PRÓXIMA PARADA

_-.. .La
_- .La cama mágica
· de Bartola
Mauricio Paredes
AL A

©2002, del texto: Mauricio Paredes

lusmcioncs:: Romina Carvajal
© De las ilusmcioncs La cama mágica
© De esta edición:
2002,, Aguilar Chilena de Ediciones S.A.
2002
Dr. Aníbal Ariu ía 1444, Providen
Santiago de Ch ililee
Providenccia
de Bartolo
• Grupo Santillana de Ediciones S.A
S.A..
Mauricio Paredes
Tor rcloguna 60,
60, 280
8043
43 Madrid
Madrid,, España
España.. I lust racion es de Rom
Romiina carvajal
Altea, Taurus, Alfaguara S.A. de C.
• Aguilar, Altea, C.V
V.
Universidad,, 76
Avda.. Universidad
Avda 767.
7.Col. del Va
Vall
lle, D.F. C.P
e, México D. C.P.. 03 100.
100.
• Aguilar, Altea
Altea,, T awus, Alfaguara S.A. de Ediciones
Avda
da.. l.nndro N.
N. Alem 720, C I00l
I00l AAP, Buenos Aires,
Aires,
Argenti
ntina.
na.
• Santillana S.A.
Avda.. San Felipe 731, Jcsw María 11,
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Lima,, Perú.
• Edicionea Santillana S.A.
Constitución 1889
1889,, 1111800
800 Montev
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• Santillana S.A.
a Río de Janci
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ro,, 1218 esquina Frutos pane Asunción, Parag
Paragua
uay.
y.
• Santlllana de Ediciones S.A.
Avda. Arce 2333, cnu e Ros Rosendo
endo Gut
Gutiéiérr
rra
y Bcli
Bclisa
sario
rio Sal
aliinas
as,, La Paz
Paz,, Bolivia
Bolivia..

ISBN
SBN:: 956-239
56-239--218-X
Inscripción: 126.495
Impreso en Chil
Chile/ Prin tcd in
Chile Prime
Primera edició
ediciónn: jun
junio
io de
2002 Sexta
Sexta edición
edición:: abril de
de 2005

Diseño de la co
colecci
leccióó
n: Manuel Es
Estrad
tradaa

Todos los derechos

derechos reservados
reservados..
Esta publicación no puede ser
rep
eproducida
roducida,, ni e n todtodoo ni en ppararte
te,, ni
registrada en,
en, o transmitida por, un sis istema
tema
de recrecupe
uperac
ración
ión de inf inform
ormaació
ciónn, en
ningu
ingunana forma ni por ningningún
ún med
medioio,, sea
mecánic o,o, foforo
roqqulm
lmkk o, elccuóní
elccuóníco,co,
magnético,, clcar oóprico,
magnético oóprico, por fotocopia
fotocopia,, o
cualquier ocro, sin el permpermiso
iso previo por
escrito
escrito de la Editorial..
Editorial..

AL A
 ,f Bartolo

Para mi
mamd.

H abía una vez un niño que que se

llamaba Ba
Ba rt
rtoola.
Bart
rtoola iba todo
doss los dí
díaas - de
semana, obviamente- al colegio a jugar
a la pelota,
pelota, a hacer carreras de botes en
la acequia
acequia,, a subirse a las ramas de los
árbo les
les,, a pillar lagartijas para meterlas
en frascos de vidrio, a fabricar aviones
de papel, a quemar hormigas con una
lupa y, a veces, hasta a estudiar. ,I' Querer es poder
Después de días tan agotadores
como este, Bartola llegaba a su casa to
do desastrado y bastante sucio, lo cual a
su mamá no le parecía muy bien. Pero
esto no le importaba demasiado, porque
sabía que si alguna vez llegaba todo im Una noche, Bartola estaba acosta
pecable y ordenado su mamá se sorpren do en su cama mirando el techo mien
dería tanto que incluso podría llegar a tras pensaba en todas las cosas que le
gustar
gus taría
ía hac
hacer,
er, y eran tantas qu , para
tener
ríaa mun
rí ataque;
ucho, se ypre
cho, como
reo
ocu Bartolo
cupaba de laand
paba que
ndaar poder hacerlas todas, tendría que vivir
siemp
sie mpre
re des
desarr
arregl
eglad
adoo par
paraa ase
asegur
gurarl
arlee por lo menos unos mil o dos mil años.
una excelente salud. Eso, en realidad, era un problema bas
tant
tantee gr
gran
ande
de po
porq
rque
ue na
nadi
die,
e, ququee él su
piera, había vivido tanto (e (exc
xcep
eptoto Ma
tusalem, pero ese no vale, porque en esa
época, como recién existía el U iverso,
el tiempo no funcionaba muy bten que
digam
dig amos;
os; por eso Dios se de demomoróró solo
siete días en hacer el Mundo).
De pronto, Bartola se dio cuenta
que era desatinado estar perdiend
preciosoo tiempo
precios tiem po en amarga
amargarse
rse y

ectd10
realizarcomenzar inmediatamente
los proyectos que tenía ena
8 mente. Total,
seguramente en el futuro alguien
inventa ría una pastilla para vivir mucho
más que lo nonnal o, inc inclus
luso,
o, par
paraa
siempre. Lo malo es que, así acostado en
su cama co mo estaba, no había muchas
cosass que ha cer salvo mirar fijamente el
cosa
techo. Y aque llo fue lo qu quee hihizzo.
Fijamen
Fijam en te y absolutamente concentrado,
sin siquiera parpadear. Aguantó así como
siete minu totoss. Los ojos ya le lloraban de
tan irritados
que los tenía y como en codo este
tiempo había contenido el aire, no pudo
más y as piró tan ta n fuerte que casi
c asi se
traga la sábana
sábana.. Estaba a punto de
desilusionarse cuando, de repente,
comenzó a abrirse un pequeño agujero
en el techo. Poco a poco fue creciendo
cre ciendo se levan ta ro n del s uelo comen zaro n a
hasta llegar a ser del porte de la cama.
c ama. v
. ,

Barcolo podía sentir el aire fresco de la elevarse lentamente.

noche en su cara y le
parecía que las estrellas se le veníaveníann en
cima. Estaba tan feliz que la emoción se 10
le salía del cuerpo.
Pero eso
eso no fue todo.
Se diver
divertía
tía miran
mirandodo el cielo,
cuando sintió que la lass patas de la cama
c ama
 Al princip
principio
io se asustó un poco,
ppeero era tan rico volar dentro de su
ppii·e za, que
que el miedo se le olvidó
rápida mente. Entonces la cama
decidió subir más y más, hasta Hegar
al forado en el te c h o .

!
1
 Ahí pa
Ahí paró
ró,, y se qued quedóó flot
flotand
andoo de la Fue
Fuerza
rza Aérea.
Aérea. Mi
Miró
ró hac
haciaia at
atrás
rás y
desppacio
acio.... como preparándose..
preparándose.... y de vioo cóm
vi ómoo se al alej
ejab
abaa su cas
casa, cada vez
pprro n to.
to... ¡Zum! sasali
liee ron Bartol
Bartoloo y su más pequeña; y después, era solo una luz
mueb
mu eble
le vo
vollador d ispspararaa do
doss com
como un que se confundía con todas las demás
cohhete al infinito .
co de la ciudad.
. El aire era cada vez más frío, por
* '
que se didiri
rigí
gían
an directo hacia las monta
ñas. Se sentó encima tapado con el cu
*
brecama y tra trató
tó de ma
manej
nejarl
arla,
a, pe
pero
ro ella
1)

* no le hizo ni pizca
piz ca de caso y sigsigui
uióó su
* * *
* * viaje, cada ve
vez
. z más alt
lto,
o, por encima de
<t

la co rdillera
rdillera.
De pront
prontoo la cama frenó suave
mente y fue bajando hasta aterrizar
en cima de la nieve. Bartola no podía
creer lo que le había pasado: hacía
uno
noss cu
cua
ant
nto
os mimin
nut
uto
os de
desca
scansaba
nsaba

tranquilamente en su casa y ahora

esta ba sentado ¡en medio de la
Cordillera de los Andes!
Tenía ganas de pisar la ni
nieve,
eve, pero
no se atrevía a bajar de la cama, porque
en cu
cual
alqu
quie
ierr mo
mome
ment
ntoo el
ella
la po
podí
díaa salir
volando de nuevo por cuenta propia y él
Él iba suj
ujeetándo se lo más fuerte
quee pod ía, porque vi
qu viaja
ajaban
ban a tant
ntaa ve no tenía ninguna intención de quedarse
loci
ociddad como la de un avió n a chorro
12 13
ahí botado.
botado. Pero el dic
dichos
hosoo mue
mueble
ble vo
lador no se movía ni un centímetro. ,r La ciudad asombrosa
Como esesta
taba
ba en la
lass mo
mont
ntañ
añas
as,, y
más encencima
ima de noche, hacía demasiado
frío
frío.. Por su
suer
erte
te tenía dos frazadas bien
gruesas. Pero de moverse la cama, nada.
Parecía como si se le hubiese acabado el
com
ombu bust
stib
iblle o algo
algo.. Ba
Bart
rtolo
olo tr
trat
atóó de Bartolo se despertó con un fuerte
echarle vuelo como a los autos cuando ruido parecido al de un bus destartala
destartala do
es tán malos y no quieren andar. Astuta corr
rrie
ienndo com
omoo un bólido. Pero aún

mente
suelo y puso solamente
sola
empujó, menteporuna
pero máspiern
pifuerza
ernaa enque
el tenía mucho
Apaciblem
Apaciblemente,sueño,
sueño
ente, , así
con unaque niera
floj se inmu
flojera ric a, tó
tó.
se.
hicie a,
a, no pasaba nada, y su pobre pie fue enderezan
enderezando.
do. To
Todav
davía
ía sin abrir los
estaba encero azul de congelado, así que ojos
ojos si
sint
ntió
ió el sol en su cara y meditó
decidió acostarse bien cubierto y esperar acer
ac erca
ca de
dell inc
incre
reíble
íble su
sueñ
eñoo que había te
un rato. nido, en el que volab
volabaa arri
arriba
ba de su cama
Y así fue que esperó un rato. Y hasta las montañas.
montañas....
-Qué lindo sería que hubie
hubiese
se
des
despué
puéss ot
dieciséis otro
ro.. Y
ratos otro. Ya
y medio llevaba
cuando como
se quedó sido
sido ciert
cierto
o -suspiró, y de un
un salto
dormido. sa lió de las sá
sába
bana
nass para bajar a
tomar desayuno.
Pero prec
precisam
isamente
ente en ese
ese instante,
sint
sintió
ió que pisaba algo sumamente frío. frío .
Abrió los ojos y ha hast
staa la bobocca ta
tann
gran
gr ande
dess como podía, pero no cre reyó
yó lo
quee esta
qu taba
ba vi
vien
endo
do.. ¡N
¡Noo ha
habbía sido un
sueño, era
14
verdad! ¡Estaba en medio de inmensos Se entretuvo, feliz de la vida, has
cerros blancos, en las alturas de Los ta que le dio hambre. Pensó que tenía
An des! dos posibilidades: una, ir a explorar los
-¡Viva, viv,a, viva! ¡Estoy en las alrededores; la otra, quedarse sentado
montañas! -cantaba Bartolo mientras esperando hasta que la cama partiera.
partiera .
bailaba alreded
alrededoror de su objeto Con la primera opción, la cama podía
volador salir volando antes que él volviese, y no
«sí
sí»» id
iden
enti
tifi
fica
cado
do.. DeDesp
spué
uéss de ununas
as era gracioso quedarse desamparado tan
cuantas vueltas,
vueltas, sentía los dedos como lejos de su casa; pero con la segunda
cubos
cub os de hielo,
hielo, así que prefirió
prefirió seguir moriría de hambre de todas maneras.
bailando encima de la ca ma--. ¡Viva,
cama Com
Co mo BaBart
rtol
oloo no er
eraa na
nada
da de
de··tonto,
viva! ¡Estoy en las montañas con mi ca partió a buscar
buscar comida.
comida.
ma mágica! Decidió subir una loma para mi
Terminado su baile de celebración, rar desde ahí. Cuando llegó a la cima
observó lo que tenía alrededor. El cielo vio la cosa más increíble que jamás,
era más azul de lo que nunca había visto jamás, jamás (jamás, en serio) había
y la nieve
nieve respla
resplande
ndecía
cía tanto
tanto que
que tuv
tuvoo vis to. Al otro lado de la colina, había
que cerrar sus párpados casi
casi totalmente. una ciudad fantástica. No había nieve,
Todo
To do ereraa esesppect
ctac
acul
ular
ar. Mucho sino
sino pasto
pasto po
porr to
todo
doss la
lado
dos,
s, y rí
ríos
os,, y
mejor que los mapas del libro de geo lagos, y todo estaba rodeado de
grafía; incluso más bonito que cuando bosques. Las casas tenían la misma
llovía y al día siguiente amanecía forma que un reloj de arena, pero en
despe jado y él contemplaba, a través de gigante. Los auto!es aban pintados de
la ventana de la clase de matemáticas, colores divertidos: celestes con puntos
la nieve recién caída en la cordillera (y verdes y rosados o amarillos con rayas
eso era muy, muy lindo) . negras como abejas.
16 17
Los á rbo les daban varios tipos de
frutas a la vez
vez:: mamanzazannas
as,, nar an jas,
j as,
plátanos,
pl átanos, sand
sa nd ías. Todas en un mismo
árbo l. In cluso a lgun unos
os daban chiclhiclees,
cho
hococollates, ppaa ppas
as fritas y hasta chch ur ros
rellenos coconn manjar. Y por s i todo esto
fuee ra ppoco,
fu oco, los h ab it itaa nt
ntees (que se
veía
ve íann bas
b asttan
antte alegres) e ran... ¡conej
¡conejosos
y zorros
zorros!! Los zo rros no e r an ta ntos ,
pero los había
había.... En realid ad casi casi todos
erann co
era connejos
ejos..
S in pensar
pensarlo lo dos veces, bajó
corriendo por la loma hasta llegar a es
ta magní
magnífi fica
ca ciudad que acababa de
descubrir.
19
 Bartolo con oce su motocicleta.
.
nuevos amigos -¿Estás bien?
Bartolo respondió afirmativa
mente.
-Permít
-Per míteme
eme reprepres
resent
entarme
arme,, soy
el Gran Mermeladuque Roelzo el Mag
Caminaba nuest
nuestro
ro prota
protagonis
gonista
ta níffico -y luego hi
ní hizzo un saludo muy
hacia uno de est
estos
os árb
árbole
oless de comida elega nte.
nte.
cuando escuchó un grito: A Ba
Bart
rtol
olaa le pareci
parecióó que era
era un
-¡¡Abraham Opazooo!! zor
orrro muy sim impápáti
tico
co y bien educado
No alcanzó a entender lo que sig (pe
perro en re real
alid
idad
ad no cocono
nocícíaa muchos
nifi
nifica
caba
ba,, cu
cuaand
ndoo al
algo
go lo tiró al suelo otro
ot ross zo
zorr
rros
os que digamos). Es Esta
taba
ba a
con vuelta de cacarne
rnero
ro y todo. Pasado el punto de explicarle su situación, pero el
golpe, se sentó en el pasto para recupe animal lo tomó de un brazo y de un so
rarse y vio que se le aceracercab
cabaa un zorro lo tirón lo subió a la moto-silueta.
que se veía igual de mareado que él. -¡Agárrate fuerte, niño!
-Perdóname
-Perdón ame por habert
habertee trom -Me ll llam
amoo Ba Bart
rtol
olaa -l
-loo ininte
te--
petilladoo con mi
petillad m i moto-silueta
moto- silueta -le dijo.
dijo . rrumpió.
Bartolo solo atinó a responder: -Agár
-A gárra
rate
te fu
fuer
erte
te igual, niño Bar
-¿Qué? rolo, porque vamos muy sumamente re
. -Con la moto-silueta...
moto-silueta... te trom- quetea
que teatra
trasad
sados
os - y arrancó como un
petil1é recién,
recién, ¿te acuerdas? bólido..
bólido
Luego de un momento de refle Segurame
Segu ramente
nte en esta
esta ciudad
ciudad no
xión, dedujo que lo que quería decir
decir el exigí
exi gían
an un ex exam
amen
en para mane
manejar,
jar, por
zorro era que· 10 había atropellado que Roelzo (o como se llamara) iba
con cuaa l
cu
2
1
loco pasand
pasandoo por entre todos los autos, Como las casas-reloj de arena
sin respetar ninguna señal del tránsito, eran
eran trtran
ansp
spar
aren
ente
tes,
s, Ba
Barr
rrol
oloo pu
pudo
do ve
verr
incluso subiéndose a la vereda
vereda para pa varios conejos jugand
jugandoo en la parte de
sar por entre los jardines de las casas. arriba (lo que vendría siendo el
Rápidament
Rápidam entee lle
llegar
garon
on a una de estas segundo piso).
vi viendas con forma de reloj de arena. Al escuchar el timbre, los conejos
-¿Por qué
quéson
son así las casas? se deslizaron por turnos a través det-
-Aaaah, te gustaría saber, ¿cierto ori ficio que tiene
tienenn los relojes de arena
niño Bartolo? -le contestó riéndose
riéndose.. y llegaron abajo en un santiamén.
Bartolo se dio cuenta que el zorro Abrie ron la puerta y los recibieron
le había hablado irónicamente, y ya no muy ama blemen
blemente.
te.
le pareció tan educado
educ ado como antes. Bartolo intentó imaginar cómo
Pero antes que se enojara, Roelzo su birían de vuelta, porque por la
le explicó: abertura se veía bastan
bastante
te complicado y
-Son así porque son súper gui le pregun tó a Roelzo.
llermodernas con un sistema sistemát
sistemático
ico -Ja, muy fácil! Mira.
que elimina los problemas de subición. ¡Atención conep..nes.' ¡Uno, dos, y...'.
Barro
Barrolo
lo se rió de la forma diverti En ese moment
momentoo todos impulsa ron
da en que el zorro habhablab
laba,
a, per
peroo ahora haci
haciaa at
atrá
rás,
s, lu
lueg
egoo ha
haci
ciaa ad
adel
elan
ante
te,, y la
fue este el que se anduvo molestando. casa completa se dio vuelta (igual que un
-Perdona que me ría, es que no reloj de arena), por lo tanto, ahora esta
te entendí muy bien -le dijo. ban todos arriba.
-Yoo ta
-Y tamp
mpoc
ocoo te en
enti
tien
endo
do de
dema
ma «¡Fantástico!», pensó Bartolo, y le
siado, niño Bartola, así que realmente y pareció increíble que a nadie en su mun
en verdad, no importa.
do se le hu
buena. hubi
bies
esee oc
ocur
urri
rido
do un
unaa idea tan
22 23

-- , #
 . .; :.#

Barcolo siguió con su descripción:

- Llegué anoche y hoy conocí al
Gran Mermeladuque Roelzo el M
agnífi co qui
quienen me trajo has
hasta acá.
El conejo lo miró exextrañado.
trañado.
- ¿C onociste
onociste a quién
quién?? .
El zorro se pu so colorado y trató
puso
de hacer como que jugaba con los cone
jo s- niño s.
s.
-¡Ol
-¡Oliv
iver
erio
io!! -e
-excl
xclamó
amó el co cone
nejo
jo

papá-
papá-.
nunca. ¿Cuán
¿Cuántas
debes tas
debes ser veces te hemenos
farsante, dicho que
aún
En la conejuna residencia vivían con gente que no conoces?
un coneJ o-papa , una cone p- yu
• I • •

El wrro le contestó mirando el suelo:

mama
I

na
cantidad abundante de conejitos que ju -En realidad y en verdad, no lo sé
gaban por todos lados. rrtuy bien , Pascual,
Pascual, pero entre hartas y
Bartola le habló al conejo-papá: muchas.
-Buenos días. Me llamo Bartola Al oír el nombre del conejo-papá,
y llegué aquí en mi cama. Barrolo dio un saleo.
El conejo-papá le contestó mien _ - ¿Pa
¿Pascua
scual?
l? ¡Tú debes ser el cone jo
tras prendía su pipa. que pone los huevos de chocolate!
-Qu
-Q ué ininte
teres
resan
ante.
te...
.. ant
antes
es nos ha Todos se quedaron mudos. Incluso
bía tocado que llegaran en avión o a ca los niños dejaron de jugar. Miraron fija
ballo, o incluso en esquíes, pero nunca
en cama. mente
tre ellosa yBartola, después
se echaron r eírsea carcajadas.
a reír miraron en
24 2S
 Tal como están
las cosas.
cosas... -Mejor aún para ti ti,, porqu
porquee
donde
don de nonoso
sotr
tros
os va
vamo
moss hay una niña
humana como tú, y quizás ella te
pueda ayu ayudar
dar a ararreg
reglar
lar tu medio de
transporte -pro puso Pascua Pascual. l.
Banolo estaba a_ punto de partirse Oliverio de un salto aulló:
en do
doss de ha
hamb
mbre re.. Po
Porr su
suen
enee la mamá- -¡Camas taimadas, si silllas coconn
cone jo se percató de esta situación estrés,, mesas exquisito-frén
estrés exquisito-frénicas
icas o con
(seguramen te escuchó como le in so mnio: todos los proble problemas sin-
retu
retumba
mbababann las tripas) y trajo un plato zoo lólóggicos que rengan los muebles
lleno de frut
frutas
as,, pasteles y cara caram
melos guiller mo modedern
rnos
os de
dell ho
hoga
garr, ella los
recién sacados de la mata. puede solucionar!
-Tenemos que actuar rápidamen Barto
Ba rtolo
lo se quedó callado. Luego
te, Oliverio -dijo el conejo Pascual (fi preguntó:
nalmente Bartolo nunca supo si era o n__oo -¿Dónde está ella?
el de los huevos de chocolate). -Al J tro lado del Lago Sinfondo
-cont
-c ontes
estó
tó Pa
Pasc
scual
ual-.
-. No
Nososotr
tros
os necesi-
-¡Intermediatamente,
Tal Parascual! señor don
-contestó Oliverio ha tamos su ayuda urgentemente.
ciendo una imitación de saludo -¿Ayu
-¿ Ayudada para qué? -siguió Bar
militar. tolo con sus preguntas.
-Tú tatamb
mbién
ién nos puede
puedess acom -¡Uuuy! -i -int
nter
ervi
vino
no Oliv
Ol iver
erio
io-.
-.
pañar si quieres, Bartola. Hayy un pr
Ha prob
oble
lemi
mill
llaa muy sumamente
-En realidad yo tengo que vol ver grave, gravísimo, terrible, mortal,
¡kaput!
a mi casa...
parecer Por otro
se agotó y nolado, mi volar-ex
quiere cama al -y sacó la lengua y cerró los ojos como
presó Bartolo
Bartolo,, un poco complicado. haciéndose el muerto.
2
7
 - Sí
Sí, ten
tenemo
emoss un problem
problemaa -di jjoo
con más tranquilidad Pascual,
Pascual, y con t in
uó-- . Hoy
uó Hoy en la mañana , ju jusco
sco des ppués
ués .,/' La aventura comienza

quee sa
qu sali
liee ra el Sol, ocurrió algo
inexplicable , algo que yo nu nunnc a cr eí
que pud ies iese pasar... -el ppoobre cone jjoo
se veía muy pre preocu
ocupad
padoo- . Ba
Bann olo , tal
como estestán las cosas,
cosas, mañana el So Soll no
va a poder salir de nuev
nuevo.
o. Salieron los tres,
tres, apresuradamen
-¡¿Qué?! - grit
gritó
ó Bartolo. te,, arriba de la moto-s
te moto-silueta de Oliveri
o . Y ll
lleegaron (muy velozmente) hast hastaa
solcitonomañana
po bre-Que va a pod
poder
porer lasobresa
obresalir
lir eol
mañana, la orilla de dell lago, do
donde
nde ha
habí
bíaa un
unaa
seaa, que no va a haber ma
se mañana
ñana,, porq ue playa.
play a. Sobre la arena había una cabaña
si no hay sol, no hay maña na y, en rea de ma dera, y hasta allá fueron ca camina
mina
lidad, hoy va a ser ayer, pero mañamañana no ndo Pascual, O liverio
liverio y Bartolo.
va a ser mañana - «acl
aclaaró
ró»» Oliverio. -¿ Has hec
hecho surf alguna ve
vezz?
Con esta expli
explicación
cación,, Bartol
Bartolaa - le preguntó el conejo.
-No, nunca -contestó
-contestó titubean
titubean--
quedó máetillado
más
bía tromp s at
aturd
urdido
trompetillado ido que cuando
Oliverio,
Oliverio , ppeero lo
se hlae te el niño-, pero he visto como se
vantó y dijo con firmeza:
firmeza: hace.
hace.
-Está bien
bien.. ¡Cuenten conmigo! - Con eso basta,
basta, porque aquí es
muy fácil -y le pasó
pasó una ta
tabla muy boni
ta co
con muchos colores.
«Bue
Bueno»,
no», pensó Bartolo, «s i pude

manejar una de
en una tabla cama
sudvoladora,
vo
>>. ladora, podré correr

28 Miró hacia la orilla y vio que las

olas eran ext
extrem
remada
adame
mente
nte grandes
para
ser un lag
lago, y fu
fuee en
entotonc
nceses que se dio Sentía el viento en la cara y veía
cuen
cuenta
ta qu
quee an
anda
daba
bann al rerevé
véss , es decir pa sar bosques llen llenos
os de árboles (en
que,, en ve
que vezz de llega
llegarr a rereve
vent
ntar
ar en la realidad,,
realidad
playya, partían hacia el ot
pla otrro lalado
do por el ¿dee qué más podría
¿d podríann esesta
tarr ll
llenos
enos los bos
borde,, dando la vuelta com pl
borde pleta al lago, ques?). Pero estos árboles eran diferentes a
sm parar nunca. loss típico
lo típicoss de la plaza; estos eran como lo loss
- au..I -exclamo' .
·1G uau que crecen en lo loss bosques del sur de Chile,
-¡Y miau! -imitó el zorro. y se acordó que había unos unos que se ll llamaban
amaban
Una vez en el ag aguua, se subi ubieeron coigües y otrootross mañíos
mañíos,, pero no sabía cuá
cada uno en un unaa ola. No re ressultó tan di les eran cu cuáles y le dieron g211as de
fícil para Barcolo , y pronto es estaba
taba dis
dis in vessci gar to
inve todo
do acacer
erca
ca de el ello
los,
s, 8e
8ero
ro ya
frutando como nunca antes. recalaban
recal aban en la ribera y su misión ahora era
urge
ur gent e, así que dej
nte, dejarí
aríaa tan ententret
reteni
enido
do
análisis para más adelante.
- ¡Llegamos!
¡Llegamos!--confirmó
--confirmó Pascual.
-¡Al des-bardaje! grit itóó Oliverio.
Se bajaron y ma 0
marc rcha
harron hasthastaa
lle
gar a una ciudad muy parecida a la an
terior. Allí tocaron el timbre de una de
las casas.
-¡Ding - <long!
Esperaron un rato
rato...
... Y tocaron de
nuevo::
nuevo
-¡Ding - dong!
Dieron un par de vueltas alrede dor
para mirar
mirar desde todos lados
lados si es
3
1
 había alg
que había alguie
uienn ade
adentr
ntro.
o. Al parecer se quedó mirándolo. Él no sabía qué de
estaba vacía, aunque varvarias
ias par
partes
tes esta cir y se empezó a poner colorado. Ella
ban tapadas con unas cortinas se dio cue uent
ntaa y rá
rápi
pida
dame
mentntee mi
miró
ró al
floreadas, así que no podían asegurarlo suelo.
cien por ciento. Bartolo se desilusionó -El gusto
gusto es mío, Bartola
Bartola -dijo
un poco, pero justo en ese momento la.. niña sin levantar la cabeza.
la
sintió detrás de él una voz de niña
niña.. Entraron a la casa y la niña les dio
leche y galletas para que recuperaran la
-¡Pascual--,
-¡Pascual Oliverio! ¡Qué gusto energía gastada en el viaje .
verlos!

Ento
En
saltaron tonc
nces
muy el zorroa darle
escontentos y el un
conejo
apre
tado abr
abraz
azo.
o. Luego,
Luego, la niña se quedó
mirando a Bartolo.
-¡Un niño! -dijo sorprendida.
- Z á s - t am e n c e -innterrum
-i umppió
Oliverio-, un niño igualito que tú...
bueno,-Hola. i gualito que tú.
casi-casi igualito
-Hola, me llamo Bartola -res-
pondió.
-Y yo, Sofía.
-Qué gusto conocerte, Sofía
-Bartolo sabía que se debe ser educa-
do con las mujeres.
Pero ella no le contestó nada, solo
32
 - Sofía - di jo Pasc scuual co n voz
grave-- , nec
grave neces
esiitam
amoo s tu ayuda - y le
,f En el fondo
fondo,, no todo
es lo que parece
expli
exp licó
có que tal como est estaban las cos cosaas,
el Sol no podría sa sall r al día si
sigguien te.
- ¡E
¡Eso
so es te terri
rribl
ble!
e! - cononttest
estóó ner
vio
iosa-
sa- . D ebe
ebemos resolverlo al i nsta stant
nte.
e.
- ¡Sí
¡Sí,, debemo
debemoss dev evolv
olveerlo al es
Se titira
raro
ronn de pi
piqu
quer
eroo y se pusie
tant
tante!
e! - cocomp
mple
lemementntóó , a su mane ra,
ron a nadar hacia el centro del lago lago .
Oliverio.
Bartola miraba sorp rend id o a So
-Lo primer
primeroo qu quee debemos hacer fía.. Ell
fía llaa era una niñ
niñaa de más o men os
-opinó Sofía, ya más calmada- es p pe-
e-
d ir
irlle ayuda a Valentín, y para eso tene llar
a go
misymlos
a eojos
dad lqeuebrillaban
él. Te
Tenncíauand
el pelo
o se
mos que que ir al la lago
go -s-sie
iend
ndoo específica
reía.
para que Bartola comprendiera el - ¿C ó mo lleg
llegaste
aste tú has
astta acá?
plan. - le preguntó Bartola co conn curio iosi
sidd ad,
-¿ Vamos a volver haciendo surf mientras nadaban.
igual que como vinimos? - Viaiaja
jaba
ba en un av aviió n con mis
-No, Ba
Pascual- Bart
, ahora rtol
oloo -l
vamos -le
edereresp
spon
ondi
vueltadióó
al papás y el avión se cayó -respondió
sin entnstecers .
la go, pero no a la otra orilla, sino que al -¿ Y qué pas
pasó con ello
ellos?
s?
fondo. Sofía se quedó ca call
llaada un raratto,
-¿Al fondo del lago Sinfondo? braceando coordinadam
coordinadamente;
ente; despu puésés
-preguntó espantado. lo miró y dio un suspiro
piro,, ah
ahor
oraa sí un
-Zás-tamente -asintió poco melancólica.
Oliverio..
Oliverio -No lo sé, Bartola. Lo último que
recue
rec uerd
rdoo es a mi mam
mamá ab abrrazá
azándome,
ndome,
un
34
fuerte choque contra la nieve... y des pués pués - No es necesa
ecesari
rioo - aseguró Pas
desppeerté en la casa de PascuPascualal.. Él y su cual, que so
solo
lo sa bía nadar est
estil
iloo pe
perr ro, o
señorra me cuidaron hasta qu
seño quee esestu
tuve
ve conne jo en es
co este
te caso.
sanna... de eso ya han pasa
sa pasado
do varios
varios años.
-Yo te pue uedo
do ayayud
udaar a buscar a yo sea-malo
Ustedes
Ustedes pe"rdó
pe"r
para nadar nenm
nenme,
, pero e, no
sta es
honesta
hone que
mente
tuss papás, Sofía. Con mi cama voladora
tu creo que nos va vammos a ahogar co conn ese
podemoss re
podemo reco
corr
rrer
er la
lass mo nta
ntaññas hasta sistema..
sistema
encontrarlo
ncontrarloss -se co comp
mpro
rommet
etió
ió coconn la Sofía avanzó
avanzó hacia
hacia él y le dijo:
mejor de de las in tencio nes.
nes. -Confía en nosot
nosotros,
ros, Bart
Bartola.
ola.
Pero ella en vez de co ntes testarle,
tarle, Toma un bu
bueen respiro y sumérgete.
so lamen te lo miró y le dio una una de la lass
sonr
so nris
isas
as mámáss lind asas qu
quee jamás había No te va a pasar nada, te lo prometo.
Antes, qui
quizzás, Bartola no habría
visto, tanto como la de de su mamá cuan do conf
confia
iado
do mucho en una niña, pero
le daba
daba el bbeeso de las buen buenasas noches. ahor
ahoraa al
algo
go era diferente. Sabía que sus
Bart
Ba rtol
oloo sisinntió algo muy raro , como nuevos amigos no lo iban a defraud ti.ti.rr y,
vergüenza
vergü enza y ganas de arrancar, ppeero por p or máss aún, estaba
má estaba seg
seguro
uro que Sofía no le
sueert
su rtee el
ellla habló antes de que que él co menti ría.
ría.
m eti
et
mier
hum
hu era
alan
illa
il anqute
el, apeor
te, cto de
aúnco
coba
fbard
rennrdía
re teía a(a
(alg
lgoo
una En aquel instante Bartola llenó sus
pulmones con todo el aire que le cupo y
mujer). se zambulló al mismo tiempo que los de
- Llegamo
Llegamoss -d jo,, fl
-diijo flot
otan
andodo en más.
má s. Na dabaa y na
Nadab nadab
dabaa par
paraa abajo,, y el
abajo
el lugar donde estaba-; ahora corazón le latía como un tambor; un po
tenemos que hundirnos. co porque le daba miedo quedarse sin ai
-¿H
¿Hun
undi
dirn
rnos
os?
? -Ba
Bart
rtol
ola
a enten re, pero también por la emoción. Sentía
día cada vez menos-¿Y el oxígeno? el pecho apretado, y se angustió.
angustió. «No
36 37
 - Lo veo y no lo c reo - exclam ó
Barrolo.
En el territorio bajo el Lago Sin
fondo , había una una·· ciudad , y sí sí,, era algo
parecida a la lass do
doss que ya conocía, pero
con la diferencia que su suss habitantes
eran todos...
todos... ¡pumas!
Bartola se fijó. que lo loss botes eran
al rev
evéés de lo s que él conoc
conocía.ía. El suelo
suelo
ibaa ha
ib haci
ciaa ar
arri
riba
ba pe
pega
gado
do ag agua
ua y los pa
sajeros colgaban sen tados·
tados ·erf unas
unas·· sillas
como de andariv(!l.
-Vamos a encontrar ·a Valentín
-dijo Pascual, exprimiéndose las orejas.
Y Ol Oliviver
erio
io,, com omoo si sieemp
mprre,
aguanto más
más»,
», calculó desesperado; pero enten dió lo que él quería:
. ., -¡Z
¡Zás
ás-t
-tam
amenentte! ¡Vamos a en
en ese preciso
brazos momento smno
ya no empujaban agua,que
sinosus
aire, cumbrar un volantín!
y cayó al fondo. Llegaron a la plaza de armas armas,, don
Sí, por increíble que parezca, el de en la mesa de un café estaba sen sencado
cado
agua del lago no llegaba hasta abajo, Yalentín, conversando alegremente con
sino que quedaba un espacio con aire en otro
otross pumas. Al ver verlo
loss ace
acerca
rcarse
rse,, se le
la pa
part
rtee in
infe
feri
rior
or;; po
porr eso Bartolo salió vantó a saludarlos.
-¡Pa
-¡Pasc
scuual!. ¡S¡Sooff
ffa!
a! ¡Y el gran
del
que ag
agua
ua,, ·así
a algo pero no ala la«sub-ficie».
como superfici
supe rficie,
e, sino Oliverio! Qué gusto verlos por estas
 39
38

Mientras, Oliverio ya se había sen

tado a la mesa y les contaba a los pumas
a su alrededor, todas sus aventuras (ver
daderas e inventadas), al mismo tiempo
que comía una torta de merengue con
frutillas y se tomaba un chocolate helado.
Esta vez fue Sofía la que habló, y le
. explicó a Valentín que, tal como
estaban las cosas, el Sol no podría salir
mañana. (Ahora Oliverio comía puré
de castaña- s con crema y tomaba leche
con
plátano).
profundidades. Por favor siéntense con
profundidades. -Sí, Va
Vallen
enttín
ín,, co
conn tu vigor y
nosot
nosotros
ros y aco
acomp
mpáñe
áñenno
nnoss en nue
nuestr
straa gran car
gran caráct
ácter,
er, no
noss pu
pued
edes
es ayudar mu
charla. cho. Te necesitamos -pidió con ojos
Cuando el puma se fijó en el niño risueños Sofía.
con piyama, Sofía dijo: -Cóm
-C ómo o podría negarme a la pe
-Éll es Ba
-É Bart
rtol
olo,
o, un nu
nuev
evoo ami
amigo
go.. tición de un ángel como tú, Sofía. Por
-Unn gusm conocerte, Bartolo, si
-U supuesto que los ayudaré en todo lo que
eres amigo de Sofía, eres amigo mío. pueda.
-El gusto es mío, señor. Bartolo se quedó pensando en lo
El puma se rió y le dijo: que acababa de decir Valentín, y le pa
-Por favor, dime Valentín y lo reció que tenía toda la razón: Sofía se
de Señor guárdalo para cuando reces. parecía a un ángel (o como él se imagi
naba que serían los ángeles)
ángeles)..
40

4
1
 -¡¡Oliverio!! -g
-¡¡Oliverio!! -gri
ritó
tó Pascual, in O li
live
verrio hiciera su digestión (aparte qu
quee
dignado. todoss los puma
todo pumass se opu
opussiero n terminan
Los demás se di dier
eron
on vuvuel
elta
ta y .cme
mentntee a esa alt
altern
ernati
ativa,
va, por temor a
viee ron
vi ron a los pumas dándole aire al las consecuencias), lo que hiciero
hicieronn fue
pobre zozorr
rroo que acababa de terminar amarrarle varvarios
ios globos
globos al cuerp
cuerpoo y po
de co merse absolutamente todo lo que nerlo en el agua. Así, lenta ment e,
había en la mesa. salió a flote.
-¡Qué triste espe espectácu
ctáculo,
lo, zorro Una ve vezz qu
quee es
estu
tuvi
vier
eron
on to
todo
doss
desvergonzado! ¿Cómo pudiste echarte arri
arriba,
ba, emprendieron rumbo a la orilla
a la boca tamaña cantidad de comida? nadando y Valentín se fue remolcando a
-lo reprendió el conejo.
-Con cuc cuchil
hillo,
lo, te
tene
nedo
dorr y cucha- Oliverio
que ch
chap que
apot
otea parecía
eaba
ba y pe una
díaa boya
pedí disc
di gigante
scul
ulpa
pass du
ra, don Tal Parascual, ¿o acaso cree que rante todo el recorrido.
soy un zozorr
rrit
itoo mal
malapre
aprendido
ndido?? -contes
tó Ol
Olive
ive rio , que apenas podía re resspirar
de tanto pas
pastel
tel,, torta
torta,, hel
helad
adoo (y todo lo
demá
de más)
s) qu
quee tetení
níaa en su ahora abultada
panza.- Bueno , Pascual
Pascual,, no lo retes tan to
-dijo Sofía y fue a ayudar a levantar a
Oliverio.
Mucho les costó mover al glotón,
y lo peor
peor de todo
todo fue
fue que,
que, con ta tant
ntoo
peso extra
extra,, no podí
podíaa su
subi
birr a la
la superfi
cie. Como no era posible esperar que
42
 43

Creer en lo imposible

Ahora llegaba
Ahora llegaba el momento de la
verdad. Barto
Bartolala finalmente
finalmente sabría
sabría por
qué el Sol no podría salir mañana (y tú
también, de hecho).
Debí
De bían
an cumplir con su misión.
Debían salvar al Mundo de quedarse...
quedarse...
¡sin Sol! Para esto or orga
ganiz
nizar
aron
on una ex
pedición a la montaña co conn moc
mochh ila s , Cuand
Cua ndoo al
alca
canz
nzar
aron
on el tope de la
c ue rdrdasas,, li
linte
ntern
rnas
as,, zapato
patoss espe
peccial
iales
es cuesta, Bartola se quedó congelado al ver
para escalar y todo lo nec es esaa rio para el algo totalm
totalmente
ente in ólito.
ólito. Había
Habíann llega
llegado
do
andinismo.
Y así partieron co conn Yalentín y Pa Pass al lugar .exacto
mañana.
mañana Bartoloporveía
donde el Sol
todos los sale
díascada
que
cuaal al frente,
cu frente, y cocorn
rn en zaron el ascenso. el Sol salía por la Cordillera, pero nunca
En rereal
alid
idad
ad,, solo te
tennía
íann que subir una se habría imaginado que fuese de seme
loma no muy empinada, pero llevar todo jante mane nerra. Fre
rent
ntee a ell
llos
os ha
habbía un
el eq uip ipoo de mont ntaaña le daba más enorme orificio en la tierra, un cráter, por
in1porr tanci
in1po tanciaa a la ex
exped
pedici
ición
ón y era más donde el Sol emergía al amanecer.
entreteni
vacías, asídoque
(rotal, las mochilas
no pesaban mucho).iban casi «Increíble», pensó. de todo er;i
Pero lo más increíble
 45

que aquel cráter, al que estaba mirando tra tar de sacarlo de acá abajo.
con la boca abierta. ¡Estaba tapado!
· - Sí
Sí-di jo Pas
-dijo Pascu
cual
al adi
adivina
vinando
ndo la
pregunta
pregun ta qu
quee Ba
Bart
rtol
olaa le iba a hacer
Hoy, pocos
pocos min
minuto
utoss des
despué
puéss del ama
nece
necer,
r, cayó
cayó un met
meteoeori
rito
to ju
just
stoo en el
agujero por donde sale el Sol.
-Y por eso, tal como están las
cosas, mañana el Sol no va a poder salir
-completó la idea Sofía
Sofía..

-¡Ese fue el ruid

ruido
o que me des
des--
pertó esta mafiana! -concluyó
Bartola..
Bartola
-Bueno
-Bu eno,, ya sabem
sabemosos cuál
cuál es el
problema, ahora ¡a solucionarlo! -
dijo con mucha energía Valentín.
.

Aando
observand
observ todo
toododet
esto
es to,,damente
deteni Oliv
Ol
enidame iver
erio
iolayainmensa
nte estaba
roca roja que capaba la salida del Sol.
Anee la orden del puma, los otros reac
cioona
ci narron y bajaro
bajaronn el montícu
montículolo co
rriend o.o. El zorro se había subido al
me teorito y lo tiraba con todas sus
fuerzas.
fuerzas.
Sofía, riéndose, le dijo:
 Oliverio,, me
Oliverio mejo
jorr ayú
yúda
dano
noss a

-No Sofica, si ya lo tengo todos de un lado, después del otro.

todo casi-casi listo... Valentín en terraba sus garras en la roca
inte
interm
rmededia
iata
tame
mentntee lo saco... un y tir aba
aba y em empu
puja
jaba
ba co
conn tanta fuerza
penúltimoo tironcic
penúltim tironcicoo y... ah, ah. ah...
.. quee se le lle
qu lle ga
gaba
bann a sa
sali
lirr los bigotes.
¡¡aaah!! Pero el meteo rito de moverse,
moverse, ni por si
El pobre zorro rodó hasta el suelo. acaso..
acaso
- ...como te venía diciendo, I nt
n t e n taro n tod as las formas qu quee
mi que
querid
ridaa Fil
Filosof
osofía,
ía, en ve
verd
rdad
ad y se les ocuocurrí
rrían
an has
hasta
ta que
quedar
dar ex
exhhausros,
en rea
reali
li dad
dad , más mejor que lo pe ro la eno rme piedra estaba ahí hí,, inm
empujemos de acá abajito no más óvi
vill, int
interp
erponi
oniénd
éndose
ose en
entr
tree el
ello
loss y su
-con
-c oncl
cluy
uyóó OlOliv
iver
erioio sob
sobán
ándo
dose
se la heroica hazaña de salvar al Mundo.
rod illa . -Mejor dejemo
dejemoss la lasaña para
Rápidamente se organizaron y más tarde -dijo, agotado, Oliverio.
co men enzzar
aroon a em empuj
pujar.
ar. Pri
Prime
mero
ro -Yo tampoco doy más
más -coment-ó

46 47
Bartola y se sentó apoyado en el me el túnel, nosotros no podemos meter nos
teonto. sin morir abrasados .
Pascual estaba muy preocupado, - ¡O h , no! -gritó Oliverio-.
medicando. Finalmente dijo:
-La única solución posible es ¡Ento
Sofía! nces
nce s yo equi
-y saltó quiero
ero de
ncima mor
morir
lairniñ
abrazado
a. a
tratar por el otro
o tro lado.
lad o. Ella le explicó que abrasado venía
-¿Por quéotro
quéotro lado? -preguntó de brasa y no de abrazo, y con eso el zo
Barrolo con el ceño fruncido. rro que
quedó un poco más tranq uilo, uilo, pero
-Este cráter es la salida de un mucho-muy confundido.
gran túnel que pasa por el cenero de la Todoss se queda ro,
Todo ro,n en silencio,
T ierra . Al otro lado está el lugar por tristes. Jamás podrían llegar a tiempo al
donde el Sol se pone al atardecer otro lad
ladoo de
dell pla
planet
netaa... a meno
noss qu
quee
-dijo el conejo. fuera volando.
Valendn se puso de piepie de un salto. -¡Volando! - saltó Bartola-.
-¡En
-¡Ento
tonc
nces
es vamos a ese lugar y ¡Con mi cama mágica podemos llegar a
entr
en tram
amos
os y lu
lueg
egoo em
empuj
pujam
amos
os el meteo tiempo y salvar al mundo y to todo
do lo
rito desde adentro! Esa es tu idea,
idea, ¿cier demás!
to, Pascual? A So
Sofí
fíaa se le ilumi
iluminó
nó la car
araa de
-Sí, esa es la idea -contestó aleg
alegrí
ríaa y miró a Ba Barc
rcol
oloo con adm ira
Pascual,, pero sin mucho ánimo- . El
Pascual ción:
problema es ququee el otro extremo del tú -¡Excelente idea! ¡Vamos rápido!
nel está en el lad
ladoo opuesto del Mundo Y Oliverio,
Oliverio, como los
los héroes de ci
y, como todos sabemos, el Sol se pone ne, dijo:
en medio del mar. Ya falta poco para el · -¡Vamos! ¡A salvar a Edmundo!
atardecer y, una vez que el Sol entre en ¡Y a todos los demááás!
 48 49

Se miraron unos a otros y despué

despuéss
al zo
zorr
rro, que se había quedado en su po ,f Atrapados en el túnel
se de hé
héroe de película.

Sin más demora, todos nuestros

bie nin ten
tenci
cionados
onados personajes recorrie
ron el cacamininoo hasta llegar al lugar
don
onde
de Ba
Bart
rtoola con su can1a habían
aterrizado.
-¡Vamos, rápido, todos
todos arriba!
arriba!
-exclamó aceleradamente Bartola.
Subieron Pascual el cone neJJo,
Valent
Val entín
ín el puma, Sofía la niña y Bar
tolo
tolo el ni
niñño . Pero el zo
zorr
rroo se quedó
quieto.-¿
-¿Qu
Qué é pasa
pasa,, Oliverio? ¡Ven, su
be! -le dijo Bartolo.
Bar tolo.
-Yo no me subo a ningún objeto
mueble-vo
mueb le-volado
ladorr no dien
dientifica
tificado,
do, sin mi
casco de moto-
moto-silueta -contestó.
-¡Oliv
-¡O liveri
erio,
o, no pode
podemos
mos esespe
pera
rarr
te! -estaba
-estaba dic
dicien
iendo
do Pas
Pascua
cual,
l, per
peroo el
zorr
zo rroo ya ha
habí
bíaa pa
part
rtid
idoo co
corr
rrie
iend
ndoo a
 bus car su casco.

50
 -Bueno -suspiró Sofía-, pa rodeaban implorando para que lograra
rece q ueue tendremos que partir sin él. hacer volar la cama. «No creo poder
- Y, para seserr si
sinc
ncer
ero,
o, qui
quizzás es con seguirlo
seguirlo»,
», pensaba con angustia
mejor que se quede aquí, por su propia
seguridad - afirmó Valentín. nues
nu estr
pude.trooCier
casi-héroe. «Antes
to, pero antes traté en
de antes, y mi
no
«Y la nu nues
estr
traa», pensó Bartolo casa
casa,, sí pude
pude...
... ¿Y por qué ahora no?
mien
mi entr
tras
as in
inte
tent
ntab
abaa que la cama se pu Vamos, ca mita, ¿qué pa passaría si el Sol
siera a volar. no volviera a salir? ¿Dormiríamos para
Pero no pasó nada.
nada. siempre?».
-Qui
-Q uizá
záss si te acacue
uest
stas
as y cierras Esta última idea no le pareció tan
los
Sofía. jos igual que en tu casa -sugirió
o jos mala,
gundo,pero
defi
de después
fini
niti
tiva
vame
mentde
nteemeditarla
se ab
abur unó sey
urri
rió
Asíí lo hiz
As izo,
o, y todos se quedaron dijo muy fuerte:
callados... y nada. -Ya cama, por el bien de mis
-Ya pues, ca
cama
ma,, ahora sí que amigos y de los demás habitantes de
es importante que me hagas caso - este
este pl
plan
anet
eta,
a, ¡p
¡par
artis
tiste
te no mámás!s! -y la
roga ba Bartolo a su mueble. cama sa lió volando como un fuego
Pasó un buen rato. De hecho, un artificial.
rato lo suficientemente bueno como pa -Con buenas palabras cualquiera
ra que llegase Oliverio corriendo con entiende -bromeó Bartola y los
su casco puesto y la lengua afuera. De demás se neron.
un salto se tiró a la cama, haciendo que Así se fueron
fueron viajando por el cielo,
ca si se cayeran
cayeran todos. agarrándose como podían de la cama
, .
Bartol
Bartoloo se con
concen
centró
tró de nuenuevo
vo mag1ca.
con los ojos apretados
apretados y todos los
los que lo Mira
Mi raba
bann hac
acia
ia ab
abaajo y veveía
íann
pasar campo, ciudad, más campo, más
 52 ciudad y después mar, mar, mar y más

mar.

53
 Se lanzaron en picada hacia la en
trada del túnel, que era un gran remolino
,J. , ,-.'
-' '/í- en medediio de
dell mar. Por la men entte de
11
-
Barto lo cruzó un pe pens
nsamamie
ient
ntoo
re/'i . ',;
terrorífico:
«¿Q ué pasaría si ésta no fuese la entrada
al túnel por donde el Sol atr traavi
vies
esaa la
Tierra, sino que en re reaalidad fuera un
remolino común y co corr
rrie
ienn tete??». La
resp
respue
uest
staa a esa pregunta era demas
demasiado
iado
tmá
rágximo
máxi icmo.
a, . aYsí resultó
quee pque,
qu refi
que fir
,ripor
ó asuerte,
cele
lerrar ese
al
remol
remolininoo ef
efeecti
tiva
vame
ment
ntee era la entrada al
túnel , porque el Sol se apro ximaba
directamente hacia él.
-¡Va
-¡Vamomoss, Ba Bannol
olo,
o, más rá rápipido,
do,
tín el puma observaba aten
Valentín
Valen que el Sol está a punto de poners ponerse!e! -
tame
tamente
nte el hori
horizont
zonte,
e, buscando
buscando el agu pi dió Sofía.
Banolo entró en un estado de
jero en el océa
océano. tardee y el Sol
no. Ya era tard
estaba a punto de meterse. De pronto concen
conc entr
trac
ació
iónn ababso
solu
luta
ta y únicamente
exclamó: pensaba en ll lleg
egar
ar ante
tess que el Sol. Se
-¡Ahí está! ¡Ahí está el túnel!
acordó que cuando iba a la playa de va
¡Vamos, rápido Bartolo! caci
ca cion
ones
es co
conn su fa fami
mili
lia,
a, él mi
mira
raba
ba el
atar
atarde
dece
cerr y tra
trata
taba
ba de
de ima
imagin
ginars
arsee por
-¡Torbell
-¡Torbellino vista! -gritó
ino a la vista!
Oliverio. qué el Sol no se mojaba con el mar, por
que de ser as
asíí, se apagaría. Ahora tenía
54 la respuesta (y era realmente insó lita).
lita).

5
5
 Llegaron volando al remolino jus 56
to antes que entrara el Sol, gracias a que
ellos iban más rápido. El túnel era in
menso (obvio,
como para que tierfe
quepaque ser muy
el Sol, perogrande
nunca
está de má
máss rec
recalc
alcarl
arlo)
o) y a medida que
se fueron
fueron internando se pu pusso más
más y más
obscu
obs curo,
ro, así
así que tuvi
tuvieron
eron que pren
prender
der
las linternas para alumbrar el cam ino .
En un breve lapso (o sea,sea, un rato corto)
llegar
llegaron
on al otro ext
extrem
remo,
o, donde
donde estaba
atascado el meteorito.
Ater
Aterri
riza
zaro
ronn ma
mans
nsam
amen
ente
te en el
túne
túnel,
l, qu
quee era de roc
roca y estaba lleno de
estalactitas (las que salen del techo) y esta
lagmitas (las que crecen desde el suelo).
Pascual dijo:
-Gracias
-Gracias a la fabulosa rapidez de
la cama de Bartolo hemos llegado
antes del amanecer, es decir, cuando el
Soll ve
So veng
ngaa ha
hast
staa acá para salir; pero
debe mos recordar que ya se encuentra
den tro del túnel y, por lo tanto, no
tenemos ninguna salida más que esta.
De un salto se despabiló
Valentín:
 -Enton
-En tonces
ces,, sin más dem
demora
ora,,
dé mosle curso a nuestra labor. 57
Y se pusieron a trabajar.
Primero todos empujaron al mismo
tiempo
po,, pe ro no hub uboo ning
ngúún
movimiento del meteonto.
-¡Yo tengo una
mermelomática fotocromática
idea! -aseguró el zorro, saltando en
una pata.

-Ahserio
contestó ora Pascual.
no, Oliverio ---
-¿Qué tal si usamos las
estalacti tas para ayudarnos a
empujar? -pro puso Bartola
Bartola..
-Bu
Buen
enaa id
idea
ea;; tra
rate
temo
moss -
estuvo de acuerdo Valentín, y
ar
arra
ranc
unas ncóó cotas
cuantas
cuan n suestalacti
s poderos
poderosas
tasasygarras
otras
pocas estalag
estalagmitas.
mitas.
Con estas puntudas estala-
ctitas/ gmitas hicieron palanca para
extirpar el meteorit
meteorito,
o, pero con toda
la fuerza que ejercieron, solo
consiguieron quebrarlas. De nuevo
apareció saltando Oli
veno:
-Les estoy diciendo que tengo

comenzaba a iluminarse indicando que

el Sol estaba cada vez más cerca.
Pascual miró su reloj.

nutos-¡Solo nosamanecer!
antes del quedan unos diez mi
Todos se lanzaron a empujar con
desesperación, pero el cansancio y el
calor sofocante los hizo caer rendidos al
suelo.
-¡Nu
-¡Nunc
ncaa pensé que todo termi
naría
Sofía así! -exclamó
-excl
ndoamó
queriendo
querie darleBartolo
Bart
un olo y miró a
abrazo, pero
no se atrevía.
una . meteorol
meteorológica-calei
ógica-caleidoscópica
doscópica for -Es que si me hicie
hicieran
ran caso un se
ma de sacar la piedrota en undosportre gund
gundir
iroo así de microscopio.
microscopio... -d-dijo Oli
ijo
seis (lx2x3 = 6). verio con cara de súplica.
-¡Basta Oliverio! ¿No ves que Vale
Va lent
ntín
ín solo le
leva
vant
ntóó la ceja
jass en
es tamos su
suma
mame
ment
nte
e apu
apurad
rados?
os? - señal
bió sude resignac ió n, pero Pascual cam
res
actitud.
gruñó el puma.
puma.
-Bueno, pero es que mi idea es es...... -Está bien 01 iverio
iverio,, danos tu
-No,
-N o, Oliverio, por favor no ha- idea.
gass la
ga lass co
cosa
sass má
máss di
difí
fíci
cile
less -l
-loo in
inte
te Al zorr
zorroo le br
bril
illa
laro
ronn lo
loss oj
ojoos de
rrumpió Sofía, que ya estaba un poco emoción y se acercó al conejo para de
nerviosa. cirle su idea
idea al oído.
El calor aumentaba en el túnel y A memedi
dida
da qu
quee Pa
Pasc
scua
uall caíd
ibaa .1es
ib esc
chando, sus orejas, que estaban , cu
 58
59

,f Por grande que sea ..

de cansancio y frustración, de a poco el castillo, hasta el ladrillo
se fueron levantando, y un gesto de de n1ás abajo es importante
espe
espe ra
ranz
nzaa fu
fuee ap
apar
arec
ecie
iend
ndoo en su
coneJuna cara.
-Rea
-R ealm
lmen
entte es un
unaa id
idea
ea ba
bast
stan
ante
te
disparatada, pero a estas alturas no perde La idea del zorro, por alocad alocadaa que
mos nada con intentarlo. pareciera,
parecie ra, era la única que te tenn ía
íann , ya
que el Sol estaba a punto de alcanzarlos
y, si no lo logr
grab
aban
an de deststap
apar
ar la sal aliid a,
primero se que quemar
maría íann como chicharro
nes,, despué
nes despuéss se derderretretirí
irían
an como cera
de ababeeja y lue uego
go el Sol Sol loloss aplastaría
cont
co ntrra el mete
meteori
orito
to y qued
quedaríarían
an como
sopaipillas. Tod Todas as estas formas d e
mori
mo rir,
r, en que el ello
loss ereran
an los ingredien
tes,, no le parec
tes parecían
ían muy ape apetitito
tosa
sass a
Bartolo.
Fue así que pusieron en marcha el
plan ded e Oliverio.
Primero,, Va
Primero Vale lent
ntín
ín didioo un sa salleo y
quedó colgado con sus zarpas de una es
talactita. Los den1ás le tomaron la cola y
se la esestira
tiraron
ron hasta llegar
llegar a am amarr
arrarb
arb a
una estalagmita con mucha fuerza. F.I
 60

pobre puma estaba ta tann ti

tiran
rante
te como un Oliver
Oliv erio
io te
tení
níaa lo
loss oj
ojos
os qu
quee se le
elástico a punto de cortarse. salían de susto y solo decía:
Precis
Precisam
ament
entee esa era la idea, por -Ayayayayai ...
que luego Oliverio se puso su casco de
motociclista y dijo con voz solemne: ble luzElhacía
Sol ya se tuvieran
que veía venir
quey tener
su increí
los
-¡Pueblo de Ed Edmu
mund ndo!
o! ¡Es
Espe
pe ojos casi cerrados para lograr ver
ver algo.
cialmente los zorros! ¡El gran -¡Ya no resisto más! -exclamó
cósmico naunauta
ta Veri
Verioli
oli Tui
Tuisto
stoff
ff se pre- Yalentín.
paraparaa ser el prim
parapar primeer zo
zorro-
rro- bala de la Bartolo dio la orden:
ají-storia y de la pre-ají-
pre-ají-storia
storia tambié
también!
n! -¡Ahora! ¡¡¡Fuego!!!
-¡Vamos-exclamó
de tiempo! Oliverio,Pascual,
Oliverio, no quedapreocu
nada -¡Toinnng! -sonó Yalentín
cuando soltaron a O liverio , y de
desp
sp
pado porque el calor ya era casi insopor ués:
table, el suelo estaba empezando a tem -¡Piuu
-¡Piuuuu
uu!! ¡¡
¡¡¡B
¡Bla
laaa
aaamm
ammm!
m!!!
!! (Es
blar y un ruido profundo como un decir, Ol
Oliv
iver
erio
io sa
sali
lien
endo
do di
disp
spar
arad
adoo y
trueno se sentía acercándo se por el chocando contra el meteorito).
túnel. Entonces, Sofía, Pascual y Bartolo

levantaron
haciendo al honda,
una zorro yen
lo la
pusieron como
que Valentín
era el elá
elásstico y Oliverio la piedra.
piedra. Con
toda la energía que les quedaba lo fue
ron tirando hacia atrás.
-¡¿Li
-¡¿Listo
sto?!
?! -g
-gri tó Pascual, porque
ritó
el ruido ahora era tan fuerte que apenas

se oía lo que uno mismo pensaba.

62
 El impacto fue impresiona nte,
nte , y malo fue que perdie
perdieron
ron el equilibrio y
el met
meteo
eori
rito
to fi
fina
nalm
lment
entee saltó dejando tuvieron un aterrizaje forzoso.
desspejada la salida,. Apenas alcanzaron
de - ¡Felicitacio nes, O]iverio!
lpar
os apque
ocossese
segu
gund
ndos
subier
sub os
an que
ieran lesndo
le
corrie
cor s qu
riendoqueda
aedaba
laban
can ¡Aca bas de d e salvar al Mund ndoo de
qued
qu edar
arsse sin S Sool! -dijo emocionado
ma y sa sali
lier
eran
an vo
vola
land
ndoo justo anante
tess que Bartola.
llegara el Sol. Afuera aterrizaron y con - ZáZás-s-ta
tame
me n te te,, niño Banolo, pe
templaron
templar on el amanece
amanecerr más increí
increíble
ble ro te digo q ue,ue, e n ve rd ad y en realidad,
que jamá
jamáss hubiesen visto. esto de sa sallva r a Edmundo <la dolor de
Una vez pasada la emoción, y cabe
abeza
za y jaq ue u eca rni
rnigra
gra ños osaa - contestó
mientras el So
Soll ib
ibaalaselevándose hacia el el zorro.
cielo iluminando majestuosas mon Entoncess Sofía
Entonce Sofía sese arrojó
arrojó hacia él y
tañas de la Cordillera de Los Andes , se le dio un gra n abr abraz
azoo y un bes beso, con lo
acordaron del zorro. que ()liverio se puso ro jo de ve verrgüenza,
-¡Oliverio,
-¡Oliverio, Oli
Oliveri
verio!
o! -grit
-gritaron
aron co mo un torna[c. Después Pascua l y
llamándolo. Valentín también l o fc fcli
li c i ra ro n y co
-¡Mm
-¡Mmm,m, gr
grmp
mpf,
f, mm
mmmhmh!! -s
-se
e menrnron aleg reme nce el ii:x i w de b
'-

escuchó su voz a la distancia. inc reí bl

ble ave ntur
ntura.
Corrieron y encontraron al pobre
i'vl i ntr as fe jabaa n, Sofh se
fess rc jab
Oliverio que estaba con su cabeza em
ace r có a B:.inolo:
butida en la parte alta del meteorito, y
-- T ü t:un bi é n eres un héroe ,
solo se veía su cuerpo colgando.
Bartola -le <lijo so n rie ndo.
Se encaramaron arriba de la gran -No, yo solo... -y antes que
roca y tiraron a Oliverio de las patas pa
terminara de decir nada,
nada , ella le dio un
ra sacarlo. Un tirón fuerte y salió. Lo beso en la mejilla.
Él quedó totalmente lelo y pálid
pálidoo
 64

65
co1noo si hubjjeese ve
co1n raneadoo de
veranead denntro de un
refri
refrigera do r. Pero de nu
gerado nuevo
evo no alc lcaanz
nzóó a
decir ni hace
h acerr nada
nada,, porque ellllaa ya había
vueho con el grupo a se
segguir celeb
celeb rando.
Así nuest
nuestros
ros peperrson jess bbaajjaro
onaaje aronn d e
vu el
eltta a la ciudad asombrosa osa,, qu
quee hab
habíaía
sido el punto dede partida de rodaa la aven tu
de rod
ra. 'T
'Too dos los hab
habiita
tantnt es estabbaan ent e
rados de su mis misió n, y Jo s espe spera
rabban
an
em ococio
io na
nado
dos.
s. En c uan antto su
supipier
eron
on de la .·

gra n idea de O liverio rio,, se abbaalan

<!§ ·· ·-
-
anzzaro n
n1aa de él para felicit
e nci n1 felicitaarl
rlo.
o. ·,··
·, º•

Inme d iatataamen te en en1p1pezezaaro

ronn los escuchaban con asombro. En fin, fin, todo
preparati vos para una fie fiessta enen honor a era fe
feli
lici
cida
dadd y sat
atis
isfa
facc
cció
ió n de haber
los cinco intrépidos paladines. El pue triunf
triunfado
ado . Pero muy pronto lle lleggó otra
blo entero fue decorado con globos y vez el atardecer y con él,él, el triste mo
serpentinas.. La orquesta tocaba alegres
serpentinas
canciones y una gran mesa, repleta de mento-de la despedid
Bueno a. pas
a.
, ya han pasaado casi do
d os
las más ricas comidas y postres, fue díass que no llego a mi casa -dijo Bar
día
puesta a lo largo de la avenida principal. tola- y sería bueno que volvie volvie ra
ra,,
Oliverio fue el que más disfrutó ppoor que si no a mi mamá le va a dar
cantando, bailando, pero por sobre un ata que surtido.
todo comiendo. Pascual y Valentín rela -No, niño Bartola,
Bartola, quédate a vivir
las
taba
bann losmás
escenas dettarriesgadas,
de allles
al es,, gadas,
arries esp
spececia
iallmeenes
a quienes
qui ntee los
nt con nosotros
nosotro
de cien s unos pocos
o doscientos años...
-le dijo no más
Oliverio.
 66
67

risa .
A Bartolo le dio un poco de risa. 68

-¿ Un
Unos
os pocos añaños
os?? No, Olive
rio, no puedo quedarme. Tengo que
volver con mi familia.
Entonces, Pascual, Oliverio, Sofía
y Valentín, acompañaron a Bartolo has
ta su cama
cama má
mágic
gica.
a. Sofía
Sofía le dio un ca
nasto con pasteles, carame
caramelos
los y frutas.
-Toma. Lleva esto para el camino.
-Gracias -y se quedó mirándola.
Sentía que el corazón le retum
ba
ba de
dent
ntro
ro de
dell pe
peccho
ho.. Ell
Ellaa est
estaba
aba son
rien
riendo
do,, pero sus ojos es esta
taba
bann tr
tris
iste
tess y
brillantes. A él le dio demasiada pena
dejarla y le dijo:
-Sofía, ¿no quieres irte
conmigo?
Quizás podríamos ubicar a tus papás.
Ella suspiró muy de desspacio
io,, se
acercó y le dio un abrazo.
-No; tútúdeb
debes
es ir con tu familia y
yo me debo queda
quedarr aq
aquí
uí con la mía,
porque mi fa fami
mili
liaa so
sonn Oliverio, Pas
cual, Valentínyyyo
me necesitan todos los demás. Ellos
a ellos.
 -Pero yo también
también...
...

Bartolo sintió algo en la cas,, su inmensa generosidad y ganas de

cas de
garganta que no lo dejó seguir
hablando.. Tenía angustia y ganas
hablando 69

de
cuellorar
nta q, upero
e Senofíael efondo
staba seendaba
lo
correcto.
Con mucha pena los fue
abrazan do para desped
despedirse
irse y luego
subi
subióó a su ca cama
ma vo vola
lado
dora
ra.. Ya
estaba
estaba hecho
hecho todo
todo un exp expert
ertoo en
m anejarla, soybre lel
suavemente a suelo.
hizo flotar
-¡Adiós, Bartola! -le dijeron
todos.
-¡Adiós, amigos! -contestó.
-Nunca te teoolvidaremos -le
dijo Sofía mi
mieentras Ba
Barrtol
oloo se

alej
alejab
abaa por
alcanzó a oír.el cielo, pero él no la
Ya cucuan
andodo es
esta
taba
ba le
lejo
jos,
s, y el
pue blo asombroso era solo un punto
en la distan
distanci
cia,a, se metió ent
ntrre las
sábanas y se acurrucó abrazado a la
almo hada.
hada. Se puso a pensar en los

iconocido.
ncreíbles Valentín
amigoscon qsuuevi talidad
había
y audacia, Pascual con su sabi duría
y ca
calma
lma,, Oli
Oliver
verio
io con sus ideas lo

ay
ayud
udar
ar siem pre. Pero de quien más m ás se
acordaba
aco rdaba era
era de Sofía, con su bondad y
,f De vuelta en casa
cariño, y su so
sonn risa.,
risa.,dd e angelito.
Así,
Así, en
ente
tero
ro ta
tapa
pado
do de
dent
ntro
ro de la
cama, se fue Bar
Barcoco lo
lo,, volando por enci
ma de la s mo ntañas,
ntañas, de vuelta a casa. ÉlÉl
no se acordaba de lo cansado qu quee esta ba,
ppero
ero su
su cuerpo sí, así que, sin darse cuen
c uen -¡Barto
-¡Bar tola
la!! ¿¡
¿¡Dó
Dónde
nde ha hass es
esttado!?
ta, se quedó pro fund ame
am ent
ntee dor mido. Bartola abrió los ojos instantá
neam
ne amenente
te al esescu
cuch
char
ar una voz muy co
noccid
no ida:
a: la de su mamá. No alcanzó a
contestarr cuando elia lo abrazó tan
contesta
fuer
fu erte
te que ca casi
si lo re
revi
vien
enta
ta y le dio mu
chos besos mie ient
ntra
rass de su suss ojos salía
tanta agua qu quee Bartolo pensó que no
iba a tener que du dus:
s:hh arse. Pero el amor
de madre le le dur ó poco y se paró de nue
vo con una una cacara
ra de eno
enojad
jadaa que a Bar
tolo
to lo le di dieero
ronn gagana
nass de desaparecer...
pper
ero no le resultó.
- Mu Muyy bienbien,, cacabal
baller
lero.
o. AhoAhora
ra
usted está muy atrasado para el colegio,
así que se me vis iste
te y parte inmediata
mente
me nte.. Pero a la vuelta
vuelta vavammos a te tene
ne r
una buena
buena convers
conversación
ación loslos dodoss - le
dijo con tono de amenaza.
 70

Lo de la conversación a Barcolo guardado la última lagartija que cazó

le daba bastante susto, pero prefería eso antes de irse en su viaje fantástico, pero
a que a su mamá se la llevaran presa los la pobre estaba tiesa y bastante muerta.
carabineros
vech
vechan do lapor
ando hijicidio.
s circu
circunsta Así
nstancias
ncias, que apro
, partió co Sacó en cuenta que así era mejor por
que ahora la lagartija se convertiría en
mo unun soplo al colegio sin siquiera to- fósil, igual que los din inoosaurios, y
mar desayuno. · podría venderla a un museo. Mientras
Corrió todo el camino, pensando seguía
segu ía buscando
buscando con la cabeza metida
en la inc
increí
reíble
ble aventura que había teni dentro del banco, la profesora (que era
do,, pero le daba rabia pensar que nadie
do algo
algo re ll
llen
ena,
a, un poc
ocoo vieja y usaba
le cre
creerí
eríaa jamás, porque estaba seguro anteojos), dijo:
que contarle a sus compañeros de curso -Alumnos, quiero presentarles a
sería una pérdida de tiempo. unaa nu
un nuev
evaa co
comp
mpañ
añer
eraa qu
quee estará con
Llegó apenas antes que cerraran nosotros a partir de hoy.
la puerta y se fue a sentar a su banco al Bartola levantó el cuello lenta
fondo de la clase. En ese momento se mente par-a ver quién era
era.. Sus ojos no
dio cuenta que con todo el apuro se le podían creer lo que veían.
veían.
habían
hab ían qued
quedado
ado sus cuad
cuadernos
ernos en la ca -Esper
-Espero o que todos·
todos· la reciban
sa, y miró dentro de su mesa, a ver si es bien -c-con
onttinu
nuó
ó la profesorora
a-. Su
que había alguno que se le hubiese olvi nombre eses...
...
dado en el colegio. -¡Sofía! -le salió a Bartola del
Buscó
Bus có rev
revolv
olvie
iendo
ndo su de desor
sorde
denn alm .
de papeles, piedras, palos y un montón ¡Sí, era ella! ¡Era Sofía! Pero, ¿có
de
unootros
de objetos entretenidos.
sus frascos Encontró
de vidrio donde mo? ¿por qué?ese
Bueno, ¿cuándo?
es otro cuento.
había
72 73

MAURI
MAU RICI
CIOO PA
PARE
REDE
DESS

,f Índice Nació en Santiago de Ch Chil

ilee, en 1972.
Estudió en la Pontificia Universidad
Cató lica de Chi hile
le,, don
ondde se ti tittul
ulóó de
Inge
geni
nieero Civil El Eléc
éctr
tric
ico.
o. EjEjer
ercicióó su
profesión hasta el año 2001, momento en
que dedeccidi
dióó se
segu
guiir su vo voccac
acióiónn de
Bartolo....
Bartolo...............
..................................................
.......................................77 escritor.
escritor. Act
Actual
ual me
ment
ntee enseñeñaa Liter
Literatura
atura
Querer es poder....
poder..................................9
..............................9 Infantil
Infantil en la Unive
Universida
rsidadd André
Andréss Be Bell
lloo.
La ciudad asombrosa...........................15 Es el autor de ¡Ay, cudnto me quiero!
Bartolo conoce nuevos amigos.........20 (Alfaguara, 2003).
Tal como están las cosas.....................
cosas.....................26 26
La aventura comienz
comienza.........
a.......................29
..............29
En el fondo, no todo es
lo que parece.....................................35
Creer en lo imposible.......................
imposible.......................44 44
Atrapados en el túnel...
túnel...........
...............
.............51
......51
Por grande que sea el castillo,
hasta el ladrillo de.
de. más abajo
es importan
importante....................................61
te....................................61
De vuelta en casa.............................71
casa............................. 71
La cama
mágica de
Ba1rtolo
Mauricio Paredes
Uus11ac es de
Romina Carvajal

¿Cómo se mªnejª una Ci'Jma

vollador-a y desobediente?
vo
sº inteniª
nteniªgprencier
gprencier Bartolo
despY s QYe la SYYª
decide llevar!\'! r
el eiele hªstª 'ª
Cor-díllern de !.es Arn:e.!s,
Jªm
ªmª§
ª§ hª
hªbr
br1
1ª imªg
imªgín
ínªª
º
gye¡¡llí
f¡¡nta¡;tide§gyl;)rírf¡¡
e¡¡eiY dYftil
wt re¡t¡, Mef\Q§ gye
ª
eoo erí¡ ¡ ()Hver-íl'! el ªl'!m!, tªi.!§€\J.é!I el eon g,
V¡¡lenlni e1 QYf\1ª y Qfí¡¡ 'ª íliM. Y rneng$ ªún qµ,e
enln
¡yn\os
yn\osdeber ían viaiar en mQtfl ílye
deberían ílyetªtª"•
"• tiaeer
syrf, OYQE!Á f, l}scalaf Cllffl;JS y elq lor-ar- tQn:eies
m1sterioscis para
a¡¡¡lvaral myndo
a¡ conseaYir
porqye, la l'lertiie¡¡
tlill como llils eo ae
llsttm1¡¡s¡¡ña•
as,
¡manana elSol no PQdril Sllllrl

1S61195H 39'218 ,X

1. . 1l.llll l l l