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INSTITUCIÓN EDUCATIVA FRANCISCO ARANGO

VILLAVICENCIO CIENCIAS SOCIALES


G2 P1 GRADO OCVTAVO
Ciencias sociales.
EJES TEMATICOS
CIENCIAS SOCIALES: Europa Potencia Mundial
I EXPLORACIÓN
Europa es el segundo continente más pequeño del mundo tras Oceanía. En realidad se trata de una gran península situada en el Hemisferio Norte
al oeste del bloque continental de Eurasia. Limita al norte con el océano Glacial Ártico; al sur con el Cáucaso, el mar Negro y el mar Mediterráneo;
al este con los montes Urales, el río Ural y el mar Caspio; y al oeste con el océano Atlántico. Cuenta con 10.530.751 kilómetros cuadrados, lo que
representa el 2% de la superficie de la Tierra. II ESTRUCTURACIÓN

1. EUROPA POTENCIA MUNDIAL

Es uno de los continentes que conforman el supercontinente euroasiático, situado entre los paralelos 36º y 70º de latitud norte. De forma
convencional y por motivos histórico-culturales es considerada un continente, tras la delimitación realizada por el geógrafo ruso Vasili Tatíshchev
quien deseaba señalar la pertenencia de Rusia a Europa y a Asia. Las fronteras de Europa y su población son objeto de controversia, ya que el
término continente puede referirse a un bien cultural y político o a distinciones fisiográficas. Andreas Kaplan describe a Europa como «una máxima
diversidad cultural en una superficie geográfica mínima». La definición más extendida es aquella que la sitúa en la mitad oriental del hemisferio
norte, limitada por el océano Ártico en el norte hasta el mar Mediterráneo por el sur. Por el oeste, llega hasta el océano Atlántico. Por el este, limita
con Asia, de la que la separan los montes Urales, el río Ural, el mar Caspio, la cordillera del Cáucaso, el mar Negro y los estrechos del Bósforo y de
Dardanelos.

Las reivindicaciones de democracia y soberanía nacional, la expansión de la industrialización y el imperialismo...


Todo ello cambia radicalmente el curso de la historia europea. Europa alcanza la cima de su poder mundial. Los cambios que exacerban las
tensiones sociales en la Europa del siglo XIX siguen teniendo una importante repercusión en la actualidad.

TRANSFORMACIÓN POLÍTICA: El siglo XIX: un tiempo de revoluciones. Inspirándose en la Revolución Francesa de 1789, gentes de toda Europa
desafiaron a las clases aristocráticas dominantes y lucharon por el desarrollo de los derechos humanos y civiles, la democracia y las
independencias nacionales. El nacionalismo surgió como una reivindicación revolucionaria que prometía a los ciudadanos más participación en la
democracia, pero de hecho tenía un tinte exclusivista, al imaginar un mundo de territorios nacionales habitados por gentes de etnias similares.
Algunos europeos visionarios, sin embargo, esperaban la unidad del continente, más allá de las lealtades nacionales.

MERCADOS Y PERSONAS: Vapor, humo, fábricas, ruido: todo anunciaba el advenimiento de la revolución industrial en gran bretaña. las fábricas
empezaron a extenderse en distinto grado por toda Europa, convirtiendo al continente en el centro mundial de la industrialización, las finanzas y el
comercio. Las innovaciones tecnológicas trajeron consigo el progreso industrial; la máquina de vapor impulsó el desarrollo de la industria pesada.
los métodos de producción se transformaron radicalmente, y grandes fábricas con miles de trabajadores empezaron a producir en masa bienes de
equipo y de consumo.

CIENCIA Y TECNOLOGÍA: Velocidad, dinamismo y fe en el progreso caracterizaban a la Europa de finales del siglo XIX. Los ferrocarriles, la
electricidad, la fotografía y las nuevas teorías científicas y médicas reforzaban el liderazgo del viejo continente en esta etapa de madurez
tecnológica. Una era de optimismo se perfilaba en el horizonte.

IMPERIALISMO: El siglo XIX estuvo marcado por la hegemonía europea en el mundo. Se extendieron imperios y se acumularon colonias, todo ello
impulsado vigorosamente por la Revolución Industrial. Las colonias proporcionaban las materias primas y los artículos de lujo destinados a
satisfacer la creciente demanda de consumo, al tiempo que ofrecían a cambio sus vastos mercados a los productos europeos. Los abusos y las
desigualdades se disculpaban como elemento necesario de la labor de «civilización» de los pueblos «salvajes». El fin gradual de la esclavitud fue
seguido de nuevas formas de intolerancia y racismo. Hacia 1914 los países europeos gobernaban cerca del 30 % de la población mundial. A finales
de 1900 solo tres Estados africanos seguían siendo independientes. Las potencias europeas acabarían repartiéndose también el mapa de Asia.

PRIMERA GUERRA MUNDIAL: El estallido de la Primera Guerra Mundial, el


primer conflicto armado industrializado y a gran escala, provocó una devastación
sin precedentes tanto en los campos de batalla como en las sociedades en
general. Los cuatro años de la guerra sacudieron Europa hasta sus cimientos,
arrastrándola hacia un conflicto mundial hasta entonces nunca visto.

TOTALITARISMO FRENTE A DEMOCRACIA: Como consecuencia de la Primera


Guerra Mundial se desintegraron viejos imperios y se crearon nuevos Estados.
Empezaron a abrirse paso el pacifismo y la idea de la integración europea. La
democracia parlamentaria se extendió por toda Europa, mientras la Unión
Soviética se convirtió en la primera dictadura comunista. Sin embargo, en 1939 la
mayoría de estas democracias habían fracasado y la mayor parte de los europeos
vivían bajo regímenes totalitarios o autoritarios que controlaban la vida pública y
privada mediante la fuerza y limitaban las libertades individuales.

SEGUNDA GUERRA MUNDIAL: La Segunda Guerra Mundial se describe a menudo como una «guerra total» sin fronteras entre soldados y civiles.
En ella, millones de personas fueron víctimas de ejecuciones en masa, deportaciones, hambrunas, trabajos forzosos, campos de concentración y
bombardeos. Bajo el poder nacionalsocialista fueron asesinadas millones de personas en limpiezas étnicas y sociales sistemáticas. Tanto por su
magnitud como por su gestión burocrática, el genocidio de los judíos europeos supuso un hecho sin parangón en la historia. Sometida al fuego
cruzado entre el nacionalsocialismo y el estalinismo, Europa Central y Oriental sufrió la guerra en su versión más brutal.

LA COSECHA DE LA DESTRUCCIÓN: Se calcula que unos 60 millones de personas —dos tercios de ellas civiles— murieron como consecuencia
de la Segunda Guerra Mundial. Pero los números por sí solos no pueden transmitir la magnitud de las tragedias personales o la catastrófica
influencia de los acontecimientos sobre diversos colectivos humanos. Los objetos aquí recopilados nos cuentan la historia humana que se
esconden detrás de los sucesos y nos empujan a reflexionar sobre la manera en que las personas asimilan la pérdida y la desgracia a tan enorme
escala.

RECONSTRUCCIÓN DE UN CONTINENTE DIVIDIDO: En1945 Europa estaba en ruinas y su población carecía de alimentos, combustibles y
vivienda. Se necesitaban de forma acuciante estrategias de supervivencia y se mantenía el racionamiento implantado en la guerra para que al
menos las necesidades básicas estuvieran cubiertas. Había millones de refugiados, exiliados y desplazados en busca todos ellos de cobijo. Europa
dependía en gran medida de la ayuda del resto del mundo.

GUERRA FRÍA: Con el lanzamiento de las bombas atómicas sobre Japón en 1945, los Estados Unidos se convirtieron en la nueva potencia
mundial. En 1949 la Unión Soviética alcanzaría la misma posición al fabricar su propia bomba atómica.

CREACIÓN DE LA SEGURIDAD SOCIAL: Los años cincuenta y sesenta supusieron, para la mayor parte de los europeos, una notable mejora de
las condiciones de vida. El crecimiento económico y la implantación del Estado del bienestar trajeron consigo mejores viviendas, educación,
atención sanitaria y servicios sociales. En Europa Occidental, la planificación estatal corrió en paralelo a la reconstrucción del sector privado. Dentro
de la órbita comunista, las economías planificadas de gestión estatal controlaban todos los recursos nacionales, interviniendo a discreción y
marcando con ello la vida cotidiana de los ciudadanos. Las diferencias entre las economías de mercado y las economías planificadas eran
inconfundibles. El control de Europa Oriental por parte de la Unión Soviética y la confrontación de esta con los Estados Unidos de América tras la
Segunda Guerra Mundial trajeron al mundo dos nuevos conceptos: Telón de Acero y Guerra Fría. Con el apoyo de los Estados Unidos, mejoraron
las condiciones para una cooperación más estrecha en Europa Occidental.

MEMORIA DE LA SHOÁ: Silencio, falta de reconocimiento, represión: esa es la forma en que el Holocausto (o Shoá, como se lo conoce en hebreo)
fue tratado en la posguerra.

Las naciones, en su ansia por rescatar su autoestima, aparcaron sus sentimientos de culpa y complicidad y se recrearon en sus propios recuerdos
de sufrimiento y privaciones. Las nuevas realidades de la Guerra Fría hicieron más fácil desentenderse de los fracasos del pasado. Hoy, sin
embargo, el reconocimiento de este crimen inaudito contra la humanidad se sitúa en el centro de todo discurso sobre la existencia de una memoria
europea.

ACTIVIDAD.

1. Elabore un cuadro como siguiente en tu cuaderno y escribe la información solicitada.

0rden País Capital MONEDA SISTEMA ESCUDO Y


POLITICO BANDERA
1.
2.
3.
Completar el cuadro con filas para todos los países europeos, en orden alfabético.
2. Elabore un mapa conceptual con los datos aportados en el texto inicial.

3. LEA ATENTAMNTE la noticia y escriba al menos 5 ideas importantes que destaquen a Europa y su influencia en las dinámicas políticas y
económicas del mundo.
4. Realice un listado de las regiones que se ven afectadas y en que forma con la problemática del texto.

La guerra en Ucrania repercute en todas las regiones del mundo

El conflicto asesta a la economía un grave golpe que frenará el crecimiento y elevará los precios.
Aparte del sufrimiento y la crisis humanitaria causados por la invasión rusa de Ucrania, toda la economía mundial sentirá los efectos de la
desaceleración del crecimiento y el aumento de la inflación.
Los efectos se transmitirán por tres canales principales. En uno, los precios más altos de productos básicos como los alimentos y la energía elevarán
aún más la inflación, lo cual a su vez erosionará el valor de los ingresos y deprimirá la demanda. En el segundo, las economías vecinas en particular
tendrán que hacer frente a perturbaciones en el comercio, las cadenas de abastecimiento y las remesas, así como a un aumento histórico de los
flujos de refugiados. Y en el tercero, la confianza mermada de las empresas y la mayor incertidumbre de los inversionistas incidirán en los precios de
los activos, endureciendo las condiciones financieras y posiblemente provocando salidas de capitales de las economías emergentes.

Rusia y Ucrania son importantes productores de materias primas, y las perturbaciones han provocado una escalada de los precios mundiales, sobre
todo de petróleo y gas natural. Los costos de los alimentos se han disparado; el trigo, del que Ucrania y Rusia exportan un 30% mundial, ha
alcanzado precios históricos.

Presiones crecientes Los precios de la energía, los cereales y los metales se han disparado desde la invasión a Ucrania, lo que presagia una
inminente aceleración de las tasas de inflación.
Aparte de las repercusiones mundiales, los países con exposiciones directas por vía del comercio, el turismo o las finanzas soportarán presiones
adicionales. Las economías que dependen de las importaciones de petróleo registrarán mayores déficits fiscales y comerciales y un aumento de la
presión inflacionaria, pero algunos exportadores, como los de Oriente Medio y África, se beneficiarán de los precios más altos.

Las subidas más drásticas de los precios de los alimentos y los combustibles pueden incrementar el riesgo de malestar en algunas regiones, desde
África subsahariana y América Latina hasta el Cáucaso y Asia Central, y es probable que la inseguridad alimentaria se agudice más en partes de
África y Oriente Medio.

Cuantificar estas repercusiones es una tarea difícil, pero desde ya resulta probable que nuestros pronósticos se revisen a la baja cuando
presentemos un panorama más completo en nuestro informe sobre las Perspectivas de la economía mundial (informe WEO, por sus siglas en inglés)
y las evaluaciones regionales.
A más largo plazo, es posible que la guerra altere fundamentalmente el orden económico y geopolítico mundial, si se produjeran una transformación
del comercio de energía, una reconfiguración de las cadenas de abastecimiento y una fragmentación de los sistemas de pagos, y si los países se
replantearan la composición de sus tenencias de monedas de reserva. El agravamiento de la tensión geopolítica acrecienta los riesgos de
fragmentación económica, sobre todo en materia de comercio y tecnología.

Europa
El costo ya es enorme en Ucrania. Las sanciones sin precedentes impuestas a Rusia reducirán la intermediación financiera y el comercio, causando
inevitablemente una profunda recesión en esos países. La depreciación del rublo está alimentando la inflación, menoscabando cada vez más los
niveles de vida de la población.

La energía es el principal canal de propagación de las repercusiones en Europa dado que Rusia es una fuente crucial de importaciones de gas
natural. Los trastornos más generalizados en las cadenas de abastecimiento también pueden acarrear consecuencias graves. Estos efectos darán
fuelle a la inflación y desacelerarán la recuperación posterior a la pandemia. Europa oriental experimentará aumentos de los costos de financiamiento
y en el número de refugiados. La región ya ha absorbido la mayor parte de los 3 millones de personas que han abandonado Ucrania
recientemente, según datos de las Naciones Unidas.
Es posible que los gobiernos europeos también deban confrontar presiones fiscales derivadas de aumentos del gasto en seguridad energética y en
presupuestos de defensa.

Si bien a nivel mundial las exposiciones externas frente a los activos rusos que se desploman son moderadas, la presiones sobre los mercados
emergentes pueden aumentar si los inversionistas optaran por buscar plazas más seguras. De igual forma, las exposiciones de la mayoría de los
bancos europeos frente a Rusia son moderadas y manejables.

Cáucaso y Asia Central


Más allá de Europa, estas naciones vecinas notarán mayores consecuencias derivadas de la recesión en Rusia y las sanciones. Los estrechos
vínculos comerciales y de los sistemas de pago traen consigo una moderación del comercio, las remesas, la inversión y el turismo, lo cual incidirá
negativamente en el crecimiento económico, la inflación y las cuentas externas y fiscales.

A los exportadores de materias primas debería beneficiarles el alza de los precios internacionales, pero también se enfrentan al riesgo de una
disminución de las exportaciones de energía si las sanciones se extienden a los oleoductos y gasoductos que atraviesan Rusia.

Oriente Medio y Norte de África


Es probable que los precios más altos de los alimentos y la energía y las condiciones financieras mundiales más restrictivas tengan fuertes
repercusiones. Egipto, por ejemplo, importa alrededor del 80% de su trigo de Rusia y Ucrania. Y, al ser un popular destino turístico de ambos países,
sufrirá una contracción del gasto de visitantes.

Las políticas para contener la inflación, como los mayores subsidios del gobierno, podrían ejercer presión sobre las ya débiles cuentas fiscales.
Además, el empeoramiento de las condiciones financieras externas puede ocasionar salidas de capital e imponer un lastre al crecimiento en los
países con niveles elevados de deuda y fuertes necesidades de financiamiento.

Las subidas de precios pueden exacerbar las tensiones sociales en algunos países, como los que adolecen de redes de protección deficientes,
pocas oportunidades de empleo, espacio fiscal limitado y gobiernos impopulares.
África subsahariana
Esta crisis pone en peligro el progreso que se estaba logrando justo cuando el continente estaba recuperándose poco a poco de la pandemia.
Muchos países de la región son especialmente vulnerables a los efectos de la guerra, precisamente por el encarecimiento de la energía y los
alimentos, la disminución del turismo y las posibles dificultades para acceder a los mercados internacionales de capital.
El conflicto ha estallado en un momento en que la mayoría de los países disponen de un margen mínimo para aplicar políticas para contrarrestar los
efectos del shock. Esto tenderá a intensificar las presiones socioeconómicas, la vulnerabilidad de la deuda pública y las secuelas duraderas de la
pandemia a las que ya se enfrentaban millones de hogares y empresas.

Los exorbitantes precios del trigo son especialmente preocupantes para una región que importa alrededor de un 85% del suministro, del cual un
tercio proviene de Rusia o Ucrania.

Las Américas
Los precios de los alimentos y la energía son el principal canal de transmisión de las repercusiones, que serán sustanciales en algunos casos. Es
probable que los precios elevados de las materias primas aceleren notablemente la inflación en América Latina y el Caribe, en donde cinco de las
principales economías ya registran una tasa anual media de 8%: Brasil, México, Chile, Colombia y Perú. Es posible que los bancos centrales tengan
que defender con más tesón la credibilidad de la lucha contra la inflación.

Los efectos del encarecimiento de las materias primas en el crecimiento varían. Los precios más altos del petróleo perjudicarán a los importadores en
América Central y el Caribe, mientras que los exportadores de petróleo, cobre, mineral de hierro, maíz, trigo y metales pueden cobrar más por sus
productos y amortiguar el impacto en el crecimiento.

Las condiciones financieras siguen siendo relativamente favorables, pero la intensificación del conflicto puede causar tensiones financieras
mundiales que, sumadas a una política monetaria más restrictiva, impondrán un lastre al crecimiento.

Estados Unidos tiene pocos lazos con Ucrania y Rusia, lo cual diluye los efectos, pero la inflación ya había tocado un máximo no registrado en cuatro
décadas antes de que la guerra incrementara los precios de las materias primas. Esto significa que los precios quizá sigan subiendo al tiempo que la
Reserva Federal empieza a elevar las tasas de interés.

Asia y el Pacífico
Los efectos derivados de Rusia probablemente sean limitados dada la falta de vínculos económicos estrechos, pero el menor crecimiento de Europa
y de la economía mundial pasará una fuerte factura a los grandes exportadores.

Los mayores efectos en las cuentas corrientes se observarán en las economías importadoras de petróleo de la Asociación de Naciones del Asia
Sudoriental (ASEAN), India y las economías preemergentes, incluidas algunas islas del Pacífico. Esta situación podría verse agravada por la
disminución del turismo en naciones que dependen del turismo ruso.

En el caso de China, los efectos inmediatos deberían ser más reducidos porque el estímulo fiscal ayudará a alcanzar la meta de crecimiento fijada
para este año de 5,5%, y porque Rusia compra una cantidad relativamente pequeña de sus exportaciones. Aun así, los precios de las materias
primas y el debilitamiento de la demanda en los principales mercados de exportación plantean nuevas dificultades.

Los efectos secundarios son similares en los casos de Japón y Corea, donde nuevos subsidios al petróleo podría atenuar los impactos. En India, los
mayores precios de la energía elevarán la inflación, que ya se encuentra en la parte superior del rango fijado como meta por el banco central.

Las presiones sobre los precios de los alimentos en Asia deberían verse aliviadas por la producción local y la mayor dependencia del arroz que del
trigo. La carestía de las importaciones de alimentos y energía elevarán los precios a los consumidores, aunque los subsidios y los topes sobre los
precios de los combustibles, alimentos y fertilizantes posiblemente amortigüen el impacto inmediato, pero con costos fiscales.

Shocks mundiales
Las consecuencias de la guerra de Rusia en Ucrania ya han conmocionado no solo a esas naciones sino también a la región y el mundo, y ponen de
manifiesto la importancia de contar con una red mundial de seguridad y mecanismos regionales para proteger las economías.
«Vivimos en un mundo más propenso a los shocks», declaró la Directora Gerente del FMI ante periodistas en una rueda de prensa en Washington.
«Y necesitamos un frente mancomunado para encarar los shocks que vendrán».

Aunque algunos efectos quizá no se materialicen en su totalidad por muchos años, ya hay señales claras de que la guerra y la consiguiente escalada
de los costos de materias primas esenciales complicarán la tarea de las autoridades en algunos países de encontrar el difícil equilibrio entre contener
la inflación y apoyar la recuperación económica tras la pandemia.

Alfred Kammer es Director del Departamento de Europa del Fondo Monetario Internacional desde agosto de 2020. En esta función, supervisa el
trabajo del FMI con Europa.

Con anterioridad, el Sr. Kammer fue Jefe de Gabinete de la Oficina de la Directora Gerente, donde asesoraba a la Directora Gerente sobre
cuestiones operativas y estratégicas y supervisaba las actividades del equipo de dirección; Subdirector del Departamento de Estrategia, Políticas y
Evaluación, donde supervisaba el trabajo sobre la estrategia y la política de supervisión del FMI; Subdirector del Departamento del Oriente Medio y
Asia Central, donde supervisaba la evolución económica regional y cuestiones relacionadas con el sector financiero; Director de la Oficina de Gestión
de la Asistencia Técnica, donde asesoraba a la dirección sobre las operaciones de asistencia técnica y supervisaba la obtención de fondos y las
asociaciones globales para el fortalecimiento de las capacidades, y Asesor del Subdirector Gerente. El Sr. Kammer también fue Representante
Residente del FMI en Rusia. Desde que se incorporó al FMI, el Sr. Kammer ha trabajado con países de África, Asia, Europa y Oriente Medio, y se ha
encargado de un amplio abanico de cuestiones estratégicas y de política económica.

Jihad Azour es Director del Departamento de Oriente Medio y Asia Central del Fondo Monetario Internacional, donde supervisa la actividad
institucional en Oriente Medio, Norte de África, Asia Central y el Cáucaso.
Azour fue Ministro de Hacienda del Líbano en 2005-08, cargo en el cual coordinó la implementación de importantes reformas, como la modernización
del sistema tributario y aduanero del país. Previa y posteriormente, ocupó una amplia variedad de cargos en el sector privado, como en McKinsey y
en Booz and Co., donde fue vicepresidente y asesor ejecutivo principal. Antes de ingresar al FMI en marzo de 2017, fue socio gerente de la empresa
de inversiones Inventis Partners.

Azour tiene un doctorado en Finanzas Internacionales y un título de posgrado en Economía y Finanzas Internacionales del Institut d'Etudes Politiques
de París. Realizó estudios sobre las economías emergentes y su integración a la economía mundial como parte de su posdoctorado en la
Universidad de Harvard. Es autor de varios libros y artículos sobre cuestiones económicas y financieras, y tiene una larga trayectoria docente.

Abebe Aemro Selassie es el Director del Departamento de África del FMI, del que antes fue Subdirector. En el FMI, ha dirigido los equipos de trabajo
encargados de Portugal y Sudáfrica y de la elaboración de Perspectivas económicas regionales: África subsahariana. También ha trabajado con
Tailandia, Turquía y Polonia, así como en una amplia gama de temas de política económica. De 2006 a 2009 fue Representante Residente del FMI
en Uganda. Antes de incorporarse al FMI, trabajó para el Gobierno de Etiopía.
Ilan Goldfajn es Director del Departamento del Hemisferio Occidental. Fue Gobernador del Banco Central do Brasil (BCB) entre mayo de 2016 y
febrero de 2019. Durante su mandato en el BCB, supervisó la implementación de importantes cambios regulatorios que abrieron la puerta a nuevos
participantes en el sector de servicios financieros, impulsó la innovación y digitalización, y promovió el crecimiento de las empresas de tecnofinanzas,
lo que ha tenido un impacto positivo en el sector financiero de Brasil. En 2017, fue elegido Banquero Central del Año por la revista The Banker, y el
año siguiente, fue nombrado Mejor Banquero Central por la revista Global Finance.
En el sector privado, el Sr. Goldfajn ocupó diversos cargos, como el de Economista Jefe y Socio de Itaú Unibanco, Socio fundador de Ciano
Investimentos, y Socio y Economista en Gávea Investimentos, tres instituciones financieras de primera línea en Brasil. Más recientemente, se
desempeñó como Presidente del Consejo Asesor de Credit Suisse Brasil. También ha trabajado como consultor para diversos organismos
internacionales, como el Banco Mundial, las Naciones Unidas y el FMI.

Dictó clases de economía en varias universidades de Brasil y Estados Unidos, y ha publicado numerosos artículos y libros. Tiene un doctorado en
Economía del Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT), una maestría en Economía de la Pontifíca Universidade Católica y una licenciatura en
Economía de la Universidade Federal, ambas en Río de Janeiro, Brasil.

Chang Yong Rhee es el Director del Departamento de Asia y el Pacífico del FMI. Antes de incorporarse al FMI, ocupó el cargo de Economista
Principal en el Banco Asiático de Desarrollo (BAsD). Fue Portavoz Principal del BAsD sobre tendencias económicas y de desarrollo, y supervisó el
Departamento de Economía y Estudios. Fue Secretario General de la Comisión Presidencial de la cumbre del G-20 en la República de Corea. Antes
de incorporarse a la Comisión de Servicios Financieros (FSC), fue Profesor Titular de Economía en la Universidad Nacional de Seúl y Profesor
Adjunto en la Universidad de Rochester. Asimismo, con frecuencia y de manera activa, se desempeñó como Asesor Político del Gobierno de Corea,
en la Oficina del Presidente, el Ministerio de Finanzas y Economía, el Banco de Corea, el Depósito de Valores de Corea y el Instituto Coreano para el
Desarrollo. Su labor de investigación se centra en la macroeconomía, la economía financiera y la economía coreana, y ha publicado varias obras
relacionadas con estos campos. Se doctoró en Economía por la Universidad de Harvard y obtuvo su licenciatura de Economía en la Universidad
Nacional de Seúl.
INFONET. https://historia-europa.ep.eu/es/exposicion-permanente/europa-una-potencia-mundial
https://es.wikipedia.org/wiki/Potencia_mundial https://es.wikipedia.org/wiki/Primera_potencia_mundial
https://es.wikipedia.org/wiki/Superpotencia_internacional https://es.wikipedia.org/wiki/Equilibrio_de_poder.

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