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UN CONCIERTO EN EL CIELO
y otros temas

por

Lic. Mario Vera Muñoz, MMus

EDIMUS-UNAD
1994
Revision 2006
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C O N T E N I D O

1.- Prólogo ………………………………………………………………. 2

2.- Un Concierto en el Cielo ………………………………………….. 4

3.- Los Dos Sacrificios ………………………………………………. 15

4.- La Música Rock y sus Efectos sobre el Organismo …………… 26

5.~ La Música en el Culto: ¿Estamos realmente adorando a Dios?.41

6.- Apéndice I - “Lo Sagrado y lo Secular” …………………………. 54


Tomado del libro: Music and Worship
pp. 36 - 40 de H.B.Hannum

7.— Apéndice II ................................................................. 58


"Los Adventistas y la Música" (Documento de la
Div.Interamericana)

8.- Apéndice III …………………………………………………… 68


"La Música: Función, virtudes e influencia (Ellen G.White
Estate, GCSDA)

9.- Apéndice IV ……………………………………………………….. 71


“Una filosofía adventista acerca de la música”
(13.Oct.2004)

10.- Apéndice V ………………………………………………………. 75


“La música en la IASD de Sudamérica”
Junta directiva de la División Sudamericana,
03.MAY.2005
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PROLOGO

"La Música forma parte del culto tributado a Dios en los atrios
celestiales y en nuestros cánticos de alabanza debiéramos
procurar aproximarnos tanto como sea posible a la armonía de
los coros celestiales". (PP.664)

La Iglesia está siendo infiltrada por algunos elementos contaminantes


que, insertos en un cierto tipo de música mal llamada religiosa ha
comenzado a formar parte de los cultos de alabanza de la membresía,
ya sea pasivamente como auditores o cantando en conjuntos vocales o
como solistas.

Si nuestra meta es, por la gracia de Dios, llegar al cielo algún día,
entonces se hace urgente la necesidad de promover una revisión del
material musical que se está usando en los cultos, en los hogares y en
los momentos de esparcimiento juvenil.

Si el pueblo de Dios se está preparando desde ahora para llegar a ser


integrantes de ese gran concierto donde se alabará al Cordero,' de qué
manera se está real izando esta preparación?

Los artículos ofrecidos en este documento tienen como objetivo llamar a


la reflexión a nuestros adultos y jóvenes para que todos, a través de
nuestra alabanza, en nuestra forma de culto a Dios, honremos al
Creador en espíritu y en verdad en esta tierra como un ensayo
preparatorio de aquel gran momento en que todos los salvados
interpretarán gloriosamente "el cántico de Moisés y del Cordero".

Cordialmente, EDIMUS-UNAD
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UN CONCIERTO EN EL CIELO

Por Mario Vera Muñoz

La orquesta estaba lista para el concierto; todos los instrumentos ya


debidamente afinados. Esta era una agrupación de músicos que se
había formado especialmente para aquella ocasión. Habían sido
convocados para interpretar con sus instrumentos un himno glorioso
de dedicación.

Una multitud estaba a la espera de que esa enorme masa instrumental


iniciara la melodía con que se iba a dedicar un costoso y enorme
monumento que había sido construido para honrar para siempre la
memoria del más grande emperador de todos los tiempos.

A fin de asegurar la asistencia de un mayor número de súbditos, tanto


de la capital como de otras provincias, se había publicado la noticia de
la manera más profusa posible. Nadie debía ignorar este glorioso
evento. La imagen del emperador estaba representada en una
inmensa estatua toda hecha de oro y la orden era muy clara: al
sonido de la orquesta, todo el mundo debía postrarse de rodillas
rindiendo con ello honor y pleitesía no solo a la estatua allí erigida,
sino también al personaje representado en ella, es decir, al orgulloso rey
Nabucodonosor. Este mismo monarca, luego de haber soñado un día
con una imagen parecida a la que él había mandado construir, quiso
proyectarse a través de ella de una manera bien definida: En la
imagen del sueño, el cuerpo estaba constituido de distintos materiales,
de los cuales solamente la cabeza era de oro.

A Nabucodonosor se le había dicho que él representaba aquella ca-


beza de oro. Sin embargo, la imagen que el rey mandó construir era
entera de oro, de unos 30 metros de altura. Podemos imaginar el brillo
inigualable de aquel monumento cuando salía el sol. Con esta imagen el
rey quiso proyectar su fama y gloria para siempre.
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La historia bíblica nos cuenta que ese concierto de dedicación tuvo


que ser suspendido por una razón sumamente extraña: tres jóvenes
hebreos que también habían sido convocados a ese magno e-vento,
no obedecieron la orden de arrodi11arse una vez iniciada la música
instrumental.

A todas luces, estos jóvenes eran sumamente importantes e influ-


yentes tanto que, a causa de su desobediencia al edicto real, tendrían
que haber sido ajusticiados de inmediato de acuerdo con la amenaza
que pendía sobre quienes no se postraran ante la imagen dorada.

Sabemos que cuando fueron llevados a la presencia del rey, éste los
reconoció de inmediato. Claro, si eran los mismos jóvenes que, poco
tiempo atrás junto con Daniel, hombre de confianza de Nabucodonosor
y también hebreo como ellos, hablan aprobado con nota máxima el
examen final que los acreditaba como sabios del reino.

Una segunda y última oportunidad fue dada ante la sorpresa de


quienes estaban presenciando esa escena. Todos esperaban la sen-
tencia final: ¡Al horno de fuego con los desobedientes! Sin embargo el
rey, como una consideración especial a sus jóvenes sabios, les da otra
oportunidad. Mayor es el espanto de aquellos que oyen la respuesta
inmediata de los valientes hebreos: "...la imagen que has levantado no
adoraremos".

La firme posición adoptada por Ananías, Mizael y Azarías no fue


irrespetuosa hacia el rey Nabucodonosor , aún cuando éste osten-
tosamente les dijo: "¿...y qué dios será aquel que os libre de mis
manos?"

La respuesta de los gobernadores hebreos fue dada confiando ellos


ciegamente en el Dios de los cielos sin saber qué les iba a acontecer
realmente.

A l l í , frente a una gran cantidad de testigos, valientemente proclaman:


"He aquí nuestro Dios a quien servimos puede librarnos del horno de
fuego ardiendo; y de tu mano oh rey, nos librará. Y si no, sepas, oh
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rey, que no serviremos a tus dioses, ni tampoco adoraremos la estatua


que has levantado". (Daniel 3:17,18)

Antes de analizar este impactante suceso, revisemos primeramente lo que


nos dice el Comentario Bíblico al respecto. En la p.784 de la versión
en inglés se afirma que la partícula "...y si no”, está revelando, más que
una duda acerca del poder divino para salvarlos; es más bien una
incertidumbre del conocimiento de la voluntad divina para ese
momento. Sin embargo, a pesar de que ellos están reafirmando su
inamovible decisión de llegar a, la muerte, si era necesario, por causa, de
sus ideales y principios, no dudaron por ello en mantenerse firmes.

Estamos trayendo al presente un hecho del pasado cuyos


protagonistas fueron seres humanos de carne y hueso. A veces
existe la tendencia a idealizar los personajes bíblicos hasta un punto tal
que éstos aparecen ante nuestras mentes como si fueran ángeles o
seres extraterrestres y dotados, por lo mismo, de poderes sobre-
naturales que les facultaban para realizar determinado número de proezas
o acciones medio inverosímiles para nuestro entendimiento occidental y
de este siglo XX. Sin embargo no fue asi. El apóstol Santiago, en su
epístola universal capitulo 5 y versículo 17. menciona a Elias como un
hombre "sujeto a semejantes pasiones a las nuestras" y, sin embargo,
como contestación a sus oraciones, sobrevino una verdadera
tempestad en Israel luego de tres años y medio de sequía, siendo ésta
una respuesta a otra oración suya.

Volviendo a nuestros jóvenes hebreos, ¿qué había en ellos que los


empujó a enfrentarse al hombre más poderoso de la tierra de ese
momento?

Daniel y sus tres compañeros, al poco tiempo de llegar a la urbe


babilónica en calidad de cautivos desde Israel, se propusieron a sí
mismos "no contaminarse con la comida del rey", ante la oferta de
ingerir los deliciosos manjares de palacio. ¿Qué los empujaba a
permanecer fieles a sus principios de alimentación aún a riesgo de
provocar la ira de quienes les demostraron consideración ofreciéndoles
lo mejor de la mesa real?
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Creo que Daniel y sus tres compañeros llegaron a ser gobernadores


del imperio más famoso del mundo antiguo no por obra de la casua-
lidad o "por política", para usar términos modernos. No creo que
Nabucodonosor los transformó en protegidos suyos a despecho de
quienes, siendo tan caldeos como el mismo rey, por eso tenían el
primer derecho para gozar de tales privilegios. Ellos se ganaron en
buena lid sus posiciones como gobernantes, como que Nabucodo-
nosor fue quien les tomó personalmente el examen final, declarándoles
aptos para ejercer los cargos para los cuales fueron designados.

Cuando estos cuatro jóvenes doblaron sus rodillas para pedir que Dios
repitiera el sueño de Nabucodonosor -cosa inusitada esta-sin saberlo,
estaban ingresando en la antesala de una cadena de acontecimientos
que, pasando por nuestros días, iban a llegar hasta la misma Segunda
Venida de nuestro Señor.

Notemos hasta qué punto puede tomar Dios en sus manos las vidas
de quienes deciden "no contaminarse con la comida del rey”.

¡Qué agradable sorpresa será para estos personajes de la Biblia


cuando contemplen, ya en la Tierra nueva, el resultado de aquella
oración de rodillas ofrecida por ellos hace más de dos milenios, en los
lejanos tiempos babilónicos!

¡Cuántos cientos de miles, quizás millones, se habrán ganado para el cielo


por el solo estudio de las profecías que aparecen en el libro del gran
profeta Daniel! ¡Cuántos más aún se habrán de acercar al pueblo de
Dios como resultado del conocimiento de estas grandes verdades
proféticas! Y todo por ser fieles a principios tan preclaros como:
- establecer una firme y decidida dependencia de Dios en todo
aquello que se emprenda o se esté planeando realizar
- entregar en las manos del Señor todo los problemas y perplejidades.
- no temer al ridículo si se trata de defender ciertos principios
relacionados con el comer, el vestir y otras características que
señalan al joven adventista como perteneciente a un grupo
especial, tesoro delicado, "pueblo adquirido por Dios para que
anunciéis las virtudes de Aquel que os llamó de las tinieblas a su
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luz admirable". (1 Pedro 2:9)

Quiero citar al apóstol Pablo cuando nos habla del grado de de-
pendencia que debe existir entre nosotros y Dios. Hasta qué punto
nuestra vida entera sencillamente no es nuestra, sino de Dios. Leemos
en Romanos 14:7-9 "Porque ninguno de nosotros vive para sí, y
ninguno muere para sí. Pues si vivimos, para el Señor vivimos, y si
morimos, para el Señor morimos. Así pues, sea que vivamos o que
muramos, del Señor somos. Porque Cristo para ésto murió y resucitó,
y volvió a vivir, para ser Señor de los muertos como de los que viven".

Una de las oraciones más hermosas registradas en las Escrituras es


aquella que el mismo Señor Jesús pronunciara en esos momentos en
que su ministerio terrenal estaba llegando a su fin. Es llamada la
oración vicaria o sacerdotal por estar saturada de amor, dedicación y
tierno cuidado por sus discípulos. Aparece en el capítulo 17 del Evangelio
de San Juan, versículos 15-17:

"No ruego que los quites del mundo, sino que los guardes del mal. No
son del mundo, como tampoco yo soy del mundo. Santifícalos en tu
verdad; tu palabra es verdad" .

¿Quiénes están expuestos más que nunca en este momento a los


embates del enemigo de las almas? Los miembros jóvenes de la Igle-
sia. ¿Por qué razón? Porque ellos son el futuro de la misma. Si
Satanás logra introducirse en sus momentos de diversión, en sus
vidas, en la música que practican de la manera más imperceptible,
que ellos piensen que están haciendo perfectamente las cosas,
entonces él ha comenzado a triunfar. Paso a paso, de tal manera que
la consabida frase: "¿Y qué tiene de malo?", surja a cada momento
como la mejor defensa de ciertas posiciones o actitudes con respecto a
los principios que la Iglesia Adventista sostiene en relación al tema
música y culto, principalmente. "Os escribo a vosotros mancebos
porque sois fuertes", afirma el apóstol. En otras palabras, los jóvenes
están plenamente preparados para dar y recibir mensajes para esta
hora y que son de contenido con mucho significado. Como Uds. son
por naturaleza valientes y arrojados, es perfectamente oportuno y
adecuado conversar estos temas con claridad meridiana, pero también con
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serena firmeza.

Creemos que es el mejor camino a seguir cuando existe el noble


deseo de buscar, encontrar y seguir aquellas verdades que Dios desea
establecer, especialmente en este delicado terreno de la música que
involucran toda la Iglesia, ya sea en el plano pasivo o activo, según la
naturaleza de quienes participen en aquellos actos de adoración en
donde la música juega un rol importante.

Hablemos acerca del t i t u l o que fue colocado a estas reflexiones: "Un


concierto en el cielo".
La verdad es que en el cielo continuamente se celebran conciertos. En el
libro Patriarcas y Profetas se afirma lo siguiente: "La música forma parte
del culto tributado a Dios en los atrios celestiales, y en nuestros cánticos
de alabanza debiéramos procurar aproximarnos tanto como sea
posible a la armonía de los coros celestiales" (PP.645).

Lo interesante es que bajo circunstancias adecuadas, los ángeles "..


se complacen en oír los sencillos cantos de alabanza expresados en un
tono natural. Ellos se unen con nosotros en los cantos en que cada
palabra es pronunciada claramente, en un tono musical. Participan en
las melodías cantadas con el corazón, el espíritu y el entendimiento".
Este último párrafo está tomado del libro Evangelismo, p.372.

¿Qué es un concierto?

Este término tiene dos acepciones en el plano musical. El primero


habla de una forma o estructura composicional de unas tres o cuatro
secciones o movimientos, escrita para instrumento solista y su
acompañamiento, que puede ser el piano o un grupo instrumental
determinado.

Las primeras composiciones de este tipo surgieron alrededor del año


1700 en Italia y asumieron tres modalidades: el llamado concerto
orquestal, el concerto grosso o gran concierto y el concerto solístico.
En este último, un solista se destacaba por encima de la masa
orquestal acompañante. Esta estaba formada casi siempre por
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instrumentos de cuerda y un clavecín. Con el correr del tiempo esta


modalidad recorrió toda Europa llegando hasta el siglo XIX en donde
compositores como Beethoven, entre otros, inmortalizaron esta forma
musical a través de creaciones como el concierto No. 5 para piano y
orquesta llamado "El Emperador", por ejemplo.

La segunda acepción ya es más moderna y se relaciona con ese evento


musical en donde se ofrece al público una presentación instrumental en
lugares especialmente acondicionados para ello. Se dice, por ejemplo, la
Orquesta Sinfónica nacional dará un concierto en tal o cual lugar con
motivo del inicio de la temporada de Primavera. A l l í será interpretada la
Sinfonía de Brahms y el concierto No. 2 para violín y orquesta de
Tchaikowsky.

Ahora bien, todos esos músicos antes de enfrentar al público pasaron


por un proceso previo que en algunos casos, dura bastante tiempo. Son
los llamados ensayos y estos están divididos en dos categorías que son
los ensayos parciales y los ensayos generales.

¿Para qué son los ensayos?

Tienen como finalidad aprender una obra nueva o la revisión de otra


que ya se sabe, pero que es necesario perfeccionarla o pulirla a fin de
ofrecer una buena interpretación más tarde. Ocurre por ejemplo, que un
director famoso es invitado a dirigir la orquesta sinfónica nacional. Todos
conocen perfectamente la partitura, pero es necesario que el director y
los músicos tengan varias sesiones de ensayo previo a fin de revisar la
obra y llegar a un acuerdo de cómo serán interpretadas las
composiciones en esta ocasión, de acuerdo a lo que el director estime
necesario. Nadie esperaría que este último se baje del avión y vaya
directamente al lugar del concierto, por muy genio que sea. Los
ensayos están primero.

Pero por otro lado, tampoco resultaría comprensible que una agru-
pación musical de cualquiera especie, se lo pasara todo el tiempo
ensayando y ensayando sin que nadie, ni director ni dirigidos, tuvieran
la más mínima esperanza de ofrecer en algún concierto aquello que
por tanto tiempo han estado ensayando. Sencillamente una
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agrupación tal estaría destinada a su pronta desaparición. Estamos


claros entonces en que ensayo y concierto son dos términos que
caminan estrechamente vinculados el uno con el otro.

Veamos ahora lo que pasa dentro de los ensayos:

En un coro, por ejemplo, los componentes ensayan una y otra vez


ciertos pasajes de alguna obra hasta que el director queda conforme
con la interpretación. Esto podría aplicarse al terreno espiritual,
cuando nosotros caemos a causa de alguna falla de nuestro carácter
y, repetidamente, Dios nos corrige hasta que logramos superar ese
aspecto negativo.

Una orquesta o agrupación instrumental está compuesta por


instrumentos de varias clases. Cada cual posee su propia técnica de
interpretación. Por ejemplo: Un trompetista no podrá utilizar su técnica
para aplicarla en el aprendizaje del oboe. Debe abandonar una
técnica y adoptar la otra, puesto que cada instrumento tiene la suya.

Así también es en la Iglesia. Es por ello que a veces al presentar una


verdad debe manejarse la estrategia apropiada para el momento.

Mientras pasamos por este mundo vivimos en situación de aprendizaje


todo el tiempo. Y en este andar, todo hijo de Dios debiera dejar correr
su existencia bajo una situación constante de búsqueda de la verdad.

Le verdad es una sola, reside en Cristo mismo y está disponible para


todos. En el libro el Deseado de todas la Gentes, p. 279, se nos dice:
"El que desee conocer la verdad, debe estar dispuesto a aceptar todo
lo que ella revele. No puede transigir con el error. El vacilar y ser tibio
en obedecer la verdad, es elegir las tinieblas del error y el engaño
satánico". Y en la p.423 se afirma: "Quienquiera desee conocer la
verdad a fin de obedecerla, recibirá iluminación divina".

La revista Ministerio Adventista de Julio-Agosto de 1982 ofrece un


interesante artículo titulado "Anticipando la música del Cielo". De a l l í
extractamos algunos párrafos que los consideramos sumamente
interesantes:
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"Todos los que aceptaron ser miembros de la Iglesia Adventista


del Séptimo Día están llamados a andar conforme a sus ideales y
objetivos. Sus vidas deben ser tan distintas como el mensaje
que sustentan. Este requiere un compromiso total que afectará
cada aspecto de la vida de la iglesia y sin duda influirá también en la
música empleada por ella al cumplir la comisión dada por Dios". (Art.
Anticipando la música del Cielo, p.5)

"El gozo de la vida auténtica -ya sea en el cielo o en la tierra- se


refleja siempre en el sonido de la música.

La esencia de todo esto es el hecho inconmovible de que el Dios de


los cielos aprecia y ama lo bello. Por consiguiente, todo aquel que
desee ser uno con Dios, deseará también desarrollar su apreciación
estética.

No es de sorprenderse, entonces, que la música y la apreciación


musical ocupen un lugar importante en la vida de un cristiano
adventista. Pero para él no puede haber estética sin ética. La música
que es aceptable para un cristiano adventista debe ser socialmente
adecuada, éticamente incuestionable y teológicamente buena".
(Ob.cit.)

Satanás, "como ex-director de coro y denodado compositor, guía


la producción de incontables canciones y melodías que degradan
el gusto y conducen al pecado. Algunas de éstas, como en el
caso de la música usada por Balac para seducir a Israel en Baal
Peor, podrían llamarse deliciosas si no fuera porque su resultado final
está muy lejos de ser delicioso". (Ob.cit.)

Debéis reconocer que se os ha puesto "en esta vida para determinar


vuestra idoneidad para la vida futura. Estáis por lo tanto, en esta vida
básicamente con el propósito de desarrollar vuestros caracteres y
parte de este desarrollo debe incluir la educación de las emociones
para responder a lo bueno, lo refinado y lo bello". (Ob.cit.7)

Un concierto en el cielo muy pronto habrá de producirse. Necesario es


recalcar que a l l í entre los participantes habrá músicos y no músicos.
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¿Qué significa ésto?

Dos cosas: la primera, que este concierto está asociado con la


recompensa que Dios dará al final a quienes hayan ensayado en sus
vidas no solo notas musicales, no solo himnos que están en
consonancia con el mensaje que proclamamos, sino que sus vidas
enteras fueron melodías que subieron al cielo cual perfume sagrado en
lo que el apóstol Pablo llama un "sacrificio racional".

"Un cristiano adventista no puede tener los gustos que tiene el mundo y
todavía pretender estar mirando hacia la ciudad cuyo arquitecto y
constructor es Dios. Debe haber una diferencia y esta diferencia debe
ser claramente evidente para todos". (Ob. cit.)

Lo segundo es que quienes somos músicos tenemos una doble res-


ponsabilidad. Cultivar nuestras propias vidas en su aspecto espiritual
y lo otro es que ineludiblemente nuestra actuación musical debe ir más
allá del cultivo de un simple gusto estético. Nuestra música,
querámoslo o no, sobrelleva la posibilidad de llevar a otros hacia Dios
o hacia Satanás. En este contexto, los músicos tenemos una
responsabilidad tan delicada como la de un pastor de iglesia.

"Un concierto en el cielo".

¿Cuál será nuestro papel allí? ¿Estamos ensayando apropiadamente


nuestro rol mientras estamos en esta tierra?

"El futuro de cada cristiano está destinado a ser colmado de sonidos


musicales. Cuando Cristo venga, los santos ángeles y una vasta e
innumerable multitud lo acompañará en su regreso con himnos de
melodía celestial. Luego, al regresar a la ciudad de Dios, el coro
angélico prorrumpirá en notas de victoria y los redimidos se 'unirán en
un potente himno que proclama: 'Digno es el Cordero que fue
inmolado'". (Ob.cit.) Este es precisamente el concierto que será
interpretado en las alturas.

Sin embargo, recordemos hermanos que la eternidad comienza en


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esta misma tierra. Ese h i l o dorado parte desde el momento en que


nos entregamos en las manos de nuestro Salvador y el otro extremo
está a l l í , en ese momento glorioso cuando hemos de ver cara a cara a
nuestro Salvador.

El libro Profetas y Reyes en p.539, hablando de aquellos momentos


sublimes nos comenta que a l l í habrá "sonido de música y canto, cual
no ha sido escuchado por oído mortal alguno ni concebido por mente
humana alguna, a no ser en visiones de Dios".

Los adventistas del séptimo día que planean estar en el cielo con toda su
música, deben comenzar sus ensayos ahora mismo para dar a la música
celestial su debido lugar en esta tierra, en sus corazones y en sus vidas. (Ob.cit.)

Rogamos a Dios para que cada uno pida que el Espíritu Santo sacuda su alma
entera, si es que lo deseamos verdaderamente.

Recordemos una vez mas, estamos ensayando en este mundo


para participar en ese gran concierto en el cielo junto al Redentor
de nuestras vidas, junto al Cordero inmolado, quien es el único
digno de la alabanza, la gloria y la magnificencia eternas.
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LOS DOS SACRIFICIOS

Por Mario Vera Muñoz

Lectura base: Colosenses 3:16,17

La Iglesia Adventista alrededor del mundo está experimentando un


crecimiento a un punto tal que acusa matices diferentes en cada lugar
de acuerdo a las características de crecimiento de cada uno. También se
toma en cuenta el perfil individual o grupal de los miembros así
como la preparación previa que hayan tenido los diferentes campos a fin
de recibir a los nuevos hermanos que han ingresado a nuestra feligresía, a
veces en cantidades que sobrepasan los blancos más optimistas.

Todos nos alegramos -y el cielo se une a ello- cuando la Iglesia crece.


Es que no puede ser de otra manera. La ganancia de las almas
constituye la razón misma de la existencia del pueblo adventista. Sin
embargo, todo crecimiento trae consigo una problemática que no
podemos ignorar.

Cuando se forma una nueva familia, sus componentes, en este caso, el


esposo y la esposa, al determinar el número de hijos que traerán al
mundo, con seguridad van a pensar y planear de qué manera serán
alimentados y educados. No basta con proporcionarles solo una
hermosa cuna para que duerman. A medida que los niños crecen
nuevas necesidades surgen y hay que atenderlas y por el hecho de
ser sus padres, nadie puede reemplazar la misión formativa que a
ellos les incumbe cumplir.

Así ocurre con la Iglesia. Cuando esta crece, se hace necesario


buscar nuevas alternativas para atender adecuadamente aquellos
aspectos que van surgiendo como efecto del mismo crecimiento.
Siendo que nuestra razón de ser es primordialmente evangélica, todos
los canales tienden a encauzar su acción hacia este fin superior y
precisamente, la actividad musical es uno de los medios más eficaces
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con que cuenta la Iglesia para llevar a cabo sus planes misioneros.

Sabido es que el tema de la música genera a veces algunas situa-


ciones que invitan, a quienes están implicados en esta actividad, a
meditar muy profundamente acerca de la verdadera razón de su
participación como músicos.

El rol protagónico que han asumido quienes dedican hoy parte de sus
vidas a alabar a Dios constituye, de por sí, un delicado ministerio que
afecta a la parte medular de la forma de ser de nuestra congregación, ya
que somos un pueblo que canta. Angeles se unen a nuestra alabanza
dada al Padre eterno cuando ésta se ofrece en consonancia con el
orden celestial. Los coros de las alturas se gozan cuando los fieles de
la tierra, con unción y alegría, entonan sus cantos al Creador con fe y
consagración.

La Música es una actividad contingente. Es un hecho real el que


alguien al mostrarse ante los demás como músico, en ese momento
ya se definió a sí mismo, a través del estilo que utiliza en sus
interpretaciones, del repertorio que presenta a sus auditores, del
contenido del mensaje dado por sus cantos, a través del momento y el
lugar que escoge para ofrecer su arte y por último, define si sus
móviles son la difusión pura de la música o también hay intereses de
orden financiero.

Si en cambio, se considera la actividad musical de la Iglesia como un


ministerio, entonces debemos intentar una redefinición de conceptos,
propósitos y objetivos, ya sea en un plano general o especifico.

¿Qué es un Ministerio? Al mencionar Hechos 20:24, el Comentario Bí-


blico Adventista lo define como un "servicio", del griego "diako-nia". No
significa este un servicio eclesiástico común, sino un "servicio rendido
a Dios directamente".(CBA.p.387)

Ahora bien, si el ejercicio de un determinado ministerio se relaciona a


quien lo desempeña con aquél que lo designó, entonces aquí nos
encontramos con un plano de interdependencia entre los dos personajes.
Nadie podría imaginar a un ministro-que es nombrado por el
17

gobernante de una nación-realizar los trabajos por su propia cuenta y


riesgo sin rendir pleitesía a quien lo puso al frente de esa cartera
ministerial.

La Concordancia Breve de la Biblia que acompaña a la versión Reina-


Valera, año 1960 revisada, asocia el término "ministerio" con los
conceptos de "administración, apostolado, dispensación, sacerdocio y
servicio".

Analicemos ahora las razones que se ha tenido para considerar la música


utilizada en la iglesia o para la iglesia, como un ministerio sagrado.
Veamos lo que se nos dice acerca de ésto en el libro Hechos de los
Apóstoles, capítulo 20 y versículo 24: "Pero de ninguna cosa hago caso,
ni estimo preciosa mi vida para mí mismo, con tal que acabe mi carrera
con gozo, y el ministerio que recibí del Señor Jesús, para dar
testimonio del evangelio de la gracia de Dios".

Ahora vayamos a Romanos capítulo 11 y versículo 13. Allí leemos:


"Porque a vosotros hablo, gentiles. Por cuanto yo soy apóstol a los
gentiles, honro mi ministerio".

Y una tercera cita nos ayudará en nuestra búsqueda. Se encuentra en


la. de Corintios, capítulo 12 y el versículo 5. Se nos dice: "Y hay
diversidad de ministerios, pero el Señor es el mismo".

Comentemos ahora los tres versículos. El primero nos dice que el


ministerio de Pablo fue entregado directamente por el Señor Jesús. El
segundo afirma que Pablo cumple su ministerio responsablemente, pues
lo honra a través de su cumplimiento. Y el tercer versículo establece
que hay varias clases de ministerios.

Ahora bien, si los ministerios son dados por el Señor Jesucristo (Hechos
20:24), también ocurre lo mismo con los dones. La Enciclopedia Espasa-
Calpe establece en torno al concepto "dones" lo que sigue: ". . . dádiva,
presente o regalo". Otra acepción: "Cualquiera de los bienes (naturales o
sobrenaturales) que tenemos, respecto a Dios, de quien lo
recibimos". Y una tercera: "Gracia especial o habilidad para hacer
una cosa".
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Hay un buen número de citas bíblicas en donde los dones aparecen


relacionados con Dios. Mencionaremos por lo menos las siguientes:

Eclesiastés 3:13; Eclesiastés 5:19; Juan 4:10; Hechos 8:20; Hechos


11:17; 1a.Corintios 7:7; 2a.Corintios 9:15; Efesios 2:8 y 2a.Timoteo 1:6.

En todos estos versículos citados aparece en forma textual la frase "don


de Dios". Romanos 11:29 merece nuestra especial atención. Nos
dice el apóstol: "Porque irrevocables son los dones y el llamamiento de
Dios". El término irrevocable viene del griego "ametaméletos", que nos
da la idea de algo irrenunciable, algo que se da a pesar de lo que
somos y sin tomar en cuenta si lo merecemos o no. Tal es el poder de
dádiva que Dios tiene para ofrecer a sus hijos. En cuanto a los dones
divinos, la palabra "jarísmata" nos habla de dones de gracia gratuita".

El Comentario Bíblico, hablando acerca del "llamado" nos aclara: "El


llamamiento divino es el primer gran paso en la salvación per— sonal, y
la respuesta a él constituye la experiencia de la conver— sión. El
llamado es de origen divino y manifiesta el poder soberano mediante el
cual somos invitados".(CBA.p.608)

Cuando alguien es invitado a una fiesta o a un evento especial, se


produce un contacto afectivo entre dos personas por lo menos. La que
invita, quien lo hace para demostrar cierto grado de deferencia hacia un
semejante. Enseguida está la persona que recibe la invitación, quien
puede ser merecedora o no de ello. Si este es el último caso, entonces
podemos entender la acción de gracia inmerecida que caracteriza la
relación de amor que Dios mantiene con sus hijos.

Asociemos ahora los conceptos "dones" y "ministerio":

El don es un atributo que Dios concede a cada uno de sus hijos. El


hecho de asignar un determinado don, es facultad privativa de Dios y lo
recibimos por gracia, vale decir, gratuitamente. (Romanos 12:6)

Como leímos anteriormente, los dones son irrenunciables y van


acompañados de su respectivo llamamiento.
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Nosotros, al recibir un don, este viene con su llamamiento para


ejercerlo. Al dedicarlo para la honra y gloria de Dios, se inicia
entonces un ministerio en nuestras vidas.

Recordemos estos tres factores:

a) Dios asigna un don al hombre. Quien lo recibe lo utiliza para honrar


su nombre. Este es el llamamiento que menciona Romanos 11:29.

b) El ejercicio en plenitud del don recibido, al ser ofrecido a Dios,


pasa a constituirse en un Ministerio, porque fue dedicado
enteramente para engrandecer Su nombre.

Hemos llegado al punto principal: ¿Es la Música un don divino o no


lo es? Si la respuesta es afirmativa, entonces y de acuerdo al pequeño
análisis que hemos hecho, debemos concluir en que si música es un don de
Dios, el único camino que tenemos es rededicarlo a El mismo, por cuanto
Dios nos lo entregó para facilitar nuestros cultos de alabanza y adoración
y para acercarnos a El.

Surge ahora de inmediato esta otra interrogante: ¿Con qué medios y


de qué manera ejerceremos este ministerio para alabar el nombre de
Dios, como El bien se lo merece?

Antes de intentar algunas respuestas centremos nuestra atención en el


capítulo cuatro del libro de Génesis. A l l í se relata la historia de los dos
primeros hermanos que hubo sobre esta tierra. El mayor agricultor y el
menor, pastor de ovejas. Ambos ofrecieron su propio sacrificio de
agradecimiento a Dios. Diríamos que ellos rindieron su culto al Señor
cada cual de distinta manera.

Dice el relato bíblico que Dios aceptó uno de los sacrificios y rechazó
el otro. ¿Por qué Dios rechazó el sacrificio de Caín cuando,
aparentemente, él ofreció su presente con lo mejor del producto de
"su" esfuerzo? La explicación está en que Caín trajo al altar lo que,
según él, era la demostración de su buena calidad como agricultor. ¿Por
qué tenía que llevar al altar un cordero cuando él no era un pastor de
ovejas? ¡Para eso estaba su hermano Abel! Caín pensó que era
20

mejor que cada cual "demostrara" al Señor el resultado de su propio


trabajo: uno, como excelente trabajador de la tierra y el otro, como
responsable pastor de ovejas.

Sin embargo, una ofrenda fue aceptada y la otra rechazada. Obvia-


mente uno de los dos sacrificios no cumplió con los requisitos básicos
para recibir la aceptación de Dios. Y este rechazo fue la respuesta
divina a una actitud que ha caracterizado la conducta humana desde el
principio cuando, frente a un requerimiento por parte de Dios, surge de
inmediato el deseo de hacer las cosas a nuestra manera. Y ya
sabemos en qué derivó esta desobediencia: acontece el primer
asesinato sobre la tierra. Un fratricidio que empañó la dulzura y el amor
que reinaba en el hogar de nuestros primeros padres,
acompañándoles ese dolor hasta el mismo momento de su muerte.

Pero volvamos a nuestro asunto: ¿Cómo, con qué medios y de qué


manera estamos ejerciendo el Ministerio de la música? ¿Estamos
alabando el nombre del Creador y Dador de todos los dones como El
se lo merece? ¿Estamos empleando aquellos recursos que son acep-
tables a sus ojos o estamos llevando al altar algunos elementos que
resultan extraños a un régimen de culto, pretendiendo agradar a Dios
con ello, a la manera de Caín?

¿No será que en estos tiempos modernos, en que vivimos rodeados de


una deslumbrante tecnología se está repitiendo de nuevo "el sacrificio
de Caín", a causa de la forma en que se intenta alabar a Dios?

¿No será que estamos empleando fuego extraño en nuestras ofrendas


musicales provocando con ello la ira divina?

Examinemos lo que dice el folleto titulado, "Preparación para la lluvia


tardía". Citaremos de allí algunos párrafos que resultan
verdaderamente impactantes en lo relacionado con los engaños que
Satanás está tratando de introducir en este tiempo en su Iglesia:

JT3 p.306: "Las potencias de Satanás se esfuerzan por distraer


las mentes de las realidades eternas".
21

JT8 p.316: "Necesitamos sentir nuestra responsabi1idad de pro-


porcionar a nuestras almas el alimento que nutrirá y estimulará
la vida espiritual".

JT1 p.117: "El hombre se inclina por naturaleza a seguir las sugestiones
de Satanás y no puede resistir con éxito a un enemigo
tan terrible, a menos que Cristo, el poderoso Conquistador, more
en él, guíe sus deseos y le fortalezca... Satanás está preparando sus
engaños, para que en su última campaña contra el pueblo
de Dios, este no entienda que se trata de él".

JT3 p.272: "A todos digo: Estad apercibidos porque semejante a


un ángel de luz, Satanás entra en cada reunión de obreros cristianos y
en cada iglesia, para tratar de atraer a los miembros
a su lado".

T5 p.102,103: "No importa cuan elevada sea nuestra situación;


necesitamos velar y orar continuamente. Diariamente debemos ser
controlados por el Espíritu de Dios, o si no seremos dominados
por Satanás... Los que no están totalmente consagrados a Dios
pueden ser llevados a hacer la obra de Satanás/ al paso que se
vanaglorian de estar al servicio de Cristo".

TM p.77: "Satanás gobierna toda mente que no se halla en forma


decidida bajo el control del Espíritu de Dios".

SDABC7 p.907: "A medida que nos acerquemos al fin del tiempo, la
mentira estará tan mezclada con la verdad, que solamente aquéllos
que sean guiados por el Espíritu Santo podrán distinguir la
verdad del error".

TM p.51,52: "Falsos maestros podrán parecer muy celosos en la


obra de Dios, e invertir recursos para presentar sus teorías
delante del mundo y de la Iglesia: pero por cuanto mezclan el
error y la verdad, su mensaje es un mensaje de engaño, e inducirá a
las almas por senderos falsos. Hemos de hacerles frente
y oponernos a ellos, no porque sean hombres malos, sino porque
enseñan falsedades y se esfuerzan por colocar sobre la falsedad
22

la estampa de la verdad".

TM p.58: "Dios tiene una Iglesia sobre la tierra, compuesta por


su pueblo escogido, que guarda sus mandamientos. El está dirigiendo,
no a vástagos descarriados, no uno aquí y otro allá sino
a un pueblo".

A la luz de los párrafos recién leídos resulta fácil deducir que quienes
no estén alertas, caerán indefectiblemente en las redes satánicas.
Quisiera advertir que estas redes no siempre estarán relacionadas con
el plano teológico o doctrinal. Un adventista de hoy puede estar
perfectamente en regla con todo aquello que se relacione con el
fundamento de nuestra doctrina y con la vocación misionera que todo
hijo de Dios debe alimentar en su corazón y, sin embargo, en
determinadas circunstancias llegar a ser un instrumento en las manos
de Satanás. Cada cual debe autoexaminarse profundamente en este
aspecto.

Saulo de Tarso iba en camino hacia Damasco perfectamente convenci-


do de que viajaba en cumplimiento de órdenes divinas y, ya sabemos lo
que le ocurrió. ¿No será que algún hijo de Dios también está "yendo
camino a Damasco" en ésto del uso de ciertos elementos ajenos a una
música religiosa pura tal como Dios la desea?

Examinemos algunas formas y aspectos bajo los cuales esta situación


puede ocurrir:

- Buscando el aplauso y la gloria personal cuando se realiza pre-


sentaciones en público.

- Integrando recursos musicales reconocidamente mundanos dentro


del acompañamiento de los así llamados himnos de alabanza.

- Buscando conseguir de parte de la audiencia una respuesta pura-


mente emocional que favorezca el deseo de poseer el material
promocionado por quienes ofrecen el recital.

- Imitando estilos interpretativos francamente reñidos con la naturaleza


23

del mensaje que pretende entregar la letra del canto,


produciendo con ello confusión entre quienes buscan la verdad a
través de medios musicales.

- Acomodando el estilo musical, decididamente mundano, a las cosas


de Dios con el pretexto de llegar a aquellos que no podrían ser
alcanzados por otro camino.

- Colocando letra de corte religioso a baladas, canciones rockeras, de


estilo jazzístico o cualesquiera melodía reconocida como música
popular, incluso ya editadas por sellos discográficos mundanos

- Empleando pistas de música popular conocidas por el público común


para colocarle un texto de contenido espiritual a fin de poder cantarlo a
un público religioso.

- Favoreciendo un ambiente festivalero en las presentaciones públicas y


pretender allí mismo que se está alabando a Dios.

Todo este panorama genera, entre otras, las siguientes reacciones:

- Un rechazo inmediato por parte de quienes entienden que la


música es de origen divino y, en cuanto a lo que alaba a
Dios, debe contener los ingredientes que faciliten a quienes escuchan su
acercamiento al cielo y un deseo de perfeccionamiento espiritual.

- Al poseer el material promocionado, los Jóvenes sienten que


pueden escucharlo con toda libertad en sus casas en cualquier
momento-incluido el Sábado-no importando el género de
música que contenga.

- Alienta el caudillismo y un cierto anhelo de imitar a los


"artistas" de la iglesia, ya que no es recomendable emular
o llegar a ser como los artistas mundanos.

Antes de terminar, vamos solo por unos momentos al monte Carmelo:

Allí está un valiente profeta testificando completamente solo frente a una


multitud idolátrica; allí están ochocientos cincuenta sacerdotes de Baal y
24

Asera listos para actuar. Pronto habría de ocurrir un trascendental


evento.

En un encuentro desigual estaba en el tapete nada menos que la


condición de Jehová como Dios. A l l í estaba Elias frente a todo un
pueblo que observaba con expectación los acontecimientos. Dos
altares, dos animales sobre ellos, dos sacrificios a punto de ser
ofrecidos, dos deidades, Jehová por un lado y Baal por el otro.
"¿Hasta cuándo claudicaréis vosotros entre dos pensamientos? Si
Jehová es Dios, seguidle; si Baal, id en pos de él". Así como Ellas
desafió al pueblo de Israel a que asumiera una posición definida en lo
relacionado al tipo de adoración y al Dios a quien finalmente iban a
adorar, de la misma manera hoy ese mismo desafío permanece.

El apóstol Santiago nos entrega los siguientes mensajes:

"¿No sabéis que la amistad del mundo es enemistad contra Dios?


Cualquiera, pues, que quiere ser amigo del mundo, se constituye en
enemigo de Dios. ¿O pensáis que la Escritura dice en vano: El
Espíritu que él ha hecho morar en nosotros nos anhela celosamente?
Pero él da mayor gracia. Por ésto dice: Dios resiste a los soberbios
y da gracia a los humildes. Someteos, pues, a Dios; resistid al diablo y
de vosotros huirá".

Recordemos que "el pecado está en aquél que sabe hacer lo bueno y
no lo hace".

Que Dios bendiga y ayude a su Iglesia a reencontrar las sendas an-


tiguas en lo relacionado con el uso de una música adecuada y de un
estilo acorde con nuestros principios institucionales. Que Dios
fortalezca a quienes, como Elias, están dispuestos a "ir al Carmelo" a
fin de colocar allí el nombre de Jehová en el pedestal que se merece.
Que nuestro culto racional sea ofrecido de una manera consagrada al
Señor "a la manera de Abel".

Recibamos, como última recomendación, lo que el apóstol Pablo es-


cribe en su epístola a los Colosenses cap.3, versículos 16 y 17:
25

"La palabra de Cristo more en abundancia en vosotros, enseñándoos y


exhortándoos unos a otros en toda sabiduría, cantando con gracia en
vuestros corazones al Señor con salmos e himnos y cánticos espirituales.
Y todo lo que hacéis, sea de palabra o de hecho, hacedlo todo en el
nombre del Señor Jesús, dando gracias a Dios Padre por medio de El".
26

LA MÚSICA ROCK Y SUS EFECTOS SOBRE EL ORGANISMO

En el mundo de hoy la música ha traspasado los umbrales de lo me-


ramente artístico para ingresar compulsivamente dentro del quehacer
económico de una sociedad que, en su imperioso deseo de sobrevivir a
todos los embates de tipo social, sociológico, ecológico y étnico, para
mencionar genéricamente solo algunos aspectos, se ha valido de este
poderoso medio de convencimiento masivo que es la música.

Basta solamente encender el televisor o manipular el dial del receptor


de radio para comprobar de inmediato cómo a través de jingles o
mensajes cantados, en combinación con los más sofisticados medios
tecnológicos, se bombardea las mentes del mundo consumidor con la
propaganda que promociona la más variada gama de artículos de
consumo.
Se ha clasificado a la sociedad actual como una sociedad consumista,
la que depende para su subsistencia de una intrincada madeja de
mensajes comerciales, cuyos patrocinadores emplean para su difusión
cifras siderales de dinero.

La industria de la comunicación se ha valido de la música, en su calidad


de lenguaje universal, para llegar a cada oído, a cada ojo y a cada
mente con la no escondida pretensión de controlar cada gusto, cada
hábito, cada costumbre, en fin, la vida toda de la sociedad moderna
de hoy .

No sería raro afirmar que la situación que estamos exponiendo ya no


constituye una pretensión por parte de los medios de comunicación
hacia las masas. Estamos frente a la realidad de una meta lograda
puesto que es innegable la afirmación: somos esclavos de la
información que sustenta la forma de vida que hemos escogido
nosotros mismos.

¿Cómo es que se ha llegado a producir esta verdadera invasión de la


mente y el cuerpo de las personas?
27

Por mucho tiempo el mundo consumidor permaneció ignorante acerca


de los procedimientos utilizados por la propaganda para convencerles de
las bondades de tal o cual producto. Simplemente cada cual
compraba totalmente convencido de que sus adquisiciones eran el
resultado de una decisión soberana e individual. Hoy se conoce,
diríamos que casi en detalle, los métodos que usan las grandes
empresas de promoción para empujar a los consumidores a adquirir
sus mercaderías. Emplean para ésto medios y procedimientos basa-
dos en ciertos principios científicos de orden psicológico y fisiológico.

Antes de hacer referencia a los efectos que produce la música en


nuestro organismo, mencionaremos algo acerca de las funciones del
Sistema Nervioso.

El Sistema Nervioso se divide en tres partes:

1.- El Sistema Nervioso Autónomo: Se encarga de supervisar aque-


llas funciones que nosotros no podemos controlar de una manera
consciente.

2.- El Sistema Nervioso Periférico: Está compuesto por los Nervios,


que son los conductores que nos comunican con el mundo
exterior.

3.- El Sistema Nervioso Central: Está compuesto por el Encéfalo y


Médula Espinal o Espina Dorsal, la cual está protegida por la
Columna Vertebral.

El Cerebro está situado por encima del tronco encefálico y


constituye la mayor parte del Encéfalo.

La superficie del cerebro está compuesta por la substancia o


materia gris, que tiene un grosor de 2 a 4 mm y se la denomina
corteza cerebral; incluye millones de neuronas dispuestas en seis
capas. Por debajo de la corteza se encuentra la llamada
substancia o materia blanca.

Encontramos en el Encéfalo dos órganos que son sumamente


28

importantes:

1 . - El Tálamo que es una estructura de forma ovalada y voluminosa


situada arriba del mesencéfalo. Es un núcleo muy importante,
que recibe todos lo impulsos sensitivos, fibras de la corteza
cerebral, de la médula espinal y de otros núcleos. Forma una
importante estación de relevo y selecciona los impulsos aferentes que
le llegan a niveles inferiores, para mandarlos a las áreas
especializadas de la corteza cerebral.

2.- El Hipotálamo qué forma junto con el tálamo una sección encefálica
llamada diencéfalo. Está protegido por el hueso esfenoides y de
manera indirecta por la llamada silla turca de este mismo hueso.
Está situado debajo del tálamo; forma el piso y la parte inferior del
tercer ventrículo.

Veamos cómo funcionan estos dos órganos:

El tálamo está comparado con una gran central telefónica, con muchos
interruptores e integradores. Tiene como función importantísima la de
ser una central de relevo o de reimpulso de las corrientes sensorial es
recogidas por los sentidos de la visión, de la audición, del olfato, del gusto y
del tacto.
Cuando nosotros escuchamos algo a través del Nervio Auditivo, ese
sonido pasa primero por el tálamo y este lo envía al cerebro donde es
analizado y devuelto.

Se han hecho algunos experimentos utilizando el cerebro de ratas, al cual


se le ha dado choques eléctricos en el tálamo. Ellas sienten sensaciones
muy exageradas de placer o de dolor.

El tálamo no solamente transmite la información que va desde los


sentidos hacia el cerebro, sino también la que viene ya desde el
cerebro hacia los órganos.

El hipotálamo es mucho más pequeño que el tálamo, sin embargo tiene


funciones muy importantes. Nombremos algunas de ellas.
29

1.- Regula e integra las funciones del sistema nervioso autónomo,


igualmente estimula al músculo liso, regula la rapidez de la
contracción del músculo cardíaco y las secreciones de muchas
glándulas.
A través del sistema nervioso autónomo, el hipotálamo controla las
actividades viscerales, el movimiento de los alimentos por el tubo
digestivo y la contracción de la vejiga.

2.- Recibe impulsos sensoriales de las vísceras.

3.- Es el intermediario principal entre el sistema nervioso y el endocrino,


que son los dos sistemas de control más importantes del
organismo.

4.- Es la zona de integración de los fenómenos emocionales. Por


ejemplo, cuando la persona tiene miedo, del hipotálamo salen
impulsos que aceleran el ritmo cardiaco.

5.- Guarda relación con la ira y la agresividad.

6.- Regula la temperatura corporal.

7.- Controla el sueño y la vigilia mientras dormimos.

8.- Controla también las glándulas de secreción interna, espe-


cíficamente la pituitaria o hipófisis. Con sus hormonas la
hipófisis regula tantas actividades corporales, que se le ha
llamado "glándula maestra"; está unida al hipotálamo por medio
del infundíbulo, que tiene forma de tallo.

¿Qué tiene que ver el tálamo y el hipotálamo con lo que escuchamos?

Cuando mencionamos el tálamo dijimos que por allí cruzan todos los
impulsos que van a través de nuestros sentidos y uno de esos im-
pulsos es lo que escuchamos. El sonido viene y se percibe a través de
la oreja, penetra hacia el oído y es captado por el nervio auditivo, quien lo
envía directamente al cerebro, pero antes de ir al cerebro pasa por el
tálamo primero. Al pasar por allí es reenviado hacia el cerebro donde es
30

analizado y luego devuelto hacia atrás vía hipotálamo, entonces


podemos percibir claramente ese sonido.

Recordemos que a través del Tálamo se filtran todos los mensajes de


los sentidos, de lo que nosotros vemos, de lo que escuchamos, etc.
Nuestros nervios son muy frágiles y captan rápidamente el sonido.
Sonidos incesantes, repetitivos y graves provenientes de tambores por
ejemplo, producen en nuestro cuerpo una especie de hipnotismo o de
trance.

Otra de las funciones del Hipotálamo es controlar las glándulas y


órganos sexuales.

Veamos algunos ejemplos de interacción entre música y sexo:

La música romántica. Esta música debido a la conformación y a la


forma en que está estructurada pone a funcionar inmediatamente las
glándulas sexuales. Como consecuencia de esa acción sobre este tipo
de glándulas, sobrevienen ciertas emociones que envuelven a la
persona que está escuchando.

La música jazzística. Los historiadores aseveran que Nueva Orleans fue


el centro más importante para el desarrollo de la música popular que
luego se conoció como jazz. Esta palabra en su sonido fonético, se
asocia con el acto sexual. Así lo afirman algunos diccionarios
americanos.

Hablemos ahora en particular de la música rock:

La música rock, según investigadores, fue creada para producir una


desinhibición del control mental, en otras palabras, el individuo actúa
sin poder ejercer un control consciente de su conducta.

En la música rock, como en el jazz, predomina el ritmo. Las guitarras


eléctricas son tan importantes como la batería para crear un énfasis
nuevo en el ritmo, motivando con ello una respuesta corporal . En
suma, el bajo electrónico no es otra cosa que el reemplazante de los
viejos tambores africanos.
31

La intelectualización del jazz y los cambios sociales durante el


comienzo de la década del 50 ayudaron al desarrollo del rock and roll.
Esta música tuvo una gran acogida entre los jóvenes que querían más
estímulo físico y sexual y que el texto fuera más convincente con su
mensaje. Tanto la palabra jazz como la denominación rock and roll
tienen una connotación sexual.

El aumento en el uso de las drogas, la así llamada revolución sexual,


el estilo de vida "hippie", todo encontró su expresión en la música rock.
A través de los nombres de sus grupos como también de la letra de
sus cantos, las estrellas de rock abiertamente blasfeman el nombre de
Dios. Hasta la adoración satánica fue sugerida y pregonada por la
música rock. En síntesis, la música rock se ha convertido en el medio por
el cual los que la ejecutan pueden no sólo proclamar o abandonar las
restricciones morales sino también expresar desagrado por todas las
cosas que los cristianos consideran como buenas: Dios, la familia
cristiana y la vida organizada.

La música que contiene un "beat" demasiado sobresaliente no puede


enaltecer ningún mensaje espiritual debido a que invita a un tipo de
movimiento corporal que no está de acuerdo con la decencia. Una
música dominada por el ritmo apela al cuerpo, a la naturaleza humana,
más que a lo espiritual.

Últimamente se ha hecho el siguiente experimento:

Se divide un grupo en dos partes. Se pide a todos que canten una


melodía conocida mientras que se percute con las manos el tiempo
fuerte de cada compás. Una vez que ambos grupos se hayan
familiarizado con la actividad, se pide a uno de los grupos que, mientras
cantan, en vez de percutir con las manos en el tiempo fuerte, lo
hagan en el tiempo débil (debe elegirse una melodía en 4/4). El otro
grupo solamente canta y observa la reacción de quienes cantan y
percuten a la vez. Luego de un momento se invierten los papeles. Cuando
esta actividad se ha realizado unas dos o tres veces, se le pide a dos o
tres de cada grupo que informe lo observado.

En la casi totalidad de los casos la opinión es unánime: Los


32

participantes de aquel grupo que, en su momento, cantó mientras percu-


tía los tiempos débiles (2 y 4) de cada compás, la melodía fue di-
luyéndose poco a poco hasta que sólo algunos cantaban mientras la
mayoría se dedicó sólo a golpear las manos y con evidentes muestras de
satisfacción corporal.

Este experimento muestra de manera concluyente que el organismo


humano acoge con mayor facilidad los estímulos rítmicos, comparado
con los estímulos melódicos y, dentro de aquéllos, los tiempos débiles o
secundarios pasan a influir primariamente sobre la estructura físico-
corporal del organismo humano.

Esta es precisamente la característica sobresaliente de la música pop y


de la música rock, vale decir, el "beat" se acentúa en los tiempos
débiles de cada compás.

Existen dos formas básicas de rock: el "soft-rock (rock suave) y el


"heavy-metal" (metal pesado). El suave se caracteriza por ser
melódico, con ritmo y pulsaciones ("beat") menos marcados; es menos
ruidoso y violento que el pesado, caracterizado por su ritmo fuerte,
veloz y compulsivo, por sus estridencias instrumentales, por la letra
cantada casi a los gritos y especialmente por los efectos sonoros
repetitivos que producen un notable efecto hipnótico.

Las dos formas -el suave y el pesado- son medios utilizados por el
enemigo de Dios para apartar a muchos jóvenes del gusto por las cosas
de valor eterno. En el caso del rock suave la penetración satánica es
menos abierta y más sutil -aunque hay excepciones-, pero es
igualmente peligrosa.

En el aspecto sexual, las vibraciones de las frecuencias bajas, gracias


a la amplificación del bajo que se añade al efecto del compás, producen
una respuesta directa en el fluido cerebral espinal. A su vez, ese fluido
enerva directamente la glándula pituitaria que controla la secreción de
hormonas. El resultado total es el desequilibrio de las hormonas
sexuales y de la adrenalina y un cambio radical en el nivel de insulina
en la sangre, de tal forma que las diferentes funciones que controlan
las inhibiciones morales caen por debajo de los límites de tolerancia o
33

son neutralizadas completamente.

El término "rock and roll" fue acuñado por un diskjockey de la ciudad de


Cleveland que lo tomó prestado del ghetto negro donde era usado
como descripción de una manifestación sexual. No se puede negar
la estimulación sexual del rock. Jóvenes que eran adictos al rock
han confesado cuan fácil era seducir a una mujer después de un
concierto o mientras estuvieron bailando.

Una encuesta realizada en 1977 en escuelas públicas del norte del


estado de Florida en EE.UU., reveló que de 1.000 muchachas solteras
que resultaron embarazadas, 984 concibieron mientras escuchaban mú-
sica rock.

Respecto a los efectos psicológicos se ha demostrado de forma


incontrovertible que no es posible escuchar por un tiempo prolongado
la música rock sin pasar por un trauma psicológico profundo.

En los análisis médicos y psiquiátricos, se han identificado los


siguientes efectos nocivos producidos por la música rock:
1.- Modificación de las reacciones emocionales, que van desde la
desilusión hasta la violencia descontrolada.
2.- Pérdida del control de la capacidad de concentración, de la
ref1exión y de la conciencia.
3.- Disminución del control de la inteligencia y la voluntad, sujeta cada
vez más a los impulsos del subconsciente.
4.- Sobre-excitación del sistema nervioso sensor produciendo euforia,
poder sugestivo, histeria y hasta alucinaciones.
5.- Serios problemas en la memoria., en las funciones cerebrales y en la
coordinación neuro-muscular.
6.- Un estado hipnótico cataléptico que reduce a la persona a una
especie de zombie o robot.
7.- Un estado depresivo que puede ir de la extrema neurosis a la
psicosis, especialmente cuando se combinan la música y las
drogas.
34

8.- Tendencia al suicidio y al crimen, acentuada considerablemente por


escuchar diaria y prolongadamente la música rock.
9.- Auto-mutilación, auto-inmolación y auto-castigo, especialmente en
conciertos donde asiste mucha gente.
10.- Impulsos destructivos incontrolables, vandalismo y revueltas que
se dan después de los festivales o concierto de rock.
El rock no es un pasatiempo inofensivo; es una droga más mortal que la
heroína, la cual está envenenando las vidas de nuestros jóvenes.

La inteligencia, la voluntad o libre albedrío y la conciencia son


sometidos a un asalto mediante estímulos ritmo-melódicos. La capa-
cidad de discernimiento y resistencia disminuye enormemente y en su
mayor parte es neutralizada.

En cuanto a los mensajes subliminales:

Las investigaciones realizadas en los últimos años demuestran que


existen mensajes subliminales en el cine, en la televisión, en la radio y
hasta en revistas y otros medios escritos. Estos mensajes se transmiten
principalmente a través de la publicidad y la música, los cuales
bombardean diariamente el subconsciente de niños, jóvenes y adultos.

Subliminal significa por debajo del "limen", etimología latina que se


traduce como umbral. La publicidad comercial transmite mensajes
visuales o auditivos físicamente débiles, pero poderosos en sus
rasgos que sus respectivos mercados reciben sin saber que recibieron.
Los textos y las imágenes de la publicidad subliminal conectan
directamente con los impulsos del inconsciente para colocar el producto
en los niveles de preferencia de consumo del comprador. La
estimulación subliminal tiene efecto sobre las actitudes logrando que
nuestras preferencias se orienten en la dirección del subestímulo
ocultado. Hay mensajes publicitarios visuales que no pasan por la
conciencia del hombre y que quedan escritos en el cerebro humano
sin posibilidad de que la inteligencia ejerza su capacidad crítica, porque
la eficacia de la publicidad subliminal viene determinada por la rapidez
con que se emite el mensaje que contiene el anuncio.
35

En 1957 se realizó un experimento en un cine de Ft.Lee, New Jersey,


Estados Unidos, por el psicólogo James Vicary cuyos resultados
establecerían la introducción de una técnica de consecuencias
impredecibles.
Mientras se proyectaba la película "Picnic" fueron insertadas las
palabras "¿Tienes hambre?, come Pop Corn y bebe Coca-Cola".

Los mensajes aparecían cada cinco segundos a una velocidad de tres


milésimas de segundo y que de ningún modo podían ser percibidas en
la exhibición de la película. Al ser tan breves dichos mensajes fueron
descritos como "subliminales" ya que se encontraban por debajo del
umbral de percepción, por lo cual no podían percibirse de forma
consciente.
Durante las seis semanas que duró el experimento, las ventas de Pop
Corn aumentaron en un 57.7% y las de Coca-Cola en un 18.1%

El 10 de Junio de 1956, el London Sunday Times ya había publicado el


artículo "Ventas a través del subconsciente", atribuidas a la publicidad
de una marca de helados, también en Nueva Jersey. A partir de ese
experimento las técnicas subliminales se perfeccionaron a niveles
insospechados.

Para grabar mensajes subliminales se usan estas técnicas:

- Se modula la frecuencia al utilizar frecuencias más bajas (de


14 a 20 ciclos por segundo).

- También se usan altísimas frecuencias (cerca de los 17.000 a


20.000 ciclos por segundo). Se necesita que los aparatos de
grabación tengan una velocidad variable.

El oído humano puede captar frecuencias sonoras ubicadas entre 20 y


20.000 vibraciones por segundo. Esto se debe a que el oído interno
posee dentro de la cóclea o caracol aproximadamente unos 18.000
filamentos microscópicos llamados receptores acústicos. Estos
filamentos "resuenan" con cada una de las frecuencias sonoras. Si
descendemos por debajo de las 20 vibraciones por segundo se entra
en el ámbito del infrasonido y si por el contrario superamos las 20.000
36

estaremos en la región del ultrasonido, en ambas situaciones habremos


generado frecuencias fuera del alcance del oído humano. Hoy en día es
cosa ya común el empleo de distintos recursos del ultrasonido en la
medicina moderna.

En el caso del ojo humano, la capacidad de percepción de los colores


está ubicada entre los 428 millones de vibraciones por segundo para el
color rojo y los 750 millones para el color violeta. Si descendemos por
debajo de la frecuencia del rojo obtendremos el infrarrojo y si superamos
la frecuencia del violeta obtendremos el ultravioleta. Estos recursos
también tienen muchas aplicaciones en la medicina moderna. Al
igual que ocurre con el infrasonido y el ultrasonido habremos obtenido
colores que el ojo humano no puede percibir. Tampoco es posible para
el ojo captar conscientemente objetos o imágenes que se desplacen a
altas velocidades. Tanto el ojo como el oído convierten la información que
reciben del exterior en señales electroquímicas las cuales son enviadas
al cerebro.

Los límites descritos anteriormente en relación a las capacidades de


percepción del ojo y el oído humanos no implican necesariamente que
los sonidos o imágenes que trasciendan ese ámbito no tendrán un
efecto en el cerebro y por ende en la psiquis del individuo. Por el
contrario, para el empleo del efecto subliminal se procesan los mensajes
con técnicas que los llevan a trascender dichos límites para así impedir
que puedan ser captados y procesados de manera consciente, de esta
forma las personas pueden ser inducidas a "obedecer" ciertas órdenes o a
asumir patrones de conducta específicos.

En el aspecto visual se recurre a distintos procesos como colocar varias


imágenes unas sobre otras de manera que quede disimulada la imagen
real que porta el "mensaje". También puede ser mostrando dicha
imagen durante sólo unas fracciones de segundo.

En el aspecto sonoro pueden emplearse varias técnicas, una de las


cuales consiste en grabar un mensaje que luego es reproducido al
revés pasando la cinta de la grabación en dirección contraria a la cual
fue grabada originalmente. Por ejemplo, en una ocasión se realizó un
experimento en el cual le fueron colocados a una persona una serie de
37

aparatos para medir todos sus signos vitales. Mientras esta persona
dormía se reprodujo una grabación con distintos nombres y al
escucharse el nombre de la persona dormida se registró una reacción
notable en sus signos, luego se reprodujo el mismo nombre con la
grabación al revés y se registró exactamente la misma reacción. Esto
demuestra que aunque la persona ni siquiera estando despierta hubiera
reconocido su nombre de forma consciente al escucharlo al revés, aún
estando dormida el mensaje se recibía y producía la misma reacción
que si se hubiese percibido de forma consciente.

Otra técnica consiste en transformar la voz que porta el mensaje por


medio de instrumentos electrónicos o "cubriéndola" con efectos que
muchas veces suelen ser sonidos de mar o de viento.

Al hacer llegar al cerebro una orden o mensaje que no puede proce-


sarse de manera consciente, la persona se verá imposibilitada de
evaluarlo para poder tomar una decisión voluntaria acorde con sus
principios. En otras palabras, es posible ir condicionando amplios
sectores de la sociedad por medio del bombardeo sistemático de
"órdenes" o "mensajes" que lleguen directamente al cerebro de las per-
sonas sin que éstas sepan conscientemente lo qué están recibiendo.

Otra técnica que se usa para enviar mensajes subliminales es el uso del
estroboscopio. Debido a este aparato es posible acelerar a voluntad el
cambio de luz a oscuridad, lo cual provoca un debilita-miento del
sentido de orientación, del juicio y de los reflejos. Se sabe que la luz
del estroboscopio provoca los siguientes efectos:

- Cuando la variación de luz a oscuridad varía de seis a ocho


veces por segundo, se pierde la percepción de profundidad.

- Cuando la frecuencia de alteración alcanza a 25 veces por segundo, se


crea la interferencia en las ondas alfa producidas por el cerebro,
condición vinculada a la pérdida del período de concentración.

- Cuando la frecuencia se aumenta más por un período de tiempo


largo, se pierde toda capacidad de control.
38

Actualmente se ha generalizado bastante el empleo de estas técnicas en


los medios de comunicación, principalmente en la propaganda co-
mercial, campañas políticas y en algunos géneros musicales.

Quienes controlan el rock estudiaron profundamente las técnicas de la


transmisión de mensajes subliminales, es decir, la capacidad para llegar a
la persona que escucha sin que su conciencia se percate de ello. Ese
mensaje no lo perciben ni los oídos, ni los ojos, ni los otros sentidos,
sino que penetra profundamente en el subconsciente del que escucha,
quien se encuentra indefenso frente a esta agresión.
Algunas canciones de música rock grabadas en inglés o en castellano
contienen mensajes ocultos o subliminales percibidos al ser escu-
chados al revés; la mayoría tiene una clara naturaleza satánica.
Los mensajes han sido colocados intencionalmente por lo tanto la voz
es casi natural al revés, pero otros están allí sin que sus autores lo
supieran o hubieran intentado ponerlos.
La voz humana está bastante distorsionada, pero no lo suficiente como
para que no puedan entenderse los mensajes.

Las personas que no saben el idioma inglés y escuchan canciones de


rock en inglés, igual reciben los mensajes subliminales enmascarados
que aunque no son captados por la mente consciente, si trabajan
desde el inconsciente sin que necesitemos entender o no el inglés.

Si sumamos el efecto del sonido del rock con el del estroboscopio, todas
las barreras morales son devastadas; el individuo pierde todos sus
mecanismos de defensa naturales.
Muchos casos de problemas de comportamiento en las escuelas o en
los hogares e incluso intentos de suicidio por parte de jóvenes
adolescentes, están asociados con la exposición frecuente a men-
sajes subliminales que vienen en discos, videos musicales o películas.

No se trata simplemente de unos efectos sonoros curiosos en medio


de una canción o de una imagen extraña en la portada de un disco,
video o película. Este problema requiere la seria atención de padres y
educadores, ya que uno de los sectores de la población al cual están
dirigidos estos mensajes son nuestros niños y adolescentes.
39

Es necesario tener en cuenta que no existe actualmente ninguna


institución pública ni privada que tenga a su alcance los recursos
técnicos y legales para descubrir, evaluar y reglamentar los mensajes
subliminales que constantemente se introducen en los anuncios
comerciales, las canciones, los videos, las películas y otros medios de
comunicación. Por lo tanto es necesario que ayudemos a crear
conciencia de que una de las formas más prácticas para enfrentar
esta situación es no exponernos constantemente a aquellos medios
de comunicación de los cuales sospechemos que incluyan mensajes
subliminales, por ejemplo, imágenes, anuncios, películas, canciones o
cualquier otro medio de comunicación que contenga un alto grado de
violencia, sadismo, pornografía o cualquier otra forma denigrante o
atentatoria contra la dignidad del ser humano y las más elementales
normas de sana convivencia.

Cabe preguntarse si no estamos quedando, como seres racionales que


somos, a la deriva y en una completa indefensión del derecho más
sagrado que tenemos, a saber, la facultad de elegir todo aquello que
nos hace bien, de aquello que identifica al ser humano con el Ser
Infinito que lo creó.

La única alternativa posible para enfrentar con éxito la verdadera


invasión de estímulos audiovisuales perniciosos que experimentamos
hoy, está a través de una reeducación del gusto musical, en donde no
debería quedar ajena la influencia de lo moral y lo ético.

Recordemos que la Música, por último, es de origen divino. El hecho


de que ésta haya sido desvirtuada a niveles degradantes no es otra
cosa que una señal más de que los tiempos en que vivimos son
solemnes y pronto, lo deseamos vehementemente, el mundo y todo lo
que le rodea contemplará y vivirá el gran cambio que Dios ha
prometido a todo aquél que crea en El.
Si en el cielo hemos de continuar alabando al Señor por los siglos
eternos ya es tiempo de ir revisando lo que cantamos y lo que
escuchamos a fin de adecuar nuestra alabanza aquí en la tierra,
antes de producida la gran transformación para participar
posteriormente en aquel gran Coro que interpretará el “himno de
40

Moisés y del Cordero”.

BIBLIOGRAFIA

ALEJANDRO, José Efecto Subliminal, Técnica y Forma 1991

BRUNO, Jorge M. Música Rock: Rescatemos a nuestros


Jóvenes

DIHIGO, M. Anatomía Humana

GASPARI, Antonio Las Raíces Satánicas del Rock Revista


Benengeli/Primer trimestre 1988

LENO, Lloyd La Música y el Cristiano

GAYTON Fisiología humana

TESTUT, L. Anatomía humana


41

LA MÚSICA EN EL CULTO

¿Estamos realmente adorando a Dios?

Por Jeffrey K. Lauritzen

Estado actual de la Música en la Iglesia

Para las cosas comunes de cada día, Dios se comunicó con


el hombre de una manera simple. Para aquellas cosas
más profundas en las cuales el hombre piensa, Dios
empleó palabras amables para revelarlas. Para lo alto, lo
sublime y lo insondable no hay palabras; para ello Dios dio
al hombre la música, el propio lenguaje del alma.
(De autor desconocido)

Howard Hanson, compositor americano y por mucho tiempo Director de


la Eastman School of Music, dijo una vez:
La música es curiosamente un arte sutil con innumerables y muy va-
riables connotaciones emocionales. Está hecha de muchos ingredien-
tes y, de acuerdo a las proporciones de estos componentes puede
aliviar o vigorizar, ennoblecer o vulgarizar, puede ser filosófica u
orgiástica. Infunde poder tanto para el bien como para el mal.(1)

La música fue idea de Dios-un frondoso regalo para los seres huma-
nos-la cual ha enriquecido nuestra vida desde los comienzos. En el
Antiguo Testamento, Dios hizo acompañar música y culto como una
unión gloriosa la que permanece estable hasta hoy. La cristiandad ,
más que todas las otras religiones del mundo, ha contribuido a la gran
música del universo. Dios toma muy en serio la música en la Iglesia,
pero ¿lo sigue haciendo cada cual en la Iglesia hoy?

La mayoría de los observadores concluyen en que la música en las


iglesias norteamericanas está mezclada. Por un lado, la música está ex-
perimentando una aceptación sin paralelo. La extraordinaria cantidad
de música sacra que se ha compuesto, publicado y grabado es
asombrosa. Nuevos himnarios de mucha profundidad, amplitud y equi-
42

librio están apareciendo a través de muchas casas publicadoras. Tal


crecimiento y vitalidad de la música de iglesia es positivo y estimulante.
Por el otro lado, hay muchos aspectos de la música de iglesia que
no son tan estimulantes o positivos. Parece ser que una buena
cantidad de música sacra contemporánea está involucrada más con
valores seculares y comerciales que con principios espirituales. La
música para la iglesia a menudo se presenta estando programada
para satisfacer el gusto del público a expensas de un ministerio
equi1ibrado. Muchos de los postulados y objetivos no bíblicos de la
industria del entretenimiento están erosionando cada vez más el ya
desdibujado concepto de ministerio a través de la música. Sumado a
ésto, subyace una tendencia hacia lo trivial y superficial lo que
contribuye a aumentar el desprecio por lo substancial y profundo en la
mayoría de la música sacra de hoy. Pocas personas en la iglesia
consideran la música de una manera suficientemente seria como para
asociarla con lo bíblico y lo teológico. Esa música permanece aún
como un área importante dentro de la vida de la iglesia y que no ha sido
tocada por la teología bíblica, situación que debería hacer reflexionar a
los adventistas del séptimo día.

Siendo que el servicio de culto en la iglesia involucra la música entre la


cuarta parte y la mitad del tiempo, debería ser de vital importancia una
revisión profunda sabia y con oración. La música forma parte del culto
a Dios en el cielo y está determinada para elevar el alma y despertar
un espíritu de devoción y gratitud; es un acto de adoración tan
importante como la oración misma.(2) Siendo así, simplificar la música
sacra "sobreactuada" no es suficiente. Ya que el objetivo último del
culto es glorificarle a El, es más la alabanza a Dios que la delicia del
hombre, lo que debería ser nuestro objetivo. Durante el culto, Dios es
la audiencia.

A pesar de esta elevada norma, sin embargo, dos corrientes han


emergido en lo relacionado con la música de la iglesia, ninguna de las
cuales tiene soporte bíblico. La primera de ellas, fundamentada en el
gusto musical, tiene su máxima meta en conseguir el placer de la
audiencia. "La buena música", por definición, está comunmente
equiparada con lo familiar. La solidez del material textual permanece
al servicio de los sonidos musicales, y en la medida que la mayoría de
43

la congregación guste de este sonido, la música es considerada


apropiada. Este apronte, quizás inconsciente, ve a la música
primariamente como una forma de entretenimiento "sagrado", y por lo
tanto, un camino para escapar de la realidad. Hay lugares para
entretenerse, pero, ¿es realmente apropiado hacerlo en un culto
dedicado a Dios?

La segunda instancia establece que la música expresa valores e


ideales culturales. Aquí lo puntual es la preservación de la herencia y
los tesoros del arte musical. Este punto de vista, sin embargo,
también es defectuoso. La música usada en el culto como un fin en sí
misma-por amor al arte-es teológicamente de poco peso. Cada cosa en
el servicio de culto debe estar fundamentada en algo más grande que
la cosa misma. El rol de la música en la iglesia no debe ser diferente
de la misión de la iglesia en sí: el ministerio del Señor, el cuerpo de
Cristo y el mundo por el cual Cristo murió.(3)

Elena G.de White ha dicho que "el canto debe ser dirigido a Dios, de
otra manera no es más que una exhibición del yo.... La música no
existe para beneficio propio sino, cual oración, es un medio de
aproximación a Dios".(4)

El propósito de este artículo es sugerir la existencia de usos erróneos


identificables en la música de iglesia que violan el objetivo de un culto
dedicado directamente a Dios. Estos usos erróneos han prevalecido
particularmente en los círculos carismáticos por algún tiempo y ahora
buscan acrecentarse dentro del culto adventista. A fin de desarrollar
esta afirmación, examinaremos algunos estilos de música popular
religiosa que prevalecen; además el proceso por medio del cual la
música es percibida en el cerebro, y cómo se relaciona con el
problema en cuestión; además se revisará algunas normas y criterios
para el uso de la música en la iglesia de hoy.

Usos y estilos de música popular en la actualidad

Algunos sostienen la posición de que cualesquier estilo de música, con


tal que contenga un texto sagrado puede usarse dentro del culto. Los
44

medios de comunicación de masas han condicionado a tal punto al


público con una dieta de ritmos rockeros que ninguna cosa parece ya
ser considerada como suave o dura para muchos. Una obsesión por
revestir toda la música "gospel" con una suerte de ritmo rock parece
haberse difundido entre muchos de los actuales cantantes de música
sacra.
Algunos de nuestros músicos adventistas están adoptando estilos de-
sarrollados por el mundo, y muy a menudo, los ritmos rockeros han
pasado a ser la música de la Iglesia —todo ello realizado en nombre de
una buena comunicación— a fin de alcanzar a la gente donde ella está.

Un escritor muchos años atrás afirmó:

Ha habido un considerable furor por la música gospel "tipo jazz" en


las iglesias del campo durante los últimos años. Esto es en muchos
aspectos algo diabólico. Como daño menor, coloca a la iglesia en un
ambiente barato y desprovisto de expresión musical artística. El mal es
mayor que ésto, porque la música barata está aliada en forma natural
con textos banales, faltos de cuidado e inconsecuentes, cuando no
absolutamente triviales y sentimentaloides.(5)

La mayoría de la música popular de hoy, es, por definición rockera.


Básicamente el rock es una estructura musical repetitiva, con patrones
rítmicos establecidos y que proyecta toda su influencia a través de la
acentuación de los tiempos débiles de los compases más que en los
fuertes. Esta característica no está limitada solamente al rock duro.
Mucho del rock suave como asimismo de la música popular ambiental
también comparten esta definición. Volúmenes de sonido a altos
niveles -a menudo sobrepasando los cien decibeles-es otro aspecto de
la música rock y fuente de poder e influencia.(6) Poderosos sets de
tambores y baterías, guitarras eléctricas, sintetizadores y elaborados
sistemas de amplificación, están en completo uso, los cuales intensifican
enormemente el efecto rítmico y ruido de la música; todo e l l o está
marcando dramáticas rutas dentro del culto cristiano, que, como está
siendo producido comercialmente por medio de grabaciones de
pistas, resulta fácil la introducción del idioma rockero.

A través de ritmos repetitivos y efectos orquestales cuidadosamente


45

calculados puede crearse una experiencia física "movida" envuelta


dentro de una fuerte carga emocional.

Irwin Sonenfield escribe:

Por algún tiempo, el control de las masas a través de la tecnología


electrónica ha jugado un rol principal en la música popular. Ins-
trumentos eléctricos junto con la amplificación, manipulación y sonido
sintetizado están casi inevitablemente asociados con nuevos
sonidos. Estos factores son más que herramientas, son factores de
control.
Ellos determinan la naturaleza de la música y sus efectos. El poder del
alto watagge y los decibeles han sacado el mejor partido. Intensas
experiencias de orden físico y psíquico pueden ser evocadas por ese
medio. Se conjuga una alianza y subyugación del poder tecnológico y
sobrehumano sobre las sensaciones de pena y éxtasis las cuales
llegan a unirse místicamente.(7)

William Schaefer observó, "Es innegable el hecho de que el rock tiene


poder hipnótico. Ha arrastrado a millones de gente joven de todo el
mundo transformando sus vidas".(8)

Obviamente, entonces, cualquier uso de pistas grabadas con música


rock dentro del culto a Dios por lo menos reclama un alto grado de
discernimiento. Una respuesta emocional o física nunca debe ser
confundida con una respuesta espiritual. ¿Podría confundirse una
manifestación espiritual con otra de orden emocional para ser ésto una
muestra de falsa lluvia tardía? ¿Podría ocurrir ésto dentro de las iglesias
adventistas de hoy que buscan promover esta nueva música en sus
cultos? La aparición de respuestas emocionales y físicas es una de las
consecuencias naturales de la música rock contemporánea. Aunque es fácil
ver los peligros potenciales al utilizar estos estilos en la música de la
iglesia, no obstante un abarcante nuevo género de música se ha
desarrollado, mucho de lo cual contiene todos los elementos del rock
secular. Tal música usada así se ha dado en llamar " rock cristiano",
pero los medios de control masivo lo han bautizado como "música
cristiana contemporánea", lo cual puede producir una mayor aceptación
y uso en las iglesias. Por largo tiempo ha formado parte del culto
46

carismático y está entrando ahora en el culto adventista entre aquellas


congregaciones que han adoptado algo así como estilos de culto
"informal es". Un uso paralelo de lo popular con estilo rockero y cierto
grado de "emocionalismo" acentúa lo teatral. Muchos cantantes
encuentran que la mayoría de la música religiosa contemporánea evoca
aspectos interpretativos teatrales "a lo Broadway", en donde lo físico y lo
Vocal están íntimamente relacionados. Las religiones pentecostales de
hoy han sido líderes en la promoción de este tipo de interpretaciones
físicas-emocionales-teatrales, y se ha descubierto que los adventistas
están llegando, en forma creciente, a sentirse influí-dos para considerar
tal cosa como buena. Puede preguntarse, ¿cuál es el objeto de la
atención en este tipo de culto, Dios o quien interpreta los cantos?

Notemos esta advertencia de Elena G.de White:

Ni una jota ni un tilde de nada que sea teatral debe ser considerado en
nuestra misión. El plan de Dios es tener un modelo sagrado, celestial.
Que cada cosa conectada con la entrega del mensaje para esta hora
lleve este molde divino. Que nada de naturaleza teatral sea permitido,
porque esto podría contaminar la santidad del trabajo.(9)

Muchos intentan justificar estos medios populares porque han tenido un


éxito aparente. ¿Qué hace que alguien se sienta impulsado a decir que
un programa tiene amplia popularidad y audiencia, aún cuando aparezca
éste en abierta violación con los principios?

Elena G.de White de nuevo ofrece esta valiosa afirmación:

Si Ud. rebaja la norma a fin de asegurar popularidad y crecimiento en


los números, para así incrementar una forma de gozo, Ud. está
demostrando una gran ceguera. Si los números fueran una evidencia
de éxito, Satanás podría reclamar la preeminencia, ya que en este
mundo, sus seguidores son la inmensa mayoría. Es el grado de poder
moral que penetra en el colegio, lo que constituye un test para medir su
prosperidad. Es la virtud, la inteligencia y la piedad de la gente que
componen nuestras iglesias, no la cantidad de ellos, lo que podría ser
una fuente de gozo y agradecimiento.(10)
47

Que nunca tengamos que "rebajar los niveles de la verdad a fin de


conseguir conversos, sino más bien llevar a los pecadores hacia la alta
norma de la ley Se Dios."(11) Job pregunta: ¿"Quién hará limpio al
inmundo? Nadie" (14:4); y el sabio agrega en Proverbios 6:28:
¿"Andará el hombre sobre brasas sin que sus pies se quemen?"

Un importante evangelista descubrió que cuando él utilizaba música


folcklórica rockera en sus reuniones, el número de asistentes aumentó
repentinamente. Mas tarde él encontró que el porcentaje de aquellos
que habían asistido a todo el ciclo había disminuido de su anterior
20% a menos del 1%.(12) Ex-músicos rockeros que han llegado a
ser cristianos afirman que no hay compromiso posible con este tipo de
música; que la única forma es la abstención total. La naturaleza del
sonido rock es tan ciertamente "de la carne" y parte "del mundo" que
debe ser eliminado completamente de una vida pura. ¿Pueden los
cristianos adventistas atreverse a defender lo que otros han
descubierto que es anti-espiritual?

La inspiración es clara en afirmar en que hay música aceptable y no


aceptable dentro del culto. Mientras descendía del Monte de Sinaí
después de haber recibido la ley de Dios, Moisés pensó que el
escuchaba sonidos de guerra. Los "sonidos de guerra" se tornaron
en sonidos de canto en un culto al becerro de oro, un ser— vicio
que había sido proclamado como día de fiesta al Señor. En los días
de Daniel, una "orquesta babilónica" fue utilizada a fin de solemnizar el
culto a la imagen de Nabucodonosor. El profeta Amos describe el
día cuando Dios dirá a su pueblo "Quita de mí la multitud de tus
cantares, pues no escucharé las salmodias de tus instrumentos
"(5:23).(13) En su tiempo, Elena G.de White describe y condena un
tipo de culto musical realizado en Indiana y afirma que ésto se repetiría
antes del cierre del tiempo de prueba.

Su evaluación de ese concierto musical es revelador:

Es mejor no mezclar nunca el culto de Dios con música, que utilizar


instrumentos musicales para realizar la obra que en Enero pasado se
me mostró que tendría lugar en nuestras reuniones de reaviva-
miento. La verdad para este tiempo no necesita nada de eso para
48

convertir a las almas.(14)


Finalmente, noten esta alarmante profecía. "Aquellas cosas que han
ocurrido en el pasado volverán en el futuro. Satanás hará de la
música una trampa a través de la cual muchos serán conducidos. "(15)
Quizás a este punto sea útil una breve revisión de los métodos satánicos:
"Satanás trabajará con su poder engañoso a fin de influenciar el corazón
y oscurecer el entendimiento, haciendo aparecer lo malo como bueno y
lo bueno como malo. "(16)

En los años recientes muchos nuevos himnarios han sido publicados, y


en la mayoría de los casos los himnos contenidos representan una
tendencia al cambio. Pareciera que muchas denominaciones sienten
que han perdido profundidad, debido al uso limitado de los grandes
himnos de la iglesia.(17) En estos nuevos himnos, por lo tanto,
vemos una vuelta atrás hacia los grandes himnos de la iglesia. Así
como muchos adventistas buscan coros simples e informales con sonidos
contemporáneos, otros cristianos que ya han experimentado éstos están
ahora aparentemente buscando algo más sustancial.

En un editorial reciente de la Revista Adventista, Eugenio Durand


establece que las iglesias Asambleas de Dios (Pentecostal) han llegado a
considerar la música cristiana rock como fuera de tono en relación al
evangelio.

La iglesia de Jesucristo ha caído bajo un especial ataque de Satanás a


través de los medios de entretenimiento y ha sido provocada para emular
al mundo en sus formas de arte degradado.... Poner la etiqueta
"Jesús" en la música rock no hace que cambie la esencia de su
naturaleza. Ellos toman algo que es básicamente inaceptable para los
cristianos y lo re-etiquetan, pero llega a ser tan malo como antes. "

¡Cuan extraño resulta que los carismáticos y exuberantes Pentecostales


lancen una alerta contra la música cristiana rock, mientras muchos
supuestamente conservadores y orgullosos adventistas del séptimo
día la devoran! No estoy hablando únicamente del rock duro, sino del rock
suave y de la música tipo night club que a menudo se escucha en las
congregaciones adventistas.(18)
49

Cómo es percibida la Música en el cerebro humano

Probablemente el desarrollo más importante dentro de la investigación


científica musical fue el descubrimiento de que la música es percibida
a través de aquella porción del cerebro que recibe los estímulos de
las emociones, sensaciones y sentimientos sin que primero sean
enviados a aquellos centros cerebrales que envuelven la razón y la
inteligencia. Schullian y Schoen explican este fenómeno.

La música, la cual no depende de los centros principales del cerebro


para ingresar al organismo, puede sin embargo utilizar el camino del
tálamo, la estación de relevo de todas las emociones, sensaciones y
sentimientos. Una vez que el estímulo ha sido capaz de alcanzar el
tálamo, el cerebro es automáticamente invadido y si el estímulo
continúa por algún tiempo se establece así un estrecho contacto
entre el cerebro y el mundo real.(19)

El tiempo y el espacio no permiten un tratamiento de la percepción


musical. Sea suficiente decir que estudios de los últimos 50 años han
traído a la luz significativos descubrimientos que pueden resumirse
como sigue:
1) La música, es percibida y disfrutada sin que necesariamente sea
interpretada por los centros superiores que envuelven la razón
y el juicio.
2) La respuesta a la música se puede medir aún cuando quien escucha
no esté prestando atención consciente a ello.
3) Hay evidencia de que la música puede traer cambios a la conducta
que puede afectar el equilibrio químico y electrolítico del
cuerpo.
4) Al bajar el nivel de percepción sensorial, la música realza las
respuestas al color, tacto y otros estímulos.
5) Ha quedado demostrado que la música produce cambios en la
energía muscular y promueve o inhibe el movimiento corporal.
6) Una música rítmica altamente repetitiva produce efectos hipnóticos .
7) El sentido de la audición tiene un mayor efecto sobre el sistema
nervioso autónomo más que cualquiera de los otros sentidos.(20)

Estos descubrimientos nos sugieren que Satanás es capaz, a través


50

de la música, de montar un ataque furtivo sobre cualquiera que


muestre indulgencia por esta "errónea" clase de música. Puede
concluirse que la música en sí, no el texto, es el punto focal para la
aceptabilidad de la música en el culto. Esta es la razón de entregar una
palabra de advertencia a todos aquellos grupos que experimentan con
nuevos estilos de culto en que se utiliza la música de iglesia. Aún un
texto bíblicamente sólido, cuando está unido a un vehículo musical
inapropiado, llega a convertirse en una "Babilonia" teológica, una mezcla
de bien y mal, verdad y error.

Refiriéndose a la caída del hombre Elena G.de White dice:

"A través de la mezcla de lo malo con lo bueno, su mente ha llegado a


confundirse, sus poderes mentales y espirituales invadidos. Ya no
podría él apreciar por más tiempo la bondad que Dios tan libremente le
ha otorgado. "(21)

El profeta Ezequiel también advierte acerca de los peligros de mezclar lo


sagrado con lo profano:

Sus sacerdotes violaron mi ley, y contaminaron mis santuarios; entre lo


santo y lo profano no hicieron diferencia, ni distinguieron entre inmundo
y limpio; y de mis Sábados apartaron sus ojos, y yo he sido profanado
en medio de ellos.... diciendo: Así ha dicho Jehová el Señor; y
Jehová no había hablado (Eze.22:26,28).

¡Mezclar la verdad de Dios con las mercaderías del mundo es un ne-


gocio altamente riesgoso!

Criterios y normas para juzgar la música

La música, en sus términos más simples, está hecha de tres compo-


nentes: melodía, armonía y ritmo. Estos tres corresponden a lo
menos en un sentido, al espíritu o intelecto humanos; sus emociones o
sentimientos, a su cuerpo o necesidades físicas. Al seleccionar
música para el culto, esta jerarquía debe ser guardada en forma
intacta: la melodía debería reinar supremamente. La armonía soporta
51

a la melodía, pero nunca la controla. El ritmo debería soportar a


ambas, pero tampoco sobrepasarlas.

Dios se comunica con el hombre a través de su mente. Esta es la


razón por la cual la melodía, que apela a la mente humana, debe
ocupar el primer lugar. La melodía es el vehículo que lleva el texto
del canto. En usos de culto especialmente, ese texto debe
predominar. ¿Hay algún lugar en los escritos inspirados donde se
sugiere que Dios se comunica con el hombre primordialmente a través
de sus emociones o de su naturaleza física? Más bien, el consejo de
Pablo es guardar "mi cuerpo, y lo pongo en servidumbre; no sea que
habiendo sido heraldo para otros, yo mismo venga a ser eliminado.
(1a.Cor.9:27). Las emociones y los impulsos no pueden ni deberían
estar separados de nuestra música, pero deben ser puestos bajo
control. ¡Aquello que apela a la mente debe tener preeminencia! (22)

Esta es la razón por la cual el uso de la mayor cantidad de la música


cristiana contemporánea de hoy, con su estructura rítmica predominante,
debe someterse a lo menos a una cuidadosa revisión antes de utilizarla en
el culto cristiano. El hecho es que mucha de esta música representa una
jerarquía invertida, con la melodía, el vehículo que lleva el texto,
apareciendo como de menor importancia. Podemos permitir que
nuestros sentimientos y emociones, o nuestros deseos de expresión
física gobiernen nuestras mentes? ¿Necesitamos adorar tan
simplemente como para "sentirnos bien", o necesitamos adorar en tal
forma que haga de Dios nuestra única fuente de salvación? El tema en
sí va más allá de nuestros gustos personales y preferencias.
Nuestra música y estilo de culto ilustran nuestras verdaderas nece-
sidades, y quizás nuestro concepto de Dios.
________
Traducción del documento: Lic. Mario Vera Muñoz

Tomado de la revista Adventist Perspectives, Vol.5:2,1991


Publicada por Southern College of Seventh-Day Adventists
52

Notas bibliográficas al texto en Inglés:


1 Howard Hanson, The American Journal of Psychiatry 99:317
2 E.G.White, Messages to Young People (Nashville: Southern
Publishing Company, 1930) 291-96. The importance of music
in the worship of God is a constant theme in Scripture.
God ordained Levites as priests and musicians in the services of
worship. Especially in Revelation do we see the integral role of
the anthems of praise in worship of God.
3 Bruce Leafblad, "What Sound Church Music?" Christianity
Today 19 May 1978:18,19.
4 E.G.Vhite, The Seventh-day Adventist Bible Commentary, ed.
F.D.Nichol (Washington D.C.: Review and Herald Publishing
Association, 1954) 6:1035.
5 Earl Enyeart Harper, Church Music and Worship (New York:
Abingdon Press, 1924) 52,53.
6 Joe Crews, Creeping Compromises (Baltimore: Amazing Facts,
1977).
7 Irwin Sonenfield, "The Mystical Rite of Youth Culture:
Search and Celebration in Popular Music, " The Music Educator's
Journal February 1973:28.
8 William Schaefer, Rock Music (Minneapolis: Augsburg Publishing
House, 1972)79.
9 E.G.White, Evangelism (Washington D.C.: Review and Herald
Publishing Association, 1946)137.
10 E.G.White, Counsels to Parents and Teachers (Mountain View:
Pacific Press Publishing Association, 1913)94.
11 White, Evangelism 137.
12 Harold Lickey, "Today's Religious Music Scene," Ministry
March 1973:19.
13 Cf. also Amos 6:5; 8:3,10.
14 E.G.White, Selected Messages, 2 books (Washington D.C.:
Review and Herald Publishing Association, 1958)2:38.
15 White.
16 E.G.White, Gospel' Workers (Washington D.C.: Review and Herald
Publishing Association, 1915)264.
17 Carol Thiessen, "Dusting Off the Old Hymnal", a review of
the Worshipping Church in Christianity Today 22 October
1990:66-68.
53

18 Eugene F.Durand, "Contemporary Christian Music, " Adventist


Review 6 December 1990:5. It should be further clarified
that the prime target of the Assemblies of God was the
"hard" rock music. However, this author agrees with Durand that
the "softer" rock sounds can be just as damaging. They at least
have allowed us to take another step
toward that which is inappropriate.
19 Dorothy Schullian and Max Schoen, Music and Medicine (New
York: Henry Schuman, Inc., 1948) 270,271.
54

APÉNDICE I

LO SAGRADO Y LO SECULAR
Por H.B.Hannum

"No han hecho distinción entre lo sagrado y lo profano


Ezequiel 22:26

El Antiguo Testamento señala claramente que Israel debía hacer una


distinción entre lo sagrado, o santo, y lo secular, o común: "Sepan
distinguir entre lo santo y lo profano, entre lo impuro y lo puro" (Lev.
10:10). La observancia del sábado en el séptimo día de la semana estaba
basada en el hecho que Dios había descansado en ese día al final de la
semana de la creación y había hecho ese día santo. El registro dice:
"Por eso bendijo el sábado y lo hizo sagrado" (Exo .20:11) . Según
todas las apariencias externas, no hay diferencia entre un día y otro,
porque el sol sale y se pone y el clima varía en el día sábado tanto
como en los otros seis días. Pero es un día santo y no uno secular. Así
era también con las otras partes de los cultos hebreos. Algunas cosas
eran sagradas, tales como el arca del testamento y partes del
tabernáculo, y otras no lo eran.

Hoy en día existe la tendencia de descuidar todas las distinciones entre


lo sagrado y lo secular. Con el rechazo de la Biblia por muchos como la
Guía inspirada y regla de la vida, ha surgido una idea que no hay
diferencia entre lo que es secular y lo que es sagrado. Se está llevando a
cabo un proceso de nivelamiento que descarta todas las distinciones. En
realidad, ésta no es una tendencia nueva, porque ha existido a través de
las edades, pero está siendo recalcada en una forma nueva hoy en
día. Esto ha provocado una falta de reverencia por las cosas
sagradas, una falta de consideración y respeto por los gobernantes y
hombres en posiciones de autoridad, una falta de reconocimiento hacia
los que están en posiciones que merecen respeto y honor. Esta es, a
lo menos, una causa contribuyente a estas condiciones.
55

Esta misma actitud ha afectado a la música de la iglesia. Algunos hoy


en día dicen que no hay diferencia entre la música sacra y la secular;
que en cierto sentido toda música es sacra y toda música es
apropiada para ser usada en la iglesia. Hoy vemos el uso del jazz
en la iglesia. Vemos a músicos de jazz y orquestas de jazz
encargándose de la música en algunas iglesias.

La Biblia hace una distinción entre el mundo y sus múltiples atracciones y


la iglesia con el Evangelio de salvación. Todo lo que es secular no es
necesariamente malo. Se nos advierte contra aquello que es malo en el
mundo. El apóstol Juan aconseja: "No amen al mundo ni lo que hay
en él. Si alguno ama al mundo, en ése no está el amor del Padre.
Pues toda la corriente del mundo es: codicia
del hombre carnal, ojos siempre ávidos y gente que ostenta su supe-
rioridad. Eso no viene del Padre sino que viene del mundo" ( 1 Juan
2:15,16).

La música sacra no se asociará primeramente con los placeres munda-


nos. El romance y excitación del teatro, con sus presentaciones de
males de todo tipo, no hallará eco alguno en la música sagrada. El baile
moderno con todos sus significados sutiles, su jazz, su
sentimentalismo, sus asociaciones con la bebida, el cigarrillo y las
drogas, no hallará sugerencia alguna en la música sagrada'. La
exhibición militar, el circo y otros tipos de expresiones seculares, sean o
no legítimas para el cristiano, no se asociarán en ninguna forma, ni
quedarán sugeridas, por la música escuchada en la iglesia. La música
que se use para los servicios religiosos jamás debe hacer recordar a
los oyentes ninguno de estos placeres o actividades.

También hay distinción entre lo sagrado y lo profano en la manera de


su presentación. Hay estilos de ejecución que se asocian claramente
con la religión por tradición y usanza, y hay otros estilos que son
característicos de varios tipos de música secular. El estilo canturreado
de canto que es muy popular para las canciones de amor y la música
sentimental no es apropiado para los cantos religiosos. Hay una
manera de tocar el órgano que es característica del órgano teatral.
Esto no es apropiado para tocar en la iglesia. El estilo de tocar el órgano
a la moda teatral enfatiza cualidades de tono pecu1iares: el uso
56

excesivo del trémolo y otros recursos técnicos que sirven bien al teatro,
pero que no son apropiados para el culto.

Hay también algunos tipos de instrumentos, tales como los tambores, las
guitarras, la marimba, el saxofón y otros, que tradicionalmente no se
asocian con la iglesia, sino que se usan extensamente en la música
secular. Estos instrumentos no deben ser considerados como
prohibidos para el uso en la iglesia, sino que deben ser tocados hábil
y técnicamente, de una forma que no sugiera lo secular. Sin embargo,
hay estilos de ejecución que se asocian tradicionalmente con la iglesia.
Lo importante es mantener la música en armonía con lo sagrado.

No es válido pensar que la música sagrada siempre debe ser suave,


dulce, tranquila y sedante, porque puede llegar a ser sólo afeminada,
neurótica y débil. Tampoco debe ser altamente emotiva. La música al
servicio de la religión puede ser verdaderamente hermosa y llena de
poder. Puede ser fuerte, vibrante, estimulante, con a-tracción para
nuestros sentimientos y pensamientos más altos. Puede ser de la
calidad musical más alta.

La belleza de un culto en la iglesia o la excelencia estética de la


música, sin embargo, no son lo único de importancia. Puede ayudar a
algunos adoradores en gran manera, pero no es esencial para
acercarnos a Dios. El diablo usa los excesos en muchas maneras para
sus designios malignos. Los excesos en algunas formas llevan al
fanatismo; el exceso en la emoción y el sentimiento lleva al
sentimentalismo y la debilidad, en vez de la fuerza. Una característica
del jazz es la exageración de las cualidades musicales normales. Hay
énfasis en cualidades extrañas de los tonos y un énfasis excesivo en el
ritmo. Muchos de los elementos de la música que no son malos en sí
mismos llegan a ser malos cuando se usan fuera de la buena
proporción. Los ritmos de notas con puntillo, la disonancia, la síncopa,
los coloridos de tonos con sordina, estos y otros recursos musicales,
cuando se enfatizan en demasía o cuando se usan en exceso,
constituyen las características comunes del jazz y la música popular de
baile. El énfasis parece estar puesto en el volumen del sonido y el
ruido. Aunque algunas de estas características pueden ser legítimas y
aceptables en la música secular artística, son sospechosas en la
57

música religiosa.

Muchas cosas que son buenas en moderación se convierten en


malas al llevarse al exceso. Un poco de sal para dar sabor es bueno,
pero en exceso se convierte en un veneno. La comida ingerida en ex-
ceso causa la obesidad y otros desórdenes físicos. El uso moderado de
la disonancia es útil en la música, pero llevado al extremo puede causar
un caos. La emoción y el sentimiento son apropiados y correctos,
pero llevados a un extremo o más allá del buen gusto, llevan al
sentimentalismo y la insinceridad. El orden y la forma son buenos en
el culto de la iglesia, pero sin el espíritu de adoración carecen de vida y
llegan a ser fríamente formales. La libertad es un don precioso, pero si se
lleva más allá de la restricción de la ley, lleva al libertinaje y la anarquía.

Es difícil mantener una separación entre lo que es genuinamente re-


ligioso y lo que es claramente secular, pero la música de adoración en la
iglesia es de suficiente importancia como para merecer un estudio
cuidadoso y bien meditado.

Tomado del libro: Music and Worship


pp. 36 - 40
58

APÉNDICE II

LOS ADVENTISTAS Y LA MUSICA

(Acuerdos tomados por el Concilio Anual de la Asociación General y


aprobados por la Junta Plenaria de la División Sudamericana el 5 de
Junio de 1973)

Acordado, que se adopten las siguientes normas en cuanto a la filosofía


adventista de la Música:

La Iglesia Adventista del Séptimo Día surgió en cumplimiento de la


profecía y con el propósito de ser un instrumento de Dios para la
proclamación mundial de las buenas nuevas de salvación por la fe
en el sacrificio expiatorio del Hijo de Dios y por la obediencia a sus
mandatos como preparación para el regreso de nuestro Señor. Las
vidas de quienes aceptan esta responsabi1idad deben ser tan
distintivas como lo es su mensaje. Esto exige que cada miembro esté
totalmente consagrado a los ideales y objetivos de la iglesia. Tal
dedicación afectará a todos los departamentos de la iglesia, y
ciertamente influirá en la música usada por la iglesia en el cumplimiento
de la misión que Dios le ha señalado.

La música es uno de los mayores dones que Dios le ha dado al hombre y


uno de los elementos más importantes de un programa espiritual. Es
una de las avenidas de comunicación con Dios. "Es uno de los
medios más eficaces para grabar en el corazón la verdad espiritual" (La
Educación, pág.163). Tratándose de asuntos de importancia eterna,
es esencial que se tenga claro el concepto del tremendo poder de la
música. Tiene poder para elevar o degradar; puede ser usada al
servicio del bien o del mal. "Tiene poder para subyugar naturalezas
rudas e incultas; para avivar el pensamiento y despertar simpatía; para
promover la armonía de acción y desvanecer la melancolía y los
59

presentimientos que destruyen el valor y debilitan el esfuerzo" (Ibid.).

Por lo tanto, aquellos que seleccionan la música para cumplir con los
propósitos singulares de esta iglesia, deben ejercer el mayor
discernimiento en su selección y uso. Para alcanzar estos ideales,
necesitarán sabiduría más que humana. La revelación nos proporciona
como guía los siguientes principios generales:

La música debiera:

1. Glorificar a Dios y ayudarnos a adorarle en forma aceptable


(1 Cor.10:31)
2. Ennoblecer, elevar y purificar los pensamientos del cristiano
(Fil. 4:8; Patriarcas y Profetas, pág.645).
3. Influir de manera efectiva sobre el cristiano para lograr el
desarrollo del carácter de Cristo en su propia vida y en la
de otros (Manuscrito 57,1906).
4. Poseer una letra que esté en armonía con las enseñanzas
bíblicas de la iglesia (Review and Herald, 6 de Junio de 1912).
5. Revelar compatibilidad entre el mensaje expresado por las
palabras y la música, evitándose una mezcla de lo sagrado y lo
profano.
6. Evitar los efectos teatrales y la ostentación vanidosa (Evangelism,
pág.137; Review and Herald, 30 de Noviembre de 1900).
7. Dar preeminencia al mensaje del texto, el cual no debería verse
disminuido por los elementos musicales (Obreros Evangélicos,
págs. 370,371).
8. Mantener un equi1ibrio juicioso entre los elementos
emocionales, intelectuales y espirituales (Review and Herald, 14 de
Noviembre de 1899).
9. Nunca comprometer los elevados principios de la dignidad y la
excelencia por querer alcanzar a la gente en el nivel donde se
encuentra (Testimonies, tomo 9, pág.143; Evangelism, pág.137).
10. Ser apropiada para cada ocasión, cada lugar y cada público
(Evangelismo, págs.333,334).

En la música de los diversos grupos culturales y étnicos se encuentran


60

elementos de valor religioso que pueden elevar espiritualmente; sin


embargo, el gusto musical y las prácticas de todos deberían conformarse
al valor universal de un carácter semejante al de Cristo, y todos
debieran luchar por alcanzar esa conformidad. Deben evitarse
cuidadosamente todos aquellos elementos mundanos en la música que
no expresen los elevados ideales de la fe cristiana.

Los principios enunciados servirán como criterios efectivos para la


selección e interpretación de la música usada para cumplir las diversas
finalidades de la iglesia. Ciertas formas musicales, tales como el "jazz",
el "rock" y sus formas afines, son consideradas por la iglesia
incompatibles con estos principios. Las personas responsables de las
variadas actividades musicales de la iglesia,, ya sea como directores o
ejecutantes, no encontrarán problema alguno en la aplicación de estos
principios en ciertas áreas. Otras áreas son mucho más complejas,
por lo cual se hace la siguiente presentación detallada de los factores
involucrados.

I. MÚSICA SACRA

La Música en el Servicio del Culto Divino

La adoración debería ser la actividad primaria y eterna del hombre. El


propósito más elevado del hombre es glorificar a Dios. Cuando el
adorador se acerca a la casa de Dios para ofrecer un sacrificio de
alabanza, debe ofrecerlo con la mejor música posible. Es esencial
hacer una planificación cuidadosa de cada elemento musical del culto a
fin de que los miembros de la congregación no sean meros
espectadores sino participantes.
Los himnos usados en el servicio de culto deberían ser mayormente
alabanzas dirigidas a Dios. Se debieran usar los grandes himnos de
la tradición cristiana.
Los himnos deben tener melodías sólidas, aptas para el canto y una
61

letra digna. El pastor debería preocuparse de aumentar la calidad y el


fervor del canto congregacional. "El canto no siempre ha de ser
entonado por unos pocos" (Evangelismo, pág.333). La experiencia
cristiana será grandemente enriquecida por el aprendizaje y el uso de
nuevos himnos.
Donde sea posible, un coro formado por músicos consagrados y bien
preparados podrá ayudar a crear un mejor clima de adoración, can-
tando himnos y corales de hondo significado espiritual y de alta
calidad musical.
La música instrumental, ya sea de piano o de órgano, debiera armonizar
con los elevados ideales del culto. Los números que se interpretan
deberán elegirse entre los mejores materiales, siempre teniendo en
cuenta la capacidad del ejecutante. La persona que a-compaña
musicalmente al canto congregacional tiene la pesada responsabilidad
de mantener una elevada norma en sus interpretaciones, tanto cuando
acompaña, como cuando toca los preludios, interludios y posludios. Su
posición la capacita de manera especial para elevar las normas musicales
del culto de su iglesia. Si en el transcurso del culto se usaran solos
vocales u otros números musicales, se debiera preferir los cantos cuya
letra tenga base bíblica. Estos solos deberán estar dentro del alcance de
las habilidades del intérprete y se presentarán al Señor sin despliegue
de recursos técnicos. La comunicación del mensaje debiera ser lo
primordial.

La Música en el Evangelismo

La música usada en el evangelismo puede incluir cantos espirituales que


no sean solamente himnos a Dios. Pueden usarse cantos que hablen
del amor de Dios, de lo que El hace por sus hijos o que testifiquen de
nuestra aceptación de Jesús, de nuestro amor por El y de nuestra
decisión de servirle. No se debe transigir con los elevados principios de
dignidad y excelencia que caracterizan a nuestro mensaje a fin de
preparar a un pueblo santo para la segunda venida de Cristo.

La Música escogida para el Evangelismo debería:

1. Dirigir al oyente a Jesús, quien es el camino, la verdad y la


62

vida.
2. Preparar el camino para la presentación del mensaje de la palabra
de Dios, o ahondar su exhortación, suscitando una respuesta
de parte de los oyentes.
3. Ser interpretada por personas cuyas vidas están en armonía con
el mensaje que presentan.
4. Ser el vehículo de la honda impresión de las verdades bíblicas
que inspirarán a realizar cambios positivos en la vida.
5. Ser presentada en forma ordenada y cuidadosamente planeada.
6. Ser sencilla y melódica, presentada sin destacar innecesariamente al
intérprete.
7. Dar preferencia a la predicación de la Palabra. Tanto en énfasis
como en la cantidad de tiempo que se le dedica.
8. Interesar en forma equilibrada al intelecto y las emociones; no
solamente en cantar a los sentidos.
9. Ser significativa y comprensible, tanto en contenido como en estilo,
para la mayor parte posible del auditorio.

La Música en el Evangelismo de los Jóvenes

En lo que atañe al trabajo entre los jóvenes, se aplica la mayor parte


de las sugerencias ya presentadas. Sin embargo es preciso
considerar algunos aspectos particulares de esta área de trabajo. Los
jóvenes tienden a identificarse estrechamente con la música de la
cultura joven contemporánea. El deseo de alcanzar a estos jóvenes con
el Evangelio de Cristo a veces lleva al uso de ciertos estilos musicales
no del todo deseables. En todos estos estilos, el elemento más
problemático es el ritmo.
De todos los elementos musicales, es el ritmo el que produce la
respuesta física más fuerte. Algunos de los mayores éxitos de Satanás
han sido logrados a través de los estímulos hechos a la naturaleza física.
Demostrando una clara percepción de los peligros de este modo de
llegar a los jóvenes, la Sra. E.G.de White declaró: "Tienen un buen oído
musical y Satanás sabe cuáles órganos excitar a fin de animar,
absorber y cautivar la mente para que no deseen a Cristo. Faltan los
intensos deseos espirituales del alma por tener conocimiento divino y
crecer en la Gracia". (Testimonies, tomo 1 p. 497). Esta es una fuerte
63

denuncia de la manera en la cual puede ser usada la música en directa


oposición al plan de Dios. El jazz, el rock y las formas musicales afines
son muy conocidos por la respuesta sensual que crean en las masas.

Por otra parte, hay muchas músicas tradicionales y folklóricas que


pueden considerarse como legítimos estilos musicales. Algunas de
estas formas constituyen vehículos aceptables del testimonio cristiano.
Otras podrán ser aceptadas en un ambiente cristiano secular, pero no
serían apropiadas para llevar el nombre del Salvador. Aún otras de
estas músicas tradicionales podrán estar totalmente al margen de la
experiencia del cristiano. Resulta claro, entonces, que cualquier forma
de música tradicional o "folklórica" debe juzgarse por los mismos
principios generales que rigen los otros tipos de música.

"El ideal que Dios tiene para sus hijos está por encima del alcance del
más elevado pensamiento humano". (La Educación p. 16). Aquellos
que se esfuerzan por lograr este elevado ideal y que dirigen el
evangelismo juvenil encontrarán que al hacer un estudio cuidadoso de la
música a usarse, recibirán en respuesta a sus oraciones la
iluminación del Espíritu Santo.

Además del problema del ritmo, hay otros factores que afectan las
cualidades espirituales de la música:

a) Estilo voca1: Debiera evitarse el estilo ronco de los cantantes


de la música rock o el estilo sugestivo y sentimental de quien
canta en un club nocturno, así como toda otra distorsión de la
voz humana.
b) Tratamiento armónico: Debiera evitarse el uso de músicas saturadas
de acordes de séptima, novena, undécima y décimo tercera.
Estos acordes usados en forma mesurada, generan hermosura,
pero cuando se los usa excesivamente, crean una música sensual
que distrae de la verdadera calidad espiritual del texto.
c) Presentación visual: Todo aquello que llame indebidamente la a-
tención del intérprete, como ser el movimiento corporal excesivo
o la vestimenta inapropiada, no tiene cabida en el evangelismo.
d) Amplificación: Se debe tener mucho cuidado para evitar la ampli-
ficación excesiva, tanto del instrumento como de la voz. Se debe
64

ser sensible a las necesidades espirituales de aquellos que dan


su testimonio musical como también a las de quienes han de recibirlo. Se
debe seleccionar con cuidado el equipo de amplificación.
e) Presentación: El objetivo primordial de la presentación de toda
música sacra debe ser la exaltación de Cristo y no del músico
o meramente el entendimiento de los oyentes.

La Música en el Hogar

1. La educación musical debe comenzar cuando el niño es aún peque-


ño, mediante:
a. La presentación de los grandes himnos y cantos sacros
dentro del marco alegre e informal del culto familiar.
b. La formación del hábito de oír buena música, ya sea en la
radio familiar o en cualquier equipo de reproducción de
sonido que haya en la casa.
c. La asistencia de la familia a concierto cuyas normas estén
de acuerdo con las expuestas en este documento.
d. El debido ejemplo y la influencia correcta de los padres.
2. Debiera estimularse a los miembros de la familia a participar
juntos en los cantos y en la ejecución de instrumentos musicales.
3. Debiera estimularse a experimentar con la composición de poesías
y música.
4. Debiera establecerse una discoteca familiar muy bien selecciona-
da.
5. Debe reconocerse que Satanás está empeñado en conquistar la
mente, y que en forma imperceptible pueden efectuarse cambios
de mentalidad que podrían alterar las percepciones y los valores
tanto para el bien como para el mal. Por lo tanto, debe ejercitarse
muchísimo cuidado en el control de lo que se escucha en la radio
y la televisión, evitando especialmente todo aquello que pudiera
ser vulgar, seductor, barato, inmoral, teatral o que pudiera
relacionarse con la rebeldía.
65

La Música en el Colegio

En la preparación y la presentación de música en las funciones


religiosas, los administradores y profesores debieran trabajar con
los estudiantes a fin de mantener en alto las normas musicales de la
iglesia.
Los grupos musicales que salgan de los colegios para dar
testimonio de su fe y cantar música folklórica, debieran ser
patrocinados y aconsejados por personas que la administración
designe para ello, ya sean profesores de música o de alguna otra
asignatura.
Los profesores de música, tanto en los conjuntos musicales, como
en las clases particulares, debieran esforzarse por enseñar literatura
musical adecuada y música sacra, para el uso en las diversas
actividades de la iglesia y en la conquista de almas. Las iglesias y
la Asociación debieran unirse al Colegio para trabajar por la
elevación del nivel musical en las iglesias. El personal
preparado de los colegios debería cooperar en la presentación de
actividades y cursillos musicales a fin de promover los altos ideales de
la música sacra.
Las presentaciones musicales realizadas en los colegios adventistas
deberán estar de acuerdo con las normas de la iglesia. Esto se
aplica a los intérpretes locales, los artistas visitantes, los conjuntos
y la música en las películas presentadas.

II. MÚSICA SECULAR

La música, "debidamente empleada... es un precioso don de Dios,


destinado a elevar los pensamientos a temas más nobles, a inspirar y
elevar el alma" (La Educación, pág.163).

El estilo de vida de los adventistas del séptimo día exige que cada
cristiano practique un alto grado de discernimiento y de responsabilidad
individual en la selección de música secular para su uso personal o
para la presentación pública. Tal música debe evaluarse a la luz de la
instrucción de Filipenses 4;8: "Por lo demás, hermanos, todo lo que es
66

verdadero, todo lo honesto, todo lo justo, todo lo puro, todo lo amable,


todo lo que es de buen nombre, si hay virtud alguna, si algo digno de
alabanza, en esto pensad". También tendrá en cuenta la admonición
dada por Elena G. de White en Testimonies, tomo 1, pág.497:
"Se me mostró que los jóvenes deben adoptar una posición más elevada
y hacer de la Palabra de Dios su consejera y guía. Sobre los jóvenes
reposan solemnes responsabilidades que ellos tienen en poca estima. La
introducción de música en sus hogares, en lugar de incitarlos a la
santidad y a la espiritualidad, ha sido el medio de distraer sus mentes
de la verdad. Las canciones frÍvolas y las músicas populares de la
época parecen congeniar con su gusto. Los instrumentos musicales
han tomado el tiempo que debiera haberse dedicado a la oración.
Cuando no se abusa de ella, la música es una gran bendición; pero
cuando se la emplea mal, es una terrible maldición".

El cristiano no cantará canciones incompatibles con sus ideales de


verdad, honestidad y pureza. Evitará todo aquello que haga que el mal
parezca deseable o que el bien parezca de poca importancia.
Procurará evitar las composiciones cuya letra tenga frases de poco
contenido, mala poesía, palabras sin sentido, sentimentalismo o
frivolidad, elementos todos éstos que pueden alejarlo del consejo y de
las enseñanzas que se encuentran en la Biblia y en el espíritu de
profecía.
Estimará que los "blues", el "jazz", el "rock", la música "beat", así como
otros estilos similares, no contribuyen al desarrollo del carácter
cristiano, pues abren la mente a pensamientos impuros y llevan a una
conducta impía. Tales músicas tienen una relación muy clara con las
costumbres liberales de la sociedad contemporánea. La distorsión del
ritmo, de la melodía y de la armonía, tal como se la usa en estos
estilos, combinada con la excesiva amplificación embota la sensibi1idad y
finalmente destruye el aprecio por lo que es bueno y santo.

Debiera tomarse cuidado especial al usar una melodía secular con


letra sacra a fin de que la connotación profana de la música no me-
noscabe el mensaje del texto. El cristiano juicioso aplicará a toda
música que elija, ya sea para oír o para interpretar, los principios
presentados en esta filosofía de la música.
67

El verdadero cristiano tiene la posibilidad de dar testimonio de su fe


ante otros por la selección de música secular que realiza en ocasiones
sociales. Por el estudio diligente y la selección cuidadosa, buscará esos tipos
de música que sean compatibles con sus necesidades sociales y sus
principios cristianos.

"Debe haber una relación viviente con Dios en oración, una relación
viviente con Dios en cánticos de alabanza y acción de gracias
(Evangelismo, pág.328).

Tomado de:
Ministerio Adventista, Marzo-Abril de 1974
68

APÉNDICE III

LA MUSICA: FUNCION, VIRTUDES E INFLUENCIA


(Según los escritos de Elena G.de White)

EL PAPEL DE LA MÚSICA

El Poder del Canto. La historia de los cantos de la Biblia está llena de


sugerencias en cuanto a los usos y beneficios de la música y el canto. A
menudo se pervierte la música haciéndola servir a malos propósitos
y de ese modo llega a ser uno de los agentes más seductores de la
tentación. Pero, debidamente empleada, es un precioso don de Dios,
destinado a elevar los pensamientos a temas más nobles, a inspirar y
elevar el alma.
Asi como los israelitas cuando andaban por el desierto alegraron su
camino con la música del canto sagrado, Dios invita a sus hijos de hoy a
alegrar por el mismo medio su vida de peregrinaje. Pocos medios hay
más eficaces para grabar sus palabras en la memoria, que el de
repetirlas con el canto. Y un canto tal tiene un poder maravilloso. Tiene
poder para subyugar naturalezas rudas e incultas; para avivar el
pensamiento y despertar simpatía; para promover la armonía de
acción y desvanecer la melancolía y los presentimientos que destruyen el
valor y debilitan el esfuerzo.
Es uno de los medios más eficaces para grabar en el corazón la verdad
espiritual. Cuan a menudo recuerda la memoria al alma oprimida y
pronta a desesperar, alguna palabra de Dios, algún tema olvidado de
cantos infantiles. Las tentaciones pierden su poder, la vida adquiere
nuevo significado y nuevo propósito, impartiendo valor y alegría a
otras almas.
Nunca se debería perder de vista el valor del canto como medio edu-
cativo. Cántense en el hogar cantos dulces y puros, y habrá menos
palabras de censura y más de alegría, esperanza y gozo. Cántese
en la escuela, y los alumnos serán atraídos más a Dios, a sus maestros, y
los unos a los otros.
Como parte del servicio religioso, el canto no es menos importante que
la oración. En realidad, más que un canto es una oración.
(Educación,p.163,164)
69

Un Arma contra el Desánimo. Si hubiera mucho más alabanza al Señor


y menos relatos tristes de desánimos, se ganarían muchas más
victorias.(Carta 53,1896. Evangelismo, p.364)
Tributemos alabanza y acción de gracias por medio del canto. Cuando
nos veamos tentados, en vez de dar expresión a nuestros senti-
mientos, entonemos con fe un himno de acción de gracias a Dios. El
canto es un arma que siempre podemos esgrimir contra el desaliento.
Abriendo así nuestro corazón a los rayos de luz de la presencia del
Salvador, encontraremos salud y recibiremos su bendición.
(Ministerio de Curación, p.196)

Grabar la Verdad Espiritual El canto es uno de los medios más


eficaces para grabar la verdad espiritual en el corazón. A menudo por
las palabras de un canto sagrado han nacido sentimientos de
contricción y de fe. (Review and Herald, Junio 6, 1912)

Para Conservar la Experiencia Cristiana. Por la noche y por la


mañana uníos con vuestros hijos en el culto a Dios, leyendo su Palabra
y cantando sus alabanzas.... Si era esencial para Moisés encarnar los
mandamientos en el cántico sagrado, de manera que cuando
marcharan por el desierto los niños pudieran aprender la ley
versículo por versículo, cuan esencial es en este tiempo enseñar a
nuestros hijos la Palabra de Dios... Hagamos todo lo que esté de
nuestra parte para hacer música en nuestro hogar. (Ev. p.364-365)

Para hacer el Trabajo Agradable. Alegrad vuestro trabajo con cantos de


alabanza. (Conducción del Niño, p.136)

Aleja al Enemigo. Vi que debemos levantarnos cada día y dominar los


poderes de las tinieblas. Nuestro Dios es poderoso. Vi que el canto
de gloria a Dios a menudo alejaba al enemigo y al alabar a Dios lo
azotaría nuevamente y nos daría la victoria. (Carta 5)
70

El Canto ayudó a Jesús a resistir al Enemigo. Cuando Cristo era niño,


... fue tentado a pecar, pero no se rindió a la tentación. Cuando llegó a
tener más edad, fue tentado, pero los cantos que su madre le había
enseñado a entonar acudían a su mente, y él elevaba su voz en
alabanza. Y antes de que sus compañeros lo advirtieran, estaban
cantando juntamente con él. (Evangelismo, p.363)

Trayendo la Alegría del Cielo. El alba le encontraba a menudo en algún


retiro, sumido en la meditación, escudriñando las Escrituras o en
oración. Con su canto daba la bienvenida a la luz del día. Con himnos
de acción de gracias amenizaba las horas de labor, y llevaba alegría
del cielo a los rendidos por el trabajo y a los descorazonados.
(Ministerio de Curación p.34)

El entonó Cantos de Alabanza. A menudo expresaba su alegría


cantando salmos e himnos celestiales. A menudo los moradores de
Nazareth oían su voz que se elevaba en alabanza y agradecimiento
a Dios. Mantenía comunión con el cielo mediante el canto; y cuando
sus compañeros se quejaban por el cansancio, eran alegrados por la
dulce melodía que brotaba de sus labios. Sus alabanzas parecían
ahuyentar a los malos ángeles, y como incienso, llenaban el lugar de
fragancia. La mente de los que le oían se alejaba del destierro que aquí
sufrían para elevarse a la patria celestial. (DTG. p.54)
71

APENDICE IV
UNA FILOSOFÍA ADVENTISTA ACERCA DE LA MÚSICA
(del libro “Declaraciones, orientaciones y otros documentos”)
Dios ha entretejido la música en la trama misma de su creación.
Por ejemplo, cuando hizo todas las cosas, "alababan todas las
estrellas del alba, y se regocijaban todos los hijos de Dios" (Job
38:7). El libro del Apocalipsis describe el cielo como un lugar de
alabanza incesante, que resuena con cánticos de adoración a Dios y
al Cordero por parte de todos (Apoc. 4:9-11; 5:9-13; 7:10-12; 12:10-
12; 14:1-3; 15:2-4; 19:1-8).
Debido a que Dios hizo al ser humano a su imagen,
compartimos el amor y el aprecio por la música con todos los seres
creados. De hecho, la música puede tocarnos y conmovernos con
un poder que va más allá de las palabras o cualquier otro tipo de
comunicación.1 La mejor música, la más pura, eleva nuestro ser
hasta la misma presencia de Dios, donde los ángeles y los seres no
caídos lo adoran con cánticos.
Pero el pecado ha lanzado una plaga sobre la creación. La
imagen divina ha sido desfigurada y casi borrada; en todos los
aspectos, este mundo y los dones de Dios nos llegan con una
mezcla de bien y de mal. La música no es moral ni espiritualmente
neutra. Puede elevarnos hasta la experiencia humana más sublime,
o puede ser usada por el príncipe del mal para rebajarnos y
degradarnos, para despertar sensualidad, pasiones, desesperación,
ira y odio.
La mensajera del Señor, Elena de White, continuamente nos
anima a elevar nuestra perspectiva en cuanto a la música. Ella nos
dice: "Cuando no se abusa de la música, ésta es una gran
bendición; pero mal empleada, es una terrible maldición" (El hogar
cristiano, p. 371).2 "Debidamente empleada es un precioso don de
Dios, destinado a elevar los pensamientos hacia temas más nobles,
y a inspirar y levantar el alma" (La educación, p. 167).
En cuanto al poder del canto, ella escribe: "¡Cuan a menudo, para
el alma oprimida y a punto de desesperar, la memoria recuerda
alguna palabra de Dios -[por ejemplo,] el tema olvidado de algún
canto de la infancia-, y las tentaciones pierden su poder, la vida
adquiere nuevo significado y nuevo propósito, y se imparte valor y
alegría a otras almas! [...] Como parte del servicio religioso, el canto
72

no es menos importante que la oración. En realidad, más de un


canto es una oración. [...] Al conducirnos nuestro Redentor al umbral
de lo infinito, inundado con la gloria de Dios, podremos comprender
los temas de alabanza y acción de gracias del coro celestial que
rodea el trono, y al despertarse el eco del canto de los ángeles en
nuestros hogares terrenales, los corazones serán acercados más a
los cantores celestiales. La comunión con el cielo empieza en la
tierra. Aquí aprendemos la clave de su alabanza" (La educación, p.
168).
Como adventistas creemos y predicamos que Jesús pronto
vendrá otra vez. En nuestra proclamación mundial de los mensajes
de los tres ángeles de Apocalipsis 14:6-12, llamamos a todos los
pueblos a aceptar el evangelio eterno, a alabar a Dios el Creador y a
prepararse para encontrarse con nuestro Señor en su pronto
regreso. Desafiamos a todos a elegir lo bueno y no lo malo, para
que, diciendo NO "a la impiedad y a los deseos mundanos, vivamos
en este siglo sobria, justa y piadosamente, aguardando la es-
peranza bienaventurada y la manifestación gloriosa de nuestro gran
Dios y Salvador Jesucristo" (Tito 2:12, 13).
Creemos que el evangelio afecta todos los aspectos de la vida.
Por eso sostenemos que, dado el vasto potencial de la música para
el bien o el mal, no podemos ser indiferentes a ella. Aunque
percibimos que los gustos en música varían en gran manera de un
individuo a otro, creemos que la Biblia y los escritos de Elena de
White sugieren principios que pueden moldear nuestras elecciones.

Definiciones
"Música sacra": También llamada "música religiosa", es una
expresión que se usa en este documento para designar a la música
que se centraliza en Dios, y en temas bíblicos y cristianos. En la
mayoría de los casos, es música compuesta para ser utilizada en los
cultos, las reuniones de evangelización o la devoción personal, y
puede ser música vocal e instrumental. Sin embargo, no toda música
considerada sacra/religiosa puede ser aceptable para un adventista.
La música sacra no debería evocar asociaciones seculares o invitar
a la conformidad con normas mundanas de pensamiento o
comportamiento.
"Música secular": Es la música compuesta para ambientes ajenos
73

al servicio de culto o de devoción personal. Apela a los temas


comunes de la vida y a las emociones básicas del ser humano.
Proviene de nuestro ser interior, y expresa la reacción del espíritu
humano ante la vida, el amor y el mundo en el que el Señor nos ha
colocado. Puede elevar o degradar moral-mente al ser humano.
Aunque no está destinada a alabar a Dios, puede tener un lugar
legítimo en la vida del cristiano. En su elección debería seguirse los
principios presentados en este documento.

Principios guiadores para el cristiano


La música con la que se deleita el cristiano debería estar
regulada por los siguientes principios:

1. Toda la música que el cristiano escuche, interprete o


componga, ya sea sacra o secular, glorificará a Dios: "Si, pues,
coméis o bebéis, o hacéis otra cosa, hacedlo todo para la gloria de
Dios" (1 Cor. 10:31). Éste es el principio bíblico fundamental.
Cualquier cosa que no pueda satisfacer esta norma elevada
debilitará nuestra experiencia con el Señor.
2. Toda la música que el cristiano escuche, interprete o
componga, ya sea sacra o secular, debería ser la más noble y la
mejor: "Por lo demás, hermanos, todo lo que es verdadero, todo lo
honesto, todo lo justo, todo lo puro, todo lo amable, todo lo que es de
buen nombre; si hay virtud alguna, si algo digno de alabanza, en
esto pensad" (FU. 4:8). Como seguidores de Jesucristo que
esperamos y anhelamos unirnos a los coros celestiales, consi-
deramos la vida en esta tierra como una preparación para, y un
anticipo de la vida en un cielo nuevo y una tierra nueva.
De estos dos fundamentos -glorificar a Dios en todas las cosas, y
elegir lo más noble y lo mejor- dependen los demás principios que
se presentan a continuación para la selección musical por parte de
los cristianos:
3. La música debe caracterizarse por ser de calidad, equilibrada,
apropiada y auténtica. Fomentará nuestra sensibilidad espiritual,
psicológica y social, y nuestro crecimiento intelectual.
4. Apelará tanto al intelecto como a las emociones, y tendrá un
efecto positivo sobre el cuerpo.
5. La música revelará creatividad y estará compuesta con
74

melodías de calidad. Cuando se utilice armonía, 3 ésta debe ser


usada de una forma interesante y artística, con ritmos que la
complementen.
6. La música vocal empleará letras que estimulen positivamente
nuestras habilidades intelectuales, así como nuestras emociones y
nuestra fuerza de voluntad. Las buenas letras son creativas, ricas en
contenido y de buena composición. Se concentran en lo positivo y
reflejan valores morales; educan y elevan; y se corresponden con
una teología bíblica sólida.
7. Los elementos musicales y literarios deben obrar
armoniosamente unidos para influir sobre el pensamiento y la
conducta, en concordancia con los valores bíblicos.
8. La música debe mantener un equilibrio prudente de los
elementos espirituales, intelectuales y emocionales.
9. Debemos reconocer y aceptar la contribución de diferentes
culturas en la adoración a Dios. Las formas y los instrumentos
musicales varían en gran manera dentro de la familia adventista
mundial, y la música proveniente de una cultura puede sonar
extraña para alguien de una cultura diferente.
Hacer música adventista significa elegir lo mejor y, sobre todo,
acercar nos a nuestro Creador y Señor para glorificarlo. Enfrentemos
el desafío de tener una visión musical alternativa viable y, como
parte de nuestro mensaje profético, hacer una contribución musical
adventista distintiva como un testimonio al mundo respecto de un
pueblo que espera el pronto regreso de Cristo.
Referencias:
' "Es uno de los medios más eficaces para grabar en el corazón la verdad espiritual"
(La educación, p. 168).
1 Ella también dice que "justamente antes de la terminación del tiempo de gracia
[...] habrá vocerío acompañado de tambores, música y danza. El juicio de algunos
seres racionales quedará confundido de tal manera que no podrán confiar en él para
realizar decisiones correctas. Y a esto consideran como la actuación del Espíritu Santo.
El Espíritu Santo nunca se manifiesta en esa forma, mediante ese ruido
desconcertante. Esto constituye una invención de Satanás para ocultar sus ingeniosos
métodos destinados a tornar ineficaz la pura, sincera, elevadora, ennoblecedora y
santificadora verdad para este tiempo" (Mensajes selectos, t. 2, p. 41).
' Reconocemos que en algunas culturas la armonía no es tan importante como en
otras culturas.
Estas orientaciones fueron aprobadas por la Junta Ejecutiva de la
Asociación General en el Concilio Anual desarrollado en Silver Spring,
Maryland, el 13 de octubre de 2004, y por la junta Directiva Plenaria de la
División Sudamericana realizada en Brasilia el 3 de mayo de 2005.
75

APENDICE V
LA MÚSICA EN LA IASD DE SUDAMÉRICA
(del libro “Declaraciones, orientaciones y otros documentos)
La Iglesia Adventista del Séptimo Día surgió en cumplimiento de
la profecía con el objetivo de preparar a un pueblo para el regreso
de Jesús. Fue escogida como un instrumento divino para proclamar
a todo el mundo las buenas nuevas de salvación por la fe en el
sacrificio de Cristo y la obediencia a sus mandamientos.
La vida de quienes aceptan esa responsabilidad debe ser tan
consagrada como su propio mensaje. Este principio se aplica, de
manera especial, a los que, por medio de la música, tienen la
misión de conducir a la iglesia de Dios en la adoración, la alabanza
y la evangelización, ya que "la música sólo es aceptable para Dios
cuando el corazón es consagrado, enternecido y santificado" (Elena
de White, Carta 198, 1895). Es necesario recibir primero para ofrecer
después. Es necesario tener un compromiso personal con el
mensaje para poder transmitirlo luego. Es necesario tener un
encuentro personal con Dios para entonces reconocer su santidad,
y así desarrollar una sensibilidad musical adecuada.
Ante esta realidad, los que producen, seleccionan o interpretan la
música usada en la iglesia necesitan mucha comunión, sabiduría,
orientación y apoyo. Deben tener una visión de la grandeza del
ministerio que tienen en sus manos, y también el máximo cuidado
al hacer sus elecciones. "No es suficiente entender los rudimentos
del arte de cantar, sino que, junto con la comprensión y el
conocimiento, debe haber tal conexión con el Cielo que los ángeles
puedan cantar por intermedio de nosotros" (Mensajes selectos, t. 3,
p. 383).
La música es uno de los dones más grandes dados por Dios y,
por eso mismo, es un elemento indispensable en el proceso de
crecimiento cristiano. La música es uno de los grandes dones que
Dios concedió al hombre, y uno de los elementos más importantes
en un programa espiritual. Es una avenida de comunicación con
Dios, y "es uno de los medios más eficaces para grabar en el
corazón la verdad espiritual" (La educación, p. 168).
Ejerce influencia sobre asuntos de consecuencias eternas.
Puede elevar o degradar, y ser empleada tanto para el bien como
para el mal. "Tiene poder para subyugar naturalezas rudas e
76

incultas, para avivar el pensamiento y despertar simpatía, para


promover la armonía en la acción, y desvanecer la melancolía y los
presentimientos que destruyen el valor y debilitan el esfuerzo" (La
educación, p. 168).

La música es uno de los elementos más importantes en cada


actividad de la iglesia, y por eso debe ser usada siempre de
manera edificadora. "El canto es uno de los medios más eficaces
de impresionar el corazón con la verdad espiritual. A menudo, por
las palabras del cántico sagrado, fueron abiertas las fuentes del
arrepentimiento y de la fe" (El evangelismo, p. 365).
Las siguientes orientaciones son presentadas procurando el
crecimiento del área de la música, de cada músico involucrado y de
la iglesia como un todo. Complementan los principios presentados
por la Asociación General, y deben guiar el uso de la música dentro
de la Iglesia Adventista en Sudamérica. Su aceptación proporcionará
elecciones sabias, el cumplimiento de la misión y la conquista de
mejores resultados.
Con el fin de identificar correctamente el papel de la música y de
los músicos adventistas, toda la actividad musical de la iglesia
deberá ser llamada Ministerio de la Música. Los músicos adventistas
tendrán una visión clara de su papel como ministros; y la iglesia, una
visión distinta de la música, su objetivo y su mensaje como un
ministerio.

I. El músico
J. Debe cultivar una vida de devoción, a la altura de un cristiano
auténtico, basada en la práctica regular de la oración y la lectura de
la Biblia.
2. Necesita expresar su encuentro personal con Cristo por medio
de la música.
3. Debe, en consecuencia, tratar a la música como una oración o
un sermón, preparándose espiritualmente para cada presentación (E¡
evangelismo, pp. 371,372).
4. Debe representar correctamente los principios de la iglesia en
su vida y reflejar el mensaje de la música que presenta, edita o
compone.
5. Debe estar en armonía con los principios de la iglesia,
77

viviendo los principios de la mayordomía cristiana y siendo miembro


activo de una iglesia local.
6. Necesita desarrollar el arte, en todas sus actividades, como un
ministerio. No resaltar su imagen personal, sino el mensaje que será
transmitido.
7. Cuida su apariencia personal, para reflejar el patrón de modestia
y decencia presentado por la Biblia.
8. Canta con entonación clara, pronunciación correcta y
articulación distinta (Obreros evangélicos, p. 370).
9. Evita todo lo que pueda apartar la atención del mensaje de la
música, como gesticulación excesiva y extravagante, y orgullo en la
presentación(El evangelismo, p. 365).
10. Evita la amplificación exagerada, tanto vocal como
instrumental, en sus presentaciones.
11. Evita el uso de tonos estridentes, distorsiones vocales o
instrumentales, así como también el estilo de los cantantes
populares.
12. Respeta el ambiente de la iglesia y las horas del sábado al
vender sus materiales.
13. Debe recibir orientación y apoyo espiritual por parte del
liderazgo del Ministerio de la Música, los líderes de la iglesia y el
pastor local.

II. La música
1. Glorifica a Dios y ayuda a los oyentes a adorarlo de manera
aceptable.
2. Debe ser compatible con el mensaje, manteniendo el equilibrio
entre el ritmo, la melodía y la armonía (1 Crón. 25:1, 6, 7).
3. Debe armonizar la letra con la melodía, sin mezclar lo sagrado
con lo profano.
4. No sigue tendencias que abren la mente hacia pensamientos
impuros, que llevan a comportamientos pecaminosos o que
destruyen el aprecio por lo que es santo y puro. "La música secular
o aquella que sea de naturaleza dudosa o cuestionable nunca
debiera introducirse en nuestros cultos" (Manual de la iglesia, p. 74).
5. No se deja guiar sólo por el gusto y la experiencia personales.
Los hábitos y la cultura no son guías suficientes en la elección de la
música. "En algunas de nuestras iglesias he escuchado solos que
78

eran inapropiados para el servicio de culto en la casa de Dios. Las


notas prolongadas y los sonidos peculiares, tan comunes en el canto
de ópera, no agradan a los ángeles. Éstos se complacen en oír los
sencillos cantos de alabanza expresados en un tono natural" (El
evangelismo, p. 372).
6. No debe rebajarse con el fin de obtener conversos, sino que
debe elevar al pecador hacia Dios (El evangelismo, p. 105). Elena de
White dice que se volverá a escuchar, justo antes de la terminación
del tiempo de gracia," [...] vocerío acompañado de tambores,
música y danza. El juicio de algunos seres racionales quedará
confundido de tal manera, que no podrán confiar en él para realizar
decisiones correctas. Y a eso consideran como la actuación del
Espíritu Santo. El Espíritu Santo nunca se manifiesta en esa forma,
mediante ese ruido desconcertante. Eso constituye una invención
de Satanás para ocultar sus ingeniosos métodos destinados a tornar
ineficaz la pura, sincera, elevadora, ennoblecedora y santificadora
verdad para este tiempo" (Mensajes selectos, t. 2, p. 41).
7. Provoca una reacción positiva y saludable en quienes la oyen.

III. La letra
1. Debe ser de fácil comprensión y estar en armonía con las
enseñanzas de la Biblia.
2. Debe tener valor literario y teológico consistente. No usar letras
livianas, vagas y sentimentales, que apelen sólo a las emociones
3. No debe ser superada por los arreglos o los instrumentos de
acompañamiento.
4. Debe mantener el equilibrio entre himnos dirigidos a Dios y
cánticos que contienen peticiones, llamados, enseñanzas,
testimonios, amonestaciones y ánimo (Col. 3:16; Efe. 5:19).
5. No debe presentarse en otro idioma que no sea el local, para
que pueda ser comprendida y los oyentes sean edificados.

IV. La alabanza de la congregación


1. Debe ser más valorada, porque por medio de ella toda la
iglesia participa. "No siempre unas pocas personas deben hacerse
cargo del canto. Tan a menudo como sea posible, hay que hacer
participar a toda la congregación" (Testimonios para la iglesia, t. 9, p.
116). Los momentos de alabanza de la congregación:
79

a. Involucran la participación de todos en el culto.


b. Armonizan el corazón del hombre con Dios.
c. Ejercen una influencia unificadora del pueblo de Dios
en un solo pensamiento.
d. Dan oportunidad para expresar las emociones y los
sentimientos personales.
e. Fortalecen el carácter.
f. Tienen gran valor educativo.
g. Resaltan un buen principio de mayordomía, al
desarrollar un talento dado por Dios.
h. Dirigen al oyente hacia Cristo.
2. No debe ser usada para llenar espacios vacíos, o un imprevisto.
Debe estar incluida dentro de cualquier culto o programa, en un
momento especial, valorando su importancia.
3. No debe ser realizada de manera fría, automática o con falta
de preparación. Los himnos que serán cantados y el mensaje que
será expuesto deben estar unidos entre sí, fruto de la planificación
y de la cuidadosa organización entre los líderes y el Ministerio de la
Música (Joyas de los testimonios, t. 1, p. 458).
4. Siempre y cuando sea posible, el ministro de la alabanza debe
ocupar un lugar en la plataforma, como uno de los participantes en el
culto de adoración.
5. Deben ser estimulados grupos musicales que involucren a una
buena cantidad de personas. "[...] Muy pocas veces convendrá que
los cantos sean ofrecidos por unos pocos" (Consejos sobre la salud,
p. 481).
6. Debe haber cuidado especial para no usar músicas que
apenas agraden a los sentidos, tengan conexión con lo carismático
o den prioridad al ritmo.

V. Los instrumentos
1. Los instrumentistas de la iglesia siempre deben ser estimulados
a participar de los cultos de adoración, con instrumentos en vivo.
Hablando del canto, Elena de White recomienda: "[...] Acompáñese
entonces el canto con instrumentos musicales tocados con
habilidad. No hemos de oponernos al empleo de instrumentos de
música en nuestra obra" (El evangelismo,p. 370).
2. Debe haber mucho cuidado al utilizar instrumentos asociados
80

con la música popular y folclórica, o que necesiten amplificación


exagerada.
Cuando son mal utilizados, hacen competencia al mensaje de
la música y lo debilitan.
3. El uso de play-backs para números especiales debe ser
alternativo. Deben ser usados de manera equilibrada, siempre en
apoyo al canto de la congregación.
4. Los instrumentos deben ocupar su papel de acompañamiento,
dando prioridad al mensaje. "La voz humana que canta la música de
Dios con un corazón lleno de gratitud y agradecimiento, es para él
mucho más agradable que la melodía de todos los instrumentos
musicales que han sido inventados por manos humanas" (El
evangelismo, p. 369).
5. Debe tener prioridad -antes que las orquestas, las bandas y
otros grupos- la presentación de música que esté dentro de las
recomendaciones de la iglesia y que edifique a los oyentes.

VI. Las producciones musicales


1. Deben caracterizarse por resaltar nuestro mensaje distintivo.
2. Los compositores, los arregladores, los productores y los
directores deben dar prioridad, valorar y trabajar con músicos que
estén comprometidos con los principios musicales de la iglesia.
3. Las producciones musicales de las instituciones adventistas
deben ser referencias de los valores musicales de la iglesia.
4. Se debe prestar atención y cuidado especial a las producciones
vendidas en locales de propiedad de la iglesia, para que reflejen
nuestros valores musicales.
5. La música presentada en las estaciones de radio y los canales
de televisión que son propiedad de la iglesia, también debe reflejar
nuestros valores musicales. Ella posee una gran influencia, forma la
cultura musical de la iglesia, y llega a ser una referencia musical de
la iglesia para los oyentes y los telespectadores.

VII. La educación musical


1. Debe considerarse la posibilidad de apoyar a los niños en su
entrenamiento musical, con el fin de preparar a futuros músicos que
servirán en la iglesia. Este apoyo podrá ser dado por medio de
maestros de música de la propia iglesia, o patrocinar clases de
81

música para algún interesado.


2. La música debe ser valorada y bien trabajada en los hogares
cristianos. La instrucción y la formación de un gusto musical
saludable debe comenzar temprano en la vida de los niños. Los
padres deben conversar, orientar y ser un modelo positivo para sus
hijos al escoger con sabiduría la música que será escuchada en
casa.
3. La educación adventista debe estimular a los alumnos en el
aprendizaje de instrumentos musicales, lectura de partituras y
canto vocal en coros o grupos.
4. En todas las instituciones educativas adventistas, las
presentaciones musicales deben estar en armonía con las
directrices de la iglesia. Esto se aplica tanto a los talentos locales
como a artistas y grupos visitantes, y también al uso de los medios
de comunicación para entretenimientos (películas y otros)
patrocinados oficialmente por la institución.

VIII. La administración de la música en la iglesia


1. Cada iglesia debe tener su comisión de música debidamente
organizada y que mantenga reuniones regulares. La administración
del Ministerio de la Música no debe estar en manos de una sola
persona.
2. Deben realizarse charlas, sermones, seminarios o festivales de
alabanza que involucren a cantantes o grupos, y fortalezcan el
compromiso con la iglesia y sus principios musicales.
3. El liderazgo de la iglesia debe animar a sus miembros a
desarrollar sus talentos musicales, al establecer un coro, un
cuarteto, un grupo musical, una orquesta o fortalecer un talento
individual.
4. La iglesia debe, dentro de lo posible, tratar de adquirir algún
instrumento musical propio para fortalecer la alabanza y la
formación musical.
5. La comisión directiva del Ministerio de la Música debe
organizar y preparar música especial, y elegir un responsable de la
alabanza de la congregación para todos los cultos de la iglesia.
6. La salida o la recepción de grupos musicales o cantantes debe
tener una recomendación oficial de la iglesia de la que son
82

miembros. Esta actitud valora a los buenos músicos y da seguridad


a la iglesia.
7. La música no debe ser motivo de discusiones o actitudes
radicales. La búsqueda del modelo divino debe ser guiada por el
amor y la oración, y no por la imposición.

IX. La música en la evangelización


1. Toda presentación musical debe contener, siempre y cuando
sea posible, un mensaje bíblico y un llamado u ofrecimiento de un
curso bíblico a quienes aún no estén bautizados, tratando de
llevarlos a Jesús.
2. Los grupos musicales y los cantantes deben buscar maneras de
actuar directamente, y de forma sistemática, en las campañas
misioneras y evangelizadoras de la iglesia; o desarrollar sus propios
proyectos para cumplir la misión.

X. La música en el culto
1. Dentro del culto y la adoración a Dios, la música debe ocupar
un lugar tan especial como la oración y el mensaje de la Biblia. La
música es un sacrificio de alabanza, un medio de promover el
crecimiento espiritual, de glorificar a Dios y de dirigir al oyente hacia
él.
2. El mensaje musical especial y la alabanza de la congregación
deben estar en armonía con el mensaje bíblico que será
presentado. Eso fortalece su impacto.
3. La música para el culto debe tener belleza, majestad y poder
(Joyas de los testimonios, t. 1, p. 458).
4. La música debe ser escogida de manera específica para cada
ambiente, programa o culto de la iglesia. "Los que hacen del canto
una parte del culto divino, deben elegir himnos con música apropiada
para la ocasión, no de notas fúnebres, sino alegres, y, con todo,
melodías solemnes" (El evangelismo, p. 370).

XI. El equipo de audio y vídeo


1. Debe trabajar, en sociedad con el Ministerio de la Música, en la
planificación y la organización del programa musical de la iglesia.
83

2. Mantendrá los principios presentados en este documento,


especialmente en lo que se refiere al uso de materiales sonoros y
visuales en la adoración, la alabanza y la liturgia.
3. Ofrecerá apoyo técnico a los cantantes, músicos, grupos
vocales e instrumentales, antes y durante las presentaciones, con
el objetivo de tener una buena calidad en la adoración y la
alabanza.

XII. La música secular


1. Los principios de elección musical deben servir tanto para la
música "sacra" como para la "secular". En ningún momento
dejamos de ser hijos e hijas de Dios que tratan de glorificarlo en
todas las cosas.
Siempre escogeremos sólo lo mejor.
2. La elección de la música "secular" debe estar caracterizada
por un equilibrio saludable en los elementos del ritmo, la melodía y
la armonía, con una letra que exprese ideales de gran valor.
3. Debe haber cuidado especial en la elección de la música en
programas especiales dentro de la iglesia, tales como: ceremonias
de matrimonio, cultos de acción de gracias, seminarios y otros.

Conclusiones
Vivimos en un momento difícil, en el que cada vez más las
personas y las sociedades expresan sus sentimientos religiosos sin
una clara orientación cristiana y bíblica. La música ha llegado a ser
un asunto fundamental, que requiere discernimiento y decisión
espirituales.
En consecuencia, debemos formularnos las siguientes preguntas
importantes mientras tratamos de hacer buenas elecciones
musicales:
1. La música que estamos escuchando o presentando, ¿tiene
consistencia moral y teológica tanto en la letra como en la melodía?
2. ¿Cuál es la intención que está detrás de esta música?
¿Transmite un mensaje positivo o negativo? ¿Glorifica a Dios (1
Cor. 10:31) y ofrece lo que es más noble y mejor (Fil. 4:8)?
3. ¿Está la música comunicando su intención eficazmente? ¿Está
el músico promoviendo una atmósfera de reverencia? La letra y la
música, ¿dicen la misma cosa?
84

4. ¿Estamos buscando la orientación del Espíritu Santo en la


elección de la música religiosa y secular?
El consejo de Pablo es claro: "[...] Cantaré con el espíritu, pero
cantaré también con el entendimiento" (1 Cor. 14:15). No hay duda
de que la música es una expresión artística que toca los
sentimientos. Esto nos lleva a evaluar, escoger y producir música de
manera racional, teniendo en cuenta su poder, y tratando de cumplir
el propósito de Dios para la edificación de la iglesia y la salvación
del mundo.
No podemos olvidar que "la música es de origen divino. Hay gran
poder en ella. Fue la música de la hueste angelical la que emocionó
el corazón de los pastores en las llanuras de Belén y alcanzó el
mundo entero. Es mediante la música como nuestras alabanzas se
elevan hacia quien es la personificación de la pureza y la armonía.
Es con música y con cantos de victoria como los redimidos entrarán
finalmente en la recompensa eterna" (Mensajes selectos, t. 3, p.
382).

Estas orientaciones fueron aprobadas por la Junta Directiva Plenaria de la


División Sudamericana, realizada en Brasilia, el 3 de mayo de 2005.

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