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Metodologías musicales

Método Willems
Busca despertar el odio musical en base a lo relacionado con lo sensorial (cómo se reacciona
ante el sonido), lo mental (armonía y polifonía) y afectiva (la melodía). Se hace teniendo en
cuenta que sean actividades divertidas y motivadoras, la libertad para desarrollar la
imaginación, el canto como base del aprendizaje y desarrollando el oído y la sensibilidad
auditiva. Cómo principios básicos buscan que todos los niños amen la música, el desarrollo
de la persona en el nivel afectivo, sensorial y mental. Los juegos juegan un papel muy
importante en esta pedagogía. Además, aporta importancia al valor psicológico y afectivo de
la música, yendo con una participación de lo concreto a lo abstracto.
Esta metodología se basa en 4 factores, la audición (actividades para la concentración
respecto a una pregunta), el ritmo (mejoran la precisión al coordinar los movimientos de los
ritmos), las canciones (son el centro de la sesión y se trabaja todo) y el movimiento (se usa
para relajarse, ya que se optan por movimientos naturales).

Método Dalcroze
Esta metodología tiene como similares desarrollar el oído musical, la improvisación y que se
trabaja cantando o haciendo movimientos corporales dependiendo del tema musical
trabajado.
Por otro lado, las diferencias son que este método basa su aprendizaje en los conceptos
musicales a través del movimiento, no en el canto. Además, establece una relación entre
diferentes desplazamientos y notas musicales

Método Kodaly
Esta metodología tiene como similitudes que es una pedagogía adaptada, con solfeo rítmico
y con un sistema pentatónico, ayudando al alumnado.
En cambio, tiene como diferencias que está basado en la música materna del folclore
húngaro. Además, trabaja la fononimia (a cada sonido de la escala, una representación con
las manos), cosa no trabajada en el nuestro, incluyendo la polifonía coral.

Método Orff
Por último esta metodología tiene casi todo similar al método Willems ya que desarrolla a la
persona musicalmente, aumenta el sentido rítmico, el habla, la improvisación, la imaginación
y el trabajo en equipo. También tienen canciones fáciles marcando el pulso con escalas
pentatónicas y con movimientos respecto al texto de la melodía.

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