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Los enlaces moleculares son las fuerzas que mantienen unidos a los átomos
en una molécula. Estos enlaces se forman debido a la interacción de los electrones
de valencia de los átomos. Los principales tipos de enlaces moleculares y su
clasificación son los siguientes:
Enlace iónico:
Características: Se forma entre átomos con diferencias significativas en la
electronegatividad, lo que resulta en la transferencia de electrones de un átomo a
otro. Uno de los átomos se carga positivamente (catión) y el otro negativamente
(anión).
Ejemplo: Cloruro de sodio (NaCl), donde el sodio (Na) dona un electrón al cloro (Cl).
Enlace covalente:
Características: Se forma cuando dos átomos comparten electrones de valencia
para alcanzar una configuración electrónica estable.
Puede ser subdividido en:
• Enlace Covalente Simple: Dos átomos comparten un par de electrones.
• Enlace Covalente Doble: Dos átomos comparten dos pares de electrones.
• Enlace Covalente Triple: Dos átomos comparten tres pares de electrones.
Ejemplo: Molécula de agua (H2O), donde dos átomos de hidrógeno comparten
electrones con un átomo de oxígeno.
Enlace metálico:
Características: Se encuentra en metales y se caracteriza por la formación de una
"nube" de electrones libres que se mueven libremente entre los átomos de metal.
Esto confiere a los metales sus propiedades conductoras de electricidad y calor.
Ejemplo: Cualquier metal, como el hierro (Fe) en el acero.
Enlace de hidrógeno:
Características: Se forma entre un átomo de hidrógeno unido covalentemente a un
átomo muy electronegativo (como oxígeno, nitrógeno o flúor) y otro átomo
electronegativo cercano. Es una fuerza atractiva entre el hidrógeno parcialmente
positivo y el átomo parcialmente negativo.
Ejemplo: En el agua (H2O), los enlaces de hidrógeno son responsables de las
propiedades únicas del agua, como su alta tensión superficial y su capacidad de
formar puentes de hidrógeno.
Las fuerzas intermoleculares, también conocidas como fuerzas entre moléculas, son las
interacciones débiles que existen entre las moléculas y que mantienen unidas a las sustancias en
estado líquido o sólido. Estas fuerzas son esenciales para entender cómo se comportan y se
organizan las moléculas en diferentes fases de la materia. Las fuerzas intermoleculares incluyen
varios tipos:
1. Fuerzas de Van der Waals: Estas son las fuerzas intermoleculares más débiles y se dividen
en tres tipos:
• Fuerzas de dispersión de London: Son fuerzas temporales que se producen debido a
fluctuaciones momentáneas en la distribución electrónica de una molécula. Cuanto mayor
sea la cantidad de electrones en una molécula, más fuertes serán estas fuerzas.
• Fuerzas dipolo-dipolo: Ocurren entre moléculas que tienen un momento dipolar, lo que
significa que tienen una distribución desigual de electrones que crea un polo positivo y uno
negativo. Estas fuerzas son más fuertes que las de dispersión de London.
• Enlaces de hidrógeno: Son un tipo especial de fuerza dipolo-dipolo que se produce cuando
un átomo de hidrógeno está unido covalentemente a un átomo muy electronegativo (como
oxígeno, nitrógeno o flúor) y está atraído por otro átomo electronegativo cercano. Los
enlaces de hidrógeno son más fuertes que las fuerzas dipolo-dipolo normales.
2. Fuerzas ión-dipolo: Estas fuerzas se producen entre un ion y una molécula que tiene un
momento dipolar. Son más fuertes que las fuerzas dipolo-dipolo normales y se observan en
soluciones donde hay iones disueltos en un solvente polar.
3. Fuerzas ion-ion: Estas son las fuerzas electrostáticas que mantienen unidos a los iones en
un compuesto iónico. Son extremadamente fuertes y son responsables de las propiedades
de los cristales iónicos.
4. Puentes de hidrógeno: Aunque se mencionaron anteriormente como una forma de fuerzas
de Van der Waals, los puentes de hidrógeno merecen su propia mención debido a su
importancia. Son enlaces específicos de hidrógeno que se forman entre un átomo de
hidrógeno unido a un átomo muy electronegativo y un átomo electronegativo cercano. Son
responsables de muchas propiedades únicas del agua y son cruciales en biología y química
orgánica.
Orbitales Moleculares:
Los orbitales moleculares (OM) son regiones del espacio tridimensional donde
existe una alta probabilidad de encontrar electrones en una molécula. Estos
orbitales se forman a través de la combinación (superposición) de los orbitales
atómicos de los átomos que componen la molécula. La teoría de orbitales
moleculares es fundamental para comprender la estructura, la reactividad y las
propiedades de las moléculas
La formación de orbitales moleculares implica la combinación de los orbitales
atómicos de los átomos que forman una molécula.
Hay dos tipos principales de orbitales moleculares: los orbitales sigma (σ) y los
orbitales pi (π).