EXPO SEGURIDAD SOCIAL

¿ES LA SEGURIDAD SOCIAL UN DERECHO FUNDAMENTAL?

Como bien se sabe la seguridad social es un derecho de rango constitucional puesto que este esta
consagrado en el articulo 48 de nuestra carta magna.

Artículo 48. La Seguridad Social es un servicio público de carácter obligatorio que se prestará bajo
la dirección, coordinación y control del Estado, en sujeción a los principios de eficiencia,
universalidad y solidaridad, en los términos que establezca la Ley.

Y el hecho de que este consagrado en este, hace que se plantee un asunto de gran trascendencia y
es si este es o no un derecho fundamental.

En Colombia es importante saber si es un derecho fundamental para saber dos cosas: primero,
definir que tipo de tramite legislativo debe tener la ley que lo regula y, por otro lado, para decidir
si es un derecho susceptible de ser protegido por vía de acción de tutela

Tomando el primer sentido, la corte constitucional desde sus primeros pronunciamientos dejó
muy claro que la seguridad social no es un derecho fundamental, es decir que no requiere de los
tramites especiales consagrados en la carta magna para las leyes que regulan los derechos
fundamentales; agregando además que es considerado un derecho de segunda generación y que
tiene un carácter meramente prestacional.

En un segundo sentido, la discusión se centra en si es o no la seguridad social un derecho

fundamental susceptible de ser protegido mediante acción de tutela. Y este a su vez se registra en
tres momentos diferentes

1) La S.S como derecho de segunda generación que no tiene el carácter de fundamental.

En esta se tenía una visión restringida sobre los derechos fundamentales, ya que solo se
consideraban como tales los que estuvieran en el capitulo correspondiente de la constitución;
pero, esta fue rebasada por jurisprudencias de la corte constitucional sobre esta materia
( sentencias como T-002/1992 y T-406/1992)

2) La seguridad social como derecho fundamental por conexidad con otros derechos
fundamentales

En este segundo momento, la corte constitucional señala que si bien la seguridad social no es un
derecho fundamental per se, por ser de carácter prestacional; este, puede tenerse como derecho
fundamental de forma excepcional, acudiendo al criterio de conexidad con otros derechos
fundamentales.

Por ejemplo en la sentencia T-375 de 1998, en la que nos relatan de que a pesar de ser un derecho
de segunda generación y, como ya había mencionado, de carácter prestacional; es una garantía
que está estrechamente vinculada con la dignidad humana y el derecho fundamental a la vida; Por
lo que si una persona no tiene seguridad social esta lejos de tener una existencia digna. Por tal
este derecho de seguridad social puede protegerse por vía de tutela, ya que esta conectado a
principios constitucionales y derechos fundamentales.

También citando a la corte, en una sentencia unificadora, nos menciona que la seguridad social
debe entenderse de carácter fundamental cuando su no reconocimiento tiene la potencialidad de
poner en riesgo otros derechos fundamentales y principios consagrados en la constitución.

3) La seguridad social como derecho fundamental autónomo:

En los últimos años la corte dio un gran paso en la ampliación de los derechos derivados de la
seguridad social como fundaméntales y susceptibles de protección vía tutela. Se trata de la idea de
darle connotación de derecho fundamental autónomo a la seguridad social.

Toda esta reflexión constitucional comienza también con el análisis del derecho a la salud como un
derecho de carácter fundamental, que se da en la sentencia T-539/2013, donde básicamente se
relatan las razones por las cuales el derecho de salud debe considerarse un derecho fundamental
autónomo y no por conexidad.

También cabe recalcar que desde hace más de 15 años la corte constitucional se refiere a la
seguridad social como derecho fundamental, en form drecta, para protegerlo no solo en materia
de salud sino también en materia pensional.

Entonces en definitiva, el derecho a la seguridad social era amparado de manera residual, en un

principio, siempre y cuando tuviera una relación estrecha con la protección de otro derecho de
índole fundamental, puesto que la primera connotación que se le otorgó fue de derecho
prestacional. No obstante, jurisprudencialmente ya ha sido reconocido como derecho autónomo e
independiente susceptible de ser amparado a través de la acción de tutela, al reconocer una
relación intrínseca con la dignidad humana y acompañándose al bloque de constitucionalidad.