Está en la página 1de 3

Género

Historia de la Teoría y Crítica de Género


Las preocupaciones en torno al cuerpo, la sexualidad y el género hoy en día no solo forman parte de
la academia o estudios especializados, si no que forman parte de la demanda ciudadana y una
demanda para la agenda política. Hoy es muy difícil ignorar la fuerza del sistema patriarcal para la
generación de desigualdades de genero tanto en lo social, cultural, político y económico. Y
movimientos como el MeToo o Ni una Mas multitudinarias marchas para los 8 de marzo.
Estudios de genero se han ido consolidando durante los últimos años como un importante campo de
estudio que atraviesa las ciencias sociales, las humanidades y todos los estudios culturales. Así el
campo de los estudios de genero es complejo que cruza la filosofía, la antropología, las sociología,
la psicología y los estudios literarios.
El feminismo nace de la urgencia polictica para el reclamo de mayores derechos para las mujeres,
mayores derechos sociales, laborales y políticos. Podríamos trazar una cierta línea de ciertos hitos
para el feminismo moderno:
1. Mary Wollstoncraft: s. XVIII reclama mayor derecho de educación para las mujeres. No
puede haber mayor emancipación de la mujer si no hay un proceso de educación.
2. SXX. Virginia Wolf: un cuarto propio. Todavía es una imagen que se ocupa para pensar en
la necesidad de la mujer de tener un espacio propio, para pensar, para reflexionar, para no
estar relegada a las funciones de esposa y de madre, le puede permitir la creatividad.
También es importante la educación, pero pone énfasis en las condiciones materiales que
harían un real cambio en la vida de una mujer. Escribe su texto después de que las
sufragistas inglesas alcanzaran el derecho a voto de las mujeres, a pesar de eso ella ve que
se sigue no produciendo la emancipación de las mujeres en la medida en la que las mujeres
no tienen las condiciones materiales que le permiten cambiar efectivamente su vida.
3. Simone de Beauvoir: 1949 el segundo sexo, texto fundamental para el estudio posterior de
todos los estudios de genero. Porque aquí acuña la frase celebre “no se nace mujer, se llega
a serlo” lo que quiere mostrar es que el ser mujer, o lo que significa ser mujer no depende
de haber nacido con un sexo biológicamente femenino sino que con aquello que la cultura
hace con esa biología, el cuerpo no es una naturaleza dada que conlleva consigo una vida
necesariamente femenina sino que es la cultura la que se imprime sobre ese cuerpo. Esta
apertura es lo que permite pensar y repensar este binomio de hombre y mujer, lo masculino
y lo femenino a través de su variabilidad histórica. Y en el momento en que se abre esa
posibilidad, se abre la posibilidad de su subversión, de su deconstruccion, de su posibilidad
de resistirse a las formas hegemónicas de pensar y vivir el género.

Dos conceptos fundamentales


Sexo: característica biológica definida incluso desde antes de que nazcamos. Influyen los
cromosomas X e Y, sistema de determinación del sexo que compartimos con la mayoría de
los mamíferos se basa en que el sexo de un individuo está determinado por un par de
cromosomas, machos una configuración XY, en tanto que las hembras son XX. En ese
sentido durante la fecundación el ovulo aporta su cromosoma X para la formación del
cigoto, mientras que el espermatozoide aporta un cromosoma X o Y, esto determinará el
sexo que tendrá el ser humano, formado desde esa primera célula. Entonces los
cromosomas de una hembra a la que en la especie humana llamamos mujer es XX, mientras
que la de un macho que en la especie humana denominamos hombre son XY. Otra
constituyente del sexo es la genitalidad, esto es los caracteres sexuales primarios, esto es el
sexo de un individuo, sea macho o hembra, provoca el desarrollo de su propio órgano
reproductor. En el caso de los machos: testículos y penes. En el caso de las hembras:
ovarios, vagina y vulva. Los testículos y ovarios tienen como función principal la creación
de las células sexuales (espermatozoides y ovocitos) que al fusionarse durante la
fecundación forman una primera célula que podría llegar a ser un individuo. Por ultimo
están los caracteres secundarios, los testículos y ovarios son sintetizadores de ciertas
hormonas sexuales: testosterona en el caso de los machos, progesterona y estrógeno en el
caso de las hembras. Dichas hormonas, liberadas desde la etapa de la pubertad, generan
cambios en hembras y machos, en ese sentido la pubertad básicamente prepara al
organismo para entrar en una etapa reproductiva activando los aparatos reproductores. Entre
estos caracteres secundarios destaca el aumento de los olores, la aparición de espinillas,
aumento de la estatura, al igual que la aparición de vello facial y pubico. Además existen
cambios psicológicos pues la persona comienza su transición entre la infancia y la adultez
temprana. Biológicamente nacer macho o hembra, esto es hombre o mujer, solamente
significa nacer con tal o cual estructura cromosómica, genitalidad y caracteres secundarios
determinados.
1949 Simone de Beauvoir declaró en su obra el segundo sexo que no se nace mujer, se llega
a serlo. Con esta idea la filósofa francesa estaba apuntando hacia el segundo concepto.
Género: construcción cultural que impone ciertos roles y características a las personas por
haber nacidos machos o hembras. Diferencias que no tienen justificación alguna son
construcciones de genero, nos dicen que existen cosas, comportamientos y roles
intrínsecamente masculinos y femeninos. Opera en ambos sentidos pues nos dice que
características como la delicadeza, suavidad, belleza, sumisión, sensibilidad son femeninas,
mientras que la fortaleza, competitividad, rudeza, valentía y racionalidad son masculinas.
Kate Millet 1969, pensadora, activista y escritora, en su obra política sexual identificó como
patriarcado aquel sistema social y político universal organizado por dos principios:
1. El dominio del macho sobre la hembra
2. Dominio del varón adulto sobre el varón joven
Estas imposiciones y estereotipos se expresan según la autora en tres frentes distintos e influyen en
todos los aspectos de la vida
- El temperamento o aspectos psicológicos
- El rol o aspecto sociológico
- El estatus o dimensión política.
Gerda Lernen 1986 la historiadora “La creación del patriarcado”: a partir de evidencia histórica,
arqueológica, literaria y artística, concluyó que esa repartición desigual de las labores, así como su
también dispareja valoración social habían nacido en una época específica del desarrollo de la
humanidad, la que no era como se solía creer. El paleolítico, en dicho periodo, la noción de
paternidad y la vinculación de la actividad sexual con la reproducción apenas eran conocidas y
comprendidas por los seres humanos. Por ello paternidad y maternidad eran vistos como tareas
colectivas y los roles estaban equitativamente distribuidos, por lo que la recolección y la caza eran
tareas de ambos sexos. Hay construcciones y relatos patriarcales que no tienen asidero científico, de
hecho la evidencia en estos campos lo desmienten.
Según Lerner, sería durante el neolítico que surge el concepto de la propiedad privada, con ello la
necesidad de los hombres de heredar su ganado y cultivo a su legítima descendencia, con lo cual
nació la exigencia de fidelidad y exclusividad hacia la mujer. De ahí se desprendería también la
división sexual del trabajo, que terminaría por relegar a las mujeres al espacio domestico. De esta
forma se conectaba el acto de parir con las labores de crianza y cuidados de la casa, liberando al
hombre al espacio público, donde se dan las tareas productivas y se compite por el poder político.
Por lo tanto el nacimiento del patriarcado, los estereotipos y roles de genero habría sido en el
neolítico.
Estereotipos de género: no tienen por qué imponerse a alguien independientemente de si nació
hombre o mujer

También podría gustarte