Carta de Alepo nº 47 (22 de octubre de 2023)

KHALAS !
Queridos amigos,
Recibís esta carta en un momento absolutamente
crítico para la región de Oriente Medio. Durante las
dos últimas semanas, hemos sido testigos de una
increíble avalancha de violencia, una violencia que
amenaza con extenderse.
Muchos amigos del extranjero nos preguntan: "¿Qué
impacto ha tenido esta guerra en su vida cotidiana
en Alepo?
¿Qué podemos decir? Una vez más, al amanecer de hoy, el aeropuerto de Alepo y el de Damasco
han sido bombardeados por enésima vez.
¡Khalas, ya basta! Ya basta de ser constantemente atacado, amenazado y asustado.
¿Hasta cuándo?
Esta semana, por invitación del Patriarca Latino, hemos celebrado una jornada de jóvenes y de
oración por la paz.
Nosotros, los Maristas Azules, participamos en esta jornada animando momentos de reflexión y
oración.
Durante una de estas puestas en común sobre la situación en la que vivimos actualmente y las
repercusiones de los acontecimientos de Gaza en nuestras vidas, una profesora dijo: "Me
pregunto seriamente para qué tener hijos, si es para hacerles pasar por lo que estamos pasando
hoy".
Otros expresaron su cansancio. ¡Khalas!
Khalas es una forma de decir basta, ¡Basta! Ya no queremos escuchar las noticias, no queremos
ver las escenas de violencia, sangre, muerte, explosiones y destrucción. ¡Ya no podemos más!
¡Los medios de comunicación rara vez informan de la verdad y la objetividad de la situación!
Otra profesora dio una respuesta que revelaba su estado de ánimo: "Quiero que haya una guerra
mundial y que se acabe. Y que yo muera si es necesario.
A la pregunta sobre el impacto de lo que estamos viviendo en una posible decisión de emigrar, la
respuesta unánime fue un sí rotundo. "¡Queremos abandonar toda la región!
Esta imagen es una muestra de los sentimientos de toda una población, que ha vivido la guerra, la
Covid 19, las sanciones económicas, el terremoto y, en los últimos días, esta escalada de violencia.
En estos momentos, nos encontramos en una situación de espera y observamos de cerca lo que
ocurre en la región y en el país.
Si nos detenemos en la situación regional, es porque no es sólo regional; afecta a valores
universales y a los derechos humanos más básicos. El mundo sigue teniendo un doble rasero. La
víctima se transforma en verdugo que debe ser aniquilado, borrado de la faz de la tierra, quemado
en el infierno de las bombas, desplazado masivamente...
¿Cómo sembrar la Esperanza en una sociedad debilitada, una sociedad cada vez más pobre, una
sociedad que lucha por sobrevivir, una sociedad que ya no tiene fuerzas para defenderse?

1
El 15 de septiembre escribí en mi diario:
"Son las 6 de la mañana...
No sé por qué no pude dormir bien anoche. Me vienen muchas imágenes a la cabeza. Reflejan la
gente y las situaciones con las que me he encontrado desde que reanudamos las actividades el 4
de septiembre.
Mis pensamientos están con los ancianos que, de nuevo anoche, sufrieron los efectos de la ola de
calor sin medios para refrescarse... No hay electricidad. Apenas 2 horas al día... Las sanciones
están ahí... ESTAMOS CASTIGADOS... Por si el clima no fuera suficiente, las sanciones pesan sobre
nuestra vida cotidiana... Nos vemos obligados a soportar la galopante devaluación de nuestra
moneda local... Todo es cada día más caro....
Pienso en todos los padres cuyos hijos empiezan un nuevo curso escolar. Los suministros y las
tasas escolares son tan caros que, para un solo niño, pueden representar más de la mitad del
salario anual de los padres.
También pienso en los jóvenes. Sí, todos esos jóvenes que sólo tienen una idea en la cabeza: salir
del país e irse a cualquier parte, como sea, pero cuanto antes. Esperanza y ansiedad son los dos
sentimientos dominantes... Por un lado, estudiar para tener éxito y obtener un título, y por otro,
¿qué hacer después? Intentar salir del país o hacer el servicio militar obligatorio. Muchos jóvenes
dicen estar "perdidos". Necesitan apoyo psicológico para tomar una decisión definitiva... ¿Qué
hacer? ¿Qué consejos darles? ¿Dónde pueden encontrar los recursos económicos que necesitan
para emigrar o lanzar su propio proyecto? Jóvenes en crisis, perdidos, buscando un futuro lejos de
la guerra y la miseria... No es nada fácil. Ya es muy difícil conseguir un pasaporte, ¿y un visado?
En los últimos días, los medios de comunicación nos han mostrado imágenes de la avalancha de
migrantes hacia Lampedusa. En una noche, más de 7.000 personas llegaron a las costas de esta
isla? ¿Somos conscientes de esta tragedia humanitaria? Los medios de comunicación utilizan la
imagen de un policía que intenta tranquilizar a una niña como símbolo del rostro humanitario.
¿Cómo podemos decir a los "grandes" de este mundo que vivimos en otro planeta? ¡El planeta de
las sanciones! ¡Es inhumano, imperdonable, repugnante! No aceptamos que el mundo sea
indiferente. Nos negamos a que nos traten como miserables. Queremos recuperar nuestra
dignidad de hombres y mujeres que viven en este siglo XXI. Queremos que se nos reintegre en la
comunidad internacional.
LOS MARISTAS AZULES
Nosotros, los Maristas Azules, no nos rendimos. Hacemos todo lo posible para apoyar a los más
desfavorecidos.
Este año hemos acogido a más de 40 nuevos niños en nuestro proyecto educativo "Quiero
aprender". Los 120 niños del proyecto proceden de entornos desfavorecidos, con una pobreza
que llega al punto de la indigencia.
Las profesoras se beneficiaron de varias sesiones de formación durante el mes de septiembre.
Desde el 2 de octubre, las voces, las sonrisas y la alegría de los niños llenan las aulas y el patio de
recreo.
Semillas, nuestro proyecto de apoyo psicológico, se ha ampliado, acogiendo a más niños pequeños
en el programa "Bambú" y a más mujeres en el programa "Ghosn = Branche", destinado
exclusivamente a prestar apoyo psicológico a las mujeres.
El proyecto "Pan compartido" proporciona cada día una comida caliente a más de 250 ancianos. El
número de beneficiarios mayores de 80 años no deja de crecer.

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Como la electricidad sólo llega dos o tres horas al día, hemos instalado baterías, luces LED y un
inversor para todos estos ancianos, para que no se queden a oscuras tras la puesta de sol y para
que la televisión rompa su soledad.
Para los ancianos encamados o postrados, distribuimos pañales en cantidad suficiente.
Hace poco organizamos una excursión para todos los beneficiarios de Pan compartido que
pudieron viajar. Fue un día inolvidable, lleno de canciones tradicionales, bailes y recuerdos. Los
voluntarios de la cocina habían preparado una comida tradicional (Hrissé). Antes de irse, alguien
dijo: "Hoy he podido comer con gran alegría porque no era el único que comía".
En nuestra última carta escribíamos sobre el "Zelzal", con su estela de destrucción y miedo, pero la
otra cara del terremoto fue la gran generosidad de amigos y organizaciones internacionales. Su
ayuda nos ha permitido seguir distribuyendo una rica cesta de alimentos mensual a 1.100 familias.
Tras el terremoto, lanzamos un nuevo proyecto de ayuda para comprar y distribuir muebles y
electrodomésticos a las familias que los perdieron en el seísmo.
Cuando recibió la cesta, una señora se echó a llorar: explicó que hacía varios días que no tenía ni
una gota de aceite de oliva en casa. Hay que señalar que el precio del aceite de oliva (esencial para
los orientales) ha subido tanto que ya no está al alcance de muchas familias.
A medida que pasan los días, vemos la extrema pobreza en la que se encuentran tantas familias.
¿Durante cuánto tiempo podremos satisfacer las necesidades de una población que en un 82%
vive por debajo del umbral de la pobreza?
Cuando los módulos 1 y 2 del proyecto de Formación Profesional llegan a su fin, nos preparamos
para lanzar 2 nuevos módulos al mismo tiempo. En cada módulo, 20 jóvenes aprendices pasarán 2
años aprendiendo un oficio trabajando para un profesional.
También seguimos ayudando a los jóvenes adultos a lanzar sus propios proyectos a través de
microproyectos. Al igual que con la formación profesional, reciben orientación y apoyo.
Las sesiones de formación del MIT son muy
apreciadas. Para una sesión de 24 participantes,
tenemos una lista de más de 130 candidatos.
El programa "Desarrollo de la mujer" ofrece a 60
mujeres en dos grupos dos sesiones de formación a
la semana. También aquí, como en todos nuestros
proyectos, la lista de espera es muy larga.
"Corte y Confección" celebró una jornada de puertas
abiertas para todas las mujeres que han asistido a sus
sesiones desde que comenzó el proyecto en 2017.
Más de un centenar de señoras aceptaron la
invitación y pasaron media jornada juntas con concursos y momentos de convivencia.
El proyecto Ayuda Médica es muy apreciado y valorado en estos tiempos difíciles. Cada día,
decenas de personas reciben ayuda para tratamientos, intervenciones quirúrgicas o
medicamentos. Esta ayuda es cada vez más necesaria ante el indescriptible aumento del coste de
la atención médica y los medicamentos.
Pudimos distribuir pañales para los niños. ¿Cuántos padres nos piden que les ayudemos con sus
hijos mayores que, tras el terremoto, han reanudado su incontinencia nocturna?
"Gota de Leche" sigue siendo un proyecto muy importante para los niños menores de 8 años. Para
los recién nacidos, su necesidad mensual de 6-8 latas de leche especial para lactantes cuesta más
que el salario mensual de sus padres.

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Hecho a mano prosigue y desarrolla su actividad y aumenta el número de productos que fabrica
para autofinanciarse. Veinte mujeres han encontrado trabajo creando ropa femenina a partir de
retales de tela.
"Esperanza" sigue atrayendo a muchas personas que desean aprender inglés. Todos los
beneficiarios muestran un gran interés por estudiar inglés y seguir los 3 niveles que ofrece el
proyecto para mejorar su CV.
El proyecto "Alquiler" sigue apoyando a las familias que tienen grandes dificultades para pagar el
alquiler ante la escalofriante subida de los precios.
El proyecto "Apoyo escolar" ayuda a los padres de niños y jóvenes a pagar la escolarización o
sesiones en centros especializados. Un niño de doce años, acompañado de su madre, vino a pedir
ayuda para reanudar sus estudios, explicando que un día tuvo que dejar la escuela para ponerse a
trabajar y ayudar a su familia, cuyo padre estaba gravemente enfermo. Creemos que, como él,
tantos otros merecen un futuro mejor.
EL PAPA FRANCISCO
Por último, reflexionemos juntos sobre las palabras del Santo Padre durante su visita a Marsella el
23 de septiembre:
"... De hecho, el verdadero mal social no es tanto el aumento de los problemas como la disminución
de la atención. ¿Quién está hoy cerca de los jóvenes abandonados a su suerte, presa fácil de la
delincuencia y la prostitución? ¿Quién está cerca de las personas esclavizadas por un trabajo que
debería hacerlas más libres? ¿Quién se ocupa de las familias asustadas, temerosas del futuro y de
traer nuevas criaturas al mundo? ¿Quién escucha los gemidos de los ancianos aislados que, en lugar
de ser valorados, son aparcados en la perspectiva falsamente digna de una muerte suave, en
realidad más salada que las aguas del mar? ¿Quién piensa en los no nacidos, rechazados en nombre
de un falso derecho al progreso que es, por el contrario, una regresión del individuo? ¿Quién mira
más allá de nuestras fronteras con compasión para escuchar los gritos de dolor que se elevan desde
el Norte de África y Oriente Medio? ¡Cuántas personas viven en situaciones de violencia, injusticia y
persecución!
Queridos amigos,
Con vosotros, hombres y mujeres de buena voluntad, no queremos rendirnos ni resignarnos.
¡Tú eres nuestra voz!
¡Tú eres nuestro grito!
Tú eres nuestra esperanza.
Contamos contigo para que juntos podamos cambiar el mundo y hacerlo más justo, digno y
humano.
Domingo 22 de octubre de 2023
Hermano Georges Sabe

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Carta de Alepo nº 47 (22 de octubre de 2023)
KHALAS !
Chers amis,
Vous recevrez cette lettre à un moment absolument critique pour la région du Moyen-Orient.
Depuis deux semaines, nous assistons à un déferlement de violence incroyable, une violence qui
risque de s’étendre.
Beaucoup d’amis de l’étranger, nous demandent : « quel est l’impact de cette guerre sur votre
quotidien à Alep ? »
Que répondre ? Encore une fois, aujourd’hui à l’aube, l’aéroport d’Alep et celui de Damas ont été
bombardés pour la nième fois.
Khalas, ça suffit ! ça suffit d’être constamment attaqué, menacé, apeuré.
Jusqu’à quand tout cela va-t-il durer ?
Cette semaine, et à l’invitation du Patriarche latin, nous avons vécu une journée de jeune et de
prière pour la paix.
Nous, les Maristes Bleus, avons participé à cette journée en animant des moments de réflexion et
de prière.
Lors d’une de ces réunions de partage sur la situation dans laquelle nous vivons en ce moment et
les répercussions des évènements de Gaza sur notre vie, une institutrice dit : « Je me demande
sérieusement pourquoi avoir des enfants, si c’est pour leur faire vivre ce que nous vivons
aujourd’hui ? ».
Plusieurs autres ont exprimé leur fatigue. Khalas !
Khalas est une expression pour dire ça suffit, Basta ! on en a marre, nous ne voulons plus écouter
ces nouvelles, nous ne voulons plus regarder les scènes de violence, de sang, de mort,
d’explosions, de destruction ! Nous ne pouvons plus !
Rares sont les médias qui rapportent en toute vérité et objectivité la réalité !
Une autre institutrice donne une réponse révélatrice de l’état d’âme : « Je désire qu’il y ait une
guerre mondiale et qu’on en finisse. Et que je meurs s’il le faut ! »
Sur l’impact de ce que nous vivons sur une possible décision d’émigration, toutes à l’unanimité ont
répondu par un oui massif. « Nous voulons quitter toute la région » !
Ce tableau est un échantillon du sentiment de toute une population, qui a vécu la guerre, le Covid
19, les sanctions économiques, le tremblement de terre et depuis quelques jours, cette escalade
de violence. Actuellement, nous sommes dans une situation d’attente et d’observation minutieuse
de ce qui passe dans la région et dans le pays.
Si on s’attarde à parler de la situation régionale, c’est qu’elle n’est pas uniquement régionale ; elle
touche aux valeurs universelles et aux droits humains les plus élémentaires. Le monde continue à
avoir deux poids, deux mesures. La victime est transformée en bourreau qu’il faut anéantir, faire
disparaitre de la terre, brûler dans l’enfer des bombes, déplacer massivement…
Comment semer l’Espérance dans une société fragilisée, une société qui ne cesse de s’appauvrir,
une société qui lutte pour survivre, une société qui n’a plus la force de se lever ?

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Dans mon carnet de bord, j’écrivais le 15 septembre passé :
« Il est 6h00 du matin...
Je ne sais pas pourquoi, cette nuit, je n’ai pas pu bien dormir. Beaucoup d’images déferlent dans
ma tête. Elles reflètent les personnes et les situations que j’ai pu rencontrer depuis que nous
avons repris les activités le 4 septembre.
Mes pensées vont vers les personnes âgées qui, cette nuit encore, ont subi les effets de la canicule
sans aucun moyen de se rafraîchir... L'électricité manque. A peine 2 heures par jour...Les sanctions
sont là... NOUS SOMMES PUNIS...Comme si le climat ne suffisait pas, les sanctions viennent peser
lourdement sur notre quotidien...Nous sommes obligés de subir la dévaluation galopante de notre
monnaie locale...Tout renchérit d'un jour à l'autre....
Je pense à tous les parents dont les enfants commencent une nouvelle année scolaire. Les
fournitures et les scolarités sont tellement chères qu’elles peuvent représenter, pour un seul
enfant, plus de la moitié du salaire annuel des parents.
Mes pensées vont aussi vers les jeunes. Oui, tous ces jeunes qui n’ont dans la tête qu’une seule
idée : quitter le pays pour aller n’importe où, n’importe comment, mais le plus tôt possible.
L'espoir et l'inquiétude sont deux sentiments dominants...D’une part, étudier pour réussir et
obtenir un diplôme et d'autre part, quoi faire par la suite ? Chercher à quitter le pays ou faire le
service militaire obligatoire. Beaucoup de jeunes se disent "perdus”. Ils ont besoin d'un
accompagnement psychologique en vue d'un discernement définitif...Que faire ? quel conseil
apporter ? Où trouver les ressources économiques nécessaires pour émigrer ou lancer son propre
projet ...Une jeunesse en crise, perdue, à la recherche d'un avenir loin de la guerre et de la
misère…Ce n’est pas du tout facile. Il est déjà très difficile d’obtenir le passeport, alors que dire du
visa ?
Les médias nous ont montré ces jours-ci les images du déferlement de migrants à Lampedusa. En
une nuit, plus de 7000 personnes sont arrivées sur les côtes de cette île ? Sommes-nous conscients
de ce drame humanitaire ? Les médias retiennent, comme symbole du visage humanitaire, l’image
d’un carabinier qui tente de rassurer une petite fille.
Comment dire aux « grands » de ce monde, que nous vivons sur une autre planète ? La planète
des sanctions ! C’est inhumain, impardonnable, révoltant ! Nous n’acceptons pas que le monde
soit indifférent. Nous refusons d’être traités en misérables. Nous voulons récupérer notre dignité
d’hommes et de femmes vivant dans ce vingt et unième siècle. Nous voulons être réintroduits
dans la communauté internationale ».
Les Maristes Bleus
Nous, les Maristes Bleus, ne baissons pas le bras. Nous cherchons par tous les moyens à soutenir
les plus démunis.
Cette année, nous avons accueilli plus de 40 nouveaux enfants dans notre projet éducatif « Je
Veux Apprendre ». Les 120 enfants du projet proviennent de milieux défavorisés et d’une
pauvreté atteignant la misère.
Les institutrices et éducateurs ont bénéficié de plusieurs sessions de formation pédagogique
durant le mois de septembre. Depuis le 2 octobre, les voix des enfants, leurs sourires, leur joie
remplissent les salles de classe et la cour.
Seeds, notre projet de soutien psychologique, s’est développé, accueillant plus d’enfants en bas
âge dans le programme « Bamboo » et plus de femmes dans le programme « Ghosn = Branche »,
programme destiné uniquement au soutien psychologique des femmes.
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Le projet « Pain Partagé » assure à plus de 250 personnes âgées le repas chaud quotidien. Le
nombre de bénéficiaires dépassant les 80 ans ne cesse de croitre.
Comme le courant électrique n’est fourni que deux à trois heures par jour, nous avons installé des
batteries et des lampes LEDs et un inverter à toutes ces personnes âgées pour qu’elles ne restent
dans l’obscurité après le coucher du soleil et pour que la télévision puisse rompre leur solitude.
Pour les personnes âgées alitées et grabataires, nous distribuons des couches en quantité
suffisante.
Récemment, nous avons organisé une sortie pour tous les bénéficiaires de Pain Partagé qui
pouvaient se déplacer. Ce fut une journée inoubliable, remplie de chants traditionnels, de danses
et de souvenirs. Les bénévoles de la cuisine avaient préparé un repas traditionnel (Hrissé). Avant
de partir, quelqu’un a dit : « Aujourd’hui, j’ai pu manger avec beaucoup de joie car je n’étais pas
seul à prendre le repas ».
Dans notre dernière lettre, nous parlions du « Zelzal » avec son lot de destruction et de peur mais
l’autre face du séisme a été la grande générosité des amis et des organisations internationales.
Leur aide nous a permis de continuer à distribuer mensuellement à 1100 familles un Panier
Alimentaire très riche en denrées.
Suite au séisme, nous avons initié un nouveau projet d’aide pour l’achat et la distribution de
meubles et d’appareils électro-ménagers aux familles ayant perdu les leurs, suite au tremblement
de terre.
Au moment de recevoir le panier, une dame était en larmes : elle nous explique que depuis
plusieurs jours, elle n’avait plus une goutte d’huile d’olive à la maison. Il faut noter que le prix de
l’huile d’olives (essentiel pour les orientaux) a tellement augmenté qu’il n’est plus abordable pour
beaucoup de familles.
Nous constatons, au fil des jours, l’extrême pauvreté dans laquelle se trouvent tant et tant de
familles. Jusqu’à quand, pourrions-nous subvenir au besoin d’une population dont 82% vit sous le
seuil de la pauvreté ?
Comme les modules 1 et 2 du projet « Formation Professionnelle » se terminent, nous nous
apprêtons à lancer 2 nouveaux modules à la fois. Dans chaque module, 20 jeunes apprentis vont
apprendre pendant 2 ans un métier en travaillant chez un professionnel.
D’autre part, nous continuons, à travers des Micros- Projets, à aider des jeunes adultes à lancer
leur propre projet. Comme pour la formation professionnelle, Ils sont accompagnés et soutenus.
Les sessions de formation du MIT sont très appréciées. Pour une session de 24 participants, nous
avons une liste de plus de 130 candidats.
Le programme « Développement de la Femme » offre à 60 femmes réparties en deux groupes
deux sessions de formation par semaine. Là aussi, comme dans tous nos projets, la liste d’attente
est très grande.
« Coupe et Couture » a célébré une journée « Open Day » pour toutes les femmes qui ont suivi ses
sessions depuis le début du projet en 2017. Plus d’une centaine de dames ont répondu à
l’invitation et ont passé une demi-journée ensemble avec des concours et des moments de
partage.
Le projet d’Aide Médicale est très estimé et valorisé en ces temps si difficiles. Tous les jours, des
dizaines de personnes sont soutenues pour un traitement, une opération chirurgicale ou des
médicaments. Cette aide devient de plus en plus nécessaire devant la hausse indescriptible des
soins médicaux et des prix des médicaments.
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Nous avons pu distribuer des couches pour des enfants. Combien de parents nous demandent de
les aider pour leurs enfants d’un âge avancé mais qui, suite au tremblement de terre, ont repris
leur incontinence nocturne.
« Goutte de Lait » reste un projet très important pour les enfants de moins de 8 ans. Pour les
nouveau-nés, leur besoin mensuel de 6-8 boîtes de lait spécial pour nourrisson coûte plus que le
salaire mensuel de leurs parents.
Heartmade poursuit et développe son activité et multiplie les produits pour arriver à
l’autofinancement. Vingt femmes y trouvent un emploi en créant, à partir de restes de tissus, des
habits pour dames.
« Hope » continue à attirer beaucoup de personnes en quête d’apprentissage de l’anglais. Tous les
bénéficiaires montrent un intérêt très grand à étudier l’anglais et à suivre les 3 niveaux qu’offre le
projet pour améliorer leur C.V.
Le projet « Loyer » continue à soutenir les familles qui ont beaucoup de difficultés à payer leur
loyer vu la hausse vertigineuse des prix.
Le projet « Soutien Scolaire » aide les parents d’enfants et de jeunes à payer les scolarités ou des
sessions dans des centres spécialisés. Un enfant de douze ans, accompagné de sa maman, est
venu demander une aide pour reprendre ses études en expliquant qu’un jour, il a dû abandonner
l’école pour aller travailler et aider sa famille dont le papa était gravement malade. Nous croyons
que, comme lui, tant d’autres méritent un avenir meilleur.
Pape François
Pour terminer, réfléchissons ensemble aux paroles du Saint Père lors de son déplacement à
Marseille, le 23 septembre passé :
« … En effet, le véritable mal social n’est pas tant l’augmentation des problèmes que le déclin de la
prise en charge. Qui aujourd'hui est proche des jeunes livrés à eux-mêmes, proies faciles de la
délinquance et de la prostitution ? Qui est proche des personnes asservies par un travail qui
devrait les rendre plus libres ? Qui s'occupe des familles effrayées, qui ont peur de l'avenir et de
mettre au monde de nouvelles créatures ? Qui écoute les gémissements des personnes âgées
isolées qui, au lieu d'être valorisées, sont parquées dans la perspective faussement digne d'une
mort douce, en réalité plus salée que les eaux de la mer ? Qui pense aux enfants à naître, rejetés
au nom d'un faux droit au progrès, qui est au contraire une régression de l'individu ? Qui regarde
avec compassion au-delà de ses frontières pour entendre les cris de douleur qui montent d'Afrique
du Nord et du Moyen-Orient ? Combien de personnes vivent plongées dans la violence et
souffrent de situations d'injustice et de persécution ! »
Chers amis,
Avec Vous, hommes et femmes de bonne volonté, nous ne voulons pas baisser les bras et nous
résigner.
Vous êtes notre voix !
Vous êtes notre cri !
Vous êtes notre espoir !
Nous comptons sur vous pour qu’ensemble nous changions le monde afin qu’il soit plus juste, plus
digne, plus humain.
Dimanche 22 octobre 2023
Frère Georges Sabe

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ENOUGH! (KHALAS!) – LETTER FROM ALEPPO N. 47 – 22 OCTOBER 2023
Dear friends,
You are receiving this letter at an absolutely critical time for the Middle East region. For the past
two weeks, we have been witnessing an incredible outbreak of violence, a violence that threatens
to spread.
Many of our friends abroad are asking us: “What is the impact of this war on your daily life in
Aleppo?”
What can we say? Once again, at dawn today, Aleppo airport and Damascus airport were
bombed for the nth time.
Enough is enough ! Haven’t we been attacked, threatened and terrified enough? How long will all
this go on for?
This week, at the invitation of the Latin Patriarch, we held a day of prayer and fasting for peace.
We, the Blue Marists, took part in this day by leading moments of reflection and prayer. During
one of these gatherings to discuss the situation we are living through at the moment and the
repercussions of the events in Gaza on our lives, a primary-school teacher said: “I seriously wonder
why we have children if we are going to put them through what we are going through today”.
Several others expressed their fatigue. Khalas Enough!
Khalas is a way of saying enough is enough, Basta! we’ve had enough, we don’t want to listen to
the news any more, we don’t want to watch any more scenes of violence, blood, death, explosions
and destruction! We can’t take it anymore! The media rarely report situations truthfully and
objectively!
Another teacher gave an answer that revealed her state of mind: “I want there to be a world war
and for it to be over. And for me to die if I have to!”
On the question of how what we’re going through might affect a decision to emigrate, the
unanimous response was a resounding yes. “We want to get out of the whole region!”
This picture gives a sample of the feelings of the entire population, which has lived through the
war, Covid 19, economic sanctions, the earthquake and, in the last few days, this escalation of
violence. At the moment, we are in a state of waiting and watching closely to see what happens in
our region and in the country as a whole.
If we dwell on the regional situation, it is because it is not just regional; it touches on universal
values and the most basic human rights. The world continues to have double standards. The victim
is transformed into an executioner to be annihilated, wiped off the face of the earth, burnt in the
hell of the bombs, displaced on a massive scale…
How can we sow Hope in a shattered society, a society that is becoming even poorer, a society
that is struggling to survive, a society that no longer has the strength to stand up?
On 15 September I wrote in my logbook:
“It’s 6am…
I don’t know why but I couldn’t sleep well that night. A lot of images were running through my
mind: the people and situations I’ve encountered since we resumed operations on 4 September.
My thoughts went out to the elderly who, again that night, were suffering the effects of a
heatwave without any means of cooling down… There is no electricity. Barely 2 hours a day…

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Sanctions are in place… WE ARE BEING PUNISHED… As if the climate wasn’t enough, these
sanctions are weighing heavily on our daily lives… We are being forced to cope with the galloping
devaluation of our local currency… Everything is getting more expensive by the day….
I am thinking of all the parents whose children are starting the new school year. Supplies and
school fees are so expensive that, for a single child, they represent more than half the parents’
annual salary.
My thoughts also go out to the young people. Yes, all those young people who have only one idea
in their heads: to get out of the country and go anywhere, anyhow, the sooner the better. Hope
and anxiety are the two dominant feelings… On the one hand, to study to get ahead in life and
obtain a diploma, and on the other, to do what next? Try to leave the country or do compulsory
military service.
Many young people say they are “lost”. They need psychological support to make a definitive
decision… What to do? What advice should they be given? Where can they find the economic
resources they need to emigrate or launch their own business? Youth in crisis, lost, looking for a
future far away from war and misery… It’s not at all easy. It is hard enough to get a passport, to
say nothing of a visa?
In recent days, the media have shown us images of the flood of migrants arriving in Lampedusa. In
one night, more than 7,000 people arrived on the shores of this island. Are we aware of this
humanitarian emergency? The media held up the image of a policeman trying to reassure a little
girl as a symbol of humanitarian solidarity.
How can we tell the “leaders” of this world that we are living on another planet? The planet of
sanctions! It is inhuman, unforgivable and outrageous! We do not accept for the world to be
indifferent. We refuse to be treated like wretched people. We want our dignity back as men and
women living in this twenty-first century. We want to be reintegrated into the international
community.
The Blue Marists
We Blue Marists are not giving up. We are doing everything we can to support the most
disadvantaged.
This year, we welcomed more than 40 new children to our “I Want to Learn” educational project.
The 120 children in the project come from underprivileged backgrounds and poverty verging on
destitution.
The teachers and aides benefited from several teacher training sessions during September. Since 2
October, the children’s voices, smiles and joy have filled the classrooms and playground.
Seeds, our psychological support project, has expanded, taking in more young children in the
“Bamboo” programme and more women in the “Ghosn = Branch” programme, which is specially
designed to provide psychological support for women.
The “Shared Bread” project provides more than 250 elderly people with a hot meal every day. The
number of beneficiaries over the age of 80 is growing all the time. As electricity is only available
for two or three hours a day, we have installed batteries, LED lights and an inverter for all these
elderly people so that they are not left in the dark after sunset and so that television can break
their solitude. For bedridden and shut-in elderly people, we distribute a good supply of nappies.
Recently, we organised an outing for all Shared Bread beneficiaries who could travel. It was an
unforgettable day, filled with traditional songs, dances and memories. The kitchen volunteers had

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prepared a traditional meal (Hrissé). Before leaving, someone said: “Today, I was able to eat with a
lot of joy because I wasn’t the only one eating”.
In our last letter, we wrote about the “Zelzal”, with its trail of destruction and fear, but the other
side of the earthquake was the great generosity of friends and international organisations. Their
help has enabled us to continue distributing a substantial Food Basket to 1100 families every
month.
Following the earthquake, we launched a new aid project to purchase and distribute furniture and
electrical appliances to families who had lost theirs in the earthquake. When she received her
‘basket’, one lady broke into tears: she explained that she hadn’t had a drop of olive oil in the
house for several days. It should be noted that the price of olive oil (essential for orientals) has
risen so much that it is no longer affordable for many families. As the days go by, we see the
extreme poverty in which so many families find themselves. How long will we be able to meet the
needs of a population 82% of whom live below the poverty line?
As modules 1 and 2 of the Vocational Training project come to an end, we are preparing to launch
2 new modules at the same time. In each module, 20 young apprentices will spend 2 years
learning a trade by working alongside a professional.
We also continue to help young adults launch their own businesses through a Micro-Project
scheme. As with the vocational training, they receive guidance and support.
The MIT training sessions are very popular. For a course with 24 students, we have a list of over
130 candidates.
The “Women’s Development” programme offers 60 women in two groups two training sessions a
week. Here too, as with all our projects, the waiting list is very long.
“Tailoring and Sewing” held an Open Day celebration for all the women who have attended its
sessions since the project began in 2017. More than a hundred ladies accepted the invitation and
spent half a day together with fun competitions and moments of sharing.
The Medical Aid project is highly appreciated and valued in these difficult times. Every day, dozens
of people receive support for dressings, surgery or medication. This help is becoming increasingly
necessary in view of the staggering rise in the cost of medical care and medicines.
We were able to distribute nappies for children. How many parents have asked us to help them
with their older children who have returned to night-time incontinence following the earthquake?
“A Drop of Milk” remains a very important project for children under the age of 8. For newborns,
their monthly need for 6-8 cans of special infant milk costs more than their parents’ monthly
salary.
Heartmade is continuing and developing its business activities, increasing the number of its
products in order to become self-financing. Twenty women have found work there, making
women’s clothes from leftover fabrics.
“Hope” continues to attract many people looking to learn English. All the beneficiaries show a
great interest in studying English and in mastering the 3 levels offered by the project to improve
their CVs.
The “Rent” project continues to support families who are finding it very difficult to pay their rent
in view of the skyrocketing rates.
The “School Support” project helps the parents of children and young people to pay for schooling
or sessions in specialised centres. A twelve-year-old boy, accompanied by his mother, came to ask

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for help to resume his studies, explaining that one day he had had to drop out of school to go to
work and help his family, when his father became seriously ill. We believe that so many others like
him deserve a better future.
Pope Francis
To conclude, let’s reflect together on the words of the Holy Father during his visit to Marseilles on
23 September:
“ Indeed, the real social evil is not so much the increase of problems, but the decrease of care.
Who nowadays becomes a neighbour to the young people left to themselves, who are easy prey
for crime and prostitution? Who is taking care of them? Who is close to people enslaved by work
that should make them freer? Who cares for the frightened families, afraid of the future and of
bringing children into the world? Who listens to the groaning of our isolated elderly brothers and
sisters, who, instead of being appreciated, are pushed aside, under the false pretences of a
supposedly dignified and “sweet” death that is more “salty” than the waters of the sea? Who
thinks of the unborn children, rejected in the name of a false right to progress, which is instead a
retreat into the selfish needs of the individual? Today we see the tragedy of confusing children for
animals. My secretary told me that as he passed through Saint Peter’s Square he saw some
women carrying children in prams… but they were not children, they were dogs! This confusion
tells us something ominous. Who looks with compassion beyond their own shores to hear the cry
of pain rising from North Africa and the Middle East? How many people live immersed in violence
and endure situations of injustice and persecution!”
Dear friends,
With you, women and men of goodwill, we do not want to just throw up our hands and give up.
You are our voice!
You speak out for us!
You are our hope!
We are counting on you so that together we can change the world to make it more just, more
dignified and more humane.
________________________
Sunday 22 October 2023
Brother Georges Sabé

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KHALAS! CARTA DE ALEPPO N. 47 – 22 DE OUTUBRO DE 2023
Caros amigos,
Vocês receberão esta carta num momento absolutamente crítico para a região do Oriente Médio.
Durante duas semanas, assistimos a uma incrível onda de violência, uma violência que corre o
risco de se espalhar.
Muitos amigos do exterior nos perguntam: “qual o impacto desta guerra na vida cotidiana de
vocês em Aleppo?”
O que responder? Mais uma vez, hoje de madrugada, os aeroportos de Aleppo e Damasco foram
bombardeados pela enésima vez.
Khalas, basta! Basta de ser constantemente atacado, ameaçado, com medo.
Até quando tudo isso vai durar?
Nesta semana, e a convite do Patriarca Latino, vivemos um dia de jejum e oração pela paz.
Nós, Maristas Azuis, participamos deste dia animando momentos de reflexão e oração.
Durante um desses encontros de partilha sobre a situação em que vivemos neste momento e as
repercussões dos acontecimentos de Gaza nas nossas vidas, uma professora disse: “Eu me
pergunto seriamente por que ter filhos, se é para fazê-los vivenciar o que vivemos hoje?”
Vários outros expressaram seu cansaço. Khalas!
Khalas é uma expressão para dizer chega, Basta! estamos fartos, não queremos mais ouvir essas
notícias, não queremos mais assistir às cenas de violência, de sangue, de morte, de explosões, de
destruição! Não podemos mais!
Poucos meios de comunicação relatam a realidade de forma verdadeira e objetiva!
Outra professora dá uma resposta que revela o estado de espírito: “Quero que haja uma guerra
mundial e que se acabe com isso. E que eu morra se for preciso!”
Sobre o impacto do que vivemos, sobre uma possível decisão de emigrar, todos responderam
unanimemente com um massivo sim. “Queremos sair de toda a região!”
Este quadro é uma amostra do sentimento de toda uma população que viveu a guerra, a Covid 19,
as sanções econômicas, o terremoto e, nos últimos dias, esta escalada de violência. Atualmente,
estamos numa situação de espera e de observação atenta do que se passa na região e no país.
Se nos concentramos em falar da situação regional, é porque não é apenas regional; ela aborda
valores universais e os direitos humanos mais básicos. O mundo continua a ter dois pesos e duas
medidas. A vítima é transformada num carrasco que deve ser destruído, feito desaparecer da
terra, queimado no inferno das bombas, deslocado massivamente…
Como semear a Esperança numa sociedade fragilizada, numa sociedade que continua a se
empobrecer, numa sociedade que luta para sobreviver, numa sociedade que já não tem forças
para se levantar?
Em meu diário de bordo, escrevi em 15 de setembro passado:

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“São 6h da manhã…
Não sei por que ontem à noite não consegui dormir bem. Muitas imagens passam pela minha
cabeça. Elas refletem as pessoas e situações que encontrei desde que retomamos as atividades no
dia 4 de setembro.
O meu pensamento vai para os idosos que, ainda ontem à noite, sofreram os efeitos da onda de
calor sem qualquer meio de refrescar… Não há eletricidade. Apenas 2 horas por dia… As sanções
existem… SOMOS PUNIDOS… Como se não bastasse o clima, as sanções pesam no nosso
quotidiano… Somos obrigados a suportar a desvalorização galopante dos nossos moeda local…
Tudo está ficando mais caro de um dia para o outro….
Penso em todos os pais cujos filhos estão iniciando um novo ano letivo. Os materiais e a
escolaridade são tão caros que podem representar, para um único filho, mais da metade do salário
anual dos pais.
O meu pensamento se dirige também aos jovens. Sim, todos esses jovens que só têm uma ideia na
cabeça: sair do país para ir para qualquer lugar, de qualquer jeito, mas o mais rápido possível.
Esperança e preocupação são dois sentimentos dominantes… Por um lado, estudar para ter
sucesso e obter um diploma e, por outro, o que fazer a seguir? Procurar sair do país ou cumprir o
serviço militar obrigatório. Muitos jovens se dizem “perdidos”. Eles necessitam de apoio
psicológico com vista a um discernimento definitivo… O que fazer? Que conselhos dar? Onde
encontrar os recursos econômicos necessários para emigrar ou lançar o seu próprio projeto…
Juventude em crise, perdido, em busca de um futuro longe da guerra e da pobreza… Não é nada
fácil, já é muito difícil conseguir o passaporte, o que dizer então do visto?
Nos últimos dias, os meios de comunicação social nos mostraram imagens do aumento migratório
em Lampedusa. Numa noite, mais de 7.000 pessoas chegaram às costas desta ilha! Estamos
conscientes desta tragédia humanitária? A mídia apresenta, como símbolo do rosto humanitário, a
imagem de um fuzileiro tentando tranquilizar uma menina.
Como podemos dizer aos “ grandes” deste mundo que vivemos em outro planeta? O planeta das
sanções! É desumano, imperdoável, revoltante! Não aceitamos que o mundo seja indiferente.
Recusamo-nos a ser tratados como pessoas miseráveis. Queremos recuperar a nossa dignidade
como homens e mulheres que vivem neste século XXI. Queremos ser reintroduzidos na
comunidade internacional”.
Os Maristes Azuis
Nós, os Maristas Azuis, não desistimos. Procuramos por todos os meios apoiar os mais
necessitados.
Neste ano, acolhemos mais de 40 novas crianças no nosso projeto educativo “Quero Aprender”.
As 120 crianças do projeco provêm de ambientes desfavorecidos e da pobreza que chega à
miséria.
Professores e educadores foram beneficiados por diversas ações de formação pedagógica durante
o mês de setembro. Desde 2 de outubro, as vozes das crianças, os seus sorrisos, a sua alegria
enchem as salas de aula e o pátio.
O Seeds, nosso projeto de apoio psicológico, cresceu, acolhendo mais crianças no programa
“Bamboo” e mais mulheres no programa “Ghosn = Branche”, um programa destinado
exclusivamente ao apoio psicológico às mulheres.
O projeto “Pão Partilhado” proporciona a mais de 250 idosos uma refeição quente diária. O
número de beneficiários com mais de 80 anos continua a crescer.

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Como a eletricidade só é fornecida duas a três horas por dia, instalamos baterias e lâmpadas LEDs
e um conversor para todos estes idosos para que não fiquem no escuro após o pôr do sol e para
que a televisão possa quebrar a sua solidão.
Para idosos acamados e com muita fraqueza, distribuímos fraldas em quantidade suficiente.
Recentemente, organizamos um passeio para todos os beneficiários do “Pão Partilhado” que
puderam sair do seu lugar. Foi um dia inesquecível, repleto de canções tradicionais, de danças e
de lembranças. Os voluntários da cozinha prepararam uma refeição tradicional (Hrissé). Antes de
retornar, alguém disse: “Hoje pude comer com muita alegria porque não estava sozinho na
refeição”.
Na nossa última carta falámos do “Zelzal” com a sua quota de destruição e de medo, mas o outro
lado do terramoto foi a grande generosidade de amigos e de organizações internacionais. A sua
ajuda nos permitiu continuar a distribuir mensalmente a 1.100 famílias uma Cesta Alimentar muito
rica em gêneros alimentícios.
Após o terremoto, iniciamos um novo projeto de ajuda para a compra e distribuição de móveis e
eletrodomésticos às famílias que perderam os seus no terremoto.
Ao receber a Cesta, uma senhora chorou: explicou-nos que há vários dias não tinha uma gota de
azeite em casa. É bom notar que o preço do azeite (essencial para os orientais) aumentou tanto
que já não é acessível para muitas famílias.
Com o passar dos dias, constatamos a extrema pobreza em que se encontram tantas e tantas
famílias. Até quando poderemos satisfazer as necessidades de uma população da qual 82% vive
abaixo do limiar da pobreza?
Com o final dos módulos 1 e 2 do projeto “Formação Profissional”, preparamo-nos para lançar 2
novos módulos de uma só vez. Em cada módulo, 20 jovens aprendizes aprenderão um ofício
durante 2 anos trabalhando para um profissional.
Por outro lado, continuamos, por meio do Micro-Projetos, a ajudar os jovens a lançar o seu
próprio projeto. Tal como acontece com a formação profissional, eles são acompanhados e
apoiados.
As sessões de formação do MIT são muito apreciadas. Para uma sessão de 24 participantes, temos
uma lista de mais de 130 candidatos.
O programa “Desenvolvimento da Mulher” oferece a 60 mulheres, organizadas em dois grupos,
duas sessões de formação por semana. Também aqui, como em todos os nossos projetos, a lista
de espera é muito grande.
“Corte e Costura” celebrou um “Open Day” para todas as mulheres que participaram de suas
sessões desde o início do projeto em 2017. Mais de uma centena de senhoras responderam ao
convite e passaram meio dia juntas com concursos e momentos de partilha.
O projeto de Assistência Médica é muito estimado e valorizado nestes tempos difíceis. Todos os
dias, dezenas de pessoas recebem apoio para tratamento, cirurgia ou medicação. Esta assistência
torna-se cada vez mais necessária face ao aumento indescritível dos cuidados médicos e dos
preços dos medicamentos.
Conseguimos distribuir fraldas para crianças. Muitos pais nos pedem para ajudá-los com os seus
filhos mais velhos que, depois do terramoto, retomaram a incontinência noturna.

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“Gota de Leite” continua a ser um projeto muito importante para crianças menores de 8 anos.
Para os recém-nascidos, a necessidade mensal de 6 a 8 latas de leite infantil especial custa mais do
que o salário mensal dos pais.
A Heartmade continua e desenvolve a sua atividade e multiplica os produtos para alcançar o
autofinanciamento. Vinte mulheres encontram trabalho lá, criando roupas femininas com sobras
de tecido.
“Hope” segue atraindo muitas pessoas que procuram aprender inglês. Todos os beneficiários
demonstram grande interesse em estudar inglês e seguir os 3 níveis oferecidos pelo projeto para
aprimorar seu currículo.
O projeto “Alugar” continua a apoiar famílias que têm grandes dificuldades em pagar o aluguel,
dada a subida vertiginosa dos preços.
O projeto “Apoio Escolar” ajuda os pais de crianças e jovens a pagar a escolaridade ou sessões em
centros especializados. Uma criança de doze anos, acompanhada pela mãe, veio pedir ajuda para
retomar os estudos, explicando que um dia teve que abandonar a escola para ir trabalhar e ajudar
a família, cujo pai estava gravemente doente. Acreditamos que, como ele, tantos outros merecem
um futuro melhor.
Papa Francisco
Para concluir, reflitamos juntos sobre as palavras do Santo Padre durante a sua viagem a
Marselha, no dia 23 de setembro deste ano:
“… Com efeito, o verdadeiro mal social não é tanto o aumento dos problemas, mas a diminuição
dos cuidados. Quem hoje está próximo dos jovens abandonados à própria sorte, vítimas fáceis da
delinquência e da prostituição? Quem está próximo das pessoas escravizadas pelo trabalho que
deveria torná-las mais livres? Quem cuida das famílias assustadas, que têm medo do futuro e de
trazer novas criaturas ao mundo? Quem escuta os gemidos dos idosos isolados que, em vez de
serem valorizados, são conduzidos à perspectiva falsamente digna de uma morte doce, na
realidade mais salgada que as águas do mar? Quem pensa nos nascituros, rejeitados em nome de
um falso direito ao progresso, que é, pelo contrário, um retrocesso do indivíduo? Quem olha com
compaixão para além das suas fronteiras para ouvir os gritos de dor que se levantam do Norte de
África e do Médio Oriente? Quantas pessoas vivem imersas na violência e sofrem situações de
injustiça e perseguição! ”
Caros amigos,
Com vocês, homens e mulheres de boa vontade, nós não queremos nos render e desistir.
Vocês são nossa voz!
Vocês são nosso grito!
Vocês são nossa esperança!
Nós contamos com vocês para que juntos mudemos o mundo a fim de que ele seja mais justo,
mais digno, mais humano.
______________________
Domingo, 22 de outubro de 2023.
Irmão Georges Sabe

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