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UNIDAD 2
2.1.1. Sófocles
En este tema se habla de la tragedia griega tratando parte de la histórica y de los
planteamientos filosóficos inmersos en las obras.
HISTORIA
Las representaciones teatrales se mostraban desde dos puntos de vista en la época de los
griegos:
1. Las Comedias: en ellas los personajes eran comunes y corrientes y su finalidad era hacer
reír a través de una parodia de las debilidades humanas.
2. Las Tragedias: éstas fueron representaciones en las que los personajes eran dioses o
nobles que estaban sometidos a un sino o destino adverso y trágico, que provocaba miedo
y terror en el espectador produciéndole una «catarsis» o purificación interna.
Esquilo: Se puede considerar como el iniciador del género de la tragedia y en sus obras,
por lo general, los personajes son dioses.
Sófocles: Sin lugar a duda, fue el más célebre y amado de la trilogía y el que mejor pudo
desentrañar las interrogantes del alma humana. Fue un poeta de una amplia educación
que mostró desde pequeño una marcada vocación por el teatro. Compuso una gran
variedad de dramas, especializándose en el género trágico otorgándoles a los personajes
característicos de héroes, nobles o semidioses. Sófocles alcanzó a descubrir una parte de
la inexplorada alma humana. En una época en que las ciencias como aritmética,
geometría, lógica, etc., el ser humano era un estudio en pañales. Las interrogantes sobre
«el ser» y sus misterios eran interminables. Una obra que puede plasmar temas filosóficos
como el destino, la relación madre-hijo, etc., es sin duda una pieza admirable de la
literatura.
Eurípides: Con él se cierra el ciclo de oro de la tragedia griega. Los personajes en sus obras
son seres humanos con todas sus virtudes y errores, por ejemplo, Las Troyanas. De esta
triada, el que logró desentrañar el alma del ser humano y le dio más profundidad a sus
obras fue Sófocles, que en su obra Edipo Rey logra tocar temas como el «destino del
hombre» y las relaciones «edípicas» que incluso entrada la época contemporánea se
tocan con relación al sicoanálisis.
2.1.2. Sócrates
Sócrates fue un filósofo clásico griego que vivió entre los años 470 a.C y 399 a.C. Fue
maestro de Platón, quien a su vez tuvo como discípulo a Aristóteles. Los tres son los
representantes más importantes de la filosofía de la Antigua Grecia. La filosofía de
Sócrates (470/469-399 a.c.) se centra en la moral. Su pregunta fundamental es: ¿Qué es el
bien? Sócrates creía que si se lograba extraer el concepto del bien se podía enseñar a la
gente a ser buena (como se enseña la matemática, por ejemplo) y se acabaría así con el
mal.
Decidió dedicarse a reflexionar sobre sí mismo y sobre la vida del hombre en la ciudad.
Pensaba que de los seres y objetos de la naturaleza nada podía aprender; sólo de los
hombres que viven en la ciudad. Se dio cuenta de que en su momento lo más importante
eran los problemas éticos, entendía la filosofía como un diálogo que hace posible la
búsqueda colectiva de la verdad, estaba convencido de que cada hombre posee dentro de
sí una parte de la verdad, pero a menudo sólo puede descubrirla con ayuda de los otros.
Rechazaba, por tanto, que alguien posea ya la verdad y que ésta pueda ser encontrada de
forma individual.
2.1.3. San Agustín
Filósofo o teólogo, el máximo exponente de la Patrística, Agustín de Hipona, utilizó el
platonismo para fijar el dogma cristiano y combatir las herejías, contribuyendo
inintencionadamente, a la difusión de la cultura griega en la Edad Media. Agustín de
Hipona (354-430) vivió en una época de gran inestabilidad social y política: la crisis y
derrumbamiento del Imperio Romano. El mismo año que Agustín fue nombrado obispo de
Hipona, Teodosio dividía en Imperio entre sus hijos Honorio (Occidente) y Arcadio
(Oriente) y a la muerte del filósofo, los vándalos invadían Tagaste. El punto de partida de
la filosofía de Agustín es el problema de la verdad. En íntima dependencia con el
pensamiento grecorromano, el hiponense reivindica la razón como única facultad capaz
de alcanzar la verdad y superar el escepticismo, verdadero obstáculo para abrazar la fe y
lograr la felicidad.
2.1.4. Santo Tomás de Aquino
Tommaso D’Aquino (nacido en Roccasecca, Lacio ó Belcastro, Clabria, Italia el 28 de enero
de 1225 – † Abadía de Fossanuova, en la actual Provincia de Latina, 7 de marzo de 1274),
fue un teólogo cristiano perteneciente a la Orden de Predicadores, y es el principal
representante de la tradición escolástica, y fundador de la escuela tomista de teología y
Filosofía. Es conocido también como Doctor Angélico o Doctor Común, y es considerado
santo por la Iglesia Católica.
2.1.5. Hobbes
Thomas Hobbes, considerado uno de los fundadores de la filosofía política moderna, nace
el 5 de abril de 1588 en el condado de Wiltshire, Galileo influye a Hobbes en su creación
de una filosofía social con base en las ciencias naturales y la geometría. Su pensamiento es
una transcripción de la física del movimiento de Galileo a toda la realidad: no hay más que
cuerpos en movimiento, y esto se refiere no solo a la materia, sino también al hombre y a
la propia sociedad. Hobbes concibe la condición humana en su puro estado natural, con
anterioridad a la fundación del Estado civil. El punto de vista adoptado por él es empirista
y fenomenológico, es decir se basa únicamente en la observación de la conducta humana,
sin tener en cuenta ninguna consideración previa de carácter metafísico o religioso.
Asimismo, afirma la igualdad natural de todos los seres humanos. Esta igualdad se observa
por el hecho de que todos quieren y desean las mismas cosas y los mismos beneficios. Si
hay alguna diferencia entre los seres humanos, se debe más bien al aprendizaje, al
conocimiento y a la experiencia de cada individuo, que no a la naturaleza. Seguidamente,
Hobbes argumenta esta igualdad recurriendo a un dato empírico observable en cualquier
lugar y época: la discordia y la enemistad entre los seres humanos, al pretender la
posesión de los mismos bienes, de aquello que sólo puede pertenecer a uno. El afán de
propiedad y posesión lleva a la guerra.
2.1.6. Nietzsche
Friedrich Nietzsche fue un gran ensayista y crítico cultural de origen alemán. Sus escritos
relacionados sobre la verdad, la moralidad, el lenguaje, la estética, la teoría cultural, la
historia, el nihilismo, el poder, la conciencia y el significado de la existencia han ejercido
una enorme influencia en la filosofía occidental y en la historia intelectual de nuestros días
Friedrich Nietzsche fue un filósofo, poeta, crítico y filólogo alemán que escribió temas
relacionados con la verdad y la moral. y que afirmó que el ser humano ejemplar debe
crear su propia identidad por medio de la autorrealización sin depender de nada que
trascienda esa vida, como Dios o un alma. la visión de Nietzsche es un verdadero caudal
de pasión y de energía desbordada por y para el hombre. Completamente opuesta de la
frialdad y ecuanimidad de su acérrimo enemigo intelectual, Kant, con quien, sin embargo,
coincide en la inexactitud en el uso de los conceptos de ética y moral, que se ven difusos y
utilizados indistintamente. La enorme y fuerte torre construida a partir de la conjunción
entre religión y razón que emprendiera Lutero en el plano religioso y Kant en el filosófico a
manera de solución definitiva e integradora de las humanidades y las divinidades, es
tirada a punta de cañonazos por Nietzsche que después de todo no estaba tan
equivocado, la filosofía no volvería a ser igual, los sistemas completos se acabarían; en la
cotidianidad posmoderna, el fatalismo mercantil y plastificado sería la moderna acepción
del nihilismo. Hoy más que nunca el hombre no vale por sí. La propuesta y la crítica de
Nietzsche van contra los valores actuales, contra la podredumbre del andar actual, pero
no sólo se queda ahí, porque Nietzsche entiende bien que cambiar por cambiar sólo daría
por resultado un antivalor similar al agnosticismo frente al cristianismo, es decir, nada.
Hasta ahora sólo se había destruido la torre parcialmente, hasta ahora los conocimientos
seguían siendo los mismos, lo destruido era siempre sustituido y lo nuevo acoplado
perfectamente con el estilo y la forma ya iniciada, Nietzsche lo entiende y lo destruye
todo.
UNIDAD 3
3.5. Las relaciones hombre-sociedad
3.5.1. Individualismo, individuación versus el hombre-masa
El individualismo es la posición moral, filosofía política, ideología, o punto de vista social
que enfatiza la dignidad moral del individuo». Los individualistas promueven el ejercicio
de los objetivos y los deseos propios y en tanto la independencia y la autosuficiencia
mientras se oponen a la mayoría de las intervenciones externas sobre las opciones
personales, sean estas sociales, estatales, o de cualquier otro tipo de grupo o institución.
El individualismo hace del individuo su centro y en tanto comienza «con la premisa
fundamental de que el individuo humano es de importancia primaria en la lucha por la
liberación. Los derechos humanos y la libertad son la substancia de estas teorías. El
liberalismo, el existencialismo y el anarquismo son ejemplos de movimientos que toman al
individuo humano como unidad central de análisis. El filósofo José Ortega y Gasset
sostiene que desde el siglo XIX, aproximadamente los cambios históricos, científicos y
tecnológicos se comienzan a producir con gran rapidez y el ritmo de vida se comienza a
acelerar mucho más que en épocas anteriores en una medida que no tiene precedentes.
Sin embargo, la vida individual y colectiva del hombre no ha evolucionado de la misma
forma. Se conoce más y se hacen más cosas, pero ese saber y ese hacer afecta a la
mayoría de las personas. El hombre-masa surge como una realidad como resultado de ese
desnivel entre el progreso de la época y el de los hombres. Las masas no se refieren
solamente a las clases obreras, como lo interpreta el marxismo, como el grupo social
protagonista del cambio social con el propósito de arrebatarle a las clases altas sus
privilegios. El problema es mucho más amplio, porque el concepto de masa no es
cuantitativo sino cualitativo y además es una cualidad individual que tiene necesariamente
una dimensión también social. El hombre-masa, para Ortega y Gasset, es el que no está al
mismo nivel de sí mismo, el que se encuentra a mitad de camino entre el ignorante y el
sabio, que cree saber y no sabe, y el que no sabe lo que debería saber. Para este filósofo,
la época moderna es el enemigo más grande del hombre actual porque son tiempos de
retórica y mucha confusión. El día que para la gente hacer dinero no sea más la
preocupación central de su vida tendrá la humanidad la oportunidad de ver surgir a una
nueva categoría de hombre más sabio y alcanzar su propia altura.