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“Actividad 1”

Módulo: Filosofía.

Docente: Jesús Mario Bautista Escamilla.

Alumna: Mayra Arroyo Martínez.

“EL USO DEL LENGUAJE”

PTB En Informática

Grupo: “605”

INSTRUCCIONES:

Fecha de Entrega: 20 de marzo de 2021.


1. Leer cuidadosamente la lectura “No es lo mismo”.
2. Leer la Guía para facilitar el diálogo y la reflexión a partir del texto “No es lo mismo”.
3. Responder las siguientes interrogantes ante el grupo, con base en la lectura anterior y la reflexión

a) ¿Todas las cosas tienen nombre? Si, Todas las cosas de este mundo tienen un sustantivo
que las nombra; todas las acciones un verbo que las dice y se conjuga; un adjetivo que
les da vida y las explica.
b) ¿Cada cosa debe tener un nombre? Si, es necesario para podernos referir al objeto.
c) ¿Todas las cosas deberían tener un nombre distinto? Si.
d) ¿Podemos o no inventar nombres para las cosas? Si, si podemos.
e) ¿Cómo se les pone el nombre a las cosas? Dependiendo de su forma y de la guía de
una o un conjunto de palabras que son ayudan a definirlo. ¿por qué las cosas se llaman
de esa forma? El origen no puede ser otro que la necesidad de identificar cada persona,
animal, objeto, lugar, situación, sentido, etc. Esta es la única manera a nuestro alcance
para entender el mundo que nos rodea y tratar de descifrarlo para asimilarlo, que es una
necesidad, si queremos sobrevivir.
f) ¿Quién les puso nombre a las cosas? Poetas, filósofos y generaciones antiguas. ¿por qué
podía ponerles nombre? Para comprender el universo que nos rodea y tratar de
interpretarlo y asimilarlo.
g) Si cada cosa tiene un nombre, ¿por qué una palabra puede nombrar dos objetos? Si
debe ser porque existe el plural y eso ayuda a generalizar las palabras para evitar repetir
lo mismo.
h) Una cosa que se llama de una manera, ¿puede cambiar de nombre? Si, si se puede.
i) Si cambia el nombre del objeto, ¿hay algo que cambie del objeto? No el objeto sigue
siendo el mismo. ¿cambia el objeto o cambia la idea del objeto? Puede cambiar un
poco el objeto y también la idea de este.
j) ¿Qué hace que una palabra, que generalmente es ofensiva, se utilice, pero no para
ofender? Depende mucho en el contexto que se utiliza la o las palabras.
k) ¿Por qué palabras o expresiones que serían ofensivas en un contexto, se ocupan en otros
sin que resulten ofensivas? Por que el argumento es el que define las expresiones como
ofensivas o no.
l) ¿Por qué en algunos contextos no pueden utilizarse palabras ofensivas? Porque sería una
falta total de respeto, y mala educación.
m) ¿De qué depende que una palabra pueda entenderse o emplearse de manera
negativa? Debido a que la lengua se encuentra en constante evolución, es habitual que
determinadas palabras o expresiones pasen a formar parte del malentendido en el
contexto de la situación.
4. Responder las siguientes interrogantes de manera individual y escríbelas en tu cuaderno, toma
en consideración la lectura y la reflexión 3.
a) ¿Por qué las personas cuidan lo que dicen? Podemos provocar malentendidos y
ocasionar problemas. ¿en qué situaciones? Robar, ofender, mentir o insultar.
b) ¿Por qué con unas personas no cuidamos lo que decimos y con otras sí? El cuidar de sí
es un acto vital, representado en la infinita y compleja variedad de actividades que las
personas realizamos para mantener nuestra existencia. El cuidar de nosotros mismos
como construcción humana, es el resultado de un proceso socializador, donde
aprendemos: los hábitos, las actitudes, las creencias, los valores, propios de grupos
sociales influyentes; pero también representa la autovaloración, la sensibilidad, el
compromiso que nos tengamos a nosotros mismos. Es por esto por lo que dependiendo
con quien y el contexto hablamos y nos expresamos de diversas formas.
c) ¿Qué significa «cuidar lo que se dice»? Debemos de pensar bien lo que decimos para
no perjudicarnos o tener el beneficio de lo que comunicamos.
d) ¿En qué situaciones no cuidamos lo que decimos? Cuando estamos enojados ¿por qué
debemos cuidar lo que decimos? Nuestra manera de hablar revela nuestra forma de
pensar. Es bueno que nos paremos de vez en cuando para poner atención a lo que
decimos y sentimos, y para corregirnos si descubrimos que estamos pensando en lo que
no queremos.
e) Si cuidar lo que se dice es elegir o evitar algunas palabras, ¿qué hace elegir o evitar
ciertas palabras? Algunas son confusas o engañosas, otras implican un punto de vista
con el que no estamos de acuerdo y esperamos que usted tampoco lo esté.
f) Cuando piensas, ¿evitas pensar ciertas palabras? No, porque se te vienen diversos
pensamientos y en ocasiones no son los más correctos.

Va una pareja de novios en un coche y otro automóvil los rebasa; él lanza una ofensa al otro
conductor. ¿Ha pensado para hablar? Yo creo que sí. Antes de decir algo, ¿se piensa? No lo
creo. ¿qué piensas de lo que vas a decir? No lo razona, porque lo están ofendiendo el solo
piensa en defenderse y puede hacerlo también con una ofensa al conductor del automóvil.

a) ¿Piensas todo lo que dices? No siempre pienso lo que digo. ¿es posible pensar todo lo
que se va a decir? En mi opinión yo creo que no, porque hay situaciones en donde nos
dejamos llevar por el impulso.
b) ¿Pensamos qué cosas no dicen? El hombre puede pensar en tanto en cuanto tiene la
posibilidad de ello. Ahora bien, esta posibilidad aún no nos garantiza que seamos
capaces de tal cosa.
c) Cuando hablamos, ¿pensamos en lo que van a decir los otros? Yo creo que no, solo
intentamos llevar la situación que se nos esta presentando, algunas veces después
reflexionamos si fue o no correcta nuestra forma de hablar y expresarnos.
d) ¿Pensamos todo lo que nos dicen los demás? Porque nosotros los seres humanos
tendemos a imitar lo que vemos, está es nuestra naturaleza, por eso debemos ser
cuidadosos con lo que vemos y con nuestras amistades.
Las personas somos unos imitadores natos. Imitamos lo que vemos hacer a los demás, lo
que los oímos decir e incluso lo que nos parece que sienten. Imitamos las modas, las
tendencias políticas e incluso la indignación y el desasosiego. Lo hacemos desde que
nacemos, y no dejamos de hacerlo nunca, aunque hay épocas de nuestra vida en que
este proceso de imitación está mucho más arraigado que en otras. Imitamos a las
personas que admiramos, y rehuimos imitar aquellas que no nos agradan, pero puede
ser que también las acabemos imitando, aún sin querer.

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