Está en la página 1de 8

Nombre: Jorge Alexander Matos Reyes

Matricula: 20-sism-1-027
Sección: 0211
Materia: lenguaje 2

Exposición
Qué es Exposición:
Una exposición es la acción y efecto de exponer algo para que sea
visto, oído y apreciado por otras personas. La palabra, como tal,
proviene del latín expositio, expositiōnis.
El término puede hacer referencia a las exhibiciones públicas de cosas
u objetos de interés artístico, científico, cultural, arqueológico,
histórico, tecnológico, educativo o divulgativo. Por lo general, estas
exposiciones se hacen con finalidad cultural o comercial,
principalmente para dar a conocer ciertas cosas a la gente.
Una exposición es también el acto de exponer de manera oral o
escrita un tema o asunto para un auditorio. En este sentido, una
exposición puede ser una presentación, una conferencia, una
ponencia o un discurso en el cual se desarrolla un aspecto específico
de un tema para someterlo a la discusión e interpretación del público.
La música entiende por exposición la parte inicial de una composición
musical en la cual son presentados los temas que a continuación
serán desarrollados en el resto de la obra.
Para la literatura, por su parte, se refiere al conjunto de noticias que se
dan al principio de las obras, sean épicas, dramáticas o novelescas,
sobre los antecedentes y causas de la acción.
Por otra parte, también se llama exposición a la situación de un objeto
en relación con los puntos cardinales. Así, por ejemplo, podremos
decir que el frente de una casa tiene exposición al este, o que una
plantación tiene exposición hacia el sur.
Modalidades
Exposición oral
Otro sentido muy común del verbo exponer tiene que ver con las
presentaciones, conferencias o exposiciones orales en general. En
ellas, uno o más voceros o especialistas en un tema disertan sobre un
tema de importancia para que el público se instruya en la materia, para
aclarar dudas o presentar un problema cuya resolución amerita el
conocimiento de todos.

A este tipo de presentaciones se las conoce como exposiciones y son


muy frecuentes en el ámbito político y académico. En este último se
emplean como mecanismo de evaluación (incluso para aprobar
las investigaciones importantes: eso que llamamos comúnmente
“defensa” de una tesis) y/o de participación del estudiante en la
dinámica de clases.

Una exposición oral generalmente consiste, entonces, en una persona


hablando sobre un tema para un público que escucha, siempre con
ánimos de informar, enseñar o compartir el conocimiento. Al término
de la exposición es común que el público entonces opine, haga
preguntas o comentarios y le brinde una devolución al expositor.

Exposición escrita
En el caso de que la presentación de un tema (tal y como la
explicamos en el caso previo) no se realice por una persona que
habla, sino a través de un texto o un conjunto de textos escritos, es
posible hablar de una exposición escrita.

Los ensayos, las reflexiones, las cartas de intención, las monografías y


otros documentos similares son exposiciones escritas, en las que el
autor registra sus ideas o sus reflexiones sobre un tema para que
luego un lector o un conjunto de ellos las pueda revisar y comprender.

Exposición científica
Por su parte, una exposición científica, como su nombre lo indica, está
dedicada a temas de interés científico-tecnológico. Puede tratarse de
una exposición oral o escrita, a modo de presentación, o bien de una
exposición museística o tipo feria (itinerante), en la que se instruye a
los presentes en temas científicos, sobre todo a modo divulgativo, es
decir, apuntando a un público amplio y no especializado.

Exposición en fotografía
En el arte y técnica de la fotografía, la exposición tiene un sentido muy
específico: la cantidad de luz que ingresa al interior de la cámara (y
que, por lo tanto, tiene contacto con el material fotosensible), medida
de acuerdo a la fórmula:

Exposición = iluminancia x tiempo

En caso de que la exposición sea muy alta, en la fotografía habrá mucha luz y
correrá el riesgo de estar sobreexpuesta, esto es, que no se registre sino luz
blanca. En el caso contrario, de ser muy poca la exposición, la fotografía tenderá a
oscurecer y se perderá información en segmentos ennegrecidos.

La exposición es clave para una buena fotografía, y se la puede manejar a través


de dos variables de la cámara fotográfica:

 La apertura del diafragma, o sea, qué tanto se abre el “párpado” de la


cámara para dejar pasar la luz.
 La velocidad de obturación, o sea, cuánto tiempo se expone a la luz
entrante el material fotosensible.

1.
procedimiento

Investigación de calidad
Reúne los conceptos más relevantes del tema, aquellos que son
atractivos e interesantes. Recuerda que demasiada información puede
saturar y abrumar a los espectadores.
Estudios científicos demuestran que la capacidad de atención de una
persona es de 18 minutos, y los 5 primeros son los más importantes.
Por ende, delimita el tema e investiga al respecto para contestar estas
seis preguntas importantes: qué, quién, cómo, cuándo, dónde y por
qué.

2. Organización y creación
Una vez que hayas identificado los aspectos a presentar, traslada la
investigación a frases cortas o títulos con dependencia entre ellos. La
mejor forma de recordar tu tema y luego compartirlo con tus
compañeros es a través de términos básicos y no tan rebuscados, ¡ve
al grano!

3. Estudio y resumen
Si estudias de manera dosificada antes de la exposición tendrás
mayores oportunidades de desempeñarte con claridad y coherencia, y
con ello obtener una gran calificación.
Para ello puedes elaborar tarjetas de apoyo que te ayudarán a
conocer el orden de los subtemas y potenciar tu aprendizaje.

4. Práctica final
No olvides ensayar en voz alta tu discurso: imagina que estás frente a
tu público e incluso pídele a un amigo o familiar que te escuche para
que puedas practicar y afinar cada detalle. Para lograr una
comunicación eficaz tienes que practicar varias veces.
Un aspecto que tienes que dominar son los nervios, para lo cual
puedes ayudarte con ejercicios de respiración, así como recordando
que gracias a los pasos anteriores estás preparado para comunicar el
tema y despejar las dudas al respecto. ¡Confía en ti!

5. Revisión del material


El día de la presentación recuerda que debes verificar
anticipadamente que todo el material físico y digital se encuentre listo.
Realiza un ensayo para minimizar las fallas técnicas del proyector, del
equipo de cómputo o bien que logre visualizarse desde cualquier
asiento de la audiencia.

expositivo
El texto expositivo es aquel que aborda de manera objetiva un asunto
o tema determinado, con la finalidad de dar a conocer e informar una
serie de hechos, datos o conceptos específicos.
El propósito fundamental de los textos expositivos es transmitir
información, es decir, aportar un conjunto de conocimientos claros y
directos sobre a una amplia lista de contenidos generales o
específicos.
A la par de esto, el texto expositivo también es explicativo, pues busca
aclarar y detallar toda la información relacionada con los datos que
proporciona. De allí que podamos encontrar textos expositivos en
discursos de carácter informativo, educativo, científico, jurídico o
humanístico.
Características del texto expositivo
Los textos expositivos se diferencian y caracterizan de los demás
textos principalmente por su estructura para organizar la información y
estilo de redacción. Las principales características son:

 La redacción del texto es objetiva.


 Se escribe en tercera persona.
 Hace uso de un lenguaje claro y preciso.
 Se apoya en el uso de recursos como los conectores, la
comparación o la enumeración, para facilitar la fluidez discursiva.
Todos textos son susceptibles de presentar distintas las modalidades
textuales (expositiva, argumentativa, científica, entre otras),
dependiendo del tema, de la intención y de los recursos de que se
valga su autor para escribirlo. Esto quiere decir que en el desarrollo de
un texto puede estar presente una diversidad de modalidades
textuales.
El dialogo

La palabra diálogo proviene del latín dialogus y éste a su vez del


griego dialogos (dia-: “a través”, y logos: “palabra”), que literalmente
significa “a través de la palabra”. Esto nos da ya una idea de lo
importante que han sido los diálogos en la historia de la humanidad,
como herramienta del mutuo entendimiento, generalmente como
reemplazo de la violencia.

De manera similar, los diálogos forman parte de los recursos


literarios que posee una obra para mostrarnos a dos o
más personajes, o para hacernos saber parte de la información que
intercambian, como si fuéramos sus testigos. Por eso, es común
hallarlos en la mayoría de las representaciones artísticas narrativas.

Por otro lado, en la Antigüedad, constituían el método idóneo


de enseñanza y aprendizaje entre maestro y alumno, puesto en
práctica por la escuela de los socráticos, es decir, los alumnos del
filósofo Sócrates.

Tipos de diálogo

Diálogos literarios. Aquellos que hallaremos en
relatos, cuentos, novelas, obras teatrales e incluso películas,
y que pueden ser:
 Diálogos internos. Que ocurren en la cabeza de un
personaje, en su imaginación o en su recuerdo, o
incluso pueden tener lugar entre el personaje y su yo
interno.
 Diálogos externos. Aquellos que tiene un personaje
con otros personajes, y que constituyen parte de
la trama de la obra.
 Diálogos no literarios. Aquellos que no tienen una clara
intención artística, o que no forman parte de una obra poética,
sino de situaciones de la vida real, o de transcripciones de la
misma. En ese sentido, pueden ser:
 Diálogos formales. De tipo planificado, en ausencia
de afecto o relaciones cercanas entre los
interlocutores, suele responder a fórmulas
y protocolos de respeto.
 Diálogos informales. Se dan de forma no planificada
o entre personas de mucha confianza, echando
mano con frecuencia al argot y a las expresiones
coloquiales, las groserías, es decir, sin
necesariamente conservar los modales.

El diálogo directo y diálogo indirecto


Dentro de las posibilidades del diálogo escrito, sea o no de
carácter literario, hallamos una distinción importante, que tiene que ver
con el discurso directo y el discurso indirecto. Nos referimos,
similarmente, a:

 Diálogo directo. Es aquél en el cual podemos constatar lo que


dice cada interlocutor. Suelen emplear líneas de diálogo para
separar y marcar cada intervención de los interlocutores,
como en el siguiente caso:

─ ¿Ya comiste, hijo?

─ No, mamá. No tengo hambre.

 Diálogo indirecto. La figura de un narrador nos refiere lo que


cada interlocutor dice. Es decir que todo el contenido
comunicativo nos es referido por un tercero, de la siguiente
manera:

“La madre le preguntó al hijo si había comido, y éste le respondió que


no, pero que no tenía hambre tampoco.”

Características del diálogo oral


- Las personas que hablan se llaman interlocutores.
- Es muy expresivo puesto que intervienen los gestos, la entonación y
la actitud.
- Es espontáneo y se utilizan frases cortas y simples.
- Suele tener errores y frases sin terminar.

1.2- El secreto de un buen diálogo


Para realizar un buen diálogo te recomendamos seguir estos consejos.

- Respetar al que habla.


- Hablar en tono adecuado.
- No hablar todos a la vez.
- Saber escuchar antes de responder.
- Pensar en lo que dicen los demás.
- Admitir las opiniones de los demás.

2- El proceso comunicativo

Para que haya comunicación deben existir dos personas: una que
entregue la información (emisor) y otra que la reciba (receptor). Con
esto se necesita la intención de comunicar, ya sea para preguntar,
felicitar, contar, argumentar, exponer, etc. Esta
información (mensaje) debe ser transmitida por medio de un código,
en el caso del lenguaje oral, un idioma compartido, a través de un
medio físico (canal), que en el caso de la voz sería el aire y las ondas.
Todo este proceso debe estar enmarcado en un contexto, es decir, un
lugar, situación y tiempo determinado.

También podría gustarte