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Principios deontológicos

La deontología proviene del


vocablo griego deon, deber y
logos, razonamiento o ciencia,
Jeremías Bentham determina a la
deontología como los deberes
que cada persona tiene consigo
misma y con los demás, de
acuerdo con la RAE la
deontología es la ciencia o
tratado de los
deberes. Con ello implica el
código de conducta bajo el cual
tiene la obligación de actuar el
profesional, sin embargo, se
puede apreciar que cada
profesión tiene su propia
deontología, con
principios específicos aplicables
a determinada diciplina
Principios deontológicos

La deontología proviene del vocablo griego deon, deber y logos, razonamiento o ciencia,
Jeremías Bentham determina a la deontología como los deberes que cada persona tiene consigo
misma y con los demás, de acuerdo con la RAE la deontología es la ciencia o tratado de los
deberes. Con ello implica el código de conducta bajo el cual tiene la obligación de actuar el
profesional, sin embargo, se puede apreciar que cada profesión tiene su propia deontología, con
principios específicos aplicables a determinada disciplina

Los principios de la deontología jurídico pueden darse a conocer como los deberes
que enmarcan las responsabilidades de determinada profesión, entonces decimos que estos
deberes son de <carácter coercitivos, ya que determinadas instituciones entre ellas el “Concejo de
la Judicatura” o los llamados “colegio de abogados” crean códigos deontológicos que orientan al
abogado a realizar sus funciones de manera correcta.

Entre estos principios tenemos el de independencia, Nielson Sánchez Stewart determina que la
abogacía es independiente, porque no está subordinada a ningún poder, ya que el abogado no
recibe órdenes, en si sería aquella libertad que tiene la persona para poder obrar de una manera
otra, de querer o no hacer algo, en lo que el individuo se hace responsable de sus propios actos,
por ello el abogado debe ser independiente ya que no necesita la aprobación de alguien para
poder ejecutar una acción, los profesionales de derechos cumplen funciones específicas, en este
caso el Juez es independiente ante las acciones que realiza el abogado, ya que el juez juzga es
decir dicta sentencia, y el abogado es el que litiga demuestra ante el juzgador evidencias
necesarias para la defensa de su cliente.

Pero ante esto también es necesario que el abogado cuente con una libertad de poder decidir si
realiza algo o no, es decir que este tenga la potestad de aceptar o rechazar su intervención en
determinados casos. La RAE determina a la libertad como la facultad que tiene el hombre de obrar
de una manera u otra y de no obrar, ya que esta persona es responsable de sus actos, he aquí la
importancia de este principio ya que demuestra que el abogado es libre de poder hacer lo que el
decida, como la libertad que este posee el poder escoger a que cliente quiere representar, salvo
en los casos de aquellos que están patrocinados por el estado, también esta aquella libertad de
que el profesional puede elegir en que ciudad quiere ejercer su profesión, así mismo esta aquella
libertad funcional es decir que la persona está en el libre albedrio de poder elegir su especialidad
en determinada materia, de la misma manera se encuentra la libertad de expresión que es un
derecho que nos garantiza el estado ecuatoriano a la ciudadanía, esta libertad de expresión es de
suma importancia para el abogado, ya que este debe de expresar lo que piensa, de la misma
manera al momento de un litigio este deberá de determinar con fundamento sus distintas
hipótesis de determinado caso que se está resolviendo, y ante el juzgador este deberá e crear un
convencimiento hacia el juez de que su cliente es inocente. Pero ante esto también es necesario
que el abogado sea confidencial, la confidencialidad en el derecho es un pilar fundamental que le
garantiza seguridad a las partes, dándoles certeza de que se encuentran en un lugar seguro donde
lo que se lleve a cabo en un proceso no podrá ser divulgado, es por eso que el principio de
confidencialidad en los códigos deontológicos se vuelve importante ya que estele garantiza al
cliente que su información está a salvo, ante todo lo que una persona le cuente al abogado este
tendrá que ser confidente y es aquí donde se pone de manifiesto el secreto
profesional en lo que el abogado no tendrá que revelar, manifestar, comunicar cualquier hecho
que allá llegado a su conocimiento, es en sí la confianza que una persona deposita hacia el
profesional del derecho, de ahí que el secreto profesional se convierte en uno de los deberes
esenciales de la abogacía.

Nielson Sánchez determina que el secreto profesional es un deber y derecho que


tiene el abogado en el ejercicio de su profesión, es decir que una vez que el abogado decida
representara una persona, este tendrá el deber de ser integro, honesto y leal hacia su cliente, y es
aquí donde la confidencialidad se convertirá en un elemento esencial de la relación del abogado
con el cliente.

Por último el abogado deberá de ser un hombre transparente, por ello dentro de los códigos
deontológicos encontramos el principio de transparencia mismo que trata que el abogado debe
de ser claro, según la RAE la trasparencia es la claridad de un acto, en lo que no exista ninguna
ambigüedad, la trasparencia se relaciona íntimamente con la rendición de cuentas en la que el
abogado deberá de manifestar a su cliente todo lo que el realice ante el asunto encomendado, por
otra parte como lo determina Nielson que el abogado es un ser servicial y que anteriormente su
fin no era siempre económico lo que querían eran servir a la colectividad y su honorario erala
gratitud que el cliente manifestaba, pero hoy en la actualidad hemos llegado a que el cliente
pague por el servicio ofrecido, por ello la trasparencia permite que el abogado
ponga enconocimiento acerca de sus honorarios hacia su cliente.
La deontología jurídica es muy importante para los abogados y estudiantes de derecho. Los
abogados deben aplicar principios éticos como respetar la privacidad de los clientes, guardar
secretos profesionalmente y comportarse a la altura de su profesión. También deben estar
actualizados en conocimientos legales y aplicar valores como la justicia. Sin embargo, algunos
abogados argumentan deficientemente los casos debido a que no se actualizan o provienen de
universidades con poca formación en aspectos como la ética legal.

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