Está en la página 1de 5

DESIGUALDAD ECONÓMICA EN MÉXICO

Se entiende como prosperidad en economía a una situación de riqueza y bienestar. Al referirse al


concepto más material y medible, en el contexto económico se considera a la prosperidad como la
destacable acumulación de riquezas y bienes.

El término de prosperidad está estrechamente relacionado también con el de economía de bienestar o al


de crecimiento económico. No obstante, las definiciones de estos son más exactas y permiten una mayor
medición.

Entendiendo la prosperidad económica como la acumulación o consecución de un cierto nivel de


riqueza, beneficio o activos, desde el punto de vista de la teoría económica y la influencia de las distintas
economías pueden afectar a su entendimiento en dicho ámbito.

Desde un punto de vista capitalista, la prosperidad se consigue mediante la creación de riqueza y por
tanto, ese debe ser el principal objetivo de la economía. Sin embargo, desde el punto de vista
del socialismo y posturas cercanas como el comunismo o el marxismo, consideran que para conseguir
prosperidad el Estado debe intervenir para repartir los recursos y garantizar otros factores como los
derechos sociales.

Introducción a la desigualdad económica en México


La desigualdad económica en México es un fenómeno profundamente arraigado que ha
persistido durante décadas y se refleja en importantes brechas de ingresos, riqueza y oportunidades. Este
ensayo examina varios aspectos de este problema, incluidas las causas, las consecuencias
y las posibles soluciones.

Evidencias de desigualdad económica en México


Para comprender el alcance de la desigualdad económica en México,
es esencial examinar los datos reales. Según el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), el
coeficiente de Gini de México en 2020 fue de 0,48, lo que indica un grave nivel de desigualdad. Al mismo
tiempo, el 10% más rico de la población de México concentra alrededor del 35% de la riqueza total del
país, mientras que el 10% más pobre puede alcanzar sólo el 1,4%.

Las diferencias en el nivel de ingresos son igualmente sorprendentes.


El ingreso per cápita proveniente del trabajo de los hogares más ricos fue casi 23 veces mayor que el de
los hogares más pobres en 2020, según el Consejo Nacional de Evaluación de Políticas de Desarrollo
Social (CONEVAL).
Brecha entre ricos y pobres:

La brecha entre ricos y pobres es un indicador clave de la desigualdad social por ingresos en México en el
siglo XXI. Esta brecha se refiere a la diferencia en los ingresos, la riqueza y las oportunidades entre los
estratos más altos y más bajos de la sociedad. A continuación, se proporciona información detallada
sobre la brecha entre ricos y pobres en México:

Distribución del ingreso: En México, la distribución del ingreso ha sido históricamente desigual, con una
gran brecha entre los ingresos de los hogares más ricos y los más pobres. Los datos del Instituto Nacional
de Estadística y Geografía (INEGI) y del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social
(CONEVAL) suelen mostrar que una pequeña proporción de la población concentra la mayoría de la
riqueza y los ingresos, mientras que una gran parte de la población vive en condiciones de pobreza o
vulnerabilidad económica.

Brecha salarial: Además de la brecha en los ingresos familiares, también existe una brecha salarial
significativa entre los trabajadores de diferentes niveles educativos y ocupacionales. Los trabajadores
con educación y habilidades especializadas tienden a ganar salarios mucho más altos que aquellos con
educación básica o sin ella. Esta disparidad salarial contribuye a la ampliación de la brecha entre ricos y
pobres en el país.

Acceso a la educación y servicios básicos: La brecha entre ricos y pobres también se refleja en el acceso
desigual a la educación y otros servicios básicos. Las familias de ingresos más altos tienen más recursos
para acceder a educación de calidad, atención médica, vivienda adecuada y otros servicios esenciales,
mientras que las familias de bajos ingresos enfrentan barreras para acceder a estos servicios, lo que
perpetúa el ciclo de la pobreza.

Brecha de riqueza: Además de la brecha de ingresos, también existe una brecha de riqueza significativa
en México. Los datos del Banco Mundial y otras instituciones financieras muestran que una pequeña élite
posee la mayoría de los activos financieros y patrimoniales del país, incluyendo propiedades, inversiones
y empresas, mientras que una gran parte de la población carece de acceso a activos financieros y vive en
condiciones de pobreza o inseguridad económica.

Impacto en la cohesión social: La brecha entre ricos y pobres tiene importantes implicaciones para la
cohesión social y la estabilidad política en México. La percepción de injusticia económica y desigualdad
puede alimentar el descontento social y la alienación, lo que a su vez puede dar lugar a tensiones
sociales, protestas y disturbios civiles. Además, la desigualdad extrema puede socavar la confianza en
las instituciones gubernamentales y debilitar el tejido social de la sociedad.
Las consecuencias de la desigualdad económica
La desigualdad económica tiene graves consecuencias para la sociedad mexicana.

En primer lugar, contribuye a un ciclo persistente de pobreza en el que las familias de bajos
ingresos luchan por acceder a una educación de calidad, una atención sanitaria adecuada y empleos
decentes. Esto crea una brecha de habilidades y oportunidades que se transmite de generación
en generación. Además, la desigualdad económica puede socavar la unidad social y política. La falta de
movilidad social puede generar resentimiento y desconfianza en las instituciones, lo que a su vez
puede crear tensiones sociales y políticas.

Las causas de la desigualdad económica en México


Hay varias causas interrelacionadas de desigualdad económica en México.

Los más importantes son:


Baja movilidad social: La movilidad intergeneracional es limitada en México.

Esto significa que las oportunidades económicas están estrechamente relacionadas con el estatus
socioeconómico de los padres.

Corrupción y falta de transparencia: La corrupción en las instituciones públicas puede exacerbar la


desigualdad económica al desviar recursos que podrían asignarse a programas de desarrollo social.

Debilidades del sistema educativo: A pesar de los esfuerzos de las últimas décadas, el sistema
educativo de México continúa enfrentando desafíos en términos de calidad y equidad, que limitan las
oportunidades para los grupos socioeconómicamente desfavorecidos.

La estructura del trabajo informal: La mayoría de la fuerza laboral de México está empleada en el sector
informal, donde los trabajadores enfrentan salarios bajos, seguridad social insuficiente y condiciones
laborales peligrosas.

Respuestas políticas y sociales:


Las respuestas políticas y sociales a la desigualdad social por ingresos en México en el siglo XXI han sido
variadas y han abarcado una amplia gama de medidas y enfoques. A continuación, se destacan algunas
de las respuestas más importantes:

Políticas fiscales progresivas: Se han implementado políticas fiscales progresivas para abordar la
desigualdad de ingresos, incluyendo impuestos sobre la renta progresivos y programas de transferencia
de ingresos dirigidos a los sectores más vulnerables de la población. Estos programas incluyen el
Programa de Pensión para Adultos Mayores, Prospera (Programa de Inclusión Social) y otros programas
de asistencia social.

Inversión en educación y capacitación: Se han realizado esfuerzos significativos para mejorar el acceso a
la educación de calidad y la capacitación laboral, con el objetivo de reducir las disparidades educativas y
promover la movilidad social. Esto incluye la expansión de la educación preescolar, la mejora de la
infraestructura escolar y la implementación de programas de becas y apoyo financiero para estudiantes
de bajos ingresos.

Fortalecimiento del mercado laboral y protección social: Se han implementado políticas para fortalecer
el mercado laboral y proteger los derechos de los trabajadores, incluyendo el aumento del salario
mínimo, la promoción de la formalización del empleo y la ampliación de la cobertura de seguridad social.
Esto incluye medidas para mejorar las condiciones laborales, combatir la informalidad y garantizar el
acceso a la seguridad social y la protección laboral.

Programas de desarrollo regional y combate a la pobreza: Se han implementado programas de desarrollo


regional para reducir las disparidades económicas entre diferentes regiones del país y promover un
crecimiento más equitativo y sostenible. Además, se han diseñado estrategias específicas para combatir
la pobreza extrema y mejorar las condiciones de vida en las áreas más marginadas.

Fortalecimiento de la transparencia y la rendición de cuentas: Se han implementado medidas para


fortalecer la transparencia y la rendición de cuentas en la gestión de recursos públicos y la
implementación de políticas sociales. Esto incluye la creación de instituciones de supervisión y control,
así como la implementación de mecanismos de participación ciudadana y rendición de cuentas.

Posibles soluciones

• Abordar la desigualdad económica en México requiere un enfoque integral que aborde


sus diversas causas y consecuencias. Algunas medidas que puedes considerar incluyen:
• Reforma tributaria progresiva: implementar políticas tributarias que graven de manera más justa a
los sectores de altos ingresos y redistribuyan recursos a programas sociales y educativos.
• Fortalecer los sistemas educativos: invertir en mejorar la calidad y la accesibilidad de la
educación, centrándose en reducir las disparidades regionales y socioeconómicas.
• Promoción del empleo formal: implementar políticas que promuevan la creación de empleos
formales y la mejora de las condiciones laborales en el sector informal, incluido el acceso
a la seguridad social y la protección laboral.
• Luchar contra la corrupción: Fortalecer las instituciones encargadas de combatir la corrupción
y garantizar la transparencia en la administración pública para asegurar el uso eficiente
y correcto de los recursos.

En conclusión, la desigualdad económica en México es un problema grave con graves


consecuencias sociales y económicas. Sin embargo, con la implementación de políticas integrales y la
voluntad de todos los actores, podemos avanzar hacia una sociedad más justa y equitativa.

También podría gustarte