Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
- Que el estudiante se exprese con claridad tanto de forma escrita como oral; que se vuelva un usuario
reflexivo de su lengua y de la diversidad que la compone, que elabore distintas producciones para dar
cuenta de su aprendizaje.
- Que el estudiante conozca los textos literarios y los conceptos teóricos del programa de la asignatura.
- Que el estudiante adquiere autonomía en el cumplimiento de las tareas de lectura, actividad domiciliaria
principal que se indicará para cada clase.
Los siguientes criterios serán tenidos en cuenta para la valoración de los logros del estudiante:
- Pertinencia de la resolución de la consigna: deben incluirse los conceptos trabajados en clase y leídos en
los textos literarios y teóricos, así como también deben citarse textualmente las fuentes estudiadas.
Asimismo, deben reconocerse las distintas operaciones discursivas que piden las consignas: explicar,
analizar, comparar, ejemplificar, interpretar, elaborar.
- La escritura** debe ser -coherente y prolija- (no se admiten cuadros, ni listas de ítems) y debe cumplirse
con puntualidad la entrega de evaluaciones domiciliarias.
- Para el trabajo en clase se tendrá en cuenta la carpeta del alumno, que esté presente el material
obligatorio de la asignatura, que se realicen las actividades propuestas y que sean pertinentes las
intervenciones orales. La ausencia a clase no significa la exención de las tareas asignadas. Para los exámenes
deben tenerse los textos literarios en formato papel: ediciones nuevas, usadas, o fotocopiadas.
- Se espera que el estudiante sea respetuoso para con sus compañeros y su docente, que levante la mano
para participar en la clase y que tenga una postura adecuada para con las actividades de la misma. Esta
actitud del alumno se considerará para el redondeo del promedio trimestral.
- Las expresiones escritas que se consideren plagiadas, tomadas de sitios web o que no puedan
justificarse, llevarán la nota mínima 1 (uno) puesto que no permiten comprobar el aprendizaje del
estudiante.
Las ideas de la escritura deben partir de sus lecturas, es decir, de las interpretaciones de los textos,
las palabras subrayadas, las notas marginales. También deben considerar los apuntes de clase y utilizar
vocabulario formal -propio de la escritura académica- y vocabulario específico de la asignatura.
Las afirmaciones deben justificarse, explicarse, con los conceptos aprendidos en clase y con citas
textuales -fragmentos que se eligen- de los textos trabajados. Estas deben estar entre comillas y ser
introducidas a través de verbos de decir (afirmar, sostener, plantear, etcétera). Asimismo, los títulos de
cuentos, novelas, obras de teatro, poemas y otros textos se escriben entre comillas y con mayúsculas.
También debe aclararse de quién se toma la cita: narrador, yo poético, personaje, autor.
El texto debe ajustarse a las normas de cohesión. Para esto, debe existir concordancia entre los
sujetos y los núcleos verbales de cada oración, así como también entre los sustantivos y sus modificadores.
Por otro lado, deben evitarse las repeticiones por medio del uso de sinónimos, pronombres, paráfrasis o
elipsis; tampoco se explican las citas con las palabras que contienen. Es imprescindible la práctica de una
letra clara, legible, de tamaño adecuado ya sea cursiva o imprenta, y el cuidado de la ortografía. Aquello
que no se entienda no podrá calificarse.
Para reconocer si un texto está terminado preguntar ¿cómo? y ¿por qué? a las afirmaciones; y
luego profundizar estas cuestiones para completarlo. Los títulos que pongan a sus textos deben ser
representativos de su contenido. Finalmente, lo escrito debe leerse, revisarse y corregirse para su
presentación. La extensión máxima de las evaluaciones presenciales es de tres carillas de hoja número tres.
Pautas formales para los trabajos hechos en procesador de textos: Sin carátula, hojas numeradas debajo a la
derecha, curso-apellido-nombre del alumno en el encabezado a la derecha. Letra Arial 11 o Times New
Roman 12; interlineado 1,5; márgenes 2,5 cm.; alineación justificado; extensión aclarada en la consigna.
El aprendizaje a partir del error
A person who never made a mistake never tried anything new.
Albert Einstein
Desde la perspectiva didáctica actual, consideramos los errores como oportunidades para aprender.
Muchas veces vemos errores que se reiteran, otras veces nos encontramos con errores nuevos; pero en
cualquier caso indagar al respecto nos permite reflexionar sobre cómo aprendemos (metacognición).
A continuación se presenta un ejercicio posible para adquirir el saber sobre los errores y luego
utilizarlo en favor de la mejora de las habilidades de los estudiantes; luego de la devolución docente:
- Los estudiantes deben leer con detenimiento las correcciones y comentarios que el docente ha hecho en
su examen. Deben asegurarse de entender qué se ha corregido, si esto no es claro debe consultarse.
- En función de la cantidad y los distintos errores agruparlos según su tipo: de comprensión de consigna; de
coherencia; conceptuales; de comprensión de texto; de redacción (ortografía y cohesión). Esto permitirá
identificar qué área ha resultado más difícil para el estudiante y luego reflexionar al respecto.
Error 1
Error 2
Error 3
- Causas Probables. A través de mirada individual e introspectiva, indagar qué provocó este error. Un mismo
error puede tener distintas causas dependiendo del estudiante. Puede ser del momento del examen o
previo a esta instancia. No incluimos aquí las causales emocionales porque estas no se abordan desde las
técnicas de estudio o reflexiones propias de la asignatura; sí podemos pensarlas desde Tutoría, por ejemplo.
- Alternativas para evitarlos a futuro. Focalizar en uno o más aspectos a cambiar con el objetivo de evitar
ese error a futuro. Es importante tener en cuenta que dependerán de la causa que se le haya asignado.
- Los estudiantes pueden compartir los cuadros que han armado con el objetivo principal de poner en
común las alternativas y colaborar con el aprendizaje de sus compañeros.