MINISTERIO PÚBLICO DE VALPARAÍSO C/ FERNANDO VICENTE BASÁEZ ZELAYA.
DELITO: VIOLACIÓN RUC: 0500243356-9 RIT: 99-2007
Valparaíso, tres de julio de dos mil siete.
VISTO, OÍDO Y CONSIDERANDO: PRIMERO: Que, con fecha veintiocho de junio de dos mil siete, ante esta Sala del Tribunal de Juicio Oral en lo Penal de Valparaíso, integrado por la Juez Presidente de Sala doña MARÍA CRUZ FIERRO REYES y, además, por las Magistrados doña MARÍA DEL ROSARIO LAVÍN VALDÉS y doña VITALIA BEATRIZ QUEZADA SCIARAFFIA, se llevó a efecto la audiencia del juicio oral recaída en los antecedentes RIT n.º 99-2007, seguidos en contra del acusado don FERNANDO VICENTE BASÁEZ ZELAYA, nacido el 3 de febrero de 1968, 40 años de edad, natural de Valparaíso, soltero, domiciliado en calle Santa Verónica, casa 130, cerro Mariposa, Valparaíso, electricista, estudios: Segundo Año de Enseñanza Media, Cédula de Identidad n.° 10.834.424-6. Fue parte acusadora en el presente juicio el Ministerio Público de esta ciudad, representado por la Fiscal adjunta de Valparaíso doña Lorena Ulloa Reyes, domiciliada en calle Molina nº 150 de esta ciudad. La defensa del acusado estuvo a cargo de la Defensora Penal Pública doña MARÍA ISABEL GONZALEZ, domiciliada en calle O’Higgins n.º 1260, Valparaíso. SEGUNDO: Que, el Ministerio Público sostuvo en su acusación lo siguiente: “Durante el mes de diciembre de 2004, en circunstancias que el imputado, tío de la menor F.A.A.B., se encontraba en el domicilio de su hermana Hortensia Vásquez, madre de la menor, procedió a llevar a ésta a un dormitorio donde la arrojó sobre la cama, sacándole los pantalones y la ropa interior, por lo que la menor comenzó a forcejear con el imputado, quien procedió a bajarse los pantalones y su ropa interior, introduciendo su pene en la vagina de la menor en reiteradas oportunidades, realizando además tocaciones en su cuerpo, logrando eyacular en varias oportunidades. Producto de lo anterior la menor en cuestión quedó embarazada cuyo parto se realizó el 24 de agosto de 2005, naciendo el menor de iniciales K.A.A., cuya paternidad corresponde el imputado, según informe de ADN” El hecho descrito precedentemente, en concepto de la Fiscalía, constituye el delito de violación, previsto y sancionado en el artículo 362 del Código Penal, concurriendo la agravante del artículo 12 n.º 7 del mismo cuerpo legal. Indicó que el ilícito penal está en grado de consumado y la imputación que le formuló al acusado lo es en calidad de autor directo, de conformidad con lo dispuesto en el artículo 15 nº 1 del Código de que trata. Solicitó imponérsele la pena de diez años y un día de presidio mayor en su grado medio, accesorias de los artículos 28, 370 bis y 372 del referido texto legal, con costas. TERCERO: Que, en su alegato de apertura, la Fiscal señaló que se acreditarán los hechos materia de la acusación, esto es, que el imputado violó a la menor de 13 años de edad a la fecha de ocurridos los hechos, a raíz de los cuales quedó embarazada, naciendo el menor de iniciales K.A.A. Señaló que se está en presencia de un delito de violación, en el cual se dan cada uno de los elementos del tipo penal: la minoría de edad de la víctima y el acceso carnal del imputado a la misma vía vaginal. Indicó que se escuchará además en el juicio el relato de la menor y el contexto familiar en el que se desarrolló el ilícito. A juicio del Ministerio Público está claro que los hechos ocurrieron de la forma descrita en la acusación, por lo que pidió se condene al imputado a la pena que en derecho corresponda. Solicitó aplicársele la circunstancia agravante de responsabilidad penal contemplada en el artículo 12 nº 7 del Código Punitivo, esto es, el abuso de confianza, puesto que el imputado tenía acceso directo a la menor, en circunstancias que había llegado recién la cárcel, siendo recibido por la madre de la víctima. Que, en su alegato de clausura, la representante del Ministerio Público señaló que se acreditaron, más allá de toda duda razonable, los elementos del tipo penal. Refirió que el artículo 362 del Código Penal, es claro en señalar que quien “accediere carnalmente por vía vaginal, anal o bucal a una persona menor de 14 años…”. En el caso en cuestión hubo acceso carnal vía vaginal, y la prueba objetiva de ello es el examen de ADN, a través del cual se probó que producto de una relación sexual entre la menor y el imputado nació un menor de edad de nombre Kevin, lo que se probó con el certificado de nacimiento del menor y la ficha clínica, la cual da cuenta del embarazo observado en el Consultorio “Mena” y en el Hospital “Van Buren”, indicándose en este último embarazo precoz. Aseveró que el menor aludido nació producto de la relación sexual entre víctima y acusado, y que la paternidad de éste se confirmó a través del examen respectivo en un 99% (noventa y nueve por ciento). En cuanto al segundo elemento del tipo objetivo -víctima menor de 14 años- se acreditó con el certificado de nacimiento de la misma, del cual se desprende que la edad de la ofendida a la fecha de ocurrencia de los hechos era 13 años de edad. En consecuencia, señaló la representante del Ministerio Público, el tema objetivo fue acreditado. Además indicó que el órgano persecutor tuvo ciertos elementos para hacer la acusación, tales como la versión de imputado, quien llegó a compartir a la familia de Fanny –la víctima- sabiendo que era menor de edad, ya que cuando había ingresado a la cárcel la menor no había nacido o bien era muy pequeña. Sabía, por ejemplo, que estaba en la Enseñanza Básica. El acusado señaló que se trató de una relación voluntaria y refirió sólo una relación sexual a fines de 2004 y que cuando se enteró que la menor estaba embarazada la acompañó al médico. Aseveró que la relación fue voluntaria y consentida. Se contó también con el relato de la menor, quien señaló que estaba enamorada del imputado, dijo que se “dejó llevar” y habló de tres relaciones sexuales con él, desprendiéndose de sus dichos que no tenía experiencia en ese ámbito. Indicó que prestó declaraciones ante funcionarios de Investigaciones, a quienes les dio otra versión de los hechos, y dentro de ésas está el extracto de su atestado leído en el tribunal por ella misma, en el cual refirió que el imputado la forzó, la arrojó a la cama y la penetró en reiteradas oportunidades, eyaculando en ella. Se le tomó declaración cuando tenía ocho meses de embarazo, la que prestó delante de su madre, quien había interpuesto la denuncia, concordando la fecha de ésta con aquélla registrada en los informes médicos y en la ecografía. Aseveró que si bien en el juicio hubo retractación de la víctima, ésta debe entenderse en el contexto que se dio. La menor señaló en audiencia que se sintió presionada para declarar cómo lo hizo ante la policía, porque las tías paternas habían amenazado a su madre, diciéndole que “iba a la cárcel la madre o el imputado” y en base a ello se hizo la denuncia. La funcionaria policial Torres señaló en audiencia que la madre fue amenazada por el imputado al momento de que ésta le dijo que había dejado embarazada a su hija. Indicó que si se hilan los documentos y las circunstancia bajo las cuales se hizo la denuncia, puede desprenderse que existió una acción de parte del imputado que no se ajusta a derecho, esto es, haber sostenido una relación sexual con una menor de 14 años de edad, lo cual se relaciona con lo señalado por la defensa, la cual pretendido establecer que el hecho de que las relaciones sexuales fueron voluntarias, es indiciario que se estaría en presencia del error de prohibición, ya que el acusado no habría sabido que su actuar era constitutivo de delito, al ser las relaciones sexuales consentidas. Al respecto, indicó la Fiscal que el imputado a los 18 años ingresó a la cárcel, y el mismo manifestó que conoce los códigos de ésta y además que llegó hasta Segundo Medio, de lo que se infiere que sabía el injusto de su actuar, es decir, tenía conocimiento que la víctima era su sobrina y menor de edad, luego no podía sostener relaciones sexuales con ella. Además, la menor tenía ignorancia sexual, luego no existe error de prohibición de parte del imputado que lo exima de responsabilidad penal, ya que comprendía el injusto de su actuar, pues su sobrina era menor de edad e ignorante sexualmente, luego el hecho de haber estado en la cárcel y estimar que si las relaciones eran consentidas su actuar no era delito, no lo excusa. Con consentimiento o sin él, acceder carnalmente a una menor de 14 años es violación, ya que pese a la retractación de la menor se ha acreditado que había inexperiencia sexual de la misma. Indicó que la madre no quiso declarar porque dijo que no quería perjudicar a su hermano declarando en su contra. Luego hubo encubrimiento de un hecho ilícito. Manifestó que se dan los presupuestos del hecho punible como también de la agravante solicitada. En su réplica, señaló que se pudo verificar a través de las declaraciones de los testigos que la madre autorizaba a la menor para salir con el imputado, pero no para sostener una relación sentimental, pues cuando la madre supo que la menor estaba embarazada sintió mucha pena y dolor. Precisó que la madre hizo la denuncia y enfrentó al imputado, quien la habría amenazado, según declaró la funcionaria de Investigaciones Claudia Torres. Luego, no existió una relación de pareja entre la víctima y el acusado, pues la primera de ellas señaló que nunca se pensó en que se iban a ir a vivir todos juntos. No puede entenderse que hubo un error de prohibición, ya que debe darse para ello la inevitabilidad del error, lo cual debe valorarse en cuanto al sujeto en concreto y sus posibilidades y, precisamente éstas, consistían en representarse el injusto de su actuar, pues el acusado era una persona mayor de edad con una diferencia de 23 años respecto de la menor, venía saliendo de la cárcel conociendo los códigos de ésta, tenía una educación normal en cuanto su escolaridad –Segundo Medio- y el hecho de que hubiese estado en la cárcel por más de doce años, todo ello conduce a sostener que debió haber tenido un total o absoluto conocimiento que mantener una relación sexual de forma no violenta con una menor, constituía un delito. Al Ministerio Público le cabe una duda, pues si el acusado sabe los códigos de la cárcel debió representarse el injusto de su actuar, en cuanto a aprovecharse de una menor de edad de 13 años, sin experiencia, ya que no sabía que los cariños podían terminar en una relación sexual. Se embarazó estando en Octavo Básico y ello interrumpió su actividad escolar de toda niña normal. Indicó que no existe un error de prohibición de parte del imputado, ya que hay culpabilidad respecto de los hechos por los cuales se le acusó en esta causa, razón por la cual solicitó se le condene a la pena que en derecho corresponde. CUARTO: Que, por su parte, la Defensa del acusado, en su alegato de apertura, expresó que en esta audiencia el imputado sostendrá, cómo lo hizo en Investigaciones, que esta relación sexual, producto de la cual se gestó su hijo, fue dentro del contexto de una relación afectiva con su sobrina. Indicó que no se está en presencia del dolo que se requiere para saber si hay por esencia un delito de violación No está demás decir que imputado admitió los hechos de la relación sexual ante la policía y autorizó el examen de ADN. Que, en su alegato de clausura, la Defensa del acusado señaló que previo a hacer un análisis específico y concreto de lo que dispone el artículo 362 del Código Penal, debe evaluarse si de acuerdo a los antecedentes probatorios su representado, al tiempo de realizar sus acciones, tenía conciencia clara acerca de si lo que estaba efectuando era un delito. Indicó que debe evaluarse el reproche penal y no el moral. Que se está en presencia de un sujeto que salió de la cárcel después de haber estado privado de libertad durante doce años, con deprivación educacional, sociocultural y afectiva bastante profunda. Efectivamente terminó Segundo Medio, pero en la cárcel, luego debe considerarse el nivel de cosmovisión que pudo tener el acusado bajo estas circunstancias. Cuando salió sus padres habían muerto hace poco, por lo que trató de incorporarse socialmente a su familia como el referente más cercano que tenía. No era libre con estas falencias de vida, debiendo entenderse que estuvo privado de libertad con códigos distintos y situaciones diversas de las del mundo de afuera. Para él, el concepto del delito de violación dice relación con el hecho de forzar u obligar a una persona. Indicó que se escuchó en audiencia la verdad, ya que la víctima sentía cariño y a su vez se sentía querida por el imputado. Por ende, se está en presencia de un contexto en el cual ambos estaban en una situación distinta a la que quiere establecer el órgano persecutor. El imputado señaló que le impresionaba de la relación que tenía con la menor la pureza y la ingenuidad de ésta, la forma honesta de entregarle cariño a esta persona, luego se infiere de ello que no urdió una situación para abusar de la inexperiencia sexual de la menor, sino que se vio envuelto en una situación de enamoramiento. Indicó que pudo desvirtuarse la presunción legal de culpabilidad, lo que puede establecerse si se hace la evaluación del conocimiento de la antijuricidad del actuar que poseía el acusado. El imputado no sabía que su conducta era un ilícito, no sabía que lo que estaba haciendo era un delito más allá de que era una menor, luego es posible exculparlo del reproche penal. Se ha hablado de retractación de parte de la menor y de la madre por parte del Ministerio Público. Respecto de la madre es posible llegar a la conclusión de que no quiso declarar pues no deseó afectar a su hermano, porque además aceptaba esta situación. Respecto de la menor hay dos versiones, una la entregada a la policía y otra al tribunal. Expuso que estaba asustada porque lo que dijo no era real y se iba a descubrir que había mentido en la audiencia, ello es una posibilidad considerando el elemento de la declaración de la otra hermana que dio a entender que la madre al menos aceptaba la relación. La autorización estaba otorgada en términos morales, y la madre pudo no declarar porque todo iba a salir a la luz en el juicio, ésta otra posibilidad. Respecto al relato de la menor, ésta se relajó y sonrió cuando señaló que ella había querido las relaciones sexuales. Su temor era mantener una versión no real. Ella es hija de padres separados y esto la hizo optar por la verdad y, el planteamiento era “o tu madre o el imputado” y aquí necesitaba decir la verdad y su rostro cambió cuando la expresó. Luego, cabe preguntarse si es posible condenar a una persona a diez años de cárcel por tener una relación sexual con una menor, en la cual no hubo abuso o engaño, habiéndose desarrollado la relación de pareja en forma lenta. La relación sexual ocurrió en diciembre de 2004, luego de haber tenido ambos un comportamiento de pareja. La menor se dejó llevar por una afectividad que concluyó en una relación sexual como finalizan las relaciones entre un hombre y una mujer. Aseveró que el error de prohibición debe ser invencible y en este caso es así, ya que el concepto de violación en Chile desde el siglo XIX al XXI guardaba relación con mayores de doce años de edad. Los nuevos elementos como la minoría de edad a los catorce años, son incorporados lentamente por la conciencia colectiva y tanto es así que la Comisión Mixta se hizo cargo en este punto y dejó a los tribunales evaluar la posibilidad de la existencia de error de prohibición invencible. Por estas consideraciones, estima la defensa, que se desvirtuó la presunción legal de que su representado cometió esta acción típica y antijurídica en forma voluntaria, en la conciencia de que su actuar era un delito, lo que se ha probado, más allá de toda duda razonable, por lo que solicitó la absolución de su representado. La defensora no hizo uso de su derecho de réplica. QUINTO: Que estando debida y legalmente informado acerca de los hechos materia de la acusación y de sus derechos, el acusado decidió prestar declaración, como medio de defensa, de conformidad con lo dispuesto en el artículo 326 del Código Procesal Penal, exponiendo lo siguiente: Señaló que esto fue una relación y no forzó a la víctima para mantenerla. Cuando salió de la cárcel en 2003 llegó a la casa de su hermana a tomar desayuno y empezaron a frecuentarse. Después de un tiempo comenzó a tener una relación con Fanny, un “pinche. Venía saliendo de la cárcel después de estar doce años preso. Habían muerto sus padres, y se dejó llevar por la situación y tuvieron una relación en su casa y las otras veces sólo se tocaron y se dieron besos. Ante las preguntas de la Fiscal señaló que estuvo preso por delitos de robo con intimidación, que salió a fines de 2003 y se fue a vivir a su casa que había sido la de sus padres, ubicada en Santa Rita, callejón diez, cerro Yungay, Valparaíso. Indicó que son seis hermanos y que la mamá de Fanny se llama Hortensia, quien vive dos pasajes más arriba de su domicilio. Señaló que cuando ingresó a la cárcel no recordó si había nacido Fanny, luego dijo que al parecer estaba pequeña. La relación con la menor empezó a mediados de 2004, porque la ayudaba a hacer las tareas, lo que veía su hermana. Indicó que se dejo llevar por la situación que estaba pasando, por algo limpio y transparente pues implicó un cambio fuerte al sentir que le hacían cariño. Tuvieron relaciones sexuales a fines de 2004, una sola vez y en su casa. Hubo besos y caricias. No sabía si Fanny había tenido relaciones sexuales anteriormente. Su hermana los había sorprendido afuera de la casa de ella. Señaló que fueron en una oportunidad a la casa de un amigo en la Puntilla, ubicada en el cerro Cordillera, donde “jugaron” –besos y tocamientos- pero no tuvieron relaciones. Supo a través de su hermana que Fanny estaba embarazada, lo que le contó cuando ésta tenía cinco meses. Él le compró el test de embarazo y salió positivo. Aseveró que luego de tener relaciones sexuales siguieron viéndose ya que se iban a ir a vivir juntos. Después de los cinco meses la niña se enojó ya que pensaba que él le iba a quitar el niño, se separaron un poco y ellos se fueron del cerro ya que la familia se enojó. En 2005 se enteró que al parecer la menor estaba embarazada. Les pasó una plata para que arrendaran un departamento, $ 140.000 (ciento cuarenta mil pesos), a su hermana para pagar la garantía y un mes de arriendo, ya que en un principio se iban a ir a vivir todos juntos. En una oportunidad se juntaron, ignorando que estaba demandado y no estuvo en el parto de su hijo pues estuvo privado de libertad cuando nació por el delito de tráfico. Especificó que las relaciones sexuales fueron consentidas y sabía que Fanny era menor de edad. A las preguntas de la Defensora señaló que no sabía que tener relaciones sexuales con su sobrina era un delito, y que es diferente una relación sexual de una violación. Supo que ello era constitutivo de delito cuando conversó con el abogado. Señaló que una violación y una relación sexual con una menor son cosas diferentes. Dijo que entendía que obligar a una persona era algo malo. Indicó que sus padres murieron a fines de 2003 y estaba privado de libertad cuando ello ocurrió. Lo autorizaron a concurrir al velorio de ellos. Su padre murió de un infarto al corazón y su madre de diabetes. Murieron con una semana de diferencia. Su padre murió primero. Señaló que su otra hermana Karen vivía con él en una casa contigua a la de él. Después que salió en libertad trabajó como gasfiter. Tuvo un vehículo que se compró con el tiempo, a mediados de 2004. Ingresó a la cárcel a los 18 ó 19 años de edad. Hizo una condena de 5 años completa, salió, delinquió y fue condenado a cinco años e hizo siete, pues tuvo que cumplir el saldo de la anterior. Estuvo libre un mes y treinta días. Señaló que su hermana la visitaba, no su sobrina. Manifestó que quería a Fanny. Señaló que actualmente tiene una mujer a la que trató de apartar de sí, porque estaba demandado. Se llama Paulina y tiene con ella un niño que va a cumplir un año. Aseveró que le contó del problema a su conviviente y que su hermana le practicó el test de embarazo y además llevó a Fanny a hacerse una radiografía. Indicó que tubo problemas con el padre de Fanny, pues dijeron que lo iban a matar y él fue a decirle que por último le pegara con una escopeta, ya que es delincuente pero en la cárcel es otro tipo de sistema de vida y los violadores la pasan mal allí. Él prefería que le pegaran un escopetazo. Es un reo antiguo y sabe lo que pasa en el ámbito delictivo. No es asesino ni violador. A las preguntas aclaratorias del tribunal señaló que tiene Segundo Medio que cursó estando recluido, que hizo cursos de gimnasia y en la calle trató de estudiar. Sacó su licencia de conducir pues quería cambia su vida. Tenía libre acceso a la casa de su hermana Hortensia. En 1995 al parecer estuvo libre y esa vez no fue a la casa de su hermana. Tenía recuerdos vagos de su sobrina cuando salió de la cárcel, ya que debió tener un año cuando entró a ella. Las relaciones sexuales ocurrieron en su casa hasta la cual llegó Fanny a las 08:30 horas pues iban a bajar a comprar mariscos e iban a comer donde su hermano. Compró mariscos y cuando llegó Fanny estaba recostada en su cama lo que era normal. Se dieron unos besos y sostuvieron una relación sexual. Terminaron y pensó que podía quedar embarazada y le dijo que se “sentara en el baño. Hizo un gesto, levantando los hombres. Luego fueron a comer mariscos. Durante los cinco meses posteriores se juntaban a veces y “jugaban” pero no era notoria la relación. Ella no quiso mantener más relaciones. Se habló de sentimientos en esa época ya que ella le había dado afecto. Pensaron en irse a vivir juntos porque estaba embarazada y le había conversado a su hermana que se iba a hacer cargo de lo que estaba pasando. Su hermana primero dijo que no y él se opuso a sacar unos muebles que estaban en una casa que eran de su conviviente y vino el enojo. Esta relación terminó porque lo decidieron ellos de esa forma pues lo demandaron. El está consciente que hizo algo malo y ahora sabe que es un delito pero él tiene la conciencia tranquila. Fanny es gordita, una “mujer niña” y tiene un carácter fuerte. En la relación sexual se dieron besos y pasó todo rápido y se desvistieron ambos. La ecografía fue sacada después de los cinco meses. Después de los cinco meses siguieron viéndose por un tiempo. En una ocasión pasó su hermana y tuvo al niño entre sus brazos. No vio más a Fanny, le mandaron un video cuando ya había nacido el niño. A su conviviente la empezó a conocer antes del nacimiento del niño. Al término del juicio, en la oportunidad prevista en el artículo 338 del Código Procesal Penal, el acusado nada quiso decir. SEXTO: Que, apreciada libremente la prueba según lo dispuesto en el artículo 297 del Código Procesal Penal, sin contradecir los principios de la lógica, las máximas de experiencia y los conocimientos científicamente afianzados, los sentenciadores, por mayoría, han llegado a la convicción tal como se adelantó por el tribunal en el veredicto de fecha veintiocho de junio en curso, que es posible dar por acreditados los siguientes hechos: “Que durante el mes de diciembre de 2004, el acusado Fernando Vicente Basáez Zelaya mantuvo relaciones sexuales vía vaginal con su sobrina, la menor de iniciales F.A.A.B., producto de lo cual ésta quedó embarazada, naciendo con fecha 14 de agosto de 2005 un hijo de ambos de iniciales K.A.A.A” SÉPTIMO: Que, a fin de acreditar el delito y la participación del acusado en el mismo, el Ministerio Público rindió la siguiente prueba de cargo: a) Declaraciones de la menor F.A.A.B., quien señaló que no estudia actualmente y que dejó de hacerlo el año pasado porque no quería. Indicó que tiene un hijo de un año y diez meses El padre es Fernando Basáez, su tío materno, de quien se enamoró. No recordó el año en que apareció su tío en su vida. Su hijo nació el 24 de agosto de 2005. Precisó que iba a ver su tío a la cárcel y en cuanto a cómo se gestó la relación entre ambos aseveró que “jugando”, añadiendo que él la llevaba a salir y le compraba cosas. No recordó el año en que empezó la relación con su tío. Se le refrescó memoria al tenor de lo dispuesto en el artículo 332 del Código Procesal Penal y leyó parte de su declaración prestada ante la Fiscalía cuyo contenido fue el siguiente: “Al pasar el tiempo, específicamente en mayo de 2004”. Agregó que su tío le decía cosas bonitas, como por ejemplo: “que estaba bonita”. Salía con él e iban al cine o a dar unas vueltas por el centro y lo pasaban bien y “miraban cosas”. Señaló que ella fue a la casa del acusado en dos ocasiones, pues lo iba a ver. No tiene palabras para explicar lo que pasó en la casa de su tío, porque se siente mal. El tribunal dejó constancia que la menor comenzó a sollozar y al preguntársele porqué lo hacía señaló que “quiere terminar con esto”. Manifestó que sabe porque está aquí –en el tribunal-. Señaló que en Investigaciones declaró bajo la presión de la familia, pues trataban mal a su mamá, en particular sus tías y “casi todas las personas de ahí”. Manifestó que sus familiares la presionaron para que ella demandara a su tío, diciéndoles que “tenía que irse preso él o su mamá”, el acusado porque era mayor de edad y su mama por encubrir lo que ocurría entre ellos, esto es, tener relaciones sexuales. Precisó que éstas eran consentidas. Se le refrescó memoria al tenor de lo dispuesto en el artículo 332 del Código Procesal Penal y leyó parte de su declaración prestada ante la Fiscalía cuyo contenido fue el siguiente: “Una vez en su casa, a eso de las 17 horas y mientras que él se cambiaba me quedé esperando en el living pero de repente él apareció y me tomó con fuerza en los brazos, pero como pensé que estaba jugando no me resistí llevándome al dormitorio, luego me tiró sobre su cama procediendo a sacarme los pantalones, por lo que comencé a forcejear con él sin lograr zafarme debido a que se tiró sobre mí. Seguidamente Fernando se bajó sus pantalones y slip hasta la altura de los tobillos y me introdujo el pene en mi vagina en reiteradas ocasiones mientras que me besaba mi boca pero como yo le corría la cara comenzó a besarme mi cuerpo, incluso me besó mi vagina además con sus manos me tocaba mis senos, logrando eyacular en varias oportunidades dentro de mi vagina. Debo señalar que en todo momento opuse resistencia pero como mi tío es grande y maceteado agarraba mis manos impidiéndome de esta forma que me moviera”. Esto dijo en su oportunidad a los policías lo cual no es verdad. Tuvo en tres oportunidades relaciones sexuales con el imputado en su casa. Se dio cuenta que estaba embarazada como a los cinco o seis meses, no recordó el mes. Esta relación con él acusado no continuó porque después se separó porque se enojó, aunque no recordó el motivo. El acusado la llevó a hacerse un test y luego un examen para ver cuántos meses tenía. Ella le contó a su mamá que estaba embarazada, quien lo tomó súper mal. Durante el embarazo recibió ayuda económica de parte del acusado consistente en ropas y dinero como $ 100.000 (cien mil pesos). Pensaron en irse a vivir juntos y no le contaron este plan a su madre. Su madre cuando enteró del embarazo lloraba de rabia y tuvo una reacción fuerte hacia el imputado. No planearon irse a vivir ambos junto a su madre. No ha recibido amenazas por venir a declarar. Ella no quería seguir con esta demanda y su mamá tampoco. Ella no quería porque ya ha pasado mucho tiempo y no desea que el acusado esté preso. Debido al embarazo dejó de estudiar. A las preguntas de la Defensora señaló que junto a su madre fue a ver a la cárcel al acusado cuando era chica, de unos siete u ochos años, hasta que él salió. Aparte de ella, iba su madre y su abuelita a verlo. El acusado le decía “Guatona” y ella se refería a él como “Nano”. Ella se sentía bien frente a las cosas que el imputado le decía. Cuando salían se daban la mano. Ella en las oportunidades que mencionó fue sola a la casa del imputado y en otras ocasiones fue acompañada de su madre. Las presiones familiares fueron por parte de parientes de su padre. Aseveró que algunas veces el acusado fue a buscarla a su colegio. Señaló que después de las relaciones sexuales siguieron manteniendo contacto. A las preguntas aclaratorias del tribunal señaló que las relaciones sexuales que tuvo el acusado fueron en su casa en distintas fechas. Se sentía atraída hacia él, lo quería y el trato del imputado hacia ella era bueno, pues era cariñoso. No recordó porque se enojaron y desde allí no volvieron a tener contacto. No sabe si todavía lo quiere. Antes no había mantenido relaciones sexuales con otras personas. “Se dejó llevar” y por ello tuvieron relaciones sexuales. A la semana siguiente de tener la primera relación tuvo la segunda. Ella iba a la casa de él. La tercera vez también fue en la casa de él. Todas fueron seguidas. Ella dejaba que el acusado le diera besos y la tocara porque estaba enamorada de él. Lo que leyó en el tribunal acerca de su declaración policial, lo dijo por la presión de la familia y lo inventó ella. Cuando habla de presión de la familia se refirió a las tías, hermanas de su papá, con quienes mantiene poco contacto. Prestó tal declaración porque creía que si no lo hacía de esa forma su madre se iba a ir presa. Señaló que el acusado trabajaba y se veían en horas que no eran de trabajo. Por último indicó que fue en dos oportunidades a la casa de su tío porque las otras veces fue con su madre. b) Declaración del Perito Sergio Rojas Trujillo, Bioquímico, quien declaró que recibió muestras de sangre para presunto padre, de un menor y una tercera muestra de una madre. Indicó que se extrajo el ADN de la sangre por medio de procedimientos químicos obteniendo ADN, que se cuantificó por medio de espectrofotometría, procediéndose a amplificar con una técnica llamada PCR, se procesó llevándose a un analizador genético donde se obtuvieron perfiles genéticos los cuales fueron analizados y tratados estadísticamente. Con los datos se obtuvo un índice de paternidad y una probabilidad de ésta. Agregó que los resultados obtenidos fueron de un índice de paternidad de 1.292.818.000 y una probabilidad de paternidad de 99,99992. Se concluyó una paternidad biológica acreditada. Agregó que las muestras analizadas correspondían a Fernando Basáez Zelaya como presunto padre, de F.A.A.B. como presunta madre y del menor Kevin Alexander como el hijo. c) Declaración de Claudia Torres Westwood, Sub Inspector de la Brigada de Delitos Sexuales de la Policía de Investigaciones de Chile, quien manifestó que recepcionó, en el mes de julio de 2005, una orden de investigar por el delito de violación. Las diligencias que se practicaron fueron entrevistas a la denunciante, afectada, imputado, inspección ocular al sitio del suceso y empadronamiento a testigos. Indicó que Hortensia Basáez Vásquez, denunciante y madre de la menor, señaló que su hija de iniciales F.A.A.B., en ese entonces de 13 años de edad, a comienzos del mes de junio del año 2005 presentó mareos, vómitos y un atraso en su menstruación, por lo que decidió llevarla al Consultorio para averiguar a qué se debían dichos síntomas. El médico indicó que se podían deberse a una cefalea que la menor habría sufrido anteriormente y fijó una nueva cita para el 14 de junio. Antes de esa fecha y ante la insistencia de su madre por averiguar los motivos del problema, su hija F.A.A.B. terminó confesándole que la razón de ellos se debía a que su tío materno de nombre Fernando Basáez Zelaya, había abusado sexualmente de ella. A raíz de lo anterior, Hortensia Basáez aprovechó la oportunidad para encarar a Fernando Basáez, quien le negó los hechos y le mencionó que su hija “era más viva que ella”, que era imposible que la hubiese dejado embarazada y que no obstante ello, se comprometía a acompañarla a efectuarse una ecografía para descartar un embarazo. Al día siguiente Fernando Basáez y su hija F.A.A.B. fueron a un doctor, y en horas de la tarde al llegar su hija a la casa le mostró una fotografía, indicando que el doctor le habría diagnosticado cinco meses de embarazo y que el padre de la guagua era Fernando Basáez. Posteriormente la señora Hortensia decidió colocar la denuncia correspondiente, y al enterarse su hermano Fernando, éste se habría acercado a hablar con ella para que retirara la denuncia, ya que se haría cargo de la menor y de su hijo. Pero, no obstante ello y ante la negativa de la Sra. Hortensia de retirar la denuncia, Fernando le señaló que “no se las iba a llevar peladas y amenazó de muerte a la menor”, que si lo llevaban detenido se iba a oponer, o que cuando saliera de la cárcel también tomaría algún tipo de represalia contra ella. Pese a lo anterior y al temor de la señora Hortensia siguió con el procedimiento, ya que estaba consciente que su hermano era una persona un poco agresiva, debido a que había estado por varios años en la cárcel. Ante el interrogatorio del Ministerio Público manifestó que la señora Hortensia habría recibido amenazas de muerte en contra de su hija, ya que la menor tenía ocho meses de embarazo y además temía por los antecedentes de su hermano, pues era una persona peligrosa por los años que estuvo detenido en la cárcel. Agregó que además le tomó declaración a la menor, quien en ese momento se encontraba preocupada, un poco tímida, pero de igual forma pudo declarar lo acontecido. Se encontraba temerosa en cuanto a lo que pudiese suceder a raíz de su propia declaración y a lo que se llevaba a cabo. Indicó que la menor F.A.A.B. declaró en presencia de su madre, a fines de agosto de 2005, indicando que su tío Fernando, después de salir de la cárcel, se fue a vivir cerca de su domicilio. Al principio la relación era buena, su tío solía darle dinero y golosinas. En el año 2004 - no recuerda fecha- su tío le empezó a manifestarle, a escondidas, que la encontraba bonita y un poco gordita y, esos dichos eran acompañados de caricias en su rostro. Manifestó que la menor agregó que nunca pensó mal de su tío, hasta que a fines del año 2004, éste habría llegado a la casa invitándola a salir, lo que ella aceptó, previa autorización de su madre. Su tío le pidió que la acompañara hasta su domicilio para arreglarse para salir. Indicó que la menor habría esperado en el living mientras su tío se vestía en su dormitorio, quien apareció y la tomó fuertemente del brazo. En un principio la menor pensó que éste estaba jugando y no opuso resistencia y luego la trasladó hasta el dormitorio, tirándola sobre la cama de él, quien procedió a quitarle sus pantalones y cuadros a la fuerza y la menor empezó a poner resistencia, pero no pudo hacer nada porque su tío se subió encima de ella y, como era más grande y fuerte no se podía mover. Una vez estando encima de la menor, su tío se bajó los pantalones y ropa interior, procediendo a introducir su pene en su vagina en reiteradas ocasiones, efectuándole tocamientos en senos, vagina y ano, además de besarla en distintas partes de su cuerpo. La menor indicó que se sintió como húmeda, lo que indicó que su tío había logrado eyacular en su interior. La testigo manifestó que el relato de la menor fue en forma pausada, que trató de guiarla al hecho mismo de lo que interesaba en la investigación. Indicó que la menor manifestó que una vez finalizado el acto se retiró a su domicilio, llorando, se quitó la ropa y se encerró en su dormitorio. Indicó que al consultarle a la menor si le había contado a alguien lo sucedido, ésta manifestó que no, ya que temía algún tipo de reacción por parte de su tío. Transcurrida una semana aproximadamente su tío la invitó a casa de un conocido de él, de nombre Carlos, pensando la menor que su tío ya no le iba a volver a hacer nada más y volvió a aceptar la invitación con autorización de su madre, y se dirigieron a un sector de Valparaíso que parecía un departamento, que era una casa de color blanco. En el trayecto hasta esa casa no se mencionó la situación anterior y, estando ahí, en el interior de ese domicilio, una vez sentados en el living, su tío procedió a acariciarle su cuerpo por sobre su ropa y, mediante la fuerza la trasladó hasta el dormitorio, indicando que trató de defenderse pero no pudo, y al igual que la vez anterior la tiró sobre la cama, se subió sobre ella bajándole los pantalones y ropa interior hasta la altura de los tobillos y él también se sacó la ropa, indicando que hubo introducción del pene en su vagina y tocamientos en distintas partes de su cuerpo. Una vez finalizado el acto le manifestó a su tío que se quería a su casa, pero éste se metió a la ducha y ella se subió al vehículo esperando que se fueran a la casa. Al pasar el tiempo ella comenzó con mareos y vómitos, razón por la cual su madre la llevó al Consultorio, indicando que al principio pensaron que podía ser una cefalea, que la había sufrido anteriormente. Al regresar le manifestó la situación a su tío Fernando, quien le manifestó a la señora Hortensia que le comprara un bono porque la iba a llevar a un doctor, lo que se hizo con un diagnóstico de 5 meses de gestación y, al llegar la casa le indicó a su madre que el padre de la guagua era su tío Fernando. Agregó la testigo que se le realizó entrevista al imputado Fernando Basáez, en dependencia de la Brigada de Delitos Sexuales, quien accedió voluntariamente a la toma de declaración y se acercó al cuartel policial, comenzó señalando que ha estado detenido por diversos delitos en la cárcel de Valparaíso y que es hermano de la señora Hortensia y que a mediados del año 2004, una vez que salió en libertad, llegó a vivir a calle Santa Rita, callejón 10, Nº 450 en Cerro Yungay, domicilio donde vivía en una casa independiente en cuyo terreno vivía otra hermana de nombre Karen y, debido a la cercanía que tenía con su hermana Hortensia, él la visitaba constantemente, conociendo en ese momento a su sobrina F.A.A.B. Comenzaron las visitas, agregando que con su sobrina se llevaban bien, que conversaban y le ayudaba a realizar las tareas y solían salir. Fernando Basáez manifestó haber terminado una relación amorosa, por lo que con la menor comenzaron unos juegos distintos, indicando que se abrazaban, se tomaban de las manos y se daban besos en la mejilla. A fines del año 2004, estando en la casa de la menor se dieron un beso en la boca, indicando que de ahí en adelante comenzó un tipo de pololeo, situación que él pensaba que la madre estaba al tanto, porque en una oportunidad los sorprendieron dándose un beso. En el mes de enero de 2005 -no recordó fecha exacta- la menor llegó de visita a su casa, la hizo pasar, se sentaron en el living y comenzaron a besarse, se trasladaron hasta el dormitorio, se sentaron en la cama y comenzaron a acariciarse sus partes íntimas por sobre la ropa, se recostaron quedando desnudos y procedieron a tener relaciones sexuales, indicando que le introdujo su pene en la vagina en reiteradas oportunidades logrando eyacular en su interior, acto que duró aproximadamente unos 15 minutos, debido a que él pensó que la menor podía quedar embarazada. Al finalizar el acto, la dirigió al baño donde la dejó sentada en la taza alrededor de unos 30 minutos, ya que tenía el conocimiento que de esa forma se impedía que una persona pudiera quedar embarazada. El imputado le indicó que al pasar una semana de esa relación sexual, se dirigieron a la casa de un amigo ubicada en Cerro Cordillera de Valparaíso, con la autorización de la madre de la menor, y también procedieron a mantener relaciones sexuales. Pasado el tiempo se acercó su hermana, la señora Hortensia, la que le indicó que se encontraba preocupada porque su hija presentaba unos tres meses de atraso en su menstruación, indicando éste que no se preocupara y que no le hiciera algo a la niña, que le comprara un bono porque la llevaría a un doctor. Posterior a ello, él volvió a tener una conversación con la señora Hortensia indicándole que probablemente su sobrina estaba embarazada y que para descartarlo comprara un test de embarazo, lo cual se realizó y salió positivo para embarazo. Luego de ello, él llevó a la menor a un médico particular donde diagnosticaron que tenía 5 meses de embarazo y, en ese momento admitió ser el padre de la guagua y que iba responder por ello, manifestando éste que pese a que las relaciones fueron de mutuo acuerdo, estaba consciente de que lo que había hecho estaba mal y que jamás había amenazado a esas personas. El testigo indicó que al entrevistar a la señora Karen, hermana de la señora Hortensia y del imputado don Fernando Basáez, ésta manifestó vivir en el mismo domicilio que el imputado, pero en casas totalmente distintas e independientes. Veía que su sobrina F.A.A.B. visitaba constantemente a su hermano y efectivamente se compró un test de embarazó para realizárselo a su sobrina, el cual resultó positivo, el que fue comprado por su hermano Fernando, enterándose posteriormente que el padre de la guagua era su hermano y que la menor tenía 5 meses de gestación. La testigo Torres manifestó que hace seis meses tuvo contacto nuevamente con la señora Hortensia, debido a que debía presentarse a la Fiscalía, quien se mostró reacia a seguir con el procedimiento, ya que de acuerdo a ella había pasado mucho tiempo desde que lo denunció, pues su nieto había nacido y estaba muy bien en la casa, a raíz de lo mismo se estaba oponiendo a seguir con la investigación. Indicó que hace un mes atrás tuvo nuevamente contacto con la señora Hortensia, y ésta se mostró dudosa de seguir adelante, no tanto como la vez anterior, no obstante estaba llana a concurrir a la Fiscalía junto con su hija. Indicó que la señora Hortensia no le manifestó que se habrían ido del lugar donde vivían, ya que siempre las ubicó en el mismo domicilio. Ante el contra interrogatorio de la Defensa manifestó que le tomó fotografías a la casa del imputado, con la autorización de éste. El imputado habría concurrido voluntariamente a declarar, oportunidad en la que se levantó un acta voluntaria para la realización de examen de ADN, la cual fue autorizada por el imputado. Indicó que por lo que recuerda, la madre no habría intervenido en la declaración de la menor. Ante las preguntas aclaratorias del Tribunal manifestó que las declaraciones tomadas a la denunciante y afectada fueron el 22 de agosto de 2005 y el 29 de agosto de 2005 al imputado. De acuerdo a los relatos, la madre de la menor se habría enterado de todo esto en el mes de junio de 2005, a través de la propia menor. Las entrevistas posteriores que tuvo con la denunciante fueron a solicitud del Ministerio Público para entrevista con la Fiscal. Al momento de citar a la denunciante, ésta le habría manifestado que había pasado mucho tiempo, pues había nacido su nieto y estaba muy contenta con él y con su hija, dando a entender que no quería más problemas. d) Declaración de Karen Marisella Basáez Zelaya, Asistente de Párvulos, quien manifestó ser hermana del imputado y que siempre compartió con su hermano, pese a que estuvo detenido igual lo iban a visitar. Al salir de la cárcel habían fallecido sus padres, lo que conllevó a que se reunieran más. Indicó que se fue a vivir a la casa de sus padres en el año 2003 y que su hermana Hortensia vivía cerca de ella. La relación entre ellas no era muy buena, porque aquella era envidiosa. Respecto a la relación con su sobrina F.A.A.B., hija de su hermana Hortensia, era buena, no tenían problemas. Agregó que se juntaban todos los hermanos en la casa de su hermano mayor, que ahí se acercó bastante Hortensia con su sobrina F.A.A.B. a la familia, y ésta, en especie de agradecimiento, invitaba a su hermano Fernando a su casa. Su sobrina F.A.A.B. buscaba bastante a su hermano Fernando, pues se llevaban bien. Supo que estaba embarazada cuando tenía varios meses y que hace poco supo que el padre del hijo de su sobrina F.A.A.B. era su hermano Fernando. Agregó que su hermana Hortensia no dejaba que su hermano Fernando saliera sólo en el auto, le decía a su hija que lo acompañara. Al salir su hermano de la cárcel tenía pareja y su hermana Hortensia se encargó de disolver esa relación. En su momento no notó que su hermano con su sobrina F.A.A.B. tenían una relación amorosa. Cuando lo citaron a declarar se enteró que a su hermano lo habían denunciado por violación hacia su sobrina F.A.A.B. Su hermana Hortensia llevaba a su casa a su hermano Fernando por interés. Ante el contra interrogatorio de la Defensa manifestó que cuando su hermana Hortensia dijo que su sobrina F.A.A.B. se colocaba celosa ante la presencia de una pretendiente de su hermano Fernando, se encontraba su sobrina. Su hermana siempre hacía comentarios dando a entender que quería que su sobrina F.A.A.B. estuviera sólo con él. Su sobrina F.A.A.B., la mayoría de las veces, iba sola a la casa de su hermano Fernando. Ante las preguntas aclaratorias del Tribunal manifestó que las visitas, por parte de su sobrina F.A.A.B., eran en forma frecuente a la casa de su hermano Fernando. En la semana eran en las tardes, como a las 15:00 horas, y los fines de semana la menor iba más temprano, a veces iba con su hermana Hortensia a tomar desayuno, pasaban primero a casa de ella y luego a casa de su hermano. Manifestó que lo declarado lo sabe por que lo vio. Sabe que su hermano salía con F.A.A.B. porque ésta se subía al auto o su hermana Hortensia le decía que fuera con él. e) Certificado de nacimiento de la menor individualizada en juicio por las iniciales de sus nombres y apellidos F.A.A.B, de nombre de pila Fanny Circunscripción El Almendral; n.° inscripción 4.494, Registro S; Año 1991; R.U.N. 18.032.271-K, Fecha nacimiento 11 noviembre 1991, Sexo Femenino; se indica nombre y rut del padre y de la madre, ésta última individualizada como Hortensia Trinidad Basáez Vásquez; f) Certificado de nacimiento del menor de iniciales K. A. A. A, de la Circunscripción Valparaíso; n.° inscripción 2411; Año 2005; R.U.N. 21.915.951-K; Fecha nacimiento: 24 de agosto 2005; Sexo Masculino; Nombre de la madre F.A.A.B. R:U.N. de la madre 18.032.271-K; g) Informe Ecografía Obstétrica del doctor José Sariego Rivera de 01 de junio de 2005 de la paciente F.A.A.B, feto único vivo, móvil encefálica de 25 semanas gestacionales, que en sus observaciones señala que el inicio aproximado de gestación fue el 07 de diciembre de 2004, que se incorporó al juicio mediante lectura resumida. h) Solicitud de Exámenes de Laboratorio, de la Clínica Maternal Centro de Salud MENA, correspondiente a F.A.B. de 13 años, diagnóstico: ingreso embarazo, programa maternal, n°ficha 105-18, fecha 20 de junio de 2005. i) Historia Clínica n.° 018921 del Hospital Carlos Van Buren de la menor F. A. B. nacida el 11 de noviembre de 1991, en la que figuran como datos de relevancia los siguientes: Ficha Clínica del recién nacido; Solicitud de interconsulta de F.A.A.B. para ser atendida en el Hospital Carlos Van Buren; La señorita Asistente Social del Hospital Carlos Van Buren deja constancia que existe Denuncia de Violación en Juzgado de Valparaíso, quien dio orden de investigar. Se coordinó con Consultorio por el caso;Ficha de ingreso de la menor a las Salas de preparto y parto, dejándose constancia de la evolución y epicrisis, como también de las Salas de recuperación y de Puerperio; Ficha clínica recién nacido, nombre de la madre F.A.A.B. de 13 años de edad, que nació el 24 de agosto de 2005 a las 09:49 horas, sexo masculino, peso 3.300 gramos, talle 51 centímetros. k) Cuatro solicitudes de exámenes de laboratorio del Consultorio MENA requeridos a F.A.A.B, todos de fecha 20 de junio de 2006; l) Un examen de Ecográfía Obstétrica Nivel 2, de F.A.A.B. de 05 de agosto de 2005, realizado en el Hospital Carlos Van Buren de esta ciudad, fecha 05 de agosto de 2005; m) Dos certificados de nacimiento pertenecientes uno al acusado Fernando Vicente Baséz Zelaya y, el otro a la madre de la menor, Hortensia Trinidad Basáez Vásquez, en los que consta que ambos tiene el mismo padre de nombre Sergio Basaéz Madariaga. OCTAVO: Que el delito de violación previsto y sancionado en el artículo 362 del Código Penal, por el que el Ministerio Público formuló sus cargos contra el acusado, exige objetivamente para su configuración “el acceso carnal , por vía vaginal, anal o bucal a una persona menor de 14 años…”, lo que resultó probado con la prueba de cargo, sin perjuicio de que no existió discusión al respecto. El primer elemento consistente en el acceso carnal vía vaginal, en este caso, se probó con los asertos de la menor sindicada en juicio por las iniciales de sus nombres y apellidos F.A.A.B. y por su primer nombre de pila Fanny, quien señaló que durante el mes de diciembre de 2004, en tres ocasiones mantuvo relaciones sexuales ,consentidas por su parte, con su tío paterno el acusado Fernando Vicente Basaez Zelaya, en el domicilio de éste ubicado en Santa Rita, callejón n°10, Cerro Yungay, Valparaíso, a consecuencia de lo cual quedó embarazada dando a luz a un varón con fecha 24 de agosto de 2005. Lo anterior, fue corroborado con la declaración del perito bioquímico Sergio Rojas Trujillo, quien señaló que de acuerdo al examen de ADN que realizó a tres muestras de sangre correspondientes al acusado, la menor F.A.A.B y del menor Kevin Alexander concluyó una probabilidad de paternidad de 99,99992, considerando por tanto una paternidad biológica acreditada, considerándose, también el certificado de nacimiento de K. A. A. A, de sexo masculino, con fecha nacimiento 24 de agosto de 2005, nombre de la madre F.A.A.B. RUN 18.032.271-K. Este elemento del tipo penal se desprende también de los dichos de la testigo Karen Basáez Vásquez, hermana del acusado y tía materna de la menor al referir que estaba enterada que el hijo de su sobrina tenía como padre biológico a su hermano y con los asertos de la funcionaria de la Policía de Investigaciones de Chile Claudia Torres Westwood a quien le correspondió tomar declaraciones a la menor, su madre y el acusado, desprendiéndose de todas ellas la efectividad del acceso carnal en comento. Señaló la primera que realizó un test de embarazo a la menor con resultado positivo, constándoles a todos ellos que la menor dio a luz a un varón y que durante su embarazo se realizó ecografías y diversos exámenes tanto en el Consultorio MENA como en el Hospital Van Buren de esta cidad. El segundo elemento del tipo penal consistente en la edad de la ofendida, se estableció con el mérito del certificado de nacimiento que F.A.A.B que establece que nació con fecha 11 de noviembre de 1991 y, que por tanto, a diciembre de 2004, contaba con trece años de edad, lo que se vio refrendado por los dichos de su tía la testigo Karen Basáez Vásquez, de la funcionario Claudia Torres Westwood y del contexto de los documentos incorporados a juicio por el Ministerio Público en los que al individualizarla se señala como su edad, trece años. Que la prueba de cargo antes referida, provenientes de testigos directos de los hechos traídos en juicio, quienes claramente manifestaron lo que ellos sabían o les constaba, dando razón de sus dichos, unido a prueba científica documental y pericial que da cuenta del resultado de los exámenes ginecológicos de la menor y examen de ADN con el objeto de establecer la paternidad de su hijo, aunado al certificado de nacimiento de aquella que incuestionablemente conduce a establecer que contaba con 13 años al mes de diciembre del año 2004, son suficientes para este Tribunal en orden a tener por establecido, más allá de toda duda razonable, que durante el mes de diciembre de 2004 el acusado Fernando Vicente Basáez Zelaya accedió carnalmente por vía vaginal a la menor de iniciales F.A.A.B.