¿Qué significa aprender

matemáticas?
Cada nota, cada libro, cada documento, cada texto escrito puede tener
intenciones diferentes, por ejemplo, una receta es una guía para cocinar; un
cheque es un documento a través del cual se realiza una transferencia de
dinero; pero tanto la receta como el cheque requieren del texto escrito y de
establecer cantidades que pueden escribirse con letra y con número, de esto
dependen las acciones del lector al cocinar o al pagar un cheque.

Como puede verse, al escribir, algunas veces, se requiere tanto de palabras

como de números y de otro tipo de signos que se deben interpretar para poder
darles significado e interactuar con ellos, pues las personas requieren leer y
escribir documentos que incluyen edades, precios, fechas, direcciones,
medidas, dosis, distancias, horarios, y todo tipo de cantidades, que se
expresan mediante números y letras.

¿Por qué los aprendizajes de matemáticas deben ser reflejo de

actividades de la vida diaria?
Como asesor debes saber que muchas de las personas buscan los servicios de
alfabetización primaria y secundaria por la necesidad de ampliar y formalizar
los conocimientos y saberes con respecto a los números y sus operaciones que
han elaborado en su hacer cotidiano, o bien para aprender y no ser engañados
en las actividades comerciales que realizan. Por lo que, al aprender en
situaciones de vida conocidas, asocian lo aprendido con lo que ya saben y le
dan significado. Así, en la medida en que sus aprendizajes les sirvan para
resolver con mayor eficiencia situaciones cotidianas, su entusiasmo y
dedicación será mayor.

¿Cómo iniciar una sesión de aprendizaje a partir de los saberes

matemáticos de las personas que participan?
Platica con ellos acerca del tema que estudiaran en la sesión y pregúntales
acerca de su experiencia al aplicarlo o necesitarlo en una situación vivida.

Anímalos para que comenten y muestren sus estrategias al resolver dichas

situaciones para que identifiques lo que ellos saben acerca del tema, hazles
notar las habilidades que cada uno ha desarrollado en sus práctica para que se
sientan reconocidos y empieza a revisar el tema, luego puedes plantear
situaciones con un poco más de dificultad de lo que dominan.

Por ejemplo, cuando trabajen el signo de pesos ($), muéstrales recortes de

periódico y revistas en las que se use, pregúntales si saben qué significa,
dónde lo han visto escrito e invítalos a emplearlo, si no hay respuesta puedes
sugerir los precios de los productos y pide que escriban algunos en su
cuaderno. Puedes proponer otras cantidades de dinero para que cuenten y
escriban en su cuaderno cada una de ellas.

Investiga contextos en los que ellos usan matemáticas y plantea problemas que
tengan que ver con sus oficios, y con la comunidad en que viven.
¿Cómo acompañar a las personas para lean solas las
indicaciones?

Una vez que las personas ya lean solas, es importante que les permitas que
ellos mismos lean las indicaciones y los problemas y te expliquen qué es lo que
tienen que hacer, no obstante, es muy importante que los acompañes en la
lectura, y te cerciores que las respuestas que dan sean correctas; si no lo son,
haz el comentario al respecto y pide que analicen nuevamente los datos y lo
que se pregunta para que resuelvan la actividad o problema.

Documentos como el recibo de pago, son muy importantes para cualquier

persona; sin embargo, muchas de ellas no saben cómo interpretarlos, por lo
que es importante que les muestres uno (el recibo de pago de luz, agua,
predio, teléfono, etc.) y les des tiempo para que lo lean y después te comenten
acerca de la información que trae. Puedes preguntar lo siguiente:
o ¿De qué documento se trata?
o ¿Han visto un documento parecido?, ¿de qué?
o ¿Qué importancia tiene para la persona que lo recibe?
o ¿Qué datos importantes aparecen en él?

¿Qué se aprende de matemáticas?

Resuelve el siguiente problema

Estos pasajeros se tienen que trasladar de Real del Monte al parque
nacional El Chico. ¿Cuál de los tres tipos de transporte les resultará
más económico?
Pasajeros Transportes Costo

Para 10 pasajeros $ 500

Para 5 pasajeros $ 200

Para 7 pasajeros $ 300

Si reflexionas un poco acerca de lo que hiciste para resolver el problema, te
darás cuenta que lo primero que necesitabas conocer era el total de personas
que se tenían que transportar, así que iniciaste contando a las personas. Para
ello fuiste señalando con el dedo (o poniendo alguna marca), a cada una de
ellas, al mismo tiempo que decías la serie numérica oral. Al llegar a la última
persona dijiste veinticuatro y tomaste ese número como el total de pasajeros
que había que transportar. Esta es una estrategia usada para resolver
problemas aritméticos llamada conteo.

El conteo es una herramienta útil que sirve para cuantificar colecciones, es

decir, para saber el total de elementos de una colección. También, a través del
conteo se pueden comparar, igualar, ordenar y sumar cantidades. Contar no
consiste en decir solamente la serie numérica oral, implica como lo pudiste
constatar, en establecer una relación uno a uno entre los números de la serie
oral y los objetos que se están contando, para finalmente identificar al último
número que se dice en el conteo, como el total de objetos de la colección
contada.

La importancia del conteo consiste en que a través de esta estrategia las

personas pueden cuantificar el total de objetos de cualquier colección: ¿cuánto
dinero tengo?, ¿cuántas cajas de leche quedan?, ¿cuántos platos se
rompieron?, ¿cuántas personas asisten al círculo de estudio, etcétera.

En los módulos de matemáticas se presentan diferentes colecciones, pide a los

educandos que las cuenten de manera individual, si observas que estos
conteos son sencillos para alguna persona, aumenta el número de objetos a
contar, agrupando colecciones. Pregunta por ejemplo:
o ¿Cuántas naranjas y tunas hay en total?
o ¿Cuántos corazones y ojos hay en total?
o ¿Cuántos objetos hay en total en esta página?

¿Cómo ejercitar el conteo y para qué sirve?

Sería muy conveniente que las personas contaran objetos concretos antes de
cuantificar las colecciones que se presentan dibujadas. Pueden contar todos
los objetos que haya en el círculo de estudio, en la plaza comunitaria o en el
espacio designado para la alfabetización, que cuenten por ejemplo, cuántas
personas hay, cuántos módulos, cuántos lápices, cuántas sillas, cuántas hojas,
etc., esto les ayudará a mejorar su estrategia de conteo.

Asimismo, es importante señalar que contar los elementos de dos o más

colecciones y obtener el total de cada una de ellas, permite a las personas
compararlas para saber cuál tiene más o menos, o saber si sobran o faltan
elementos, por ejemplo, pueden saber si las hojas que tienen alcanzan para
todas las personas. También a través del conteo es posible comparar los
números, ya que pueden saber, por ejemplo, que el cuarenta y ocho, es menor
que el cincuenta y tres simplemente porque este último número se dice
después en la serie oral.

Con el conteo se pueden construir otras colecciones con la misma cantidad de

objetos de otra que se toma como referencia. Muchas situaciones que se
presentan en la vida diaria están vinculadas a la igualación, por ejemplo, si una
persona desea comprar una cerradura de $87.00, y sólo tiene $29.00, para
saber cuánto dinero le falta no requiere necesariamente hacer una suma o
resta escrita, ya que puede resolverlo a través del conteo, empezará a contar
hacia arriba a partir del veintinueve, de uno en uno o por conteos múltiples,
hasta llegar al 87, y estos números contados (58 en este caso) será la cantidad
de pesos que le hacen falta para hacer su compra.

Es probable que las personas que inician su alfabetización sepan contar hasta
un determinado rango, por lo que contar diferentes objetos también les
permitirá ejercitar y ampliar el rango que manejan en la serie numérica oral. Al
contar se dan cuenta por ejemplo, que después del veinte, se agrega a la parte
veinti, los primeros nueve números de la serie: veintiuno, veintidós, veintitrés,
etc. y lo mismo sucede con el treinta: treinta y uno, treinta y dos, treinta y tres;
con el cuarenta, cincuenta, sesenta, etcétera.

Contar ayudará a las personas jóvenes y adultas a comprender las reglas de

cómo se construye la serie numérica oral, así como para entender las
características más importantes del cálculo.

¿Siempre se debe contar de uno en uno?

Para desarrollar mejor la estrategia de conteo, la persona puede iniciar con
conteos hacia arriba (o ascendentes) de uno en uno empezando con el número
uno. Después se le pedirá que cuente a partir de cualquier número, por
ejemplo: cuenta doce a partir del veintitrés y dime a qué número llegaste, o si
está en el 38 dime cuántos números te faltan para llegar al 53.

Posteriormente, es recomendable proponer conteos hacia abajo (o

descendentes) de uno en uno utilizando material concreto, por ejemplo, puedes
poner en una bolsa cierta cantidad de lápices e ir sacando de uno en uno al
mismo tiempo que se va contando de manera descendente: treinta cinco,
treinta cuatro, treinta y tres, etc.

Los conteos ascendentes y descendentes facilitan la identificación del

antecesor y sucesor de cualquier número.

Después se puede fortalecer esta estrategia haciendo conteos múltiples, es

decir, contar de dos en dos, de cinco en cinco, de diez en diez, etc. de manera
ascendente y descendente.

Es conveniente que se trabaje el conteo de manera simultánea con la

numeración del sistema decimal y las del sistema monetario, para que
contando busquen la respuesta a preguntas como:
o Si compras un kilogramo de jitomate que te cuesta $ 15 y pagas con un
billete de $ 50, ¿cuánto recibes de cambio?
o Comienza a contar desde el 15 y termina en el 50, ¿cuántos números
recorriste?

Este trabajo previo con el conteo oral, preparará a las personas para
enfrentarse con menos dificultades al trabajo con la serie numérica escrita.
¿Por qué es necesario aprender la serie numérica escrita?
Ya mencionábamos anteriormente que la mayoría de las personas que inician
su alfabetización tienen una gran habilidad de cálculo que han desarrollado al
resolver problemas matemáticos que se le presentan en su vida cotidiana.
Practican cálculos de cantidades con dinero, kilogramos, litros, paquetes, etc.
Por su contacto con anuncios de tiendas o precios de productos conocen
algunos dígitos, saben lo que tienen que pagar por productos que compran en
el mercado y anticipan el cambio que les van a devolver, al pagar con un billete
del que conocen cuál es su valor.

Ahora bien, muchas de estas personas utilizan un cálculo personal que no ha

necesitado, en la mayoría de los casos, de la escritura matemática, por lo que
desconocen tanto la escritura convencional de los números, la cual requiere de
una disposición espacial, como los procedimientos escritos de las reglas de
resolución de operaciones escritas como la suma y la resta, y estas cuestiones
tanto la escritura como los procedimientos escritos, deben hacerse en un
sistema cuyas reglas no son sencillas de entender y utilizar.

De ahí que nuestro interés principal en estos cuadernos sea el aprendizaje de

la escritura convencional de algunos signos y símbolos matemáticos.

Cuenta y escribe en tu cuaderno cuántas flores son en

total

Comprueba que lo hiciste bien contándolas otra vez, pero ahora haz grupos de
diez en diez. Al finalizar comenta si fue más fácil contar así.

Centrémonos ahora en lo que tuviste que hacer para escribir la cantidad de

flores, utilizando cifras. Es probable que tú, como usuario experto del sistema
de numeración decimal, ya no reflexiones sobre estos aspectos, pero para las
personas que están iniciando su aprendizaje es muy importante hacer
conciencia de su estrategia de conteo:
o Primero, tuviste que saber el número de unidades, decenas y centenas
que se pueden formar con esta cantidad de flores y saber además que
se necesitan 10 unidades para formar una decena, 10 decenas para
formar una centena, y así continuar con esta regularidad para las
 unidades de millar, decenas de millar, etcétera. A este proceso se le
conoce como agrupamiento, que por tratarse de 10 en 10, se le nombra
decimal.
o Además tienes que conocer que las cifras se escriben de izquierda a
derecha, escribiendo primero las de mayor valor relativo, por lo tanto si
tenemos 1 centena, 2 decenas y 1 unidad, escribimos 121 y ese número
no es lo mismo que 112 ó 211, es decir, aplicaste lo que se conoce
como valor posicional.
o Tienes que saber también por qué después del 29 sigue el 30 (o del 39
el 40, o del 49 el 50, etc.) Porque si agregamos una unidad más,
tendremos 10 unidades y con ellas se forma una decena y no sobra
ninguna unidad y por lo tanto dos decenas que ya se tenían, más la
decena que formamos, tenemos 3 decenas y cero unidades, es decir,
30.

Cuando las personas jóvenes y adultas que están iniciando su alfabetización,

conocen y manejan esta última regla de agregar cada vez una unidad, junto
con las dos primeras (agrupamiento y valor posicional) tendrán las
herramientas necesarias para escribir todos los números. Es importante que las
personas aprendan estos conceptos del sistema de numeración, ya que ello les
permitirá darse cuenta que las matemáticas siempre tienen reglas y principios y
que, de ninguna manera, en ningún caso, los procesos y problemas
matemáticos se resuelven de manera mágica o azarosa.

¿Cuál es la relación entre los nombres de los números y su

escritura?
Es muy común pensar que el número junto con su nombre es una misma cosa,
porque se cree que la numeración escrita corresponde estrictamente con la
numeración hablada. Cuando decimos ochocientos cuarenta y seis, es fácil, al
menos para nosotros, adultos alfabetizados en este asunto, escribir el número
correspondiente a ese nombre: 846. Pero señalemos algunas de las
dificultades que enfrenta una persona que está iniciando su proceso de
aprendizaje.

Cuando decimos ochocientos, escribimos un 8 en el lugar de las centenas,

cuarenta, un 4 en el lugar de las decenas, y seis, un 6 en el lugar de las
unidades, entonces, ¿en dónde indica el nombre ochocientos cuarenta y seis,
las centenas, decenas y unidades?

En general, en el nombre de los números se indican las centenas, decenas y

unidades, cuando las acompañamos de la potencia de 10 respectiva, así,
ochocientos, da cuenta de las unidades de a cien y del nombre cientos,
mientras que su escritura con cifras es 8 y su valor de unidades de a cien está
dado por la posición: 800, 840, 830, 817, etc.
Esta es una regla precisa que sirve para las centenas: dos-cientos (200), tres-
cientos (300), cuatro-cientos (400), etc. Por lo que podemos concluir que la
escritura con cifras está regulada por un sistema posicional, mientras que el
sistema oral no.
El conocimiento de los números junto con el sistema de numeración decimal
constituye la base para lograr el acceso y la comprensión de otros contenidos
como las operaciones de suma y resta.

¿Cómo comparar números?

Te sugerimos que para trabajar comparaciones entre números tengas a la
mano algunos materiales publicitarios, en los que se anuncian los precios de
diferentes productos, para que los adultos lean y comparen números

Es importante que las personas empleen algunos criterios para comparar

números, para lo cual, puedes hacer preguntas como las siguientes:
o ¿De qué manera saben, qué producto es más caro que otro?
o ¿Todos los precios tienen el mismo número de cifras?

Cuando todos los números tienen igual número de cifras, puedes preguntarles:
o ¿En qué cifra nos fijamos para decidir qué cantidad es mayor o menor?
En el caso de aquellas cantidades que empiezan con la misma cifra,
o ¿Cuál es la cifra que nos permite decidir qué cantidad es mayor o
menor?
o Pídeles que lean las cantidades y pregúntales:
o En estas cantidades, ¿la primera cifra indica miles o cientos?

Déjalos que contesten en forma individual y que comenten lo que opinan a

cerca de las respuestas de sus compañeros.

¿Cómo introducir la noción del cero?

Es importante señalar que el cero (0) puede representar ciertas dificultades
para nuestros jóvenes y adultos que están iniciando su alfabetización, ya que
en la secuencia numérica que han estado utilizando para contar objetos no se
suele comenzar por el cero, o en los recuentos, lo común es empezar a contar
a partir del uno. Esto lo pudiste constatar cuando contaste y recontaste las
flores de la colección de flores presentada anteriormente.

Así que una forma de introducir al cero con un significado muy específico es
preguntar por la cantidad de objetos que no hay en una colección, por ejemplo:
Si en una colección sólo hay macetas y tazas, pregunta por cuántos platos hay,
con la intención de que al responder que no hay, se introduzca el cero (0) como
el número que representa la ausencia de objetos.

También es primordial que en las actividades de los Cuadernos del adulto, en

las que tengan que registrar el número de centenas, decenas y unidades que
hay en una colección de objetos, escriban el cero (0) en la posición
correspondiente, para señalar la ausencia de alguna de ellas.

¿De qué manera se puede apoyar el conocimiento de la

escritura de los números?

Algunos recursos que se utilizan con la intención de apoyar la escritura de los

números, son las tablas numéricas.
Por ejemplo, en una cuadrícula de 10 × 10 se escriben los números del 1 al
100 y sus respectivos nombres
Cuando alguna persona desconozca cómo se escribe algún número, será
primordial que lo ayudes a buscar la información en la tabla numérica de la
siguiente forma: haz que señalen el número 1 y digan uno, señalen el 2 y digan
dos, el 3 y digan tres, así hasta el 15, de esta forma, por ejemplo, si no sabe
cómo se escribe el número 12, contará en la tira numérica desde el 1 hasta
llegar al número 12. Dale tiempo para que lo vea y lo copie, sin presionarlo,
luego pide que copien el nombre que viene debajo de dicho número. Esto
mismo puedes hacer con otras tablas numéricas.

Las tablas numéricas, también se pueden utilizar para que las personas
encuentren las regularidades de la serie numérica escrita y de esta forma
apoyarlos para facilitarles su aprendizaje.
Para que observen cómo se van repitiendo y combinando los primeros diez
números para formar los siguientes, puedes plantear preguntas como estas:
o ¿Con qué cifra inician los números de la segunda fila?
o ¿Con cuál él de la tercera?, la cuarta, la quinta, etcétera
o ¿Con qué cifra terminan los números de la primera columna?
o ¿Y los de la segunda y tercera?, etcétera
o ¿Cuántos números hay que empiezan con 1?, ¿cuántos que empiezan
con 2?, ¿y con 3?, etcétera.

También puedes pedirles que:

o Señalen la columna en la que los números terminan en 9, digan sus
nombres y comenten en qué se parecen y en qué son diferentes.
o Después que señalen la siguiente columna, digan con cuál cifra terminan
todos los números y que expliquen a qué se debe esto.
o Digan el nombre de los números que terminan en cero.

A las personas se les facilita más aprender los números terminados en cero:
10, 20, 30, 40, 50, etc. y después construir a partir de estos números, el rango
comprendido entre éstos:
 50, 51, 52, 53, 54, 55, 56, 57, 58, 59
 80, 81, 82, 83, 84, 85, 86, 87, 88, 89
Así es que puedes construir, en una cuadrícula de 10 × 10, una tabla numérica
de 10 en 10 señalar dichos números y preguntar por sus semejanzas y
diferencias.

Veamos también cómo puedes orientarlos para que se apoyen en estos

recursos para escribir diferentes series numéricas.

o Series de 1 en 1 hasta el 100. Si en determinado momento no saben

cómo se escribe el número que sigue en la serie, les puedes pedir que lo
busquen en la tabla. Oriéntalos para que se den cuenta con que número
empieza y así lo busquen en la fila correspondiente. También pueden
utilizarla para revisar su serie, una vez terminada.
o Series múltiples de 2 en 2, de 5 en 5 y de 10 en 10. Si se les dificulta
alguna de estas series pueden ir contando sobre la tabla, e ir marcando
los números a los que se llegan y de esta manera comparar con los
números que escribieron en sus series múltiples.
o Series descendentes. Pide que ubiquen en la tabla el número con el que
inicia la serie descendente y que tapen con una hoja los números que le
 anteceden. Pregunta cómo se escribirá el número antecesor, qué digito
se conservará y qué dígito cambiará. Que lo escriban y comprueben
destapando el número correspondiente.

Date cuenta que la búsqueda de regularidades en la serie del 1 al 100,

permitirá generar avances en el uso de la numeración escrita y constituye una
ayuda importante en la comprensión de las leyes del sistema de numeración.

Con lo que respecta a la tabla numérica de 10 en 10, puedes realizar preguntas

parecidas a las anteriores, por ejemplo:
 ¿A partir de qué número se utilizan tres dígitos?,
 ¿Cómo se repiten y combinan los primeros diez números para
formar los números de tres cifras?
 ¿Por qué todos los números terminan en 0?
 ¿Qué números están entre el 100 y el 110, o entre el 420 y el
430?

Puedes realizar las siguientes actividades para ejercitar los conteos múltiples
apoyados en dicha tabla:
 Pide que cuenten de 10 en 10. Pueden iniciar en el 10, en el 100,
en el 200, etc.
 Pide que cuenten de 100 en 100.
 Solicita que señalen en tabla numérica un número determinado,
por ejemplo el 610, que comenten en qué fila está, en qué
columna, y que después ellos digan otro número de la misma fila o
columna.

¿Qué es el sentido numérico y por qué es importante

desarrollarlo en las personas que aprenden matemáticas?

Desarrollar un sentido numérico en las personas es parte esencial del

aprendizaje de las matemáticas, porque les permitirá adquirir la capacidad de
reconocer y relacionar los números en diferentes usos y contextos, de tal
manera que puedan comprender cómo utilizarlos cuando cuentan, miden o
inclusive para poder detectar errores aritméticos. Además de favorecer el
cálculo mental, permite emplear diferentes estrategias en la resolución de
problemas y la comprensión de distintas formas de representación.

Este sentido numérico se desarrolla tomando como punto de partida los

conceptos revisados anteriormente como conteo, comparación e igualación de
cantidades, serie numérica, etc. poniéndolos en relación con otros aspectos
que aparecen en el uso cotidiano de los números.

Cómo puedes ver, aprender números puede ser sencillo si se recuperan los
saberes construidos a lo largo de la vida, y se emplean adecuadamente los
materiales que constituyen la propuesta. También es necesario hacer la
pregunta o preguntas pertinentes para que las personas reflexionen y
descubran la lógica del sistema de numeración.