Está en la página 1de 7

MODERNIDAD LIQUIDA

• Modernidad líquida (o modernidad tardía) es la caracterización de las


actuales sociedades globales altamente desarrolladas como continuación
(o extensión) de la modernidad, en lugar de como el pasaje a una nueva
era enunciada como posmodernidad. Introducida como "modernidad
líquida" por el sociólogo polaco-británico Zygmunt Bauman, la modernidad
tardía está marcada por las economías capitalistas globales, con su
privatización creciente de servicios y la revolución de la información. Si bien
las definiciones presentan variaciones entre los autores, se refieren a un
conjunto similar de fenómenos y pueden, de este modo, ser entendidas
conjuntamente.
• Sociólogos y teóricos sociales como Scott Lash, Ulrich Beck, Zygmunt Bauman y
Anthony Giddens, mantienen (contra los posmodernistas) que la modernidad
continúa en la era contemporánea, por lo que es mejor concebirla como un
estado de modernidad tardía.2A partir de los cambios sociales y tecnológicos
ocurridos desde los 1960s, el concepto de "modernidad tardía" propone que las
sociedades contemporáneas son una continuación clara de transiciones
institucionales y desarrollos culturales modernos. El concepto de modernidad tardía
se construye contra el telón de fondo de un mundo fragmentado de identidades
en competencia y contraste, y culturas de estilo de vida. La matriz de la
personalidad moderna tardía es la manera ambigua en que las relaciones sociales
fluidas afectan a los individuos, produciendo un sí mismo reflexivo y múltiple. Esta
teoría de la sociológica explica cómo las condiciones en las que actúan los
miembros de una sociedad cambian más rápido de lo que tardan en consolidarse
en hábitos y rutinas. Las costumbres se han sustituido por las modas, esto produce
que las ideas no se solidifiquen en las sociedades, sino que fluyan y se modifiquen
constantemente a pasos acelerados
• Zygmunt Bauman -quien introdujo la idea de
modernidad líquida- escribió sobre sus consecuencias
en los individuos, concretamente aumentando
sentimientos de incertidumbre y una privatización de la
ambivalencia. Se trata, para este autor, de una
continuación caótica de la modernidad, donde una
persona puede cambiar de una posición social a otra
de manera fluida y reiterada. La modernidad líquida,
según Bauman, está marcada por cambios constantes,
inciertos y acelerados que, entre otras cosas, llevan a
dar más valor al índice de consumo y productividad
laboral de una persona al cuidado que requiere
cuando llega a una edad de vejez. El nomadismo
deviene un rasgo general del hombre líquido moderno,
mientras fluye a través de su propia vida como un
turista, cambiando sitios, trabajos, cónyuges, valores y a
veces más —como su orientación política o sexual—
excluyéndose de las redes tradicionales de contención.
• Bauman acentúa la nueva carga de responsabilidad que el modernismo
líquido coloca en los individuos, en donde los patrones tradicionales son
reemplazados por otros auto-escogidos. La expresión “modernidad líquida”
busca definir un modelo social que implica “el fin de la era del compromiso
mutuo”, donde el espacio público retrocede y se impone un individualismo
que lleva a “la corrosión y la lenta desintegración del concepto de
ciudadanía” La entrada a la sociedad globalizada está abierta para
cualquiera con su propia posición y capacidad de pago, de modo similar a
como era la recepción de los viajeros en los viejos caravasar
• Anthony Giddens no niega que hayan
ocurrido cambios importantes desde los
albores de la modernidad, pero
argumenta que no hemos abandonado
verdaderamente la modernidad. Por el
contrario, la modernidad de las
sociedades contemporáneas es una
modernidad desarrollada, radicalizada,
"tardía" —pero todavía modernidad, no
posmodernidad. En tal perspectiva, el
posmodernismo aparece sólo como una
versión hiper-tecnológica de modernidad
• La atomización de la sociedad es un fenómeno moderno derivado del proceso de
postindustrialización, de la globalización económica y de los avances inéditos de la
comunicación. En un mundo cada vez más conectado, las relaciones
interpersonales se diluyen y las solidaridades se extinguen sustituidas por la
virtualización de las redes sociales. La atomización afecta a todas las relaciones
comunitarias tanto a las heredadas de la sociedad pre capitalista como a las
derivadas de las capacidades organizativas de resistencia de la nueva clase
obrera en el momento de la gran acumulación capitalista e imperialista del siglo
XIX: la sindical y la interna de las grandes empresas. Estas relaciones se han diluido
en las grandes corporaciones actuales donde el poder es difícil de visibilizar,
compartimentado en pequeñas empresas subsidiarias. La atomización empresarial
coincide con la atomización de las decisiones ejecutivas dentro de las empresas.
Los mandos intermedios siempre aluden a órdenes superiores del sistema, liberando
su responsabilidad. Los ciudadanos pierden de vista la gestión de los asuntos que
les conciernen en la ciudad y los usuarios el control de producto. A nivel judicial,
político… la persona pierde autonomía y empoderamiento de las situaciones en
concreto en las que parece que se le ofrecen continuamente capacidades
decisorias

También podría gustarte