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La Brújula del Maestro

INSTITUTO BIBLICO BETHEL CENTRAL A.D.

Maestro: Pastor Gustavo Avalos

Materia: Evangelio de Juan

Alumnos:

Edwin Alberto

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ÍNDICE

PRIMERA PARTE: LA PERSONA DEL MINISTRO

1. El ministro ora en privado


2. El carácter del ministro
3. La mente del ministro
4. La salud física del ministro
5. El ministro y su hogar

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CAPÍTULO UNO
El ministro ora en privado

“Si tú no puedes hacer nada que sirva por lo menos puedes orar”
El ministerio de la oración ha sido poco valorado y relegado a un espacio mínimo. El ministro de
mayor renombre irá al fracaso si no mantiene una vida de comunión con el Señor.
1. La importancia de la oración privada.
Moisés, después de su oración privada con el Señor, el cual llevaba a cabo en monte Sinaí, podía
bajar con la autoridad de la Palabra que Jehová había dicho y actuar conforme a ella.
El mismo Hijo de Dios, siendo divino, pasó más tiempo en la oración privada que nadie. La
comunión con su Padre era vital para mantener su ministerio. Pasó más tiempo en oración antes y
durante los tiempos de crisis.
A lo largo de la Biblia, hemos visto como diversos personajes se mantuvieron firmes en oración
para llevar a cabo los planes que Dios mismo les había encomendado.
Si un dirigente de una nación necesita mantener las líneas de comunicación abiertas con sus
aliados, cuánto más los Embajadores de Dios necesitamos hacerlo.
La oración diaria en privado es de suma importancia porque somos insuficientes para enfrentar lo
que nos espera cada día.
Otra razón por la cual la oración es de suma importancia en el ministro es porque Dios merece
nuestro reconocimiento, gratitud y adoración. Casi instintivamente el ser humano siente el impulso
de expresar a uno que le ha sido un benefactor, su gratitud.

2. El pecado de la poca oración


Siempre nos quejamos de que nos hace falta tiempo, pero la instrucción de la Biblia con respecto a
la oración es categórica “Orad sin cesar”; porque el ministro que no ora porque no le queda
tiempo por su ministerio, es un irresponsable al cual su alma prontamente se secará.
Si el orar es presentarse a Dios y reconocer que Él es Dios Supremo, dejar de hacerlo significaría
dar poca importancia a su soberanía.
El ministro que no ora desconoce a Dios con respecto a su Voluntad.

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3. Dificultades al orar
Uno de los obstáculos de la oración es la impresión de “sentir” la presencia de Dios. Pero Dios no
se aleja de sus siervos.
Otra dificultad es pedir mal. Si uno ora con motivos impuros, cuando utiliza las promesas bíblicas
con fines egoístas se engaña a sí mismo y la oración llega a ser infructuosa.
La oración verdadera requiere consagración, una entrega total y sin reservas.
La oración impositiva que fija pautas al Soberano y le insiste cómo debe obrar, es una osadía. No se
puede exigir que el Todopoderoso responda a nuestra voluntad o a nuestro modo de pensar.

4. La eficacia de la oración
La eficacia de la oración radica fundamentalmente en la Voluntad de Dios. La oración cambia la
situación, alimenta el pensamiento, siembra la buena semilla en la mente. Todo pensamiento que
se anida en el corazón será puesto en acción tarde o temprano.
La oración se convierte en un medio por el cual Dios nos guía y es eficaz para ayudarnos a resistir al
enemigo.

5. Cómo ser un hombre de oración


Se llega a ser un hombre de oración por el camino de la persistencia. El ministro no aprenderá a ser
un hombre de oración si no aprende a adorar. Si Dios se esfuerza por encontrar verdaderos
adoradores es porque considera de mucha importancia la adoración. Debemos cultivar el hábito
de la meditación, en tales momentos se aclara el pensamiento. La práctica de la meditación puede
ayudar cuando la mente se cansa y divaga en los contratiempos de la vida, antes que en las cosas
que dan vida.
La meditación es la parte de la adoración en que uno se ocupa más bien en escuchar que en
hablar. Luego de la adoración

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BIBLIOGRAFIA

 Jamieson, R., Fausset, A. R., & Brown, D. (2002). Comentario exegético y explicativo de la Biblia
- tomo 2: El Nuevo Testamento (178). El Paso, TX: Casa Bautista de Publicaciones.
 Estudios Bíblicos ELA: Para que creáis (Juan)
 Juan Testifica de Jesús: J.L. Sullivan
 John, the Gospel of Faith.
 Compendio Manual Portavoz (Harold L. Willmington).
 Juan Testifica de Jesús (J. L. Sullivan).
 John, The Gospel of Faith (Moody Press). Traducido por Santiago Escuain.
 Juan testifica de Jesús de (J.L. Sulivan)
 El compendio Manual de la Biblia de (Henry H. Halley)

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