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Las aleaciones a base de hierro se llaman aleaciones ferrosas y las que se basan en otros
metales se las llaman aleaciones no ferrosas.
Siderurgia
Se realiza una reducción del mineral de hierro empleando carbono usado como
combustible. Los minerales utilizados están constituidos por óxidos de hierro e impurezas.
En el alto horno, el coque (carbono) actúa como agente reductor para reducir óxidos de
hierro (principalmente Fe2O3) para producir arrabio en bruto, el cual contiene casi 4 por
ciento de carbono además de otras impurezas, de acuerdo con la siguiente reacción típica
El arrabio tiene un porcentaje muy alto de carbono para ser colado en moldes. Por ello la
fundición de hierro se obtiene por un proceso de segunda fusión donde se reduce el
carbono y regulan la cantidad de otros componentes. Este proceso se lleva a cabo en
hornos de menor tamaño llamados cubilotes. Sobre la carga metálica (arrabio en lingotes,
sobrantes de fundición, trozos de hierro dulce, etc) se coloca coque y se completa con el
agregado de fundente (piedra caliza para formar escoria fluida y refinar la carga).
La mayoría de los aceros se fabrican mediante la oxidación del carbono y otras impurezas
del arrabio hasta que el contenido de carbono en el hierro se reduce al nivel necesario.
Aceros al carbono
Si bien los aceros son aleaciones de hierro y carbono, existen siempre otros elementos
cuya presencia desempeñan funciones importantes en las propiedades de los aceros. Los
aceros al carbono se designan con un código de cuatro dígitos AISI-SAE. Si los dos
primeros son 10 indican un acero al carbono simple mientras que para un aleado los grupos
presentes en el carbono. Los dos últimos dígitos indican las centésimas del porcentaje de
carbono contenido en el acero.
Las aleaciones de hierro y carbono que contienen desde 0.02% hasta 1.2% de C, de 0.25 a
1% de Mn (para aumentar la solidez) y cantidades menores de otros elementos (S, P, Si),
reciben el nombre de aceros al carbono simples.
❖ Aceros al carbono bajos: Contienen entre 0.02% y 0.3% C. Son suaves,
maleables y tienen buena soldabilidad. Son usados en aplicaciones donde la
resistencia mecánica no es el factor principal (láminas, componentes
livianos).
Para superar las deficiencias de los aceros al carbono simples (poca resistencia a la
corrosión, relación resistencia-ductilidad extremas, poca resistencia al impacto a bajas
temperaturas, temple rápido para lograr uniformidad de estructura martensítica) se han
creado aceros de aleación que contienen elementos aleados (V, Co, B, Cu, Al, Pb, Ti, Nb)
para mejorar sus propiedades. Se consideran aleados a aquellos que tienen entre 1 y 4%
de estos elementos. La manera en que los elementos de aleación se distribuyen en los
aceros depende de las tendencias de cada uno a formar compuestos y carburos.
Tienen buena resistencia a la corrosión, esto es debido a su alto contenido de cromo. Para
fabricarlos debe haber por lo menos 12% de Cr en el acero. El Cr forma un óxido superficial
que protege a la aleación subyacente y para tal fin, el acero debe estar expuesto a agentes
oxidantes. Existen tres tipos:
❖ Aceros inoxidables ferríticos: Aquellos que contienen entre 12 y 30% de
Cr. Su estructura se mantiene en la BCC, en virtud de que el Cr tiene la
misma estructura que la ferrita 𝛼, por lo que se extiende esta región y se
suprime la fase 𝛾 en el diagrama Fe-Cr. Son poco dúctiles y tienen poco
porcentaje de C (0.02-0.3%). Se usan en materiales de propósito general.
● Aceros de fundición
Se fabrican con la intención de ser fundidos en lugar de ser trabajados en forma sólida.
Contienen entre 2 y 4% C y de 1 a 3% de Si (otorga refuerzo estructural, desoxida y
controla la solidificación). Se vacían con facilidad y no forman películas superficiales
cuando se vierten. Son fáciles de maquinar y pueden alearse para aumentar la resistencia
al desgaste, abrasión o corrosión. Tienen poca ductilidad y resistencia al impacto.
Casi todos los tratamientos térmicos del acero están orientados a producir la mezcla de
ferrita y cementita que da la combinación correcta de propiedades.
Estos tratamientos térmicos se emplean para lograr uno de tres propósitos: 1) eliminar los
efectos del trabajo en frío, 2) controlar el endurecimiento por dispersión o 3) mejorar la
maquinabilidad.
❖ Revenido: las aleaciones reducen la rapidez de revenido permitiendo que los aceros
operen de forma satisfactoria a temperaturas elevadas ya que no ocurre exceso de
envejecimiento.
Sirve para comparar la templabilidad de los aceros. Una barra de 4’’ de largo y 1’’ de
diámetro es austenizada, colocada en un aparato y rociada con agua en un extremo. Esto
ocasiona una amplia variedad de magnitudes de velocidad de enfriamiento. Luego se
realizan mediciones de dureza a lo largo del espécimen y se grafican curvas de
templabilidad en función de la distancia
de Jominy. Un acero con alta
templabilidad muestra una curva casi
plana. La templabilidad está determinada
principalmente por el contenido de
aleación del acero.
Tratamientos superficiales
Es posible producir, por medio de un tratamiento térmico apropiado, una estructura que sea
dura y fuerte en la superficie, lo que otorga una excelente resistencia al desgaste y la fatiga,
pero al mismo tiempo da un núcleo blando, dúctil y tenaz que proporciona buena resistencia
a la falla por impacto.
Se austeniza el acero rápidamente calentando con una flama o rayo láser un acero medio al
carbono, de manera que el centro se encuentre por debajo de la temperatura de
austenizado, y luego templarlo, generando una estructura martensítica en la superficie y en
el centro, una mezcla blanda de ferrita y perlita. La profundidad de la capa de martensita se
denomina profundidad de cementado y el revenido produce la dureza deseada.
● Carburizado y nitruración
ANEXO
Los objteivos por los cuales se aplican los tratamientos térmicos son para:
● Homogeneizar: eliminar segregación de solutos, corregir defectos.
● Ablandar: mejorar la maquinabilidad con tratamientos de recocido.
● Distencionar: las piezas pueden acumular tensiones producida por deformación,
soldadura o solidificación.
● Endurecer: aumentar la resistencia máxima, límite de fluencia, resistenicia a la
fatiga.
● Aumentar la tenacidad o ductilidad.
● Adicionar o remover elementos químicos.
Recocido
Tratamiento térmico que se aplica cuando un material ha sido trabajado en frío, que es
endurecido por deformación y pierde ductilidad debido a la disminución de tamaño de grano.
Sirve para reducir la dureza, aumentar la ductilidad y ayudar a eliminar las tensiones
internas de metales. Consiste en calentar una pieza a alta temperatura y luego enfriar
lentamente en un horno apagado para mantener las fases en equilibrio. Permite obtener una
mejora de maquninabilidad, estabilidad dimensional y mejora en las propiedades mecánicas
y eléctricas. Existen distintos tipos:
Templado
Revenido