Bienestar

Vivíamos de forma vegetal, aunque eso es un insulto para las plantas.

El bienestar depende mucho del contexto de las personas, cuando nos preguntemos por él hay
que situarlo. Parte del proceso histórico de cada persona o de cada colectivo.

Idea mesiánica de la vida nos lleva a querer solucionar problemas ajenos, y queremos llevar el
bienestar a todos.

El bienestar es algo que se cultiva y tiene que ver con dos cosas: afuera que puede hacer uno para
crear condiciones para que en la otra persona florezca el bienestar. Por darle algo a la gente, la
gente de por sí no va a encontrar el bienestar.

Si uno quiere ver un cambio tiene que comenzar por hacerlo uno mismo.

Bienestar vs felicidad:

Bienestar, hedonista, creemos que es todo lo bueno y creemos que lo bueno da felicidad y esa
felicidad debería existir todo el tiempo, pero la realidad de la humanidad no es esa, todo es
impermanente, todo está cambiando todo el tiempo.

Por querer negar algunas situaciones me pierdo de algunas experiencias que me podrían traer
bienestar.

Es una realidad que nadie quiere estar mal, hay un impulso adentro de cada uno que quiere estar
bien. Por huir de lo malo terminamos no aceptando las emociones y a desconocer como tomar
decisiones.

Homeostasis: estado de balance de equilibrio, pero es un equilibrio dinámico, se está adaptando,

está cambiando, está respondiendo a las condiciones de cada uno. No es un punto de llegada, es
un balance que siempre está sucediendo. Siempre están pasando cosas afuera, siempre están
pasando cosas adentro, el asunto con el bienestar es aprender a surfear cada situación que me
pasa afuera y cada situación que me pasa adentro.

Bienestar eudaimónico: crear capacidades internamente para poder resolver cada una de las cosas
que nos pasen, virtudes, habilidades con las qu epoda no sucumbir ante esas cosas que me
desbalances, dejar de reaccionar y empezar a actuar desde un lugar coherente. Dejo de ser víctima
de la vida.

Vivir en simbiosis: todo lo que pasa con los otros seres, pasa conmigo también.

Cuando una flor florece nadie le puede negar que comparta su aroma. Uno no puede negar los
procesos que ya están adentro y que nacen para ser compartidos.
Lo que nos hace evidentemente humano es: Formas de relacionarnos que no sea en forma de
reacción, cultivar vínculos de formas diferentes. Si reconocemos las emociones como el
patrimonio de la humanidad, las podemos entrenar, La capacidad de pensar, poner a la mente en
su lugar (cuando usamos las relaciones, emociones y mente para lo que sirven, se vuelven en
herramientas potentes para resolver la vida, para tener bienestar). Esto es matrimonio de la
humanidad, herencia colectica, hay ciertas cosas que no pueden ser vendidas, no deben ser
vendidas, se pagan con el precio de otras cosas como la constancia, la permanencia, el bienestar.

No es el protocolo, es como persona y cómo humanidad me dedico a cultivar esos principios nos
transformamos como sociedad.