Los presocráticos.

los primeros filósofos griegos se les conoce como presocráticos, aludiendo con
ello a todos los pensadores y escuelas anteriores a Sócrates. Los primeros
filósofos griegos dejaron de lado los mitos en los que seguía creyendo la mayoría
de la población- y comenzaron la investigación racional.

Arjé.

Término griego también transcrito como "arkhé" y como "arché", que significa
etimológicamente principio, fundamento, comienzo, y que fue utilizado por los
primeros filósofos para referirse al elemento primordial del que está compuesta y/o
del que deriva toda la realidad material.

Tales de Mileto: Su Arjé era el agua, inspirado en el incesante fluir de los ríos, y
convencido de que el agua hacía presencia en todas las demás cosas, Tales
propuso al agua como arjé o primer principio creador del universo.

Anaximandro de Mileto: Fue discípulo y continuador de Tales, además

compañero y maestro de Anaxímenes, consideró que el principio de todas las
cosas era lo ápeiron (lo indefinido o indeterminado): una sustancia indeterminada,
ilimitada e infinita, que es a la par eterna.

Anaxímenes de Mileto: El aire, según Anaxímenes, da origen a todas las cosas

por medio de la rarefacción y la condensación. Anaxímenes decía que, la
rarefacción del aire da origen al fuego, y la condensación, el aire da origen al
viento, a la nube, al agua, a la piedra y a la tierra.

Pitágoras: Su Arjé eran los números y fue el primero en proporcionar una

explicación no mística o religiosa del origen de todo lo que es. La idea central, era
que los números eran la esencia de todas las cosas, cuando los pitagóricos
decían, como médula de su metafísica, que todos los objetos estaban compuestos
de números, que los números son la esencia del universo.

Jenófanes de Colofón: El arjé de Jenófanes es Dios, dentro de un universo

único, inmóvil, inalienable y también infinito. Para él, únicamente existía un Dios
que era al mismo tiempo inteligente y que gobernaba todas las cosas del universo
por medio de su espíritu.

Heráclito de Éfeso: Para Heráclito el arjé es el fuego, el cual es una sustancia

generadora del principio de las cosas, del cosmos. El universo era un fuego eterno
que se encendía y apagaba por medio del logo, con el cual podía darse el orden y
la armonía del cosmos, y de leyes que determinaban la unidad y la lucha.

Parménides: Para el ser, a estos los llamó vía de la verdad y de la opinión. Se

estableció el ser como imperecedero, único, inmutable y completo. Dejó ideas
claras con respecto al pensamiento y el ser, pues para él eran lo mismo. Nos
enseñó que el ser es uno solo y no cambia.

Empédocles: Su arjé era, Tierra, agua, aire y fuego. Otros dos eran el amor y el
odio ya que siempre hay una contraposición. Existe algo que atrae, como el amor,
algo que separa, como el odio. El amor es la fuerza que busca siempre la
condición para unir a los cuatro elementos encontrándose atracción entre entes
diferentes. Y en segundo plano aparece el odio, su actuación es la de separar a
los semejantes.

Anaxágoras: Su arjé fue basado en la existencia de una gran multitud de semillas

en todas las cosas. La diferencia entre las cosas que existen se encuentra en las
spermata o en las semillas lo cual marcó un límite en la historia de la filosofía.

Leucipo y Demócrito: Demócrito como su maestro Leucipo creían que la materia

estaba formada por partículas indivisibles llamadas átomos El modelo atómico
Demócrito fue el primer modelo postulado por el hombre en la historia, que decía
que los átomos eran homogéneos, eternos y no se podían dividir, que eran
invisibles e incomprensibles y que también tenían características internas
diferentes.