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P e r i o d i c o Cr i o l l o
DIRECTOR
ALCIDES DE-MARÍA
COLABORADORES: VAHIOS AVENTAJADOS LITERATOS NACIONALES
A dm inistrador: EN RIQ U E D F-M ARIA
Solé a lu z lodos los D om ingos
Suserieióo mensual . . . 50 cents.
Número su elto .................... 16 »
» atrasad o.............20 »
Avisos y otras publicaciones convencional.
Le aseguro, don Cirilo, que lia sido
una cosa grande la manera como ha
acudido la gente al Pabellón Nacional
cada vez que se ha anunciado que iba á
volar ese pájaro; y sobre todo las descar­
gas cerradas de aplausos que el público
menudeaba saludando los pasajes de la
obra, en que figuran en primera línea los
Añol ——S Montevideo, Diciembre 29 de 1895—— <¡N. 17 criollos.
No se crea, compañero, que le estoy
SUMARIO DEL. NUMERO 17—A don guayabeando al pintarle la cosa de tal
Cirilo Gua3quita avecindado en C anarias.— suerte, por tratarse de un compañero de
C arta de Calisto el Ñato al Presidente de la
Criolla.—Una interesante Carta de don Ri­ fogón.
cardo Palm a. —a vuelo d9 pájaro. R evista Puedo citarle en mi apoyo la opinión
criolla por E nrioue De-Haría ( C ontinua­
ción).—Correo de «El Fcgon», (La.3 carreras. de la prensa, que al mismo tiempo que
Dentrada, A Manolo). —Año nuevo. —C arta le servirá de prueba en cuanto al éxito de
de Pancño Truco á 3 U compadre Sebastian. la obra y á lo de que menudearon las des­
cargas de aplausos, puede servirle tam­
AdonCiriloGuaspita bién para que les haga ver á los cana­
rios que no hay tierra en el mundo en que
AVECINDADO ENCANARIAS se escriba con mayor libertad que en la
nuestra para toáoslos gustos, y en que
Maroñas Diciembre 24 de 1805. venga mas á pelo el argumento de la
Estimado paisano: célebre comedia de Echegaray «El Cri­
tico^incipiente».
Le enderezo esta larga enflautada Yaya oyendo, don Cirilo, las opinio­
para poner á sus alcances la noticia del nes de nuestros mas entendidos gacete­
estreno de una revista criolla á que lla­ ros sobre esa revista criolla.
man «A vuelo de pájaro» de que son au­ Principiaré por el preludio que es una
tores nuestro compañero de fogón Enri­ música compuesta sobre motivos de
que De-Maria y el maestro Yidegain y nuestro pericón y que arrancó en el es­
que ha causado mas alboroto en la po­ treno las primeras descargas de aplausos
blación que la mejor de las comedias que se mantuvieron por un rato como
pasta ahora representadas en nuestros fuego por batallones.
teatros. «La sinfonía aunque es un revoltijo de
/rases musícedes, se hace aplaudir porque mayoría de un público numeroso en ex­
contiene un tema agradable, (no dice cual) tremo, la revista clel señor Enrique De-
entremediado con reminiscencias del María.
perico 11 ».—(La Razón.) La interpretación de la obrafuébuena.
«El maestro Yidegain, autor de la mú­ Gil hace dos ó tres papeles perfectamente,
sica, lia escrito "na sinfonía que vale un lo mismo que Mesa; la Montenegro se
mundo».—(La España.) porta bien, secundada por la Calvo y de­
«Apenas terminada ta sinfonía, todo el más artistas.
mundo elevó las manos para aplaudir «Al final se bailó muy bien el Pericón
entusiasmado el mérito artístico de aque­ Nacional.
lla música salpicada de aires criollos que «Esta noche se dá «Como está la socie­
traían á la memoria el <jrato recuerdo de dad», «La Czarina», «Niña Pancha» y «A
nuestras costumbres camperas:»—(El Sí- vuelo de pájaro». Esta llevará al teatro
dio).
«A la obra le lian puesto una música una concurrencia tan grande como la de
bonita de la que se destaca el preludio.»— anoche y recibirá iguales aplausos.»—(El
(El Dia.) Día.)
«El público numeroso estaba predis­ «A vuelo de pajaro .—Hoy se repre­
puesto al aplauso.—Batió palmas á una senta por tercera vez esta revista en el
especie de sinfonía sobre la cual no abri­ Pabellón Nacional. Ha sido acojida con
mos juicio y disculpemos Yidegain; por­ un éxito de que no hay precedentes en
que somos como aquel que dijo que para los anales de nuestros teatros y la con­
él la música era el mas molesto de los currencia que ha desbordado én aquella
ruidos».—(La Pre/isa.) sala sería suficiente para llenar las de So­
Ateme, amigo Guasquita, esas mos­ lis, Cibils y San Felipe á la vez.»—(Mon­
cas por el rabo y vaya viendo lo que tevideo Noticioso.)
dicen ahora los gaceteros sobre la parte «Ante una distinguida y numerosa con­
del compañero de fogon: currencia se estrenó anoche la obra del
«Si el triunfo obtenido en el estreno de joven De-María titulada «A vuelo de pá­
una obra dramática, garantizase perdu­ jaro». Es una obra que le valdrá muchos
rablemente el éxito de las sucesivas, bien aplausos al joven escritor y muchos lle­
podría el joven Enrique De-María dedi­ nos á Enrique Gil.
carse sin temores á la composición de La falta de espacio nos impide hacer
nuevas piezas, después de las merecidas una reseña de la obra.»—(El Nacional.)
ocasiones que anoche recibió la revista «La novedad de anoche en el Pabellón
criolla A Vuelo de Pájaro, del numerosí­ fue el estreno de la revísta criolla «A vue­
simo público que acudió al Pabellón, lo de pájaro» letra de Enrique De-María,
atraído ya por la fama de incipiente dra­ el autor de «El melón de invierno», y mú­
maturgo. sica del maestro Yidegain, director de
El joven De-Maria nos ha hecho des­ orquesta del referido Pabellón. El público
filar por el pequeño escenario, con lujo interesado en conocer la nueva obra de
de detalles, que denuncian la bondad de De-María asistió en buen número al tea­
su espíritu observador, las costumbres tro, que se llenó en la tercera sección.
mas salientes de los hombres de papo y Á nuestro juicio, De-María no ha esta­
china, y aun también con crítico gracejo, do acertado en su obra. De que es una
la de otros que pasan por hombres bien. revista no cabe la menor duda, pero de
Sigamos también nosotros á vuelo de lo que se duda, es deque ella sea tan inte­
pájaro la revista criolla.......... resante y tan buena como se había anun­
Un incidente se produce en la platea, ciado. Falta en ella muchas cosas: chiste,
que conmociona aratlditorio: un concu­ escenas pasables y desarrollo lógico. Hay
rrente chilla como un marrano porque algunas gracias que se pasan de tales y
otro le ha molestado con sus aclamacio­ otras de marca alemana.
nes extemporáneas. Protesta cada uno de Al final de la representación, el autor
la conducta incorrecta cíe su interlocutor, fué llamado á la escena, aplaudiéndole el
produciendo el consiguiente escándalo, público durante algunos instantes.»—(Lo
hasta que acude un vigilante y les con­ Tribuna).
duce en dirección.. .al escenario. Era el «Numerosa concurrencia llevó anoche
primer cuadro de la revista! á este teatro de verano, el anuncio del es­
A11i estaba retratado el temperamento treno de la revista «A vuelo de pájaro»
de los que por pagar unos reales por un del joven De-Maria, que obtuvo un éxito
asiento, se creen con derecho á molestar ruidoso.
al prógimo con sus majaderías.»—(El Si­ Rica en escenas, chistes, tipos y pai­
glo.) ♦ sajes, la obra del señor De-Maria está
«Fué aplaudida anoche de una manera llamada, en el interés siempre creciente
estruendosa y estusiasta, por la gran con que se desarrolla su acción, á figu­
rar en los carteles muchas veces y á lie- quiere la cosa. Yo creo que una revista
var al Pabellón gran concurrencia. local podriaseren Montevideo algo mas
Por ello felicitamos al inspirado autor que una colección de retazos de cosas
y á la Empresa.»—(El Censor.) viejas recojidas aquí y allí, y que tenemos
«Con el mismo exitoso repitió anoche muchos temas originales que merecen
«A vuelo de pájaro» obteniendo una bue­ ser originalmente tratados. Pero, como
na interpretación por parte de la compa­ quien anda por la calle recojiondo colillas
ñía Gil. (puchos, en criollo) el señor De-María,
Este hace un compadrito verdadero, recoje todos los desperdicios de las obras
y de gaucho nada tiene que envidiar á buenas ó malas «que en el mundo han si­
nuestros paisanos. do». Y asi, comienza su revista con un
El pericón admirable, bailado por la escándalo figurado en la platea, escánda­
compañía, con el refuerzo de elementos lo que no viene á cuento, y que no condu­
de Petray, tué muy aplaudido, y muy fes­ ce a nada, sino es á fastidiar á los que
tejadas las relaciones, algunas de una están hartos de ver ya el mismo truc
crudeza subida.» (La Prensa.) gastado, en obras de todo género.... ¿Por­
«No podemos juzgar la obra porque no que presenta en escena á un diputado
la oimos, á causado los aplausos de la borracho? No me parece que sea la em­
barra, pues no otra cosa parece el cómodo briaguez la cualidad- característica de
paraíso del teatro de verano. nuestros legisladores y no alcanzo donde
Si esta noche nos dejan oir la obra la está la sátira en esa personificación ab­
juzgaremos imparcialmente. surda. Igualmente inexacta y reprocha­
Lo que hoy nos toca censurares la ble es la escena de los dos mocosos de
parte final de una délas décimas que dice ocho ó diez años, (1) que se van con sus
la Montenegro, y que el autor no ha me­ queridas á comer en los gabinetes reser­
dido su alcance. vados de La Bella.. .Barcelona. (Sabían
No es patriota quien no es orienta/, dice Yds. que existían tales gabinetes?....No?,..
esa linca, vesto sencillamente constituye Pues ya lo saben. Para algo sirven estas
una ofensa para todos los asistentes á la Revistas!...) La escena del compadrito y de
función que no hayan nacido en tierra la china, no tiene mas defecto que ser la
uruguaya.»—(La España.) traducción criolla de otra escena exac­
«Si alguna vez cayera en la tentación de tamente igual que existe en El Plato del
escribir para la escena, juro que me con­ Dia. Hay alli un dúo sobre temas de mi­
tentaría con obtener la décima parte del longa, que resulta bastante malo, pero que
aplauso que recibió anoche el autor de A fué aplaudido con entusiasmo loco —
vuelo de pájaro. Creo que nunca he pre­ Se bisó la milonga y el baile, en que Gil
senciado un bochinche igual en el público, y la Montenegro pusieron todas las que­
y de seguro mis tímpanos no recuerdan bradas posibles.:.pero quebradas de tango,
otro clamoreo igual. El señor De-María que nada tenían que ver con nosotros.
debe estar srtisfecho y orgulloso: su obra Una crítica al letrero del Ateneo fué
ha llevado al Pabellón el máximun de unánimemente siseada por el público.
concurrencia, y si los éxitos han de juz­ (Aplaudida, habrá querido decir el señor
garse por lo que aturden, el suyo no tiene cronista........................................ )—Vino
precedentes en el Río de la Plata y casi después el cuadro criollo, con el pericón,
estoy por decir que en el mundo entero. y las décimas obligadas, y los hermanos
Noliacemucho que tuve ocasión de aplau­ Petray y el eterno Cocoliche. Me pareció
dir en el señor De-María, algunas dotes estar cii el Circo. «Entre todas las potran­
de verdadero autor dramático: alabé su cas— Vos sos la que mas estimo—Y se
ingenio, la soltura de sus frases, y la ex- me para la cola—En cuanto oigo tu relin­
pontánea naturalidad de su versificación. cho!»—Grandes risas, y una ovación á
Meratifico en todos estos elogios que solo Gil.—«No me mirés mi chinita—Con esos
son justicia después de oir la nueva obra, ojos de gato—Me parece que me quieres
porque aunque mi entusiasmo no so caldeó —1Tomar para el Patronato». Delirio, pa­
anoche hasta el rojo blanco, como el de al­ roxismo de entusiasmo, y el acabóse.
gunos de mis vecinos de butaca, no dejo Después de esto salió la Montenegro,
de reconocer que la revista está bien dia­ personificando á la Patria, vestida de
logada, que posee ocurrencias felices, y raso blanco y celeste con gorro frigio en
que está reforzada con ingeniosas alusio­ la cabeza, y—llevando en la mano un ban-
nes de oportunidad. Pero, si está bien deron nacional que se perdía en las bam­
dialogada, en cambio está pésimamente balinas,—comenzó á recitar unas octavas
zurcida; si tiene ocurrencias, tiene tam­ en que se aconsejaba el trabajo, la con­
bién una docena de cosas inconvenientes; cordia y la paz. Uno de los versos más
y á veces, en esas alusiones picantes de bellos de esas octavas, es, si la memoria
que acabo de hablar, se pasa el autor al
patio y hasta á la cocina, como quien no (i) El autor indica que tienen quince.
no me engaña, éste, que fué muy aplau­ nosotros, y según La Prensa, hizo Gil un
dido: No es patriota quien no es orien­ compadrito verdadero.
tal!. . .Alzóse un telón, apareeió Artigas, Naturalmente que tratándose de esos
mas narigudo que de costumbre, monta­ tipos nadie mas competente para juzgar­
do en un caballo de bronce, y entre luces los que el público grueso como dice el
de bengala y aplausos frenéticos conclu­ que ha escrebido más largo, y ese público,
yó la farra.. .quiero decir, la revista. No amigo, les meneaba aplausos que daba
sé si el señor De-Maria habrá tomado en miedo cada vez que los veia Isalir al esce­
serio los aplausos de anoche, pero como nario.
lo juzgo hombre inteligente, me atrevo á Hay uno de los gaceteros que manifies­
suponer que no. Hay tres ó cuatro gracias ta que no le gustó nada un verso que di­
finas en su obra, que no han sido com­ ce: «no es patriota quien no es oriental»
prendidas por el público, mientras que y otro que por el contrarío asegura que
las gruesas.. al momento!... »—(La Ra­ es el mas bello de todos.
zón). De esos mismos gaceteros, uno dice
Y ahora, amigo don Cirilo, permítame que ese verso pertenece á una décima
que aunque medio bruteando y recono­ dicha por la comcdianta y el otro que á
ciendo, por supuesto, que es un atrevi­ una octava. Buenas orejas deben tener
miento de mi parte el meter mi cuchara los dos seguramente, porque según opi­
en la carbonada de opiniones que re­ nión de otro que entiende eran puras
sultado lo que le dejo ti nscribido, le haga cuartetas. ¡Hagase cargo, amigaso Guas­
algunas aclaraciones que me parecen del quita y saque ía consecuencia!
caso. Luego hay otro entendido que dice que
Principiaré por decirle que el gacetero esa Revista no vale la pitada de un pucho
de La Razón, que le ha pegado tan juerte porque la gracia que tiene es de marca
es, según dicen, el que sostuvo no hace edemana.
mucho un tiroteo con el presidente de La Le pregunté á un aleman que sabe
Criolla, que defendía y defiende las tradi­ mucho y se puso á reir de la ocurrencia,
ciones de nuestros gauchos. porque precisamente, según me dijo, los
Era pues, natural, que al sonar las gui­ alemanes son los que están mas arriba
tarras que acompañan las décimas y el en los chistes de sus comedias, de manera
pericón de la Revista, el gacetero resolla­ que el gacetero se había pisado el palito
ra por la herida, porque aquello pasaba haciéndole sin querer un elogio morroco­
en La Criolla y el publico lo aplaudía has­ tudo á la Revista.
ta dejarlo sordo y templao como para Le agregaré, como que viene á pelo,
cantaral otro dialo que le dejo trascribiclo. que el gacetero de La Razón dice que hay
Es cosa brava, amigo Guasquita, la gracias finas en la obra, que no han sido
picadura de la ortiga en cuero que no es comprendidas por el público. (¡Que públi­
curtido, y yo creo que ese señor gacete­ co tan bruto que no entiende lo bueno y
ro lo debe tener bastante dclicao, como aplaude lo que no sirve!)
hombre que se cuida. Y asi sigue la cosa, don Cirilo, si se
Pero dejeme revolver la carbonada, no estudia medio despacio.
sea cuento que se me queme. Pero lo que resulta de toda esa carbo­
Hay que dar vuelta primero al choclo nada. en que naturalmente hay algunas
del escándalo, figurado en la platea, que cosas buenas, es que el público en su
no viene á cuento y que no conduce á na­ mayoría es criollo, y por eso ha aplaudi­
da, según el gacetero de La Razón, y que, do noche á noché el «A vuelo de pája­
según el de El Siglo, retrata el tempera­ ro», en que el autor ha tenido el talento
mento de los que por pagar unos reales de darle con el gusto.
por un asiento, se creen con derecho á Nada le digo sobre la traducción del
molestar al prójimo con sus majaderías. tipo del compadrito, que yo creo que es
Para mi gusto el do El Siglo ha dado en la parte mas bien estudiada de la obra,
la matadura, y eso se explica, paisano, porque si por traducción se tomara el pa­
porque la música salpicada de aires criollos recido entre tipos de distintos países, to­
en vez de molestarlo, le trae á la memo­ dos los autores traducirían, como dicen
ria el grato recuerdo de nuestras costum­ que ha traducido (aunque yo creo que es
bres camperas. mentira) el autor de un cuento muy men-
Vamos ahora al zapallo del compadrito tao pero que no ha llevado á los teatros
y la china que «no tiene mas defecto que ni la décima parte de gente que la Re­
ser la traducción criolla de una excena de vista.
el Plato del Dia» y en que (según La Ra­ En resúmen, compañero Guasquita,
zón) Gil y la Montenegro hicieron quebra­ los hijos de nuestra tierra que tienen la
das de tango que nada tienen que ver con chifladura de desprestigiar lo criollo para
alabar lo de afuera, ya se lian podido Esta noche como es buena
convencer de que no hacen camino. Para de fijo que la Criolla
eso al menos ha servido la Revista. como quien dice: arda Troya!
Y es al ñudo que quieran despresti­ ai diablo manda la pena;
giarla criticando las escenas de la turca, y mientras que el ruido suena
de los compadritos y de nuestro pericón, de la animadora farra,
que por crudas y repulsivas que las pin­ mientras la dulce guitarra
ten, nunca sobrepasarán á las de la “Ver­ vibra entre el ancho galpón,
bena de la Paloma”, en que también hay aquí queda un corazón
turcas y compadres, mujeres de rompe y ciue de penase desgarra.
raja y bailes con quebradas', sin que todo ¿Y sabe porque, aparcero»
eso haya sido inconveniente para que los tanto lamento mi ausencia?
que hoy critican hayan hecho representar porque és esa la querencia
esa Verbena por niñas de familias de co­ que mas estimo y prefiero;
pete, y hayan ido á aplaudir con entu­ porque, como terutero
siasmo lo bien que representaban los pa­ que tiene una ala quebrada,
peles! me acuerdo de la bandada
Le recomiendo, paisano, este último á que hoy no puedo seguir
parrafito del gacetero de La. Razón'.— y le hago el canto sentir
“Alzóse un telón, apareció Artigas mas á través de la cañada.
narigudo que de costumbre, montado Me figuro desde acá
en un caballo de bronce y entre luces de verlo, viejo, entre el galpón
bengala y aplausos frenéticos, concluyó de bombacha con galón
la farra.. .quiero decir, la Revista. cual signo de autoridá.
Ahi tiene, paisano, como cualquiera Como se pavoneará
chacotea con la memoria venerable del como china petízona
primer patriota de este país; y ya verá, corriendo por esa zona
como el dia que se ocurra representar donde ronca el Coniendante
entre luces de bengala alguna escena de por ver si agarra infragante
Jauja, no han de decir que sea farra, por algún criollaso con mona.
mas que eso resulte la jaujada. Tenía aperao el caballo
Para terminar este chorizo, que se ha­ con mis quillangas mejores
ce muy largo, le diré que á mi entender para ir entre esos cantores
el gacetero de La Razón es quien mas ha á echar un truco con gallo;
inmortalizado la obra. La conclusion que pero de pronto un desmayo,
de su critica se desprende es ésta:—“A luego un tremendo dolor
mi no me gusta la obra porque no me y algo comprometedor
gusta nada que sea criollo, pero declaro que aquí esplicarle no puedo,
que su éxito colosal no tiene preceden­ me trajo tuito ese enríedo...
tes.” caso de fuerza mayor.
Su paisano y amigo Fué cosa muy apurada,
Mamerto Pajarito. talvez con complicaciones
de unos tomates verdiones
CARTA DE CALISTO EL ÑATO que me engullí en ensalada.
(Jomo tremenda patada
a l ' p r e s id e n t e d e l a c r io l l a de algún burro parejero;
Con motivo de la fiesta celebrada en su pero viera, compañero,
local social la noche de Navidad. no le miento, creamé,
¡puro acordarme de usté
en ese trance tan fiero!
Señor Presidente de «La Criolla» doctor Por fin me dió la patrona
don Elias Regules. un mate de manzanilla
EnMaroñas. que me ha sacao á la orilla
Como gaucho bien nacido como á la chancha rabona;
y atenta su invitación y ahora sobre la carona
ie mando hasta su fogon, estos renglones le escribo
que ha de estar bien encendido, pidiendo disculpa, amigo,
este gajo desprendido por no poder asistir,
del árbol del sentimiento porque me pueden venir
para que en cualquier momento otros dolores de ombligo.
como cobre entre la plata, Ya sabe pues, aparcero,
lo meta entre la fogata que así lamento la ausencia
de su envidiable talento. porque és esa la querencia
que mas estimo y prefiero; ciosa y hábilmente manejaba la musa
porque como terutero popular. Su panada á Calixto el Nato me
que tiene el ala quebrada ha deleitado infinito. Las antitesis déla
me acuerdo de la bandada parte IV son encantadoramente poéticas
á que no puedo seguir La musa de Hilario Ascasubi, que lué
y lo hago el canto sentir hace treinta años mi íntimo camarada en
á través de la cañada. París, retoza alegre en la pluma de Vd.
Que entre las chispeantes bromas, He recibido los números 2, 4 y 5 del
los cantares, los murmullos F o g o n . Las cartas, en prosa, de Braulio
y los plácidos arrullos y de Calixto, me han interesado mucho
de las herínusas palomas, como estilo gaucho por mi afición á la
cuando los suaves aromas prosa criolla, y por el tecnicismo enri-
embalsamen la llanura quccedordela lengua. Actualmente tengo
y con su grata frescura en prensa un librejo sobre Neologismos y
azote el aura la frente, Americanismos que no se encuentran
encuentren mas atrayente consignados en el Diccionario. Probable­
de los campos la hermosura. mente en quince dias mas quedará ter­
minada la impresión, y tendré el gusto
Que al resplandor de la luna de remitir áusted un ejemplar y otro pa­
y del chispeante fogón ra Daniel Granada, cuya dirección he
renazca la tradición olvidado, y á quien tendrá usted la ama­
que aprendimos en la cuna, bilidad de entregarlo. Hay en mi librejo
y como en clara laguna una docena de vocablos rio-platenses de
que imita bruñido espejo indispensable naturalización en la lengua
viva en todos el reflejo de Castilla.
de las glorias del pasado Volviendo á el F o g o n , ruego á usted
como aquí vive incrustado que si le fuere posible me consiga los
en el alma de este viejo. números 1, 3, 6 y siguientes. Tendría
Adiós criollos! ya no puedo gusto en coleccionar para la Biblioteca
seguir este pericón de Lima esa publicación. El criollismo
porque me causa emoción de las repúblicas del Plata es mas origi­
y entre las cuartas me enriedo. nal y mas americano que el nuestro.
Triste y enfermo me quedo El criollismo peruano, chileno, centro­
por lo que cuenta el relato, americano y colombiano tiene mucho
pero aunque el destino ingrato del espíritu andaluz. La colección del
hoy me aleja de esos pagos, F o g o n será de útil consulta para los es­
no son menos los halagos tudiantes de literatura. El criollismo de
del viejo— .ustedes, tales la idea que me he formado
por la lectura de esos tres números, es
Calisto el Ñato, más espontáneo que el nuestro.—Tam­
Diciembre 24 de 1895. bién desearía obtener la colección de co­
medias de Orosman Moral orio que, á juz­
gar por algunos títulos, deben tener
UNA INTERESANTE CARTA mucho de criollismo gauchesco.
Mucho me ha complacido la noticia
DE DON RICARDO PALMA que vd. me transmite sobre el capitán
del «Santander» don Antonio Garda.
Nuestro estimado amigo don Antonio Celebro que no haya sufrido contraste en
su posición y que la Compañía trasa­
Lussicli (àlias Luciano Santos) nos lia fa­ tlántica lo considere tanto como él lo
vorecido con Ja interesante carta del lite­ merece_por'su caballerosidad y carácter.
rato peruano señor Palma, que engalana Créa vd. que, á contar algunos años de
ho y las columnas de E l F o g o n . menos, me seria muy grato dar un paseo
Recomendamos su lectura, reservándo­ por Montevideo y Buenos Aires; pero,
nos dirigirle la palabra en el nùmero próx­ amigo mió, cuando se avecina un hombre
imo al ilustrado autor de la carta: álos 03 febreros debe renunciar á la vida
de viajero.
Lima, Noviembre 19 de 1895. Ademas, como no soy rico, no puedo
Sr. D. Antonio Lussích.—Montevideo. darme la satisfacción de viajar por pla­
Señor y amigo: cel-, aparte de que tampoco aceptaría
cargo oficial en el extrangero. Me he
El vapor de ayer me trajo su muy grata declarado ya sedentario y en pleno goce
del 22 de Octubre. de la vida del hogar. Agradezco, pues,
Guardaba á Vd. secreto de que tan gra­ muy cordialmente su deseo.
Orden eme con toda llaneza en lo que mo de 80 años) Caballeros,
me estime útil, y créame su amigo y una liraosnita!
apreciad or afectísimo. Viajero. —¿Quién es usted?
Ricardo Palm a. Limosnero.—¡Un soldado de la Indepen­
dencia!
Viajero. —¡Y pide limosna!
a vüelT de pájaro Limosnero.—¡Ya lo vé usted!
Viajero. —(Pobre hombre!) ¿Qué grado
REVISTA CRIOLLA, EN UN ACTO Y CINCO tiene Vd.?
CUADROS, LETRA DE ENRIQUE DE-MARIA, Limosnero.—Cabo primero.
MÚSICA DEL MAESTRO ANTONIO YIDE- Viajero. —Un guerrero de su época, de­
GAIN. biera ser por lo menos capi­
(Continuación. — Véase el número 16) tán!
Limosnero.—Señor, ya están todas las pla­
Cuash*:» M<»guailo zas ocupadas; nosotros, los
LA PLAZA INDEPENDENCIA que hemos empezado primero,
(Lustradores, vendedores ambulantes, lo­ Viajero. —Tome ustedáyretaguardia!
quedamos
disculpe, (le da
teros, chiquillos, ele., etc — viajero y dinero).
JUSTINIANO. Limosnero.—¡Dios y el alma del General
(Habrá dos ó tres bancos, faroles, árboles, etc.) Artigas le recompensen á Vd.!
E sc e n a GE (rase.)
(gran murmullo general) Justiniano.—Pobre hombre!
Unos. —La suerte para mañana. Viajero. —¿Quienes son estos elegantes?
Otros. —Lustrare marchante. Justiniano.—Dostipos defama! Ocultémo­
Otros. —Buena frutilla! Frutilla barata. nos y los oiremos discutir, (se
(Un guardia civil, aparece dormido ocultan).
en un banco, dos chiquillos le qui • .
tan el machete; el guardia se des­ ; Escena 8E
pierta y corre á los chiquillos. — PEREZ, MARTINEZ, VIAJERO ,Y JUSTINIANO
(Desaparecen). Los vendedores, etc., Perez. —(Saliendo) ¿Qué dice, amigo
van desapareciendo paulatinamente.) (Martínez?
Viajero.—Amigo mió, hay mucho movi­ Mart. —(saliendo del lado opuesto) Pa­
miento! seando Montevideo,
Just. —Si, todos gritan, pero náclie ven­ buscando algunas noticias.
de.— Áqui, medio mundo casi Perez. —Muy bienhecho compañero.
se muere de hambre! ¿Estuvo en el Pabellón?
Viajero— ¿Qué plaza es ésta? Mart. —No, pues según me dijeron
Just. —La plaza Independencia. estrenaban la Revista
Viajero.—¿Y aquel galpón de madera? que han escrito dos muñecos
Just. —Una J^~**«»esse. y es un atroz disparate!
Viajero.—¿Y qué es eso?
Just. -^-Una moda alemana, para sacar di­ Perez. —Martínez, yo la he
eso no es cierto:
visto y me ha gustado;
nero á todo el mundo! y además, por lo que veo,
Viajero.—¿Y porqué se llama Kermesse? se aventura usted muchísimo
J ust. — Porque ya no es de buen tono ha­ diciendo tal desacierto
blar en castellano. sin conocerla siquiera!...
Viajero.—(pasa un grupo de hombres) Mart. —¡Ja, ja, ja, ja! ¡Ay qué bueno!
¿Qué significa aquel grupo de Parece mentira Perez!.. .
caballeros, que se clirije á aquel Un muchacho de talento,
edificio? que sabe inglés y latín
Just. —Son los empleados públicos que y juega hasta con el griego,
van á sus oficinas. necesita conocer
Viajero.—¿A las dos de la tarde? la piezaque anoche dieron,
Just. —Naturalmente; van con atrazo para juzgarla, mi amigo?
porque viven del presupuasto! (con énfasis) A críticos de mi génio
E sc e n a 7.a les es bastante la firma;
Al AJERO, JUSTINIANO V UN LIMOSNERO nunca desdoblan cuadernos!
Limosnero.—(Entrando', será un viejo co­ Perez.—¡Todo requiere uu principio!
Mart. —Niego, niego ese argumento! se le ocurra á algún muñeco,
Nace el poeta, no se hace! hundir la instrumentación
Viajero—( Apunta muy asombrado)— sin conocer el solfeo?
¡Aquí se nace sabiendo! y decir coa sangre fría:
Perez.—Según su opinión, Martínez, «No están bien los instrumentos
cuando mamaba Quevedo, «se oye poco el clarinete;
deleitaría á su nodriza «sobresale mucho el cuerno!
escribiéndole sonetos. «el bajo en el contrapunto
Mart. —No he dicho tal! «no hace tercia al violonceJlo.»
Perez. —¡Cómo no? Y sin saber lo que es tónica,
Imitó usted á un sujeto, que es el estudio primero!
que en cierta exposición, Mart. —En eso tiene razón.
de pintura, el muy zopenco, Perez. —Y en todo, amigo la tengo;
solo miraba las firmas ¡que hasta para hacer botines,
délos cuadros; y muy serio, se aprende de zapatero!
con aires de sabio antiguo, Mart. —Ya no quiero discutir,
(que ya no hay sabios modernos) porque vienen...
Decía: qué mamarracho! Perez. — Ya lo veo;
Y era un trabajo de mérito! son las artes nacionales!
—¿De quién es ésto?—De Blanes, Mart. —¡Qué pobres!
—Es muy pasable el boceto! (con Perez. — (Como tu ingenio!)
desprecio) Vamos, Martínez?
—¿Y, aquel?—De Hequet.—Regular; Mart. — Sí Perez.
tiene el marco muy pequeño! (vánse).
¿Y ese tan grande? ¡Qué lindo! Viajero—(Adiós, crítico soberbio!)
A ver la firma! ¡Qué es ello! J ust. —Vienen las artes.
(con mas desprecio) Anónimo.... Viajero— Amigo,
(Un mamarracho! con atención escuchemos.
ya me pareció de lejos!
Mart. —Pero es que... Escena 9.a
Perez. — Permítame;
deje concluirle mi cuento. M U S I C A
Pasó al otro gabinete, LA MÚSICA, LA PINTURA Y LA LITERATURA
y le preguntó aun portero, Música. —Yo soy la música.
(muy bruto ó muy chacotón) Pintura ■ —Yo la pintura.
dime: ¿quién fué que pintó eso?— Literatura.—Literatura
—Un cuadro de Víctor Hugo! me llamo yo.
dijo el portero muy sério! Las tres. —Tan protegidas
—Caracoles, dijo el critico; todas vivimos
¡ese, es un cuadro soberbio! que nos morimos
Vale mucho! Víctor Hugo! de consunción!
te agradezco; y le dió un peso. Música. —Me pensionara
El portero lo miraba ped¡ á un macota
diciéndose, ¡qué jumentos y á la chacota
van vestidos de levita! ól lo tomó;
Viajero—{Desde su puesto apuntando) y al poco tiempo
Y hacen críticas, es cierto!) para un Jtorete
Mart. —Víctor Hugo, no pintó!... pensión y flete
Perez. —Pero su firma es de mérito! se decretó!
Mart. —Es usted algo chocante!... Pintura. —Yro pinto que es un primor;
Perez. —Digo, amigo, lo que siento! en Europa yo aprendí
Mart. —Aquí hay muy pocos artistas!.,. porque escuelas no hay aquí
Perez. —Y cada vez habrá menos. que acrediten á un pintor?
¿Puede soportarse, amigo,) Literatura.—Litere,to nacional
(Y seguiremos de cuentos,) que ú una obrita le de vida,
que si se estrena una ópera, lo revientan eu seguida
que le ha costado á su dueño solo con ser oriental!
diez ó doce años de estudio, Las tres. —Quien quiera ser artista
en nuestra tierra recorren el camino las orilleras
tiene que haber nacido bajo un fuego graneado de compadradas.
allá por Grecia! Al compás de los cielos y pericones
Que es un sarcasmo grande, chillan las tortas fritas y los pasteles,
es un delito, y pasan entre risas los cimarrones
ser oriental y artista de manos de las chinas á los donceles.
en este siglo! Ya están los parejeros en el camino,
Y no se crea y en el suelo las mantas y maneadores
que son estraños,- y es de ver como ponen todo su tino
quienes por gusto al hacer las partidas los corredores.
nos hacen mal; Ls diez cuadras el tiro de la carrera
son orientales y la corren un zaino y un onalacara;
los que prefieren se convidan los tapes, cae la bandera
al extranjero y comienzan los gritos y la algazara.
que al nacional!
Ve usté lina niña Espoleando los flancos ásus bridones
que toca el piano, se atropellan los grupos desesperados,
pinta acuarelas y no bien pela un gaucho los patacones
y habla francés; cuando vale contestan: ¡están jugados!
todos la admiran • Se acompañan un rato los parejeros,
si su maestro juntítas las orejas y los fiadores,
es sueco, turco cual si fueran los amos dos aparceros
ó japonés. que viajaran hablando de sus amores. .
Si es enseñada Mas de pronto, del zaino los costillares,
por un maestro con sus dientes agudos muerde la espuela,
que por desgracia y al sentir las rodajas en los ijares,
sea oriental; estirándolos remos el pingo vuela.
todos murmuran, Toca al otro de nuevo ganarle el lado,
(aunque sea un genio,) se redoblan Tos gritos y desafios,
toca la niña y al que ha poco se hallaba desalentado
bastante mal! la esperanza del triunfo vuelve los bríos.
De esta manera
nos encontramos Se atropellan nerviosos los jugadores,
tan arruinadas las amigos del zaino brindan usura
en el país; agitando en la diestra los tiradores
que es imposible donde luce brillante botonadura.
permanezcamos Vuelve el zaino á tomarse la delantera,
tan depreciadas; hace el otro un esfuerzo desesperado,
mejor morir. y á la voz de los jueces: ¡no es ni carrera!
(vanse) sin llegar ¿i la raya
' -jrG.cáe reventado.
CORREO DE “EL FOGON“ Fray-Bentós.
Garda Hamilton.
LAS CARRERAS
(Á PLÁCIDO ESCRIBANIS) DENTRADA
Vestido deparada, junto al camino Voy"ó hacer una denirada
que marcan uniformes andaribeles, con mi pingo bien cinchao,
está todo el gauchaje que al pago vino pa ver si por un costao
á mirar la contienda de los corceles. dentro al FOGON, camarada,
Relucen los anillos y las cadenas pues le garanto, y no es nada,
de los ricos chapeados de plata y oro; que tanto me ha entusiasraao
y al rumor que levantan las nazarenas que es por eso que he cinchao
él piafar de los pingos le forma coro. pa dentrar eq la bolada.
Trenzadas y lustrosas las cabelleras, Y ahora que ya me hallo en él
luciendo las enaguas almidonadas, no quiero retroceder,
pues tan amable ha de ser Pero como güen paisano
la gente de ese fogon, yen antes de comenzar
que dirán: un talenton mi flete dentro á ensillar
lia escrito en este papel, con mi puñal cu la mano,
pero como á gaucho fiel diciendo si este cristiano
bríndenle algún cimarrón. me lia querido á mi pitar
yo tuito lo lie de arreglar
Pues á ese lindo Fogon á fuerza do fechurías
es que yo quiero llegar, decí, Chingólo, ¿qué harías
porque deseo tocar puesto tu aqui cu mi lugar?
aunque sea algún tizó n Al leerla firmajqué buzo!
ya que de ese cimarrón que ni la podía entender;
no puedo participar, viera allí mi padecer
y como quiero agradar todo aflijido y confuso
alii le mando esta canción. hasta que Cristo se puso
á hacérmela revolver
Yo no quiero terminar y ahí jué que pude entender
esta macana, aparcero y salir de aquel apuro
sin saludar placentero pues había jurao que duro
á tuitos los del fogon. aquel pueta le iba á caer.
pues cada uno es un tizón Vieras querido Manolo
que chispea largo rato, lo que vide que eras tú
ó les cuesta muy barato lo mesmito que un tatú
ó son de gran talenton, gozaba, leyendo solo;
pues tienen cada canción, y yo dije; este Chingólo
que suena de lo mas grato. á salido un lindo pueta
y ahora por mas que me meta
lodo aquí va ser al ñudo;
Cocodrilo. y recibe un gran saludo
de este mancarrón sotreta.
A MANOLO Armando Raggi'
La noche viene cayendo Diciembre 20 de 1895.
y yo cerca de mi mesa
me encuentro con una presa ANO NUEVO
á la que miro sonriendo,
pues es por lo que estoy viendo
de mi amigaso Manolo; (pon calisto ei. ñato)
y ahora, ya que me hallo solo,
tranquilo la voy á ver Mozos farristas, y viejos
y para bien entender de arrugadotes pellejos,
ic llamaremos Chingólo. que rcgeiítcais compadreando ;
Un tamaño cartel veo ya un año mas sobre el lomo
con mi nombre bien escrito; tenéis desde ahora en asomo;
y para más Chingolito pero mas chabela...cuando?
me la lia mandao por correo. Criollazos tic buena facha
Pues viene aquí, á mi deseo, que usáis apero, bombacha
con un sello bien pcgao y gacho, cual corresponde;
y aquí conozco, venao, ya en ancas lleváis otro año,
que sos empleáo del correo tendréis mas tino y amaño;
pues si pagaras tranqueo pero mas pesos...¿dc donde?
no me lo hubieras mandao.
Corto el sobre con ternura Mozas mas lindas que soles*
para no dirlo á estropiar viejas como caracoles
y no me animo á empezar que vais la baba soltando;
al mirar tanta escritura, llováis otra carga encima
pues cuál una criatura y apretáis al que os estima;
me quedo tuito asombrao pero las clavijas...¿cuando?
diciendo no es el venao Cantores de pacotilla
que metió aqui su paleta en que el ingenio no brilla
pues debe ser algún pueta ni la inspiración responde;
y ya me vidc bolíao. otro año de macanees
colmará vuestros deseos Principiaré por contarle
pero al público...¿de donde? lo que por lerdo ó por pavo
Dragones que, por si cuela, me pasó los otros dias
hacéis siempre centinela en que me acerqué paseando,
á las niñas, afilando; á una rifa que le llaman
este año según colijo la rifa del Patronato.
sigue la guardia, de fijo, Alli se venden, compadre,
pero la conquista.,., ¿cuando? papelitos cnrrollados
en forma de cigarrillos,
Mocitos que por caudal pero mas chicos y caros;
lleváis flor en el liojal y en los tales papelitos
y las ínfulas de un conde; hay dibujos tan estraños
sigue este año la florcita, que á veces es compromiso
la galera y la levita, el tener que ir á cobrarlos,
pero moneda.... ¿de donde? á sigun el que yo tuve
compadre, en mi propia mano.
Picaflores con polleras Figúrese que el papel
que al fin os quedáis solteras un mono tenia pintado
por tanto andar picoteando; en camisa; v un letrero
mirad que otro año no es broma que decía: El Secretario.
y os puede sobrar aroma, Cuando en la calle lo abrí
pero matrimonio...¿cuando? calculé por el retrato
Viejos verdes que el reposo que dejuro tenia suerte
perdéis por hacer el oso y ya me largué á cobrarlo.
ala niña que se esconde; Le entregué la cedulita
un año es una berruga á un señor moreno y calvo
que os va á dejar como oruga; diciéndolc muy cortés:
y ya conquistas...¿de donde? vengo, señor, por el pago;
el hombre aquel la miró
Gauchos que por precaución y luego se armó el fandango.
os acercáis al fogon —¡Qué cree, me dijo, insolente,
siempre alerta y orejeando; grosero, mal educado,
este año estáis garantidos que la rifa es un bochinche.
de no vivir perseguidos; —Pero señor, no sea bárbaro;
pero de las levas...¿cuando? yo no le falto al respeto;
ese papel lo he comprado
Puede ser que un aguacero y lo que he sacao es mió,
les cambie el viento al pampero por eso vengo á cobrarlo.
y salga otro batifonde; De ay comenzaron á gritos
que estando bien emponchados una porción de muchachos
resulten poco mojados; á decir: ¡Ya cayó el guiso!
pero séquitos..... ¿de donde? ya cayó pa el Patronato!
Y no lo echen en el olvido» Yo al sentirla gritería
que como viejo curtido y quesearmaba un escándalo,
lo digo pronosticando; les rompí la papeleta
y cuando el viejo palpita y me sali culebriando.
puede errarse de cerquita, Enderecé pa un café
pero de muy lejos.... ¿cuando? y me recosté en un banco
medio caliente toabia
por la fumadora, cuando
Carta de Pancho Truco vide entrar á un cajetilla
quedecia: ¡qué bellacos!
á unas le ponen figuras,
otras resultan en blanco,
Á SU COMPADRE SEBASTIAN
y otras con unos letreros
que son unos macanazos!
Compadre don Sebastián, ¿De qué se trata? le dije.
estos renglones le mando Amigo, del Patronato!
para ponerlo al corriente ¿El de aqui enfrente?
de las cosas de estos pagos, —Ese mismo,
que son cosas, francamente, dijo el mozo alborotado:
por lo que tienen de raro, y yo, retruqué: aparcero,
á sigun mi parecer toque y apriete esta mano,
inventadas por el diablo. igual me ha pasado á mí
que me saqué un secretario, me hizo dir sin mas razones
y en vez de darme la prenda donde estaba el Comisario,
cuasi me dan un amargo. Entré; y en cuanto me vicio
Del café medio asustan me dijo el hombre: paisano,
salí como trompezando ¿no sabe que está prohibido
y me encontré en el camino el transitar galopeando?
con dos mozos de mis pagos ¡Tiene que pagar de inulta
que habían caído como yo cuatro pesos!
ála capital, paisano. —Pa los pavos!
Conversando en una esquina dije entre mi; y muy humilde
estábamos, para el caso, por no llevar aquel clavo,
corno cualquiera conversa le contesté: «No sabia,
en la puerta de su rancho soy de ajuera y no es estraño..,
sin tener ningún recelo dispense por esta vez
de que lo oigan conversando; que ni cuatro reales traigo.
cuando nos cayó un milico El hombre se enterneció
diciendo: ¡sigan de largo! y como refunfuñando
que no se permiten grupos ine dijo: retiróse!
demasdedosL.Revenqueando y si en otrame lo agarro
salimos de allí, compadre, cuente que no le perdono.
como alma que lleva el diablo —Está bien señor, y al tranco
aunque sinsaber de fijo sali de la polecía
si de revueltas liabia algo poco menos que sudando.
que pudiera dar motivo Con que ya sabe, compadre,
para un sustaso tamaño. se lo advierto por si acaso
Con el jabón me" trepé cae por esta capital
á un trenguay que iba pasando pa que no caiga bruteando
en esos mismos momentos y le pase lo que á mi
en dirección á los barrios desde que entré al Patronato.
donde suelto, entre un galpón Recuerdos á mi comadre,
liabia dejao mi caballo. á mi ahijada y mi tocayo
Cuando ya íbamos cerquita el marido de ia vieja
quise largarme y ¡Dios Santo! que es lindera ele mi campo,
caí trabao yo no sé como, y usté ordene á Pancho 7 ruco
y me pegué tal porrazo su compadre y su paisano.
que hasta ahora, créamelo,
siento la cosa hormigueando.
Salí todo dolorido,
medio rengo; y paso á paso
me fui á dar hasta el galpón
DE LDCIA10 SANIES
encojido y cabisbajo. Por falta de espacio y con el mayor sentimien­
Al otro dia de mañana, to postergamos para el próximo numero una
ya resollando mas largo preciosa versada del amigo Luciano que, como
porque me hallaba mejor, todas las suyas, causa deleite en el alma y en
traté de volverme al campo el cuerpo un hormigueo.
olfateando la querencia La versada es como un ramillete que le ofrece
pa revolearme en el pasto, á su exelente amigo el señor J. G. Boron Du-
que es ese el mejor remedio bard, redactor de la gaceta francesa, con moti­
que puede buscar el gaucho* vo de otro que dicho señor le ha dedicado.
Ensillé el pingo y monté,
después de pagar el gasto, ¡Lindo, amigo Luciano! s u í guitarreos valen
saliendo ya de galope mucho y no hoy que perder la afición por lo"
como bagual orejano criollo.
que sin trabas endereza
campo ajuera relinchando: Advertimos á nuestros colegas de cam­
pero no bien unas cuadras paña que hemos organizado desde este
anduve, de nuevo el diablo número el servicio de cange, con lo que
se atravesó en el camino recibirán puntualmente nuestro periódi­
vestido de policiano co los que nos sigan favoreciendo con
y ¡paróse! me gritó, los suyos.
sujeto el pingo y haga alto! Si alguna irregularidad notan en el
Yo de golpe sujeté servicio sírvanse avisárnoslo, ó reclamar
y el soldao con modo huraño al Correo, en la seguridad de que la
me hizo que echara pié atierra Administración los remite-.
y á pata, medio rengueando,

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