Está en la página 1de 4

¿Qué es la justicia ocupacional?

El término 'justicia ocupacional' surgió a finales de 1990 con la integración de la obra de


Wilcock y Townsend (Stadnyk et al., 2010; Townsend y Wilcock, 2004; Wilcock y
Townsend, 2009). Según Wilcock, el valor social de las ocupaciones depende de
determinantes culturales y sociopolíticos (Wilcock y Townsend, 2009). Además, aseguró que
desde que las ocupaciones son fundamentales para la existencia humana, las restricciones a
la participación en ellas resulta ser una cuestión de injusticia (Townsend y Wilcock, 2004).
Estos autores tenían un interés común en la ocupación y su papel en la justicia social y
cuestionaron si la justicia social aborda suficientemente los derechos individuales y
colectivos a participar en ocupaciones (Wilcock y Townsend, 2009) o si era necesario un
concepto que tuviese un foco más fuerte en ocupación Stadnyk et al (2010), se describe
entonces la justicia ocupacional como centrándose en '' las ocupaciones significativas y útiles
(actividades y tareas) que las personas quieren hacer, tienen que hacer y pueden hacer
teniendo en cuenta sus circunstancias personales y contexto '' (p. 331).

Por lo tanto, una perspectiva de justicia ocupacional reconoce a los individuos como seres
ocupacionales y a cada individuo como único con deseos ocupacionales, hábitos y
necesidades que se basan en su propio conjunto único de circunstancias y capacidades, donde
cada individuo requiere diferentes oportunidades ocupacionales para utilizar sus talentos y
florecer (Townsend y Wilcock, 2004; Wilcock, 2006; Wilcock y Townsend, 2009).

En la literatura, se identificaron las necesidades que pueden satisfacerse a través de las


ocupaciones incluidas '' ejercer la participación ciudadana, la elección y control'' (Townsend
y Wilcock, 2004, p. 80); '' alimento para el espíritu humano y la espiritualidad '' (Wilcock,
2005, p. 85); '' salud, calidad de vida y el sustento de las familias y comunidades... cuidar de
uno mismo o a otros, disfrutar de la vida, o hacer algo en que se siente o es reconocida por
otros como ser productivo '' (Stadnyk et al., 2010).

Dentro de una perspectiva de justicia ocupacional, los individuos tienen el derecho a la


igualdad de oportunidades para participar en ocupaciones variadas y significativas con el fin
de satisfacer sus necesidades básicas y maximizar su potencial (Wilcock, 2006; Wilcock y
Townsend, 2009).
Un '' mundo ocupacionalmente justo” se concibe como uno que se regiría de manera que
permita a las personas a prosperar haciendo lo que ellos deciden como más significativo y
útil a sí mismos y a sus familias, comunidades y Naciones '' (Wilcock y Townsend, 2009, p.
330). Lo anterior exige una asignación justa de recursos para la distribución equitativa de
derechos y privilegios que pueden resultar de la participación en ocupaciones, reconociendo
las necesidades ocupacionales de los individuos. Considerando lo anterior, una violación de
la libertad para participar en estas ocupaciones sería una injusticia ocupacional (Wilcock y
Townsend, 2009).
¿Qué es injusticia ocupacional?

Se han descrito una serie de conceptualizaciones de la injusticia ocupacional, ayudando a


explicar el significado de la justicia ocupacional por dilucidar cómo pueden ser violados.
Cinco formas de la injusticia ocupacional se describen con detalle diferente

Apartheid ocupacional: ocurre en situaciones donde las oportunidades de ocupación son


otorgadas a algunos individuos y restringidos a otros basados en características personales
como la raza, discapacidad, género, edad, nacionalidad, religión, condición social,
sexualidad, entre otras (Kronenberg y Pollard, 2005).
Apartheid ocupacional puede resultar de restricciones ocupacionales por motivo económico,
social, jurídica o religiosa y crear a través de ''medidas de política insensible, complicidad o
explotación y mantener así privilegios sobre la pobreza '' (p. 66). Apartheid ocupacional
podría considerarse una forma institucionalizada de injusticia ocupacional.

Privación ocupacional: es el ejemplo más frecuente de la injusticia ocupacional encontrado


en la literatura. Wilcock (1998) y Whiteford (2000) definen privación ocupacional como
''un estado de exclusión de participación en las ocupaciones significativas o necesarias,
debido a factores que están fuera del control inmediato del individuo '' (p. 201).
Whiteford (2000, 2010) y Wilcock (2006) ambos sugirieron que estas circunstancias externas
pueden incluir factores sociales, ambientales, económicas, geográficas, históricas, culturales,
políticas o interpersonales. Whiteford (2010) distinguido privación ocupacional de
interrupción laboral, una condición temporal que puede deberse, por ejemplo, a la
enfermedad. La Privación ocupacional argumenta, tiene un efecto generalizado y a largo
plazo en individuos Whiteford 2012; Wilcock, 1998, 2006) y también puede tener
consecuencias para la salud significativos (Wilcock, 2006).

Marginación ocupacional: se explica como exclusión de la participación en ocupaciones


basada en normas y expectativas 'invisibles' sobre quién debe participar en qué ocupaciones,
cómo, cuándo, dónde y por qué (Stadnyk et al., 2010; Townsend y Wilcock, 2004). Además
se describe como situaciones donde los individuos o grupos no pueden otorgarse la opción
para participar en ocupaciones socialmente valoradas y pueden ser relegados a aquellas que
son menos prestigiosos o permiten poca opción de control (Stadnyk et al., 2010) o baja
oportunidad para toma de decisiones (Townsend y Wilcock, 2004).
Hammell (2008) agrega que marginación puede manifestarse a través de, o resultar en la
exclusión social y el acceso limitado a oportunidades y recursos.

Townsend y Wilcock (2004) distinguen marginación ocupacional de apartheid ocupacional


y privación ocupacional, argumentando que la marginación ocupacional surge a partir de
normas y expectativas informales, dentro de una infraestructura socio-cultural. En otras
palabras, las personas no están restringidas de la participación en ocupaciones debido a leyes
explícitas, política social o religiosas, sino por hábitos, tradiciones y expectativas de
comportamiento no explicitadas.
Alineación ocupacional: se describe como una ''prolongada experiencia de desconexión,
aislamiento, vacío, falta de un sentido de identidad, una expresión limitada o confinada del
espíritu o una sensación de falta de significado '' (Townsend y Wilcock, 2004, p. 80) y en
relación con participación limitada (o forzada) en ocupaciones sin sentido o sin ningún
propósito (Stadnyk et al., 2010; Wilcock, 2006). Stadnyk et al (2010) argumentó que
ocupaciones significativas tal vez mental y espiritualmente enriquecedoras dan forma a la
identidad. Así, la participación en ocupaciones que no proporcionan experiencias positivas
pueden impedir la formación de identidades positivas y, argumentan, así es injusto.
Stadnyk et al (2010) sostuvo que casos e los cuales, algunas personas son objeto de privación
o alejamiento de ocupaciones altamente valoradas y significativas, mientras que otros son
privilegiados con éstas (potencialmente a expensas de los enajenados o privados) podría
llevar a situaciones de apartheid ocupacional

Desbalance ocupacional A nivel individual, se refiere a un tiempo excesivo ocupado en área


ocupacional a expensas de otras áreas (Stadnyk et al., 2010); por ejemplo, algunas personas
pasan una exceso de tiempo en un empleo asalariado a expensas de tiempo de la familia.
Wilcock (2006), además, sostuvo que el desequilibrio ocupacional puede ocurrir cuando el
tiempo utilizado en ocupaciones no se relaciona con las necesidades personales, fisiológicas
y rutinas saludables; por ejemplo trabajar en el turno de noche.
En el plano social, desequilibrio ocupacional se describe como situaciones donde a algunos
individuos se le ofrecen muchas oportunidades para la ocupación mientras que otros tienen
pocas opciones, dando por resultado individuos sobre o sub “ocupados”, o incluso sin ocupar
(Stadnyk et al., 2010; Townsend y Wilcock, 2004).
Todas estas formas de desequilibrio ocupacional pueden tener efectos perjudiciales para la
salud (Wilcock, 2006), siendo las estructuras económicas, políticas y culturales en gran parte
responsables de situaciones de desequilibrio, particularmente con respecto a la distribución
del empleo remunerado (Townsend y Wilcock, 2004). Además, si esas estructuras crean o
mantienen situaciones de desequilibrio ocupacional, el resultado podría considerarse
apartheid ocupacional.
En situaciones de desequilibrio ocupacional, no son sólo las ocupaciones las que son
desigualmente distribuidas, sino también los derechos, privilegios, beneficios y recompensas
que se asocian a estas ocupaciones.
Los conceptos de apartheid, privaciones, marginación, alienación y desequilibrio denotan
diversas formas de exclusión de las ocupaciones, así como la imposición de ocupaciones
desfavorables, es decir, donde los individuos participan en ocupaciones que normalmente
no elegirían.
Teóricos de la Justicia Ocupacional, sostienen que ambos la prohibición de la participación
en ocupaciones significativas y la obligación de participar en ocupaciones que no son
voluntariamente solicitadas o significativa puede afectar el bienestar individual. Una
dificultad con estos conceptos radica en la falta de claridad conceptual acerca de cómo
determinar qué ocupaciones deben prevenirse u obligárseles a los individuos. Por ejemplo,
poner un niño a la cama cuando él o ella desea estar despierto y jugar, ajusta a la definición
de injusticia ocupacional y marginación, sin embargo, la mayoría de la gente estaría de
acuerdo que el bienestar del niño general reemplaza su interés en permanecer despierto. Del
mismo modo, fumar cigarrillos está relacionado con un mayor riesgo de enfermedad cardiaca
y pulmonar (Lloyd-Jones et al., 2009) y así la salud disminuida, sin embargo, algunas
personas que fuman lo consideran una ocupación significativa de los que derivan beneficios
sociales, oportunidades de desarrollar relaciones sociales y sentido de pertenencia (Katainen,
2012). ¿Es injusticia en forma de privación ocupacional o enajenación impedir que otras
personas fumen en las situaciones sociales que se producen en lugares públicos donde más
desearan expresar su individualidad?. Mientras ambos ejemplos describen situaciones que
cumplen con las definiciones de la injusticia ocupacional, podría argumentarse que estas
injusticias son superadas por otros problemas de salud y moral. El argumento más matizado
puede ser que más que definir e identificar las injusticias ocupacionales, resulta importante
reconocer si la injusticia obliga o no a una respuesta. Sin duda situaciones de esclavitud,
guerra, pobreza, abuso, desplazamiento y muchas otras circunstancias pueden indicar la
necesidad de una respuesta a la injusticia, pero si estas y otras injusticias indican la necesidad
de intervención contra las injusticias ocupacionales requiere deliberación.

Resumen y recopilación
Análisis Concepto de Justicia Ocupacional,( Tamara Olivos, 2018)
Dra. Oskarina Palma C.
Umag.

También podría gustarte