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REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA.

MINISTERIO DEL PODER POPULAR PARA LA EDUCACIÓN UNIVERSITARIA.


UNIVERSIDAD NACIONAL EXPERIMENTAL DE LOS LLANOS CENTRALES
‘‘RÓMULO GALLEGOS’’
ÁREA DE CIENCIAS POLÍTICAS Y JURÍDICAS
PROGRAMA DE MUNICIPALIZACIÓN DE FORMACIÓN EN DERECHO
VALLE DE LA PASCUA - ESTADO GUÁRICO.

Facilitadora: Integrante:

Magaly Mota Rita Ortega # 36

CI: 20525021

Septiembre, 2021
Secreto profesional del abogado

Se trata de un secreto confiado, mediante el cual, el profesional se obliga a


mantener ocultas todas aquellas confidencias que reciba en el ejercicio de su
profesión. El secreto profesional, tiene una condición moral y otra jurídica Desde el
punto de vista moral, existe el deber de guardar el hecho conocido cuando éste
pueda producir resultados nocivos o injustos sobre el cliente si se viola el secreto.
En el ámbito legal, la obligación del profesional a guardar secreto está recogida
por la mayoría de las legislaciones, aunque no en la misma medida.

El secreto profesional es una obligación de confidencialidad, que se impone por


la necesidad de que exista una absoluta confianza entre el profesional y quienes
acuden a solicitar sus servicios. Por ejemplo, un acusado no podría contar toda la
verdad a un abogado si luego se pudiese obligar al abogado a declarar como
testigo lo que le ha contado. En otros casos, como el de los médicos, el secreto
profesional se basa en el respeto a la intimidad del cliente.

En los abogados, el Secreto Profesional surge como una consecuencia de la


existencia de una relación profesional, siendo así un deber, un derecho y porque
no decirlo también se trata de una obligación entre el abogado y su clientela.

Entonces la obligación jurídica de guardar el Secreto profesional y el deber


moral de no revelarlo, nacen de la dependencia profesional, que puede o no
convertirse en contrato de Locación de Servicios a futuro. De lo que se puede
inferir que si se acepta la defensa, el Abogado se convertirá en defensor, y el
consultor en cliente. Esta aceptación se hará constar en el contrato pertinente de
Locación de Servicios Profesionales anteriormente descrito. Pero si no se acepta
la defensa no existe vínculo jurídico que una al Abogado con el cliente, sin
embargo el Abogado tendrá siempre la obligación y el deber moral de guardar el
secreto de aquello que fue objeto de la consulta.
Opinión de Ángel Ossorio sobre el secreto profesional

Para empezar a indagar un poco en la opinión acerca del abogado gran


letrado español Ángel Ossorio es importante mencionar el lema que tenia este
ilustre abogado, el cual decía que no hay más que una manera de guardarlo: “no
diciéndoselo a nadie”. Con tal reflexión pretendió expresar que quien consulta a
un abogado debe tener la certeza de que lo allí dicho no verá nunca la luz ya que,
indiscutiblemente, se trata de un derecho del ciudadano y de un privilegio-deber
del jurisconsulto.

El Secreto Profesional, nace pues de una relación en la que existe una


persona que confía un hecho o confía también un documento y un confidente que
recibe la noticia, con la obligación de guardarla y no comunicarla a ninguna
persona ajena a la situación. Por lo que, de este modo el Secreto es a todas luces
el total resultado de la confianza existente. La abogacía se caracteriza entonces
por ser un oficio o una profesión en el que la confianza es sin lugar a objeciones la
principal base. El cliente sabe que ha de depositar sus secretos y acude donde el
Abogado, en quien a ciegas confía, y es el que pondrá en práctica todos sus
conocimientos ya sean éticos, científicos y prácticos para poder tratar de ganar un
fallo o sentencia a favor de su cliente.

La confidencialidad

La confidencialidad se refiere al acuerdo del investigador con el participante


acerca de cómo se manejará, administrará y difundirá la información privada de
identificación. La propuesta de investigación debe describir las estrategias para
mantener la confidencialidad de los datos identificables, incluidos los controles
sobre el almacenamiento, la manipulación y el compartir datos personales.
Para minimizar los riesgos de divulgación de información confidencial, considere
los siguientes factores cuando realice el diseño de su investigación:

 Si es posible, recopile los datos necesarios sin utilizar información de


identificación personal.
 Si se requiere información de identificación personal, reitre la identificación
de los datos después de la recolección o tan pronto como sea posible.
 Evite transmitir electrónicamente datos personales no cifrados.

El secreto frente a los terceros

El secreto más allá de la terminación del servicio

Los Abogados, depositan las confidencias de los clientes, deben guardar el


secreto profesional, asunto que constituye un deber y un derecho fundamental de
dicha profesión. Este derecho y deber, permanecen incluso después de haber
cesado la prestación de los servicios. El derecho y la obligación del secreto
profesional comprenderán las confidencias del cliente, las del adversario, las de
los compañeros de profesión, y todos los hechos y documentos de que hayan
podido tener noticia por razón de cualquiera de las modalidades de la actuación
profesional.

Para hacer entender mejor este tema le facilitare unos ejemplos, los cuales
con los siguientes, serian una serie de información un poco delicadas que pueden
manejar los abogados sobre los clientes, tales como información económica (gana
tanto, tiene tantas propiedades, adeuda tanto, le embargaron tanto, cobró una
indemnización de tanto, le pasa tanto de pensión a su ex pareja, el coche no está
a su nombre, etc), o información médica (tiene tal o cual enfermedad, está de baja
por tal motivo, es consumidor de drogas, etc), o cualquier tipo de información que,
en definitiva, conozca derivada del ejercicio de la profesión (nació en tal año, se
propone divorciarse, fue condenado por tal delito, etc). Todos estos datos y otros
muchos, a nadie le agrada que se den a conocer o que se divulguen, y mucho
menos que quien traicione la relación de confianza sea tu propio abogado.

Cuando debe revelarse un secreto profesional

No todo aquel que difunda un secreto tuyo está cometiendo un fraude. Para
cometer un delito de revelación de los secretos profesionales, en primer lugar,
tienes que formar parte de un colectivo profesional. Además, dicho secreto tiene
que estar vinculado a la información del cliente que sea considerada como íntima.
Por tanto, el delito se restringe a una relación profesional en su ámbito más
estricto.

El secreto profesional se vulnera en los siguientes casos:

 Se puede producir daño en forma directa, es decir en forma consciente y


premeditada.
 Se vulnera en forma no intencional pero directa.
 A través de una confidencia a otra persona.
 A través de una conversación informal, con ligereza.

El abogado y su cliente, la eficiencia y la diligencia en la profesión

Durante todo el proceso, el abogado debe mantener puntualmente de la


marcha del mismo, de la conveniencia o no de la presentación de recursos, etc. A
su término, y en caso de desestimación de las pretensiones de su cliente, deberá
informarle de otros posibles cauces procesales en los que aquéllas puedan ser
estimadas.
 El deber de adecuada custodia de todos los documentos.
 El deber de devolución de la documentación al cliente.
 El deber de conocimiento de la legislación y jurisprudencia aplicables al
caso si hubiese interpretaciones no unívocas.

Son obligaciones del abogado para con la parte por él defendida, además de
las que se deriven de sus relaciones contractuales, el cumplimiento de la misión
de defesa que le sea encomendada con el máximo celo y diligencia y guardando
el secreto profesional.

El abogado realizará diligentemente las actividades profesionales que le


imponga la defensa del asunto encomendado, pudiendo auxiliarse de sus
colaboradores y otros compañeros, quienes actuarán bajo su responsabilidad.

En todo caso, el abogado deberá identificarse ante la persona a la que asesore


o defienda, incluso cuando lo hiciere por cuenta de un tercero, a fin de asumir las
responsabilidades civiles, penales y deontológicas que, en su caso, correspondan.

Relación del abogado y cliente

La relación entre abogado y cliente es una relación de especial confianza que


se encuentra enmarcada dentro del marco de un arrendamiento de servicios, que
no implica una obligación de resultado, sino una obligación de medios, dicha
obligación no comporta la de lograr la estimación o resolución favorables a las
pretensiones deducidas. Ahora bien, el abogado siempre ha de respetar las
instrucciones de su cliente, aunque siempre gozando de cierto margen de
actuación, así como de libertad en las actuaciones que estime más convenientes y
más favorables para su cliente y velando por sus intereses, todo ello por su
condición de perito en la materia.

El abogado debe respetar las instrucciones de su cliente, teniendo también el


deber de información y de consejo de la mejor vía para la defensa de sus
intereses, aunque como perito en la materia goce necesariamente de un cierto
margen de libertad e iniciativa para elegir los medios que estime más
convenientes, teniendo en cuenta los múltiples factores concurrentes definidos por
la expectativa de éxito y el coste a cargo del cliente, siempre procurando
salvaguardar los intereses del mismo mediante la prestación de asesoramiento y
defensa adecuados.

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