12.

Anuncio del nacimiento de Juan

Lucas 1:5-25
Introducción: El tiempo se acercó, muy pronto el nacimiento del Mesías sería
anunciado a María, pero como lo decía la profecía, antes debía venir Juan con el
espíritu del profeta Elías.
Lucas se toma su tiempo para describir la época y a las personas involucradas (5 al 7)
y posteriormente relata como el Señor se manifestó a Zacarias en medio del servicio
que ejercía en el templo; en medio de su trabajo rutinario; aquel día, le tocó la
suerte ofrecer el incienso (9); en el ejercicio de su oficio, se le manifestó el ángel
Gabriel, con un mensaje claro, sin lugar a doble interpretación (13 al 17), pero
Zacarias respondió con incredulidad ante este mensaje, más bien se enfocó en las
circunstancias externas de su condición física (18), esto le costó la voz; aquella buena
noticia no podría ser anunciada por Zacarias hasta que se cumpla (19 al 20), la
multitud fuera del santuario entendió que Zacarias tuvo una visión (22).
Elisabet reconoció que el Señor se dignó en mostrarle su misericordia quitándole la
vergüenza de no tener hijos (24 al 25).
Preguntas para reflexionar
1. ¿Puedo confiar que el Señor utilizará el dolor, la frustración y la vergüenza en mi
vida para su gloria? Romanos 8:28
2. Examinando mi corazón, delante del Señor ¿Hay algún rastro de incredulidad?
3. Juan preparó los corazones de la gente para que cuando llegue el Señor ellos se
hallen dispuestos a escucharle y seguirle, ¿Entiendo que como creyente tengo este
mismo llamado? Mi vida y mis palabras acercan a la gente al Señor o la aleja?

13. Anuncio del nacimiento de Juan

Lucas 1:5-25
Introducción: El tiempo se acercó, muy pronto el nacimiento del Mesías sería
anunciado a María, pero como lo decía la profecía, antes debía venir Juan con el
espíritu del profeta Elías.
Lucas se toma su tiempo para describir la época y a las personas involucradas (5 al 7)
y posteriormente relata como el Señor se manifestó a Zacarias en medio del servicio
que ejercía en el templo; en medio de su trabajo rutinario; aquel día, le tocó la
suerte ofrecer el incienso (9); en el ejercicio de su oficio, se le manifestó el ángel
Gabriel, con un mensaje claro, sin lugar a doble interpretación (13 al 17), pero
Zacarias respondió con incredulidad ante este mensaje, más bien se enfocó en las
circunstancias externas de su condición física (18), esto le costó la voz; aquella buena
noticia no podría ser anunciada por Zacarias hasta que se cumpla (19 al 20), la
multitud fuera del santuario entendió que Zacarias tuvo una visión (22).
Elisabet reconoció que el Señor se dignó en mostrarle su misericordia quitándole la
vergüenza de no tener hijos (24 al 25).
Preguntas para reflexionar
1. ¿Puedo confiar que el Señor utilizará el dolor, la frustración y la vergüenza en mi
vida para su gloria? Romanos 8:28
2. Examinando mi corazón, delante del Señor ¿Hay algún rastro de incredulidad?
3. Juan preparó los corazones de la gente para que cuando llegue el Señor ellos se
hallen dispuestos a escucharle y seguirle, ¿Entiendo que como creyente tengo este
mismo llamado? Mi vida y mis palabras acercan a la gente al Señor o la aleja?