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Docente:

Dr. José Rivero Corcuera


I. INTRODUCCIÓN
Para el entendimiento del comportamiento de los
elementos químicos , la distribución electrónica
(teoría atómica) y la Tabla Periódica son de gran
ayuda. Pero, existe un vacío en cuanto al
comportamiento de cada elemento al interactuar
con otros semejantes o diferentes. Para ello hay
modelos y conceptos de enlaces químicos.
Las sustancias forman enlaces químicos como
resultado de interacciones electrónicas, estos
enlaces forman la gran diversidad de compuestos
conocidos. Debemos repasar que las cargas
opuestas se atraen y las contrarias se repelen.
II. ENLACE QUÍMICO.
El enlace químico es la fuerza que mantiene unidos a
los átomos (enlace interatómico) para formar
moléculas o formar sistemas cristalinos (iónicos,
metálicos o covalentes) y moléculas (enlace
intermolecular) para formar los estados condensados
de la materia (sólido y líquido), dicha fuerza es de
naturaleza electromagnética (eléctrica y magnética),
predominante fuerza eléctrica.

PRINCIPIO FUNDAMENTAL:
Los átomos y moléculas forman enlaces químicos con
la finalidad de adquirir un estado de menor energía,
para asa lograr una condición de mayor estabilidad.
En el caso de los átomos, la estabilidad se reflejara en
un cambio de su configuración electrónica externa.
2.1. ESTRUCTURA DE LEWIS.
Para tratar de explicar por qué los átomos forman enlaces, G.N. Lewis
propuso que: “Un átomo es más estable cuando su capa externa está
llena o contiene ocho electrones y no cuenta con electrones de mayor
energía”. De acuerdo con esto, un átomo cederá, aceptará o compartirá
electrones para poder disponer de una capa externa llena o una capa
externa que contenga ocho electrones; esta teoría se llama “ La Regla
del Octeto”. Cuando se representan los electrones en torno a un átomo,
como en la fig. 01, no se muestran los electrones interiores, solamente
se hacen los externos, porque sólo son ellos los que participan en la
formación de los enlaces. Cada electrón de valencia se representa con
un punto.
2.2. TIPOS DE ENLACES QUÍMICOS .
Los enlaces químicos pueden ser iónicos y covalentes (polares y no
polares), metálicos. Existen otras fuerzas intermoleculares: Enlace
dipolo-dipolo, enlace puente de hidrógeno, fuerzas de dispersión o de
London.
E IONICO
N INTERATOMICOS
L COVALENTE
A
C METALICO
E

Q DIPOLO-DIPOLO
U
I INTERMOLECULARES ENLACE PUENTE
M DE HIDROGENO
I
C FUERZAS DE LONDON
O

Fig. 01. CLASIFICACION DE ENLACES QUMICOS


2.2.0. FUERZAS INTERATÓMICAS
2.2.1. ENLACES IÓNICOS
Los electrones se transfieren completamente de un átomo a otro.
Durante este proceso de perder o ganar electrones cargados
negativamente, los átomos que reaccionan forman iones. Lo iones
cargados de manera opuesta se atraen entre ellos a través de
fuerzas electroestáticas que son la base del enlace iónico.
Por ejemplo, durante la reacción del sodio con el cloro:
sodio (en la derecha) pierde su única valencia de electrones al cloro
(a la derecha), resultando en un ión de sodio cargado positivamente
(izquierda) y un ión de cloro cargado negativamente
Note que cuando el sodio pierde su electrón de valencia, se hace
más pequeño, mientras que el cloro se hace más grande cuando
gana una valencia de electrón adicional. Esto es típico de los
tamaños relativos de iones a átomos. Después que la reacción tiene
lugar, los iones cargado Na+ y Cl- se sujetan gracias a las fuerzas
electroestáticas, formando así un enlace iónico.
Esta última característica es un resultado de las fuerzas
intermoleculares (fuerzas entre las moléculas) en los sólidos
iónicos. Si consideramos un cristal sólido de cloruro de sodio, el
sólido está hecho de muchos iones de sodio cargados
positivamente (dibujados a debajo como pequeñas esferas
grises) y un número igual de iones de cloro cargados
negativamente (esferas verdes). Debido a la interacción de los
iones cargados, los iones de sodio y de cloro están organizados
alternadamente como demuestra el esquema a la derecha.
Cada ión de sodio es atraído igualmente por todos sus iones de
cloro vecinos, y de la misma manera por la atracción del cloruro
de sodio. El concepto de una sola molécula no aplica a cristales
iónicos porque el sólido existe como un sistema continuo.
Sólidos iónicos forman cristales con altos puntos de fusión
debido a las a las grandes fuerzas entre dos iones vecinos.
Fig. 02a. Enlace iónico del NaCl
Fig. 02b. Enlace iónico del NaCl
Tabla 01. Electrones de valencia
Los compuestos iónicos comparten muchas
características en común:
* Los enlaces iónicos se forman entre metales y no
metales.
Al nombrar compuestos iónicos simples, el metal
siempre viene primero, el no metal segundo (por
ejemplo, el cloruro de sodio).
* Los compuestos iónicos se disuelven fácilmente en el
agua y otros solventes polares.
* En una solución, los compuestos iónicos fácilmente
conducen electricidad.
* Los compuestos iónicos tienden a formar sólidos
cristalinos a temperaturas muy altas.
2.2.2. ENLACES COVALENTES.
El segundo mayor tipo de enlace atómico ocurre cuando los
átomos comparten electrones. Al contrario de los enlaces
iónicos en los cuales ocurre una transferencia completa de
electrones, el enlace covalente ocurre cuando dos (o más)
elementos comparten electrones. El enlace covalente
ocurre porque los átomos en el compuestos tienen una
tendencia similar hacia los electrones (generalmente para
ganar electrones). Esto ocurre comúnmente cuando dos no
metales se enlazan. Ya que ninguno de los no elementos
que participan en el enlace querrán ganar electrones, estos
elementos compartirán electrones para poder llenar sus
envolturas de valencia.
Un buen ejemplo de un enlace covalente es ese que ocurre
entre dos átomos de hidrógeno. Los átomos de hidrógeno
(H) tiene un electrón de valencia en su primera envoltura.
Puesto que la capacidad de esta envoltura es de dos
electrones, cada átomo hidrógeno 'querrá' recoger un
segundo electrón. En un esfuerzo por recoger un segundo
electrón, el átomo de hidrógeno reaccionará con átomos H
vecinos para formar el compuesto H2. Ya que el compuesto
de hidrógeno es una combinación de átomos igualados, los
átomos compartirán cada uno de sus electrones
individuales, formando así un enlace covalente. De esta
manera, ambos átomos comparten la estabilidad de una
envoltura de valencia.
A) ENLACE COVALENTE POLAR.
El compartimento de electrones se da en la molécula, pero existe
la tendencia de alguno de los átomos a ganar densidad
electrónica, debido a que trata de atraer los electrones del
átomo ligado. No llega a ser iónico porque el átomo afectado
ofrece resistencia a ceder completamente la densidad
electrónica , como en un enlace iónico.
Ejemplos: CHCl3 , HCl, NH3
B) ENLACE COVALENTE NO POLAR
En este caso, los átomos tienen fuerzas equilibradas, debido a
que los vectores de fuerzas se anulan o porque pasa
desapercibido la «ganancia» de nube electrónica por parte de
uno de ellos, siendo prácticamente cero la resultante de fuerzas.
Ejemplos: CO2, CCl4, N2, O2.
Fig. 03. Enlace covalente polar del metano
(CH4)
2.2.3. ENLACE METÁLICO
El enlace metálico explica muchas características
físicas de metales, tales como fuerza, maleabilidad,
ductibilidad, conducción de calor y de la electricidad,
y brillo o lustre (devuelven la mayor parte de la
energía lumínica que reciben).
La vinculación metálica es la atracción electrostática
entre los átomos del metal o cationes y los electrones
deslocalizados. Esta es la razón por la cual se puede
explicar un deslizamiento de capas, dando por resultado
su característica maleabilidad y ductilidad.
Los átomos del metal tienen por lo menos un electrón de
valencia, no comparten estos electrones con los átomos
vecinos, ni pierden electrones para formar los iones. En
lugar los niveles de energía externos de los átomos del
metal se traslapan. Son como enlaces covalentes
identificados.
Características de los metales
Sólidos a temperatura ambiente, excepto el mercurio. El enlace metálico es
característico de los elementos metálicos. Es un enlace fuerte, primario,
que se forma entre elementos de la misma especie. Al estar los átomos tan
cercanos unos de otros, interaccionan sus núcleos junto con sus nubes
electrónicas, empaquetándose en las tres dimensiones, por lo que quedan
los núcleos rodeados de tales nubes. Estos electrones libres son los
responsables de que los metales presenten una elevada conductividad
eléctrica y térmica, ya que estos se pueden mover con facilidad si se
ponen en contacto con una fuente eléctrica. Los metales generalmente
presentan brillo y son maleables. Los elementos con un enlace metálico
están compartiendo un gran número de electrones de valencia, formando
un mar de electrones rodeando un enrejado gigante de cationes. Muchos
de los metales tienen puntos de fusión más altos que otros elementos no
metálicos, por lo que se puede inferir que hay enlaces más fuertes entre los
distintos átomos que los componen. La vinculación metálica es no polar,
apenas hay diferencia de electronegatividad entre los átomos que
participan en la interacción de la vinculación (en los metales,
elementales puros) o muy poca (en las aleaciones), y los electrones
implicados en lo que constituye la interacción a través de la
estructura cristalina del metal.
2.3.0. FUERZAS INTEMOLECUALRES

2.3.1. Fuerzas de orientación o de Keeson (dipolo-dipolo):


Este tipo de interacción aparece solamente entre moléculas polares.
Además, son proporcionales a los valores de los momentos dipolares de
las moléculas.
Esta interacción se produce por las atracciones electrostáticas que se
producen entre la zona cargada negativamente de una molécula y
la positiva de otra, lo que provoca que las moléculas se vayan
orientando unas con respecto a otras.
Así, por ejemplo, si las moléculas polares constituyen un gas (por
ejemplo SO2, HCl, etc.) y están sometidas a fuerzas de orientación de
cierta importancia, este gas será fácilmente licuable. Al disminuir
ligeramente la temperatura, decrece la agitación térmica, los dipolos se
orientan entre sí, las moléculas se asocian y se produce un estado más
condensado (líquido). Estas fuerzas de orientación influyen en el
alejamiento del comportamiento
Fig. 04. Ion dipolo – dipolo.
2.3.2. Fuerzas de dispersión o de London:
Son fuerzas muy débiles, aunque aumentan con el número de electrones de la
molécula.
Todos los gases, incluyendo los gases nobles y las moléculas no polares, son
susceptibles de ser licuados. Por ello deben de existir unas fuerzas atractivas
entre las moléculas o átomos de estas sustancias, que deben ser muy débiles,
puesto que sus puntos de ebullición son muy bajos.
La distribución electrónica alrededor del núcleo positivo es esférica, de manera
que no hay momento dipolar neto; pero, como los electrones están en
movimiento, puede haber en cualquier instante un desbalance de la
distribución electrónica en el átomo. Esto quiere decir que puede
autopolarizarse momentáneamente. Este átomo polarizado induce un
momento dipolar en el vecino, que a su vez crea el mismo efecto en sus
vecinos y el efecto se va propagando por toda la sustancia.

2.3.3. Enlace puente de hidrógeno:


Es un tipo de enlace especial entre el hidrógeno y los átomos muy
electronegativos como F, O, N. Ver fig. 03.
Fig. 05. Fuerzas de dispersión (London) ( Van
der Waals)
Fig. 06. Enlace puente de hidrógeno.
3.0.ESTRUCTURA LEWIS

NOTACION O FORMULA DE LEWIS:


Es la representación convencional de los electrones de valencia
(electrones que intervienen en los enlaces químicos), mediante el uso
de puntos o aspas que se colocan alrededor del símbolo del elemento.
En general para los elementos representativos (recordar que el numero
de grupo indica el numero de electrones de valencia) tenemos:
Fig. 07. Enlace covalente del flúor.
Fig. 08. Red cristalina del
diamante.
Fig. 09. Diamantes en bruto.
III. FORMAS MOLECULARES.
Hay una gran cantidad de formas moleculares, pero se ha agrupado de
manera que tengan características semejantes. Esta clasificación hace que
tengamos mejor entendimiento y facilita el estudio de estas moléculas. Se
han clasificado en 5 formas diferentes:

4.1. FORMA LINEAL.


Ocurre cuando todos los átomos están en línea recta, el ángulo formado es
el mismo del átomo central. Es de 180º.

4.2. FORMA TRIANGULAR PLANAR.


Existen cuatro átomos que están en el mismo plano. El átomo central está
unido a tres átomos, los cuales se localizan en los vértices de un triángulo
equilátero. Angulos de 120º.

4.3. FORMA TETRAEDRICA.


El átomo central está en el centro y dentro de una pirámide tetragonal que
tiene cuatro caras. Los átomos ligantes se encuentran en las esquinas del
tetraedro. Tiene ángulos de enlace de 109,5º.
Fig. 10. Diagrama de las formas
moleculares.
Fig 11. MOLECULA TETRAEDRICA DEL
METANO
V. FORMAS MOLECULARES.

4.4. FORMA BIPIRAMIDE TRIGONAL.


Consiste en dos pirámides triangulares similar a los tetraedros, que
tienen una cara común. Tiene un átomo central rodeado de 5 átomos
ligantes. Este átomo se halla en el centro del plano triangular compartido
por la pirámide superior e inferior, los 5 átomos restantes se encuentran
en las esquinas de la BPT. En esta clase de moléculas, el ángulo de
enlace no es el mismo. Los enlaces situados en el plano triangular son
de 120º y los ángulos de enlace del átomo central con el plano inferior y
superior son de 90º.

4.5. FORMA OCTAEDRICA.


Es una figura geométrica que tiene 8 caras triangulares iguales.
Podemos pensar en una pirámide de base cuadrada, la misma que es
compartida para las dos pirámides que se forman. Dispone de 6
esquinas y ocho caras.
El átomo central se rodea de 6 átomos, el mismo que se encuentra en el
centro del cuadrado plano que pasa por la mitad del octaedro. Los 6
átomos enlazados se encuentran en las esquinas del octaedro y forman
90º.
FIG. 12 MOLECULA DE FORMA BIPIRAMIDE
TRIGONAL.
Fig. 13. Red octaédrica
molecular
Fig. 14. El rubí Fig. 15. Modelo
(octaedro) molecular octaédrico

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