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Presento más dificultades con la ira ya que soy muy poco tolerante a los malos ratos y más aún

cuando estoy con mucho estrés es muy fácil enojarme rápido por cualquier cosa que suceda.
Cada vez que estoy con ira, me siento impotente, siento que mi cara me quema y me arden las
orejas, me duele la cabeza y se me dificulta respirar. Lo que me resulta es ducharme con agua
caliente por un buen rato y luego salir a manejar. Las recomendaciones que encontré en la
lectura me parecen muy interesantes particularmente la que indica que es bueno elaborar una
situación de una manera más positiva para dejar de lado la ira. También que la ira puede ser
evitada completamente si la información atenuante surge antes de que ésta empiece a actuar.
Además, salir a dar un largo paseo a pie, aplicar métodos de relajación como respirar
profundamente y relajar los músculos ayuda a enfriar la ira. Finalmente, el poder de la
distracción como ver una película, leer un libro, hacer lo que te gusta es muy útil para detener
esa serie de pensamientos de ira.

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