PSIC.

LORENA DEL CARMEN ROLDAN MAQUEO

ESTABLECIMIENTO DE NORMAS Y LÍMITES EN CASA.

1. Hay que ser específicos y guiar. Es importante decirle exactamente lo que se
espera del él/ella. En lugar de decir “pórtate bien” o “haz caso” es mejor dar la
orden clara y concisa. Ejemplo: “recoge tu habitación antes de ir a la cama”
“realiza tu tarea y después podrás ver el celular”.

2. Establecer límites apropiados a la edad del niño. Es importante ajustar los

límites acordes a la edad que tiene, lo que sabe hacer y conoce. Además de
explicar la razón del porqué lo que usted sugiere es mejor que su comportamiento.
Ejemplo:
 Decirle al pequeño/a cuál es la norma: “Tienes que evitar responderle a las
personas adultas”
 Explicarle cuál es el motivo / lo que se quiere mejorar: “Si te tratan con respeto
también debes tratar con respeto...”
 Establecer cuál será la consecuencia si se rompe. “Se te retirará el fútbol, la
televisión, la tablet” (alguna situación que le guste o quiera mucho).

3. Ser constantes. Asegurarnos de que si establecemos una norma seremos

capaces de hacerla cumplir. No podemos algunas veces cumplirlo y algunas no
porque no le tomará importancia y la conducta seguirá siendo la misma.

4. Acuerdo entre los padres y/o cuidadores. Si hay alguna otra persona
involucrada en el cuidado y crianza del niño/a es necesario conozca sus normas y
límites de casa y también las lleve a cabo, sin excepciones.

5. No darle opciones. Si es una conducta que se quiere mejorar o eliminar, no

podemos dar opciones a que el niño/niña decida lo que quiere hacer. Debemos
marcar el límite claro.

6. Ser firmes con buen tono. Hay que tener firmeza al momento de establecer las
normas (sin gritos ni violencia) enfatizando que no se van a cambiar una vez
estipuladas.

7. Reforzar lo positivo. Elogiar al niño/a ante una actitud o conducta positiva

(recoger sus materiales y ordenar su mochila) con comentarios como “muy bien,
eso te ayuda a ser más organizado/a”.

8. Evitar los “No” y mejor indicar lo que debe realizar. Ejemplo: En lugar de decir
“NO hagas esto o aquello” decir “lo que tienes que hacer es”. Ayuda a que tenga
más clara la indicación y no se reprima su acción.

9. Explicar el motivo. El niño/a tiene que entender que se establecen porque es

mejor para él/ella. Además, ayuda que al saber la razón no discuta la norma.
Ejemplo: “Arreglas tu habitación para que cuando tengas que arreglar tu mochila
puedas encontrar fácilmente tus útiles”
PSIC. LORENA DEL CARMEN ROLDAN MAQUEO

10. Controlar nuestras emociones. Siempre hay que mantener la calma y ser
paciente con el niño/a, sin dejar de marcar los límites. Intentar dialogar con el niño
sobre su comportamiento.

11. Cuando demos una instrucción a un niño/a debemos:

 Estar al lado del niño/a.
 Ponernos a su altura y establecer algún contacto con él/ella (tomarlo por los
hombros, agarrarle la mano, poner una mano en su espalda)
 Utilizar un tono de voz agradable pero firme.
 Mirarlo a los ojos y asegurarnos de que él también lo hace.
Nota: Los horarios para acostarse y levantarse, la hora para hacer los deberes o las
tareas en casa y regulación de la conducta no se pueden cambiar y tampoco se pueden
ofrecer alternativas, pero en otro tipo de aspectos a lo mejor se pueden cambiar los
detalles, llegando a un acuerdo con el niño o niña y dependiendo la disponibilidad que
muestre ante cumplir con ello.