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Inteligencia Emocional: Aprende a gestionar tus emociones

¿Para qué sirven las emociones?


Carmen Carrasco Hernández

Las emociones presentan tres (3) funciones importantes;


Las emociones presentan 3 funciones importantes principales:
1. Adaptativa: cada emoción tiene su propia utilidad.
2. Motivacional: energiza la conducta motivada que se realiza de una forma más vigorosa y eficaz.
3. Comunicativa: abarca la comunicación intrapersonal y la interpersonal. De la intrapersonal
obtenemos información propia. En cambio, en la interpersonal se presta atención a la
comunicación verbal y no verbal, que influyen en la conducta de los demás.
Emociones Positivas vs. Emociones Negativas
Generalmente el ser humano genera emociones negativas (ansiedad, tristeza, asco, ira) para afrontar
situaciones críticas (peligros, pérdidas emocionales, etc) y resolverlas cuanto antes. Son emociones que
provocan tendencias muy concretas (ej el miedo nos hace huir, el enfado atacar…) y que han sido
desarrolladas a lo largo de nuestra evolución en pro de la supervivencia. De alguna manera cuando
tenemos emociones negativas, el cerebro se cierra en un efecto barricada que nos protege y nos centra
en resolver esa situación.
Hasta entonces se creía que las emociones positivas eran simplemente lo contrario de las negativas, es
decir, que surgían cuando no hubiese una situación crítica y que conllevaban acciones concretas y
positivas (ej. la risa nos hace sonreír y la tranquilidad respirar más profundamente), pero Bárbara
Fredrickson demostró que las emociones positivas (alegría, amor, serenidad…) generan efectos mucho
más complejos en el ser humano. Las emociones positivas provocan un efecto cascada excepcional:
crean cambios cognitivos muy potentes en el cerebro, amplían nuestras capacidades cerebrales, nos
vuelven más creativos, constructivos, receptivos, resilientes…
La evolución de las emociones positivas y negativas en el ser humano ha sido muy diferente, mientras
que las emociones negativas se desarrollaron para sobrevivir (de manera directa y a corto plazo), las
emociones positivas fueron evolucionando para enriquecernos a largo plazo y que una vez llegado
cualquier momento crítico, fuésemos mucho más capaces y fuertes para enfrentarnos y salir adelante. El
ejemplo más claro para explicar todo este proceso, son los niños y su extraordinaria capacidad para
generar emociones positivas constantemente debido principalmente a que están aprendiendo y
desarrollando su cerebro.
En resumen, Bárbara Fredrickson llega a la conclusión de que las emociones positivas tienen un efecto
dominó en el cerebro de una gran envergadura. Así, cada vez que tenemos emociones positivas se
produce un aumento cognitivo del cerebro lo que a su vez provoca una construcción de recursos a nivel
cerebral (aumenta la creatividad, resiliencia, perspectiva.)

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Inteligencia Emocional: Aprende a gestionar tus emociones

Para que sirven las emociones negativas.


Todas las emociones tienen una utilidad adaptativa, ya que favorecen la autodefensa y la supervivencia.
Sin ellas, aunque supiésemos lo que hay que hacer, no lo haríamos, puesto que nos mueven a la acción.
Funcionan entonces como señal de alarma, nos dicen ante determinadas situaciones, que debemos
movilizarnos, ya sea para mantener ese comportamiento o para cambiarlo. A partir de ahí, introducimos
el pensamiento racional, y elegimos cuál será la acción más adecuada.
La “señal” referida a emociones positivas (Alegría), nos indica la utilidad de mantener o repetir la
situación o comportamiento que la ha provocado. Ej: alegría provocada por una muestra de afecto.
Sin embargo, nos resulta más complejo encontrar una función para las emociones negativas, ya que
generan un malestar, y tratamos de que desaparezcan cuanto antes a través de estrategias de evitación o
negación sin pararnos a reflexionar sobre ellas.
Pero entonces, ¿para qué sirven las emociones negativas? Vamos a hacer un repaso de las emociones
negativas, los elementos o situaciones que las suelen provocar, y las funciones que tienen tanto para
nosotros como para el entorno.
 La ira. Es común sentir ira cuando se frustra algún objetivo que nos hayamos planteado, o cuando
estamos en desacuerdo con algo. Las funciones de la ira se encuentran relacionadas con la
protección y defensa de la integridad propia, de las personas que valoramos, y de los bienes y
posesiones. Además, en el ser humano, también se encuentra relacionada con la defensa de las
creencias, los juicios y los valores. Podríamos decir que nos animan a activarnos para realizar
futuras acciones, así como a defendernos de posibles ataques.
 La tristeza. Esta emoción puede aparecer ante la pérdida de algo o alguien que es valorado por
nosotros. También cuando alguien no se siente eficaz o capaz de solucionar algún problema o
situación. En este caso, la tristeza nos está advirtiendo de que debemos reflexionar. Permite que la
persona haga introspección, realice un análisis personal acerca de su situación, su futuro y su vida
en general. Por otra parte también suscita compasión, empatía y atención en los demás, con lo que
es interpretada como una petición o demanda de ayuda hacia las personas cercanas.
 El miedo. El miedo suele surgir ante la percepción de riesgo o de una amenaza. El miedo es la
emoción más primitiva, encontrándose asociada a la principal finalidad de cualquier ser vivo: la
supervivencia. Tiene como función la adaptación, es decir, una persona que tiene miedo, toma

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conciencia de la dificultad de la situación y de lo que puede perder, y como consecuencia de esta
valoración, la persona decide escapar, o enfrentarse a la situación.
 La culpa. Aparece ante la percepción de haber cometido algún error. Su función es animar a la
persona a poner en marcha acciones que intenten reparar el daño, al mismo tiempo que nos hace
reconsiderar la forma en la que actuaremos en un futuro. Se podría decir que generalmente los
sentimientos de culpa provocan deseos de confesar, pedir perdón, reparar el daño causado, así como
de actuar de un modo diferente en el futuro.
 El asco. Se produce cuando percibimos algo nocivo o que supone un riesgo para nuestra salud, y su
función sería la de alejarnos de esas condiciones ambientales potencialmente dañinas.
En definitiva, podríamos decir que aunque en un principio las emociones negativas generan un malestar
evidente, y son causantes de ciertos problemas psicológicos u otras complicaciones en algunos casos, su
objetivo sería el de movernos a la acción para garantizar la preservación y mejora de nuestra salud y
bienestar.
¿Para qué sirven las emociones positivas?

Cuantas más emociones positivas generemos (desde un punto de vista sano y equilibrado), mejor nos ira
en la vida. Es lo que Bárbara Fredrickson llama la positividad, un término que no tiene nada que
ver con ninguno de esas visiones extremadamente positivas que tanto gusta a algunas personas estilo
“Nunca hay problemas” “Tienes que estar siempre bien”, “No pienses”. El Secreto. Va mucho más allá y
comprende todo el espectro de las emociones positivas del ser humano (así como las perspectivas y
actitudes que generan estas emociones). Para poder plasmar este concepto, Bárbara Fredrickson propone
el Ratio de Positividad: la frecuencia de nuestras emociones positivas dividido entre la frecuencia de
nuestras emociones negativas, algo como esto P=E+/E-

Aquellas personas que tienen un alto ratio de positividad (es decir, que generan muchas más
emociones positivas que negativas al cabo de un día) son personas felices, eficaces, resilientes,
proactivos, creativos, comprometido, son, en términos de Bárbara Fredrickson, personas que florecen a
nivel emocional. Mientras que por otro lado, aquellas personas con un bajo nivel de positividad serán
personas deprimidas, negativas, poco eficientes, rígida, o dicho de otra manera, personas que
languidecen emocionalmente. Nuestra autora propone estos dos términos por que explican muy bien su
teoría de una manera muy visual y simbólica, es como si nuestros cerebros fuesen plantas que florecen o
languidecen dependiendo de cómo las cuidemos emocionalmente.

3 Emociones Positivas por cada negativa


Según Bárbara Fredrickson el objetivo para llegar a florecer emocionalmente es conseguir un Ratio de
Positividad de 3 a 1, es decir, tres veces más emociones positivas que negativas a lo largo del día.
Al ver este ratio es importante explicar varias cuestiones, la primera es que las emociones negativas son
fundamentales en el ser humano e intentar deshacerse de ellas es un error que comete mucha gente
(provocando más emociones negativas y perdiendo eficiencia), debemos aceptarlas y aprovecharlas al
máximo en nuestra vida. Un estrés equilibrado nos ayuda a enfrentarnos a nuestro trabajo, el enfado
constructivo a poner límites en nuestra vida o la tristeza como parte del proceso del duelo. Las
emociones negativas son fundamentales, si, pero con una dosis muy pequeña nos suele llegar
normalmente, todo lo demás es un desgaste emocional importante que provoca que las emociones
negativas nos resten en vez de aportarnos.

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Por otro lado, la manera de aumentar este ratio emocional es enfocarlo como un camino a largo plazo,
como una inversión diaria en nosotros, una inversión sana y sabia (ej. la meditación, el deporte o una
perspectiva sabia de la vida). El problema es que la sociedad actual se equivoca en esta búsqueda de
bienestar y lo plantea constantemente como una meta simplista y distorsionada (conseguir dinero,
trabajo, cosas materiales). Se busca aumentar esta positividad en fines o cosas pero lo que hay que ver es
que en la positividad (y las emociones), el viaje es más importante que el destino.
Finalmente debemos saber que las emociones positivas que generemos deben ser reales, sinceras y
profundas, hay estudios que demuestran que una positividad insincera (risas forzadas, decir que estar
alegre pero no estarlo, etc) puede llegar a hacernos tanto daño como las emociones negativas más
extremas.

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Las emociones

. Definición
Son reacciones a las informaciones que recibimos en
nuestras relaciones con el entorno
Elementos constitutivos de la emoción:
• El estímulo.
• La percepción.
¿Cómo impactan las emociones en las personas? • La reacción corporal o fisiológica.
Las emociones: construyen y potencializan y • El significado.
• La experiencia emocional.
desarrollan o destruyen, reducen y obstaculizan
• La expresión corporal.
la forma como nos sentimos y, por lo tanto, como nos
relacionamos con los demás.

¿Para qué sirven las emociones?


Su labor primordial es darnos información de nosotras o nosotros mismos, lo
que nos permite reaccionar ante situaciones gratas o amenazantes

Para afrontar o actuar conforme a las Para socializar pues comunican nuestros sentimientos a los
situaciones que se nos presentan; es demás, influyen en nuestra interacción con las demás
decir, para equilibrarnos y personas: sirven para la interacción social, a partir de esta se
protegernos. crean, mantienen y disuelven las relaciones.

¿Cómo impactan las emociones en las distintas áreas de trabajo ?

Las y los servidores públicos y los


Las y los servidores públicos y los
trabajadores en general, deben tener
trabajadores en general, están
estrategias para la contención adecuada
constantemente expuestos
de las emociones, para atender a las
a factores que pueden causar mella
personas que se presenten con distintos
en su estado psico-fisiológico.
estados emocionales.
.

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