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TRADUCIDO POR LOS LIBROS SON MI

DEBILIDAD
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Derechos de autor
Contenido
Prefacio
Predicador
Lista de reproducción
Capítulo 1
Capitulo 2
Capítulo 3
Capítulo 4
Capítulo 5
Capítulo 6
Capítulo 7
Capítulo 8
Capítulo 9
Capítulo 10
Capítulo 11
Capítulo 12
Capítulo 13
Capítulo 14
Capítulo 15
Capítulo 16
Capítulo 17
Epílogo
También por Madison Faye
Lista de correo
Sobre el Autor
Aviso de copyright
PREDICADOR
MADISON FAYE

Derechos de autor © 2020 Madison Faye

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CONTENIDO
Prefacio
Predicador
Lista de reproducción
Capítulo 1
Capitulo 2
Capítulo 3
Capítulo 4
Capítulo 5
Capítulo 6
Capítulo 7
Capítulo 8
Capítulo 9
Capítulo 10
Capítulo 11
Capítulo 12
Capítulo 13
Capítulo 14
Capítulo 15
Capítulo 16
Capítulo 17
Epílogo
También por Madison Faye
Lista de correo
Sobre el Autor
Aviso de copyright
PREFACIO
Querido lector,

Si bien este libro trata con bastante claridad sobre la religión, no pretende ser insultante o irrespetuoso de ninguna
manera. Tampoco está escrito para ser. Principalmente, este libro trata sobre querer lo que no puedes, o no deberías
tener, y querer lo prohibido. Y seamos realistas, todos sabemos que la fruta prohibida generalmente tiene el sabor más
dulce ...
Entonces, si el sexo mezclado con la religión es algo que podría no sentirte bien contigo, tal vez dale un pase a
este. Pero, si tienes sed de un pequeño pecado, abróchate el cinturón, di una oración y sumérgete.
Nos vemos en la iglesia;).

-Madison
PREDICADOR
Bendíceme, porque he pecado.
Tenía pensamientos impuros, tentaciones de la carne. He albergado lujuria, y para el último hombre debería estar
albergándola. Un hombre de Dios, nada menos.
Excepto que este hombre no es un ángel. Él no es santo. De hecho, él podría ser el diablo. Solo Satanás mismo podría
prender fuego a mi piel y enviar escalofríos, deseos sucios y deseos carnales a través de mi alma. Ningún hombre
piadoso me miraría como si quisiera devorarme por completo, o despedazar mi inocencia e inhibiciones. Por. Trozo.
Dice que está aquí en Canaan, Georgia, para salvar nuestras almas. Un predicador viajero aquí para hablar el
evangelio y librarnos del mal. Pero un predicador no debe ser construido para el pecado, como él. Ningún pastor
debería tener labios que debiliten su rebaño, ni manos que me hagan doler, ni un cuerpo que me enseñe el verdadero
significado del pecado original.
Gabriel Marsden es un lobo con piel de cordero, y me está extraviando. Me está llevando a la tentación, y no puedo,
y no lo haré, decir que no.
Pero ya sabes todo esto, ¿verdad, predicador? Ya conoces cada detalle de esta sórdida historia. Porque ese hombre?
Ese hombre eres tú .
El diablo bajó a Georgia. Y que Dios me ayude, creo que ya estoy perdido.

LISTA DE REPRODUCCIÓN
Jesús personal - Johnny Cash
Hijo de un hombre predicador - Dusty Springfield
Cuatro vientos - Ojos brillantes
Jesús, Etc. - Wilco
Fallin 'libre - Tom Petty
Samson - Regina Spektor
(Antichrist Television Blues) - Arcade Fire
Perder mi religión - REM
A Little's Enough - Ángeles y ondas radiales
Pequeña Religión Sucia - Warren Zebon
Isaías - Noah Gundersen
Aleluya - Jeff Buckley
CAPÍTULO UNO
GABRIEL
"Y LO! ¡La ira del señor fue cruel y terrible sobre los pecadores malvados! ¡Si eres humilde delante de mí, tus
diezmos te ascenderán al Reino de los Cielos!
El momento es jodidamente perfecto también. Golpeo el púlpito con fuerza en el púlpito justo cuando la música de
órgano grabada toca su crescendo, sonando a través de los parlantes metálicos al lado del Winnebago. Para florecer
más, salpico un puñado de agua mezclada con purpurina y jabón de burbujas del tazón junto a mí en el aire. La luz
lo atrapa y brilla a mi alrededor cuando cae al suelo, y la multitud reunida jadea y ooo's y aaah's.
Se lo comen a la mierda . Por supuesto que lo hacen, y sabía que lo harían, al igual que sé que cada multitud que se
reúne alrededor de mi Winnebago o debajo de mi tienda se va a poner los pantalones por mi marca especialmente
dramática de sermones de fuego y azufre.

"¡S.M! ¡Destierra a los malvados de en medio de ti y otorga tus dones y diezmos sobre los escalones del templo!
El truco es sugerir, no preguntar. Usted sugiere que vaciar sus bolsillos en el cubo de mierda al pie del
púlpito. Usted sugiere que el dinero en su bolsillo o bolso, o en su casa otra colchón es su boleto de ida a la tierra de la
salvación, veranos interminables, sonrisas, jugando tejo con el único Jesucristo, o lo que coño Es la gente piensa que
está esperando al otro lado.
A la mierda, si está haciendo líneas de golpe con el culo de Mary Magdalene con Paul y Matthew, eso es lo que les
estoy dando. Eso es lo que les estoy vendiendo , por el bajo, bajo precio de todo lo que puedo hacer que tosen y mi
vergüenza. Pero, mierda, ese stock se agotó hace años y millas.

“¡Los poderosos triunfarán sobre los impíos! ¡YE, yo soy el SEÑOR! ¡Y heriré a los paganos entre ustedes! ¡Trae
diezmos sobre mi iglesia, y mi luz te guiará a casa! ¿Puedo obtener un aleluya!

Ooooh ahí está. Como música para mis jodidos oídos. No, no el coro de aleluyas que me devuelven la llamada, o los
amens gritando fervientemente. Me refiero al sonido del dinero golpeando el fondo de ese cubo de
colecciones. Sonrío y sonrío desde mi percha detrás del púlpito al primer cliente, una cosa vieja y frágil que agarra
un monedero del siglo pasado. Pero maldita sea si ese bolso no parece tener fondo. Ella sigue cavando en lo
profundo y sacando puñados de monedas y cargando billetes y arrojándolos directamente.

"¡Bendito seas, predicador!" Ella canta, sonriéndome mientras gira la jodida cosa y la vacía en el cubo.
"No, querido", sonrío ampliamente y piadosamente. " Te bendigo ".
Después de eso, es como un guión que se desarrolla. Una vez que el primero comienza a sentirse caritativo, el resto
lo seguirá. Siempre lo hacen, y seguro que lo hacen aquí y ahora. Nadie quiere quedarse atrás frente a Jesús. Nadie
quiere quedarse atascado con el último asiento al lado de los baños en el autobús hasta el cielo.
Uno por uno, y luego en hordas, la multitud reunida me trae su efectivo ganado con esfuerzo y lo deposita en el
cubo de donaciones. Si todavía tuviera un alma, podría sentir una punzada de culpa por esto. Afortunadamente,
abandoné a ese molesto hijo de puta hace años.
"¡Mirad! ¡Mi reino se abre para ti! ¡Porque echarás a un lado a los pecadores y a los paganos y los pisotearás en el
polvo cuando salgas a traer diezmos a mis puertas celestiales!
Joder, nada de esto es de la Biblia. Quiero decir, ni siquiera jodidamente cerca. Pero arrojas algunos "sí" y algunos
"deberías" y un montón de mierda sobre los malvados y los condenados, y nadie se asombra. No les
importa Algunos de ellos podrían incluso saberlo, pero ninguno de ellos le presta atención. Mis clientes son
humildes y humildes. Son los perdidos, que buscan desesperadamente respuestas y salvación. Podrías decir que
estoy tirando estupideces, o llamarme un fraude, o un charlatán. Me han llamado estafador, estafador, vendedor
ambulante, bastardo de rata, y mucho, mucho peor.

¿Pero sabes que? Lo tengo. Los palos y las piedras no romperán estos huesos, y las palabras son solo
jodidas palabras . Las palabras son un argumento de venta, y soy el mejor vendedor de mierda que cualquiera de
estos yokels haya visto.
Al menos, eso espero, porque si no lo hago, es cuando salgo corriendo de la ciudad en tren.
¿Pero sabes que? ¿Y qué si es una mierda? Así es la televisión. Así es el puto Facebook.

Todos están vendiendo mentiras y la promesa de salvación, de una forma u otra, y por lo que sea que consideres
salvación. Empresas de bebidas alcohólicas, fabricantes de pastillas, productores de películas.

Están todos los que la venta de su propia marca de iluminación y la salvación de la tormenta de mierda sin fin que es
la vida. Entonces, ¿qué tiene de malo vender a la gente la comodidad de saber que hay un lugar para ellos en la
cancha de los playoffs de tejo de Jesús?
El dinero sigue tintineando, y sonrío y miro el gran cielo de Georgia y el cálido y húmedo sol de verano. Respiro
hondo y mi sonrisa se ensancha. He estado en Dakotas y el este de Montana, y un poco de Wyoming durante los
últimos meses, y ha sido jodidamente miserable. Las noches frías, los días tristes y la gente del norte son una marca
diferente de rube. Se aferran a esas billeteras un poco más apretadas que estas personas.
Pero Dios bendiga la hospitalidad sureña, eso es todo lo que diré sobre eso.
Dejé el norte atrás para la temporada, y Canaan, Georgia, es mi primera parada en lo que mi instinto me dice que
será una pequeña gira muy rentable por el país de la Biblia. En mi industria, el verano en el sur es como disparar
pescado en un barril. Con una bazuca.
La música de órgano sigue sonando a través de los altavoces, y el dinero sigue cayendo en el cubo. Oh, pero estoy
empezando aquí. Ni siquiera he comenzado a sacudir esta ciudad. La música se apaga y respiro hondo. Los vigilo,
cuadrando mis anchos hombros y levantando mis manos en el aire mientras cierro los ojos con fuerza. Cómete el
corazón, Billy Graham.
“¡Hermanos! Hermanas! ¡Compañeros hijos de nuestro Señor! Yo bramé. Incluso agrego un pequeño timbre a mi voz
para bajarme debajo del Mason-Dixon. Este chico de Carolina no ha olvidado todo acerca de dónde vino, después de
todo.
“¡Quién de ustedes necesita ser limpiado ante el Señor! ¡S.M! ¡Porque eras inmundo, y mis aguas te hicieron
puro! ¡Te perdiste y mi suave lavado te encontró!
Estoy genuinamente impresionado por mi capacidad de sacar oro puro de mi boca cuando quiero.
Con un torbellino dramático, doy la vuelta y salgo del pequeño escenario al lado del Winnebago y camino hacia la
gran cosa cubierta de lona. Agarro el borde, y con un movimiento, saco la lona, revelando el enorme tanque de
bautismo de cien galones. Estas jodidas cosas se vuelven locas . Afortunadamente, este en particular fue donado
generosamente por un rico, uh, feligrés en Colorado el año pasado. La cosa es una puta para cargar en el remolque en
la parte trasera del Winnebago, pero es una máquina de impresión de dinero.

Los ooo's y ahhh de la multitud me hacen sonreír. El primer día, y esto ya se perfila como un gran recorrido.
Con otra floritura, me quito la bata que fluye. Estoy usando un traje de baño y una camiseta blanca debajo, y me
acerco a la plataforma y luego lentamente desciendo las escaleras hacia el agua. Flexiono mis músculos, ruedo los
hombros y doblo el cuello, y la multitud comienza a formar una línea, con el dinero apretado en sus ansiosos
puños. Dios, es como un reloj, cada vez. Más allá de ellos, puedo ver más autos que se detienen en el estacionamiento
al lado del campo que he instalado en las afueras de la ciudad. Más clientes ansiosos vienen corriendo por la hierba,
agitando su dinero.
Sonrío y ayudo al primer hombre que entra después de que deja caer su dinero en la caja. Murmuro ... bueno, algo,
pero a quién le importa, y luego lo sumerjo en el agua. Él aparece farfullando y sonriendo ante los vítores de sus
amigos.
"¡Bendito seas, Predicador Gabriel!" él brota, agarrando mis manos. "¡Te bendigo por tu trabajo!"
"No es más que un llamado, mi hermano en Cristo, hermano Sam", le digo suavemente.
Su sonrisa vacila solo por un segundo. "Es Anthony", espeta. Me acaba de decir su nombre hace unos
segundos. Whoops Pero solo sonrío y estrecho sus manos en las mías.

“Hermano Anthony, lo siento, es solo que me recuerdas a un querido, querido amigo mío que estaba visitando antes
de venir a tu maravilloso pueblo. Un alma verdaderamente justa, Sam lo es. Verdaderamente, un hombre de Dios y
de Cristo, y un hombre cuyo lugar se salva con una cinta de oro en Su Reino ". Mi sonrisa se ensancha y aprieto mis
manos. “Igual que tú, hermano Anthony. Perdóname mi fumble. Es simplemente que estoy tan conmovida por tu
camino despejado hacia las puertas abiertas y nacaradas de San Pedro.
Anthony me mira y me da la mano fervientemente con una lágrima en el ojo.
" Bendito seas , Predicador Gabriel", lloriquea. "¡Salud!"
Un oscar. Merezco un maldito Oscar por esta mierda. Este es un método que actúa como Daniel Day-
Lewis nunca podría lograrlo.

A continuación, ayudo a una mujer de mediana edad y a su hermana. Un hombre mayor y su hijo adulto son los
siguientes, seguidos de una abuela que también insiste en traer a su pequeño perro. Lo abigarrado casi me quita la
puta mano antes de que pueda apartarla a tiempo. Pero ella lo compensa pagando el triple. Entonces, ya sabes,
bienvenido al cielo, o lo que sea.
La línea sigue moviéndose, el dinero sigue aterrizando en la caja, y los tontos pobres, es decir, los clientes, se
sumergen sin ceremonias en el tanque hasta que haya terminado con todos ellos. Está borroso, y estoy empezando a
preguntarme si esta es una ciudad seca o no porque estoy sin alcohol en Winnebago y tengo ganas de ser estallado
esta noche, cuando de repente, miro hacia arriba.
Miro hacia arriba, el mundo se detiene, mi corazón también.
He pasado siete años fingiendo escuchar a la gente decirme acerca de ver a Dios, oir ángeles, o sentir una "presencia"
o un "toque", o lo que sea que quieran decirme. Prácticamente no recuerdo nada de eso y creo menos que eso. Pero
justo allí, en ese campo al borde de Canaan, Georgia, de pie hasta la cintura en agua chapoteando, miro hacia arriba y
veo un maldito ángel .
Es como el goteo mojado, partes de la multitud recientemente sumergidas para ella. El sol brilla sobre su cabello
rubio dorado y brilla en estos grandes, amplios e inocentes ojos azules. La suave brisa del verano susurra su modesto
vestido blanco y le quita un mechón rubio de la cara. La miro y, por primera vez en mi vida, no estoy seguro de qué
decir.
Se detiene frente al tanque de bautismo y mis ojos la recorren. Se ve tan jodidamente inocente, tan pura y
tan buena de esta forma sana. Y la miro, y quiero mancillarla .
Quiero reclamar esa jodida inocencia para los míos. Quiero poner mis manos en cada jodido centímetro de ese
pequeño e inocente cuerpo y hacer que ella realmente vea a Dios por primera vez.
Ahí estoy, hasta la cintura en un tanque bautismal, una maldita biblia a prueba de agua en una mano, himnos de
órgano que suenan sobre un altavoz de mierda, y una multitud de los recién limpiados espiritualmente que me
rodean. Y yo soy el rock jodidamente duro.
"Tú", ronroneo, levantando una mano antes de que pueda detenerme. Si este fuera un sermón mío, diría que es Dios
moviendo mi mano para hacer su voluntad. Pero no soy lo suficientemente falso como para probar esa mierda
conmigo mismo. No es Dios y un poder celestial moviéndose dentro de mí en este momento. Echo un vistazo a este
ángel y quiero reclamarla . Quiero destrozar al pequeño y lindo vestido de verano de su pequeño y hermoso cuerpo y
extender esas lindas y pequeñas piernas para mi jodida gran polla .
Créeme, es un poder al sur del cielo que mueve mi mano, si eliges creer ese tipo de mierda.
Doblo dos dedos, y sonrío cuando veo su rostro ponerse rojo carmesí.
"Ven aquí", gruño.
Da un paso más , quiero gritar. Da un paso más y te juro por lo que sea que consideres sagrado que poseeré tu jodida alma.
Y luego, ella lo hace.
Dios la ayude.
CAPITULO DOS
DALILA
"¡O H , NO , NO , EL BLANCO, CARIÑO !" Mamá me suspira con una sonrisa y sacude la cabeza mientras saca el vestido
carmesí de mis manos. "Ese no, Dalila".
Arrugo la frente. "Mamá, no voy a vestirme de blanco"
"Bueno, por supuesto que sí!" ella se ríe como si estuviera haciendo una broma obvia. “Es un bautizo, cariño. ¡Está
reafirmando tu amor por Jesús! No puedes ponerte ... se sonroja un poco y baja la voz. "No puedes vestirte
de rojo para un bautizo, Dalila", susurra con voz ronca, como si incluso mencionara el vestido rojo en la misma
oración que "bautismo" es un pecado capital. Pero, sabiendo la forma en que piensa mi mamá, muy bien podría estar
en su cabeza.
"Mamá, el vestido blanco es blanco ".
"Exactamente. Puro, limpio, casto.
"Sí, y transparente cuando se moja?"
La cara de mi madre se pone más roja que el vestido que acaba de quitarme, y se ve absolutamente
escandalizada. Lordy, me siento escandalizada ahora que lo he dicho y ahora que ella ha reaccionado así.
“ Delilah May! Ella jadea, llevándose una mano al corazón. Ella me mira severamente. "Cuídate, niña", dice ella con
tristeza. "Estás cerca de pensamientos malvados, cariño".
Pensamientos malvados. Correcto. La preocupación de que mi vestido sea completamente transparente una vez que
un extraño me sumerja en el agua es un "pensamiento perverso".
"¡Mamá!" Siseo de vuelta, un poco escandalizado. “Solo quiero decir ... ¡ya sabes! No conozco a este predicador y ...
"Es un predicador , cariño", suspira. “Un hombre de Dios. Un pastor, ven a cuidar a este rebaño sin pastor.
"Sólo temporalmente, ma!" Paul, mi hermano mayor, canta desde la otra habitación.
"¡Escuchar es un pecado, Paul !" Grito.
"No, no lo es", se ríe. "Y además, solo le estoy recordando a mamá que una vez que mi iglesia termine, no tendremos
necesidad de predicadores viajeros como este tipo Gabriel".
Mamá niega con la cabeza y se lleva la mano al corazón mientras levanta los ojos hacia el cielo. Sus labios se mueven
un poco, y sonrío. La piedad de mamá puede ser un poco demasiado a veces, pero es uno de los rasgos de carácter
que amo de ella.
"Bueno, este tipo Gabriel ", murmura mamá. "¡Solo va a estar predicando la palabra del Señor por un tiempo más
largo, y si no te pones en marcha, la vas a perder!" Ella se vuelve hacia mi. “Vestido blanco, Dalila. No seas
pecaminoso.
Yo suspiro. "Bien bien."
Ella sonríe. "Gracias cariño. ¡Ahora prepárate! Ella asoma la cabeza por la puerta de mi habitación. "¡Pablo! ¿Estas
vestida?"
“No, mamá, no puedo ir. Prometí llevarle un café a Mayer Pearson para que pudiéramos hablar sobre la zonificación
”.
La puerta principal se abre ruidosamente, y mi padre entra corriendo, sonriendo. "¡Así es!" él hace rayos. "¡Ese es mi
hijo el ministro con su propia iglesia!"
Bueno, todavía no, pero ese es el plan al menos. Paul pasó mucho tiempo siendo lo que mamá llamaría "sin rumbo",
haciendo algunos trabajos extraños, paseando por la ciudad aquí en Canaan, e incluso uno o dos años viviendo la
vida de la ciudad en Savannah, un lugar que tanto mamá como papá acuerdan que es un malvado, lugar
malvado Pero ahora con un año de escuela de divinidad en su haber, Paul aparentemente ha encontrado su vocación,
que es recaudar fondos para construir una iglesia aquí en Canaan, un pueblo pequeño sin iglesia, y ser su ministro.
"Dalila!" Papá llama desde la cocina con voz apagada.
"¡Jedediah!" Mamá sisea de vuelta, saliendo de mi habitación. "¡Es mejor que no te metas en mi horneado esta noche!"
Casi puedo escuchar a mi padre tragar la masa de tarta desde aquí, y mamá también. Ella suspira con una sonrisa y se
gira para señalarme con el dedo. "Vestido blanco, ahora mismo, cariño".
"¡Bien bien!"
¿Tú también vienes, cariño? Papá llama.
"Necesito terminar la preparación para la cena", se lamenta. "Pero si usted y Dalila no se apuren"
“¡Oh, nos estamos apurando! ¡Dalila! él bramó con su gran voz de vientre. ¡El camión se va en dos
minutos! ¡Vamonos!"
"¡Bien bien!" Cierro la puerta de mi habitación y rápidamente empiezo a tirar del vestido blanco.

D OCE MINUTOS DESPUÉS, la camioneta de papá rebota del camino de tierra en el pequeño parche de hierba donde
están estacionados los demás habitantes del pueblo.
"Él es el verdadero negocio, cariño", dice papá mientras pone el ruidoso camión en el parque y apaga el
motor. "¿Gene Parsons dijo que este chico visitó la ciudad de su primo en Tenseness el verano pasado?" Papá
silba. “Dijo que fue el mejor sermón que jamás escuchó. Lo movió de maneras que se supone que el Señor debe
conmoverte.
Papá levanta las manos manchadas de grasa del garaje y le pone una mano sobre el corazón. No lo muestra mucho,
como si realmente no mostrara mucho de sí mismo que mostraría una camisa con mangas enrolladas, pero sé que
está tocando el tatuaje del crucifijo sobre su corazón. Canaan no es exactamente un lugar donde encontrarías mucha
tinta para tatuajes, y si no conocieras a mi padre tan bien, nunca adivinarías que él también.
Pero papá pasó varios años cuando era joven y antes de conocer a nuestra madre en lo que ambos llaman una
"multitud mala". Él lo llama su pasado oscuro, o sus "cuarenta años en el desierto" antes de conocer a mamá. Hay
mucha más tinta de tatuaje además de un crucifijo debajo de su camisa, pero no le gusta hablar de eso en
absoluto. Para papá, lo único que importa es que él encontró a mi madre y encontró la salvación del Señor junto con
ella.
Luego vino Paul, y luego el taller mecánico de papá, y luego años después, yo.
Atravesamos el campo a toda velocidad hacia una multitud reunida frente a un Winnebago con un remolque
enganchado en la parte posterior.
"¿Los predicadores no suelen venir con una iglesia?"
Papá se ríe entre dientes. "Muy gracioso, cariño", jadea, tirando de mí por el campo y resoplando con fuerza. “La
gran tierra verde de Dios es una iglesia, Dalila. Y los hombres bendecidos como el Predicador Gabriel aquí son Sus
humildes siervos, vagando por Su reino trayendo salvación y consuelo sobre ellos sin ellos ”.
Yo sonrío. Eso en realidad suena muy bien, y es algo increíblemente desinteresado que hacer. Ahora estamos más
cerca, y puedo escuchar la voz del Predicador Gabriel llamando a las Escrituras, y ya puedo sentir la comodidad de
eso. A medida que nos acercamos, puedo ver a la gente del pueblo mojada y radiante parada detrás de la multitud.
"Misericordia", resopla papá. "¡Seguramente espero que no sea demasiado tarde!"
Toca a unas pocas personas que reconocemos en el hombro, que se dan vuelta y sonríen y con gusto nos dejan
pasar. Todos se ven tan serenos y pacíficos ahora que están empapados en la salvación y el amor del Señor, y mi
corazón late más rápido. Por supuesto, ya estoy bautizado, e incluso si no hay una iglesia en Canaán, los domingos
podemos, nos amontonamos en la camioneta y nos dirigimos a Huntington Parish para un servicio.
Pero hoy es especial. Palabra del predicador Los conmovedores sermones de Gabriel golpearon nuestra ciudad como
un incendio forestal incluso antes de que llegara aquí. E incluso si ya estás bautizado, dice papá, no hay nada malo
en "volver a ser bueno con el Señor de nuevo". Realmente no puedo discutir con eso.
Mi corazón late un poco más rápido cuando escucho una voz profunda, melódica y retumbante proclamar: “¡Y
vosotros! ¡Thout será limpio y amado por mí de nuevo! "
Mi, el Predicador Gabriel tiene una voz encantadora, fuerte y confiada, y sin embargo tan gentil y relajante. Suena a
humo de leña y cuero, y tal vez un poco como el whisky que Paul mantiene escondido en su habitación sobre el
garaje.
"¡Sal de las aguas curativas de Su Gloria, hermano Joseph!" él estalla, y mi corazón se acelera cuando comenzamos a
empujar a través de la última multitud ya sumergida.
Papá golpea ligeramente el hombro de Mary-Beth Coleson, y ella se gira con una gran sonrisa y asiente antes de
apartarse.
"¡Oh, él es maravilloso , Jedediah!" ella brota en voz baja.
Mi corazón late más rápido y mi sonrisa se extiende sobre mi cara a medida que crece la emoción. Papá me toma del
brazo y me atraviesa, y sonrío alegremente mientras miro al hombre parado hasta la cintura en el tanque de
bautismo ligeramente elevado.
…Mi corazón se salta un latido.
Mis piernas se traban.
Mi sonrisa titubea.
Una bola de calor candente comienza a arder dentro de mi propio cuerpo, y un escalofrío, a diferencia de lo que
alguna vez he sentido, se burla de mi piel.
El hombre parado en el tanque del bautismo está empapado. El agua corre en pequeñas gotas y riachuelos sobre
músculos abultados y ondulantes, brazos como los brazos de Sansón empuñando una mandíbula. Un cofre como
Jacob, esforzándose por luchar contra el propio ángel de Dios.
Pero ahí es donde este hombre de Dios deja de ser piadoso. Mis ojos se arrastran sobre su enorme forma, y la
camiseta blanca transparente que se aferra a sus músculos, y no siento nada más que pecado . Miro por encima de los
remolinos que aceleran el pulso de la tinta del tatuaje en su pecho, hombros y brazos, y mi corazón da un
vuelco. Miro más alto sobre su mandíbula cincelada y perfecta, y esa sonrisa dura y sonriente. Miro más alto, mi
cuerpo tiembla, y mis ojos finalmente aterrizan en sus hermosos azules.
... Y me está mirando directamente , con la mirada más intensa, penetrante y feroz que he sentido en toda mi vida.
" Tú ", gruñe suavemente. Jadeo, y siento que mi corazón se está arrastrando hacia mi garganta. Un calor que nunca
antes había conocido hormiguea a través de mi cuerpo de maneras malvadas, pecaminosas e impuras, y trago con
fuerza.
"Ven aca." El hombre me mira fijamente, y levanta una mano para torcer dos dedos, haciéndome señas.
Me tambaleo por un momento. Ningún pastor debería debilitar a su rebaño en las rodillas con solo una
mirada. Ningún hombre de Dios debe ser construido para el pecado , como él.
... Un predicador no debería prender fuego a los lugares más pecaminosos de mi cuerpo con los deseos más impíos e
impíos que jamás haya sentido en mi vida.
Sus ojos se clavan en los míos y sonríe. No puedo decir si es inocente, o si dice que sabe muy bien que está
corrompiendo mi alma mortal con una sola mirada. Pero de cualquier manera, cuando vuelve a doblar sus dedos
para llamarme hacia adelante, Dios me ayude, lo hago.
Pase lo que pase.
CAPÍTULO TRES
GABRIEL
"¿PREDICADOR? ¿PREDICADOR GABRIEL?
Parpadeo y me doy cuenta de que alguien me está hablando. Parpadeo otra vez, y lentamente me doy cuenta de que
es un hombre parado junto a ella que me está hablando.
"¿Qué?" Arrugo la frente. Mierda. Me aclaro la garganta y respiro, y mi máscara vuelve a encenderse. Me giro y
sonrío cálidamente al hombre mayor al lado del ángel de cabello dorado. “¡Sí, señor! ¡A su servicio!"
El sonrie. "¡Oh, gracias al Señor que llegamos a tiempo!" Él pone un brazo sobre sus hombros y mi palpitante polla
dura titubea por un segundo. Está bien, claramente su padre, y este buen chico sureño parece exactamente del tipo
que tiene una escopeta cargada lista y esperando a lobos exactamente como yo que olfatee para acercarse a su
angelito.
Me obligo a respirar y mantener mis ojos en él , no en ella. Sin embargo, podría ser la cosa más difícil que he hecho en
mi vida.
"¡Predicador Gabriel!" él hace rayos. "¡Esperaba que mi hija y yo pudiéramos lavarnos en Sus aguas santas antes de
que sea demasiado tarde!"
Nunca es demasiado tarde para una donación al fondo de whisky del Predicador Gabriel, confía en mí.
Yo sonrío. "¡Pero por supuesto! Por supuesto hermano ... Levanto una ceja y él me devuelve la sonrisa.
“Oh, Jedediah, señor. Jedediah Somerset, y esta es mi hija ”, se vuelve hacia ella y yo apreto los dientes. He estado
tratando de mi puta más difícil no mirar a ella. Se requiere toda mi fuerza de voluntad para mirarlo, no al jodido y
sorprendente ángel que está a su lado. Pero, qué puedo decir, la carne es débil. Arrastro mis ojos hacia los de ella, y
rechino los dientes.
Aww infierno .
"Aquí está Dalila", dice.
Nuestros ojos se cierran y mi pulso truena. Mierda. La niña no es solo un ángel. Ella pone cualquier maldita mierda
de ángel que he visto avergonzar. Ella es más que hermosa: esta embriagadora mezcla de encanto sureño puro y
saludable, y una fantasía de colegiala de Playboy. Mi polla se endurece instantáneamente, dolorosamente. Es un
recordatorio de que he estado sin el toque de una mujer por un muy, muy largo tiempo.
Hubo un tiempo, hace años, cuando comencé este pequeño emprendimiento, donde con mucho gusto, eh,
había participado de los frutos de su rebaño. Viudas solitarias, amas de casa curiosas y aburridas, y que Dios bendiga
a esas chicas "buenas cristianas" que piensan que una cruz alrededor de su cuello de alguna manera los absuelve de
todo tipo de mierda pecaminosa.
Pero eso fue hace años, y ese era un yo diferente. Me di cuenta de que si iba a tener éxito en esto, y realmente ganar
dinero, y no, ya sabes, recibir un disparo , tenía que dirigir cosas como un negocio, no una fiesta de fraternidad. De
todos modos, las joyas nunca valieron la pena, y siempre me dejaron vacío y odiándome a mí mismo. No me
malinterpreten, solo soy un hombre y creo firmemente que un hombre necesita sus vicios para atravesar este
mundo. Pero esa lista de vicios durante el último año más o menos lamentablemente no ha incluido las tentaciones
de la carne.
Créeme, mantienes suficiente hábito de whisky y es la única comodidad que realmente necesitarás.
Para un hombre que se está burlando de este gran país fingiendo ser piadoso, en realidad he mantenido un celibato
extraño durante mucho tiempo. Me obligué a concentrarme en el espectáculo y a perfeccionar mi capacidad de
separar a los tontos de su dinero. Pero miro a esta chica, a Dalila, y mis paredes comienzan a desmoronarse.
La erección gruesa y pulsante que cubre mi traje de baño bajo el agua es un indicador bastante claro de eso.
"¿Entonces no llegamos demasiado tarde, Predicador Gabriel?"
Parpadeo Por un momento, quiero decir que sí. Quiero decir joder sí y volar su mente y destrozar todas las ideas de
estas personas sobre mí antes de empacar mi mierda y salir de la ciudad. Todo por ella , porque sé muy bien que esto
es un problema. Sé que es un problema, no por ella, sino por lo que claramente me hace. Y eso es un problema
que no necesito si voy a hacer que todo funcione.
"Hermano Jedediah-"
"Traje dinero en efectivo, ¿está bien?"
Levanta un puñado de dólares y yo gimo. Jódeme, bien podría ser treinta monedas de plata malditas. Pero un
pecador como yo ve esa mierda, y cualquier reserva que tenga se derrite.
Sonrío y asiento. "¡Por supuesto, hermano!" Yo canto. Mis ojos vuelven a Delilah y gimo cuando veo el sonrojo en su
rostro y la extraña chispa en sus ojos. Quiero decirme a mí mismo que hay algo malvado allí: que esta pequeña y
bella belleza sureña con el casto vestido blanco está ocultando algunos pensamientos muy impuros sobre los tuyos de
verdad. Pero sé que es solo mi propia imaginación. No, no es una oportunidad. Esta chica es manera demasiado puro
mirar, y esta ciudad es manera demasiado Biblia-golpes para que eso sea real.
Tomo nota mental de que probablemente debería comenzar a masturbarme más para mantener la cabeza enfocada, y
sonrío una vez más.
“Pues bien, hermano Jedediah. ¿A cuál de ustedes le gustaría ser bañado primero en Sus aguas purificadoras?
"Ve, papá", Delilah susurra en voz baja. Ella traga saliva y se vuelve para sonreír a su padre. "Por favor, tú primero".
Jedediah irradia de oreja a oreja, y se da vuelta para mirarme. "¿Solo intervenir?"
Tan pronto como pueda hacer que mi jodida polla dura como una roca baje, sí, déjate caer, amigo.
"Pero, por supuesto, hermano Jedediah", le digo suavemente, pensando en la mierda más horrible que se me ocurre
para calmarme la polla. Empiezo a repasar las estadísticas del béisbol en mi cabeza mientras él se quita los
zapatos. Lleva un traje de baño y una camisa negra de manga larga con "Canaan Auto Repair" en la parte delantera
sobre su vientre redondeado, y comienza a subir los escalones. Afortunadamente, para cuando está facilitando su
gran cuerpo en el agua, mi polla ya no está en peligro de comenzar algunas conversaciones incómodas.
"¡Hermano Jedediah!" Yo grito, más a la multitud que a él. "¡Renuncias a Satanás y sus malos caminos!"
"¡Hago!" grita tan fuerte que me lleva un poco atrás. Todos lo han gritado, pero Jeb aquí tiene el rendimiento del día,
con mucho. Mierda, incluso se está poniendo un poco lloroso.
"¡Entonces ven y sé limpio!" Yo rujo. Lo agarro y gruño, mis músculos se esfuerzan por bajarlo nuevamente al
agua. Jeb aquí puede tener un instinto de cerveza, pero el tipo es puro músculo de oso. Es solo el último recordatorio
que necesito para quitarle los ojos hambrientos a su maldita hija.
Jeb se hunde y yo gruño de nuevo para arrastrarlo de vuelta. Sale farfullando y llorando, y antes de que pueda
detenerlo, el chico me tiene en un gran abrazo de oso húmedo y varonil.
"Te bendigo, Gabriel", se ahoga contra mi hombro. "Bendícete por recordarle a este pecador que todos podemos
compartir su luz".
Asiento con rigidez. Una vez más, si todavía tuviera un alma, incluso podría sentirme un poco culpable por
este. Aunque bueno que no.
Jedediah sube los escalones y baja de la bañera. Algunos de los otros habitantes del pueblo se adelantan para
estrecharle la mano y abrazarlo calurosamente, y yo solo sonrío por todo el asunto, esperando que Dios la saque de
aquí antes de que me joda más la cabeza. Además, ahora realmente necesito comenzar a beber.
"Bueno, amigos", arrastré mi mejor sonido sureño. "Estaré aquí durante la semana, con sermones, ofrendas y
sanidades sagradas diarias disponibles para todos ..."
"¿Que hay de mí?"
Su voz es tan suave y gentil que me lleva de vuelta. Parpadeo, y aunque lo intento, no puedo evitarlo. Mis ojos se
deslizan hacia ella e instantáneamente gimo. Mis músculos se tensan, mi mandíbula se aprieta y ese hambre feroz
explota en mí otra vez. La miro, a ese largo cabello rubio, esos bonitos ojos azules, ese pequeño cuerpo apretado
envuelto en el suave vestido blanco, y quiero devorarla .
"Lo siento-"
"¿Tienes tiempo para ella, predicador?" Jedediah dice con entusiasmo. "¿Por favor? Podemos pagar ".
No. No no no, joder no . De ninguna manera estoy poniendo las manos en
"¿Es suficiente?"
Mierda. Agita ese verde en mi cara, y no puedo resistirme.
"Sí, eh ..." Trago, y respiro hondo para tratar de arreglar mi mierda. "¡Por supuesto , hermano!" Yo emito. Mis ojos
giran hacia los de ella y mi mandíbula se aprieta.
"Por favor, ¿no darás un paso adelante ..."
"Dalila", dice suavemente, comenzando a mirarme a los ojos.
"Dalila", le devuelvo la sonrisa. "Ven", hago señas con mis dedos otra vez, y ella se sonroja. Ella comienza a subir las
escaleras hacia la bañera, y mi polla ya se está engrosando. Las estadísticas de béisbol, las tablas de multiplicar y las
imágenes de accidentes automovilísticos revolotean en mi cabeza. Pero maldita sea, nada de eso ayuda. Nada de eso
hace una maldita cosa para evitar que mi polla se hinche al máximo en mi traje de baño.
Delilah jadea en voz baja mientras ella entra al agua. El vestido comienza a ondularse a su alrededor, y ella se sonroja
y lo empuja hacia abajo. El agua lo empapa y ella entra hasta que el agua está justo por encima de su cintura.
"¿Me gusta esto?" susurra, parándose a mi lado.
"Al igual que, sí ..." gruño, buscando a tientas. "Párate de esta manera".
Extiendo la mano antes de poder detenerme, y mis manos rodean su cintura. Ella se tensa por un segundo, y mi polla
simplemente palpita . Mierda, esto va a ser malo. La giro para que mire en la dirección correcta, y mis manos asumen
la posición de sostener la parte baja de su espalda y la parte posterior de su cabeza. Su largo cabello rubio sedoso se
burla de mi brazo y apreto los dientes.
Estoy tan jodidamente duro, pero también me esfuerzo por alejarme un poco de ella de lo que normalmente lo
haría. Lo último que necesito es que esta chica que sale de su bautismo farfulle que el predicador tiene una erección.
"Dalila".
Su nombre cae en silencio de mis labios, y gimo. Joder, es como un interruptor que se activa. Mis manos se tensaron
un poco en ella, y mi pulso retumbó un poco más fuerte en mis oídos. Su cuerpo suave y apretado se derrite contra
mis grandes manos, y ella sonríe y cierra los ojos. Empiezo a sumergirla y mis ojos la recorren.
Cogida .
Quiero gritar en el que la cogida pensó que era una buena idea dejar que una chica que se parece a esto usar un
vestido de algodón blanco de mierda a un bautismo maldito. Claramente está usando ropa interior, pero a medida
que el agua empapa su delgado vestido, casi podría decirte la jodida marca de ellos. Mis ojos miran hambrientos a
través del agua, y juro que casi puedo ver una pequeña sombra entre sus piernas, a través del vestido empapado y
las bragas.
Ponte en contacto contigo mismo, tonto , gruño para mí mismo.
Me aclaro la garganta. "Dalila", llamo un poco más fuerte. "¿Renuncias a Satanás y sus malos caminos?"
"¡Hago!" ella jadea.
"Entonces ven."
... Juro que mi pene se pone un poco más duro cuando digo eso. Sin embargo, nunca dije ser menos malvado que el
infierno, así que, demandame.
"Ven y sé limpio".
La sumerjo y ella se retuerce contra mis manos. Y luego, sucede. Ella debe perder el equilibrio en el fondo de la
bañera o algo así, porque de repente, ella vacila. Se revuelve y se arrastra mientras se me escapa de las manos. Pero
me muevo rápido, y la agarro fuerte y la levanto fuera del agua escupiendo y jadeando ...
... Justo en mi contra. La tengo en mis brazos y se aferra a mis bíceps. Los dos estamos empapados, y ella es
presionado a la derecha en mi contra. Puedo sentir su cuerpo cálido y suave presionándome, y gimo cuando siento los
puntos duros y ansiosos de sus pezones contra mi pecho. Mi polla palpita y, de repente, Dalila jadea .
Ella me mira, su rostro rojo brillante y su boca abierta, con esos grandes ojos azules que se ven tan escandalosamente
jodidos. Y puedo decir en medio segundo que ella sabe. Ella ha sentido mi erección con fuerza contra su estómago,
y sabe que no soy un hombre santo, de pura intención. Mi polla me abandonó como la pecadora malvada y llena de
lujuria que realmente soy, y ella lo sabe .
Me detengo Me congelo así, solo abrazándola y esperando a que grite. Solo espero que salte y les diga a todos lo que
realmente soy, y que papá Jedediah saque su escopeta y me lleve al reino.
Pero entonces, no pasa nada. Sus ojos sostienen los míos, y sus manos se aferran a mí, y su respiración se corta. Pero
ella no dice una palabra . Se humedece los labios y siento que su pecho sube y baja contra el mío. Ella traga, sus
mejillas se ponen rosadas.
Me aclaro la garganta y de repente la realidad vuelve a mí. Recuerdo dónde estoy, y rápidamente me pongo de pie y
la sostengo sobre sus propios pies. Mis manos caen de ella y reconozco la emoción que viene al soltarla:
arrepentimiento. Lamento y enojo porque estas manos ya no la sostienen.
Dalila se sonroja profundamente y se estabiliza. Ella aparta la vista rápidamente, alisando su vestido antes de que de
repente jadee. Sigo su mirada y gimo. Su vestido es tan jodidamente transparente que puedo ver sus pequeños
pezones rosados, claros como el maldito día, a través de él. Mi polla surge, y el lobo debajo de mis ovejas
disfraza aullidos .
Ella se sonroja ferozmente y rápidamente envuelve sus brazos sobre su pecho. Sus ojos se alzan para mirar los míos
de nuevo, vacilando mientras intenta mantenerlos allí. Pero luego aparta la mirada y su rostro se calienta aún más.
Jedediah se ríe y, por primera vez en lo que deben ser cinco minutos completos, solté el aire en mis pulmones.
"¡Bien, cariño!" él ríe. “Sabes que Gabriel está aquí para bajarte, cariño. ¡No tienes que saltar dentro de ti mismo!
Algunas otras personas a su alrededor se ríen afablemente. Dalila se obliga a reír también, pero está vacía. Ella se
sonroja ferozmente, y sus brazos se tensan a su alrededor. Ella me mira una vez más, sus ojos ardiendo con ...
algo. Pero luego ella mira hacia otro lado, y rápidamente camina hacia las escaleras y sale de la bañera.
Junta tu mierda , me gruño a mí misma. Respiro hondo y me paro. Gracias a Dios, el agua cubre mi erección todavía
palpitante y dura.
"Bueno, amigos!" Me dirijo a ellos. "¡Me temo que eso concluye los servicios hoy!"
Y si alguno de ustedes pudiera decirme si puedo comprar alcohol en esta jodida ciudad porque necesito emborracharme , eso
sería genial.
"¡Por favor, dile a tus amigos y vecinos que todos son bienvenidos y que estaré aquí por el resto de la semana!"
Hay un coro de aleluyas, amén y personas que dicen: "Bendito seas, Predicador Gabriel", y luego comienzan a
dispersarse por el campo hacia sus autos.
Pero Jedediah y Dalila se quedan. Tragué saliva mientras él se acercaba a mí con aspecto severo, yo todavía de pie en
la bañera.
"¿Predicador?" él gruñe. Me congelo. Mierda. Por un segundo, me pregunto si en los pocos segundos mientras me
dirigía a la multitud, ella le contó lo que pasó. Me doy fuerzas y empiezo a calcular qué tan rápido podría saltar de
esta bañera, entrar en el Winnebago, cerrar la puerta y arrancar el motor. Pero entonces Jedediah sonríe.
"Señor, estamos muy contentos de que esté aquí en Canaan".
"¿Por qué, gracias amablemente, señor ..."
"Somerset", me recuerda.
"Por supuesto, y de nada, señor Somerset".
No mires a su hija. No mires a su hija .
"Oh, diablos, es solo Jeb, predicador".
Yo sonrío. “Por supuesto, Jeb. Y es solo Gabriel. Espero verte durante toda la semana.
Él sonríe. "Bueno, predicador", dice, ignorando por completo esa parte de Gabriel. "Por supuesto que lo estaremos,
pero tenía curiosidad por saber qué estabas haciendo esta noche."
"Papá…"
Delilah da un paso adelante con una mirada preocupada en su rostro, sus brazos aún cruzados sobre su pecho. Pero
Jeb solo sonríe y se da vuelta para acariciarle el hombro antes de mirarme.
“La esposa y yo seguramente nos encantaría tenerte en la casa para la cena del domingo. Sería un honor para
nosotros partir el pan con usted.
Mis planes de cena consisten en fideos instantáneos de ramen del microondas de Winnebago y tanto whisky como
pueda tener en mis manos. No hace falta decir que se despiertan intereses. Pero entonces, mis ojos giran más allá de
él, hacia Delilah. Goteando, hermosa como el infierno, sexy como el maldito pecado original de Dalila. ¿Y él quiere
invitarme, el lobo, a su casa? Oh, esta es una idea terrible.
Sonrío y sacudo la cabeza. "Sí, gracias, señor, pero respetuosamente ..."
“Aww, por favor, predicador? Significaría el mundo para mí y la señora. Además, nuestro hijo, Paul, es en realidad
un hombre de escuela de teología, y está buscando comenzar su propia iglesia. Haría todo su mes si le animas un
poco. Ah, y Dalila aquí ", dice. "Bueno, sé que le encantaría tener la oportunidad de escuchar a un hombre honesto de
Dios hablar Su palabra mientras cenamos".
Yo gimo. Mierda. Mierda, mierda, mierda. Esta es una idea terrible. Necesito decir que no, y necesito mantener mi
maldita distancia de esta chica durante la próxima semana. Pero entonces Jeb se acerca y toma mis malditas manos
entre las suyas.
"¿Por favor, predicador?"
Maldita sea, maldita sea. Me estoy ablandando en mis años.
Me dirijo a él. “Pero por supuesto, señor. Sería un placer absoluto.
Él sonríe. "¡Bien, maldición!" Al instante, se tapa la boca. "Mis disculpas, predicador".
Me detengo de decir "No hay ningún maldito problema", pero solo sonrío y le digo que está bien.
¿Siete bien para ti? Somos cuarenta y siete Ridge Street, justo al centro pasando la oficina de correos. Es la casa blanca
con la puerta azul.
"Bueno, te veré entonces, Jeb", sonrío. "Y te agradezco amablemente".
Jeb sonríe, pero Delilah está de pie detrás de él, moviéndose nerviosamente y definitivamente evitando mis ojos. Esta
es una muy, muy mala idea. Más allá del hecho de que quiero arrancarle ese vestido, doblarla sobre el borde de esta
bañera y follar a esta chica tonta, existe la verdadera idea de que podría romperse en medio de la cena y sacarme por
el pecador que soy. Podríamos estar a la mitad de un asado cuando ella decida decirle a toda la maldita familia
Somerset que la gran polla del Predicador Gabriel estaba dura cuando la puso en el tanque de bautismo.
"Nos vemos entonces, predicador".
Jeb me da la mano y gira, y luego se va antes de que pueda decir algo o retomar mi acuerdo. Mierda. Los veo a los
dos alejarse por el campo, preguntándome cómo diablos puedo salir de esto sin parecer un imbécil.
Pero de repente, Dalila se detiene, y ella se vuelve. Solo es fugaz, pero sus ojos se posan en los míos, y cuando se da
cuenta de que la he estado mirando, se sonroja intensamente. El sol atrapa su vestido y brilla a través de la maldita
cosa transparente, y por un segundo, puedo ver todo . Puedo ver siempre la curva de su cuerpo con el vestido blanco
translúcido brillando a su alrededor. Y mi polla palpita gruesa y dura de nuevo.
Se sonroja profundamente, sus ojos brillan de nuevo, y luego se da vuelta rápidamente y corre para alcanzar a su
padre.
Mierda.
Ella nunca fue parte del plan, y esta es una tentación que nunca vi venir. La veo caminar de regreso por ese campo
con el sol de Georgia brillando a su alrededor, y gimo.
Ella es una tentación, de acuerdo. Ella es el maldito pecado original, encarnado. Ella es la puta manzana del jardín, y
que Dios me ayude, me la voy a comer entera .
CAPÍTULO CUATRO
DALILA
" S EÑOR QUE HUELE BIEN , C HRISTINA".
Mi padre irradia mientras mete la cabeza en la cocina humeante llena de ollas hirviendo a fuego lento. Mi mamá le
lanza una sonrisa, pero su rostro está tenso. "Bueno, desearía haberlo discutido antes de que invitaras a
un predicador a cenar, Jeb", dice con preocupación. Frunce el ceño y pasa apresuradamente delante de mí, revisando
la salsa, asomando en el horno al asado y revolviendo rápidamente las judías verdes a fuego lento en mantequilla y
azúcar en una sartén.
"Quiero decir, él vive en un Winnebago", me encojo de hombros. "Estoy seguro de que va a ser-"
"Dalila May!" dice mi madre de una manera escandalizada y conmocionada. Ella blandió una cuchara de madera
hacia mí. ¡No te atrevas a hablar de un hombre de Dios así! ¡El predicador Gabriel se ha humillado ante el Señor para
poder viajar por este gran país difundiendo su palabra!
"Sí, Dios, un poco de caridad, Lah-lah", Paul, mi hermano mayor, arroja desde la otra habitación.
"Paul, cállate".
Él se ríe y mi madre incluso esboza una sonrisa. Pero papá frunce el ceño.
“Muy bien, eso es suficiente de eso. Paul, llama a tu hermana por el nombre que Dios le dio, por favor. Y Dalila,
cariño, muestra un poco de respeto por un hombre maravilloso, piadoso y piadoso como Gabriel. Christina, cariño,
el asado huele divino, y le va a encantar cada bocado, al igual que todos nosotros. Él sonríe y cruza la cocina para
besar la mejilla de mi madre antes de que se retire.
Un hombre maravilloso, piadoso y piadoso. Si claro . Todos están muy emocionados de que Gabriel venga a cenar,
incluso el Paul perpetuamente hosco. Y todos lo ven exactamente como quieren verlo, y cómo estoy dispuesto a
apostar que se ha tomado muchas molestias para que lo vean.
…Pero yo sé.
Sé lo que ellos no saben. Me estremezco al recordarlo, y nuevamente, ese horrible, prohibido y perverso calor me
revuelve antes de apagarlo como una fogata deshonesta. No. Señor , no. Gabriel no es un buen hombre. No es un
hombre piadoso, eso es seguro. Él es ... malvado . Y pecaminoso. Temblo de nuevo cuando mi mente vuelve a la
bañera de bautismo. Pienso en sus grandes manos sobre mí y en ayudarme. Pero entonces recuerdo resbalar y caer
en él, y de repente, me acuerdo ... que .
Mi cara se pone roja y succiono mi labio inferior entre mis dientes mientras agito la salsa. Recuerdo lo
que sentí cuando caí contra este "hombre piadoso de Dios". Recuerdo lo que palpitaba contra mí, debajo del agua,
enviando el pecado a través de mi núcleo.
... Los hombres de Dios no tienen erecciones cuando difunden su palabra. No se excitan mientras bautizan a su
rebaño.
Me estremezco, y otra voz en mí dice que las buenas chicas cristianas tampoco se emocionan cuando sienten algo así
presionándolas. Rápidamente me sonrojo y me trago el pensamiento, tratando de respirar.
Lo que sentí hoy es algo que nunca antes había sentido. Pero sé lo que es. Canaan podría ser un poco más
conservador y religioso que otros lugares en este país; quiero decir, no vivo en una burbuja, y sí tengo un iPhone e
Internet. Pero aunque podríamos estar un poco más anticuados aquí, sí aprendemos sobre, bueno, la anatomía de la
concepción en la escuela. Sé que los hombres se ponen ... duros , eh, allá abajo, cuando están excitados. Pero también
sé tejer bien que un predicador debería no estar recibiendo así en el medio de un bautismo.
Y no deberías estar tan emocionado por eso , la voz en mi cabeza escupe. Quiero negarlo o afirmar que solo estoy
indignado o escandalizado. Pero esas no son realmente las palabras correctas para ello, y he pecado lo suficiente hoy
sin agregar mentiras a la mezcla.
No, la palabra es "emocionado", incluso tan horrible como es. Me emocioné cuando caí en el hombre pícaramente
guapo, pecaminosamente guapo, con los hombros anchos, las manos grandes y la tinta del tatuaje tentadoramente
malvada. El hombre del cabello oscuro, la mandíbula cuadrada y los penetrantes ojos azules que miraron
directamente a mi alma.
Pero, dejando de lado mis propios pecados de vacilar en las tentaciones de la carne, sé lo que el resto de mi familia
no sabe: que el Predicador Gabriel Marsden es un hombre malvado y pecador. Incluso me pregunto si es un
predicador.
La cuchara en mi mano agita la salsa en el piloto automático mientras me deslizo más profundamente en mis
pensamientos y en pensar en Gabriel. Nunca me he sentido escandalizado antes. Pero la peor parte es que no es
un escándalo indeseable . Es como los sentimientos de lo prohibido que su toque hoy me trajo son algo de lo que
quiero más. Pero rápidamente trato de aplastarlos una vez más.
No. He tenido pensamientos así antes y sentí las cosas que le hacen a mi cuerpo y mi alma antes. Cosas pecaminosas
y horribles también. Me da vergüenza decir que también he cedido a ellos antes, en ocasiones. Ha habido momentos
en los que la maldad de mi propia mente era demasiado poderoso, y yo ... bueno, me tocó a mí mismo, no por causa
de ellos.
Afortunadamente, cada vez que sucede, me las arreglo para salir del borde de la condenación. Pero esas otras veces,
todavía teníamos una iglesia en la ciudad. Esas otras veces, podría correr allí el domingo y sumergirme en Su
espíritu santo y Palabra y leer los pasajes elegidos para el día tan fuerte como pudiera para limpiar la maldad de mi
corazón.
Pero ya no hay iglesia en Canaán, después de que el Pastor Michaels tomó el trabajo en Atenas y el desvencijado
edificio en el que sostenía los servicios aquí finalmente se consideró inseguro. La única iglesia es a la que no solemos
ir en Huntington Parish. Y ahora, el único en la ciudad es suyo: la malvada Iglesia del pecado carnal y la condenación
eterna de Gabriel Marsden.
"Dalila!"
Salgo rápidamente y jadeo ante la llamada de mi madre. Miro hacia abajo y me doy cuenta de que me he olvidado de
seguir revolviendo, y la salsa se está volviendo demasiado espesa.
"Lo siento, mamá", murmuro y sigo revolviendo, volviendo a la cremosidad justo a tiempo.
Arrugo la frente. Mira, estos no son el tipo de pensamientos que un predicador debería inculcar en su rebaño. Y, sin
embargo, este es el hombre que vendrá a cenar en nuestra casa esta noche. El hombre no me infunde justicia y
piedad. Los pensamientos en mi cabeza son malvados, pecaminosos, y él es quien los puso allí.
Como si fuera una señal, suena el timbre y mi corazón da un vuelco.
"Cariño, ¿lo entenderías?" dice mi madre desde el comedor donde está preparando platos.
Se me encogen las tripas y una sensación de excitación horrible, acalorada y endiabladamente malvada me inunda
antes de que pueda detenerlo. Trago saliva, con la garganta apretada, cuando de repente mi padre me salva.
"Oh, lo entenderé, querido".
Gracias a Dios . La idea de abrir mi puerta a él , y frente a él luego de haber es ... bueno, es un bien o un completo
mortificando su totalidad lejos pensamiento demasiado emocionante. Quizás ambos, lo que es aún peor.
Oigo que la puerta se abre de par en par y mi padre saluda cordialmente al malvado predicador.
"¡Adelante! ¡Adelante, predicador!
La puerta se cierra y puedo escuchar el sonido de mi padre llevándolo a la casa y luego al comedor fuera de la
cocina.
"Dalila?" mi madre arquea la frente y las pantomimas se cepillan el pelo.
"¿Huh?"
Ella sonríe. “Tu cabello, querido. Solo mételo de vuelta.
"Correcto, sí", murmuro, haciendo exactamente eso. Siento mi cara arder mientras sigo a mi madre al comedor, y
mantengo mis ojos en el suelo.
"¡Bienvenido a nuestra casa, Predicador Gabriel!" Mi madre dice calurosamente. Ella me da un codazo, y finalmente
cedo, y miro hacia arriba.
... Y no pasa nada . No hay condenación eterna instantánea. No hay fuego, ni golpes divinos. De hecho, el Predicador
Gabriel está parado allí sonriéndonos a todos, y luego a mí, como si nada hubiera pasado. No hay un solo indicio de
lo que sucedió anteriormente en su rostro. Ni un pelo de reconocimiento, ni un parpadeo, ni nada. Incluso frunzo el
ceño y miro su cara endiabladamente hermosa un poco más de lo que debería. Pero está limpio: una pizarra en
blanco con nada más que una sonrisa encantadora y saludable en su rostro extremadamente guapo.
No se parece en nada a la última mirada anterior, cuando caminaba de regreso a través de ese campo, empapado y
ardiendo de calor. Miré hacia atrás para verle mirando directamente a los ojos de su pequeño campamento-mirarme
así que . Como si ningún hombre me hubiera mirado antes. Esa mirada era puro fuego y hambre, y desde entonces ha
quedado grabada en mi mente, quemándome y quemándome desde adentro hacia afuera.
Esta vez, sin embargo, es solo una cálida sonrisa de predicador. Una parte de mí se siente horrible porque en
realidad estoy un poco decepcionado por eso.
"Es tan bueno verlos a los dos otra vez", dice Gabriel de advertencia, sacudiendo la mano de mi padre
vigorosamente. Y un placer absoluto conocerla, señora Somerset. ¡Bien, Lordy, casi pensé que Dalila tenía una
hermana de la que no había oído hablar!
Mi madre se ríe tímidamente y agita su mano hacia Gabriel. "¡Oh, bueno, Jeb no mencionó que usted era tan
encantador, señor Marsden!"
Gabriel y mi padre se ríen afablemente. “Es solo Gabriel, por favor, Sra. Somerset. Y te bendigo por invitarme a lo
que huele a comida celestial .
"Bueno, hijo, ¡te espera un verdadero placer con el asado de Christina!" Papá se ríe antes de mirarnos. "¡Ah, y aquí
está nuestra línea telefónica familiar para el buen Señor!"
Paul entra a la sala de estar a través de la cocina en su habitual deambular medio encorvado y medio
enérgico. Mamá lo llama su "mezcla de boogie-woogie", lo que creo que es gracioso, y Paul odia.
"Señor. Marsden ", dice con rigidez pero con calidez y extiende su mano. Gabriel lo sacude con firmeza.
"Solo Gabriel, por favor, señor", arrastra una voz que parece cada vez más sureña con cada palabra.
"Paul acaba de salir de la escuela de seminario", exclama papá, dándole palmaditas en el hombro a mi hermano.
"Un año."
Mamá y papá, y Paul, en realidad, se giran para dispararme miradas agrias. No tengo idea de por qué lo dije, pero
inmediatamente siento vergüenza.
"Lo siento", murmuro.
"¿Tienes alguna universidad bajo ese cinturón, Lah-Lah?" Paul frunce el ceño.
"Eso es suficiente." La voz de papá no es fuerte, ni siquiera tan severa, pero tiene esa ventaja que te permite saber que
ha terminado de jugar con el tema. Paul está siendo un idiota, incluso si lo merezco después de esa excavación sobre
su año en la escuela de seminario. La graduación de la escuela secundaria fue hace un mes, pero no voy a la escuela
en el otoño. Incluso con la matrícula estatal y el paquete de ayuda financiera que recibiría en la U de Georgia, está un
poco fuera de mi alcance. Quiero decir que no es que mis padres estén cargados ni nada. Canaan es una pequeña
ciudad agradable, pero las personas que viven aquí no son ricas. Entonces, el plan es encontrar algo de trabajo aquí o
cerca de aquí por un año, ahorrar un poco mientras vivo en casa y luego ir a la universidad el próximo año.
"Bueno, Paul", dice Gabriel cálidamente, rompiendo la tensión. “No me da vergüenza decir que nunca fui a la escuela
por lo que hago. No señor." Él sonríe ampliamente. “Llevar su palabra a su rebaño es un llamado de un poder
superior a la educación superior. Y si cree que ha sido tocado para cumplir Su palabra, bueno, señor, creo que es su
deber hacerlo, sin importar la escolaridad o no. Deja que Su Palabra sea tu escuela ".
Mi padre está radiante. Mi madre se limpia una lágrima y se agarra el corazón con las manos. "Bendíceme, Gabriel,
eso fue simplemente hermoso".
Lo miro fijamente, mi boca apretada y mi ceño arqueado, como si estuviera tratando de mirar más de cerca. Es como
si estuviera usando esta máscara ahora que no la llevaba antes cuando ... bueno, antes. Y una parte de mí siente que
si busco lo suficiente, podría ver el borde y echar un vistazo a lo que hay debajo.
"Bueno, entonces, ¡sentémonos y comamos!" Papá finalmente exclama. "Gabriel, señor, espero que sepa que está
hablando la gracia esta noche, si nos honraría".
"Por supuesto", Gabriel sonríe. Sus ojos recorren la habitación, y casi siento que veo ese parpadeo de antes. Pero
luego su mirada cae sobre mí, y Dios mío, no hay una sola grieta en esa armadura. Él solo me sonríe serenamente y
asiente. "El honor sería mío, señor".

P ARA CUANDO mamá está limpiando los platos, Gabriel tiene a mi familia envuelta alrededor de su dedo. Quiero
decir, mamá ha estado colgando cada una de sus palabras. Papá ha estado sin palabras durante toda la comida, lo
que en sí mismo es un milagro. Incluso Paul lo ha estado mirando asombrado, como si estuviera bebiendo en cada
palabra. Y toda la comida, allí he estado yo también, solo observándolo: Biblia en mano, sonrisa sana en su rostro y
un brillo encantador en sus ojos.
... Bien, estoy empezando a admitir que podría ser yo. Estoy empezando a pensar que no hay forma de que un
hombre tenga esta buena "fachada" o máscara, y que mis opiniones anteriores sobre que Gabriel es un fraude
perverso, lascivo y carnalmente pecaminoso podrían ser, bueno, yo . Puede ser que mi vergonzosa atracción por
un predicador esté nublando mi cabeza.
Me siento allí en la mesa casi vacía después de ayudar a Paul y mamá a limpiar la cena, y frunzo el ceño. Pienso en la
piscina del bautismo, y mi nariz se arruga con disgusto ... hacia mí misma . ¿Sentí lo que creía sentir? ¿Quién puede
decir que no era algo en su bolsillo? ¿O solo mi malvada y vergonzosa imaginación?
Me encojo interiormente y me muerdo el labio. Señor, ayúdame desde mi mente pecaminosa. Necesito
arrepentirme, inmediatamente . Me volvieron a bautizar hace menos de seis horas, y creo que podría haber
desaparecido.
Mi madre regresa al comedor con un pastel de nueces con una sonrisa en su rostro. Y veo como la cara de Gabriel se
ilumina.
"¡Mi-oh-mi!" él arrastra una sonrisa completamente sana y pura en su rostro. "¿Es esa nuez, señora?"
"¡Seguramente lo es!" ella ríe. "Una de mis especialidades, si perdonas mi orgullo".
"Señora", Gabriel se ríe. "Después de haber cenado en su mesa con la deliciosa comida que ha preparado, creo que el
buen Señor está dispuesto a pasar por alto cualquier orgullo, dado el talento del cocinero".
Papá se ríe y se levanta. Se agacha en la otra habitación y regresa con una sonrisa tímida en su rostro y mira hacia mi
madre, algo en su mano detrás de su espalda.
"Predicador Gabriel, espero que perdones mi único pecado terrenal".
Gabriel arquea una ceja. "¿Oh?"
Mi padre sonríe y saca el frasco de melocotón a la espalda. Gabriel se ríe y sus ojos se iluminan un poco.
"Señor, una vez más, ¡creo que puedo hablar con Su autoridad de que eso estaría bien!"
Mi madre frunce el ceño y se queja. "Canaan es una ciudad seca", murmura.
"Bueno, no estoy bebiendo en la ciudad, Christina", sonríe papá. “Solo en la comodidad de mi propia casa”. Él frunce
el ceño. "Pero predicador, si te opones ..."
La sonrisa de Gabriel lo dice todo, pero de todos modos abre la boca. "Jedediah, creo que podría compartir un vaso
con buena compañía, y él sabría que está bien".
Papá irradia y agarra tres vasos para Gabriel, Paul y él mismo. No es una cuestión de sexismo: mamá estrictamente
no bebe, y solo tengo dieciocho años. Vierte el líquido ámbar en ellos y los pasa antes de hacer un brindis rápido una
vez más dando la bienvenida a Gabriel a nuestra casa. Tintinean sus vasos, Gabriel agradece profusamente a mis
padres nuevamente por tenerlo, y luego beben.
Eso es. Quiero decir, ese es el "pecador" en él. El hombre está bebiendo alcohol con mi padre y mi hermano después
de una cena dominical, en una ciudad seca. Esa es su grande, peligrosa, maldad. Quiero decir, sí, sé que está
técnicamente mal. ¿Pero a quién le importa? Independientemente de la marca de pecador por la que lo había
vinculado antes, estaba claramente equivocado. Y claramente, todo lo que sentía estaba en mi cabeza.
Si uno de nosotros es el pecador aquí, seguro que no es el predicador .
Incluso se detiene después de un segundo vaso. Se para y estrecha la mano de mi padre antes de darse la vuelta para
estrechar la de Paul. Él cruza la habitación e incluso le da un fuerte abrazo a mi madre antes de dar un paso atrás y
nos mira con tanta calidez y emoción.
“Gracias amablemente, de verdad. Esto ha sido…"
Dios mío, ¿se está limpiando una lágrima?
“Esto ha sido simplemente encantador. Christina, creo que puedo decir con autoridad que esa fue la mejor comida
que he tenido en años. En verdad, los bendiga a todos por su hospitalidad ".
Todos lo aman. Y claramente, me he equivocado. Claramente, él no es un hombre malvado. Soy solo yo, teniendo
pensamientos pecaminosos y pecaminosos sobre él.
"¿Predicador Gabriel?"
Él me sonríe con una cara completamente neutral y malvada. "¿Si?"
"Te acompañaré".
“Obligado, gracias. Y gracias a ambos, Jedediah y Christina. Estoy más humillado por tu generosidad. Paul, estoy a
tu disposición si alguna vez quieres hablar de su palabra y su misión.
Otra ronda de grandes apretones de manos después, salgo al porche con Gabriel y cierro la puerta detrás de
nosotros.
"Lo siento por lo de antes", espeté.
Gabriel se gira con una curiosa sonrisa. "¿Por?"
"Por ... resbalar," digo en voz baja. Lo miro a los ojos, el resplandor de la luz del porche y la luna casi llena arriba nos
ilumina. Lo miro fijamente a la cara, esperando solo una pequeña grieta, un pequeño resbalón para poder decirme
que no estoy totalmente loco o que no estoy totalmente condenado por codiciar a un hombre de Dios. "En la bañera,
quiero decir", agregué suavemente.
Gabriel solo me mira. Parpadea una vez, y luego ... querido Señor.
... Entonces, la máscara se cae.
Da un paso más cerca de mí y trago con fuerza. Mi pulso se acelera y mi piel hormiguea con la humedad húmeda del
aire del comienzo del verano. Su mirada se endurece, y jadeo en silencio cuando veo ese destello de fuego crudo y
malvado en sus ojos.
" No lo soy ".
Él gruñe las palabras. Su acento incluso cae un poco, y esa rutina de cantar, hokey good-ole-boy desaparece como el
humo.
Jadeo otra vez cuando él da un paso hacia mí, mi corazón se acelera.
"¿Q-qué?"
Sus ojos brillan, y él da otro paso más cerca. Retrocedo, hasta que con un jadeo, siento el poste del porche a mi
espalda. Gabriel se desliza contra mí, hasta que su cuerpo grande y musculoso está a unas dos pulgadas de mi pecho
agitado.
"Dije que no ", gruñe sombríamente. "Y si quieres pasar por otro ... bautismo ..." el significado detrás de sus palabras
gotea absolutamente de su lengua, tanto que incluso yo entiendo lo que está diciendo.
"Bueno, Dalila", ronronea en este tono bajo que me da un nudo en el estómago, me hormiguea la piel y Dios me
ayuda, mis muslos se contraen pecaminosamente. Se inclina así, tan cerca, y yo jadear mientras siento sus labios
perfectos acaba casi rozan la oreja.
"Sabes dónde encontrarme", gruñe.
Voy a ir al infierno. Al instante, mi cuerpo reacciona a él de la manera más pecaminosa y horrible. Mi piel anhela su
toque. Mis pezones se endurecen a pesar del calor de la noche. Y un calor húmedo y maldito se acumula entre mis
piernas. Voy tan al infierno.
Los labios de Gabriel se acercan media pulgada, y cuando realmente me rozan la oreja con un gruñido bajo y
oscuro, lloriqueo .
Señor salva mi alma.
Hay una risita baja de sus labios antes de que él retroceda. Y ahí está: está el calor abrasador tan caliente como el
Infierno en sus ojos. Hay una sonrisa malvada, apenas reteniendo la lengua bífida.
"Eso es lo que pensé", gruñe con una risita tranquila. Él arquea una ceja y me lanza una sonrisa arrogante. "No tan
piadoso como pensabas, ¿verdad?"
"Yo ... yo ..." jadeo. "Te diré ", siseo.
Gabriel se ríe entre dientes. "¿Decir qué, exactamente?"
"Que eres ..." tartamudeo, sonrojándome ferozmente, y sintiéndome más condenado por el segundo por
lo ardiente que me hace este hombre, tan perverso como él. O quizás peor, por lo malvado que es.
"Les diré que eres un hombre malvado", siseo.
"Y les diré que eres una niña sucia que se calienta y molesta por un predicador ".
Se me cae la mandíbula y me quedo sin aliento.
“Hago ninguna tal cosa, señor!”
Él sonríe. "Sigue diciéndote eso, cariño".
Me sonrojo ferozmente, y sus ojos se clavan en los míos, manteniéndolos cautivos. Se inclina de nuevo y todo lo que
puedo hacer es tragarme el gemido y extender la mano para agarrar el poste del porche con mis uñas mientras sus
labios rozan mi oreja una vez más.
" Buenas noches, Dalila ", ronronea directamente en mi oído.
Y luego se aleja, y se ha ido, saliendo del porche y saliendo a la noche, dejándome jadeando, escupiendo y ... maldita
sea.
Gabriel Marsden no es hombre de Dios. No es un heraldo celestial, ni ángel, ni santo.
Él es el diablo mismo .
Y el problema es que creo que ya podría estar condenado. Porque me quedo allí sin aliento, mirándolo entrar en la
noche, y desesperada, dolorosa, pecaminosa queriendo más .
…Dios ayúdame.
CAPÍTULO CINCO
GABRIEL
JODER , eso estuvo mal. Eso fue ... mierda. Eso estuvo muy mal.
Maldita sea.
No debería haber estado bebiendo así, y no me refiero solo a los dos pequeños tragos de luz de luna de
melocotón. Me las arreglé para dirigir dos ciudades antes de cenar en la casa de Somerset para encontrar algo de
alcohol, ya que Canaan era una ciudad seca. Sí, de ninguna manera estaba yendo a cenar con esa chica después de lo
que sucedió sin adormecerlo un poco con alcohol.
Así que tomé un par o cinco tragos antes de ir allí. Y ayudó, lo sé. Fui un maldito profesional allí, inquebrantable, sin
pestañear y totalmente en control, como un actor principal. Miré a esa chica directamente a los ojos y ni siquiera
me estremecí al imaginarme arrancando su vestido blanco mojado en ese tanque de bautismo y hundiendo mi polla
gorda profundamente en su dulce y pequeño coño.
Le sonreí a su padre antes de volverme hacia ella e imaginarme esos suaves labios llenos alrededor de mi cabeza
hinchada, o esa bonita lengua rosa bailando sobre mis bolas. Me imaginé mi semen en sus labios. La imaginé a cuatro
patas, su cabello en mi puño mientras empujaba cada centímetro de mi polla gorda por su apretado y ansioso
trasero. Y no me rompí ni una vez .
... Como dije, debería ganar los Oscar por esta mierda.
Ir allí fue un error, lo sé ahora. Quiero decir que lo sabía antes, dado lo que sucedió con Dalila. Pero ahora que
terminó, realmente sé lo tonto que fue. Porque más allá de ella, esas personas eran ... bueno,
increíbles. Amable, generoso y verdaderamente agradable . Esas personas me dieron la bienvenida a su casa, me dieron
de comer y me sonrieron, todo mientras estaba sentado allí, deseando a su hija.
Y ahora me siento como un imbécil por estafar a esta ciudad y a estas personas durante la próxima semana. Bueno,
supongo que soy tan imbécil como soy capaz de sentir. Lo cual no es mucho, pero es algo.
Frunzo el ceño mientras salgo de la ciudad al costado del camino. El aire es espeso y bochornoso con el calor del
verano de Georgia, y puedo sentir mi ropa pegada a mí como una segunda piel antes de que esté a cinco minutos de
la casa de Somerset.
Cuando finalmente regreso al campo donde me instalé, y caminé de regreso al Winnebago, me desnudo a los boxers,
tomo un poco de hielo y la botella de whisky barato desde adentro, y me dejo caer en una silla de jardín al lado al
tanque de bautismo. La escena del puto crimen. Arrojo un poco de alcohol sobre el hielo en una taza de café, le doy
un remolino para quitarle el calor y lo golpeo con una mueca. Esta mierda sabe a, bueno, mierda . Pero lo hará.
Apago las luces exteriores del Winnebago y del tanque y me siento en mi silla de jardín. Sirvo otro trago y apreto los
dientes mientras miro el campo iluminado por la luna que se extiende ante mí.
Estoy en espiral aquí, mal. Este no soy yo, quiero decir, que una chica me deje de lado. O enredarme o tener dudas
sobre lo que estoy haciendo con mi vida. Estoy concentrado en estos días, sin tonterías. Me mudo al lugar, establezco
una tienda y obtengo su dinero, y sigo adelante antes de que alguien empiece a mirar demasiado a los sermones que
arrojo o las curas milagrosas que vendo.
Tomo otro trago de whisky, cuando el sonido de unos pasos casi me ahoga. Me trago el alcohol mientras me giro y
levanto la vista para ver a una mujer que se aleja del campo, de costado, y así es como nunca la vi venir.
Me pongo de pie, frunciendo el ceño. "Uh, señora?"
La mujer está vestida para matar , eso está muy claro. Ella está en un vestido sin mangas con un corte tan bajo que
sus pechos llenos se están derramando por la parte superior. La cosa también es corta . Sería corto para un lugar
como Nueva York o Los Ángeles. Aquí en Canaan, no puedo creer que todavía no la hayan sacado directamente de
la ciudad por usarla.
Sus labios son de color rojo oscuro, sus ojos ahumados y su largo cabello oscuro está peinado.
"Mi, mi, mi predicador", ronronea con voz ronca. Ella mueve los ojos mientras se deslizan sobre mí de arriba a abajo,
y de repente recuerdo que estoy en mis malditos boxers.
"Mis disculpas, señora," murmuro, mirando alrededor para buscar mis jeans. Estaba a punto de retirarme por la
noche ...
"Oh, no se preocupe por mí, Sr. Marsden", grita. “Realmente, no estoy ofendido. Hace calor ".
Dejo de buscar mis pantalones y me encojo de hombros. "Eso es, señora, eh ..."
"Es señorita , en realidad", dice con un guiño coqueto. “Purcell. Lizzie Purcell.
Frunzo el ceño, ignorando su evidente coqueteo. El nombre suena ... familiar, pero no puedo ubicarlo.
"Purcell ..." digo lentamente.
Ella se ríe. "Es el mismo Purcell que el nombre en el centro del banco", arroja casualmente. "Ese sería el banco de mi
papá, en realidad".
"Ahh, cierto, cierto".
Frunzo el ceño mientras ella sonríe y se acerca a mí.
"Dios mío, Predicador Gabriel, el buen Señor ha sido amable contigo, ¿no es así?"
Sonrío, pero no muerdo el anzuelo. Esto está lejos de ser la primera vez que veo este acto. Y se siente como si fuera
interpretada por la misma maldita actriz cada vez. Siempre es la mujer más rica o al menos más conocida de la
ciudad: la esposa del alcalde, la hija del sheriff, ese tipo de cosas. Por lo general, también pasan un par de días en mi
estadía, cuando todos se ponen elegantes y seductores, buscando dar un paseo por el lado salvaje con el misterioso
desconocido predicando el fuego del infierno y la condenación.
Es casi como si pudieran oler al pecador escondido debajo de las túnicas y los versos de la biblia de mierda.
En otra vida, hace años, caí en esta trampa una y otra vez. Pero la edad, y unos cepillos con casi conseguir mi tiro
tuercas fuera por un padre enojado o marido o quien sea, me han enseñado a pasar la cogida lejos de las mujeres les
gusta esto. Y eso sin contar el hecho de que Delilah Somerset está ocupando cada centímetro de mi cabeza.
Le sonrío con calma a Lizzie. "¿Y qué puedo hacer por usted esta hermosa noche, Sra. Purcell?"
Ella suspira. "Bueno, predicador ", ronronea, golpeando sus ojos. "Es mi alma mortal".
Resisto el impulso de poner los ojos en blanco.
“Ahh, por supuesto, Sra. Purcell. Bueno, mi tienda está abierta para todos, mañana por la mañana, a primera hora.
Ella pone mala cara. “Bueno, Sr. Marsden, no estoy tan seguro de que esto pueda esperar hasta la mañana. Ya ves, mi
alma está terriblemente cargada.
Me aclaro la garganta. "Sí, claro, está bien". Todo lo que quiero es paz y tranquilidad. Y whisky Y Dalila, lentamente,
montando mi polla arriba y abajo, supongo, si nos estamos dando detalles. Tengo cero paciencia o ancho de banda
para jugar estúpidos juegos coquetos con chicas ricas aburridas como Lizzie Purcell.
"Bueno, ¿qué parece estar pesando, Sra. Purcell?"
"Pecado, predicador".
Es muy difícil no poner los ojos en blanco otra vez. Es como si fuera el mismo guión, cada vez con estos tipos de
mujeres, los tipos que quieren tratar de seducir al predicador viajero.
“Sí, bueno, eso pondrá un peso en tu alma. Decirle qué, señorita Purcell ...
"Por favor, llámame Lizzie".
"Bueno, Lizzie , creo que a primera hora de la mañana, deberías venir con algunos amigos, y podemos unir nuestras
oraciones juntas y suplicar al buen señor que te libere de este pecado".
"Es carnal, predicador", murmura ella con voz ronca. "Pecado carnal".
"El mundo está lleno de tentación, Lizzie".
"Cuéntame sobre eso", ronronea, sus ojos se deslizan sobre mí otra vez sin vergüenza. ¿Dónde diablos están mis
pantalones?
"Seguramente lo haré", sonrío débilmente. " Mañana ".
Ella pone mala cara. "Pero predicador", dice en voz baja. "Seguramente esperaba que pudieras ... descargarme esta
noche".
"Genoveva-"
Ella comienza a caminar hacia mí, sus ojos encapuchados. "Mi, mi", ronronea, mordiéndose el labio mientras sus ojos
se deslizan sobre mí otra vez. "Mi palabra hizo que el buen Señor hiciera lo correcto por ti, Gabriel".
"Lizzie, tengo que insistir en que ..."
"¿Podrías liberarme de este pecado, predicador?"
" Lizzie- "
"¿Limpiar mi alma?"
"Em. Purcell ...
"¡Hace tanto calor , Predicador Gabriel, estar tan cerca de los fuegos de la condenación!"
Ella alcanza la corbata delantera de su vestido, y yo gimo. " Lizzie- "
"O tal vez solo eres tú , Gabriel", ronronea. Abre la corbata y, de repente, se encoge de hombros y se quita el vestido
para ponerse a sus pies.
Maldita sea.
Ella también tiene un pequeño número debajo: este conjunto de encaje negro de bragas y sujetador a juego, completo
con ligueros. Para cualquier hombre moral, esto debería haber terminado el juego. Esto sería hola ciudad del
pecado. Yo debería estar rasgando mis boxers y tropezarse con el mío para conseguir mis manos por todo su.
... Nada de esa mierda sucede, porque este no es quien quiero. No por una jodida milla de campo.
"Em. Purcell —digo en voz baja. "Creo que tienes una idea equivocada".
"Uh-uh, Gabriel", ronronea. “Podrías decir que eres un hombre de Dios, pero conozco a un pecador hambriento
cuando lo veo. Vamos, predicador ... es todo para ti. Lo que quieras, es todo para tomar ...
"Quiero que se ponga su ropa y se vaya a casa, Sra. Purcell".
Ella se pone rígida y, finalmente , esa sonrisa petulante y tímida se desvanece de sus labios.
"¿Perdóneme?" ella se eriza.
"Ve a casa, Lizzie," digo suavemente. "Estoy halagado, de verdad, pero-"
" Gilipollas ".
Ella gira, agarra su vestido del suelo y se lo pone furiosamente. Solo rodo los ojos a su espalda mientras ella resopla y
balbucea.
"Tienes nervios ", sisea.
"¿Perdón?"
"¡Oh, conozco su juego, señor!" Ella escupe. ¿Llevar a las mujeres de la ciudad? ¿Te ves muy guapo y hazles pensar
que estás allí para pasar un buen rato, solo para que puedas dominar algunas moralejas sobre ellos cuando
finalmente cedan y vengan a ti?
Arrugo mi frente ante la loca parada frente a mí. "¿De qué demonios estas hablando?"
"Estoy en sus juegos, señor!" ella canta. "Y voy a contarle a toda la ciudad sobre-"
"No estoy segura de querer entrar en una guerra de 'compartir', Sra. Purcell", gruño con fuerza. "¿Vos si?"
Ella se eriza, pero sus labios se cierran.
"Gilipollas", finalmente murmura antes de girar sobre sus talones y comenzar a marchar por el campo.
Solo parpadeo y me agacho para agarrar mi taza de whisky aguado y tibio. Golpeo el resto y sacudo la cabeza. El
pueblo me va a matar.
Me arrastro de regreso a mi silla y me desplomo en ella. Necesito concentrarme. Con el ceño fruncido, miro
alrededor y finalmente veo mis pantalones en el suelo detrás de mí. Los recojo y saco mi teléfono celular. Necesito
llamar a Kane.
Mi hermano responde después del cuarto timbre.
"Hermano Gabriel", dice con diversión con esa voz grave y áspera suya. "¿Cómo estás, mi hermano en Cristo?"
Pongo los ojos en blanco y me río. “¿Qué eres, un actor de método ahora? Sal de personaje y habla de mierda con
normalidad. He estado hablando en la iglesia todo el maldito día.
Kane mira. "Por desgracia, hermano, no soy más que un humilde servidor de la ..." se apaga con una risita. "¿Qué
pasa, hombre?" él se ríe en su discurso más normal.
Sacudo la cabeza y tomo un trago. Es curioso cómo los dos llegamos aquí, los dos jugando el mismo juego en
diferentes partes del país. Tenía dieciséis años y Kane tenía veinte cuando Jasper nos encontró en el centro de
Charleston, los clientes del bar. Lo hicimos todo, hombre: engañar a los niños de la fraternidad universitaria en las
mesas de billar, juegos de mierda de "encontrar el mármol" con tres tazas para los turistas en White Point
Garden. Fraude postal, fraude con cheques, estafas en hoteles. Lo que sea, y estábamos en camino de ser cinturones
negros en ese entonces.
Pero entonces, conocimos al gran maestro de mierda.
Jasper vio la derecha a través de nuestras pequeñas estafas y trucos de salón. Pero lo que vio fue talento en bruto,
supongo. Kane y yo habíamos estado en las calles durante aproximadamente un año para entonces, después de que
nuestros padres despegaran, y por cualquier razón, pero probablemente debido a los signos de dólar que podía ver
en nosotros, Jasper era como el tío que nunca tuvimos, y él tomó nosotros adentro. Nos llevó, nos tomó bajo su ala y
nos dio una clase magistral de estafa y estafa.
Quiero decir, Jasper era la Facultad de Derecho de Harvard. Entramos con títulos de licenciatura en trucos de cartas
y carteristas y salimos con doctorados en separar a los tontos de su dinero. Jasper ejecutó muchos esquemas, pero su
actuación principal fue la rutina del predicador viajero. Y hombre, el tipo prácticamente escribió el libro sobre
él. Para Kane y para mí, fue como aprender a tirar aros de Michael follando con Jordan.
Eso fue hace años, ahora. Después de que Kane y yo nos separamos para hacer nuestras propias cosas, Jasper fue
arrestado por fraude postal por el maldito FBI. Estuvo unos años en McCreary Federal Correctional Institution en
Kentucky antes de enfrentarse a la hermandad aria allí y se cortó el cuello en las duchas. Es una lástima, sin
mencionar una pérdida total de brillantez y talento. Pero también es un recordatorio aleccionador de lo que sucede si
te equivocas en este juego.
"No mucho, hombre", dije. "¿Cómo está el salvaje oeste?"
Kane y yo nos aseguramos de que nunca crucemos territorios o visitemos unos que el otro también haya sido, por
razones obvias. En su mayoría, me quedo en el medio oeste del norte y el sureste, y Kane toma la costa oeste, el
suroeste y parte de la costa del Golfo. Ahora está en Arizona, creo.
"El salvaje oeste es jodidamente genial, hombre", se ríe. "Hey, encontré uno nuevo para ti".
"¿Oh?" Lo escucho sonreír y tomo otro trago de whisky.
"Sí, mira esto. Es un medicamento para la artritis ".
Sí, realmente somos tan desvergonzados y horribles. Oye, paga las cuentas.
"¿Oh enserio?"
"Oh, amigo ", sonríe. "Mezcle un poco de aceite de mentol y un poco de lidocaína en dosis bajas con un gel
transparente, como desinfectante para manos".
"¿Y?"
"Da una sensación de hormigueo, un poco adormecedor, dura un tiempo y huele bien". El se ríe. "Mierda, hombre, la
gente también jura por esto".
Me río y sacudo la cabeza y tomo otro trago. "Supongo que esto no tiene base en hechos médicos".
"Ninguno", sonríe Kane al teléfono. "Y cobro veinticinco dólares por una botella de mierda de seis onzas".
Yo silbo "Jesús."
“Putos hombres, hermano. Los negocios están prosperando." Puedo escuchar el sonido "crssshht" de una lata de
cerveza abriéndose. "Entonces, ¿cómo está ... dónde estás, Florida?"
"Georgia."
El silba. “Joder, hombre. Ese es el país del oro allí mismo ".
Asiento, tomando un trago antes de fruncir el ceño. "¿Oye, Kane?"
"¿Si?"
"Alguna vez pensaste que este trabajo es ... ¿sabes?"
"No seas suave conmigo, Gabe", dice con una pequeña risa.
"No, no como ... escucha-"
"No, escucha", suspira. “¿Quieres una conciencia? Ve a vender autos usados o conviértete en político ”.
Arrugo la frente. "No estoy seguro de que sea un gran ejemplo".
"No, es un ejemplo fantástico, porque esos imbéciles mentirosos tienen más escrúpulos que nosotros, y ambos lo
sabemos". Suspira y toma un trago de cerveza. "Gabe, ¿quieres ser honesto? Se honesto contigo mismo. Nunca
compres tu propia mierda, hermano. Somos lo que somos, tal como Jasper nos enseñó ".
"Cómo ser estafadores".
“Cómo ser hombres de negocios , Gabe. Cómo vivir en el camino ".
"Cómo embotar nuestras almas".
Él suspira. “Gabe, Jasper está en la tumba de un pobre porque nunca supo cuándo apretar los frenos, y nunca supo
cómo ahorrar o cómo mantenerlo en funcionamiento. Ahí es donde estamos mejor. Vamos, hombre, ¿de dónde
vienen los segundos pensamientos? Estás en la jodida Georgia . Jesucristo, Gabe, es como buscar oro en el jodido
fuerte de Knox. El se ríe. "Eres un imbécil, no puedo creer que te haya dejado tener el sureste, y aquí te estás
quejando de eso".
Yo sonrío. “No, no es nada. Solo ... no lo sé. Pensando, supongo.
Tomo otro sorbo y miro de nuevo el campo, mis pensamientos se dirigen a lo obvio: Dalila.
"¿Te acuestas en estos días?"
Pongo los ojos en blanco. "Kane, relájate".
Él ríe. "Te digo que te estás negando a ti mismo el mayor regalo de Dios para la humanidad".
Yo resoplo "¿Sexo?"
"Joder sí! Bueno, sin rodeos, la mamada podría ser su mejor regalo, pero follar es un maldito segundo.
Me río y bajo el último trago de mi whisky. “Me tengo que ir, hombre. Es tarde aquí y tengo que levantar esta
carpa. Además, tengo un sermón para trabajar mañana.
“Golpéalos con el pilar de sal uno. Hombre, ese es mi favorito. Y estás en Georgia, van a comer esa mierda ”.
Yo sonrío. "Gracias hombre. Y gracias por contestar.
“En cualquier momento, hombre. Y oye, Gabe.
"¿Si?"
“Mantén el rumbo, hombre. Puedes pensar en tus objetivos de vida cuando tomamos un descanso en el invierno. Por
ahora, gana. Haz ese efectivo. Haz heno mientras brilla el sol, ¿sí?
"Suena bien."
"Más tarde, hombre".
Cuelgo y alcanzo la botella una vez más para flotar el hielo aguado en mi taza. Tomo un trago largo y mi mente se
suaviza mientras me recuesto en la silla. Sé que esta noche fue un error. Sé que ir allí fue malo, pero arrinconarla así,
soltar mi armadura y dejar que me viera, el verdadero yo, el malvado, era una muy mala idea.
Pero fóllame, ese jadeo ; ese gemido La forma en que jadeaba cuando mis labios rozaban su oreja, y la forma en que
su cuerpo se arqueaba como si se muriera por tocar el mío. Gimo, recordando el aroma de su piel desde tan cerca:
madreselva y vainilla. El recuerdo de su olor me hace la boca agua, y recordar la sensación de su cuerpo suave y
húmedo en mis manos en esa bañera, y luego la forma en que se arqueó en ese porche hace que mi polla palpite en
mis boxers.
Mis bolas se hinchan de esperma, y miro hacia abajo y gruño a la enorme y obscena carpa en los boxers. Estoy tan
jodidamente duro que está alejando la cintura de mis abdominales acanalados. Aprieto los dientes, y algo feroz y
salvaje chisporrotea dentro de mí.
A la mierda
Golpeo el resto de mi bebida, dejo la taza a un lado y deslizo mis manos en mis boxers. Los empujo hacia abajo, y mi
polla gorda e hinchada se suelta para golpear fuertemente contra mis abdominales. Creo que está bastante bien
establecido que en realidad no soy un hombre religioso. Pero si lo fuera, probablemente haría una nota para enviar
una tarjeta de agradecimiento al tipo grande de arriba por la bendición entre mis muslos.
Gimo y paso mi mano alrededor de mi eje grueso y palpitante. Siseo de placer cuando mi agarre se aprieta y mi
mano se desliza hacia arriba y hacia abajo por mi longitud. Cierro los ojos y, una vez más, mis fantasías vuelven a
caer en Dalila. Pienso en ella en esa bañera, inclinada y mirándome por encima del hombro, rogándome que la folle
su pequeño coño.
Me agacho y ahueco mis pesadas bolas llenas de esperma, y las ruedo debajo de mis dedos. Mi polla se contrae y
pulsa, la vena palpita a lo largo de ella mientras gruño y acaricio lentamente. Precum cuentas en la punta y gotea
sobre mi eje y mis dedos, haciéndolo resbaladizo y brillante a la luz de la luna. Me imagino a la pequeña y dulce
Dalila como mi pequeño y sucio juguete. La imagino de rodillas, mirándome con la boca abierta y ansiosa,
rogándome que me trague la polla.
Me la imagino boca arriba, piernas arriba y rodillas junto a sus tetas mientras me agacho entre sus piernas y paso la
lengua desde su clítoris hasta su pequeño ojete. Sacudí mi polla gorda e imaginé el sabor de madreselva de su coño
en mi lengua. La imagino chillando y gimiendo por más y jadeando mientras me pongo de pie y presiono la cabeza
hinchada de mi polla contra su pequeño culo virgen apretado.
Más rápido y más rápido, mi mano se mueve hacia arriba y hacia abajo por mi palpitante y tembloroso eje. Siseo en
voz alta de placer, y mis abdominales se tensan. Mis bolas se tensan, y justo cuando me imagino a la dulce e inocente
pequeña Dalila montando mi polla y viniendo sobre mis bolas, la pierdo por completo. Siseo, y el semen comienza a
bombear desde mis bolas. Mi polla se retuerce y se sacude en mis manos, y con un gemido, siento que mi semen
brota de la punta en cuerdas gruesas y pesadas.
Caliente y pegajoso, mi semen salpica mi mano, mis bolas y mis abdominales, hasta que estoy jadeando y volviendo
a la silla.
Mierda .
No sé qué me está pasando, y no sé cómo es que esta chica se está metiendo debajo de mi piel y follando con mi
cabeza. Pero sí sé que no hay forma de sacarla. Sé que estoy en problemas.
Sé que la quiero a ella.
…Dios ayúdame.

CAPÍTULO SEIS
DALILA
E L SOL DEL MEDIODÍA es cálido y abrasador cuando salimos de la camioneta de papá en el campo a las afueras de la
ciudad. Y sin embargo, a pesar del calor sofocante, tiemblo cuando miro a través del campo a Winnebago.
La guarida de Gabriel .
Trago saliva y me arde la cara. Me retuerzo, moviéndome sobre mis tacones bajos y alisándome el vestido. Es un
lunes por la tarde, pero parece que la mitad de la ciudad ha cerrado para asistir al primer servicio de "iglesia" de
Gabriel. Allí, de pie junto al Winnebago, hay una gran carpa blanquecina de dos mástiles, como una pequeña carpa
de circo, en realidad.
... Ya sabes, el tipo de tienda donde vas a ver bestias salvajes. Muy parecido al que estamos a punto de ir a ver,
llamado Gabriel .
Mi cara se sonroja de nuevo, y trago el calor lo mejor que puedo. Mi mente pasa a la noche anterior, y la forma en
que él ... bueno, la forma en que invadió mi mente. La forma en que me tocó sin tocarme realmente. La forma en que
puso el pecado en mi cabeza y me mantuvo despierto toda la noche rezando para que la maldad se fuera al
amanecer.
Espero, rezo , que así sea. Pero cuando miro a través del campo hacia la carpa, y cuando pienso en el hombre que
conozco está adentro, mi estómago se agita. Mis muslos se aprietan y me muerdo el labio, tratando de hacer
retroceder los malos pensamientos carnales que enterró en mi cabeza y mi alma desde anoche. Frunzo el ceño y mi
boca se tensa. Una vez más, me digo lo que me he estado diciendo toda la noche en vela: que Gabriel Marsden es
el diablo .
Y no puedo decirle a un alma. Yo sé lo que es, y no es que yo estoy preocupado por él tratando de “llevarme con él” o
algo por el estilo. Es que sé que sus palabras sobre mí no son mentiras. Son ... bueno, son verdad.
... He sido pecaminoso. He albergado pensamientos malvados y carnales. Soy no pía. Y sé que si trato de decirle a
alguien la verdad sobre Gabriel, la verdad sobre mí inevitablemente saldrá a la luz. Y así, estoy silencioso y
sonrojado mientras sigo a mamá, papá y Paul a través del campo hacia el servicio de la Bestia.
Realmente parece que la mitad de Canaán está aquí, y apenas encontramos asientos en la última fila de sillas
plegables, la música de órgano comienza a sonar desde los altavoces que cuelgan en las esquinas de la tienda. Las
luces en el interior se atenúan, y de repente, con una túnica blanca ondulante, el mismo Diablo toma el púlpito en el
pequeño escenario en la parte delantera.
... A aplausos .
Yo ceño y muerdo el labio cuando parte del público de los ciudadanos ponerse en pie y volviendo loco aplauso para
él. Gabriel les sonríe a todos, dándoles esa sonrisa deslumbrante y hermosa. Y que Dios me ayude, cuando sus ojos
me recorran y se me peguen , una oleada de calor se apodera de mí. Deliberadamente miro hacia otro lado, pero
cuando cuento hasta cinco y levanto la cabeza otra vez, jadeo.
Todavía me está mirando directamente, sonriendo con locura.
Finalmente, se vuelve hacia el resto de la congregación y levanta las manos.
"¡Hermano y Hermanas!" grita en voz alta, pero fácilmente. Su voz ronca y profunda llena la tienda como un maestro
de ceremonias de circo, y nosotros somos sus multitudes que comen palomitas y arrojan maní.
"Gracias a todos por venir hoy para mi primer servicio en esta gran ciudad en el propio país de Dios".
Saludos, por supuesto .
"Hoy, quiero hablarte sobre los pecados de la carne".
Me pongo rígido Tienes que estar bromeando.
" Pecado carnal , hermanos y hermanas", suspira con una sacudida dramática de su cabeza. “Te estoy hablando de
albergar las malvadas tentaciones del mismo Satanás. La lujuria y la codicia de la carne. La debilidad de todos los
hombres y el mejor obstáculo de la Bestia para mantenerte alejado de las puertas del cielo.
La multitud murmura, y Gabriel profundiza. Y honestamente, estoy casi impresionado. Durante media hora, el
hombre con la sonrisa malvada, las palabras pecaminosas y los labios que rozaron mi oído anoche y enviaron calor a
través de mi núcleo de la manera más carnal imaginable, le habla a la multitud sobre los peligros de,
bueno, él . Advierte sobre la tentación y las insinuaciones. Advierte contra ceder ante la seducción del corazón y la
carne, y durante todo el maldito tiempo , me está mirando directamente con esos ojos que sonríen y arden de calor.
Me siento allí en su tienda, retorciéndome y rebosando de calor mortificante. Sé que la tienda de Gabriel no
es realmente una iglesia, no con un hombre como él en el púlpito. Pero aún así, se siente aún más terrible estar
luchando contra los sentimientos que ha puesto dentro de mí mientras está rodeado de un sermón sobre Dios y la
tentación.
Cuando finalmente termina, corro, no camino, de regreso al camión. No estoy cambiando un poco con Gabriel
después del servicio, y cuando mi familia desconcertada me alcanza, lo explico con calambres estomacales. Lo cual es
una mentira. Hermoso, un pecado más para agregar a mi creciente repertorio de condenación.
Necesito iglesia Necesito una iglesia de verdad .
D E ALGUNA MANERA , me mantengo ocupado, lo que significa que mi mente está ocupada, el resto del día. Ayudo a
papá a cambiar un neumático de su camioneta. Revisé algunos de los folletos que Paul está reuniendo para obtener
más donaciones para su iglesia. Me sumerjo profundamente en el horneado con mi madre, hasta que toda la cocina
está cubierta de harina y huele divina. Incluso me pongo los auriculares y salgo a dar una carrera larga y dolorosa,
incluso con lo pegajoso y caliente que está afuera.
Todo para aclarar mi mente de Gabriel Marsden.
A la hora de la cena, los horribles pensamientos de la tarde, sin mencionar los de la noche anterior, son un recuerdo
lejano. Principalmente. Termino de lavar algunos platos en la cocina y me dirijo escaleras arriba a mi habitación, y
una vez que la puerta está cerrada, me derrumbo sobre mi cama.
Es agotador evitar que tu mente piense en lo que quiere pensar todo el día.
Pero en cuanto mi cabeza golpea las almohadas, la pared que construí alrededor de esos pensamientos se
derrumba. En segundos, en realidad. Me sonrojo, y mi núcleo se aprieta cuando comienzo las repeticiones
interminables de Gabriel moviéndose hacia mí anoche. Me muerdo el labio y recuerdo la sensación de su enorme
cuerpo moviéndose contra el más pequeño. Recuerdo la forma en que olía a aftershave y melocotón. La forma en que
el toque de sus labios en mi oído envió sentimientos y deseo a través de mí, pasé toda mi vida ignorando y
alejándome deliberadamente.
Nunca ha habido un niño, y mucho menos un hombre. En Canaan? Por favor. Las únicas "parejas" en nuestra escuela
secundaria se casaron antes de graduarse, y la mayoría de ellas esperan su primer hijo para Navidad de este año. De
nuevo, tengo un teléfono, internet y Netflix. Entiendo que no en todas partes es como aquí, y que hay escuelas
secundarias donde las personas de mi edad “salen casualmente” y experimentan lujuria carnal e intentan casi todo
antes del matrimonio.
Toda mi vida me han dicho cuán equivocado es eso, y que es vergonzoso y malvado tratar de hacer esas cosas con
alguien que no sea la persona que es su esposo o esposa bajo los ojos de Dios. Me han enseñado que cualquier
cosa prematrimonial es un pecado digno de condenación eterna. O, al menos, un pecado digno de nunca encontrar su
único, porque cualquier cosa además de una "boda blanca" real es una burla de la celebración en sí.
La cuestión es que nunca he estado seguro si realmente lo creo. Quiero decir, entiendo el mensaje de amor detrás de
la prepotencia temeraria involucrada en avergonzar a la gente para que "espere". Conocí a una chica en la escuela un
año por encima de mí, Laura, que salió con James Lahey durante años, y que seguramente se acostó con él, en
múltiples ocasiones. Lo sé porque James Lahey es un pequeño cretino repugnante y confinado al infierno que se lo
contó a toda la escuela. Su familia terminó mudándose en su último año, a Savannah, y recuerdo que la mayoría de
la escuela la evitó como si estuviera contaminada la última semana que pasó en Canaán.
La cuestión es que busqué a Laura en línea, por curiosidad. ¿Y sabes qué? Ella está muy bien. La he acechado en las
redes sociales y está en la Universidad de Clemson, como si estuviera pasando el mejor momento de su vida. Ella
está en la lista de Dean allí, especializándose en bioquímica, y juega en el equipo de fútbol femenino. Ella tiene un
novio guapo que se ve muy bien, y es un miembro destacado del ministerio juvenil en el campus.
El punto es que no es una ramera o leproso descartada. Ella todavía está con la iglesia. Presumiblemente, Dios sigue
siendo parte de su vida. Su novio incluso tiene una publicación de aniversario para ella que menciona que tuvo que
"superar algunos malos para encontrar el bueno", por lo que, presumiblemente, ambos saben que han "estado con"
otras personas. Y todavía están felices y juntos.
Son cosas así las que me hacen cuestionar todo. Y no estoy tan seguro de que cuestionar las cosas sea algo malo. No
estoy seguro si el Dios en el que creo estaría enojado con algunas preguntas.
Sin embargo, con lo que estaría enojado es con el tipo de pensamientos que tengo sobre Gabriel Marsden. Este no es
un chico de mi edad. Tengo curiosidad por las "citas". Gabriel es un hombre , mayor que yo, y mis pensamientos no
son sobre "salir con él".
... Son mucho, mucho más malvados que eso.
Los pensamientos que he hecho todo lo posible para evitar todo el día, desde la noche anterior, en realidad, no
implican que Gabriel me lleve a cenar y al cine. No implican tomarse de las manos o dar un paseo al anochecer. Son
... más carnales que eso. Mucho, mucho más carnal, en realidad.
Me sonrojo y mi cuerpo se estremece cuando me hundo en el edredón en la oscuridad de mi habitación. Mi piel se
siente eléctrica, y un calor diabólico comienza a acumularse entre mis muslos, no importa cuánto intente
apretarlos. No, los pensamientos que albergo sobre Gabriel son pensamientos malvados y pecaminosos. Lo
involucran agarrándome y besándome de una manera que no se parece en nada a los castos besos de Hollywood en
comedias románticas. Lo involucran mordiendo mi piel y arrancando mi ropa de mi cuerpo pieza por pieza.
Implican sus manos sobre mí, y especialmente en lugares donde ninguna mano más que la mía ha tocado. Me
sonrojo y tiemblo en la cama cuando los pensamientos sucios se apoderan y aplastan el resto de mis defensas. Cierro
los ojos y me pongo una manta. Mi respiración se vuelve irregular y, lentamente, desabrocho mis jeans. Trago con
fuerza y los empujo hacia abajo debajo de la manta, y mis manos se deslizan sobre mi barriga.
Mis dedos encuentran el borde de mis sencillas bragas de algodón, y sé que está mal, es pecaminoso y horrible , pero
el Diablo se ha apoderado de mí. La Bestia misma ha hundido sus garras en mí, y no puedo parar.
Jadeo cuando mis dedos se deslizan debajo de la cintura y empujo profundamente mis bragas. La piel lisa se
convierte en pelo suave y suave debajo de mis dedos, y luego con un jadeo amortiguado y un gemido sofocado, que
se convierte en humedad húmeda, suave y aterciopelada. Mis dedos golpean la pequeña protuberancia entre mis
piernas y jadeo bruscamente. Giro la cabeza, aprieto los ojos y muerdo la almohada mientras mis dedos se empujan
hacia abajo. Me abrí, sonrojándome horriblemente cuando un dígito se deslizó para burlarse de mi humedad.
Sobre mi ... mi coño .
Incluso pensando que la palabra cruda me tiene temblando en la cama, y mis dedos se vuelven más ansiosos. Froto
ese pequeño bulto de nuevo, que sé que es mi clítoris, simplemente no puedo ni siquiera decirlo en mi cabeza. Sigo
frotándolo con un dedo mientras mi otra mano se desliza hacia abajo. Empujo un dedo hacia abajo entre mis labios, y
gimo en la almohada cuando encuentra mi abertura. Lo deslizo dentro, y el placer comienza a alcanzarme.
Cuando cierro los ojos con fuerza, es Gabriel tocándome. Es el mismo Diablo empujando sus manos entre mis
piernas y tocándome donde ningún hombre lo ha hecho. Me está acariciando cada vez más cerca de algo ... apretado,
caliente y tembloroso. Algo que siempre he detenido porque me da miedo. Pero esta vez, sé que no hay que parar.
Con Gabriel en mi cabeza, y esos penetrantes ojos azules mirándome, y esos labios en los míos, en mi cabeza, se está
moviendo sobre mí en la cama. Él está extendiendo mis piernas, y en lugar de su dedo, es su ... su ...
Me sonrojo.
Su polla que se desliza entre mis labios y comienza a hundirse en mí.
Reclamándome Llevándome. Condenándome a dulce, jadeante, gimiendo y golpeando el infierno y la condenación.
Me froto más rápido y mis caderas comienzan a arquearse de la cama. Ya he pasado a donde he ido antes, sé que la
explosión es casi inevitable esta vez. Gimo en la almohada, mi pulso palpita en mis oídos y mi cuerpo se tensa,
aprieta y se prepara para explotar. Mis dedos frotan mi clítoris con más fuerza, y estoy a punto de romperme en
cualquier momento.
Cuando llaman a la puerta de mi habitación.
"Dalila, cariño?"
Casi tengo un ataque al corazón .
Con un grito ahogado de pura mortificación, literalmente me tiro de un lado de la cama, llevándome la mesita de
noche y los libros. Mi madre jadea al otro lado de la puerta.
“Dalila? ¡Qué fue eso!"
"¡Está bien! ¡Está bien!" Grito, encogiéndome y sonrojándome casi dolorosamente de vergüenza. "¡No entres, estoy
cambiando!" Grito mientras pongo mis bragas con furia en su lugar y levanto mis jeans. Me estremezco cuando
siento cuán húmedas están mis bragas contra mí, un recordatorio aleccionador de lo cerca que me puse de esa
línea. Cuán cerca del pecado llegué.
Tomo una bocanada de aire y me siento allí en el piso de mi habitación, temblando.
"Dalila?" Mi madre llama de nuevo.
"¿S-sí?" Yo grazno. Señor, solo llévame ahora, ¿por favor?
"Cariño, envolví un poco de comida extra de la cena, ¿y esperaba que se la llevaras al Predicador Gabriel?"
Mi corazón da un vuelco y mis ojos se abren.
No. Lordy , no. No hay un millón y medio.
"Oh, mamá, me estaba preparando para la cama".
“Oh, cariño, ambos sabemos que el buen predicador apenas tiene dos centavos para frotar juntos para una buena
comida. Es verdaderamente un hombre desinteresado de Dios, viaja por el país en lo que puede, difundiendo su
palabra. ¿Piensa caritativamente, Dalila? ¿Por favor?"
"Mamá-"
“Tu padre dice que tú también puedes conducir la camioneta. No es necesario que camines a mitad de camino por la
ciudad en la oscuridad.
Me estremezco, mirando un punto en el suelo y sintiendo esta vergonzosa mezcla de miedo y emoción .
"Mamá-"
"Dalila", dice ella, mucho más escuetamente esta vez. “Me encantaría dejar de pedir , si lo que quiero decir.”
Trago y tiemblo, sabiendo que esto está sucediendo ahora. "Sí, mamá", finalmente veo en silencio. "Sí, yo lo
entiendo. Déjame vestirme.
"¡Oh, Gabriel no necesita que te vistas para él, cariño!" ella ríe. ¡Lo que sea que estés usando está bien! Simplemente
no quiero que sea demasiado tarde, ¿de acuerdo?
Mierda. Doble mierda.
"Sí, estoy ... está bien", susurro mientras me levanto del suelo. Levanto la mesa volcada y vuelvo a colocar los libros
en su lugar. "Ya voy."
No, vendrías .
Me sonrojo ferozmente por la voz sucia en mi cabeza. Me acerco al espejo y miro mi cara roja y enrojecida: mis labios
jadeantes, mis ojos grandes y pecaminosos. Mi arcón agitado, y la simple camiseta y jeans que llevo.
Y luego, sabiendo lo absurdo que es, y sabiendo lo malvado que es pensar en términos como este, rápidamente me
quito la ropa y tomo una blusa de manga corta y una modesta falda que acabo de comprar hace una semana y
refugio Todavía me lo puse de mi tocador. Me sonrojo furiosamente y abro mi cajón de ropa interior para un nuevo
par, pero gimo cuando me doy cuenta de que lavé la ropa antes y que todo está abajo en el sótano.
Gran .
Pero entonces, por supuesto, me sonrojo aún más profundo y sentir aún más pecaminoso, ya que estoy realmente
preocupado acerca de lo que la ropa interior que llevo cuando voy a llevar la cena a un predicador.
... No importa lo malvado que sea.
"Dalila!"
"¡Viniendo! ¡Ya voy!" Jadeo mientras me aliso la falda y la blusa, me echo hacia atrás mi largo cabello rubio, respiro
hondo y tembloroso y voy hacia la puerta.
Hora de enfrentar la música.
Es hora de mirar a la Bestia a los ojos.
Hora de entrar en la guarida del león.
Que el cielo me ayude.

CAPÍTULO SIETE
DALILA
ESTO ESTA BIEN. Esto está totalmente bien .
Trago saliva mientras el camión retumba por el camino rural que sale del extremo este de Canaán. Las sobras de la
cena de mamá están envueltas en papel adhesivo y tupperware en el banco junto a mí, pero ni siquiera el olor a
pastel de nuez todavía caliente me está arrancando de mi cabeza. Ni siquiera el olor a madreselva que entra por la
ventana enrollada.
No puedo creer que esté haciendo esto, caminando directamente hacia la maldita guarida de los leones, como una
ofrenda. Estoy solo , todavía estoy zumbando y hormigueando vergonzosamente por lo que casi no sucedió hace
quince minutos en mi habitación, y estoy a punto de caminar hacia la puerta principal del hombre que está
volteando lentamente todo mi mundo. arrastrándome a la condenación pecaminosa.
Sí, no, no hay nada "bien" en esto.
El bosque se agota y, de repente, está la gran extensión de campo de hierba. Al otro lado, veo las luces bajas de su
Winnebago y la gran carpa de circo que está al lado. Saco la camioneta del camino hacia un pequeño claro en la
hierba, y apago el motor. Me estremezco en la oscuridad, a pesar de que hace bochorno y calor afuera. Trago, y mi
piel hormiguea.
De acuerdo, dentro y fuera. Voy a ir allí, darle la estúpida comida, y luego dar la vuelta y correr, no caminar, de
regreso aquí para alejarme. Fácil, verdad?
Trago de nuevo y salgo de la cabina del camión, con la tupper en la mano. Paso a paso, avanzo por el campo hasta su
configuración, mi corazón late cada vez más rápido a medida que me acerco. Finalmente, entro en el suave
resplandor de la luz de una pequeña luz exterior en Winnebago. Me estremezco y me acerco a la puerta, y antes de
que pueda salir y salir corriendo, llamo.
Solo hay silencio a cambio.
Frunzo el ceño y llamo de nuevo.
"Señor. ¿Marsden?
La puerta detrás de la puerta de la pantalla está abierta, y me asomo. Está lo suficientemente limpia por dentro, pero
tampoco es tan grande. Y definitivamente no está allí. Incluso puedo ver que la puerta del baño está abierta. Frunzo
el ceño y retrocedo un paso hacia la puerta y miro alrededor.
"¿Predicador Gabriel?" Yo digo suavemente. "Señor. ¿Marsden?
De nuevo, nada más que silencio. Trago saliva y empiezo a caminar hacia la tienda. En la puerta, donde se retiran las
aletas, miro hacia adentro, pero también está vacía. Frunzo el ceño y estoy a punto de cancelar todo, cuando noto un
brillo detrás de la pared en la parte trasera del pequeño escenario que sostiene el púlpito. La tienda se extiende hacia
atrás un poco, y veo un parpadeo en la suave luz brillante.
Movimiento.
"Señor. ¿Marsden?
Frunzo el ceño y empiezo a caminar en silencio por el pasillo cubierto de hierba entre las filas de sillas plegables. Me
acerco al púlpito y al pequeño escenario, y puedo escuchar un suave ... Supongo que es un sonido burbujeante,
detrás de la pared del fondo. La luz parpadea de nuevo con movimiento, y respiro temblorosamente mientras
camino hacia la derecha del escenario y empiezo a arrastrarme por el borde hasta el área detrás del escenario.
"Señor. Marte, ¡Dios mío! Yo grito , porque estoy casi seguro de que estoy mirando a un hombre muerto desplomado
sobre el borde de la bañera de bautismo, su cabeza cayó hacia atrás. Pero en el mismo instante en que grito, el
hombre muerto salta unos dos pies fuera del agua y gira para mirarme.
... Se me cae la mandíbula y mi corazón se salta probablemente dos o tres latidos. Sí, no, no un hombre
muerto. Solo uno desnudo .
Grito de nuevo y me giro, dejando caer la comida al suelo y cubriendo rápidamente mis ojos. Pero no hay sin ver lo
que acabamos de ver, que era cada pulgada de ranurado, esculpido, musculoso, tatuado cuerpo de Gabriel Marsden,
desde la parte superior de la cabeza básicamente a las rodillas.
Todo de él.
"¡Lo siento mucho!" Grito. "¡Lo siento! ¡Lo siento! Estoy-"
Ahí es cuando me doy cuenta de que se está riendo. Ruidosamente. Trago saliva y empiezo a darme la vuelta antes
de darme cuenta de que no se ha movido en absoluto, ni que de alguna manera se ha vestido mágicamente. Entonces
me giro, manteniendo mis ojos cerrados con mis manos sobre ellos.
"Tú ... qué estás ..." Jadeo un suspiro tembloroso. "¡Qué estás haciendo!"
Detrás de mí, Gabriel se ríe. “¿Qué estoy yo haciendo? No estoy traspasando, por mi parte.
Me sonrojo mucho. "Lo estoy, ¡lo siento!" Yo tiemblo. “¡No estaba tratando de entrar o espiarte! Yo era-"
Me detengo porque se está riendo de nuevo.
"Dalila", finalmente gruñe en voz baja con esa voz que envía calor y escalofríos para colocarlo mucho, no
debería. "Está bien. Te estoy tomando el pelo. Puedes darte la vuelta.
Yo trago. "¿Eres decente?"
"Decente desnudo, sí".
Mi sonrojo de alguna manera se profundiza aún más.
“Yo ... te estaba trayendo la cena. Mi madre ... "Trago, aún temblando por lo que acabo de ver. "Voy a ir."
“No, espera. Aférrate. Pásame esa toalla y podremos hablar.
Yo trago. "¿Dónde?"
"Será mucho más fácil si abres los ojos".
Esbozo una pequeña sonrisa y, apartándome de él, abro los ojos.
"Justo allí, sobre la silla".
Asiento y lo agarro, y luego empiezo a caminar hacia atrás hacia él. Gabriel comienza a reírse y yo suspiro.
"No tendría que hacer esto si estuviera usando ropa , Sr. Marsden", le dije con firmeza.
El resopla. ¿ Sr. Marsden ? ¿Qué es esto, clase de matemáticas?
"Bien, Predicador Gabriel".
"Solo Gabriel, ¿de acuerdo?"
Asiento y empujo mi brazo hacia atrás, toalla en mano. Me estremezco cuando siento sus dedos cálidos y húmedos
rozar los míos mientras me los quita.
"Gracias."
"De nada," respiro. Tragué saliva cuando escuché el chapoteo de él saliendo de la bañera, y luego un clic. El suave
sonido burbujeante de antes se calma.
"¿Que estabas haciendo?"
"Relajarse en mi bañera de hidromasaje".
Yo resoplo "¿Tu bañera de hidromasaje ?"
"Sí, mi, puedes darte la vuelta, ya sabes".
"¿Eres decente ahora?"
"Soy bastante decente desnuda, para ser honesto".
Gimo y siento mi cara arder. "¿Estás vestido , Gabriel?" Digo brevemente, haciendo todo lo que esté en mi poder para
olvidar la vista de su ... um, todo de él. No funciona.
"Estoy usando una toalla sobre mis partes de no-no, si eso es lo que estás preguntando".
Solté una risita e inmediatamente me puse rojo brillante. Gabriel se ríe entre dientes.
"En serio, puedes mirar".
Lentamente, no callado creyéndole, me giro. Al instante, aspiro un soplo de aire, y mi pulso golpea en mis
oídos. Técnicamente , sí, está cubierto. Pero por cubierto, quiero decir que tiene una toalla que lo cubre desde muy por
debajo de su ombligo hasta aproximadamente dos tercios de sus muslos musculosos. Sinceramente, ni siquiera sabía
que hacían toallas tan pequeñas, y toda mi cara se quema antes de mirar al techo de la tienda.
Gabriel resopla una carcajada. "Oh, vamos, ¿no te has vestido lo suficiente?"
"Eres ..." tartamudeo, sonrojándome. "¡Estás prácticamente desnudo!"
“Por definición, no lo estoy. Entonces, puedes mirar.
"No creo que pueda".
"Como predicador, te digo que puedes".
"Bueno, no estoy seguro de que debería ", susurro. "Tampoco estoy seguro de que realmente seas un predicador", solté
con un chasquido antes de jadear y rápidamente cerré la boca. Pero Gabriel solo se ríe profundamente.
"Ahh, y he aquí, la verdad te ascenderá al reino de los cielos".
Esta vez, bajo la mirada y lo fulmino con la mirada. "Eso no es de la Biblia".
El se encoge de hombros. "Yo nunca dije que era."
Se encorva contra el costado del tanque de bautismo, con sus musculosos brazos cruzados sobre su grueso
pecho. Sus abdominales se ondulan por sí solos, y esa maldita toalla es como el propio letrero de neón del diablo, con
esos surcos de sus caderas apuntando directamente hacia el Infierno y la condenación misma.
"Ojos aquí, jovencita".
Me sonrojo y mis ojos vuelven a los suyos. "Diste a entender que así era".
Él sonríe. "¿Yo que? Son solo palabras, Dalila.
"Bueno, no puedes simplemente agregar 'ye' y 'shalt' a tonterías y pasarlo como escritura," murmuro.
Él suspira. "¿Necesitas algo?"
"¡No!" Me quebré. “Solo te estaba trayendo comida. Es ... Me giro y frunzo el ceño ante el tupperware al revés en el
suelo.
"Lanzado", ronronea con una sonrisa. No puedo evitar sonreír, pero rápidamente me lo limpio de la cara.
Me frunce el ceño. "Espera, ¿dijiste bañera de hidromasaje?"
"Yo hice. Puedes venir a probarlo.
Arrugo la frente. "¿Dónde?"
Él sonríe y acaricia el costado del tanque de bautismo, y mi frente se frunce. "No eres serio."
"Seguro que lo soy. Un feligrés de las afueras de Knoxville, hace aproximadamente un año, donó gentilmente a este
bebé ”. Palmea un artilugio de aspecto extraño sujeto al borde de la bañera que parece un pequeño motor fuera de
borda.
"Y eso es…?"
Él se encoge de hombros, esos hombros musculosos se ondulan y mi alma mortal se desliza una pulgada fuera de mi
alcance.
“Es una bobina de calentamiento con una manguera de aire. Creo que está destinado a bañeras de camping o
pequeñas piscinas elevadas. De todos modos, hace el truco ".
Arrugo la frente. "¿De convertir un tanque de bautismo en una bañera de hidromasaje?"
"Exactamente."
Pongo los ojos en blanco. “¿Y esto es necesario para tu 'mensaje sagrado'?” Gruño secamente.
Gabriel sonríe ampliamente, y esa sonrisa enloquecedora me envía un escalofrío por la espalda.
“A un pastor se le permiten sus pequeñas comodidades terrenales, Dalila. No creo exactamente que el agua caliente
y burbujeante sea pecado, ¿verdad?
"¿Qué tal si nos sentamos desnudos en una bañera de bautizo!"
Sus ojos se clavan en los míos. "Puedes venir a probarlo y avisarme si se siente pecaminoso".
Mi mandíbula golpea la hierba y mi cara se pone roja. Miro más allá de él y mis ojos se entrecierran a la botella de
whisky que se encuentra en el borde de la bañera.
"¿Y supongo que eso es parte de tus 'comodidades terrenales'?"
"Oh sí."
Jadeo, y él solo sonríe y lo alcanza. Me mira directamente a los ojos y toma un trago de la botella mientras mi
mandíbula cae una vez más.
" Gabriel "
"¿Quieres un poco?"
Me erizo. "Tengo dieciocho años".
Su mandíbula se mueve, pero no se mueve. "¿Y?"
¡Y no puedo beber! ¡Tampoco quiero! ¡Y además, Canaan es una ciudad seca ! Me quebré.
Él sonríe. "¿Vas a arrestarme?"
"No, pero voy a denunciarlo".
Él suspira. "Dalila?"
"Qué", me quejo.
"Realmente creo que necesitas relajarte".
Trago saliva y mi cara se enrojece. "Estoy perfectamente relajado".
" No , en este momento eres como un pequeño perro narcótico rabioso que huele drogas".
" Disculpe ?" Yo siseo.
Él sonríe. “Vamos, solo date un chapuzón. Es extremadamente relajante ".
Ladro una risa y Gabriel sonríe.
"¿Qué?"
"¿Qué?" Arrugo la frente. "Yo-" Me sonrojo. "¿De verdad crees que es apropiado que un predicador se sumerja en una
bañera de hidromasaje desnuda en una bañera de bautismo con sus feligreses?"
Su sonrisa malvada se ensancha. “No, Dalila, no lo hago. Tienes razón."
"Gracias."
“Solo algunos de sus feligreses”.
Mi cara arde ardientemente, y él cruza sus brazos. Él comienza a caminar hacia mí, y mi corazón late fuertemente en
mi pecho. Una parte de mí grita para darse la vuelta y volver corriendo al camión. Otra parte de mí quiere
gritar. Pero la mayor parte de mí permanece arraigada en el lugar. Es la parte malvada y corrupta de mí en la que ha
puesto sus garras lo que me tiene parado allí, jadeando y tiritando mientras se acerca a mí.
Gabriel se detiene justo frente a mí, mirándome a los ojos con sus penetrantes azules casi brillando a la tenue luz del
área detrás del escenario.
"Vamos a dejar caer la mierda, ¿de acuerdo?" él gruñe.
Jadeo ante su idioma, pero él solo sonríe.
"No piensas muy bien de mí, ¿verdad?"
"Yo-" trago. “No me corresponde a mí juzgar, Gabriel. Solo Dios-"
"Dalila", gruñe. "Dime lo que piensas de mí."
Aprieto mis labios.
"Dime o no puedo prometer que esta toalla no se caerá aquí".
Mi cara arde ardientemente y trago con fuerza.
" Bien ", murmuro. "¿Quieres saber lo que pienso?"
"Soy todo oídos."
"Creo que eres un farsante", le espeté. "¡Creo que estás actuando para que la gente de esta ciudad tome el dinero que
tanto les costó ganar, y creo que es una de las cosas más malvadas y desagradables de las que he oído hablar!"
Las palabras simplemente caen de mí y jadeo antes de llevar una mano a mi boca. Pero Gabriel solo arquea una ceja
y me sonríe lentamente.
"Wow", respira.
"Yo ... lo siento, no quise decir ..."
"No, lo hiciste", ronronea. “Lección de vida para ti. Cuando tomes una posición o te comprometas con las
palabras, comprométete con ellas. Cuando vuelvas sobre ellos, la gente nunca te creerá.
Sonrío secamente. "¿Estafando uno-oh-uno?"
"Más bien como un grilling one-oh-one".
Pongo los ojos en blanco. "Me voy."
Me doy vuelta, pero de repente, su gran mano está agarrando mi brazo con firmeza, no con firmeza agresiva, pero lo
suficientemente fuerte como para hacerme jadear y enviar un escalofrío por mi columna vertebral. Lentamente me
vuelvo hacia él.
"Qué-"
"Tengo curiosidad", gruñe en voz baja. Sus ojos arden en mí, chisporroteando sobre mi piel mientras se deslizan de
mi cara hacia abajo sobre cada centímetro de mí y luego hacia arriba. Mi pulso se acelera y respiro tembloroso y sin
aliento.
"¿Por qué una buena niña eclesiástica como tú trae a un estafador 'falso' como yo a cenar?"
Aprieto mis labios. "Te lo dije, mi madre quería que lo hiciera". Me sonrojo. "Y no quise decir esas cosas que dije".
Él sonríe. "Sí, lo hiciste", ronronea. "Crees que soy un pecador, ¿no?"
"Como dije, Gabriel, no me corresponde a mí juzgar ..."
"Solo responde la pregunta, Dalila".
Me muerdo el labio inferior, mirando sus pies descalzos porque no confío en mí mismo para mirar sus ojos
diabólicos, que roban el alma y embrujan el cuerpo.
"Sí", respiro.
"Crees que soy un hombre malvado, impío, malo, malo ".
Trago saliva, y casi tan suavemente que ni siquiera está allí, asentí.
"Sí, eso es lo que pensé", gruñe. "Lo que significa que solo tengo una última pregunta para ti".
"Bien", susurro.
"Necesito que me mires, sin embargo."
Me estremezco y sacudo la cabeza.
Gabriel se ríe sombríamente. "¿Y por qué no?"
Porque no confío en mí mismo. Porque si te miro, no estoy seguro de si alguna vez miraré hacia otro lado.
"¿Cuál es tu pregunta?" Yo respiro.
Jadeo cuando su mano se levanta y sus nudillos me rozan la barbilla. Él inclina mi cabeza hacia arriba suavemente, y
mi cuerpo tiembla cuando mi mirada se desliza sobre sus piernas desnudas, la pequeña toalla, las caderas y los
abdominales pecaminosamente acanalados, su pecho tatuado y duro como una roca, y finalmente, su cara
endiabladamente malvada. . Mis ojos se cruzan con los suyos, y el calor puro se burla de mi alma.
"¿Por qué te disfrazaste para venir aquí esta noche?"
Me sonrojo ferozmente. "Yo-yo no hice tal-"
"La etiqueta de ventas todavía está en tu falda, cariño", gruñe.
Me arde la cara y me quedo sin aliento en la garganta.
"YO-"
"Ahora, para mí", ronronea. "Eso dice que tal vez quisiste venir a verme".
“Hice no ,” susurro sin aliento.
"Tal vez sabes que soy malvado, y tal vez eso te emociona".
Jadeo, escandalizada, mis ojos se abren. "Tú-"
“Quizás una buena chica como tú está un poco cansada de serlo . Maldito. Bien —gruñe profundamente, haciéndome
jadear mientras sus palabras malvadas se deslizan sobre mi piel. Se acerca a mí, sus dedos todavía en mi barbilla, y
puedo sentir el calor de su cuerpo prácticamente desnudo irradiando contra el mío con él a apenas una pulgada de
mí.
"Por favor-"
"Tal vez", ronronea con voz ronca. "Tal vez, alguien como yo te hace querer probar un poco de pecado ".
"Gabriel"
Estoy en espiral Sus palabras malvadas, y el calor de él, y esos ojos cautivadores hacen que mi cabeza gire y me
hacen perder el control. Está hundiendo sus garras más profundamente en mí, llevándome más a la tentación y al
pecado. Pero la parte más pecaminosa no es él .
Es mí .
Es que no quiero que se detenga.
"Entonces, ¿qué piensas, Dalila", ronronea. Sus dedos se deslizan por el borde de mi mandíbula, y gimo mientras su
mano grande y fuerte acuna mi mejilla. Sus ojos iluminan el fuego del infierno azul con los míos, y puedo sentir el
calor derritiéndose a través de mi cuerpo.
"Tal vez es un poco malo , y un pequeño pecado te vuelve loco ".
Yo lloriqueo . No es un jadeo escandalizado. No es una expresión de horror y desdén.
... Es el sonido de mi alma cediendo a las tentaciones de la carne. Es el sonido de mí dejándome ir.
" Gabriel ", susurro.
Él gime y su cuerpo se mueve justo contra el mío. Sus músculos se ondulan contra mí, y su mano se desliza
alrededor de mi cintura para ahuecar la parte baja de mi espalda.
" ¿Por qué no nos enteramos?", Gruñe. Y de repente, se inclina y sus labios se clavan en los míos.
Difícil.
Siempre he imaginado que caer en pecado o encontrarte en el infierno sería un horror de dolor y sufrimiento. Ahora
sé que me mintieron. Caer en pecado es placer y calor. Es mi corazón latir más rápido que nunca antes. Es mi mismo
hormigueo y dolor en la piel ser tocada. Son mis labios contra su boca perfecta, y su lengua encontrando la mía.
Caer en pecado es más como hundirse en la dicha, y nunca quiero parar.
Los grillos chirrían a nuestro alrededor, la bochornosa noche de verano de Georgia nos cubre con un calor húmedo, y
mi cuerpo traidor se empuja contra su desenfrenado y descarado. La gran mano de Gabriel se desliza por la parte
baja de mi espalda, y gimo cuando se desliza hacia abajo para agarrar mi trasero a través de mi
falda. Yo gemido plazo -no, no abofetearlo, no jadear en shock y horror.
Yo lloriqueo. Porque quiero mas.
Él gruñe en mis labios y me tira más fuerte contra su cuerpo. Gimo en sus labios pecaminosos, y descaradamente
empujo y giro mi lengua contra la suya. El pecado sabe bien. El sabe bien. Sus músculos se tensan, y de repente,
puedo sentir algo ... duro contra mi barriga. Estoy confundido, hasta que de repente, con un grito ahogado, sé lo que
es.
El predicador Gabriel es duro , y es duro para mí .
Me muele, y esta vez, su mano se aprieta en mi trasero. Me empuja contra él y se mueve, y de repente, su muslo
musculoso empuja entre mis piernas. Gimo, y de repente, él está justo allí entre mis muslos.
... Su muslo está contra mí allí , a través de mis bragas.
Jadeo, alejándome de su boca mientras el puro placer florece a través de mí. Mi cabeza cae hacia atrás, mis ojos se
cierran en éxtasis pecaminoso mientras Gabriel se aprieta contra mí. Su gruesa erección palpita con fuerza contra mí,
y su muslo se aprieta mientras me frota a través de mis bragas. Puedo sentir el calor húmedo y resbaladizo de mi
excitación empapando el algodón, y mi cara arde, porque estoy seguro de que él también puede sentirlo.
Su boca encuentra mi cuello, y lloro cuando sus labios y sus dientes se arrastran sobre mi piel sensible allí. Sus dedos
presionan mi cabello, enredando mis mechones rubios mientras agarra mi trasero y besa mi cuello de una manera
que no sabía que podía besarme la piel. Su muslo se aprieta contra mí, una y otra vez, hasta que de repente lo siento,
el mismo fuego perverso, palpitante, que construye lentamente en el fondo. Es la misma sensación que tuve hace una
hora en mi habitación, cuando estaba ... tocándome .
Y esta vez, es él quien me lleva allí.
Su boca sube por mi cuello, y gruñe mientras captura mis labios nuevamente. Me besa profundamente, enviando
una emoción sacudiendo mi núcleo. Frota mi ... mi ... coño a través de mis bragas empapadas con su muslo, y que
Dios me ayude, empiezo a retroceder. Me froto contra él y siento que empiezo a caer mientras me entrego al pecado.
La presión aumenta, y el fuego arde más fuerte, y me estoy acercando rápidamente a ese lugar en el que estaba antes,
en mi habitación. Pero de repente, mis ojos se abren y jadeo.
Estoy mirando la pared trasera de su escenario del púlpito y mirándome una foto de Jesús en la Cruz.
... Es como arrojar agua helada al fuego.
Con un jadeo, retrocedo lejos de él, casi tropezando con mis pies hasta que realmente me caigo directamente sobre
mi trasero. Me levanto y pateo con los pies hasta que vuelvo a ponerme de pie, y rápidamente levanto la vista para
verlo mirándome con una mirada dura y feroz. Mi pecho se agita y mi sangre se calienta como fuego líquido
mientras me alejo lentamente de él, jadeando y temblando.
"Dalila", gruñe.
"Aléjate", jadeo. "Por favor, solo ..." Trago el nudo en mi garganta, y me abrazo mientras retrocedo con horror.
"Tengo que ir."
Mis ojos se clavan en él una vez más, bebiendo la visión pecaminosa de su hermoso cuerpo y sus ojos inquietantes.
"Dalila", gruñe de nuevo. "Espere."
"Yo-no, Gabriel", jadeo en voz baja. " No ".
Me doy vuelta y corro . Corro a través del campo de hierba, mi corazón se acelera y mi cuerpo tiembla de asombro,
emoción y miedo.
Hay una canción que escuché en la radio en el garaje de Papa antes: "El diablo vino a Georgia". Siempre me ha
gustado la melodía, pero ahora sé lo que realmente significa. Ahora, sé que la tentación y el pecado se ocultan de
manera irresistible e insidiosamente se abre paso en tu alma.
El diablo bajó a Georgia, está bien. Se llama Gabriel Marsden, y ha hundido sus garras y lengua
bífida profundamente en mi alma.
¿Pero lo peor es?
Bueno, lo peor de todo es que no estoy seguro de que me disguste por completo cómo se sienten sus garras.
CAPÍTULO OCHO
GABRIEL
"¿PREDICADOR GABRIEL?"
Me giro, y al instante, me congelo. Es Paul Somerset, el hermano de Delilah, y mi primer pensamiento es que él está
aquí para, no sé, dispararme o alguna mierda después de lo que pasó anoche.
Miro alrededor, mi mandíbula se aprieta. Acabo de dar otro sermón debajo de mi tienda, y todavía hay muchas
personas dando vueltas. Testigos, creo. Con suerte, lo suficiente como para disuadir a mi hermano Somerset de la
venganza que me arranca la cabeza.
"Paul", sonrío, mis ojos se lanzan sobre él y tratan de detectar el arma oculta debajo de su ropa. "¿Qué puedo hacer
por ti?"
Pero él solo le devuelve la sonrisa. "Solo quería decir que fue un sermón realmente poderoso, Sr. Marsden".
Dejo escapar el aliento que he estado conteniendo lentamente y le devuelvo la sonrisa. “Bueno, gracias, Paul. Lo
aprecio." Hoy fue un verdadero día de pago de un sermón en el que he trabajado mucho. Este involucra una historia
casi completamente tonta sobre Jesús repintando el templo de Dios con pintura que compró a través de la
generosidad de sus seguidores.
... Lo sé, lo sé, soy una persona horrible. Afortunadamente, los poderes que se crean whisky para calmar un alma
dolorida.
El problema es que también creó Dalila Somerset, que tiene un sabor más dulce y le pega fuerte y dura todo
un infierno de mucho más tiempo que cualquier whisky que he tenido. Dulce, tentador, insidiosamente corruptora de
una manera que ni siquiera entiende a Delilah Somerset. Delilah, que tenía el corazón acelerado más rápido de lo que
nunca había corrido, y mi alma estaba sufriendo por ella de una manera que ninguna mujer me había hecho
nunca. No por un largo, largo país, maldita milla.
Sé que fui demasiado lejos anoche. Había bebido un poco, y estaba tratando de burlarse de ella, o ver cuánto tiempo
había aguantado conmigo, bueno, yo antes de que ella corriera gritando. Y sin embargo, ella se quedó. Y el calor
creció, y la tentación me sobrecogió, nos sobrecogió a los dos , creo.
Joder con ella fue un error. Besarla era peligroso. Y yo se mejor.
"Bueno, señor Marsden, lo confieso, esa no es la única razón por la que quería hablar con usted hoy".
Mierda. Mis ojos vuelven a mirar su ropa otra vez, buscando un bulto revelador de pistola o como una puta espada o
algo así. Pero de nuevo, Paul solo sonríe y extiende sus manos de par en par.
“Como usted sabe, señor, he sido llamado como usted por un poder superior para difundir Su palabra entre el
rebaño. Sé que estás aquí ahora, y todos estamos muy agradecidos por eso. Pero, el suyo es ministerio itinerante, y
pronto ...
"Domingo", interrumpo. Una semana, ese es el tiempo que permaneces en un lugar: el Evangelio de Jasper, versículo
dos. Después de eso, surgen sospechas y el misterio de un predicador viajero se convierte en la peste de un extraño
que acampa en las afueras de la ciudad y se lleva el dinero de la gente.
"Bien, bueno, después del domingo, Canaan quedará nuevamente sin pastor", continúa Paul. “Ahora personalmente
me gustaría cambiar eso. Creo que he sido puesto en esta tierra por las mismas razones que usted, señor.
Esperemos que no, por tu bien, amigo.
Paul respira hondo. "Señor. ¿Marsden?
"¿Sí, Paul?" Sonrío rotundamente.
"Me gustaría construir una iglesia, aquí mismo en Canaán".
"Bueno, Paul, creo que es una idea encantadora", le dije rotundamente. Mi estómago está gruñendo, y estoy exhausto
después de permanecer despierto toda la noche con todos mis pensamientos dando vueltas alrededor de Delilah.
"Gracias, predicador, eso significa mucho".
"Bueno", sonrío. "La mejor de las suertes para ti, Pau"
"He estado recaudando fondos, en realidad".
Ahhh, ahí está. Suspiro, pero sigo sonriéndole, a pesar de que está claro a dónde va esto.
"La buena gente de Canaán ha contribuido poderosamente al fondo, pero esperaba poder implorarles a usted y a su
caridad divina ..."
"¿Sabes qué, Paul?" Yo sonrío. "Déjame rezar sobre eso, ¿de acuerdo?"
Esa es mi buena manera de decir "joder no y joder". Pero mi sonrisa encantadora parece darle a Paul la idea opuesta.
"Oh, Lordy, predicador, eso sería ... bueno, caramba", dice. "¡Eso sería un milagro!"
"¿No es así?" Yo sonrío. "De todos modos, Paul, tengo que ir a prepararme para el sermón de mañana".
"¡Por supuesto! ¡Por supuesto!" él brota de nuevo. Extiende la mano y me estrecha la mano con firmeza. “Y gracias,
Gabriel. Salud."
"Y para ti como ... tú también", murmuré con una sonrisa. Se da vuelta para irse, cuando de repente se detiene y se
vuelve.
"Oh, Gabriel, ¿te habló mi hermana?"
Me congelo. "¿Cómo?"
"Dalila. Estaba todo mal esta mañana, y ...
Mierda. Joder, joder, joder. Echo un vistazo a Winnebago y me pregunto qué tan rápido puedo hacer que arranque lo
suficiente como para huir de esta jodida ciudad antes de que las horcas y las antorchas aparezcan en el horizonte
buscando engancharme por poner mis manos sobre Dalila Somerset.
"Bueno, parecía que su alma estaba en conflicto, y creo que estaba buscándote para ayudarla a aclararla".
Arrugo la frente. Pues esto es interesante.
"No la he visto, Paul".
"Oh, bueno, tal vez ella llegue más tarde". El sonrie. "Y gracias de nuevo, predicador".
Se da vuelta y lo veo seguir al resto de la multitud de la mañana a través del campo hasta los autos estacionados.
... Creo que necesito un trago.
Empiezo a girar, cuando de repente, hay un dedo tocando mi hombro. Salto y me doy la vuelta y me encuentro cara
a cara con ella .
"Necesito hablar contigo."
Parpadeo y miro hacia atrás, casi esperando que Jedediah esté parado allí con una escopeta apuntada hacia mí.
"Estoy solo."
Sonrío con ironía y vuelvo a mirarla.
Mierda .
Anoche me dije mil veces que lo que sucedió fue un error. Me dije a mí mismo que arreglara mi mierda y que
resistiera cualquier tentación de brujería que Delilah me arrojara, lo supiera o no. Y creo que incluso me convencí a
mí mismo, hasta que me di la vuelta y bebí a la vista del ángel de cabello rubio en el vestido de flores que se aferra a
cada maldita curva dulce.
Gruño humildemente.
"¿Qué puedo hacer por ti, Dalila?"
Sus labios se curvan en las esquinas. “¿No hay lenguaje o broma groseramente salaz? ¿No tienes porquería para
tratar de hacerme tropezar?
Yo sonrío. Me has pillado sin preparación. Si me das uno o dos minutos, tal vez pueda quitarme los pantalones o
algo así.
Ella se ríe pero rápidamente la sofoca cuando su cara se enrojece.
"Yo he ..." ella mira a su alrededor. "¿Podemos hablar en privado?"
Frunzo el ceño y miro a mi alrededor el campo completamente vacío.
"Tal vez allí?" Ella asiente hacia la tienda y yo me encojo de hombros.
"Por supuesto."
Delilah gira sobre un tacón con sandalias y camina a través de la solapa de la tienda, y estoy justo detrás de ella con
los ojos pegados a ese pequeño culo apretado debajo del vestido de verano floral. Dios ayúdame. Camina todo el
camino por el pasillo y alrededor del pequeño escenario hasta donde se encuentra mi bañera de bautizo, que también
es casi una pequeña área de oficina para mí.
"¿Entonces?" Murmuro una vez que ella se detiene y se vuelve hacia mí.
"Entonces, he estado pensando".
Descomprimo mi gran bata blanca de "predicador" y la tiro sobre el respaldo de una silla. Doblo mis brazos sobre mi
pecho, y cuando ella no continúa, arqueo una ceja.
"¿Es este un juego de adivinanzas?"
Ella se sonroja. "No no. Yo ... he estado pensando en ... ”su sonrojo se profundiza. "Acerca de anoche ", ella respira.
La bestia se agita dentro de mí. "¿Qué parte?" Yo gruño
"Todas las partes", dice en voz baja, sus ojos chispeantes.
"¿Y?" Gruño, acercándome a ella.
Dalila traga saliva y sus dientes se rascan sobre su labio inferior. "Y he llegado a algunas conclusiones".
"Ilumíname, por favor?"
Sus ojos se lanzan sobre mí. “He decidido que tenía razón. Usted está un hombre malvado, probablemente pecador, y
yo no cree que usted es realmente un predicador “.
Frunzo el ceño y mi mandíbula se aprieta. Bueno, eso es todo, la plantilla está lista. Si aún no se lo ha dicho a sus
padres y tal vez incluso a los policías locales, lo hará, y eso significa que necesito alejarme de tres estados, pronto.
Sin embargo, también hay otra parte. La cuestión es que no solo deseo a Dalila, sino que sí. Pero no es solo eso. Hay
más, incluso si no estoy completamente seguro de qué, por qué o cómo es un tipo como yo sin alma perceptible o
moral, incluso puede sentir eso.
Pero es lo que es, y ahora es el momento de escapar de la mierda.
"Encantado de conocerte, Dalila", gruño. Me giro para comenzar a empacar mi mierda, cuando su mano suave toca
mi brazo.
" Pero ", susurra.
Mi polla se contrae. Hay suficiente de un poco ... algo en ese "pero" que me hace sentir un hormigueo en los nervios,
apretar la mandíbula y mi deseo de que se levante.
"Pero he hecho las paces con eso".
Arrugo la frente. "¿Sentido?"
“Es decir, sé que eres un hombre malvado, pero también sé que el mundo no siempre será un lugar como Canaán. Sé
que el año que viene, cuando finalmente llegue a la universidad, estaré en lugares y alrededor de personas que no
son ... bueno, que no son lo que estoy acostumbrado ".
Yo suspiro. "Entonces, ¿qué, quieres tomar lecciones 'malvadas' de mí para que estés preparado para la maldad de
las fiestas de fraternidad y el pong de cerveza?"
Empiezo a girar para alejarme de estas tonterías, cuando su voz suave me detiene.
"Si."
Me congelo. Parpadeo y lentamente me vuelvo hacia ella, una ceja arqueada. "¿Perdóneme?"
"Sí", dice en voz baja, sonrojándose mientras retuerce los dedos. "Yo ... sé que le estás mintiendo a todos acerca de ser
un predicador, lo cual es, bueno, bastante malo ".
Arrugo la frente.
“ Pero también entiendo que lo estás haciendo por dinero, no por pura maldad ni nada. Entonces, es malo, pero no es
necesariamente maldad, supongo ".
"¿Entonces no crees que soy el diablo?" Yo digo secamente.
"Creo que eres un hombre diabólico", ella respira. "Pero no creo que seas el mismo Satanás".
"Mierda, debo estar resbalando".
Sonrío, y ella se sonroja con mi lenguaje. Pero tomo un latido y mis ojos se estrechan hacia ella.
"¿Qué estamos diciendo aquí, Dalila?"
"Estoy diciendo que quiero ..." Sus cejas se fruncen, y se mira las manos. "No estoy realmente seguro."
"Quieres que te muestre un vistazo de ... eh, maldad".
“Yo, sí, sí. Creo que sí."
"¿Quieres emborracharte?" Murmuro sarcásticamente.
Ella arruga su nariz. "No lo creo."
"¿Qué tal un poco de juego?"
Ella se encoge de hombros.
"Podríamos ir a robar un banco".
Sus ojos se clavan en los míos. “¿Usted hace eso?” ella susurra en estado de shock.
Me río. "No es exactamente mi velocidad, no".
Alzo mis ojos hacia ella, y mi pulso se acelera. Dejo que mi mirada se deslice sobre ella nuevamente en ese vestido de
verano. Jodeme, ella es pura maldita tempta
Y luego, me golpea.
"Anoche", murmuro, mi polla temblando. Dalila se sonroja.
"Si…?" ella susurra.
Me acerco, y ella aspira una bocanada de aire.
"¿Te gustó cuando te besé?" Yo gruño
Su cara arde aún más roja, y se mira fastidiosamente las manos.
"Dalila ..."
" Sí ", susurra.
Yo gimo. "¿Un poco o mucho?"
"Yo ..." se muerde el labio inferior. "Tal vez esto fue un error"
"Dime", gruño.
Ella jadea en silencio, y lentamente, sus ojos se arrastran hacia los míos, tan llenos de miedo, emoción y sí, lujuria .
" Mucho ", ella respira.
"¿Por eso estás aquí?" Yo gruño "¿Así es como me estás buscando para mostrarte el pecado ?"
Su cara arde carmesí. "Yo ... no sé", murmura.
"Si tu puedes."
Ella jadea de nuevo cuando me acerco aún más a ella, y cuando extiendo una mano para deslizarla sobre su cadera,
ella gime.
Dios me ayude, ella gime .
"¿Seguro que quieres esto?" Yo gruño
Delilah me mira con sus grandes y grandes ojos azules, sus mejillas sonrojadas y sus labios carnosos, llenos de
expresión y ligeramente abiertos. Parece una chica que se muere por ser besada. En realidad, se parece a una niña que
muere por mucho más que un beso.
Y lentamente, ella asiente.
"Dilo", le ordeno.
"YO-"
"¿Tu quieres esto?" Yo gruño “Entonces dilo . Porque no te tocaré hasta que ...
En el lapso de un cuarto de segundo, ella se mueve hacia mí, se pone de puntillas, levanta la barbilla, me agarra la
cara con las dos manos y me clava esa bonita boca en los labios. Y el cielo mismo no podía detenerme ahora.
Gruño, y mis brazos la rodean posesivamente. Ella gime mientras mi lengua empuja con avidez sus suaves y gruesos
labios, y se derrite contra mí mientras la chupo entre los míos. Gimo, y mi cuerpo se enrolla alrededor de ella, mis
brazos rodean su pequeño cuerpo y la agarran posesivamente. Ella presiona hacia atrás, y sus caderas incluso chocan
contra las mías mientras gime profundamente en el beso.
Sí, no hay vuelta atrás ahora.
Nos giro y la empujo hacia atrás, golpeándola contra la mesita que sirve de escritorio. Ella gime y es como si el calor
la estimulara a besarme aún más fuerte. Ella se aferra a mí, y mi polla palpita con fuerza contra ella. Deslizo mis
manos sobre ella para agarrar su trasero a través de ese suave y pequeño vestido de verano. Gimo al sentirla bajo mis
manos, y ella chilla cuando la agarro con fuerza y la levanto. Puse su trasero sobre la mesa y empujé entre sus
muslos, y sus piernas se abrieron voluntariamente para mí mientras ella gimió en voz baja.
Sus largas piernas se envuelven alrededor de mi cintura, y el vestido de verano se aprieta más arriba en sus
muslos. La beso con todo lo que tengo y todo lo que soy, y muevo mi polla dura como una roca contra el suave calor
que puedo sentir entre sus muslos. Fóllame, incluso a través de mis jeans, puedo sentir lo caliente que está su
pequeño coño.
¿Esta buena niña quiere probar el pecado? Ella va a conseguirlo, pase lo que pase y maldiga las consecuencias.
Gruño mientras la beso ferozmente, mi lengua girando con la de ella. Una de mis manos agarra su trasero, la otra se
desliza por su cadera y sobre sus costillas. Delilah gime y agarra mi camiseta con fuerza con ambas manos. Ella gime
ansiosamente en mis labios, como si se estuviera muriendo por más, y estoy muy feliz de entregar. Mi mano sigue
moviéndose más alto, y cuando la deslizo sobre el suave montículo de su pecho, su respiración se corta bruscamente.
" Gabriel " , ella gime. Su espalda se arquea, empujando la dura protuberancia de su pezón contra mi palma, y gimo.
Sin sostén Chica mala .
Mis dedos se burlan del pequeño brote dolorido, y ella suspira de placer. Sus piernas se aprietan a mi alrededor, la
beso profundamente y le froto el pezón hasta que tiembla por mí. Sus caderas se balancean contra mí otra vez, más
fuerte esta vez, y sé muy bien que ella puede sentir lo jodidamente duro que es mi polla gorda para ella.
Todavía está agarrando mi camiseta como si quisiera arrancarla, así que me agacho, agarro el dobladillo y lo tiro
hacia arriba y sobre mi cabeza. Me alejo lo suficiente para sacarlo antes de aplastar mis labios con los de ella. Ella
gime mientras sus manos aterrizan en mi pecho desnudo, y sus uñas se rastrillan sobre mi piel mientras se arrulla
suavemente. Tiré de uno de los tirantes de su vestido de verano y lo tiré hacia abajo y fuera de un hombro. Ella gime
cuando mi mano se desliza por su hombro desnudo.
Tiré de la correa más abajo, mi pulso se aceleró cuando la mitad de la parte superior de su vestido de verano
comenzó a despegarse sobre la hinchazón de su pecho. Baja y baja hasta que con un suave gemido de sus labios, se
desliza sobre el pezón que he estado tomando el pelo. Miro hacia abajo y gimo lujuriosamente por su pequeño pezón
rosado y oscuro, y mi mano se mueve instantáneamente para tomarla de nuevo. Mis dedos se burlan del pequeño
capullo nuevamente, y ella grita mientras sus caderas se mecen más fuerte.
Y quiero mas. Quiero mostrarle más.
Mi lengua se arremolina con la de ella, y devoro sus gemidos enteros cuando la mano de su trasero comienza a
deslizarse sobre su cadera. Se mueve hacia abajo y hacia abajo, trazando la línea de sus bragas debajo del vestido,
hasta que casi la empujo hacia abajo entre nosotros. Gruño y levanto su vestido de verano, y cuando mi mano
aterriza en la parte superior del muslo desnudo, Dalila jadea y retrocede.
Sus ojos están ardiendo con fuego mientras se clavan en los míos, y me detengo.
"Quieres parar, solo—"
" No quiero parar ", ella respira.
"Entonces abre tus piernas," gruño espesamente, mis ojos ardiendo en los de ella. "Extiende esos muslos bonitos y
déjame mostrarte cómo se siente realmente el pecado".
Y ella lo hace. Me agarra la cara y me besa como si hubiera estado perdida en el desierto durante cuarenta malditos
años, y mi beso es la primera agua que encuentra. Gruño en su boca cuando sus piernas se abren para mí, y mi mano
se desliza hacia mi premio. Mis nudillos se arrastran sobre sus suaves bragas de algodón, y siseo por lo jodidamente
húmedos que están, y me refiero a lo jodidamente húmedo , empapado, de verdad.
Froto mis nudillos sobre ella, y ella gime tan suavemente. La punta de mi dedo grueso traza el borde de las bragas,
justo donde su muslo se encuentra con los labios regordetes de su coño que casi puedo sentir a través de la mancha
de algodón pulido hacia ellos. Empujo el dedo hacia abajo y luego sigo adelante. Ella gime , temblando como si ya
estuviera cerca de venir por mí solo con mi toque. Mi dedo se desliza hacia abajo y traza sobre sus labios suaves,
resbaladizos y aterciopelados, y mi polla se tambalea contra su muslo a través de mis jeans.
Gruño, y jalo sus bragas a un lado. Delilah jadea, pero cuando mi dedo se desliza hacia arriba y hacia abajo por sus
labios, ella se arrulla suavemente.
"Oh Dios ".
Todavía no lo sabe, pero el Predicador Gabriel está a punto de acercarla más al Todopoderoso que nunca
antes. Arrastro mi dedo más alto, y cuando lo paso sobre su clítoris, ella grita.
"¡Oh Dios mío !" ella jadea antes de golpear sus labios con los míos y empujar su lengua en mi boca. Gruño y devoro
sus labios, y mi pulgar comienza a rodar en círculos sobre su clítoris. Deslizo un dedo hacia abajo entre sus labios, y
cuando la encuentro resbaladiza y húmeda, empiezo a enroscarla. Se aferra a mí, jadeando, gimiendo y temblando
mientras deslizo mi dedo profundamente, y mi pulgar comienza a frotar su clítoris de un lado a otro.
Sus uñas se arrastran por mi pecho, su lengua baila con la mía, y ella gime como ninguna mujer que alguna vez haya
escuchado. Su pequeño gatito húmedo y ansioso inunda mis dedos con su excitación, y saco el dedo hacia adentro y
hacia afuera y paso el pulgar sobre su clítoris. La empujo más alto, deliberadamente tomándome mi maldito
tiempo. Sé que ella nunca ha hecho esto. Es más que obvio que esta chica es virgen en todas las formas imaginables,
y pensar en ser la primera en todas las formas posibles hace que mi polla palpite y mis bolas anhelen su liberación.
Curvo mi dedo más profundo y froto su clítoris con más fuerza, y Dalila comienza a desmoronarse. Ella gime, se
retuerce y se mece contra mí. Su respiración se vuelve más rápida y desigual, hasta que, de repente, se aleja y me
mira con el rostro arrugado.
"¡Oh Dios, Gabriel!"
" Ven por mí , cariño", siseo. "Ven sobre mis dedos como una niña mala ".
Sus ojos giran hacia atrás, deja caer la cabeza hacia atrás y explota para mí. Su coño se aprieta alrededor de mi dedo
como un vicio de terciopelo, y mientras grita, puedo sentir su semen inundando mi mano. Ella gime y jadea cuando
su orgasmo la atraviesa como una casa de ladrillos antes de que se derrumbe sobre mí. Deslizo mi mano de sus
bragas y la abrazo mientras ella se hunde contra mí, cojeando y jadeando por aire.
Y luego, de repente, todo sale mal. De repente, ella se aleja de mi pecho, y cuando me mira, no veo lujuria o felicidad
orgásmica. Veo el horror .
" Oh Dios ", ella respira. Su cara se pone blanca, y de repente, me está alejando y bajando de la mesa. Ella vuelve a
poner su vestido en su lugar, sus hombros se agitan y sus labios se mueven sin que salgan palabras.
"Dalila"
" No ".
Finalmente se da vuelta para mirarme, con los ojos muy abiertos y las mejillas sin color. Parece petrificada, o como si
acabara de tener una experiencia cercana a la muerte.
... No es exactamente el resultado que estaba buscando al hacerla venir por primera vez.
"Dalila"
"Me equivoqué", ella respira, sus hombros todavía agitados y sus ojos ardientes en los míos.
"¿Acerca de?"
"Tú eres el diablo", susurra, alejándose de mí.
La ira nubla mi cara y mis ojos se entrecierran.
"Toma dos para el tango, cariño", gruño.
"Esto ..." ella sacude la cabeza. "Esto no es para lo que vine aquí".
"¿No?" Me quebré. “Entonces iluminame. Lo qué vienes aquí?”
Ella traga, su cara pálida. "Yo ... no lo sé".
"Bueno, cuando lo resuelves," gruño. "Sabes donde encontrarme."
Sus labios se fruncen, sus ojos se estrechan hacia mí y lentamente retrocede. "Sí, y créeme, nunca volveré aquí otra
vez".
Ella se da vuelta y corre.
Por un momento, pienso en perseguirla. Pienso en seguirla y decirle que se quede, y decirle que ella es la única cosa
buena que he sentido en toda mi vida. Pero obviamente no. En cambio, me desplomo en mi silla, alcanzo mi media
botella de whisky barato y bebo.
Bebo hasta que no puedo recordar el sonido de sus gemidos, pero en realidad nunca llego allí.

CAPÍTULO NUEVE
DALILA
"¿E STÁS BIEN, CARIÑO ?"
"¿Hmm?"
Parpadeo y levanto la vista del jardín detrás de nuestra casa para ver a mi padre parado allí mirándome con
preocupación.
"Oh, eh, sí".
Pero no, no lo soy. Ayer caí en el infierno y la condenación. Ayer, cedí a la lujuria y las tentaciones de la carne, y dejé
que ese hombre , ese demonio, me pusiera las manos encima.
Todo sobre mi
Por un lado, no he dejado de zumbar desde entonces. Me he sentido más vivo en las últimas veinticuatro horas que
en los últimos dieciocho años. Siento ... un poder, supongo. Pero mientras mi corazón quiere decirme que es un buen
sentimiento, mi alma sabe lo contrario. Sé que ese "buen" sentimiento en mi corazón es el mismo Satanás sonriendo y
riéndose por engañarme en el infierno eterno.
"Oh, sí, estoy bien, papá".
Y ahora le miento a mi padre. Hasta dónde he caído con solo un resbalón. Pero entonces, no es solo un desliz. Es toda
una pendiente resbaladiza, deslizante y pecaminosa.
"¿Estás seguro?" mi padre frunce el ceño. "Has estado hurgando en la tierra alrededor de esa planta de tomate
durante los últimos diez minutos". El sonrie. "¿Qué te está comiendo, Dalila?"
Me encojo de hombros y él se ríe.
“Vamos, cariño, háblame. Lo que sea que es-"
“¿Alguna vez has pensado algo sobre alguien, y luego descubriste que no es lo que pensabas, y te decepcionó un
poco? Pero entonces, tampoco te disgusta del todo lo que son, ¿es confuso porque no es lo que pensabas?
Papá parpadea sorprendido.
"No importa", murmuré. "Lo siento, no te importa-"
"No lo he hecho", dice lentamente. "Pero tu mamá sí".
Arrugo la frente. "¿Qué?"
"Pensé que alguien era otra cosa, descubrí que eran diferentes, pero me quedé para descubrir a esa persona".
Parpadeo sorprendido. "¿De Verdad? ¿OMS?"
Él sonríe. "Lo estás mirando".
Mis cejas se levantan por la sorpresa. "¿Qué quieres decir?"
"Quiero decir que antes de tu madre, yo estaba ..." frunce el ceño. “Bueno, yo era otro hombre. Y que Dios bendiga a
esa mujer por quedarse tanto tiempo como para decidir que podría mirar más allá de mis propios problemas y ver al
hombre que era capaz de ser ”.
Sonrío con curiosidad. "Papá, ¿de qué estás hablando?"
Suspira y mira hacia otro lado mientras se rasca la barbilla. “Aww diablos, eres lo suficientemente mayor. Sé que
mencioné que antes de tu mamá, estaba perdido, pero no sabes ni la mitad. Comienza a desabotonarse la camisa, y
frunzo el ceño con curiosidad cuando la abre para mostrar la tinta del tatuaje de la cruz sobre su corazón.
"Estoy hablando de esto".
Yo sonrío. "Papá, he visto tu tatuaje muchas veces".
Él frunce el ceño. "Mira más cerca."
Arrugue mi frente y camino hacia él, mirando su cruz. "Papá, ¿qué soy yo?" Y entonces, lo veo. Se me cae la
mandíbula y no estoy muy seguro de cómo nunca antes me había dado cuenta, pero ahora que estoy escudriñando
más de cerca, es difícil pasarlo por alto. Allí, debajo de la cruz adornada con espinas, hay algo más.
Una rueda de la caravana y el manillar mirando hacia afuera.
Ve el reconocimiento en mis ojos, suspira y retrocede. Se desabrocha el resto de los botones y se quita la camisa. No
he visto mucho a mi padre sin camisa, porque sé que no está realmente orgulloso de los tatuajes en sus hombros y
brazos desde que era "más joven y más tonto", como dijo antes con una sonrisa. Esta vez, sin embargo, se siente
diferente. Comienzo a mirar realmente la tinta, y me doy cuenta de que muchos de ellos son simplemente tatuajes
oscurecidos, o rosas y cruces no tan sutiles que cubren otras cosas.
"¿Papá?" Yo susurro.
"Cuando tu mamá me conoció, yo era un desastre", dice sombríamente. Me refiero a un verdadero desastre,
cariño. No conocía a Dios en absoluto. No conocía el amor, no creía que tuviera alma, y pensaba que la vida era un
gran viaje hasta el final. Tu mamá, que Dios la bendiga, vio que yo era más que eso. Y no quiero decir que ella
arrastró mi trasero a la iglesia y me hizo hablar con Jesús o cualquier otra cosa ". Él sonríe. "Usted la conoce. Ella no
me obligaría a eso. Pero ella me ayudó a ver la verdad y la luz.
Toma un respiro tembloroso. “Ella me ayudó a salvarme, cariño. Y ella es la razón por la que estoy aquí hoy, viva y
no condenada al infierno. Lo sé de verdad.
Asiento lentamente, y él sonríe. Levanta su camisa, se la vuelve a poner y comienza a abotonarla. “Entonces, ¿quién
es esta persona? ¿Quieres mi opinión?
Asiento con la cabeza. "Si."
“Ver en ellos. Vea quiénes son y vea quiénes podrían ser. No te estoy diciendo que te vayas por alguien que no se va
a salvar ", se ríe. “Pero tienes un buen corazón y una buena cabeza sobre tus hombros. Confío en que puedas notar la
diferencia entre un alma verdaderamente perdida y un alma que acaba de perder su camino. Si es el segundo,
abre. Si puedes ver un rastro de amor allí, creo que lo más piadoso sería ayudarlos y dejar que te ayuden. Quiero
decir, tu mamá me salvó, pero yo también la salvé a mi manera.
El sonrie.
"¿Eso tiene sentido, cariño?"
Me río y camino hacia él y lo abrazo con fuerza.
"Más de lo que sabes, papá".
El se ríe. "Muy bueno. Oh, ¿pero Dalila? Su sonrisa se desvanece en un ceño preocupado. “Ahora si estamos
hablando de un chico , olvida todo lo que acabo de decir. ¿Eso está claro?
Me las arreglo para contener una sonrisa en lugar de una risa profunda, y asentí. "Entendido, papá".
... Oye, ¿cuál es una pequeña mentira más, verdad?

E N REALIDAD , son dos mentiras más. Después de la cena, les digo a mis padres que voy a la casa de Melanie Krupa
para un pequeño estudio bíblico antes de salir corriendo con pantalones cortos de jean y una gran camiseta holgada
de "Christ Ministries 2015". Papá incluso me deja tomar prestada su camioneta. Pero una vez que saco la camioneta
de la carretera y salgo de la ciudad al pequeño claro en el campo de hierba, me quito la camiseta para revelar la
camiseta sin tirantes, mucho menos saludable, que usualmente me pongo en la cama.
El motor se apaga, respiro temblorosamente y me miro en el espejo retrovisor. Me sonrojo mientras me alboroto con
mi largo cabello, antes de dejarlo. Salgo, cierro la puerta chirriante y miro a través del campo oscuro hacia la tienda y
el Winnebago.
Incluso ayer, habría dicho que estaba mirando hacia la condenación y el infierno. Ahora no estoy tan seguro. No
estoy tan seguro de muchas cosas, en realidad. Y estoy bastante seguro de que la charla de mi padre antes no
era exactamente sobre lo que estoy bastante seguro de que estoy a punto de hacer, pero me ha mostrado el
camino. Me abrió los ojos y me quitó las anteojeras un poco más de lo que he estado usando toda mi vida.
La vida no es solo buena o mala. La gente no es pura ni malvada. Todo es un espectro, y lo sé en mi corazón, o al
menos espero saberlo y que no es un paso en falso, que lo que sucedió con Gabriel no es puramente un
pecado. Puede que no sea bueno, pero cuando me siento ... bueno, lo que siento por él, eso no puede ser todo pecado,
¿verdad?
Con una respiración temblorosa más, comienzo a caminar por el campo, mi corazón se acelera.
La tienda está oscura, excepto por un letrero azul neón sobre el púlpito que dice "GUARDADO". Más allá, escucho
un sonido burbujeante detrás de la pared del fondo, y sonrío a través del nerviosismo cuando doy la vuelta a la
esquina. Y allí, sentado en su bañera con los brazos extendidos a los lados, una botella de whisky en una mano y la
cabeza echada hacia atrás, luciendo pecaminosamente hermosa, está Gabriel.
"¿Llego tarde a los bautizos de esta noche?"
Levanta la cabeza y arquea la frente. Una pequeña sonrisa se riza en las comisuras de su boca, y tiemblo ante el fuego
que chispea sobre su rostro.
"Bueno", gruñe. "Todo depende".
"¿En?"
"Sí, si hay una pandilla de gente del pueblo detrás de ti lista para colgarme de las bolas del árbol más cercano".
Yo sonrío. "No esta noche."
El se encoge de hombros. "Bueno, entonces, la iglesia de Gabriel Marsden está abierta y lista para limpiar tu alma
mortal".
Pongo los ojos en blanco y sonrío antes de mirar la botella en sus manos. "¿Estas borracho?"
Él arquea una ceja. “No estoy no borracho”, dice en una manera que me hace reír. “Pero no, no me critican si eso es lo
que estás preguntando. Estoy probando esta nueva cosa llamada moderación.
"Oh, ¿eso fue ayer?"
Tan pronto como las palabras han caído de mis labios, mis mejillas arden y mi labio se atrapa entre mis dientes,
sorprendido de que realmente lo dije en voz alta.
Sin embargo, solo me sonríe. "No, Dalila", ronronea. "Estoy bastante seguro de que no llamaría a esa restricción".
Trago saliva y nos miramos, su deslizándose lentamente sobre mí como si me diera cuenta de lo que llevo puesto.
"¿Qué puedo hacer por ti?" él gruñe en voz baja.
"YO-"
Ensayé lo que iba a decirle mientras conducía por aquí, pero todo sonaba cojo y practicado. Y nada de eso era
realmente por qué venía aquí. La verdad es que realmente no sé por qué estoy aquí, solo sé que "aquí", con él, es
donde quería estar. Y si eso solo es un pecado, creo que he hecho las paces con eso.
"Esperaba que pudiéramos ..." Frunzo el ceño. "Quiero decir, esperaba que pudieras ..." tartamudeo y miro mis manos.
"Respira", dice en voz baja. Y lo hago, cerrando los ojos y respirando profundamente. Y cuando hablo, mis ojos
todavía están cerrados.
"Hablamos ayer", digo vacilante. "Aproximadamente un día fui a un lugar que no es Canaán y estuve cerca de cosas a
las que no estoy acostumbrado".
"Estábamos", gruñe.
"¿Y dijiste que tal vez podrías, uh, guiarme?"
Miro hacia arriba y me sonrojo cuando veo sus ojos ardiendo en mí.
"Estás bailando alrededor de la pregunta", gruñe en voz baja. "¿Qué quieres decir exactamente?"
Respiro hondo y tembloroso, cada nervio de mi cuerpo zumba antes de endurecerme y apretar mis manos en puños.
"Quiero decir esto."
Antes de que mi cerebro pueda alcanzarme, me agacho, abro el botón de mis pantalones cortos y los empujo a mis
pies. Me quito las chanclas y los pantalones cortos, y luego, por primera vez, estoy frente a un hombre con una
camiseta sin mangas delgada y sin sujetador y un par de bragas rojas con lunares blancos, nada especial. , pero son
discutibles la ropa interior más sexy que tengo.
Gabriel gruñe . Quiero decir, él literalmente gruñe profundamente, como un animal, y yo jadeo cuando sus ojos me
arden.
"¿Qué estás haciendo, Dalila?"
"Esto", susurro. Marcho directamente hacia la bañera, subo las escaleras y balanceo una pierna sobre el borde hacia el
agua burbujeante. El área del backstage es oscura, excepto por la única luz sobre la puerta de su Winnebago afuera, y
el tenue resplandor azul del letrero "SALVADO" en el otro lado de la pared, brillando sobre el borde. Jadeo ante el
calor del agua cuando entro y me acomodo en la bañera de burbujas. Hay un asiento a mi lado, y me acomodo en él,
el agua burbujea alrededor de mi barbilla mientras mi pulso se acelera.
Sonrío ante la expresión divertida de Gabriel.
"¿Sorprendido?"
"Un poco", asiente. Él levanta la botella. "¿Beber?"
Sacudo la cabeza Podría ser un poco loco esta noche, pero no estoy de que una locura.
Él sonríe. “No lo creo. Hay Pepsi en la mini nevera de allá. Él asiente con la cabeza hacia la pequeña nevera
conectada a un cable de extensión debajo del escritorio de su mesa. Arqueo una ceja y lo miro.
"Um, ¿puedes conseguirlo?"
Él ríe. "¿No puedes?"
"¡No!" Me sonrojo profundamente.
"Y por qué es eso."
"Um, porque estoy en ropa interior y una camiseta sin mangas".
"¿Y?"
Yo gimo. "Y estoy todo mojado, y estoy ..." Me sonrojo. "Y no estoy usando sostén, y todo va a ser todo ... ya sabes".
Me mira y yo suspiro profundamente.
"Todo transparente, ¿de acuerdo?"
"¿Porque tus bragas están todas mojadas?"
Mi cara se vuelve carmesí por la sonrisa lobuna en su rostro.
"Mira, olvídalo".
Gabriel se ríe entre dientes. "Bien bien. Yo te lo traigo. Pero solo si estás seguro.
"Estoy bastante seguro", me quejo. "Y gracias."
Él sonríe. "No digas que no te lo advertí".
Las arrugas de mi frente. "Adviértame acerca de quién ..." Grito y rápidamente aprieto los ojos mientras él se para,
revelando cada pulgada de su cuerpo completamente desnudo, esculpido, entintado y empapado.
"Gabriel!" Yo jadeo. "Estás desnudo!"
Él ríe. "Bueno, ¿por qué demonios iría a mi propio jacuzzi con la ropa puesta?"
"¿Un traje de baño?" Yo blanche.
Se ríe profundamente. "¿Todavía quieres esa Pepsi?"
" No, gracias ", gruño con los ojos bien cerrados.
Hay un sonido chapoteante de él volviendo al agua.
"Puedes abrirlos".
"¿Eres decente?"
"Estoy desnudo a medio metro de ti en una bañera de bautizo, Dalila", gruñe. "No estoy seguro de si eso va a volar
como 'decente' por cualquier métrica".
Yo sonrío. "Sabes a lo que me refiero."
"Sí, pero estoy pensando que eso podría ir en contra del espíritu de todo esto".
Me sonrojo, pero lentamente abro los ojos. Él está, de hecho, sentado en el agua. "¿Sentido?"
"¿Quieres que te muestre el pecado?", Gruñe. "¿Quieres que sea tu maldito entrenador para el mundo real?"
Trago, asintiendo lentamente.
“Entonces, ¿por qué rehuir? Quiero decir que esa fue tu oportunidad, un tipo que básicamente no tiene vergüenza y
está dispuesto a dejarte echar un vistazo.
Me sonrojo furiosamente. "Bueno, tal vez no quiero echar un vistazo".
Gabriel sonríe. "Seguro lo haces."
Caigo mis ojos mientras el calor se derrama sobre mí.
"En algún momento de la vida, solo digo que verás a un hombre desnudo".
"Sí, mi esposo", le digo brevemente.
Él pone los ojos en blanco. "Sabes qué, fue una mala idea".
Arrugo la frente. "¿Qué? ¿Por qué?"
"Porque no creo que realmente sepas por qué viniste aquí, y creo que es una mala idea". Toma un trago lento de su
whisky. "Y creo que deberías irte".
Atornillarlo. Aprieto los labios, mi corazón se acelera. Sé exactamente por qué vine aquí esta noche. Acabo de caminar
de puntillas alrededor. Incluso he estado fingiendo a mí mismo que no es por eso que estoy aquí, pero lo es.
"¿Sabes por qué estoy aquí?"
"No en realidad no. Pensé que lo había dejado bastante claro ...
"Para esto."
Me levanto del pequeño asiento sumergido, y el agua salpica mientras cruzo la distancia hacia él. Y antes de que
cualquiera de nosotros pueda decir una palabra, o antes de que pueda adivinar esto, lo paso sobre él y me deslizo
sobre su regazo.
Oh, Dios .
Oh, está desnudo, está bien. Jadeo cuando mis muslos desnudos rozan los suyos, mis rodillas se deslizan alrededor
de su cintura. Y allí, pulsando, palpitando y endureciéndose contra mis bragas, está su ... su polla .
Gabriel gruñe, y de repente sus grandes manos se deslizan sobre mí, agarrando mi cintura con fuerza. Me mira a los
ojos mientras me sostiene posesivamente en su regazo, su erección palpita como un músculo palpitante entre mis
muslos y me hace ... bueno, me hace mojarme . Pecaminosamente, palpitantemente húmedo.
"¿Estás seguro de que sabes lo que estás haciendo?" él gruñe.
" No ", jadeo. "Pero ya no tengo miedo de no hacerlo".
El gime. "Ven aquí, hermosa".
Su mano se desliza por mi espalda y se enreda en mi largo cabello. Y de repente, él me atrae hacia él, y gimo cuando
sus labios se aplastan con los míos.
Y si esto es un pecado, llévame al infierno. Porque una vez que he probado Gabriel Marsden, nunca quiero volver a
lo que era antes.

CAPÍTULO DIEZ
DALILA
JADEO cuando sus manos se deslizan sobre mí, y gimo en sus labios mientras su lengua busca la mía. Hay un
ferocidad en su beso y un hambre en su agarre, y me derrito contra su regazo con entusiasmo y de buena gana. Sé
que esto está mal y es pecaminoso, pero tampoco puedo decirle que no. No quiero decir que no esta vez, porque
quiero esto con cada parte de mi alma, maldita sea o no.
Las manos de Gabriel se burlan de mi cintura y sus dedos se deslizan debajo del dobladillo de mi camiseta sin
mangas. Lo agarra con fuerza, y lloriqueo cuando comienza a despegarlo sobre mi piel. Temblo, jadeando en su boca
mientras él tira más y más, hasta que se agarró justo debajo de mis senos. Sé que podría detenerlo. Sé que podría
terminar esto ahora, y alejarme, y no es como si él me forzara, incluso con lo mucho más grande que yo y lo fuerte
que es.
Pero no voy a hacer eso. Esta noche, digo que sí, y no voy a detener nada de esto.
Él tira y yo jadeo cuando la camiseta sin mangas se desliza hacia arriba, burlándome de mis pezones mientras la
levanta más. Lo suelta de mi cabello y arroja la camiseta empapada, y luego sus manos vuelven a estar sobre mí, sus
brazos me rodean mientras me empuja contra él. Gimo, sintiendo mis pezones arrastrarse sobre su pecho duro como
una roca mientras su boca devora la mía.
Mi pulso se acelera y gimo cuando siento algo duro y palpitante entre mis piernas. Sé lo que es, y me asusta y
emociona. Él es tan duro contra mí, y puedo sentir cada centímetro de esta longitud gruesa y pulsante golpeándome,
desde mi coño a través de mis bragas hasta mi barriga desnuda. Mi corazón late como un tambor, y lentamente,
vacilante, dejo caer mi mano entre nosotros.
Temblo, empujando mi mano más y más, hasta que de repente, mis dedos rozan algo caliente , sedoso y duro como el
acero. Jadeo vacilante, temblando cuando mis dedos rozan la cabeza hinchada en la punta de él.
" Oh , Dios mío ", jadeo en voz baja en su boca. Mi mano se desliza hacia abajo, y lentamente, mis dedos se deslizan
alrededor de su circunferencia. Y oh Dios mío tiene razón.
Gabriel es enorme .
Es muy, muy grande, y cuando mi mano ni siquiera se cierra alrededor de su tamaño, mi corazón se salta. Una vez
más, de alguna manera es aterrador y emocionante al mismo tiempo, como si estuviera emocionado y muy, muy
nervioso al mismo tiempo. Mis dedos revolotean hacia arriba y hacia abajo por su longitud, y jadeo ante lo duro que
está bajo una piel tan suave y sedosa.
"Puedes agarrarlo más fuerte", gruñe en mis labios.
Bien, esta es una lección: una práctica, si se quiere, para el mundo real. Con mi predicador . No es gran
cosa. Definitivamente no es un pecado digno de fuego infernal en absoluto.
Pero incluso si sé que esto está mal, no puedo, y no lo haré, parar. Envuelvo mis dedos alrededor de él con más
fuerza, y cuando gruñe cuando acaricio de nuevo, una sensación de fuego me atraviesa. Deslizo mi agarre hacia
arriba y hacia abajo nuevamente, y Gabriel sisea mientras me agarra con fuerza y me lastima los labios con su beso.
Sigo acariciándolo mientras devora mis labios, su lengua pelea con la mía. Sus grandes manos se deslizan hacia abajo
sobre mi trasero, y gimo cuando él me aprieta entre ellas. Su polla se contrae y palpita en mi mano contra mi barriga,
y mi núcleo se tensa y tiembla con el calor.
De repente, él se aleja del beso y me quita la mano. Frunzo el ceño, y me preocupa que sea tan terrible que él cancele
todo esto, cuando de repente, se para, nos hace girar y luego me da vueltas. Jadeo cuando él me empuja hacia
adelante, inclinándome sobre el borde del tanque de bautismo con las rodillas en el asiento en el que estaba y mi
trasero en el aire, fuera del agua.
"Gabriel"
" Inclínate ", sisea oscuramente en mi oído, lo que envía una emoción a través de mi núcleo que nunca antes había
sentido. Es sexy, pero hay un borde oscuro que me deja sin aliento y me acelera el pulso.
“Quiero que dobla la cogida terminado para mí, chica mala”, gruñe en mi oído, haciéndome gemir mientras mis ojos
se voltean.
Sus dedos se deslizan debajo de los costados de mis bragas empapadas, y lloro cuando él comienza a despegarlas de
mis caderas. Se escabullen y se deslizan sobre mi trasero, y mi cara se pone carmesí. Puedo sentir el algodón
empapado que se desprende de entre mis piernas, y envía esta sensación eléctrica chisporroteando a través de
mí. Me los tira por los muslos y me arde la cara.
Por primera vez, estoy desnuda frente a un hombre. Desnudo y vergonzosamente inclinado, dejándolo ver todo . Sé
que debería estar mortificado o disgustado con mi propio comportamiento. Dios mío, debería huir de aquí y de él lo
más rápido que pueda.
Pero no siento ni hago nada de esas cosas. Doblado sobre el borde de la bañera así, sintiendo la mirada acalorada de
Gabriel burlándose de mí, no siento nada más que deseo y placer.
Se baja detrás de mí, y cuando siento que sus manos agarran mi trasero y me abren, me sonrojo furiosamente.
"Gabriel, ¿qué estás—"
"Estoy haciendo esto, hermosa".
De repente, lo siento, y el eje de mi mundo entero cambia. Veo estrellas mientras el placer explota a través de mí. Veo
fuego puro y luz blanca cuando siento algo húmedo y caliente, y me deslizo tan bien sobre mi coño desnudo. De
repente me doy cuenta de que es su lengua, y gimo y me sonrojo.
"Espera, Gabriel, eso ..." Jadeo cuando él lo vuelve a hacer. "Eso no es ... eso está sucio".
Gruño detrás de mí. "Estoy en desacuerdo."
"Es ... es un pecado ", jadeo.
"¿Dónde exactamente en la Biblia prohíbe lamer el coño?"
Me sonrojo furiosamente, y cuando vuelve a poner su boca sobre mí, gimo de puro placer. Me gruñe, y sus manos
me agarran más fuerte mientras su lengua se arrastra sobre mi coño. Me estremezco por el calor, el placer se derrite a
cada centímetro de mí. Me chupo el labio inferior, mis dientes se rascan mientras aprieto los ojos. Su poderoso agarre
cava en mi piel posesivamente, emocionándome casi tanto como la sensación perversamente traviesa de
su lengua empujándome.
Jadeo cuando él lo desliza más profundamente en mi abertura, y grito mientras lo gira. Se burla de mi botón, y jadeo
bruscamente cuando su lengua gira sobre él. Oh Dios , se siente increíble. Es lo mejor que he sentido, sin duda, y todo
mi cuerpo tiembla y tiembla cuando los sonidos de puro placer pecaminoso caen de mis labios.
Él gruñe, sus dedos me agarran con fuerza y me tiran con fuerza contra su cara. Su lengua toca mi clítoris, y gimo
ansiosamente. Puede que vaya al infierno, pero va a estar en una nube de almohada de puro calor y deseo.
Su lengua se desliza hacia atrás sobre mis labios, provocando mi apertura mientras sus dedos se levantan entre mis
piernas para provocar mi clítoris nuevamente en círculos lentos. Besa superior y superior, y de repente mis ojos
se amplia como su lengua se desliza malvados justo por encima de mi ... mi ...
"Gabriel!" Reprimí su nombre como el placer más pecaminoso que jamás haya soñado. Su lengua está en mi ...
mi trasero , y es puro, candente, placer . Mis ojos giran hacia atrás y mis dedos se curvan. Mis dedos cavan en el borde
del estanque de bautismo, y gimo profundamente en mi garganta con lujuria, vergüenza descarada, ansiosa y
desenfrenada.
Gabriel me gruñe, y su lengua se burla en círculos lentos alrededor de mi lugar privado más prohibido. Él gruñe, sus
manos me agarran con fuerza mientras desliza su lengua hacia atrás entre mis piernas para pasarla por mi coño
nuevamente. Me derrito contra él, y cuando sus pecaminosos labios se cierran alrededor de mi clítoris, y cuando
chupa suavemente y mueve su lengua sobre él, empiezo a desmoronarse.
El mundo gira y se tambalea a mi alrededor, y el mismo aire se enciende con fuego. Dejo caer mi mejilla sobre mi
brazo, jadeando, gimiendo y jadeando de placer mientras Gabriel me acerca más y más a la condenación.
Dulce, feliz, dolorosa condenación.
La presión aumenta y el fuego consume mi alma, y sé que me voy a romper. Sé que me va a hacer ... volver a
hacerme llegar al orgasmo , y esta vez, sé que será aún más grande que la primera vez.
"¡Estoy ... voy a ... Gabriel ...!"
Estoy tan cerca, pero es justo entonces que la otra parte de mí, la parte reprimida y controlada de mí, reacciona. Entro
en pánico, sintiendo que me estoy deslizando de la luz y cayendo al infierno. Se me corta la respiración y me estiro
hacia atrás como para alejarlo antes de que sea demasiado tarde.
"Espera, Gabriel, no podemos ..."
" Sí, podemos ", sisea, gruñendo mientras su lengua gira sobre mi clítoris electrizado y trae un grito de felicidad a mis
labios.
“Sí, podemos, y sí, lo eres . Ahora ven por mí, ángel. Quiero que vengas en mi cara de mierda.
Su boca vuelve a presionarme, su lengua gira sobre mi clítoris, y sus palabras sucias son el golpe final, el colmo que
me rompe en dos. Con un grito de placer, me rompo y el clímax explota en mi alma. Grito de placer, retorciéndome y
empujándome contra su cara mientras grito, gimo y convulsiono contra el costado de la bañera.
Sus manos nunca me dejan, y su lengua permanece sobre mí todo el tiempo, hasta que estoy temblando y mi visión
está nadando.
Estoy jadeando y todavía no soy capaz de ponerme de pie cuando me doy vuelta y me arrojo a sus brazos. Lo beso
febrilmente y sé cuál es esa dulce mancha en sus labios, pero no me importa en absoluto. Lo beso profundamente y él
gruñe en mi boca mientras nos da vueltas y se apoya contra el borde de la bañera. Mi cuerpo se retuerce contra el
suyo, y gimo cuando siento su enorme y gruesa erección palpitando contra mi barriga.
Jadeo y deslizo mi mano hacia abajo para agarrarlo una vez más, y gimo mientras empiezo a acariciarlo lentamente.
" Joder , Dalila ..." gruñe, siseando de placer. Los sonidos de sus labios perfectos me estimulan, y lo sigo frotando con
la mano.
"Quiero ... quiero hacerte ..." Me sonrojo, jadeando mientras lo beso febrilmente y lo acaricio más rápido contra mi
piel. "Que me hiciste."
" Ven ", gruñe. “Dilo, ángel. Déjame oírte decirlo.
Yo lloriqueo. "Yo ... quiero hacerte venir ", siseo contra sus labios.
Él gime, sus músculos se agolpan y sus manos me agarran más fuerte.
"Joder, Dalila", gruñe. "¿Quieres hacerme venir?"
" Sí ", jadeo. Puedo sentir su polla palpitar con tanta fuerza debajo de mis dedos, y acaricio mi mano hacia arriba y
hacia abajo más rápido. Su cabeza hinchada palpita contra mi piel, y puedo sentir sus abdominales apretarse.
Estoy de pie desnudo en un tanque de bautismo , con los labios chamuscados a los de un predicador, con mi mano
sacudiendo su polla.
Satanás llévame ahora.
Gabriel gruñe y me agarra a él. Me besa ferozmente, una mano agarrando mi trasero y la otra enredando mi
cabello. Gimo, mis caderas meciéndose descaradamente contra él mientras mi mano acaricia su enorme y palpitante
polla dura. Él sisea, y lo siento temblar en mis manos, y de repente, lo siento. Gimo cuando su polla se tambalea
contra mí y comienza a chorrear líquido caliente y pegajoso sobre mi barriga.
Gimo, y lo sigo acariciando mientras la pegajosidad gotea por su eje y sobre mis dedos. Él ruge de placer y me besa
ferozmente, nuestros cuerpos se frotan y mi pulso se acelera.
No me envuelven las llamas. No se abre el abismo, con demonios surgiendo para arrastrarme a los fuegos de
abajo. De hecho, cuando disminuimos la velocidad y cuando él me abraza y me acerca para besarme lenta y
profundamente, mi alma nunca ha estado más en paz.
Y nunca me he sentido más salvado.

CAPÍTULO ONCE
G AB R I E L
E STO ES MALO . Bueno, no, es jodidamente increíble lo que es. Pero objetivamente, definitivamente voy al Infierno
por esto.
Han pasado dos días desde que Dalila vino a mí esa noche, la noche que la probé por primera vez y la hice venir por
toda mi lengua. Y desde entonces, he pasado casi cada segundo libre que tengo con mis manos y lengua sobre
ella. Se siente como si hubiera presionado el maldito botón de pausa en la vida, y que solo somos ella y yo existiendo
en este extraño vacío.
Ella es la inexperta aquí, no yo. Pero con ella, todo se siente jodidamente nuevo. Cada beso se siente como si lo
sintiera por primera vez. Cada toque es una nueva exploración. Y créeme, estoy explorando cada maldita pulgada de
ella.
Oh, pero sí, definitivamente voy al infierno. Todo lo que se necesita es mirar a la hermosa virgen de rodillas entre
mis piernas en Winnebago, su cabello rubio provocando mis muslos y sus dedos apretados alrededor de mi polla
para saber eso.
"¿Me gusta esto?" ella dice suavemente.
Miro asombrada, mi boca colgando abriéndose mientras ella baja sus labios suaves y carnosos a mi polla hinchada y
dolorida, y saca su lengua. Ella se inclina más cerca, y yo gimo mientras gira esa lengua alrededor de mi cabeza.
Santo mierda .
" Sí ", gruño, jadeando. "Exactamente como ... oh mierda ".
Su pequeña boca caliente se desliza sobre mi cabeza, envolviéndome en calor húmedo y sordo. Gimo, y mis dedos de
los pies se curvan mientras mis abdominales se tensan. Siseo de placer mientras ella me acaricia lentamente y chupa
mi corona hinchada, su cabello rubio se menea suavemente mientras el calor puro me alcanza. Ella se balancea más
abajo, llevándome más profundo, y apreto los dientes mientras voy con los ojos bizcos.
Ella es ... buena . Muy, muy jodidamente bien. La primera vez, ayer? Bueno, tal vez no tanto. Pero ella regresó
balanceándose la segunda vez, y mis bolas están de acuerdo. Está desnuda entre mis piernas, y todavía puedo
saborear su dulce miel en mi lengua al hacerla venir, tres veces, antes. Una vez con ella tendida sobre mi cama,
retorciéndose de placer y retorciéndose de éxtasis mientras le sacaba el orgasmo.
La segunda vez fue ella montando mi cara, y para una chica a la que le daba vergüenza intentarlo, ella cabalgó mi
lengua como una vaquera de rodeo después de unos quince segundos.
La tercera vez fue cuando estaba tomando un trago de agua en el fregadero de mi cocina, todavía desnuda, y no
pude resistirme a ella. Esa vez, hace unos diez minutos, me acerqué detrás de ella y le besé el cuello mientras
deslizaba mis dedos por detrás. Esa vez, la llevé hasta el borde de la garra antes de caer sobre mis rodillas, agarré su
trasero, la abrí por completo y lamí ese pequeño y caliente gilipollas mientras frotaba su clítoris hasta que ella gritó.
... Oye, nunca dije ser menos que un pecador en toda regla.
Gimo cuando su boca me saca de mis pensamientos. Gruño, y la miro asombrada mientras ella comienza a ir a
la ciudad con mi polla. Ella sorbe húmedamente sobre mí, su lengua se arremolina en mi parte inferior mientras me
traga profundo. Siseo, y ella sorbe y chupa ruidosamente sobre mí, su mano acariciando la longitud de mí que no
puede caber en su pequeña boca caliente. Su boca se mueve lenta y sensualmente sobre mí, y la miro
acaloradamente.
"¿Dónde diablos ...?" Gimo.
Ella se ríe y se aleja de mí, jadeando y sonrojándose. "Yo ... investigué un poco desde ayer".
Arrugo la frente. "¿Investigación?"
Su rubor florece de rojo en su rostro, y se pasa los dientes por el labio mientras me acaricia y me mira a los ojos.
"Yo ... vi algunos videos en línea".
Sonrío, y mi polla se hincha en su mano. "Te refieres al porno".
Se sonroja aún más y pone los ojos en blanco. "¿Puedes dejarme concentrarme?"
"Mi boca está cerrada ".
Ella se ríe, y luego ronronea en silencio mientras se inclina hacia abajo. Gimo cuando su boca caliente envuelve mi
polla otra vez, y su lengua se burla de mi corona. Su mano suave me acaricia de arriba abajo, y se balancea sobre mi
polla gorda e hinchada mientras la presión aumenta. Gimo, y mi control comienza a romperse cuando pierdo la
batalla en sus labios.
"Joder, Dalila", gruñí, alejándola suavemente.
"¿Qué?"
"Me vas a hacer venir, hermosa", gruño.
Ella se sonroja, y algo salvaje chispea en sus ojos. "Quiero ..." ella me mira a los ojos con una mezcla de lujuria y
vergüenza.
"Sólo usted sabe…"
Arrugo la frente. "¿Qué?"
Ella traga, sus ojos arden.
"Quiero que vengas a mi boca".
Ella baja esa boca hacia mí, pero casi ni siquiera regreso. Sus labios se deslizan húmedamente sobre mí, y su lengua
gira alrededor de mi cabeza, y la pierdo. Gimo, y mis pesadas bolas se contraen cuando mi semen entra en erupción
en su boca. Mi carga caliente brota en gruesas cuerdas sobre su lengua, y ella balbucea un poco, pero traga rápido y
ansiosa, gimiendo a mi alrededor mientras me acaricia su ansiosa boca, hasta que se traga cada gota.
Bueno. Maldito. Señor.
Me dejo caer en el sofá, jadeando por aire, cada músculo de mi cuerpo se contrae mientras ella me quita la boca. Ella
se ríe y se desliza hacia arriba en el sofá conmigo. Gimo, acercándola a mí, y ella se acurruca contra mí.
"¿Mejor esta vez?"
"Tú ... santo cielo , hermosa", gemí.
Ella sonríe y me mira. "Me gusta cuando me llamas así".
"¿Que hermoso?"
Ella se sonroja. "Si, eso." Se inclina y beso sus labios lenta y suavemente mientras mi brazo la rodea.
Sin embargo, de repente, ella se aleja y mira el reloj. Ella jadea y salta de mis brazos y del sofá y rápidamente
comienza a recoger su ropa.
"¡Mierda!" ella jadea. Yo sonrío. Es jodidamente adorable que incluso después de toda mi corrupción, o incluso con
ella estando desnuda con mi semen todavía en su lengua, no se atreva a maldecir.
"Tengo que correr antes de que mis padres se pregunten dónde diablos estoy".
Ella vuelve a ponerse la ropa, para mi consternación, y luego se inclina hacia mí para besarme profundamente. La
agarro y hago un movimiento para deslizar mi mano debajo de su falda, pero ella se ríe y empuja mi mano mientras
se levanta.
"Eso fue muy divertido", murmura suavemente.
"Uh, sí ", me reí entre dientes.
Ella se ríe y me mira. "¿Luego?"
"Oh sí."
Se sonroja cuando me paro y la atraigo hacia mí, besándola profundamente otra vez antes de que finalmente la deje
ir. Ella sostiene mi mirada antes de girarse y abrir la puerta de la pantalla al Winnebago y salir. La veo saltar por el
campo de regreso a su camioneta, todavía desnuda y apoyada contra el marco de la puerta sacudiendo mi cabeza.
Maldita .
Esto no es nada de lo que estaba buscando. Demonios, ni siquiera sé qué es "esto". Es casual, pero no. Es un "arreglo
de enseñanza", pero eso es una mierda. No, cuando la veo alejarse de mí, y siento un dolor sordo en el pecho por no
estar aquí conmigo ahora, sé muy bien que esto no es remotamente casual.
Pero mejor me doy cuenta de qué es, y rápido.

"¡TARDE , PREDICADOR !"


Sonrío y saludo al hombre de enfrente que me saluda. Luego a la otra pareja que dice hola. Sigue sucediendo, hasta
que parece que cada jodida persona en Main Street en el centro de Canaan está allí para saludar y estrechar mi
maldita mano.
Han pasado unas pocas horas y dos sermones desde que Dalila dejó mi Winnebago antes, y mi cabeza todavía no
está recta. Algo anda mal o ha cambiado conmigo. Por un lado, todo lo que puedo pensar es en ella , pero aún más
confuso es que todo el día, y todo el día de ayer, realmente he estado predicando de verdad . En realidad, desde mi
primer día aquí cuando cayó en mi mundo, básicamente estoy siendo un predicador de las palabras del Señor. De
acuerdo, a veces son palabras inventadas que suenan bien, pero aún así.
En realidad, tampoco les estoy vendiendo mierda. Quiero decir, claro, están los platos de las colecciones y el
bautismo que todavía estoy dando. Pero ningún "milagro" cura. Ninguna de las "medicinas" de artritis de mierda de
Kane. Ningún trozo de madera de ese granero que encontré en Minnesota que, según yo, son piezas del ataúd literal
de Peter the Apostle. Nada de esa mierda.
Camino por las bonitas callejuelas arboladas de Canaan, saludando a cada maldita persona que veo, y de repente me
sorprende: me gusta esto. Me gusta que todos me saluden y quieran sonreírme. Me gusta que realmente no haya
cosido ninguna mala voluntad aquí, o incluso he hecho mucho estafa. Y realmente, simplemente me gusta aquí, esta
ciudad, quiero decir. Por un segundo, casi puedo verme solo viviendo aquí, permanentemente.
… Para un hombre que no ha dejado de moverse en años, confía en mí, ese es un concepto extraño. También está
jodiendo con mi cabeza.
Frunzo el ceño y decido hacer las compras de comestibles que vine a hacer a la ciudad lo más rápido posible para
poder sacar mi trasero de aquí. Pero de repente, escucho mi nombre una vez más.
"Gabriel!"
Frunzo el ceño y finjo no escucharlo, hasta que escucho los pasos detrás de mí y la voz vuelve a llamarme.
"¡Espera, Gabriel!"
Mierda. Me doy vuelta, y efectivamente, es Paul Somerset. Forzo una sonrisa en mi cara.
"Hola, Paul, ¿cómo estás?"
“Genial, Gabriel, genial. ¿Como esta tu dia?"
Asombroso. Tu hermana se tragó mi semen después de que le hice el orgasmo por toda la boca, tres veces.
"Fantástico", sonrío. "Simplemente fantástico."
El asiente. "Eso es genial. Bueno, oye, podría ... "frunce el ceño. "¿Podría seguir contigo esa idea de la iglesia?"
Correcto. Mierda.
Yo suspiro. "Paul, sabes qué, necesito ..."
"¿Podríamos sentarnos?"
"Uhhh, ¿seguro?" Me estremezco. Joder, no necesito ser arrastrado a esta mierda en este momento. O, ya sabes,
alguna vez.
"Pero Paul, realmente necesito ..."
“Solo un minuto de su tiempo, señor, lo prometo. Sé que esto podría ser bueno.
"Sí, um, un minuto".
Él sonríe. "Fantástico. Aquí, por aquí.
Gimo por dentro mientras me arrastra al Café Morning Glory y se sienta en una de sus mesas al aire libre antes de
hacer un gesto hacia la silla a su lado. A regañadientes, me siento mientras Paul saca una computadora portátil. Lo
abre, y mis ojos casi salen de mi cabeza. Su fondo es una foto de él abrazando a una mujer en un vestido de verano,
que está besando su mejilla con amor.
La mujer es Lizzie Purcell, alias, mi persistente visitante de medianoche en el Winnebago hace unas noches.
Que mierda
"Uh, Paul, quien ..."
Se da vuelta y me sonríe. "Oh, Lizzie?" su sonrisa se ensancha. "Ese es mi prometido, Sr. Marsden".
Le sonrío débilmente. “Fantástico, Paul. Eso es fantástico para ti ".
Pobre bastardo , gimo por dentro, pero mantengo la boca cerrada.
"Bien, esta es mi hoja de cálculo de donaciones hasta ahora, junto con nuestros objetivos y puntos de referencia".
Paul abre un archivo de Excel, y parpadeo en estado de shock cuando mi mandíbula golpea la mesa. Por un lado,
porque la hoja es meticulosa y muy detallada. Pero para dos, y lo que es más importante, porque Paul de alguna
manera ha logrado recaudar casi dos millones de dólares para su iglesia. Quiero decir, olvida esta mierda de estafador,
debería salir y recaudar fondos para una iglesia real. Quiero decir, mierda .
"Jes—" me atrapo. "Wow, Paul, eso es realmente impresionante".
El me sonríe. "Gracias Señor. Sin embargo, no es solo de Canaán, algunas otras comunidades e iglesias locales han
colaborado ”. Él irradia. “El Señor me ha llamado a Su servicio, y haré lo que deba para honrar Su nombre con una
iglesia digna de Él. Y creo que si también sintieras el llamado, como otro hombre de Dios, sé que seguramente
apreciaríamos cualquier cosa que pudieras dar por la causa.
Sí, de ninguna manera.
Me aclaro la garganta y le sonrío. "Mira, Paul-"
"¿Sabes que?" Él salta de su asiento. Déjame ir a buscarnos algunos cafés. ¿Es usted un hombre con leche, señor
Marsden?
"Uh, ¿seguro?"
Él sonríe. "Yo invito. Siéntate, volveré enseguida.
Se lanza dentro y yo soplo aire a través de mis labios. Sí, de ninguna manera estoy dando algo de mi dinero ganado
con esfuerzo, o al menos ganado con esfuerzo a su tonta iglesia. De ninguna manera. Frunzo el ceño y miro su hoja
de cálculo, y sacudo la cabeza. La cifra que ha planteado es realmente impresionante. Es envidioso, en realidad. Mis
ojos se mueven sobre las mesas y sacudo la cabeza. Sí, podría estar en el negocio equivocado aquí.
Estoy mirando su hoja, cuando de repente aparece otra hoja, parpadeando con un mensaje que le pregunta si quiere
activar el autoguardado. Instintivamente, porque odio cuando mi computadora portátil sigue haciendo preguntas
tontas como esa, hago clic en sí para él. Pero entonces, ese segundo documento se mantiene y empiezo a leerlo.
... Y mis ojos se abren.
Santo. Mierda .
El documento tiene listas de cuentas y términos, y de mis pequeñas incursiones en el fraude con cheques, puedo leer
lo que es. El hijo de puta está preparando un juego de conchas. Él tiene la principal "confianza", que
presumiblemente es donde estos casi dos millones se mantienen seguros para destinarlos a la construcción de su
iglesia. Pero entonces, hay cuentas "alimentadoras". El imbécil promedio miraría esta mierda y no tendría la menor
idea de lo que es, o de que hay algo malo en esto. Pero, no soy un rube ordinario.
Yo sé lo que es un juego de la cáscara se parece. Demonios, Jasper me enseñó esta mierda cuando tenía diecisiete
años. Y sé muy bien, en un segundo, lo que Paul está haciendo.
El truco es que usted hace que las cuentas "alimentadoras" parezcan negocios legítimos. Y cuando miro su sábana,
eso es exactamente lo que está haciendo. Uno está calificado como una "firma de contratación de asesores de
construcción". El otro es un inicio de estudios geológicos con sede en Florida. ¿El único problema?
Todas son compañías de Paul .
Echo un vistazo a través de las ventanas del café, y Paul está gritando con el barista detrás del mostrador. A la
mierda Abro una carpeta y empiezo a hurgar. Me lleva treinta segundos encontrar la carpeta "Contratos"
ingeniosamente nombrada dentro de la carpeta "Shell Corps" igualmente ambigua. Aparentemente, no tienes que ser
un genio para lograr esto en un lugar confiable como Canaan.
Abro el PDF llamado "Contrato de fideicomiso principal" y empiezo a hojear. Al instante, frunzo el ceño.
El Trust está a nombre de Paul, y el contrato es estándar, como casi todos los contratos de Trust que he visto. Incluso
hay una subsección que menciona que en el caso de un matrimonio donde se unirán las finanzas, la confianza se
debe disolver para evitar compromisos. Eso es una mierda estándar, pero luego, Paul se va a casar.
Mi ceño se profundiza. ¿Qué diablos está haciendo? Pero entonces, está bastante claro lo que está haciendo: Paul está
a punto de estafar a toda esta jodida ciudad.
No hay iglesia, eso está bastante claro. De hecho, tiene contratos de aprobación previa para comprar una propiedad
en Costa Rica. Pongo los ojos en blanco ante lo descarado y obvio que es, pero Paul es de Canaán, que es exactamente
el tipo de ciudad que elegiría un estafador. Quiero decir, por eso estoy aquí.
Frunzo el ceño ante los contratos y algunas de sus otras intrigas antes de volver a mirar dentro del café. A Paul le
están entregando dos tazas para llevar, y rápidamente cierro todo y levanto su hoja de cálculo original. Sale del café
y sonríe mientras se sienta y me da el café.
"¿Bueno, dónde estábamos?"
Sonrío levemente. “Paul, me temo que tengo que correr. Pero pongamos un alfiler en esto.
Frunce el ceño ligeramente, pero asiente. “Sí, sí seguro, Gabriel. ¿Volveremos pronto? ¿Antes de salir de la ciudad?
Yo sonrío. "Absolutamente."
No. Absolutamente no.
No quiero ser parte de la mierda de Paul. Tengo que pensar en mi propia mierda: con lo que soy, con lo que es esta
cosa con Dalila y, junto con eso, lo que significa para ella y para mí cuando salga de la ciudad dentro de unos días.
Más tarde esa tarde, tengo un último sermón para el día programado en la tienda. El lugar está lleno como lo ha
estado desde que llegué aquí, y les doy un deslumbramiento estándar sobre "ser la luz" e "iluminar el camino para
los no salvos".
Pero, no hay placa de colecciones, y no es un descuido, simplemente no paso nada. Tampoco configuro un cubo de
recolección, no bautizo y todavía no vendo una sola botella de aceite de serpiente.
Cuando la multitud se va, me siento al borde de mi escenario, frunciendo el ceño. Me preguntaba qué demonios me
pasa, pero ya sé lo que es.
Es ella . Es Dalila. Pero entonces, no estoy seguro de si este nuevo yo con ella en mi vida es algo tan malo o malo.
CAPÍTULO DOCE
GABRIEL
"TE TRAJE ALGO".
Miro hacia arriba, sobresaltada, desde mi bloc de notas para ver a Delilah apoyada contra el poste de la solapa
trasera de la tienda, sonriéndome. Le devuelvo la sonrisa, y una calidez se derrite sobre mí, como siempre sucede
cuando la veo.
Ella asiente con la cabeza en mi bloc de notas. "¿En que estas trabajando?"
"Un sermón".
Ella se ríe. "¿Realmente lo intentas?"
Pongo los ojos en blanco. "Divertidísimo. Y sí, lo hago ".
"Mira, pensé que acababas de sacar cosas de tu ..." Se sonroja adorablemente, y me encanta que todavía se ponga
nerviosa cuando está a punto de intentar usar una verdadera palabrota.
"Tu trasero".
Me reí entre dientes. "Estás empezando a tener la boca como un marinero, merodeando a mi alrededor".
Ella se ríe.
"Pero sí, lo intento". Me encojo de hombros "Ya sabes, a veces". Sonrío y asentí a la bolsa de papel en su mano. "¿Que
es eso?"
Ella sonríe "Esta." Alcanza el interior y saca un enorme tarro de albañil lleno de algo de color naranja y ámbar. Mi
ceño se anima.
"¿Eso es algo de ese brillo de luna?"
"Sí, de hecho".
"¿Y trajiste suficiente para toda la clase?" Bromeo.
Pero ella solo se rasca los dientes sobre el labio. "Sí", ella respira. "Yo hice."
Sonrío con curiosidad. "¿De verdad te unes a mí en una bebida por una vez?"
Ella asiente, mordiéndose el labio inferior mientras sonríe. "Solo por una vez, sin embargo."
Hago un chasquido y sacudo la cabeza. "Travieso Travieso."
"Bueno, mañana rezaré más fuerte".
Me río, pero por dentro, mientras la bebo, trato de ignorar el hecho de que me fui en tres días. En tres días, me iré, y
eso significa dejarla. Y todavía no estoy seguro de cómo voy a lidiar con eso.
"Bueno, Sra. Somerset, levante un taburete".
Ella sonríe cuando tomo un par de tazas de café de un pequeño estante y detengo una segunda silla plegable. Retira
la tapa del tarro de albañil y huele antes de reírse. "Eso realmente huele delicioso".
Me sirvo dos tazas pequeñas y le doy la suya. "¿Estás seguro de esto?"
"Por supuesto", se encoge de hombros con indiferencia.
Yo sonrío. "Nunca has bebido antes, ¿verdad?"
Ella sonríe tímidamente. "Bueno no exactamente."
"Tranquila", murmuro, y presiono mi taza contra la de ella. "Salud."
"Salud."
Ambos llevamos las tazas a nuestros labios, y la veo tomar un sorbo. Ella balbucea un poco, pero sonríe mientras se
la traga.
"Wow, eso es bastante bueno".
Golpeo el mío y sonrío. “Mierda, que va a ir hacia abajo manera demasiado fácil. Lo digo en serio, la miro. "Con
calma."
Ella me sonríe tímidamente y nos sirve un fuerte chapoteo. Mierda. Esto es peligroso, pero es divertido y peligroso.
"He estado pensando en algo".
"¿Oh?" ella ronronea, inclinándose cerca y bebiendo su bebida. "¿Que es eso?"
"Existe la posibilidad de que pueda ser una mala influencia para ti".
Ella se ríe, y antes de que pueda decir otra cosa, se acerca, empuja mi taza y me besa profundamente. Gruño y le
devuelvo el beso, y sus labios se abren para mi lengua con entusiasmo. Ella gime en mis labios, y nuestras lenguas
bailan antes de retroceder jadeando, sus mejillas brillando.
"Tal vez", ella respira. "Pero soy una niña grande y puedo pensar por mí misma".
"¿Y qué piensas de esto?", Gruño. "Tú y yo, y todo esto".
Sus ojos brillan y ella tira su bebida. "Creo que quiero más".
Ella se desliza de su silla y cae en mi regazo, y yo gimo. También tiro mi bebida y empujo nuestras dos tazas sobre la
mesa. Mis brazos rodean su cintura, y gruño cuando siento que los músculos de la parte baja de su espalda se
retuercen cuando ella se arquea contra mí. Me besa lentamente y sus caderas se mecen sobre mí, rechinando contra la
gruesa erección de mis jeans.
Alguien aprende muy, muy rápido.
Sus manos van a mi camisa y comienza a desabrochar febrilmente los botones. La ayudo a despegarlo de mis brazos
antes de agarrar el dobladillo de su camiseta y tirar de ella sobre su cabeza. Luego le quito el sostén y ella gime
mientras sus pezones presionan como dos puntos contra los músculos de mi pecho, arrastrando eléctricamente sobre
mi piel.
Ella se aleja, jadeando, sus ojos salvajes.
"¿Bañera de hidromasaje?"
"Joder sí".
Nos trepamos y nos quitamos el resto de la ropa. Todavía se está quitando las bragas cuando yo gruño y me acerco
detrás de ella para agarrarla. Ella chilla y se ríe mientras mis brazos la rodean por detrás, pero luego gime cuando
siente mi polla gruesa caliente contra su trasero. Ella patea las bragas y se retuerce en mis brazos.
Gruño y agarro su trasero, tirando de ella hacia mí mientras sus piernas se entrelazan a mi alrededor. La beso
profundamente mientras extiendo una mano y enciendo mi pequeño calentador burbujeante, y la bañera comienza a
burbujear. Sigo besándola, y lentamente, el vapor comienza a salir de la bañera. Mantengo mi boca pegada a sus
labios mientras subo por el borde de la bañera y me acomodo con ella en mi regazo, esas piernas largas y lisas me
rodean.
Ella muele ansiosamente contra mí, y siseo de placer en su boca cuando siento su pequeño coño resbaladizo
arrastrarse contra mi polla. Obviamente no la he follado todavía. A pesar de sus formas malvadas recientemente
descubiertas conmigo, sé que eso es algo que todavía es importante para ella. Ella quiere aferrarse a eso para el
matrimonio. ¿Frustrante? Sí, pero también lo respeto, de una manera extraña.
De otra manera extraña, me enfurece pensar que algún otro imbécil tendrá esa parte de ella. Sé que irme significa que
esto está hecho, sea lo que sea "esto". Y sé que a pesar de la diversión que estamos teniendo, y yo "enseñándole su
pecado" o cualquier nombre de mierda que hayamos asignado a esta cosa, así que tenemos una excusa para
engañarnos unos con otros, será otro hombre quien la haga para siempre El pensamiento me enfurece, pero lo
empujo a un lado mientras la agarro con fuerza y la beso ferozmente.
Mi mano se desliza hacia abajo entre nosotros, y ella grita y fácilmente deslizo un dedo dentro de ella. Ella muele
contra mi palma y me besa ampliamente mientras doblo mi dedo profundamente, y su propia mano cae sobre mi
polla.
"Gabriel ..."
Gruño, y ella jadea cuando la levanto de la piscina y la dejo en el borde. Me muevo entre sus muslos, extendiéndolos
ampliamente antes de inclinarme y arrastrar mi lengua sobre su pequeño y caliente coño. Delilah gime
profundamente y ella jadea cuando mi lengua la empuja profundamente. Sus manos se deslizan en mi cabello,
agarrándolo con fuerza mientras le tomo el pelo con la lengua. Me deslizo hacia su clítoris, y ella grita mientras
succiono su pequeño capullo entre mis labios y giro mi lengua sobre él.
Ella ya está cerca, y lo sé. La empujo más hacia ese borde, y mi lengua provoca su clítoris más rápido. Sus gemidos
llenan mis oídos, y sus dedos arañan mis hombros. Deslizo un dedo en su lindo gatito y lo enrollo contra su lugar
justo adentro mientras chupo su clítoris, y Dalila comienza a temblar.
"¡Oh Dios! Gabriel! Gabriel ...
Mi nombre que cae de sus suaves labios me pone tan jodidamente duro, al igual que el dulce sabor de su pequeño
coño caliente. Gimo mientras bebo ansiosamente su miel y succiono su clítoris, y sus muslos comienzan a apretar mi
cabeza.
"¡Yo ... yo soy!" ¡Gabriel!
Curvo mi dedo más rápido y giro mi lengua alrededor y alrededor de su dolorido capullo, hasta que de repente, con
un dolorido y roto grito de placer, ella se hace añicos por mí. Ella gime violentamente mientras se golpea con fuerza
contra mi lengua, su cuerpo arqueándose y rechinando contra mi lengua hasta que se derrumba, jadeando. Ella
agarra mi cara y me levanta para besarme ferozmente, y gruño cuando sus piernas me rodean.
" ¿Qué me haces ?" Ella gime, besándome acaloradamente. Ella se agacha y envuelve sus pequeños dedos alrededor de
mi polla dura y palpitante, y yo gruño. Ella se aleja, sonriendo tímidamente antes de deslizarse por el borde de la
bañera y gira lentamente. Todavía está sosteniendo y acariciando lentamente mi polla, y me mira por encima del
hombro, con el pelo sobre los ojos ahumados de lujuria.
Ella tira de mi polla dolorida contra su trasero, y yo gimo mientras me golpea contra su muslo. Ella abre un poco las
piernas y, con un suave gemido, guía mi polla entre sus muslos. Mi cabeza hinchada empuja sobre sus resbaladizos
labios rosados, y siseo de placer mientras ella gime.
"Yo ... ojalá pudiéramos hacer más", susurra. Ella frunce el ceño y me mira por encima del hombro. "Lo siento, no
quiero molestarte, solo ..."
"Estás esperando", gruño. "Y eso está bien".
Se derrite contra mí, de espaldas a mi pecho mientras me inclino sobre ella, giro su cabeza hacia un lado y la beso
profundamente. Mi polla palpita contra su pequeño coño prohibido, y ella gime.
"Pero te sientes tan bien", ella gime suavemente. "Solo desearía que hubiera algo más que pudiéramos hacer". Ella se
sonroja. "Algo más que podría probar".
Lentamente empuja su trasero contra mí, y gimo cuando su suave y pequeño coño se burla de mí. Delilah jadea y
gime, temblando mientras se mece en mi polla.
"Yo, solo quiero sentirte un poco", gime. Su mano todavía está envuelta alrededor de mí y acaricia mi polla mientras
frota la corona sobre su clítoris. Ella me desliza sobre sus labios, no tirando de mí adentro, sino que hace que mis ojos
rueden hacia atrás mientras mi cabeza se desliza sobre su sedoso y húmedo coño. Ella empuja hacia atrás una
fracción de pulgada, y yo gimo cuando casi empujo dentro antes de que los dos nos atrapamos.
" Whoa " , ella respira, jadeando. "Eso estuvo cerca."
"Deberíamos parar, Dalila", gruñí.
Ella asiente. “Lo sé, yo solo… quiero sentirte tan mal. Quiero que solo me tengas a mí.
Ella acaricia mi polla de un lado a otro, frotando mi corona sobre sus labios lisos hasta que, de repente, arrastra mi
cabeza más arriba.
Y luego más alto.
Cuando mi cabeza gorda y burlona se burla de su pequeño y apretado gilipollas, siseo oscuramente de placer, y un
gemido atrapa en su garganta.
" Oh , joder ", ella jadea.
" Dalila ..." Gimo.
“ ¿Qué hay de aquí? "Ella respira tan silenciosamente que casi ni siquiera la escucho. Pero yo sí, y mi polla
jodidamente se tambalea.
"Joder, Dalila", gruño oscuramente. Ella gime y me acaricia, y suavemente, ella empuja hacia atrás. Puedo sentir su
pequeño anillo apretado presionar contra mi cabeza, y ella jadea sin aliento.
"Yo-yo quiero", ella gime suavemente. "Quiero intentarlo."
Yo gimo. "Estás borracha, hermosa", ronroneo en su oído, mordisqueando su lóbulo mientras ella gime.
"No lo soy", ella respira. "Bueno, un poco, pero yo soy ..." ella se voltea hacia mí, sonriendo. “No estoy no borracho,
para citar a mi predicador favorito.”
Gira su cabeza más hacia mí, y yo gruño mientras me inclino y la beso lenta y profundamente antes de que ella
retroceda sin aliento.
"Sé lo que quiero, Gabriel", susurra con el corazón en su voz.
"Dalila, no puedo ..."
"¿Me quieres?" ella respira
Gruño " Joder sí ".
"¿Tú ..." ella gime mientras empuja hacia atrás, su culo presionando contra mi cabeza hinchada y gorda. " Ya sabes ",
ella respira.
Me pongo rígida y mis ojos se deslizan hacia donde mi gran polla está presionada contra su pequeño anillo apretado.
" ¿Sabes qué ?" Yo gruño
Ella gime y retrocede un poco más, con los ojos cerrados. "Gabriel ..."
"Dime, Dalila", gemí
Ella gime sin aliento, su rostro rojo carmesí y sus caderas empujando un poco más antes de jadear.
" ¿Quieres follarme el culo ?"
El fuego ruge por mis venas, mis músculos se aprietan, mi mandíbula se aprieta y mis manos se tensan sobre su
dulce cuerpo. Una niebla roja de lujuria desciende sobre mis ojos, y gruño profundamente mientras presiono mi
polla contra su pequeño y perfecto gilipollas.
"Eres ..." ella jadea. "Eres realmente grande ..." ella gime y empuja hacia atrás. "Sólo-"
"Espera", gemí, inclinándome para besar la parte posterior de su cuello. "Ya vuelvo".
Estoy asombrado de ser capaz de alejarme de ella, pero salgo al borde de la bañera y corro hacia Winnebago. Tomo
lo que necesito de mi mesita de noche, y estoy de vuelta en la bañera detrás de ella con mis manos sobre ella en un
tiempo récord.
Ella se ríe. "Qué-"
"En un segundo, hermosa", gruño con una sonrisa. Aparto su largo cabello de su cuello y me inclino para
mordisquear la piel allí. Ella está jadeando y temblando mientras beso mi camino hacia abajo, besando cada golpe en
su columna mientras mis manos se deslizan por su piel. Me hundo en el agua detrás de ella, y mis manos agarran su
culo apretado y curvo. Gruño cuando la abro para mi mirada hambrienta, y me mudo con un gemido.
Mi lengua se arrastra sobre su coño, y Dalila jadea. Ella gime cuando empujo mi lengua profundamente, lentamente
jodiéndola con ella mientras se retuerce y empuja hacia atrás y gime de placer. Envuelvo mis labios alrededor de su
clítoris y giro mi lengua sobre ella, y ella grita, agarrando el borde de la bañera con fuerza. Mi lengua se arrastra a
través de sus labios, y luego más arriba, y mi polla se contrae cuando la abro aún más.
Mi lengua se desliza sobre su gilipollas, y Dalila tiembla de calor. Ella está gimiendo y empujándome contra mí
mientras le bordeo el culo con la lengua, haciéndola gemir de placer.
"Gabriel!" Ella gime. "Así que ... ¡ oh Dios , tan sucio!"
Gruño y giro mi lengua sobre su pequeño agujero apretado, intacto y prohibido, y ella chilla de placer.
"Ponte en contacto, ángel", gruño. "Ponte en contacto y toca tu coño por mí".
Ella se estremece, y sé que su rostro está rojo brillante mientras empuja lentamente su mano entre sus piernas, hasta
que sus dedos se deslizan sobre su clítoris. Ella jadea bruscamente, y yo gruño cuando empiezo a lamer su culo otra
vez.
Mi polla está dolorosamente dura, y sé que está lista. Lentamente, me alejo y me paro detrás de ella, y alcanzo el borde
por el lubricante que he sacado del Winnebago. Exprimo una carga de mierda sobre mi polla, y gruño de placer
mientras me acaricio hasta que estoy resbaladizo y brillante. Ella mira hacia atrás y se sonroja cuando lo ve en mi
mano.
"¿Tú ..." se muerde el labio. "¿Haces esto con muchas chicas?"
Arrugo la frente. “Delilah, no he estado con una mujer en un año. Más, en realidad.
Ella parpadea y me mira. "¿De verdad?"
Asiento con la cabeza "Si."
"Pero tienes eso ..."
Yo sonrío. "Porque es más divertido que una mano seca".
Se sonroja furiosamente, pero sonríe, sus dientes se rascan el labio.
"¿Estás seguro de esto?"
Ella asiente, tragando saliva. "Muy."
Ella jadea y empuja hacia atrás, y mi polla se contrae. Bromeo con mis dedos resbaladizos sobre su trasero, y ella
tiembla mientras se frota el clítoris. Lentamente, empiezo a hundir un dedo en ella, y Dalila gime de placer.
"Oh Dios ", ella jadea. "Eso es ... oh Dios ".
Mi mandíbula se aprieta fuertemente mientras lentamente muevo un dedo dentro y fuera de ella, antes de agregar
un segundo. Me meto a ambos, y ella gime y comienza a frotar su clítoris más rápido. La sangre está rugiendo en mis
oídos, y mi esperma está hirviendo en mis bolas. Lentamente, deslizo mis dedos de ella y me acerco. Mi mano agarra
su trasero, abriéndola mientras acaricio mi polla y presiono la cabeza contra su pequeño agujero.
"Sigue tocando tu coño, ángel", gruño.
"¿Ve lento?"
"Nunca voy a lastimarte, Dalila".
Mi polla se tambalea mientras la presiono contra su anillo. Empujo, cada onza de mi fuerza de voluntad se usa para
ir despacio. Agrego presión, acariciando mi polla y burlándola con mi cabeza hinchada hasta que su pequeño y
apretado imbécil comienza a abrirse para mí. Mi cabeza palpita, y empujo un poco más, aliviándola. Ella gime, su
respiración se vuelve irregular y su mano frota furiosamente su clítoris. Su espalda se arquea, y en la luz tenue y
brillante, miro hacia abajo mientras mi polla gorda comienza a hundirse lentamente en ella.
Delilah empuja hacia atrás, y de repente, con un jadeo, mi cabeza se desliza dentro.
"Oh joder ..." ella ahoga la palabra sucia, pero inmediatamente es seguida por este profundo y primitivo gemido de
placer. Gruño y me sostengo allí mismo, apretando los dientes cuando siento su culo apretarse alrededor de mi
cabeza con tanta fuerza. Delilah respira temblorosa y lentamente gira la cabeza para mirarme con puro fuego en los
ojos.
"Quiero que sigas adelante".
Sí, no necesito que me digan eso dos veces. Gruño mientras agarro sus caderas con fuerza, y empiezo a empujar. Mi
polla hinchada comienza a empujar dentro de ella, resbaladiza y brillante mientras se hunde más profundamente en
su culo. Delilah se frota el coño con tanta fuerza, y ella gime una y otra vez mientras yo sigo alimentando mi polla
por el culo. Pulgada tras pulgada desaparece dentro de ella, mis bolas revolviéndose con esperma y mi pulso
rugiendo, hasta que finalmente, estoy completamente adentro.
Delilah deja escapar un gemido bajo y jadeante, y yo gruño con mis bolas descansando sobre su coño.
“ ¡Oh Dios, oh Dios, oh Dios! "Ella gime profundamente. Siseo y mis dedos se clavan en sus caderas. Una neblina roja
de lujuria cubre mi visión, hasta que todo lo que veo es donde nos unimos. Lentamente, me deslizo fuera de ella,
gimiendo de puro placer mientras su apretado anillo agarra mi polla con fuerza. Me deslizo lentamente fuera de su
culo, dejando solo la cabeza adentro mientras ella gime guturalmente.
" Más ", jadea, y con un gruñido, empujo hacia adentro.
Mi agarre se tensa cuando me deslizo hacia afuera, y luego vuelvo a entrar, y lentamente, la bestia dentro de mí
comienza a hacerse cargo. Gruño como un animal cuando empiezo a ver lentamente dentro y fuera de su culo
increíblemente apretado y caliente. Delilah gime de éxtasis, jadeando de placer mientras frota su clítoris, y mi gruesa
polla se hunde en ella.
Gruño, deslizando una mano por la curva de su espalda hasta que mis dedos se enredan en su largo cabello
rubio. Lo envuelvo en un puño, tirando de su cabeza hacia atrás mientras chilla de placer. Me inclino sobre ella, mis
dientes rastrillando su cuello y mis labios acariciando su piel mientras empujo mis caderas hacia adelante, follando
mi polla en su culo. Garras en el borde de la bañera con una mano, la otra estirando la mano para agarrar la parte
posterior de mi cuello, mantener mi boca en su cuello y clavícula.
Deslizo mi mano alrededor de su cadera y hacia abajo entre sus piernas para frotar su clítoris, y ella comienza a
temblar por todas partes. Le tiemblan las piernas y su puto culo me agarra como un vicio mientras gime como
ninguna mujer que haya escuchado.
" Gabriel! "Ella grita. " Gabriel ... A la mierda. Estoy ... oh Dios mío. ¡Dios mío, eres tan jodidamente profundo! ¡Oh Dios! "
Mis dedos ruedan sobre su clítoris y mis dientes se arrastran sobre su cuello mientras empujo dentro de ella, y de
repente, puedo sentir su rotura por mí. Ella chilla de placer, y todo su cuerpo parece convulsionarse a mi alrededor
mientras el orgasmo detona a través de ella. Gimo, bombeando en ella una y otra vez a través de su clímax, hasta que
la sensación de que ella viene una y otra vez para mí es demasiado para resistir.
Con un rugido, entierro mi polla hasta la empuñadura en su pequeño culo caliente, y la dejo ir.
Mi semen explota profundamente en ella, cuerda tras cuerda caliente pegajosa llenándola una y otra vez. Delilah
ahoga un gemido, temblando mientras empuja hacia atrás y se aferra a mí con tanta fuerza. Me detengo lentamente,
jadeando y envolviendo mis brazos alrededor de ella mientras me mantengo allí, tan jodidamente profundo en ella.
" Eso ... " ella murmura lentamente, jadeando mientras su pecho se agita y su cuerpo tiembla con sus réplicas. “ Eso
fue ... el cielo real. "
Sonrío y la atraigo hacia mí, besándola de vuelta. Me dirijo hacia abajo y suavemente salgo de ella antes de darle la
vuelta y envolverla en mis brazos. Nos hundimos en el agua burbujeante, jadeando, con el corazón acelerado. Y
lentamente me giro hacia ella para besarle el cuello y la mejilla, y cuando se da vuelta para encontrarme, sus suaves
labios.
He pasado toda mi vida sin encontrar religión. Y ahora, creo que podría haber ido y tropezar con el culo hacia atrás
en algo aún mejor.
CAPÍTULO TRECE
GABRIEL
CASI LA CONVENZO DE QUE SE quede A pasar la noche. Fóllame, después de lo que hicimos en esa bañera, quiero que
ella vaya esa noche, la noche siguiente y todas las jodidas noches por el resto de mi vida.
Pero al final, sé que tiene razón: no puede quedarse toda la noche conmigo. Tal como están las cosas, le dijo a sus
padres que se quedaría hasta tarde en la casa de un amigo para estudiar la Biblia. Podría mentir un poco más y
mencionar que se quedará toda la noche, pero es demasiado arriesgado, y no le estoy diciendo que le mienta aún más
a sus padres.
Después de la bañera, la envuelvo en una toalla y la llevo al Winnebago. De hecho, nos quedamos dormidos con su
cabeza sobre mi pecho, pero ella está levantada en algún lugar alrededor de la medianoche riendo y jurando que
necesita correr ahora . Me las arreglo para un beso más antes de llevarla de regreso al camión y verla alejarse.
Duermo como un jodido muerto y, por primera vez en mucho tiempo, no siento la necesidad de usar productos
químicos para conciliar el sueño. Es decir, hasta alrededor de las ocho cuando el puño comienza a golpear como el
infierno en la puerta de mi Winnebago.
"¿A la mierda ...?" Me quejo, medio rodando fuera de la cama. Me las arreglo para ponerme los boxers antes de
caminar penosamente hacia la puerta y abrirla, haciendo una mueca ante la luz.
"Me estás ayudando a recaudar esos fondos, Marsden ".
Frunzo el ceño, todavía ciego por el sol de la mañana. "¿Quién diablos ..."
"Sal de aquí".
Gruño cuando un puño me agarra del hombro y me saca por la puerta. Siseo mientras tropiezo, pero me atrapo, me
giro y mi puño se levanta antes de parpadear sorprendido.
"¿Pablo?"
El hermano de Delilah entrecierra los ojos y cruza los brazos sobre el pecho mientras sonríe levemente.
"Buenos días, predicador ", se burla a medias.
Mierda. Mi primer pensamiento es que Delilah fue arrestada furtivamente a casa anoche, y derramó todo, y ahora
Paul está aquí para ponerme una escopeta en el trasero por ponerle las manos encima a su hermana. Lo miro y mi
mirada baja rápidamente para ver si puedo ver alguna pistolera o pistola reveladora en los cinturones.
"¿Qué puedo hacer por ti, Paul?" Yo gruño débilmente.
Él sonríe. "Como dije, Sr. Marsden, puede ayudarme a recaudar el resto de los fondos que necesitaré antes de que yo,
bueno ..." me sonríe con aire de suficiencia. "Creo que los dos sabemos lo que sabes, ¿no?"
Me chupo los dientes. "Paul, no estoy seguro de lo que eres-"
"Miraste mi laptop, Gabriel", dice rotundamente. “Te vi a través de la ventana, y luego revisé los últimos archivos
abiertos después de que te fuiste para confirmarlo. Y sí, lo hiciste. Ya sabes cuáles son mis planes.
Asiento, aclarándome la garganta. “Paul, honestamente no me importa cuáles son tus planes para el futuro. Me voy
de Canaan en dos días, y después de eso, ni siquiera necesito recordar cómo se deletrea. Lo que sea que intentes
hacer aquí, este no es mi pueblo, y lo que sea que sea, no es mi lucha.
Su sonrisa se ensancha y se ríe. "Sí, mira, esa es la cosa, Gabriel", se burla. "Ahora es."
"Pablo-"
"Sé lo que eres, predicador ", susurra.
Me aclaro la garganta otra vez. "Ahora, Paul, no soy más que un humilde servidor de los ..."
“Shut arriba , Gabriel,” escupe. "En serio, ¡cállate y deja de mentir por una vez!"
No es tan fácil, imbécil. He jugado este papel ocho espectáculos a la semana durante años . Yo soy este papel.
“Escucha, Paul. Dios nos escucha, incluso cuando no crees que está escuchando ...
Paul gime. “Oh , suficiente , Gabriel. Sé lo que eres. Llamé a algunas personas que conozco, hice algunas conexiones,
llamé a algunas personas más ".
Su sonrisa se adelgaza mientras me mira.
“Oh, la gente te conoce, Gabriel Marsden. No eres exactamente bienvenido en algunas de las ciudades en las que has
estado antes, ¿verdad?
Mierda. "El, eh, el camino de los justos está lleno de baches y setba-"
"Gabriel!" Paul ruge. "¡Cállate! Un pequeño lugar llamado Lockton, Dakota del Sur, quiere quemarte en la
hoguera. Sacude la cabeza con disgusto. "Parece que contaminaste a la esposa de un ministro, bastardo".
Frunzo el ceño y levanto una mano. "Está bien, en realidad, ese no es tr-"
"¡Mierda!" él bramó. "YO-"
"No, Paul , no estabas allí", le espeté. “Estaba loca porque yo no lo hice desfiladero ella, así que fue a decir a todos los
que hice , por lo que me habían expulsado de la ciudad.”
Paul me mira y yo suspiro.
"Es ... suena más complicado de lo que realmente fue".
Se burla. "Eres un farsante".
"Eh, es una línea delgada".
El resopla. "Me pregunto si a Dalila le gustaría saber quién eres."
Soy lo suficientemente inteligente como para mantener la boca cerrada después de eso, pero los labios de Paul se
curvan en las esquinas.
"O tal vez , ella ya lo hace?" Me mira, su sonrisa delgada y fría. "Ella pasa mucho tiempo contigo, ¿verdad, Gabriel?"
Todavía no digo nada, y su mirada se endurece.
"Estudio de la Biblia, ¿verdad, Gabriel?" él sisea. “Enseñándole la escritura, ¿verdad? ¿O simplemente estás poniendo
tus jodidas y sucias manos sobre mi hermana?
"Cálmate", gruño. Comienzo a moverme hacia él, porque decir que Paul parece desquiciado en este momento es un
jodido eufemismo, y quiero desanimarlo y antes de que haga algo loco.
Él ladra una carcajada. "¿Cálmese? ¿Cálmese?" Él comienza a reír antes de llegar detrás de él y tirar de su mano hacia
atrás.
Ahh, joder .
Sí, esta vez está sosteniendo una pistola.
" Paul , escúchame", gruño. "Necesitas calmarte antes de-"
"Esto es lo que va a pasar", dice con frialdad, interrumpiéndome. "Me vas a ayudar con el resto del dinero que
necesito".
“Y cómo demonios haría eso. ¿Quieres que pase el plato de oferta por, qué, los otros dos millones que necesitas para
alcanzar tu objetivo en ese acuerdo de tierras en Costa Rica?
Sus ojos se endurecen peligrosamente, pero sonríe.
"Necesito que te cases conmigo, Gabriel".
Yo arqueo una ceja. "Bueno, podrías llevarme a un lugar agradable primero y preguntar como un caballero, Paul,
quiero decir realmente".
El me mira fijamente. "¿Es todo un jodido chiste para ti?" él gruñe humildemente. "Quiero decir que necesitas casarte
conmigo con mi prometida, Lizzie".
Hago una mueca y silbo humildemente. "¿Hola Paul? El arma que me estás apuntando a un lado, necesito hacerte un
favor y ahorrarte muchas cosas más tarde. Usted realmente no debe casarse con Lizzie “.
Él sonríe y comienza a reír. “¿ Casarse realmente con ella? Jesucristo, Gabriel, no. De ninguna manera. Lizzie Purcell
es basura , pero su familia es más que rica, y prometí recortarla en un pequeño porcentaje si me ayuda, ya que se
enteró de que estaba siendo eliminada del testamento de su padre ".
Arrugo la frente. "¿En qué te estoy ayudando exactamente?"
Te vas a casar con nosotros. Si estamos casados antes de que esa nueva voluntad entre en vigencia, básicamente
puedo ayudarme con el dinero de su padre en su fondo fiduciario ”.
Sacudo la cabeza "Paul, estás haciendo un juego de conchas, ¿verdad?"
Él frunce el ceño.
"La estafa", suspiro. “El juego que estás jugando se llama juego de conchas. Estás poniendo todo a través de un
fideicomiso para que parezcas legítimo, y luego las compañías de mierda que son propiedad tuya lo dejan en seco ”
"¿Sí y?"
Me estremezco. "Bueno, si estás casado, el fondo se disuelve y las donaciones regresan de donde vinieron".
Maldito idiota , me las arreglo para no decirlo en voz alta.
Paul comienza a reír. “No mierda, Gabriel. Por eso te casas con nosotros. Porque eres un predicador falso de mierda,
pero todos piensan que eres el verdadero negocio. Significa que el secretario de la ciudad lo empujará, y tendré
acceso conjunto a sus cuentas. Y luego la confianza permanece donde está porque no estamos realmente casados, ya
que eres una mierda falsa ”.
No digo nada y solo lo miro.
Él sonríe triunfante.
Me vas a ayudar, Gabriel. O le digo a toda esta maldita ciudad lo que eres. Y no va a doler que , lo sé, idiota “, se
burla. "Simplemente harás lo que siempre haces y te irás y nunca volverás".
Su sonrisa se ensancha.
“Pero matará a Dalila. Dos veces, una vez cuando te vas, y luego cuando todo el pueblo la odia por abrigarte e
incitarte, sabiendo perfectamente que eras un estafador.
Mi boca permanece cerrada, y mis ojos sostienen los suyos mientras él se ríe y me agita el arma.
“No me importa lo que estés haciendo con mi hermana, Gabriel. Quiero decir, mi papá podría, y probablemente te
matará legítimamente cuando se entere. Pero antes de eso, me ayudas, y es posible que tengas la oportunidad de
llegar a la frontera mexicana antes de que te saque de la carretera. Entonces, ¿qué dices, gilipollas?
"Estás cometiendo un error", gruño débilmente.
Él sacude su cabeza. “Consigue mi maldito dinero, Gabriel. O te clavaré en una maldita cruz.

CAPÍTULO CATORCE
DALILA
"BUENO, ¡ALGUIEN SE LEVANTÓ TARDE!"
Levanto la vista de mi almuerzo con horror, mi cara se vuelve de color. Pero mi madre solo me está sonriendo a su
manera habitual, y respiro temblorosamente. Me obligo a sonreír y me encojo de hombros.
"Oh, sí, un poco se metió en la madriguera del conejo con Melanie acerca de la divulgación de caridad a los condados
del tercer mundo, y si convertirlos a Cristo es algo que debe ser parte de eso, o si simplemente ayudar como puedes
es lo más cristiano para hazlo, sin preocuparte de a quién rezarán después ”.
Casi me tropiezo con mis propias palabras, y estoy, inmediatamente un poco empezado por la facilidad con que la
mentira salió de mi lengua. Porque discutir el trabajo misionero con Melanie Krupa no es lo que estaba haciendo
anoche. No, anoche me estaba dejando ir con Gabriel.
Estaba ... pecando, supongo, pero de la manera más increíble que jamás haya imaginado que sentiría el pecado. Me
perdí con él y, sin embargo, me siento encontrado.
Me sonrojo. También me siento un poco adolorido , pero de una manera deliciosamente ardiente que todavía envía
pequeños sentimientos revoloteantes a través de mi núcleo.
Mi padre, sentado frente a mí en la mesa del porche trasero, deja el thriller político que está releyendo por enésima
vez y sonríe. "Bueno, dispara, Christina", se ríe, mirando a mi madre. "Ella es tu hija, está bien con esa inteligencia".
Pongo los ojos en blanco y miro hacia mi emparedado para evitar la vergüenza de las mentiras en mi cara. Para ser
claros, no me siento mal por lo de anoche. No siento que vaya al infierno, o que esté perdido o condenado. Pero me
siento mal por mentirles a mis propios padres.
"Creo que me desperté cuando subiste", se ríe mamá. "¡Y creo que fue cerca de la medianoche!"
"Eran las doce y media", murmura Paul mientras sale de la puerta trasera con su computadora portátil y una pila de
archivos en sus manos. Me mira, pero no dice nada más antes de sentarse en una silla frente a un sándwich que mi
madre ha preparado para él. Mi padre lo mira por encima de su libro y frunce el ceño un poco antes de volver a
mirar las páginas.
Papá y Paul están "en eso otra vez", como me informó mi madre cuando finalmente bajé las escaleras esta
mañana. Aparentemente, hubo una gran pelea anoche después de que me fui al "estudio de la Biblia", y
aparentemente, fue una mala.
No es la primera vez que mis padres, particularmente mi padre, y Paul han discutido, bueno, sobre varias cosas. Que
se fuera de casa por un rato antes de que terminara la escuela secundaria era muy importante, pero lo perdonaron y
lo llevaron de regreso. Luego estaba el DUI que obtuvo después de finalmente graduarse, y nuevamente, lo dejaron a
un lado. Cuando Paul "dejó" la escuela a la que mis padres habían reunido dinero para enviarlo, incluso para mí
estaba bastante claro que era menos una "salida" voluntaria y más una "situación de" pedir que se fuera ".
Pero todavía lo llevaron de regreso. El perdón es fuerte en nuestra familia, supongo.
Pero su próximo matrimonio con Lizzie Purcell ha sido un tema muy candente durante meses. Por un lado, porque
él ha sido completamente insípida en cuando que en realidad podría ser que se casan, y por dos, porque Lizzie
nunca una vez incluso hablado con mis padres ya que se comprometieron. Lo cual es ... raro, por decir lo menos.
Ella y Paul nunca han venido a cenar, ni siquiera ha llamado a mi madre, su futura suegra, para saludarla. Además
de eso, ni siquiera es como si fueran una pareja a la que le gusta su privacidad o algo así, o como si fueran una de
esas situaciones de "son tan opuestas que son lindas". Es como si no fueran una pareja en absoluto . Además, Lizzie
solo ... Arrugo la nariz. Ella no es exactamente una persona agradable y cálida. Ninguno de los Purcells es, en
realidad. Son una de las familias más antiguas de Canaán, pero Thomas Purcell, su padre que posee y preside el
Banco de Ahorros y Préstamos de Purcell en el centro, camina principalmente por la ciudad como si fuera un rey y
todos somos sus súbditos humildes.
En pocas palabras, Lizzie es una chica fría, snob y rica, lo que hace que sea aún más extraño que se case con un
desertor de la universidad de clase media que está tratando de construir una iglesia y ser un ministro de un pueblo
pequeño.
La última vez que todo esto llegó a un punto crítico, tuve que averiguar los detalles a través de la cadena de chismes
una semana después. Paul y mi padre se pelearon en la sala de estar, y Paul se retiró rugiendo de que "no era asunto
de mi padre". Se fue por una semana en ese momento, pero finalmente regresó a su pseudo-apartamento sobre el
garaje. Eventualmente, supe a través de Melanie Krupa que un amigo de mi padre había jurado con la mano en una
biblia que había visto a la nueva prometida de Paul en la ciudad de Atenas cuando estaba allí por negocios,
besándose con otro chico afuera un hotel elegante antes de entrar con él.
De eso se trató la última pelea: mi padre le preguntó a Paul si estaba realmente seguro de sus planes de matrimonio y
Paul le respondió que no era asunto suyo. Anoche volví a hablar sobre su matrimonio con Lizzie y sobre cómo mis
padres solo quieren sentarse con los dos y hablar sobre eso. Mamá dice que también se calentó bastante.
"Pásame la limonada, Dalila", se queja Paul.
Lo alcanzo, pero mi padre gruñe humildemente.
"Por favor."
Paul frunce el ceño y lo mira. "¿Qué?"
" Por favor " , gruñe mi padre. "Te criamos en un buen hogar cristiano, Paul, y usamos modales en esta casa".
"Tengo veintisiete años, papá", gruñe Paul. "No necesito que me den una conferencia".
"Veintisiete años, viviendo en el departamento sobre el garaje de tus padres "
"Jeb", dice mamá en voz baja, poniendo una mano sobre su brazo. Aprieta los dientes y baja el libro, mirando a Paul.
“Y casarnos con una chica que no conocemos, que parece no querer siquiera reconocer que tienes una familia. ¿En
resumen, señor adulto?
“La conocerás, ¿de acuerdo? He estado ocupado, papá ", sisea Paul.
"Y estamos orgullosos de ti , hijo", gruñe Papa. “Estamos, de verdad. ¡Estoy tan orgulloso de que un hijo mío esté
construyendo una iglesia! ¡Justo aquí en Canaán!
Mi madre frunce el ceño. "Estamos, cariño, pero Paul, también es como si estuvieras liderando este doble ..."
"¡Dejalo!" Paul ruge.
Mi padre brama y se pone de pie. "¡Te importará tu maldito tono cuando hables con tu madre!"
Me estremezco, porque mi padre usando el nombre del Señor así no es poca cosa. Sin embargo, Paul solo comienza a
reír.
“Soy un hombre adulto, papá. No puedes hablarme así.
“Hombre adulto, ¿eh? Entonces, ¿qué tal si comienzas a actuar como tal?
"Jódete".
El porche va caer un alfiler en silencio. Mi madre palidece, y diablos, yo también. La cara de mi padre se pone roja, y
luego carmesí, y luego púrpura, antes de soplar lentamente el aire a través de sus labios apretados.
"Necesitas dejar esta mesa, Paul", dice fríamente.
Paul pone los ojos en blanco. "Con alegría."
Se pone de pie, levanta su computadora portátil y sus archivos, y toma su emparedado antes de que mi padre de
repente se acerque y se lo quite de la mano. Paul jura.
"¿Para qué demonios fue eso?"
"No dijiste gracia, y me faltaste el respeto a mí y a tu madre que te hizo esa comida", papá gruñe profundamente.
Paul se ve lívido y golpea sus cosas. Él señala con el dedo el pecho de mi padre, con los dientes al descubierto. "No
eres Dios , lo sabes".
"Dios sabe que no lo soy", sisea papá. “Pero se me respete como su padre.”
"Buena suerte con eso."
Paul agarra sus cosas y comienza a pasar junto a mi padre, pero papá lo agarra del brazo y lo tira hacia atrás. "¡No
hemos terminado por aquí!"
"Sí, estamos jodidamente!"
Antes de que nadie pueda reaccionar, Paul empuja de repente a mi padre en el pecho. Rabia como nunca he visto
destellos en la cara de papá, y con un rugido, él empuja hacia atrás. Paul jadea y retrocede, y los archivos en sus
brazos caen al suelo, esparciendo papeles por el porche.
Al instante, el fuego se apaga de los ojos de mi padre cuando se da cuenta de lo que ha hecho.
"Señor, ayúdame", susurra con voz ronca, cerrando los ojos antes de sacudir la cabeza y volver a abrirlos. "Hijo, no
tenía derecho-"
"¡Jódete!" Paul grita.
Papá parece roto, y frunce el ceño mientras se agacha y comienza a recoger los papeles. "Permítame-"
"¡No los toques!" Paul grita. "No—"
"Pablo."
Mi papá se congela, sus ojos pegados al pedazo de papel en sus manos. Parpadea y luego toma otro papel y su cara
palidece. Lentamente, levanta la vista y mira a Paul.
"¿Qué es esto, hijo?" susurra roncamente.
"No es asunto tuyo." Paul va a arrebatar los papeles, pero mi papá los saca de su alcance y se levanta. Parpadea
cuando los mira de nuevo y luego mira a mi madre y luego a Paul.
"Es solo cosas de la iglesia", murmura Paul.
"¿La iglesia va a estar en Costa Rica, hijo?" Papá se ahoga.
"Dame esos".
"¿Pablo?" Mamá susurra. Su cara se cae cuando Papá le entrega los papeles y ella jadea bruscamente. "Cariño, ¿qué ...
qué es esto?"
"Es un negocio de tierras en Costa Rica, ¿no es así?", Gruñe papá en voz baja, mirando a Paul. "Hijo, ¿qué es esto?"
"¡No es nada!" Paul se rompe.
"Hijo", susurra papá en voz baja, su rostro pálido. “Le has dicho a la gente, gente buena y trabajadora que te dio el
dinero que tanto te costó ganar, que la iglesia estaría aquí. Tu mamá y yo te dimos dinero, porque Canaan necesita
un ...
"¡Dame ese!"
Paul se abalanza y arrebata los papeles de las manos de papá antes de extender la mano y sacar la otra de la de
mamá. Los vuelve a meter furiosamente en sus carpetas de archivos y los cierra.
"¡Pablo!" Papá ruge.
"¡Vete a la mierda !"
Mi padre parpadea en estado de shock y mi madre comienza a llorar. Me siento insensible, como si estuviera viendo
esto en la televisión o algo así, y me acerco para abrazar a mi madre.
¿Quieres hablar de la boda? ¿Eso es todo? Paul grita. "¡Multa! Es mañana, en la tienda de Gabriel Marsden. Ven si
quieres, ya no me importa ".
Con eso, se da vuelta, y sale del porche y da la vuelta al costado de la casa hacia su auto. Aprieto a mi madre antes
de saltar y salir corriendo tras él.
"¡Pablo!" Grito, persiguiéndolo. " ¡ Paul !"
"No lo hagas", sisea, volviéndose repentinamente hacia mí en el camino de entrada. "¡No lo hagas, Dalila!"
"Paul, ¿por qué estás-"
"Oh, ve a correr a tu predicador, Dalila", le espeta.
Me pongo rígido "¿Qué?"
Él pone los ojos en blanco. ¿Crees que soy un idiota como ellos? ¿Como si no me escapara y fuera a encontrarme con
chicas durante toda la secundaria? Él resopla una risa cruel. "Sé cómo es un paseo de la vergüenza, Dalila".
Me pongo carmesí y empiezo a tartamudear. "Eso no es-"
"No me importa", dice Paul rotundamente encogiéndose de hombros. "Realmente, realmente no me importa".
Yo trago. "¿Y Gabriel realmente se va a casar contigo mañana?"
"Sí." El sonríe. "Supongo que no mencionó eso, ¿verdad?"
Me muerdo el labio, mirando a mi hermano. "¿Estás construyendo una iglesia en Canaán, o no, Paul?"
Él mira hacia otro lado. "Dalila"
"¡Respóndeme!"
Se vuelve hacia mí, frunciendo el ceño. "No. Me voy a la mierda de esta jodida ciudad, y si eres inteligente, tú
también lo harás.
Yo lo rechazo. ¿Al estafar a la gente? ¿Al estafar a mamá y papá?
Él ríe. “Lanza la primera piedra de mierda. Ve a hablar con el Predicador Gabriel sobre estafar a la gente, él es más
profesional que nunca.
"Paul, eso no es ..."
Él ríe. “¿Realmente quieres defenderlo? Vamos, Dalila. Pregúntale sobre Lockton, Dakota del Sur. Pregúntale sobre
Worthington, Minnesota. A ver si quiere contarte todo lo que sucedió en Jessup, West Virginia, es divertido ".
Parpadeo, mi pulso se acelera. "¿Qué?"
"Pregúntale por qué lo sacaron de la ciudad en una jodida barandilla , Dalila", dice. ¿Tal vez es porque los
desangró? O porque se folló a la esposa del ministro, oa la hija del alcalde.
Mi cara se cae, y él solo sacude la cabeza.
¿Crees que Gabriel solo está tratando de ganar dinero? ¿Solo vendiendo algunas tonterías pseudo-religiosas a las
ciudades montañosas y podunk como Canaan? Sus ojos se estrechan. “Es un parásito, Dalila. Y si eres inteligente, te
mantendrás alejado. Pero haz lo que quieras, ya no me importa ".
Empiezo a llorar y miro hacia otro lado. Paul suspira.
"No estoy tratando de lastimarte, Dalila", dice en voz baja. "Pero si me vas a lanzar como pecador, ve a ver al diablo
sentado debajo de esa tienda".

CAPÍTULO QUINCE
DALILA
E MPUJO las lágrimas mientras salgo del camión. Han pasado horas desde que Paul se escapó, pero no puedo
soportarlo más. No puedo soportar pasear por mi habitación o ayudar a mi padre a calmar a mi madre. Me he dicho
mil veces que Paul solo estaba diciendo tonterías, y que Gabriel realmente no está involucrado en nada de esto. Me
he dicho a mí mismo que las historias a las que Paul se escapó están hechas de rumores y rumores, o simplemente
algo que Paul mismo inventó para ser cruel. Pero horas después, ya no soporto el no saber, así que es aquí donde he
huido.
Mi corazón se rompe en dos cuando late como un tambor, y las lágrimas corren por mis mejillas mientras corro por
el campo hacia él. Pero esta vez, corro hacia él por una razón muy diferente. Esta vez, quiero respuestas.
" Gabriel !" Grité mientras entro en la tienda. Está vacío, y frunzo el ceño mientras regreso a su pequeña área de
oficina. Doy la vuelta a la esquina, pero también está vacío. Mis ojos se posan en la bañera y, a pesar de todo, el calor
me atraviesa al recordar lo que hicimos aquí anoche.
La escena del pecado, por así decirlo.
Me estremezco, rascando mis dientes sobre mi labio mientras salgo corriendo de la tienda y me dirijo al
Winnebago. No lo sé, solo abro la puerta. Pero también está vacío.
" ¿Dónde diablos estás ?" Me susurro a mí mismo mientras vuelvo a salir. Frunzo el ceño y camino por el costado del
Winnebago, hasta que, de repente, lo veo. Gabriel sale al campo trasero detrás de su pequeño conjunto, parado en
jeans y una camiseta de espaldas a mí, mirando la puesta de sol.
"Gabriel!" Grito cuando empiezo a correr hacia él. Se da vuelta y sonríe antes de ver la mirada tormentosa y fría en
mi rostro, y su sonrisa se desvanece.
"Dalila"
"¿Estás trabajando con mi hermano?" Me quebré, golpeándolo en el pecho antes de que él me abrazara.
Él frunce el ceño. "¿Qué?"
"¡¿Eres o no eres ?!" Grito. "¿Sabes cuáles son sus planes?"
Su ceño se profundiza. "Dalila ..."
"¡¿Lo haces o no, Gabriel ?!" Medio sollozo de angustia.
Traga y se le aprieta la mandíbula. " Sí ", gruñe. "Hago."
Las lágrimas fluyen, y me giro, sacudiendo mi cabeza. Lo siento moverse hacia mí, pero me giro y sacudo la cabeza
hacia él, retrocediendo.
" No ", jadeo. "Gabriel, no puedo ..."
"Me acabo de enterar, Dalila", gruñe. "Esta tarde. No estoy 'trabajando con' él, si estás insinuando lo que creo que
eres ”. Me mira furioso. "Sí, tu querido hermano está tratando de estafar a toda tu maldita ciudad".
"¿Y cuándo exactamente dónde planeas compartir esto?"
El gruñe. “¡Cuando terminé de quedarme aquí parado, como lo he estado durante jodidas horas, tratando de
descubrir cómo decirte que tu propio hermano es un estafador que trata de desangrar a tu ciudad con un juego de
conchas! Cuando descubrí cómo decírtelo de una manera que te rompa el corazón lo menos posible ”, dice
bruscamente. "¡Es cuando!"
Cocino a fuego lento, mi pecho se agita mientras nos miramos, a tres pies de distancia.
"¿Estás metido en eso?"
"¿Qué?" él gruñe. "No, Jesucristo ..."
"Dime qué pasó en Lockton", escupí.
Él frunce el ceño. "¿Qué?"
¿O Worthington? Me burlo. "¿O qué tal Jessup, hmm?" Yo siseo.
La claridad se extiende horriblemente sobre su rostro, y él se recuesta sobre sus talones, asintiendo lentamente con
una mirada sombría en su rostro. "Entonces, supongo que Paul siguió adelante y plantó esas semillas en tu cabeza,
¿eh?"
"¡ ¿ Y bien ?!" Yo bramé.
"¡¿Qué quieres que diga, Dalila ?!" él ruge de vuelta. ¿Que era un maldito monje? ¿Un santo antes de
conocerte? Bueno, no lo estaba, lo siento. ¡Soy seis años mayor que tú, y he estado recorriendo el mundo sin padres,
sin paracaídas, sin un pueblo amoroso y saludable, y sin fe ciega toda mi puta vida! Pero esos lugares? ¿Quieres
saber sobre Lockton?
Empiezo a llorar mientras miro hacia otro lado. "No, no lo hago".
“Bueno, te lo digo de todos modos. ¿Quieres saber por qué me echaron?
"Gabriel"
“Debido a que la esposa de los ministros me tomó un poco de fantasía, trató de que me acostara con ella, y cuando le
dije que no, no lo tomó muy amablemente. Entonces ella le dijo a toda la ciudad que me aproveché de ella, ¡y casi me
disparan al salir de allí! Worthington? ¿Quieres oír hablar de Minnesota?
"¡Maldita sea, Gabriel ...!"
La hija de un alcalde enamorada, Dalila. Eso fue todo. Ella escribió una historia ficticia sobre nosotros en un jodido
diario, y su madre la leyó ". Él jura por lo bajo. "Por el amor de Dios, Dalila, ella tenía dieciséis años".
"¡Bueno, tengo dieciocho años!" Me quebré.
"Mírame."
Sacudo la cabeza
"Bien, sigamos adelante", le espeta. "¿Virginia del Oeste? Encontré un par de imbéciles golpeando a un negro mayor
y escupiendo mierda racista, así que les di una patada. Resulta que uno de ellos era el hijo de un concejal de la
ciudad, y ese pequeño y racista pueblo de la ciudad decidió alegar que estaba 'predicando pecado' y , una vez más ,
casi me disparan ”.
Él suspira. "Maldita sea, Dalila, mírame ".
Me estremezco y siento que se acerca a mí. Cierro los ojos y respiro, y lentamente, me giro para mirarlo. Y en el
segundo que lo hago, la ira me inunda. La rabia y los celos se desvanecen, hasta que solo somos él y yo.
"¿Pero sabes la verdadera razón por la que todos esos lugares se deterioraron?" él gruñe en voz baja. "Porque soy el
pecador que creías que era cuando me conociste", gruñe. “ Soy un estafador, Dalila. Soy un estafador, un ladrón, un
tramposo y un mentiroso, y he sido muy feliz de ser cada una de esas cosas hasta el momento en que te vi .
Parpadeo y el mundo se detiene.
"¿Qué?" Respiro en silencio.
"Soy un farsante, Dalila", dice suavemente. "Nunca he encontrado a Dios, ni a la religión, ni a la salvación". Extiende
la mano y sus manos agarran mis brazos. "Pero estoy bastante seguro de que eres la salvación que siempre he estado
buscando".
Maldita .
Me subo a él, y antes de que ninguno de nosotros pueda hablar una palabra más, le he pasado los brazos por el
cuello y me incliné hacia él. Sus brazos me rodean, y gimo mientras nuestros labios se juntan. Mi boca se abre para él,
y gimo cuando su lengua encuentra la mente. Sus manos se tensan en mi cintura, y me aferro a él mientras me
derrito contra su cuerpo fuerte y musculoso.
" Soy tuyo ", susurro suavemente.
"Dalila"
"Quiero decir que soy realmente tuyo", respiré en sus labios. Él gime y me besa profunda y poderosamente mientras
lentamente comenzamos a hundirnos en el suelo cubierto de hierba. El sol brilla en el horizonte mientras me rueda
sobre mi espalda, se agacha y se quita la camiseta. Le rasgo el cinturón, tirando de su cierre y tratando febrilmente de
bajar sus jeans mientras se ríe y toma mis muñecas.
"Tú primero", gruñe. Empuja mis manos sobre mi cabeza, sujetándolas allí con una mano. El otro se desliza sobre mi
mejilla y mi cuello, y entre el valle de mis senos mientras jadeo y arqueo la espalda en su toque. Sus dedos
encuentran el primer botón de mi vestido de verano, y lo abre. Luego el segundo, y luego el tercero, bajando cada
uno hasta que todo se desliza hacia los lados. Me estremezco, jadeando cuando sus ojos se deslizan sobre mi piel casi
desnuda.
"Tan jodidamente hermoso", murmura, casi asombrado, mientras se inclina sobre mí y me besa
profundamente. Gimo, aferrándome a él y empujando sus jeans mientras sus dedos se deslizan a mi alrededor para
desabrochar mi sostén. Me la desliza y gruñe cuando su boca se desliza por mi cuello. Jadeo, rascando suavemente
las uñas sobre su musculosa espalda y su cabello oscuro mientras chupa y muerde más abajo. Él besa sobre la
pendiente de mis senos, y cuando toma un pezón rosado dolorido en sus labios, lloro de placer.
Sus manos se deslizan hacia abajo mientras patea sus jeans, y sus dedos se deslizan dentro de la cintura de mis
bragas. Los despega lentamente mientras besa mis costillas, mi barriga y mi ombligo, hasta que estoy maullando de
placer mientras sus labios se deslizan más abajo. Me baja las bragas hasta las rodillas y me acaricia entre los
muslos. Alejo las bragas y Gabriel gruñe mientras abre las piernas y me muestra su hambrienta mirada. Se desliza
entre mis piernas, sus ojos se clavan en los míos, y se mueve mientras yo jadeo de placer.
Su lengua se desliza sobre mis labios, y gimo, mis manos se deslizan en su cabello. Su lengua me empuja,
abriéndome mientras se hunde en mi abertura, y yo chillo sin aliento. Él gruñe, y sus grandes manos agarran mis
muslos y los separan para su lengua ansiosa. Lo baila sobre mí, hundiéndome profundamente y probándome antes
de burlarse más, hasta mi clítoris. Él chupa el nudo dolorido entre sus labios, y todo mi cuerpo se sacude mientras
gira su lengua sobre él.
" Gabriel ... " jadeo, bajando mi cabeza hacia atrás sobre la hierba y hundiéndome en el vestido de verano a mi
espalda. Su lengua profundiza en mí, empujándome y persuadiéndome más y más a medida que mi pulso se acelera
y mi piel hormiguea.
Esto no es pecado. Esto no es condenación. Esta es la salvación .
Gime dentro de mí, burlándose de mi clítoris en forma firme y arremolinándose en la lengua, y comienza a deslizar
un dedo dentro de mí. Gimo, retorciéndome bajo su toque mientras acaricia su grueso dedo hacia adentro y hacia
afuera, frotando ese lugar justo adentro. Su boca en mi clítoris y su dedo acariciante me empujan más y más alto, y
de repente, puedo sentir que empiezo a tensarme y caer.
“ ¡Oh Dios, Gabriel! "
"Quiero probarte", me gruñe. "Quiero probar este lindo coño cuando vengas por mi maldita lengua".
Podrían ser las palabras sucias o la blasfemia. Pero estoy bastante seguro de que el hombre por el que estoy
completamente loco me muestra placer que nunca antes había soñado antes de conocerlo. Empiezo a tensarme y
empiezo a caerme mientras él chupa mi clítoris entre sus labios y rueda su lengua sobre él.
"Ven por mí, Dalila", ronronea. "Ven por mí, amor".
Me sobresalto, el fuego atrapa gasolina y el clímax se enciende como una tormenta. Grito, arqueando la espalda y
empujando mis caderas descaradamente contra su boca malvada mientras el orgasmo me atraviesa. Me estremezco y
tiemblo, y estoy sin aliento mientras me derrumbo sobre la hierba con su lengua todavía burlándome suavemente de
todo.
Estoy jadeando mientras besa mis muslos y luego mi barriga y comienza a deslizarse entre mis piernas. Los envuelvo
alrededor de sus musculosas caderas y lo beso con todo lo que tengo. Gimo dentro de él mientras mis manos se
deslizan por su espalda, hasta que mis dedos rozan la cintura de sus boxers. Me deslizo debajo de ellos y empiezo a
empujarlos hacia abajo.
Gabriel se detiene y retrocede lentamente.
"¿Que estás haciendo hermosa?" él gruñe.
No lo dudo No ando de puntillas ni bailo alrededor. Solo lo digo, porque viene de mi alma.
"Te quiero", le susurro. "Los quiero a todos y quiero que me tengan a todos".
Sus ojos brillan de calor y su mandíbula se tensa. "Dalila"
"Sí, puedes", susurro. “Antes de que digas que no puedes hacer eso, o que no lo harás, te digo que puedes , y quiero
que lo hagas. Quiero que , Gabriel “.
El no pelea conmigo. No me dice que no sé de qué estoy hablando. Simplemente aplasta sus labios con los míos, y
me besa como si el maldito mundo estuviera ardiendo a nuestro alrededor. Ambos empujamos sus bóxers hacia
abajo, y lloriqueo cuando siento sus gruesos, palpitantes y gordos pulsos entre mis piernas. Él se mueve, y con un
gemido, siento su cabeza hinchada rozar mis ansiosos y resbaladizos labios.
" Tómame ", susurro. "Tómame y hazme todo tuyo".
"La cosa es", se queja en mis labios. Él mece las caderas, y yo jadeo cuando su gruesa cabeza se desliza entre mis
labios y se aloja allí, a centímetros de deslizarse dentro de mí.
" Ya lo eres ".
Él empuja, y yo jadeo cuando su grosor comienza a deslizarse dentro de mí. No hay dolor, no hace una mueca como
en las películas. Es ... diferente, y es nuevo, pero todo es puro calor blanco y placer. Gimo, y lo beso con todo lo que
soy mientras él me empuja suavemente. Gimo cuando siento que mi coño se abre para él, estirándose alrededor de
su enorme polla mientras se hunde otra pulgada en mí. Él gime y me besa como si nunca se detuviera mientras mece
las caderas, aprieta los abdominales y empuja aún más profundamente.
Y luego más profundo. Y luego aún más profundo. Gimo salvajemente, aferrándome a él y rascando mis uñas por su
espalda lo suficientemente fuerte como para dejar marcas. Pero Gabriel solo gruñe y me besa con más fuerza
mientras sigue empujando, hundiéndose centímetro tras centímetro grueso y glorioso de su polla dentro de mí, hasta
que cada pedacito de él está enterrado hasta la empuñadura dentro de mí.
... Hasta que sea suyo .
" Dalila ", gime, su boca se desliza hacia abajo para besar mi cuello. Jadeo, aferrándome a él y envolviendo mis
piernas con fuerza alrededor de él. Balanceo mis caderas, instándolo a que continúe, y él no duda. Se aleja y sus ojos
se clavan en los míos mientras desliza lentamente su polla gorda y palpitante. Lloro de placer, sintiendo mis labios
resbaladizos aferrándose a él, ansioso por atraerlo hacia adentro, donde pertenece.
Hace una pausa con solo la cabeza dentro de mí, y la saca para frotarla sobre mi clítoris. Gimo ansiosamente,
echando la cabeza hacia atrás con placer, antes de que de repente él empuje hacia adentro. Él se hunde en mí un poco
más rápido esta vez, sus músculos se contraen como si estuviera evitando solo tomarme .
... Pero no quiero que se detenga. Y quiero que me lleve.
" Más duro ", jadeo. Él gruñe, escapándose y luego repentinamente volviendo a entrar. Gimo profundamente en mi
pecho, el placer caliente explotando a través de mí mientras su gruesa polla se hunde profundamente en mi pequeño
y caliente coño. Puedo sentir sus pesadas bolas contra mi trasero, y tiemblo cuando él retrocede, solo para empujar
de vuelta adentro.
" Fóllame ", jadeo. "Fóllame como si fuera tuyo, Gabriel ..." gimo.
"Te lo dije", sisea, besándome fuerte. " Ya eres mía ".
Él se desliza hacia afuera, y luego esta vez, se sumerge nuevamente. Gimo de placer, y su gran mano se desliza hacia
abajo para agarrar mi trasero posesivamente. El otro se enreda en mi cabello, tirando de mi cabeza hacia un lado
mientras devora mi cuello. Sus caderas se balancean y se mecen, y yo grito cuando su enorme polla comienza
a follarme, de verdad y por completo.
Los húmedos y lascivos sonidos de nosotros golpeando juntos llenan mis oídos, y me aferro a él como una balsa
como una tormenta. Mis tobillos se traban detrás de su espalda, y gimo cuando siento sus músculos apretarse y su
perfecto trasero empujando para golpearme. Con un gruñido, Gabriel nos hace rodar para que esté de espaldas, y
lloriqueo mientras me encuentro encima de él. Se sienta, envuelve sus musculosos brazos entintados a mi alrededor
y agarra mi trasero con fuerza. Él gruñe, besándome ferozmente, y empiezo a montar su polla.
Salto sobre él, gimiendo, maullando y jadeando de puro placer mientras su enorme y enorme polla se sumerge en mi
pequeño y apretado coño. El sol se pone cada vez más bajo, y los dos estamos bañados por una luz oscura, roja como
la sangre mientras el fuego ruge a través de mí. Lo agarro fuertemente con mis rodillas, mis brazos apretados
alrededor de su cuello mientras aprieto mis labios contra los suyos.
El fuego en el interior aumenta, y aumenta, hasta que todo lo que sé es calor y luz blanca. Su polla se hunde en mí
una y otra vez, llenándome tan perfectamente y moliéndome profundamente, y sé que voy a ir por él.
" Gabriel "
"Yo también", se ahoga. “Joder, Dalila, me harás venir tan jodidamente duro. Ven por mí, niña, ”gruñe, haciéndome
gemir de éxtasis. "Vamos mi jodida polla ahora mismo".
Se dirige hacia mí, mi clítoris se aprieta contra la base de él, mis pezones se arrastran sobre su pecho duro como una
roca, y su boca mordisqueando mi cuello me empuja hacia el borde. Grito y lo agarro, mi coño apretando su
grosor. Echo la cabeza hacia atrás, mis ojos se abren y grito mi liberación al cielo mientras el mayor orgasmo de mi
vida explota a través de mí.
Gabriel ruge y me agarra fuerte, y de repente, puedo sentirlo. Su polla late tan profundamente dentro de mí, y gimo
ansiosamente, y siento la inundación caliente de su liberación en el fondo. Él palpita una y otra vez, bombeando su
semilla dentro de mí una y otra vez, hasta que los dos jadeamos y nos detenemos temblando.
El sudor me recorre la espalda, respiro el varonil aroma de su piel y lamo el sudor mientras me abraza fuerte y
fuerte. Y nos quedamos así mientras el sol se pone y la luna brilla en el cielo de Georgia.
Y sé, lo sé, esto no es pecado. De hecho, es lo más cercano a Dios que he sentido. Y todo lo que se necesitó fue cometer
pecado carnal, con el pecador más increíble que he conocido.
"Gabriel"
"Te amo", dice en voz baja. Sus ojos brillan a la luz de la luna, sin pestañear. Me ahogo, y jadeo cuando acerco mis
labios a los suyos, gimiendo suavemente mientras lo beso con todo lo que soy.
"Yo también te amo", susurro.
Él me abraza, y yo lo abrazo, y sé que al menos en este momento, somos intocables.

"T E QUEDARÁS AQUÍ ESTA NOCHE, ¿sabes?"


Estamos en su cama en Winnebago, empapados de sudor y brillantes después de la segunda ronda. Me muerdo el
labio y estoy a punto de protestar, pero él sacude la cabeza con una sonrisa.
" Sobornaré a esa amiga tuya Melanie si tengo que hacerlo, para mentir por ti, pero lo eres".
Me muerdo el labio inferior y sonrío. "Aférrate."
Alcanzo mi teléfono, y rápidamente toco un mensaje de texto a Melanie, diciendo que Paul y mi padre están
peleando nuevamente, y que estoy con mi hermano en oración, pero que mis padres podrían estar preocupados de
que yo esté fuera. tarde, así que está bien, en esta circunstancia extrema, decir una pequeña mentira piadosa de que
me quedaré en su casa.
Gabriel resopla, y me giro para verlo sonriendo y leyéndolo sobre mi hombro.
"¡Furtivo!" Me río, juguetonamente abofeteándolo.
El gime. " Definitivamente soy una mala influencia para ti".
Yo sonrío. "Tal vez, pero no me estoy quejando".
Me mira a los ojos. "¿Cómo se siente tu alma eterna al respecto?"
"Perfectamente contento y tranquilo, muchas gracias", le susurro con una sonrisa. "Y lo digo en serio".
"Bien", gruñe, acercándome a él y besándome. Me río y me alejo lo suficiente para enviarle un mensaje de texto a mis
padres acerca de estar en casa de Melanie, antes de tirarlo y acurrucarme en él.
"¿Gabriel?" De repente frunzo el ceño. "¿Realmente te casas con Paul y Lizzie mañana?"
El asiente. "Sí", dice con una sonrisa astuta.
Arqueo una ceja ante la sonrisa en su rostro. "¿De qué trata eso?"
"Oh nada."
Giro mis labios, mi ceño se frunce. “¿Realmente va a estafar a la ciudad y partir? ¿Y realmente estás bien casándote
con ellos y dejando que suceda?
La sonrisa de Gabriel se ensancha y me tira en sus brazos. "Solo necesitas confiar en mí, ángel", murmura.
"Gabriel"
"¿Confías en mí?"
Me muerdo el labio y asiento. "Sí lo hago."
"Entonces, preocupémonos por el mañana, mañana", murmura. "Porque estoy lejos de terminar contigo esta noche".
Su polla palpita con fuerza contra mi muslo, y gimo cuando él me empuja a sus brazos y apaga la luz.

CAPÍTULO DIECISÉIS
GABRIEL
"RECUERDA, GABRIEL" , murmura Paul, mirándome. “Solo haz esto, y tendrás que salir de esta ciudad sin una pandilla
buscando ponerte una bala en la cabeza, ¿entendido? Además ... "mira alrededor de la tienda prácticamente vacía y
desliza una mano dentro de su chaqueta. Saca un fajo de billetes y mueve las cejas.
“Hay diez mil para ti si solo haces que esto suceda sin ninguna mierda. ¿Lo aclaramos?
"Como una campana, imbécil", murmuro.
El se ríe. “Llámame como quieras, idiota, me iré de aquí y nunca miraré hacia atrás. Ahora, hagamos esta mierda.
Asiento, pero ya estoy mirando más allá de él. Detrás de él, en la apertura de la tienda, están Jeb y Christina
Somerset, con Delilah parada detrás de ellos. Está recién duchada después de regresar a casa temprano esta mañana
desde mi casa, y se ve increíble en este hermoso vestido azul con el cabello suelto sobre un hombro.
Me llama la atención, y sonríe y se sonroja, pero sin ningún rastro de timidez. Es solo un rubor puro, acalorado y
hambriento. Y mi pulso se acelera cuando pienso en lo que estoy a punto de lograr.
Tiene muchas maneras de ir al sur. Y una parte de mí, bueno, no, la mayoría de mí, se pregunta por
qué demonios estoy sacando mi cuello de esta manera por esta jodida ciudad y estas jodidas
personas. Estoy camino del guión aquí, después de todo, se supone que debo salir de aquí mañana y no volver
nunca. Pero obviamente, los planes han cambiado. Demonios, los planes de mi vida cambiaron cuando Delilah
Somerset cruzó ese campo hacia mi mundo.
"¿Estamos listos para hacer esto?"
Thomas Purcell, el ceñudo padre de la prometida, igualmente aburrida e infeliz, aplaude. "Vamos a poner en marcha
este espectáculo, amigos".
Paul le sonríe. "Un hombre de acción, Thomas, me gusta".
Thomas solo pone los ojos en blanco y mira hacia otro lado su teléfono. Paul se vuelve hacia mí, con el ceño
endurecido.
" Solo haz esto ", sisea.
Su plan no es malo. En realidad, el viejo yo incluso podría estar un poco impresionado. Él va a conseguir que yo, el
falso predicador, me case con él y con Lizzie. Obtendrá la licencia firmada antes de que alguien pueda verificar mis
credenciales, porque quién interrogará a un predicador, e incluso tiene un empleado de la ciudad, un notario y dos
policías aquí de alguna manera para acelerar las cosas. Luego, él y Lizzie van a ir directamente al banco para abrir
una cuenta conjunta. Lizzie luego usará a su propio abogado para presentar una moción expedita para acceder a su
fondo fiduciario que se adjunta a una gran cuenta de su padre. Va a vaciarlo en la nueva cuenta compartida, Paul va
a transferir la mayor parte a una cuenta falsa de la compañía, menos el corte de Lizzie, y luego es adiós Georgia, hola
Costa Rica.
Como dije, en realidad es un plan bastante bueno, y el yo de hace una semana casi sentiría envidia de lo bien que va
a ir.
... Es decir, a excepción de un pequeño y pequeño detalle que Paul no se ha molestado en mirar. Pero está a punto de
morderlo firmemente en el culo. El único truco es asegurarme de que mi trasero no se muerda también.
"Bueno, entonces," murmuro, juntando mis manos. "Empecemos. ¿Se acercarán los novios al altar?
Un sonriente Paul y una hosca Lizzie dan un paso adelante, y sus familias se agrupan detrás de ellos.
"Estamos reunidos aquí hoy ..."
"Todos sabemos por qué estamos aquí", dice Lizzie en un tono aburrido. "Simplemente pase a la parte importante".
Ahh, romance. Thomas Purcell sigue mirando su teléfono, pero el pobre Somerset parece desconsolado. Me aclaro la
garganta y sigo adelante.
"En ese mismo momento. Pasemos a las partes buenas, ¿de acuerdo? Miro a Paul. "¿Usted, Paul Somerset, toma a
esta mujer, Elizabeth Purcell, como su esposa legítimamente casada?"
Él sonríe a la parte "legalmente", ya que sabe que esto es falso. Solo le devuelvo la sonrisa.
"En la enfermedad y en-"
"Sí", dice rápidamente.
"Encantador", le devuelvo la sonrisa y me giro hacia Lizzie. "¿Y tú, Elizabeth Purcell, tomas a este hombre, Paul
Somerset, como tu esposo legítimamente casado?"
"Sí."
Me está costando mucho contener la sonrisa, pero al menos me las arreglo a medias.
"¡Bien entonces!" Sonrío ampliamente. "Entonces, por el poder que me confió la Iglesia Universal de la Vida en línea
..."
La sonrisa de Paul se desvanece. "Espera, wh-"
"Por la presente legalmente ", canto. "¡Declararte hombre y esposa!"
Hay algunos pequeños aplausos de los Somersets y el sonriente empleado de la ciudad, y sonrío ampliamente
mientras me acerco y agarro la mano de Paul.
" Felicitaciones, Paul ", siseo a través de mi sonrisa. "Estás jodido".
¿Ese pequeño detalle que Paul pasó por alto? Fue que asumió que todo yo era un acto de mierda. Excepto que no lo
es. Excepto que en realidad estoy ordenado, lo que significa que acabo de casarlo con Lizzie Purcell.
... Lo que significa que su fondo y todo su esquema simplemente se incendió, según la redacción contractual del
mismo.
"¡Qué mierda!" él ruge, su rostro rojo brillante.
"¿Qué?" Lizzie sisea.
"¡Estamos casados!" Paul grita. "En realidad estamos jodidamente casados!"
"¡¿Esperar lo?!" Lizzie chilla. "¡¿Qué?! ¡No! ¡De ninguna manera! Ella gira sobre Paul y comienza a
abofetearlo. "¿Dónde está mi maldito dinero, Paul?"
Paul gira sobre mí y lanza el golpe más cobarde del mundo, que esquivo fácilmente. Los policías se miran el uno al
otro tratando de descubrir qué demonios está pasando, pero solo les sonrío mientras esquivo otro gancho débil.
"Si miras en el maletín en el auto del Sr. Somerset," gruño. "Encontrarás todo lo que necesitas".
"Señor, ayúdame", dice Jeb en voz baja y da un paso adelante con una mirada dura en sus ojos. "Mike", asiente con la
cabeza al policía más veterano. “Mi hijo está tratando de sacudir la ciudad. Su iglesia es una estafa ".
La mandíbula de Paul cae . "¡Papá!" él ruge. "¡¿Estás hablando en serio ?! ¿Estás hablando en serio?
Se abalanza sobre su padre, pero lo agarro y lo devuelvo. Él gira y se estrella contra mí, y los dos caemos al suelo.
¡Crees que me estás derribando! él chilla. "¡Pues cosecha el maldito torbellino, predicador !"
Él ruge cuando los policías lo alejan de mí, retorciéndose en sus brazos.
"¡Quieres un estafador!" El grita. "Bueno, hay uno!" sonríe triunfante mientras los Somerset se giran para mirarme
confundidos.
“¡Oh, es un fraude, está bien! ¡Llame a Lockton, Dakota del Sur! O Jessup, West Virginia! ¡Pregunta cuántos años
tenía esa chica en Worthington, Minnesota! ¡O demonios, mira en su puto trailer toda la mierda de aceite de
serpiente que está vendiendo!
Se ríe cuando Jeb, Christina y, lo que es más importante, los rostros de Delilah se ponen blancos de horror.
¡Es un traficante, idiotas! ¡Es un tramposo, un estafador y un mentiroso! ¡Es un maldito parásito! Me sonríe
perversamente mientras gruño, mis labios se curvan.
"Oh, sí, ¿y papá?" se da vuelta para sonreír a sus padres. "Y él está jodiendo a Dalila".
Me quebré. Con un rugido, me lanzo sobre él y lo derribo al suelo. Y mis ganchos no son los de su coño. Él se queja
cuando mi puño choca contra su mandíbula, una y otra vez antes de que la policía me saque de él. Estoy gritando Jeb
está gritando. Christina está llorando y Delilah está sollozando mientras nos llevan a Paul y a mí a un coche de
policía estacionado afuera de la tienda.
Las esposas pasan por mis muñecas detrás de mi espalda, y estoy rugiendo por ella mientras me empujan a la parte
trasera del auto.
Mierda .

CAPÍTULO DIECISIETE
G AB R I E L
K ANE SILBA LENTAMENTE por el teléfono.
"Bueno, joder".
Sí, joder está bien.
"¿Qué tan malo va a ser si buscan tu Winnebago?"
No hay un "si". Estoy seguro de que están destrozando la maldita cosa ahora, después de la pequeña diatriba de
Paul. Estoy apoyado contra una pared de ladrillos, esposas en mis muñecas y el teléfono público acunado contra mi
oreja, cortesía del departamento de policía de Canaan. Y estoy bastante seguro de que estoy jodido .
"Nada tan malo".
"Todavía no estabas arrojando hierba en el costado ni nada, ¿verdad?"
Pongo los ojos en blanco. "Kane, tenía dieciocho años, y fue una vez".
"Sí, pero tuve que hablar sin problemas con ese policía para que te relajara".
Yo sonrío. "Me acuerdo. Pero no, nada en Winnebago. Solo algunas curas de 'dolor de cabeza' que son literalmente
aspirina bañadas en caramelo rosa ”.
Kane se ríe por lo bajo. "Mierda, Jasper conocía todos los trucos, ¿no?"
"¿Crees que él sabía cómo salir de algo como esto?"
"Probablemente", gruñe Kane. "Pero estoy seguro que desearía que nos lo dijera". Él suspira. "Mira, hombre, voy a
comenzar a llamar a cualquier abogado que conozca".
Hago una mueca "¿Por qué no suena muy prometedor?"
"¿Porque la mayoría de los abogados que conozco son los que intentaron encerrarme?"
Gimo y dejo caer la frente contra la pared.
Kane suspira de nuevo.
"¿Valió la pena?"
Frunzo el ceño y él se ríe.
“Vamos, por supuesto que era una niña, tonto. ¿Como si de repente crecieras una capa de superhéroe y un sentido
de justicia en tu solitario?
"¿Y si lo hiciera?"
"Si lo hiciste, las pastillas de azúcar pintadas de negro que vendo a los chicos que no pueden levantarse realmente
curan la disfunción eréctil".
Hago una mueca "¿Ellos?"
El gruñe. "Endulzarán tu café".
Yo suspiro. "Bueno, ella era".
“Oye, al menos lo tienes. Mira, no te preocupes demasiado. ¿Dónde estás, condado?
“Solo la cárcel de la ciudad”.
El se ríe. “Dios, amo el sur. Te mantendrán allí al menos unos días. Las ciudades pequeñas no tienen la mano de obra
para comenzar a presionar el papeleo para llevarlo al condado ni nada. Quiero decir, a menos que realmente
los cabrees.
“El tipo que planea jodir les contó todo. Hijo de puta incluso llamó a Lockton.
Kane hace una mueca. “ Joder , ¿en serio? Qué puta erección.
"Y Worthington".
Kane gime profundamente. " Joder . De acuerdo, puede que tengas menos de un par de días. Pero mira hombre, voy a
hacer algunas llamadas. ¿Estás bien mientras tanto? ¿Me refiero a que alguien va a intentar darte un salto?
Hago una mueca “Bueno, estoy encerrado con los criminales más duros de Canaan. Hay un adolescente aquí que fue
arrestado levantando dulces de la tienda de la esquina, y un viejo geezer que blandió una pistola de la Guerra Civil a
los policías cuando le dijeron que dejara de dejar que sus pollos pastaran en la calle. La mierda está bastante tensa
aquí, podría tener que empezar a vender mi trasero por cigarrillos.
Kane se ríe entre dientes. "Bueno, todavía no puedes pasar cuatro malditos segundos sin hacer una estúpida broma,
así que no puede ser tan malo".
Me encojo de hombros
"¿La mujer?"
"Dalila".
“Supongo que eso te hace Samson. ¿Cómo se siente ese corte de pelo?
Yo sonrío. "Mírate, tirando mierda bíblica real".
"Tengo mis momentos", se ríe Kane. "¿Ella vino a verte?"
Sacudo la cabeza “Creo que Worthington podría haber sido el clavo en el ataúd allí. No, no lo ha hecho, y no la
culpo.
"Ella sabe que en realidad no hiciste nada en esa ciudad, ¿verdad?"
“No importa. Todo el pueblo la odiará si ella se pone de mi lado, y ambos lo sabemos. Se acabó, hombre —gruño,
golpeando mi cabeza contra la pared. "Se acabó."
Kane suspira. "Voy a hacer algunas llamadas, hermano. Siéntate bien, ¿de acuerdo?
"Intentaré no ir a ningún lado", murmuro secamente antes de colgar el teléfono mientras mi corazón se hunde.
De hecho, se acabó.

"¡P REDICADOR !"


Frunzo el ceño y miro al policía. "¿Si?"
"Tienes un visitante".
Parpadeo Mierda, Kane.
"¿Un abogado?"
"Un mecánico, en realidad", gruñe una voz familiar.
El policía se hace a un lado y Jedediah Somerset se adelanta. El policía se acerca y comienza a desbloquear mi celular,
y mi pulso se acelera. Jeb puede ser un tipo piadoso, pero es un tipo musculoso y esta es una celda pequeña.
"¡Whoa, whoa, espera, espera!" Gruño, de pie. “¡Espera, no puedes dejarlo entrar aquí! ¡Hiciste un juramento,
hombre!
El policía me frunce el ceño y pone los ojos en blanco. Se vuelve hacia Jeb. "Tienes diez minutos, Jeb".
"Solo necesito cinco", gruñe. "Gracias, Carl".
"¡Carl, idiota!" Grito. "Este es exactamente el tipo de mierda que da mal nombre a los buenos policías"
"¿Dejarás de gritar?" Jeb gruñe. Carl sonríe y cierra la puerta detrás de él antes de regresar al frente de la
estación. Trago y calculo a Jebediah mientras cruza los brazos sobre el pecho.
"Entonces, pensé que deberíamos hablar, hijo".
Asiento con la cabeza. "Bueno."
"Pero como hablas mucho, ¿qué tal si voy primero?"
Asiento de nuevo. "Funciona para mi."
Alza sus ojos hacia mí y suspira. "¿Amas a mi hija?"
Parpadeo ¿Esperar lo?
"¿Perdóneme?"
"No es una pregunta compleja, predicador".
Arrugo la frente. "Supongo que puedes dejar de llamarme así".
El se encoge de hombros. “Excepto que parece que en realidad eres uno. Ministro de la Iglesia de la Vida Universal,
¿verdad?
Sonrío con ironía. "Es solo esta cosa en línea".
"Pero es una orden real, ¿verdad?"
"¿Supongo?" Me encojo de hombros "Sí lo es."
"Jesucristo nunca fue a la escuela del seminario, ya sabes", gruñe. “Nunca tuve ningún certificado de ningún lugar
que dijera que él era lo que era. Él solo ... estaba. Él predicó la Palabra, y eso lo convirtió en un predicador, más o
menos ”.
Arrugo la frente. "Creo que hubo bastante influencia allí, al ver quién era su papá".
Jeb esboza una sonrisa. "Lo suficientemente justo." Él suspira. “Por lo tanto, es un predicador, incluso si realmente no
se mantienen a Dios en su corazón.”
Arrugo la frente. “No , no , es que ...” Niego con la cabeza. "No importa."
"Habla", gruñe.
"No vine exactamente de un hogar amoroso, Sr. Somerset".
"¿Esa es tu excusa para no conocer a Dios?"
"Tal vez. No lo sé."
“Sabes, yo no vine de Canaán, y estoy seguro de que no vengo de una casa llena de amor. Pero usé eso, y lo recordé
cuando decidí llenar mi propia casa con amor, bondad y el Espíritu Santo ”.
Él suspira de nuevo. "Entonces, eres un predicador".
"Sip."
"Y un estafador".
"A veces."
El asiente. “El mundo es un lugar difícil a veces, no voy a discutir eso contigo. Y un hombre necesita ganar dinero.
Arrugo la frente. "Señor. Voltereta-"
"Jeb".
"Está bien, Jeb, no creo que me hayas escuchado".
"Te escuché bien, muchacho", murmura. “Eres un buen orador, pero no estás que lisa. No, sabía lo que estabas
haciendo cuando llegaste a la ciudad y estableciste una tienda. Apuesto a que mucha más gente de lo que
piensas. Me duele una ceja "Eres inteligente, pero no eres tan inteligente".
Me miro las manos.
"Pero", agrega Jeb. “La gente necesita sentir que hay un poder superior, que alguien tiene sus traseros cuando caen
sobre ellos. Vendes esa sensación de ser atendido y vigilado, y si algunas personas están dispuestas a pagarlo, bueno,
eso es lo que es. Como dije, es bueno pensar que el mundo es puro bien o mal, pero un hombre necesita comer ". Él
frunce el ceño. "Hay cosas peores que la gente hace por dinero, créeme".
"Jeb, nunca quise ..." Frunzo el ceño. "Me refiero a Paul".
Él frunce el ceño. "Mi hijo tomó sus propias decisiones, y a veces no puede dejar de elegir la equivocada". Él sacude
su cabeza. No te arrepientas de eso, Gabriel. Hizo lo que hizo y pagará por sus crímenes. Su mamá y yo lo amamos
mucho, pero a veces, tienes que caer de culo para recordar que la gravedad siempre gana ".
El guiña un ojo. "Pero demonios, eso fue realmente muy astuto de tu parte".
Yo sonrío. "Tengo mis momentos."
"Así que me reúno". Se aclara la garganta. "Sabes, llamé a algunas de esas ciudades por las que Paul estaba gritando".
Mi mandíbula se tensa.
"¿Todavía están enojados como sombrereros contigo en Lockton, ese asunto con la esposa del ministro?"
"Eso nunca sucedió", gruño. "Ella hizo una jugada, le dije que no ..."
Jeb se ríe entre dientes. “Relájate, te creo. Yo sí, de verdad. Ese ministro todavía no lo hace, pobre hombre, pero el
sheriff local sí, y me acordó. Se aclara la garganta. “Entonces llamé a ese lugar en West Virginia. Conocí a un hombre
llamado Winston Maples. Parece que evitaste que un par de tacones neonazis de cabeza rapada lo golpearan.
No digo nada y Jeb asiente.
"Eso dice mucho de ti, como hombre, ya sabes".
"Gracias."
"Y luego llamé a Worthington, en Minnesota".
Frunzo el ceño, pero él sacude la cabeza y agita una mano. “Descansa tranquilo, ya ni siquiera están enojados contigo
allá arriba. La chica se puso al corriente de ese diario. En realidad, el alcalde ha estado tratando de localizarte para
disculparte y ofrecerte una compensación por ... ”se ríe. "Bueno, ¿aparentemente hubo algunos disparos al salir de la
ciudad?"
"Obtuvieron la ventana trasera del Winnebago y pusieron un agujero en mi último tanque de bautismo".
Jeb se ríe entre dientes. "Bueno, le gustaría que lo llamaras, para que pueda reembolsarte por eso".
Él suspira y cruza los brazos sobre su pecho, y sus ojos se estrechan hacia mí. "Así que hablemos de mi hija".
"Jeb-"
"¿La amas? No, espera, antes de abrir esa boca tuya que habla con suavidad ”, gruñe. "Quiero que me mires a los ojos
y me des un honesto"
"Sí", siseo, sin vacilar. "Sí."
Su boca se tensa.
“Me refiero a verdad, chico. Vos si-"
"La amo con cada parte de mi alma y mi corazón", gruño. “Completamente y completamente. Señor, amo a Dalila
como algunas personas aman a Dios o a Jesús. Más que eso, en realidad. Sacudo la cabeza “No te mentiré y fingiré
que tengo fe, o que veo un poder superior. No sé si lo hago, y no sé si alguna vez lo haré ".
Respiro y lo miro a los ojos.
"No sé si creo en Dios, pero sí creo en amar a tu hija".
Jeb sostiene mi mirada, y lentamente, una sonrisa comienza a extenderse sobre sus labios.
"Infierno", gruñe. "Eres muy bueno para hablar, ¿lo sabes?"
Yo sonrío. "Tal vez debería vivir de ello".
Él ríe. "Un poco inteligente, también".
"Solo un poco."
Él sonríe y sacude la cabeza. "Muy bien, demonios, eso funciona para mí". Se da vuelta y golpea los barrotes. "¡Hola
Carl!"
El policía regresa de la oficina y Jeb se encoge de hombros. “Muy bien, déjalo salir. Estamos bien aquí.
Parpadeo "Espera, así como así?"
"¿Quieres quedarte?"
Yo sonrío. "Pasaré. ¿Pero cómo?"
“Lizzie se volvió hacia Paul y derramó todo. Además, en realidad no hiciste nada excepto casarte legalmente con dos
personas ". Frunce el ceño y me mira. "Perdón por mi hijo de mierda".
"Sin daño no hay falta".
Carl abre la puerta y vuelve a salir, y Jeb y yo salimos de la celda. Empiezo a seguir a Carl, pero Jeb me detiene con
una gran mano sobre mi hombro.
"Solo para que quede claro", gruñe. "Si has puesto las manos sobre Dalila, te casarás con ella".
Yo sonrío. "Señor. Somerset, para que quede claro, el Señor mismo no pudo detenerme. Quiero decir, ¿pensé en
preguntar primero si eso funciona para ti?
Él sonríe y sacude la cabeza. "Realmente eres una especie de sabelotodo, ¿no?"
“Eso soy, señor. Eso soy yo.
"Sí, muy inteligente, ella te está esperando afuera".
Me detengo en seco, mi corazón se acelera y lentamente me giro para mirarlo.
"Continúa", se ríe. "Obtener."
Nunca he salido tan rápido de la estación de policía, y créanme, esto está lejos de ser la primera vez que me he
quedado sin una. Atravieso las puertas delanteras y me tambaleo por los escalones delanteros, y allí, apoyada contra
la camioneta con ese hermoso vestido azul, que parece la salvación misma, está Dalila.
Ella grita cuando me ve, y nos estrellamos juntos mientras salta a mis brazos. Ella jadea, y sus labios se aplastan con
los míos, y la beso como si nunca quisiera parar.
"Pensé que te había perdido", jadea.
"No, soy como un centavo malo", sonrío.
Ella se ríe y me abraza fuertemente. "Bueno, eres mi centavo malo".
"Tomaré eso", gruño, abrazándola antes de que su boca encuentre la mía otra vez, y la beso profundamente.
"Te amo, Dalila Somerset".
Ella gime. "Yo también te amo, Gabriel Mar—" Ella de repente frunce el ceño. "Espera, ese es realmente tu nombre,
¿verdad?"
Arqueo una ceja misteriosamente, y su mandíbula cae antes de romperme.
"Sí, ángel, ese soy yo".
"¡Oh, Dios mío, casi me tienes, culo!" ella me golpea antes de besarme profundamente.
"Mira, estoy bastante seguro de que te tengo".
"Maldita sea", murmura.
Me reí entre dientes. “Dios mío, Delilah Somerset, y aquí estás tomando el nombre del Señor en vano. ¿En qué tipo
de pecados perversos te he arrastrado?
"No lo sé", ronronea, y sus ojos brillan en los míos. "¿Pero tal vez podamos salir de aquí y puedas arrastrarme a
cualquier pecado que quieras?"
Mi polla late, y mis manos la aprietan mientras sonrío lobunamente.
"Señora, quiero que sepa que soy un predicador "
"¿Oye Gabriel?"
"¿Si?"
Ella sonríe "Cálla y bésame."
Ah, y yo si.

EPÍLOGO
GABRIEL
ME HAN DICHO que tengo una boca sobre mí, y no me refiero a eso en la forma en que Delilah grita a veces cuando la
mía está entre sus muslos. Mi boca, y la inteligencia detrás de ella, ha sido mi boleto de comida desde que Kane y yo
nos encontramos en la calle tratando de descubrir cómo íbamos a sobrevivir. Pero también me ha metido en más
problemas de los que nunca me ha sacado.
El hecho es que, cuando golpeé a Canaán, había estado hablando tan alto y corriendo mi maldita boca durante tanto
tiempo que estaba sorda a cualquier otra cosa. Snark, sarcasmo y encanto pueden llevarte lejos en este mundo, pero
cuando las ruedas se caen, o cuando se agota el gas, también ayuda tener algo más: amor, o al menos un corazón
abierto a encontrarlo.
Pero encanto y una boca inteligente era todo lo que tenía. He pasado la mayor parte de mi vida corriendo, y
pensando que era yo contra el resto del mundo. Existí en un sentido de superioridad de mierda sobre los "tontos"
que robé, aprovechando su fe, amor y esperanza. Excepto que ahora sé que era el mayor imbécil de todos ellos, por
pensar arrogantemente que estaba por encima de toda esa mierda. Me sentí superior a las personas, que de alguna
manera, dado que no tenía amor o fe en casi nada más que el todopoderoso dólar, era mejor que ellos.
Estaba equivocado.
No era mejor que cualquiera que tuviera amor en su corazón. Era patético por pensar que correr la boca era un
sustituto para abrir mi corazón. Me reí de las personas que tenían "fe" en lo que no pude por mi vida distinguir de
creer en la magia de mierda o superpoderes. Para mí, rezarle a Dios o agradecerle a Jesús estaba al mismo nivel que
agradecerle a Ron follándole a Weasely por la comida que está a punto de cavar, o pedirle a Batman que perdone sus
pecados.
Pero entonces, Delilah Somerset entró en mi vida y dio la vuelta al desfile de mierda. Ella no me "convirtió" o "salvó",
pero sí me salvó, si eso tiene algún sentido.
Como dije, he pasado toda mi vida corriendo, a veces, a veces, huyendo de algo. Pero también, si soy honesto
conmigo mismo, porque eso es algo que realmente hago ahora, fue que estaba corriendo hacia otra cosa que estaba
bastante seguro de que nunca encontraría. Era como si corriera hacia él y nunca conseguirlo de alguna manera me
"demostrara" que no existía.
Estoy hablando de amor, por cierto.
Pero, tal vez el amor y la fe son lo mismo, porque sé que el día que Dalila cayó en mi mundo, fue como ser salvado,
como a la gente le gusta decir. Tal vez no del infierno, y tal vez no en el sentido de ser salvado en algún tipo de
brazos del padre celestial. Pero, salvado de mi propia mierda ciega, obstinada y farisaica.
Y tengo que decir que ser salvo, incluso si lo digo en serio y no de una manera bíblica, se siente muy bien.
Se siente tan bien, de hecho, que he dejado de correr. Dejé de perseguir y, en cambio, por primera vez en toda mi
vida, mis pies están arriba y mis raíces están abajo. Por primera vez en mi vida, tengo un lugar al que llamar hogar
que no se sienta sobre ruedas o que me arrebata el culo de las multitudes de clientes enojados y estafados.
De acuerdo, técnicamente, aún no se ha terminado de construir, y técnicamente, el hogar sigue siendo el
Winnebago. Pero pronto, retiraremos a la vieja y nos mudaremos a la casa que estamos instalando en el lugar donde
estaba mi tienda, en las afueras de Canaán. ¿Sorprendido? Pues no lo seas. Me gusta aquí. Demonios, honestamente
me gustaría una choza en el fondo de un pozo si Dalila estaba allí conmigo. Afortunadamente, Canaan es mucho
mejor que un pozo.
Y ahora, está en casa.
Me gusta bromear diciendo que tomé el consejo de Jeb, pero en realidad, los cuatro jinetes no pudieron haberme
impedido pedirle a Delilah que se casara conmigo. Supuse que si hay un Dios y Él tiene algún sentido de justicia
kármica, podría haber hecho mucho para convencerla de que dijera que no. Pero no lo hizo, y si eso es porque el
buen Señor lo aprueba, o porque realmente estamos solos en el universo, o porque de alguna manera vencí al sistema
está más allá de todo lo que necesito cuestionar.
Soy un sabelotodo con una gran boca, pero soy lo suficientemente inteligente en estos días como para
mantenerlo cerrado cuando estoy por delante del juego. Y casarme con Delilah decididamente me pone por delante del
juego, confía en mí.
Entonces, me casé con la niña, y ahora Canaan está en casa, para diversión de mi hermano.

El dinero del padre de Lizzie la ayudó a vencer la conspiración para cometer cargos de fraude, pero Paul terminó
yendo a prisión por malversación de fondos, fraude y evasión fiscal. Sin embargo, no te sientas mal por el tipo, está
en uno de esos lugares cómodos de cuello blanco donde tienen lecciones de pintura y HBO gratis o algo así.
Además, Paul podría ser un imbécil, sin mencionar un estafador de verdad, pero la cárcel podría haber sido una
llamada de atención para él. Está tomando cursos universitarios nuevamente tras las rejas, y está en camino de
obtener ese título de la escuela de divinidad. Estoy bastante seguro de que la ciudad de Canaán está totalmente
agotada cuando se trata de ayudarlo a establecer una iglesia o mirarlo como cualquier tipo de guía espiritual, pero
esa es la cama que hizo. Aparentemente, todavía tiene sus ojos en Costa Rica después de salir, pero esta vez, está
pensando en traer religión, no una maleta llena de dinero mal recibido.
Quién sabe, pero entonces, si puedo ser "salvado", también puede hacerlo esa bolsa de pollas.
Ah, y él y Lizzie todavía están técnicamente casados legalmente, un hecho que me divierte sin fin. Quién sabe, tal vez
esos dos niños locos terminarán juntos en Costa Rica y encontrarán el amor verdadero. O lo atropellará con un auto
la primera oportunidad que tenga.
Como dicen, solo Dios lo sabe.
Y Canaán podría haber superado la idea de que Pablo los guiara en oración, pero afortunadamente, no contaminó el
apellido en su conjunto. Y cuando se disolvió el fideicomiso y se devolvió el dinero, la buena gente de Canaán
encontró un Somerset diferente para construir su iglesia y liderar el rebaño.
Esa sería Christina, la madre de Delilah, quien se abrió paso a través de la escuela de divinidad para estar a la altura
de las circunstancias. La nueva iglesia es el otro gran proyecto de construcción en la ciudad además de nuestra casa,
y sé que Jeb por su parte no podría estar más orgulloso de su esposa.
Así que aquí está la cosa. Todavía no sé si creer en Dios, o en Jesús, o en un poder superior. Pero sí creo en el
amor. Creo que lo que siento por Dalila es más profundo que cualquier otra cosa en esta tierra, y creo que amarla
podría ser la salvación que siempre he estado buscando. Y amar a alguien no es "fe", entonces no estoy seguro de qué
es.
Porque, en lo que a mí respecta, el amor es fe, y la fe requiere amor. Entonces, si quieres hablar con Dios, con Harry
Potter o con Spiderman, y si eso te hace sentir amado, y parte de algo bueno que te levanta por la mañana y te
encamina por el camino correcto.
A la mierda, a ti. Porque el nombre del juego, no importa qué etiqueta quieras pegar, es amar, ser amado y mostrar
amor. Así que sal y ama un poco. Vive un poco. Y ya sea que sea Dios o Thor, el Dios del Trueno al que recurras, que
él te sonría todos tus días.

EL FIN.

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Belleza de la caza
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Serie "Prohibida":
Coqueteando con la ley
Rompiendo su inocencia

Serie "Tres veces":


Jefe tres veces
Tomado tres veces
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Serie "Dos veces" :


Impulsado dos veces
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SOBRE EL AUTOR
USA Today y la autora n ° 1 de Amazon más vendida del romance contemporáneo, Madison Faye, es el alter ego sucio de la ama de casa suburbana muy
sana y normal detrás de las historias. Si bien podría ser una esposa, madre y organizadora de la PTA en el exterior, ¡no hay nada más que fantasías calientes,
humeantes y obscenas que se están gestando justo debajo de la superficie!
Cansados de mantenerlos ocultos por dentro o solo de que salgan al dormitorio, todos están aquí en forma de
algunas historias perversamente calientes. Héroes alfa resueltos, relaciones pecaminosamente tabúes y escenarios tremendamente exagerados. Si te
encanta más sucia, más caliente y más traviesa, ¡este es el lugar para ti!
(Simplemente no le digas a los otros miembros de la PTA que la viste aquí ...)
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