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Terapia Sistémica Transformacional Satir

(en breve)
¿Qué sucede cuando un ser humano aparece en el radar profesional y, sin desafiar directamente el
sistema imperante, brinda nuevas posibilidades y oportunidades para el crecimiento y la integridad
humana? Virginia Satir (1916 - 1988) fue una de esas personas cuando se convirtió en una de las
fundadoras del movimiento de terapia familiar. Vio a su primera familia en 1951 que estaba, en ese
momento, en contra de las “reglas” terapéuticas del día. Ella enseñó sus primeros cursos de terapia
familiar en el Instituto de Investigación Mental en California,
EE.UU., en 1959. En 1964, se publicó su innovador libro, Terapia familiar conjunta, que la
estableció como pionera en nuevas formas de ayudar a las personas necesitadas.

Satir era un aprendiz apasionado. A medida que aprendió, añadió continuamente a su enfoque, probando
cosas nuevas, descartando las viejas y desarrollando su sistema para volverse más plenamente humana.
Sin embargo, su filosofía básica subyacente y la esencia de su proceso de cambio permanecieron intactas.
Algunas de sus creencias básicas que son la presuposición de su modelo terapéutico se enumeran aquí en
forma puntual. Estas creencias le proporcionaron una confianza inquebrantable en que el crecimiento
humano es natural y se está moviendo en una dirección positiva. Algo de lo que ella creyó y practicó es:

1. Los seres humanos son todos manifestaciones únicas de la misma Fuerza de Vida Universal. A través de esta
Energía de Vida universal, podemos conectarnos de una manera positiva, de aceptación y amorosa.

2. Los procesos humanos son universales; Todos los seres humanos se experimentan a sí mismos
haciendo, pensando, sintiendo, esperando, anhelando y conectando espiritualmente. Por lo tanto, se
puede acceder a estos procesos humanos y modificarlos independientemente de los diferentes
entornos, culturas y circunstancias.

3. La gente es básicamente buena. En su núcleo, nivel esencial de Energía Vital, las personas son
naturalmente positivas. Necesitan encontrar este tesoro interno para conectarse y validar
su propia autoestima.

4. Todas las personas tienen los recursos internos que necesitan para afrontar con éxito cualquier
situación que les depare la vida y crecer a través de ellas. Todos los recursos internos necesarios residen
en su interior, incluso aquellos que la gente puede haber aprendido a juzgar de manera negativa o
aquellos que aún no se han descubierto.

5. El "problema" no es el problema; cómo las personas afrontan su problema es el problema. La

seriedad con la que la persona experimenta el problema a través de los significados que hacen, sus
preocupaciones y sus enfrentamientos influye en la magnitud del problema para
ellos.

6. El síntoma es la solución subconsciente al problema, incluso si crea patrones

disfuncionales. Es el resultado del intento de la persona de sobrevivir al dolor de su
problema. Aunque el problema percibido por la persona necesita ser escuchado y validado, el cambio
terapéutico necesita trabajar en soluciones saludables a partir de la Energía Vital de la persona.
y anhelos.

7. La terapia debe centrarse en la salud y las posibilidades en lugar de los problemas y la patología. La
energía vital es naturalmente positivamente direccional y la terapia necesita aprovechar el proceso
natural del crecimiento humano en una dirección positiva.

8. El cambio siempre es posible. Incluso si el cambio externo es limitado, el cambio interno sigue siendo
posible. Podemos aprender a ser conscientemente responsables y decidir cómo viviremos en nuestro
interior, incluso cuando el exterior no puede cambiar.

9. No podemos cambiar los eventos pasados; solo podemos cambiar el impacto que los eventos
pasados han tenido en nosotros. Es posible resolver los impactos del pasado para vivir con más
energía positiva y estar libre de viejas heridas, enojos, miedos y mensajes negativos en el
regalo.

10. La gente hace lo mejor que puede en cualquier momento. Incluso cuando han hecho cosas
muy negativas o destructivas, es el mejor afrontamiento de lo que fueron capaces en ese
momento y es un reflejo de su nivel de autoestima. Por lo tanto, no hay razón para culparlos por
sus fracasos pasados. Ayudarlos a experimentar su Energía Vital direccional positiva les ayudará
a tomar nuevas decisiones para el presente y el futuro.

11. Los sentimientos nos pertenecen. Todos los tenemos y podemos aprender a estar a cargo de
ellos. Podemos ser responsables de ellos y tomar decisiones sobre ellos. Podemos escuchar el
mensaje de vida positivo de nuestros sentimientos y darnos la validación que necesitamos. Podemos
optar por dejar ir los sentimientos que crean energías y eventos negativos y reemplazarlos con
aceptación, aprecio, perdón, amor y paz.

12. La integridad, el crecimiento y la evolución son procesos humanos naturales y, por lo tanto,
deben ser el foco de cualquier cambio terapéutico. El cambio transformacional proviene del nivel de
energía vital y es parte del crecimiento y la evolución humana natural. Significa que las personas se
están volviendo más verdaderas y espirituales en lugar de su supervivencia reactiva.
sistemas.

13. El uso del Yo por parte del terapeuta es la mayor herramienta terapéutica que tiene el terapeuta
para crear las condiciones que faciliten un cambio transformacional direccional positivo. Los terapeutas
que experimentan su propia Energía de Vida positivamente direccional pueden proporcionar a los
clientes relaciones terapéuticas basadas en el cuidado, la aceptación y nuevas posibilidades. El
terapeuta a menudo experimenta la naturaleza positiva de la Energía Vital del cliente incluso antes de
que el cliente lo haga y se conecta con el cliente en ese nivel.

14. La esperanza es un componente o ingrediente importante para que se produzca el cambio. Cuando el
terapeuta experimenta la naturaleza positiva del verdadero Yo del cliente, la esperanza se convierte en un
aspecto tangible del proceso terapéutico y guía el camino hacia el cambio.
Estas creencias, y otras, son la base del Modelo de Crecimiento Satir, llamado Terapia
Sistémica Transformacional Satir (STST) en el mundo de la terapia profesional.

El Modelo de Crecimiento Satir tiene como base este núcleo profundamente espiritual,
la creencia de que todas las personas pueden acceder, experimentar y vivir desde esta
Energía de Vida espiritual. El dolor que experimentan las personas a menudo proviene
de cómo experimentan sus comportamientos, sus emociones, su cognición y sus
expectativas. Cuando se les invita a aprender sobre estos aspectos de su experiencia
interna, así como su espiritualidad y los anhelos que produce y que brindan
posibilidades positivas, las personas a menudo pueden cambiar a través de todo su
sistema intrapsíquico para vivir más en el presente a través de su energía vital positiva.
Este sistema intrapsíquico a menudo se discute en términos de la metáfora de un
iceberg. Satir invitó a los terapeutas a aprender a ser "buceadores de aguas profundas"

El modelo de crecimiento de Satir abarca cuatro meta-objetivos universales como el enfoque de

terapia. Estos son:

1. Aumento de la autoestima. La autoestima es cómo la persona experimenta y se juzga a sí

misma en el presente. Va más allá de cómo uno se siente o se percibe a sí mismo; está en el
nivel de la propia esencia y, por tanto, está en el nivel del Ser y la conciencia. Cuando uno tiene
una alta autoestima, se está experimentando a sí mismo a través de su Energía de Vida
espiritual, o Yo.

2. Convertirse en un hacedor de elecciones. Cuando uno vive desde el nivel del Sí mismo, sus elecciones
son hacia la libertad. Las elecciones de uno están en la dirección de la salud, la felicidad, la paz y el amor.
Uno se siente capacitado para elegir sabiamente.

3. Convertirse en responsable. Cuando uno vive desde el nivel del Ser, es consciente de sus experiencias internas
y es responsable de todos los sentimientos, percepciones, expectativas y anhelos, así como de su
comportamiento. Satir nos recordó que todas nuestras experiencias internas nos pertenecen. El Ser es más
grande que todos los sentimientos, más grande que todos los pensamientos, más grande que todas las
expectativas no satisfechas. Cuando nos hacemos responsables de nuestro mundo interno, experimentamos la
inmensidad de nuestro Ser. Entonces nos volvemos responsables de nuestro propio crecimiento para volvernos
también más plenamente humanos.

4. Volverse congruente. La congruencia es un concepto y un objetivo profundamente arraigados en el

modelo de crecimiento Satir. En su modelo de comunicación inicial, Satir animaba a las personas a
ser "heterosexuales", a decir lo que querían decir y a hacer lo que decían. Sin embargo, la
congruencia como meta-meta implica que las personas pueden crecer para estar en armonía con su
propia Energía de Vida y experimentar la paz, la alegría, el amor y la conexión que existe allí. Cuando
uno es más congruente, se libera de las experiencias negativas del pasado, ya que ahora se vive en el
presente en el nivel del Ser. Otras formas de describir la congruencia pueden incluir ser integrado,
real, genuino o auténtico. En el modelo de crecimiento de Satir se espera que los terapeutas hayan
alcanzado un nivel bastante alto de congruencia en sus vidas y puedan ser congruentes al trabajar
con sus clientes.
Además, es parte del proceso terapéutico en STST que el terapeuta ayude al cliente a establecer
metas intrapsíquicas e interactivas para el cambio. El terapeuta está a cargo del proceso, pero el
cliente está a cargo de sus objetivos terapéuticos. El terapeuta trae patrones dolorosos y
posibilidades positivas a la conciencia del cliente de manera experiencial y permite que su Energía
de Vida positiva los guíe hacia lo que quieren tener diferente. Los objetivos del cliente se
convierten en el foco del proceso de cambio.

A partir de la observación del trabajo terapéutico de Satir y el análisis de sus palabras, se han identificado
cinco elementos del proceso terapéutico que son esenciales para que la terapia genere un cambio
transformacional, un cambio energético significativo. Estos elementos terapéuticos están
necesariamente presentes a lo largo de toda la sesión de terapia desde el contacto inicial y la
construcción de la relación, pasando por la evaluación y exploración, el establecimiento de objetivos, el
proceso de cambio transformacional, anclar los cambios, revisar la sesión y asignar tareas terapéuticas
para practicar e integrar los cambios. Los cinco elementos esenciales para el cambio transformacional
son:

1. Experimental. La terapia debe ser experiencial, lo que significa que el cliente está experimentando el
impacto de un evento pasado en el presente. Además, y al mismo tiempo, el cliente está experimentando
su propia Energía de Vida positiva en el presente. A menudo, se accede a la memoria corporal como una de
las formas de ayudar a los clientes a experimentar sus impactos. Es solo cuando los clientes están
experimentando tanto la energía negativa del impacto como la energía positiva de su Fuerza de Vida en el
ahora que puede tener lugar un cambio energético.

2. Sistémico. La terapia debe funcionar dentro de los sistemas intrapsíquicos e interactivos en

los que el cliente experimenta su vida. El sistema intrapsíquico incluye las emociones,
percepciones, expectativas, anhelos y energía espiritual del individuo, todos los cuales
interactúan entre sí de manera sistémica. Los sistemas interactivos incluyen las relaciones,
pasadas y presentes, que la persona ha experimentado en su vida. Los dos sistemas
interactúan entre sí. Un cambio en uno impacta en el otro. Sin embargo, el cambio
transformacional es un cambio energético en el sistema intrapsíquico que luego cambia los
sistemas interactivos.

3. Positivamente direccional. En el Modelo de Crecimiento Satir, el terapeuta se involucra activamente

con el cliente para ayudar a replantear las percepciones, generar posibilidades, escuchar el mensaje
positivo de los anhelos universales y conectar al cliente con su Energía de Vida positiva. La atención se
centra en la salud y las posibilidades, apreciando los recursos y anticipando el crecimiento en lugar de
patologizar o resolver problemas.

4. Cambio centrado. Como el enfoque de la terapia Satir está en el cambio transformacional, las preguntas
del proceso que se hacen a lo largo de toda la sesión de terapia están relacionadas con el cambio.
Preguntas como "¿Qué tendrías que cambiar para que te perdones a ti mismo?" dar al cliente la
oportunidad de explorar aguas desconocidas dentro de su propio sistema intrapsíquico.

5. Yo del terapeuta. Como se mencionó anteriormente, la congruencia del terapeuta es esencial para
que los clientes accedan a su propia Energía de Vida espiritual. Cuando los terapeutas son
congruentes, los clientes los perciben como bondadosos, receptivos, esperanzados, interesados, genuinos,
auténticos y activamente comprometidos. El uso de los terapeutas de su propia Energía Vital creativa en forma
de metáfora, humor, autorrevelación, escultura y muchas otras intervenciones creativas también proviene de la
conexión que los terapeutas tienen con su propio Yo espiritual cuando se encuentran en un estado congruente.

Quienes no entendían su trabajo solían decirle a Virginia Satir que lo que hacía
en la terapia y el éxito con el que ayudaba a las personas a crecer y a cambiar
era en gran medida el resultado de lo que aportaba a la terapia en su propia
personalidad específica que nadie más. alguna vez podría hacer su forma
particular de intervenciones y procesos terapéuticos breves, efectivos y
transformadores. Ella siempre esperaba y creía que otros podrían, y podrían,
usar y enseñar su modelo de manera efectiva. También quería que el mundo
escuchara a los demás sobre cómo estaban usando su modelo en sus vidas
personales y profesionales. Ahora tenemos terapeutas muy competentes y
efectivos en todo el mundo que utilizan y enseñan su modelo, que quizás
nunca hayan conocido a Virginia Satir, pero que utilizan su modelo con gran
éxito.
proceso.

por
Dr. John Banmen, RPsych, RMFT y Kathlyne Maki-Banmen, MA, RCC