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Neumonía intrahospitalaria

Materia: fisiopatología
Alumna: Erika Janeth Carvajal Bojorquez
Matricula: 22060397
Lic. En enfermeria
Neumonía intrahospitalaria

Definición:
La neumonía intrahospitalaria, también conocida como neumonía
nosocomial, es una infección del tracto respiratorio inferior que se
desarrolla en pacientes hospitalizados por al menos 48 horas y que no
estaba presente ni en periodo de incubación en el momento de la
admisión.

Epidemiología:
Es una de las infecciones nosocomiales más comunes, especialmente
en pacientes críticamente enfermos y aquellos que requieren
ventilación mecánica. La incidencia varía según el tipo de hospital, la
unidad de cuidados y los procedimientos realizados, pero puede
representar hasta el 20% de todas las neumonías adquiridas en el
hospital.
La epidemiología de la neumonía intrahospitalaria (NIH) es un tema
relevante debido a su impacto en la salud pública y la atención
médica. Aquí tienes algunos aspectos importantes de su
epidemiología:

Incidencia:
- La incidencia de la neumonía intrahospitalaria varía según la
población estudiada y los criterios utilizados para su definición.
- Se estima que representa entre el 5% y el 15% de todas las
infecciones hospitalarias en países desarrollados, aunque puede ser
más alta en ciertas unidades de cuidados intensivos (UCI) o en
pacientes con factores de riesgo específicos.

Factores de Riesgo:
- Los factores de riesgo principales para el desarrollo de neumonía
intrahospitalaria incluyen la estancia prolongada en el hospital, la
ventilación mecánica, la intubación endotraqueal, la presencia de
dispositivos invasivos como catéteres intravenosos y sondas urinarias,
la inmunosupresión, la edad avanzada y la gravedad de la enfermedad
subyacente.

Microorganismos Causales:
- Los microorganismos responsables de la neumonía intrahospitalaria
son diversos y pueden variar según la institución, la unidad de
cuidados y la población de pacientes.
- Bacterias como Staphylococcus aureus, Pseudomonas aeruginosa,
Klebsiella pneumoniae y Streptococcus pneumoniae son comunes, así
como patógenos resistentes a múltiples antibióticos como
Staphylococcus aureus meticilino resistente (SAMR) y Pseudomonas
aeruginosa resistente a carbapenémicos.

Impacto Clínico:
- La neumonía intrahospitalaria está asociada con un aumento de la
morbilidad y la mortalidad, así como con un aumento en los costos de
atención médica y la duración de la estancia hospitalaria.
- Los pacientes que desarrollan neumonía intrahospitalaria tienen un
mayor riesgo de complicaciones, incluyendo la necesidad de cuidados
intensivos, la insuficiencia respiratoria, el fallo multiorgánico y la
muerte.

Prevención:
- La prevención de la neumonía intrahospitalaria es fundamental y se
centra en la identificación y mitigación de los factores de riesgo
modificables, la promoción de prácticas de higiene adecuadas, el uso
racional de antibióticos y la implementación de medidas para prevenir
la transmisión de microorganismos resistentes.

El conocimiento de la epidemiología de la neumonía intrahospitalaria


es crucial para el desarrollo de estrategias efectivas de prevención y
control, así como para mejorar la atención y el manejo de los
pacientes afectados. La investigación continua en este campo es
fundamental para abordar este importante problema de salud pública.

Etiología:
La neumonía intrahospitalaria puede ser causada por una variedad de
microorganismos, incluyendo bacterias, virus y hongos. Las bacterias
más comunes incluyen Staphylococcus aureus, Pseudomonas
aeruginosa, Klebsiella pneumoniae y Streptococcus pneumoniae.
Clínica:
Los síntomas típicos incluyen fiebre, tos productiva, dificultad para
respirar, dolor torácico, fatiga y confusión en pacientes ancianos. Sin
embargo, los síntomas pueden variar según la gravedad de la
enfermedad y la presencia de comorbilidades.

Diagnóstico:
El diagnóstico se basa en la historia clínica del paciente, los hallazgos
físicos, los resultados de las pruebas de laboratorio (como
hemograma, gasometría arterial, cultivo de esputo) y las imágenes
radiológicas, como la radiografía de tórax.

Diagnóstico Diferencial:
Es importante diferenciar la neumonía intrahospitalaria de otras
condiciones que pueden presentar síntomas similares, como
atelectasia, embolia pulmonar, insuficiencia cardíaca congestiva y
exacerbación de enfermedades pulmonares crónicas.
El diagnóstico diferencial de la neumonía intrahospitalaria implica
distinguirla de otras condiciones que pueden presentar síntomas
similares. Algunas de las principales condiciones que deben
considerarse en el diagnóstico diferencial son:

● Atelectasia: La atelectasia es una condición en la cual parte o todo


el pulmón colapsa, lo que puede causar síntomas como dificultad para
respirar y fiebre. Se diferencia de la neumonía intrahospitalaria por la
ausencia de infiltrados pulmonares en la radiografía de tórax y por la
respuesta a maniobras de expansión pulmonar como la respiración
profunda y la tos.
● Embolia Pulmonar: La embolia pulmonar es una obstrucción de las
arterias pulmonares por un coágulo sanguíneo, lo que puede causar
síntomas como dificultad para respirar, dolor torácico y tos. Se
diferencia de la neumonía intrahospitalaria por la presencia de signos
de tromboembolismo en pruebas como la tomografía computarizada
de tórax y la arteriografía pulmonar.

● Insuficiencia Cardíaca Congestiva: La insuficiencia cardíaca


congestiva es una condición en la cual el corazón no puede bombear
suficiente sangre para satisfacer las necesidades del cuerpo, lo que
puede causar acumulación de líquido en los pulmones y dificultad para
respirar. Se diferencia de la neumonía intrahospitalaria por la ausencia
de signos de infección en las pruebas de laboratorio y por la respuesta
al tratamiento con diuréticos y medicamentos para el corazón.

● Exacerbación de Enfermedades Pulmonares Crónicas: Las


enfermedades pulmonares crónicas como la enfermedad pulmonar
obstructiva crónica (EPOC) y la fibrosis pulmonar pueden presentar
exacerbaciones agudas con síntomas similares a los de la neumonía
intrahospitalaria, como dificultad para respirar y tos. Se diferencian de
la neumonía intrahospitalaria por la historia clínica del paciente y por la
presencia de hallazgos característicos en las pruebas de función
pulmonar y las imágenes radiológicas.

● Otras Infecciones Respiratorias: Otras infecciones respiratorias


como la bronquitis aguda, la tuberculosis pulmonar y la influenza
pueden presentar síntomas similares a los de la neumonía
intrahospitalaria. Se diferencian de la neumonía intrahospitalaria por la
historia clínica del paciente, los hallazgos en las pruebas de
laboratorio y las imágenes radiológicas específicas de cada
enfermedad.
Es importante realizar un diagnóstico diferencial completo para
asegurar un manejo adecuado del paciente y evitar tratamientos
innecesarios o inapropiados. Esto puede requerir la realización de
pruebas adicionales, como análisis de sangre, cultivos de esputo,
pruebas de función pulmonar y pruebas de imagen avanzadas.

Tratamiento:
El tratamiento de la neumonía intrahospitalaria incluye el uso de
antibióticos empíricos de amplio espectro inicialmente, con ajustes
posteriores según los resultados de los cultivos y la sensibilidad
antibiótica. Además, se pueden administrar otros tratamientos de
soporte, como oxigenoterapia, terapia broncodilatadora y fisioterapia
respiratoria.
El tratamiento de la neumonía intrahospitalaria (NIH) se basa en el
manejo adecuado de la infección pulmonar, la optimización de los
cuidados de apoyo y la prevención de complicaciones. Aquí tienes los
aspectos clave del tratamiento:

Antibióticos:
- El tratamiento empírico con antibióticos de amplio espectro se inicia
de inmediato una vez que se sospecha el diagnóstico de neumonía
intrahospitalaria.
- La elección del antibiótico depende de factores como la gravedad de
la enfermedad, los factores de riesgo para patógenos resistentes y las
características locales de resistencia bacteriana.
- Se pueden considerar combinaciones de antibióticos para
proporcionar una cobertura más amplia, especialmente en pacientes
críticamente enfermos o con factores de riesgo para infecciones
polimicrobianas.

Ajuste del Tratamiento:


- Una vez disponibles los resultados de los cultivos y la sensibilidad
antibiótica, se ajusta el tratamiento antibiótico según sea necesario
para dirigirse específicamente a los patógenos identificados y
garantizar la eficacia del tratamiento.
- Se recomienda revisar y ajustar el tratamiento antibiótico según sea
necesario en función de la respuesta clínica del paciente y los
resultados de los cultivos.

Cuidados de Apoyo:
- Se proporcionan cuidados de apoyo para optimizar la función
respiratoria y prevenir complicaciones. Esto puede incluir
oxigenoterapia para mantener la saturación de oxígeno adecuada,
fisioterapia respiratoria para facilitar la eliminación de secreciones y
terapia broncodilatadora según sea necesario.
- Se puede considerar la necesidad de soporte ventilatorio en
pacientes con insuficiencia respiratoria grave o deterioro clínico.

Manejo de Complicaciones:
- Se trata cualquier complicación que pueda surgir durante el curso de
la enfermedad, como la sepsis, el shock séptico, el fallo multiorgánico
y la insuficiencia respiratoria.
- Se monitorea estrechamente la función cardiaca, renal y hepática, y
se proporciona tratamiento de apoyo según sea necesario.

Duración del Tratamiento:


- La duración del tratamiento antibiótico varía según la gravedad de la
enfermedad, la presencia de complicaciones y la respuesta clínica del
paciente.
- Se recomienda un enfoque de "tratamiento corto" siempre que sea
posible, con una duración total de antibióticos de 7 a 10 días en la
mayoría de los casos, para minimizar el riesgo de resistencia
antibiótica y efectos secundarios.

Seguimiento:
- Se realiza un seguimiento clínico regular para evaluar la respuesta al
tratamiento, monitorizar la resolución de los síntomas y prevenir
recaídas.
- Se pueden realizar pruebas de imagen de seguimiento, como
radiografías de tórax, para evaluar la resolución de las infiltraciones
pulmonares y confirmar la curación de la neumonía.

El tratamiento de la neumonía intrahospitalaria requiere un enfoque


multidisciplinario que incluya la coordinación entre médicos,
enfermeras, farmacéuticos y otros profesionales de la salud para
proporcionar una atención integral y garantizar los mejores resultados
para el paciente.
Pronóstico:
El pronóstico depende de varios factores, incluyendo la gravedad de la
enfermedad, la presencia de comorbilidades y la respuesta al
tratamiento. La neumonía intrahospitalaria puede estar asociada con
tasas de mortalidad significativas, especialmente en pacientes
críticamente enfermos.

Referir al Paciente:
Los pacientes con neumonía intrahospitalaria pueden requerir atención
especializada, especialmente si presentan complicaciones o no
responden al tratamiento inicial. La derivación a un neumólogo o
intensivista puede ser necesaria en casos graves.
Bibliografía:
https://www.elsevier.com/es-es/connect/neumonia-intrahospitalaria-
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