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UNIVERSIDAD ANÁHUAC MÉXICO

LICENCIATURA EN HISTORIA

Examen parcial de la asignatura:


Historia del Mediterráneo medieval: Bizancio e Islam,

Imparte: Mtro. Reynier Valdés Piñeiro

Fecha: 2 de octubre de 2023

Nombre y apellidos del estudiante: André Pérez Mendizabal

A partir de las siguientes fechas, describa el desarrollo del Imperio bizantino entre los
siglos IV y VII. Repare en aspectos políticos, económicos, militares, religiosos y culturales
que considere relevantes.

Fechas:

-330
-527-565
-610-641

Apóyese en este recurso:


https://www.metmuseum.org/toah/hd/byru/hd_byru.htm
Con el declive inminente del Imperio romano de Occidente, una nueva civilización
nacerá para convertirse en lo que sería el gran Imperio romano de Oriente. Para entender a
Bizancio es necesaria la división de su historia en tres periodos importantes; los cuales se
visitarán a lo largo de este trabajo.
Roma empieza a perder fuerza durante el principio del siglo IV y el emperador
Constantino I plantea la opción de una capital provisional en Oriente. Es así cómo se
escoge a la ciudad griega de Bizancio como la Nova Roma. Constantinopla, nombrada en
honor a su fundador, abre sus puertas el 11 de mayo del año 330 d.C. Este periodo de la
ciudad está lleno de prosperidad y riqueza gracias a la mayor parte de su población siendo
aristócratas romanos.
Durante este momento en la historia, Bizancio está estructurada como una ciudad
romana. Se podrían apreciar la basílica, las thermas y el hipódromo. La sociedad bizantina
era importante y culta y este aspecto nutre a la ciudad de conocimiento y formas de pensar
que se expresan día con día, sobre todo en el tema religioso. Con la tolerancia y expansión
del Edicto de Milán (313), promulgado por el mismo Constantino I, el cristianismo fue
ganando territorio importante en el Imperio bizantino. Aunque había una parte de la
población que fuese pagana todavía; no era extraño durante esta época el saber de
diferentes expresiones y entendimientos sobre la religión cristiana. El reinado de
Constantino I “el grande” se termina con su defunción en el año 337 d.C.
El segundo gran momento en la historia de Bizancio abarcó el periodo entre los
años 527 y 565 d.C (d. C.) con el reinado de Justiniano I apodado “el grande” también. Al
principio este emperador no tuvo una gran reputación dentro de la sociedad bizantina por
varios factores: primeramente por no ser parte de la élite, al venir de la región balcánica y
no ser descendencia directa del emperador anterior, Jusntino. Por si no fuera poco con el
descontento de los bizantinos, Justiniano empieza a poner a personas emergentes al poder
en lugar de la aristocracia ya establecida en esos cargos; además de cambiar la ley para
contraer matrimonio con una bailarina, Teodora.
Durante el turbulento inicio, se dan los disturbios de Niká en el 532 d.C., revueltas
ocasionadas por los aficionados de los equipos de caballos en el hipódromo. Causan la
destrucción de Constantinopla. Para remediar el daño, tanto social como arquitectónico, el
primer proyecto de Justiniano es la reestructuración de la capital en ese mismo año. Gracias
a este restablecimiento de la ciudad se da la maduración del arte bizantino, teniendo como
expresión máxima la reconstrucción de Hagia Sofía; proyecto que termina cinco años
después y es una de las máximas expresiones del arte bizantino y la cristiandad de la
ciudad.
En el aspecto militar el reinado de Justiniano I es de extrema importancia, ya que se
empieza una campaña para la reconquista de Occidente de los pueblos bárbaros. Es así
como con las contiendas exitosas de los militares Belisario y Narsés logran que para el año
563 Rávena en Italia o Egipto en el norte de África formen parte del Imperio bizantino.
Al morir Justiniano I en el 565, se termina su reinado y poco a poco la reciente
expansión que había logrado. Acaba la época dorada de Constantinopla.
En el año 610 Heraclio I “el joven”, hijo del exarca de Cartago con el mismo
nombre, recibe la corona del Imperio bizantino y con ella, una serie de eventos políticos y
militares que hacen a su reinado otro de los periodos puntuales en la historia de Bizancio.
Un gobierno que además efectúa la reestructuración cultural del Imperio al decidir adoptar
la utilización del griego por sobre el latín.
Apenas empezando el reinado de Heraclio la guerra Perso Bizantina explota. Los
persas-sasánidas, desde siempre enemigos de Bizancio, saquearon Jerusalén en el año 614
llevando la Vera Cruz a Ctesifonte y al patriarca Zacarías como prisionero. Por su parte, los
eslavos empiezan a ocupar la zona de los Balcanes. En el 619, los sasánidas retenían Egipto
y las invasiones eslavas debilitan Constantinopla; por lo que Heraclio se ve obligado a
firmar un tratado tributario a cambio de paz por parte de los ávaros.
Una luz de esperanza empieza a asomarse para Heraclio en el año 622 al lograr
conquistar la ciudad de Armenia. Este suceso impulsa al contingente militar bizantino a una
nueva victoria en Nínive en el 627. Finalmente, en el año 628 se firma un tratado de paz
con el Imperio persa, devolviendo a Bizancio los territorios que se habían perdido durante
la guerra.
La Santa Cruz regresa a Bizancio siendo cargada por Heraclio descalzos en el año
630. La entrada triunfal del emperador servirá como referente en las peregrinaciones del
cristianismo y obras de arte posteriores.
Sin embargo, a Heraclio no le espera mucha paz, ya que para el año 634 empiezan
las invasiones árabes en la ciudad de Bosra y al año siguiente en Damasco. En agosto del
636 se da un enfrentamiento en la periferia del río de Yarmuk. La Batalla de Yarmuk,
siendo ganada por el pueblo islámico. Esta batalla tiene una importancia considerable ya
que permite el ingreso de esta religión y sociedad al Occidente.

99/100

André,
Has realizado un examen muy bien argumentado a propósito de la historia del
Imperio bizantino (330-1453), en su etapa formativa y de consolidación.
Recuperas los aspectos más sobresalientes del reinado de Constantino I el
Grande (324-337), de Justiniano I el Grande (527-565) y de Heraclio (610-641).
Estos tres períodos, sin dudas, son pilares de la historia de Bizancio, sobre todo
porque en ellos se asegura la continuidad del Imperio, como bien los apuntas.
Celebro los giros literarios con que amenizas tu escritura, te invito a que sigas
desarrollando este vuelo literario aplicado a la escritura de la historia: de eso se
trata, de hacer de la historia una lectura amena.
Revisa:
-Los detalles y comentarios que te devuelvo en tu documento.
-Hacia el final terminas el examen de manera abrupta, sin un cierre de balance,
lo cual no guarda relación con la redacción que has venido siguiendo. En
próximos ejercicios este cierre es necesario.
Aprecio tu preparación para este examen.

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