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Psicodrama
1
Kesselman, H. (1997). La Multiplicación Dramática.
paciente se vincula con los demás. En el método psicodramático, nos encontramos con
que a través del despliegue escénico, el paciente logra revivir aquellas escenas
constitutivas de su desarrollo en donde ocurre esta configuración vincular y en donde su
rol se cristaliza, en este revivir psicodramático. Aquí, el paciente tiene la libertad de
revitalizar sus vínculos, recrear sus libretos, elegir y reelegir flexiblemente sus roles. En
este sentido, el paciente puede permitir que sus emociones de rabia y pena circulen en
forma adecuada en sus relaciones, de modo que su furia no se congela ni su pena se
desvanece, en tanto puede sustituir la depresión, por la vitalización de sus emociones.
El psicodrama, como modelo psicoterapéutico, surge con Jacob Levi Moreno, quién,
además de la filosofía y la religión, se inspira en disciplinas como la sociología, el teatro
y la psicología.
De la sociología rescata su concepción de la ley de gravitación social y de
movilidad, así como los conceptos de sociogenética y sociodinámica.
La sociometría, si bien contiene el concepto de medir, antepone la persona al
número. Su cuerpo teórico comprende el desarrollo de reglas relacionadas con la
movilidad, complejidad y posibilidades de elecciones al interior de un grupo, las cuales
no se modifican, aunque aumenten las posibilidades de elegir2.
La concepción sociológica que está a la base de la teoría de grupo de Jacob Levi
Moreno, se opone al colectivismo marxista y al inicial individualismo instintivista
freudiano. Esto supone un punto de equilibrio entre lo individuativo y lo social, ya que
el ser humano puede, en su condición de libertad, desarrollarse esencialmente en su ser
individual y particular, sin masificarse en conservas culturales, pero adecuándose e
integrándose a los otros. Es más, son los otros y la definición de ser social lo que
permite el proceso de identidad y, por qué no decirlo, de individuación. De aquí que es
posible sustentar que Moreno es el precursor de la mirada social en la temática de salud
mental.
Raíces Religiosas
Como señalan Moreno y Bustos, religión viene de religar, de unir 4, es sacar al individuo
aislado del diván a un encuentro y unión con los otros y a una forma de diálogo
cósmico. Moreno, inspirado en Spinoza y Nietzsche, desarrolla un concepto del hombre,
que, siendo un ente biológico, psicológico, social y cultural, trasciende además a lo
espiritual y lo cósmico.
Dios es parte del desarrollo interno del hombre; en este sentido, se cuestiona al
Dios judeocristiano, que insiste en separar al ser humano de Dios. Consecuente con esta
postura, plantea la importancia de los ritos tribales y religiosos como una búsqueda del
ser humano de comunicación con el cosmos.
Diferencia, además, entre la voluntad de vivir que refiere Schopenhauer y la
voluntad de dominio que plantea Nietzsche. La voluntad de vivir es propia de todos los
seres vivientes desde los protozoos; en cambio, la voluntad de dominio es propia de los
seres humanos.
Moreno critica la dureza, egoísmo y frialdad defendida en ocasiones por
Nietzsche, como critica también la caridad cristiana, en tanto ambas son tesis y antítesis
de una misma postura rígida, pues considera que a veces una realidad puede requerir
respuestas que van de un polo al otro, pasando por diversos matices, sin rigidizar roles.
Debemos recordar que Moreno era de origen judío.
La cábala judía tiene una fuerte influencia mística, esotérica, con elementos
gnósticos, el reconocimiento de una comunicación cósmica y la búsqueda de la
inmortalidad a través de la metafísica.
4
Bustos, D. (1990). Psicoterapia Psicodramática.
5
Fonseca Filho, J. (2005). Psicodrama de la Locura.
Moreno la espontaneidad, constituyen el encuentro con la totalidad, con la posibilidad
de libertad, la creación y la trascendencia, en cierto sentido con Dios.
Es así que como para muchas culturas indígenas, como por ejemplo los mapuches,
el inconsciente y los sueños son un escenario de expresión de las divinidades.
Fundamentos Filosóficos
Entre los filósofos que influyeron en la obra de Moreno, destacan fundamentalmente los
jasidistas y existencialistas. De Bergson adopta el principio de la espontaneidad y la
filosofía del momento. Sin embargo disiente en el concepto de espontaneidad
bergsoniano, por ser más metafísico que existencial. La filosofía del momento se ilustra
en una célebre frase de este autor que es clásicamente citada: “El presente es el pasado
que será”, lo cual implica una concepción revolucionaria del tiempo para la cultura
occidental.
Moreno plantea que este filósofo es sensitivo a la temática de la creatividad, pues
refería el “elan vital” y “durée”, relacionados con el fluir de la experiencia, en una
duración donde todos los tiempos se conjugan6.
6
Espina Barrio, J. (1995). Psicodrama, Nacimiento y Desarrollo.
Por otra parte, otro autor que influye de manera importante en la obra de Moreno
es Martín Buber. Este autor plantea la filosofía del encuentro, yo-tú; refiere que el yo-
ello es una falacia, ya que “el observador” no puede mantenerse neutro y ajeno al
proceso que está observando; en cuanto a la posibilidad del encuentro, sostiene que se
vincula con el proceso de relación entre dos personas que se están mirando. Y en este
sentido, ambas se afectan y se conmueven7.
En sus primeras etapas, Moreno estuvo especialmente interesado por Spinoza,
Kant, Nietzsche, Hegel y Kierkegaard. El existencialismo influye en la obra de Moreno
en lo que respecta al concepto del ser y flujo espontáneo de la existencia, surgiendo de
aquí también la idea del momento, la espontaneidad y la creatividad. A ello habría que
agregar los influjos del movimiento social ligado al existencialismo, hecho que explica
su tendencia a dedicarse a actividades con marginados y a irrumpir en las conservas
culturales.
En síntesis, los fundamentos filosóficos del psicodrama dicen relación con tres
aspectos relevantes:
- Los conceptos de espontaneidad, creatividad, libertad, tiempo y espacio,
provenientes del existencialismo.
- La teoría del encuentro, proveniente del jasidismo.
- La visión de Dios.
Fundamentos Epistemológicos
7
Buber, M. (2001). Yo y Tu.
8
Pichón Riviere, E. (1999). Teoría de Vínculo.
Una característica relevante de la espontaneidad es la adecuación, lo que permite
diferenciarla de espontaneísmo9.
“La espontaneidad deriva del Latín sua esponte (desde adentro). Es la capacidad
que el hombre actual más teme, ya que le han enseñado que todo lo bueno esta fuera de
sí, en forma de conservas culturales…”10.
Finalmente, otro de los conceptos básicos de la teoría psicodramática,
fundamental para el entendimiento de su técnica está relacionado con la “memoria
corporal”: es la actualización de la acción, de movimientos, de patrones musculares e
incluso neurofisiológicos, que muchas veces están asociados a ideas, emociones y
fantasías preverbales. El sentido de la acción, junto a la palabra, es desbloquear cadenas
de significados que están reprimidos para evitar emociones de dolor. Según Moreno, “el
lenguaje gramatical organizado con sus símbolos comunes, ricos en significación, no es
suficiente para penetrar en las capas más antiguas del desarrollo psíquico, en las partes
mudas del encadenamiento de las neurosis y las psicosis”11.
No hay persona que exista separada del cuerpo vivo en que tiene su ser y a través
del cual se relaciona con el mundo que le rodea. En el anterior marco, y en
contraposición a muchas terapias tradicionales, el lenguaje que emplea la técnica
psicodramática está centrado no sólo en la cognición, sino también en aspectos
corporales y afectivos, siendo parte del objetivo la integración de estos elementos en el
vínculo terapéutico. La “teoría del encuentro” debe ser entendida, según Moreno,
íntimamente ligada al concepto de espontaneidad –libertad– y creatividad. En otras
palabras, en la actualización del “ser” está siempre presente el vínculo, un “otro” que va
permitiendo la estructuración y diferenciación de un yo adecuado a normas sociales –
roles–, pero con características particulares que cada persona crea en cada momento. En
este sentido, la espontaneidad está fuertemente relacionada con la creatividad, que es la
capacidad que todos los seres humanos tenemos de desarrollar conductas afectivas,
cognitivas, corporales de manera única y adecuándonos al entorno social, sin
interferencia de relaciones previas en este proceso12.
De lo anterior surge otro aspecto relevante en la teoría de Moreno que es el
concepto de “tele” y de “transferencia”. “Tele” es un proceso de empatía recíproca a
partir del cual dos a más seres humanos pueden encontrarse y percibirse en un acto
simultáneo y dinámico, creativo y libre de contaminaciones de historias vinculares
anteriores. En contraposición a esto, se encuentra el concepto de “transferencia”, que es
depositar en el otro, a través del vínculo, objetos internos introyectados en relaciones
interpersonales anteriores, fundamentalmente de carácter primario.
Éste, si bien es un concepto tomado de Freud, posee ciertas diferencias en el
planteamiento de Moreno, centradas básicamente en su aplicación no exclusivamente al
contexto terapéutico sino que a cualquier situación. Existe otra diferencia, referida a que
lo que se “transfiere” no es exclusivamente derivado de la relación con la madre, sino
que también de otras relaciones.
Hasta ahora hemos estado revisando las diferentes influencias que tuvo el desarrollo de
la teoría psicodramática de Moreno.
9
Bustos, D. (1997). El yo y el psicodrama, Espontaneidad y Adecuación.
10
Bustos, D. (1990). Psicoterapia Psicodramática.
11
Moreno, J. L. (1987). Psicoterapia de Grupo y Psicodrama.
12
Moreno, J. L. (1995). Las Bases de la Psicoterapia.
Lo que analizaremos en este punto son las convergencias que este modelo posee
con otros modelos, incluso de desarrollos ulteriores. La característica de
transparadigmático (mirada más allá de la parcialidad) que posee el psicodrama es tal
vez una de sus más relevantes fortalezas.
Teoría Psicoanalítica
Éste es uno de los modelos desde donde se producen mayores convergencias, y que en
este caso específico, son más bien influencias.
La concepción que tiene el psicodrama de la relación entre los conflictos y la
historia biográfica del sujeto es similar a la del psicoanálisis. No obstante, Moreno
realizó quiebres paradigmáticos en torno al psicoanálisis en varios aspectos. El primero
dice relación con una concepción no etiológica causalística, sino teleológica y de
sentidos de los síntomas: los fenómenos no ocurren porque, sino para. El segundo es
acentuar una concepción más vincular de los conflictos, sacando aquí al sujeto de la
soledad intrapsíquica del diván a una exploración de la relación con sus objetos y su
átomo social. En este sentido el psicodrama se asimila a ulteriores desarrollos del
psicoanálisis, tales como Winicott y otros teóricos del vínculo posteriores a Moreno.
El tercer e importante quiebre paradigmático que realiza Moreno con respecto al
psicoanálisis es en relación a los conceptos de transferencia y contratransferencia.
Moreno utiliza el mismo concepto de transferencia, aunque su ámbito de aplicación
trasciende al espacio psicoterapéutico y no es de origen exclusivo del vínculo materno.
Disiente además con relación al concepto de contratransferencia, ya que desde el yo-tú,
lo que ocurre en el vínculo terapéutico, es bidireccional. No podría en este aspecto
existir la neutralidad técnica, que percibe al terapeuta como una tabla rasa, y a la
contratransferencia como exclusivamente determinada por el paciente. Por el contrario,
Moreno plantea el tele como una empatía y compasión recíproca entre terapeuta y
paciente, siendo además una de las principales herramientas terapéuticas13.
Humanismo
El psicodrama se relaciona con el humanismo en la forma de percibir al ser humano, en
sus posibilidades de autogestión y capacidad de libertad y albedrío. Esencialmente el ser
humano tendría todas las potencialidades para la libertad, la adecuación y la creatividad.
Son las conservas culturales las que lo coartan e inhiben, las que lo rigidizan y
cristalizan en roles no siempre adaptativos. Moreno creía en la capacidad de
autocuración de la humanidad. De hecho, su mirada no está centrada exclusivamente en
los conflictos, sino también en los recursos. El hombre y los grupos se enferman no sólo
porque no saben de sus conflictos, sino porque no reconocen ni asumen sus
posibilidades y recursos. Modelos que derivan del humanismo, como la gestalt, poseen
ciertas similitudes en la forma, en el quehacer de algunas técnicas psicodramáticas.
Transpersonal
Con relación a la corriente transpersonal, tiene muchas correspondencias con Jung.
Existe una escuela en Argentina de Carlos María Menegazzo y otra en Venezuela de
Niksa Fernández, que han profundizado y articulado en lo teórico y en lo práctico los
encuentros de estas teorías. Menegazzo dice que si Moreno y Jung se hubiesen
conocido, sin duda hubieran trabajado juntos. Este mismo autor plantea que los
conceptos de espontaneidad de Moreno e individuación de Jung son homólogos.
El primero habla del Dios que llevamos todos dentro, y el segundo también habla
de Dios, de trascendencia, sí mismo y totalidad. Ambas visiones apuntan a lo
13
Bello, M. C. (2000). Introducción al Pensamiento de J. L. Moreno.
teleológico, a lo finalista, y conciben al ser humano como algo más allá de lo biológico
y psicológico, así como también cósmico y espiritual.
Teoría Sistémica
El psicodrama y la teoría de sistema son modelos que tanto en su aspecto
epistemológico como metodológico consideran lo contextual. Estos son los aspectos
sociales, culturales, familiares, históricos y transgeneracionales que rodean al sujeto.
En este sentido, para ambos modelos los conflictos o síntomas no pueden ser
entendidos aislados de lo anteriormente planteado. Es así como una fobia en Irak, en
Mayo del 2003, no tiene obviamente el mismo significado que la misma fobia en Chile
en Mayo de 200514.
Finalmente, las confluencias de modelos se aprecian a veces más en su quehacer,
en su praxis, que en su teoría.
14
Pleno período de la invasión de Estados Unidos.