Está en la página 1de 9

República bolivariana de

Venezuela
U.E colegio educativo montalban
Inscrito en el M.P.P.E
4to año “B”
BIOLOGIA

ATP
ADENOSIN TRIFOSFATO

Prof. Elisa DE: Jeremy


guerrero colina
Caracas, 28 de noviembre de
2023
Índice
- Pagina 1: ¿qué es?
- Página 1,2,3: constitución de la molécula de ATP
- Pagina 3,4: formación de la molécula
- Pagina 4,5: funciones detalladas
- Pagina 6,7: transporte de la molécula de energía
- Pagina 7: importancia del atp
¿Qué es?
El adenosín trifosfato (ATP) es una molécula esencial para la vida. Se trata de un
nucleótido compuesto por una base nitrogenada, adenina, un azúcar de cinco carbonos,
ribosa, y tres grupos fosfato. Esta molécula desempeña un papel fundamental en la
transferencia de energía en los sistemas biológicos.
La molécula de ATP actúa como una especie de "moneda energética" dentro de las células,
ya que almacena y transporta la energía necesaria para llevar a cabo procesos metabólicos y
actividades celulares. Esta energía es liberada a través de la hidrólisis del enlace fosfato que
une los tres grupos fosfato, lo que genera adenosín difosfato (ADP) y un grupo fosfato
libre, liberando así energía que puede ser utilizada por la célula.
El ATP se produce principalmente en la mitocondria, organelo encargado de llevar a cabo
la respiración celular. Durante este proceso, los nutrientes (carbohidratos, lípidos y
proteínas) se descomponen para obtener energía, y esta energía se utiliza para sintetizar
ATP a partir de ADP y fosfato inorgánico (Pi) mediante un proceso llamado fosforilación
oxidativa.
La energía almacenada en el ATP se utiliza en una amplia variedad de procesos celulares,
como la síntesis de macromoléculas (proteínas, ácidos nucleicos, carbohidratos y lípidos),
el transporte activo de sustancias a través de la membrana celular, el movimiento de los
organelos celulares y la contracción muscular, entre otros.
Además de su papel como fuente de energía, el ATP también desempeña un papel
importante en la señalización celular. Al liberarse el fosfato terminal, el ATP se convierte
en adenosín difosfato (ADP), y esta conversión puede activar o desactivar proteínas y
enzimas específicas, lo que permite regular numerosos procesos celulares.

Constitución de la molécula de atp


El ATP está formado por la base nitrogenada adenina (A) unida a un azúcar de cinco
átomos de carbono, la ribosa, que a su vez se une a tres grupos fosfato en cadena (P).
Adenina y ribosa constituyen la molécula de adenosina. estas son las funciones de cada
uno:
-base nitrogenada de adenina: La base nitrogenada de adenina desempeña un papel
crucial en la función del ATP. La presencia de la adenina en el ATP le confiere la
capacidad de participar en la transferencia y almacenamiento de energía en las células.
La adenina tiene una estructura molecular que permite formar enlaces específicos con otros
componentes celulares. Además, la adenina es una base nitrogenada que forma parte de los
ácidos nucleicos (ADN y ARN), por lo que también está implicada en la síntesis y el
metabolismo de estos ácidos nucleicos.
La adenina en el ATP permite la interacción con enzimas y coenzimas que participan en la
liberación y utilización de la energía almacenada en la molécula. La adenina se une
químicamente a la ribosa a través de un enlace glucosídico, formando la adenosina, que a
su vez se une a los grupos fosfato para formar el ATP.
Cuando se hidroliza el enlace de alta energía entre los grupos fosfato del ATP, se libera
energía utilizable por la célula. Esta liberación de energía está regulada y controlada por
enzimas y coenzimas que interactúan con la adenina y los grupos fosfato del ATP. En
resumen, La adenina interactúa con enzimas y coenzimas que controlan la liberación de
energía almacenada en el ATP, proporcionando así una fuente de energía necesaria para
llevar a cabo numerosos procesos celulares.
Ribosa: La ribosa tiene varias funciones importantes en la molécula de ATP. A
continuación, se enumeran algunas de ellas:
Estabilización de la estructura: La ribosa actúa como esqueleto o soporte estructural de la
molécula de ATP. Se une a la base nitrogenada de adenina mediante un enlace glucosídico,
formando la adenosina. Esta unión entre ribosa y adenina proporciona estabilidad y rigidez
a la molécula de ATP.
Formación de enlaces químicos: La ribosa, como azúcar de cinco carbonos, forma enlaces
químicos con los grupos fosfato del ATP. Los grupos fosfato están unidos a la ribosa
mediante enlaces fosfodiéster, que son enlaces químicos fuertes y estables. Estos enlaces
permiten la formación de una cadena de fosfatos en el ATP, lo que le confiere su estructura
característica.
Transferencia de energía: La ribosa, al formar parte de la estructura del ATP, está implicada
en la transferencia y almacenamiento de energía en las células. Los enlaces de alta energía
entre los grupos fosfato del ATP se liberan mediante hidrólisis, generando energía
utilizable por la célula. La ribosa participa en esta liberación de energía al formar parte de
la estructura del ATP.
Grupos de fosfato: existen 3 tipos de grupos fostato:
- El grupo fosfato alfa es el más cercano a la ribosa, el azúcar de cinco carbonos que
forma parte del nucleótido. Este grupo fosfato se une al carbono 5 de la ribosa mediante un
enlace éster, que es un tipo de enlace covalente que se forma entre un ácido y un alcohol. El
grupo fosfato alfa tiene una función estructural, ya que forma parte de la columna vertebral
del ADN y el ARN, los ácidos nucleicos que almacenan y transmiten la información
genética. El grupo fosfato alfa también se une al carbono 3 de la ribosa del nucleótido
anterior, formando un enlace fosfodiéster, que es otro tipo de enlace éster. Estos enlaces
fosfodiéster son los que unen los nucleótidos entre sí, creando una cadena lineal de ADN o
ARN¹.
- El grupo fosfato beta es el que está en el medio de los tres grupos fosfato. Este grupo
fosfato se une al grupo fosfato alfa mediante un enlace anhídrido fosfórico, que es un tipo
de enlace covalente que se forma entre dos ácidos. El grupo fosfato beta tiene una función
energética, ya que al romperse este enlace se libera una gran cantidad de energía. Esta
energía se utiliza para impulsar muchas reacciones químicas que ocurren en las células,
como la síntesis de proteínas, el transporte de moléculas a través de las membranas, la
contracción muscular, etc. Cuando el ATP pierde el grupo fosfato beta, se convierte en
ADP (adenosín difosfato), que es una molécula de menor energía. El ADP puede recuperar
el grupo fosfato beta mediante la fosforilación, que es la adición de un grupo fosfato. La
fosforilación se produce gracias a la acción de enzimas llamadas quinasas, que transfieren
grupos fosfato desde otras moléculas que los tienen, como el fosfato inorgánico o el
fosfoenolpiruvato².

- El grupo fosfato gamma es el más alejado de la ribosa, y también se une al grupo fosfato
beta mediante un enlace anhídrido fosfórico. El grupo fosfato gamma tiene una función de
señalización, ya que puede transferirse a otras moléculas que necesitan activarse o
regularse. Esta transferencia se llama fosforilación, y también la realizan las quinasas.
Algunas de las moléculas que reciben el grupo fosfato gamma son las proteínas, que
cambian su forma y su función al fosforilarse. Por ejemplo, la fosforilación de la proteína
quinasa activada por AMP la activa para regular el metabolismo energético de la célula. La
fosforilación de la proteína quinasa activada por mitógenos (MAPK) la activa para regular
la proliferación, la diferenciación y la apoptosis celular³. Cuando el ATP pierde el grupo
fosfato gamma, se convierte en ADP, y cuando pierde los dos grupos fosfato beta y gamma,
se convierte en AMP (adenosín monofosfato), que es una molécula de muy baja energía. El
AMP puede recuperar los grupos fosfato beta y gamma mediante la fosforilación, que se
produce en procesos como la glucólisis, el ciclo de Krebs y la cadena respiratoria⁴.

Formación de la molécula

La molécula del ATP se forma a partir de la fosforilación del ADP, que es la adición de un
grupo fosfato. La fosforilación se produce gracias a la acción de enzimas llamadas
quinasas, que transfieren grupos fosfato desde otras moléculas que los tienen, como el
fosfato inorgánico o el fosfoenolpiruvato². La molécula del ATP se forma principalmente
en las mitocondrias de las células, que son los orgánulos encargados de la respiración
celular. La respiración celular es el proceso que libera la energía química almacenada en la
glucosa, mediante un proceso de oxidación que produce CO 2, H 2 O y ATP. La
respiración celular consta de tres etapas: la glucólisis, el ciclo de Krebs y la cadena
respiratoria.

La glucólisis es la primera etapa de la respiración celular, y consiste en la degradación de


la glucosa en dos moléculas de piruvato, que entran en la mitocondria. La glucólisis se
produce en el citoplasma de la célula, y produce un balance neto de dos moléculas de ATP
y dos de NADH (un transportador de electrones) por cada molécula de glucosa.
El ciclo de Krebs es la segunda etapa de la respiración celular, y consiste en la oxidación
del piruvato a CO 2 y H2O, con la liberación de energía en forma de ATP, NADH y FADH
2 (de nuevo otro transportador de electrones). El ciclo de Krebs se produce en la matriz de
la mitocondria, y produce un balance neto de dos moléculas de ATP, seis de NADH y dos
de FADH 2 por molécula de glucosa.
La cadena respiratoria es la tercera etapa de la respiración celular, y consiste en el
transporte de los electrones provenientes del NADH y el FADH 2 a través de una serie de
complejos proteicos situados en la membrana interna de la mitocondria. Este transporte
genera un gradiente de protones (H +) entre el espacio intermembrana y la matriz, que se
utiliza para impulsar la síntesis de ATP por medio de una enzima llamada ATP sintasa. La
cadena respiratoria se termina cuando los electrones se combinan con el oxígeno molecular,
que actúa como aceptor final de electrones, y forman agua. La cadena respiratoria produce
un balance neto de unas 32 moléculas de ATP por cada molécula de glucosa, esta es la
forma en donde se produce más.

Funciones detalladas
El ATP es la fuente más importante de energía en nuestro cuerpo. Tiene un amplio
repertorio de funciones esenciales, a continuación, se detallan algunas de ellas:
Transferencia de energía: El ATP guarda y libera energía química para impulsar
reacciones bioquímicas y procesos celulares. Cuando el enlace de alta energía entre los
grupos fosfato del ATP se hidroliza, se libera energía que se utiliza para realizar trabajo
biológico, como la contracción muscular, el transporte de sustancias a través de las
membranas celulares y la síntesis de nuevos compuestos., estas se encuentran apenas abajo
La contracción muscular: también es fundamental el ATP para la contracción muscular
en el sistema muscular esquelético, cardíaco y liso. La hidrólisis del ATP proporciona la
energía necesaria para la interacción entre las proteínas del músculo, permitiendo la
generación de fuerza y movimiento.
Bombas de ion: El ATP se utiliza para alimentar bombas de iones en las membranas
celulares, como la bomba de sodio-potasio. Estas bombas mantienen la homeostasis y la
concentración adecuada de iones dentro y fuera de las células, lo que es esencial para el
funcionamiento normal de los sistemas nervioso y muscular, la regulación del equilibrio de
fluidos y la transmisión de señales nerviosas.
Síntesis de biomoléculas: El ATP proporciona la energía necesaria para la síntesis de
numerosas biomoléculas esenciales, como proteínas, lípidos y ácidos nucleicos. Estas
moléculas son responsables de funciones clave en el organismo, como el crecimiento y la
reparación de tejidos, la producción de hormonas, la comunicación celular y el
mantenimiento de la estructura y función celular.
Activación de enzimas: El ATP puede actuar como un cofactor o coenzima en ciertas
reacciones enzimáticas. Transferir un grupo fosfato del ATP a un sustrato puede activar la
enzima y facilitar la velocidad y eficiencia de las reacciones químicas.
Transporte de sustancias: El ATP es necesario para el transporte activo de sustancias a
través de las membranas celulares. Por ejemplo, la bomba de sodio-potasio utiliza ATP
para transportar iones de sodio fuera y iones de potasio dentro de la célula. Además, la
energía del ATP se utiliza para impulsar el transporte de moléculas y nutrientes a través de
las membranas en contra de su gradiente de concentración.
Señalizar células: El ATP también actúa como una molécula de señalización extracelular.
Puede ser liberado al medio extracelular y desencadenar respuestas celulares específicas
mediante la interacción con los receptores enérgicos o purienergicos. Esto es importante en
la comunicación entre células y en la transmisión de señales en procesos como la
contracción muscular, la secreción glandular y la función neuronal.
Mantener la estructura celular: La molécula de la que estamos hablando es muy
importante para el mantenimiento del citoesqueleto, una red de filamentos que le da forma
a la célula.

Transporte de la molécula de energía


El transporte de la molécula de energía en el ATP se refiere al movimiento del ATP desde
el lugar donde se produce hasta el lugar donde se utiliza. El ATP se produce principalmente
en la mitocondria, el orgánulo celular encargado de la respiración celular. La respiración
celular es un proceso que implica la oxidación de la glucosa y otras moléculas orgánicas en
presencia de oxígeno, liberando energía que se almacena en los enlaces anhídridos de
fosforo del ATP.
El ATP se transporta desde la mitocondria hasta el citoplasma por medio de proteínas
transportadoras específicas, como la adenina nucleótido translocasa (ANT) y el fosfato
translocasa (PiC). Estas proteínas forman parte de la membrana mitocondrial interna y
permiten el intercambio de ATP y ADP entre la matriz mitocondrial y el citoplasma.
El ATP se utiliza en el citoplasma para impulsar diversas reacciones y procesos celulares
que requieren energía, como el transporte activo de sustancias, la síntesis de proteínas, la
contracción muscular, la comunicación neuronal y el mantenimiento de la estructura
celular¹. El ATP se hidroliza a ADP y Pi, liberando la energía almacenada en el enlace
anhídrido de fosforo. El ADP y el Pi pueden volver a la mitocondria para ser reciclados y
formar de nuevo ATP, completando el ciclo.
El transporte de la molécula de energía en el ATP es un mecanismo esencial para la vida,
ya que permite el intercambio de energía entre los procesos catabólicos y anabólicos de la
célula. El ATP es la principal moneda energética de las células y es fundamental para el
funcionamiento de todos los sistemas biológicos.

Importancia del atp


Por lo que hemos analizado en este trabajo podemos llegar a la conclusión de que el ATP es
una molécula esencial para la vida humana, que se utiliza en todo tipo de procesos y
funciones celulares, el ATP es importante para el mantenimiento y el equilibrio de las
condiciones interna del organismo, también es importante para adaptarnos al medio
ambiente ya que permite a las células responder a los cambios y a los estímulos externos
por esto considero que el ATP es el combustible que hace posible la vida en la tierra.

También podría gustarte