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2019
Aspirantes
Residencias
Médicas
ADENDA 2019
VIÑETAS CLÍNICAS ARM
Para aspirantes a residencias médicas
ADENDA 2019
Facultad de Medicina
Universidad Autónoma de Nuevo León
Subdirección de Educación Continua
Facultad de Medicina
UNIVERSIDAD AUTÓNOMA DE NUEVO LEÓN
Comité editorial
Dr. Eduardo Roberto Garza Cortés
Dr. Iván de Jesús Hernández Galarza
Dr. MC. Gabriel Ángel Mecott Rivera
Dr. Carlos Augusto López Acevo
Dr. med. Alejandro Quiroga Garza
Dra. Mara Cecilia Olivo Gutiérrez
TILDE EDITORES
Reservados todos los derechos, queda prohibida la reproducción total o parcial de los
textos de la presente edición sin la autorización expresa por escrito de los autores.
ISBN: 978-607-27-0860-0
CARDIOLOGÍA
21 Enfermedad arterial periférica de miembros inferiores
24 Insuficiencia cardíaca
26 Pericarditis en adultos
29 Síndrome coronario agudo sin elevación del segmento ST
CIRUGÍA GENERAL
31 Tratamiento quirúrgico de la obesidad mórbida en la población adolescente
34 Traumatismo de tórax
DERMATOLOGÍA
37 Dermatitis por contacto
ENDOCRINOLOGÍA
41 Complicaciones agudas de la diabetes mellitus
45 Galactosemia
46 Mucopolisacaridosis tipo 1 en pediatría
48 Nódulo tiroideo no tóxico en adultos
49 Pelagra
GASTROENTEROLOGÍA
53 Enfermedad por reflujo gastroesofágico
55 Várices esofágicas en adultos
GENÉTICA
57 Enfermedad de Fabry (EF)
GERIATRÍA
61 Hipertensión arterial en el adulto mayor
GINECOLOGÍA
65 Diagnóstico de cáncer de mama
67 Lesiones precursoras del cáncer del cuello cervicouterino
68 Diagnóstico y tratamiento del cáncer cervicouterino
HEMATOLOGÍA
71 Enfermedad de Von Willebrand
72 Hemofilia y trastornos de la coagulación
INFECTOLOGÍA
75 Diagnóstico y tratamiento de sepsis y choque séptico en pacientes de 1 mes a 18 años de
edad en los 3 niveles de atención.
76 Prevención, diagnóstico y tratamiento de la exposición laboral al VIH en trabajadores de la
salud
78 Tratamiento antirretroviral del adulto por infección con VIH
NEUMOLOGÍA
81 Diagnóstico y tratamiento de bronquitis aguda en el paciente adulto, mayor de 18 años
de edad, en primer y segundo nivel de atención
82 Diagnóstico y tratamiento de COR pulmonale crónico en el segundo y tercer nivel de
atención
83 Prevención, diagnóstico y tratamiento de la neumonía adquirida en la comunidad
NEUROCIRUGÍA
87 Diagnóstico y tratamiento del traumatismo craneoencefálico en pacientes menores de 18
años de edad
89 Diagnóstico y tratamiento de demencia vascular en el adulto en los tres niveles de
atención
90 Diagnóstico y tratamiento temprano de la enfermedad vascular cerebral isquémica en el
segundo y tercer nivel de atención
OBSTETRICIA
93 Control prenatal con atención centrada en la paciente
97 Detección, diagnóstico y tratamiento de las enfermedades hipertensivas del embarazo
99 Prevención, diagnóstico y manejo oportuno de la ruptura uterina en los 3 niveles de
atención
102 Prevención, diagnóstico y tratamiento de la preeclampsia en segundo y tercer nivel de
atención
104 Prevención, diagnóstico y tratamiento del parto pretérmino
105 Diagnóstico y tratamiento del cáncer cervicouterino
OFTALMOLOGÍA
109 Prevención de toxicidad ocular por cloroquina (CQ) e hidroxicloroquina (HCQ)
PEDIATRÍA
111 Diagnóstico oportuno de la leucemia aguda en pediatría en primer y segundo nivel de
atención
114 Diagnóstico y tratamiento de la desnutrición en menores de cinco años de edad en el
primer nivel de atención
115 Diagnóstico y tratamiento de la estenosis hipertrófica congénita de píloro
116 Diagnóstico, tratamiento y pronóstico de la encefalopatía hipóxico-isquémica
120 Diagnóstico, tratamiento y referencia oportuna de la diabetes mellitus tipo 1 en el niño y
adolescente para el segundo y tercer nivel de atención
124 Prevención, diagnóstico y tratamiento de diarrea aguda en pacientes de 2 meses a 5 años
de edad en el primer y segundo nivel de atención
126 Prevención, diagnóstico y tratamiento de la rubéola en primer nivel de atención
URGENCIAS
129 Diagnóstico y tratamiento del traumatismo de tórax en adultos
130 Nutrición parenteral y enteral en el paciente adulto en estado crítico
UROLOGÍA
135 Diagnóstico oportuno del cáncer de testículo en el primer y segundo nivel de atención
136 Diagnóstico y tratamiento de los síntomas del tracto urinario inferior asociados a
crecimiento prostático
137 Prevención, diagnóstico y tratamiento de infección urinaria asociada a sonda vesical en la
mujer en los tres niveles de atención
ALERGIA
ASMA EN EL ADULTO
Definición / Etiología
• Es una enfermedad broncopulmonar inflamatoria crónica frecuente y po-
tencialmente reversible, que se acompaña de hiperreactividad de la vía
aérea y provoca en forma recurrente tos, sibilancias, disnea y aumento del
trabajo respiratorio, principalmente en la noche o en la madrugada.
• Estos síntomas se asocian generalmente a una obstrucción extensa con
disminución variable del flujo espiratorio, engrosamiento de la pared de la
vía aérea e incremento de la mucosidad.
Factores de riesgo
• Elementos desencadenantes: alérgenos, infecciones virales de las vías res-
piratorias altas, ejercicio e hiperventilación, aire frío, dióxido de azufre y
gases irritantes, fármacos (bloqueadores ß, ácido acetilsalicílico), estrés, ali-
mentos, reflujo gastroesofágico, irritantes (aerosoles domésticos y humos
de pinturas).
19
Factores endogenos Factores ambientales
Cuadro clínico
• Sibilancias.
• Disnea.
• Tos.
• Sensación de opresión torácica.
• Hiperventilación.
• Uso de los músculos accesorios de la respiración.
• Estertores en inspiración y espiración.
• Las manifestaciones a menudo empeoran durante la noche y tras el ejer-
cicio.
Diagnóstico
• Gold standard: clínica más espirometría con incremento >12% FEV1 y 200
ml en FVC a los 15 min tras inhalar bloqueador ß2 de acción breve.
• Si hay clínica compatible y espirometría normal realizar variabilidad de flujo
espiratorio medio (FEM).
• Pruebas complementarias: IgE total e IgE específicas contra alérgenos in-
halados en suero, radiografía de tórax (normal o hiperinsuflado), tomogra-
fía computarizada, pruebas cutáneas y óxido nítrico exhalado.
Tratamiento
• Primera elección:
Evitar los factores desencadenantes de crisis.
• Farmacología:
Medicamentos de rescate: B2 agonistas de acción corta inhalado, útil
para el control de asma intermitente y en cualquier escala del trata-
miento.
Medicamentos de control: esteroides inhalados (pilar del tratamiento),
B2 agonistas de acción larga, antileucotrienos, anti IgE (asma refracta-
ria).
Se recomienda añadir bromuro de ipratropio nebulizado (0,5 mg cada
4-6 horas) al tratamiento de Beta 2 agonista en los pacientes con asma
grave o potencialmente mortal aguda o aquellos con una respuesta
Pronóstico / Complicaciones
• Se debe hospitalizar a aquellos pacientes que permanezcan sintomáticos
o requieran aporte de oxígeno suplementario para mantener una satura-
ción de oxígeno >92% o que tengan un FEV1 o PEF <40%, posterior a un
tratamiento óptimo para su nivel de gravedad.
Tips
• Los corticoesteroides inhalados son seguros para usar en el embarazo.
• Una prueba con metacolina negativa excluye generalmente asma.
• El asma debe sospecharse en niños con episodios múltiples de CRUP e
infecciones respiratorias superiores asociados con disnea.
• Mnemotecnia ASTHMA para medicamentos para exacerbaciones del
asma: Albuterol, eSteroides, Teofilina, Humidificación con O2, Magnesio,
Anticolinérgico.
ALERGÍA 21
CARDIOLOGÍA
ENFERMEDAD ARTERIAL PERIFÉRICA DE MIEMBROS INFERIORES
Definición / Etiología
• Se define como una enfermedad obstructiva arterial de las extremidades
inferiores que reduce el flujo sanguíneo y limita la caminata diaria, el ren-
dimiento durante el ejercicio y en estados avanzados, durante el reposo.
• Se caracteriza por estenosis u obstrucción de la luz arterial debido a pla-
cas de ateroma que originadas en la íntima, proliferan hacia la luz arterial
provocando cambios hemodinámicos al nivel del flujo sanguíneo arterial,
que se traducen en disminución de la presión de perfusión y dan lugar a
isquemia de los tejidos.
Factores de riesgo
• Edad.
• Raza negra.
• Tabaquismo.
• Diabetes mellitus.
• Hipertensión arterial sistémica.
• Dislipidemias.
• Antecedente familiar de enfermedad aterosclerosa.
• Niveles elevados de homocisteína en sangre.
• Insuficiencia renal crónica.
23
Cuadro clínico
• Claudicación o cansancio con la actividad.
• Ausencia de flujo arterial auscultable (ilíaco, femoral, poplíteo) o cualquier
anormalidad en la intensidad de los pulsos.
• Piel fría.
• Dolor isquémico en reposo.
• Heridas que no sanan.
Diagnóstico
• Historia clínica adecuada.
• Exploración física (palpación de los pulsos de las extremidades inferiores
[femoral, poplíteo, dorsal del pie y tibial posterior], además de auscultar
sonidos femorales e inspeccionar piernas y pies).
• Medición del índice tobillo-brazo (ITB)
• Este último se debe reportar como anormal (ITB < 0.90), limítrofe (0.91-
0.99), normal (1.00-1.40), o no compresible (>1.40)
Tratamiento
• Tratamiento no farmacologico:
Se recomienda un programa de entrenamiento de 3 meses, con tres
sesiones por semana. La intensidad del entrenamiento en la banda sin
fin aumenta con el paso del tiempo, y la sesión dura de 30 a 60 min.
Abandonar el hábito tabáquico.
• Tratamiento farmacológico:
El tratamiento antiplaquetario únicamente con aspirina (rango de 75-
325 mg al día) o Clopidogrel (75 mg al día) se recomienda para reducir
infarto al miocardio, EVC, y muerte vascular en pacientes con EAP sin-
tomática.
• Se recomienda el uso de estatinas, beta bloqueadores adecuados y medi-
das de control glicémico para control de enfermedades concomitantes y
evitar complicaciones.
• Se recomienda tratamiento de 3 meses con Cilostazol (100 mg dos veces
al día) para mejorar la distancia de caminata sin dolor en los pacientes que
no tengan insuficiencia cardíaca congestiva.
• Se recomienda revascularización como una alternativa de tratamiento para
el paciente con claudicación que limita su estilo de vida y que no responde
adecuadamente a tratamiento y manejo dirigido.
Tips
• En los pacientes sintomáticos en que el tratamiento de revascularización
esté siendo considerado, se sugieren estudios de imagenología anatómi-
cos, como el Ultrasonido Doppler arterial, tomografía, resonancia, y arte-
riografía de contraste.
• No se debe utilizar anticoagulación para reducir el riesgo de eventos car-
diovasculares isquémicos en pacientes con EAP.
Arteria carótida
externa
Arteria carótida
interna
Embolia
Placas
Arteria carótida
común
CARDIOLOGÍA 25
INSUFICIENCIA CARDÍACA
Caso clínico
• Paciente masculino de 56 años, con antecedente de hipertensión arterial y
diabetes mellitus, con mal apego a tratamiento médico. Uso cotidiano de
tabaco. Acude a revisión debido a que presenta disnea progresiva de varios
meses de evolución teniendo que dormir con 4 almohadas porque “siente
que se ahoga”, se acompaña de tos nocturna, la cual no cede a tratamien-
to con antitusígenos. A la exploración física presenta: 36.7 ºC, FC 139 lat/
min, TA 160/110 mm Hg. Tórax con presencia de estertores a la inspiración,
sin otros datos agregados, extremidades con edema ++.
Definición / Etiología
• La insuficiencia cardíaca (IC) es un síndrome clínico que resulta de la dis-
función ventricular, caracterizado por signos y síntomas de retención de lí-
quidos intravasculares e intersticiales y de inadecuada perfusión de tejidos.
• IC sistólica / IC con FEVI anormal: problema de vaciado de una cavidad
dilatada con motilidad disminuida de la pared (inotropismo disminuido e
hipertrofia excéntrica). FEVI <50% (fracción de eyección ventricular izquier-
da).
Causas: coronariopatía (IAM), sobrecarga de presión (HTA, valvulopatía
crónica), sobrecarga de volumen, neumopatía crónica, miocardiopatía
dilatada, daño por fármacos, etcétera.
• IC diastólica / IC con FEVI normal: problema de llenado de una cavidad
ventricular de tamaño normal (relajación y complianza disminuida, hiper-
trofia concéntrica). FEVI normal. Hay alteración en la relajación y llenado
ventricular en el estudio Doppler transmitral.
Causas: hipertrofia patológica, envejecimiento, miocardiopatía restric-
tiva (amiloidosis, sarcoidosis), fibrosis, etcétera.
Factores de riesgo
• Infecciones, arritmias, infartos al miocardio, cardiomiopatías, enfermedad
valvular, embolia pulmonar, anemia, intoxicaciones, embarazo.
• Tabaquismo, hipertensión arterial, diabetes mellitus, obesidad, dislipidemia,
hombres >55 años, mujeres >65 años, antecedentes familiares.
Cuadro clínico
• Sígnos y síntomas: disnea (síntoma más temprano y común), ortopnea,
disnea paroxística nocturna, disnea en reposo, tos crónica, fatiga, edema
periférico, nicturia, plenitud abdominal.
• Exploración física: choque de la punta ventricular aumentado, S3 y S4 ga-
lope ventricular, reflujo venoso yugular, edema periférico.
• Disfunción diastólica: disnea al ejercicio.
• Falla cardíaca izquierda: ortopnea, disnea paroxística nocturna, edema pul-
monar, S3 S4 de lado izquierdo, derrame pleural, edema pulmonar.
• Falla cardíaca derecha: hepatomegalia, distención venosa yugular, edema
periférico, reflujo hepatoyugular, ascitis, S3 S4 de lado derecho.
Tratamiento
• En cuanto a la IC diastólica, el tratamiento se basa en control de factores
de riesgo conocidos:
Tratamiento de HTA.
Uso de IECA, beta bloqueadores, diuréticos.
Pronóstico / Referencia
• Referir en caso de:
IC refractaria a tratamiento, deterioro de la clase funcional, FEVI < 40%, mo-
nitoreo hemodinámico contínuo, falla cardíaca aguda, síndrome coronario
agudo, necesidad de intervención quirúrgica.
Tips
• Un ECG normal descarta disfunción sistólica del ventrículo izquierdo.
• Es importante identificar si la FEVI se encuentra preservada o reducida,
para dar un tratamiento adecuado.
• La insuficiencia cardíaca izquierda es la más común.
CARDIOLOGÍA 27
Normal Disfunción sistólica Disfunción diástólica
Aurícula
Aurícula izquierda
derecha
Diástole
(llenado)
Ventrículo Ventrículo
derecho izquierdo
Los ventrículos se llenan Los ventrículos agrandados Los ventrículos rígidos no pueden
con sangre de modo normal se llenan de sangre contener tanta sangre como en
condiciones normales
Sístole
(bombeo)
PERICARDITIS EN ADULTOS
Definición / Etiología
• El pericardio es una estructura sacular, cónica y fibroserosa que circunda
al corazón y la raíz de los grandes vasos. Separa y aísla al corazón del con-
tacto con los tejidos circundantes permitiendo la libertad de movimiento
en los límites del espacio pericárdico.
• La pericarditis aguda es un síndrome inflamatorio del pericardio que puede
presentarse con o sin derrame.
• Se clasifica según su etiología o su tiempo de evolución.
Tiempo de evolución: se clasifica en aguda, incesante, recurrente y
crónica.
• Aguda: pacientes que acuden de primera vez con los siguientes signos y/o
síntomas:
Dolor pericárdico.
Frote pericárdico.
Cambios electrocardiográficos.
Derrame pericárdico o evidencias adicionales: marcadores séricos in-
flamatorios elevados (PCR, VSG, leucocitosis), evidencia de inflama-
ción pericárdica por cualquier técnica de imagen como la tomografía
axial computada (TAC) o la resonancia magnética nuclear (RMN).
• Incesante: pericarditis que dura más de 4-6 semanas, pero menos de tres
Factores de riesgo
• Edad entre la cuarta y sexta década de vida.
• Relación hombre : mujer es 2:1.
Cuadro clínico
• Dolor precordial.
• Frote pericardíco.
• Cambios electrocardiográficos sugestivos (imagen).
• Derrame pericárdico.
Diagnóstico
• Radiografía de tórax postero-anterior y lateral.
• Electrocardiograma.
• Ecocardiograma transtorácico.
• Exámenes séricos generales.
• Marcadores de inflamación séricos (PCR y VSG).
• Marcadores de lesión miocárdica ([creatinfosfocinasa fracción MB] CPK-
MB y Troponina I).
Tratamiento
• Tratamiento no farmacológico:
Restricción del ejercicio, al menos hasta la resolución de los síntomas
y normalización del electrocardiograma, la PCR y de los cambios eco-
cardiográficos.
• Tratamiento farmacológico:
Primera elección: ácido acetilsalicílico o AINE más colchicina con adi-
ción de gastroprotección.
La dosis de AAS deberá ser de 750 mg a 1 gr cada 8 horas por 1-2 se-
manas, posteriormente se deberá disminuir de 250-500 mg cada 1-2
semanas, hasta completar 4-6 semanas.
La dosis recomendada de colchicina es de 0.5 mg cada 24 horas en
sujetos de menos de 70 kg y 0.5 m cada 12 horas en sujetos de más de
70 kg.
• Segunda elección: uso de esteroides a dosis bajas como la prednisona
a razón 0.2 - 0.5 mg/kg/día hasta la resolución de los síntomas y reducir
progresivamente la dosis en las primeras dos semanas hasta 4-6 semanas
• Embarazo: los AINE son medicamentos de primera línea hasta el segundo
trimestre. Se recomienda suspender a partir de las 20 semanas de gesta-
ción por el posible riesgo de cierre de conducto arterioso o alteraciones
de la función renal del feto. La colchicina está contraindicada durante el
embarazo, lactancia y niñez por ser teratogénica e interferir en la mitosis
y división celular.
CARDIOLOGÍA 29
Pronóstico / Referencia
• Se recomienda la hospitalización a pacientes con pericarditis aguda que
cuenten con al menos un criterio de pronóstico adverso (alto riesgo). Los
predictores de pronóstico adverso para pericarditis aguda son:
Mayores:
• Fiebre mayor de 38°C.
• Inicio subagudo.
• Derrame pericárdico severo.
• Taponamiento cardíaco.
• Falta de respuesta a tratamiento con AINE después de 1 semana.
Menores:
• Miopericarditis.
• Inmunosupresión.
• Trauma.
• Tratamiento con anticoagulantes orales.
•
Tips
• Una complicación de la pericarditis es el taponamiento cardíaco, donde se
recomienda la realización de pericardiocentesis guiada por ecocardiogra-
fía o fluoroscopia lo más rápido posible.
• La piedra angular del tratamiento de la pericarditis constrictiva es la peri-
cardiectomía.
Definición / Etiología
• Incluye infarto agudo al miocardio con y sin elevación del segmento ST y
angina inestable.
Factores de riesgo
• Edad: hombres ≥ 45 años, mujeres ≥ 55 años o menopausia prematura sin
terapia de remplazo hormonal.
• Género masculino.
• Historia familiar de enfermedad cardíaca coronaria prematura (infarto del
miocardio o muerte súbita en familiares de primer grado; hombres meno-
res de 55 años, mujeres menores de 65 años).
• Tabaquismo.
• Dieta alta en colesterol.
• Hipertension arterial.
• Sedentarismo.
• Obesidad.
• Diabetes mal controlada.
Cuadro clínico
• Dolor precordial opresivo
Referido a mandibular, cuello, brazo izquierdo, espalda o epigastrio.
Diaforesis, náusea, mareo, disnea y debilidad.
En caso de angina inestable, tiene duración de 5 a 20 min.
Diagnóstico
• Todo paciente con dolor precordial.
Electrocardiograma de 12 variaciones tomado en los primeros 10 mi-
nutos a su ingreso en urgencias.
• En caso de salir normal (cuadro clínico de angina) se recomienda la toma de
ECG seriados en intervalos de 15-30 minutos.
Biomarcadores de lesión miocárdica: se deben medir valores en inter-
valos de 6 a 8 h para medir pico máximo como índice del tamaño del
infarto.
• Troponina T o I: más sensible, especifico y el mejor para pronósticos a corto
plazo. Se eleva después de 3 a 4 h.
• CPK-MB: se eleva después de 4 a 6 h. Más económico, pero de baja sensibili-
dad y especificidad en las primeras 6 h.
• Determinación del riesgo de complicaciones de SICA (escala GRACE).
• Radiografía de tórax.
• Ecocardiograma transtorácico.
Tratamiento
• SICA: IMASEST y angina inestable. Al ingreso del paciente administrar:
Oxígeno suplementario, morfina para el control del dolor
AAS en dosis de inicio de 150-300 mg (mantenimiento 75-100 mg)
Añadir inhibidor de P2Y: Clopidogrel, prasugrel, ticagrelor, cangrelor
Administrar enoxaparina (1mg/kg dos veces al día, subcutánea) o hepa-
rina no fraccionada en pacientes con SCA SEST.
CARDIOLOGÍA 31
Monitoreo continuo de ECG.
Terapia anti-isquemia.
Nitroglicerina sublingual: 0.4 mg cada 5 min por 3 dosis.
• Se debe estratificar el riesgo de acuerdo a las escalas TIMI y GRACE y se
clasifica en riesgo bajo, intermedio, alto y muy alto, en caso de riesgo in-
termedio a muy alto se deberá realizar angiografía coronaria percutánea
en las siguientes 72, 24 o 2 horas respectivamente.
Tips
• Todo paciente debe tener manejo médico óptimo: oxígeno, morfina, as-
pirina, clopidogrel.
• Se debe valorar el riesgo de cada paciente, porque de eso depende la ra-
pidez con que se debe realizar la angiografía coronaria.
Definición / Etiología
• El tratamiento quirúrgico de la obesidad, también conocido como ciru-
gía bariátrica, es el procedimiento que se realiza sobre el estómago y/o
intestinos, con la finalidad de modificar su anatomía y en consecuencia el
metabolismo digestivo, con la finalidad de favorecer la pérdida de peso.
Factores de riesgo
• Los criterios para considerar obesidad mórbida en el adolescente son los
mismos que en el adulto, con base en el Índice de Masa Corporal (IMC)
existen dos condiciones: IMC ≥ 35 con una o más comorbilidades o IMC ≥
40 con y sin comorbilidad o por arriba del percentil 90 de IMC.
Cuadro clínico
• Identificar como candidato para cirugía bariátrica al adolescente que cum-
pla los siguientes criterios:
IMC ≥ a 35 más una o más comorbilidades o IMC ≥ a 40 con y sin co-
morbilidad.
Ha tenido fracaso en el manejo para la pérdida de peso durante un pe-
ríodo mayor o igual a 6 meses con un programa de reducción de peso
realizado en un centro especializado.
Ha alcanzado un desarrollo y madurez esquelética (estadio IV a V de
Tanner mamario y testicular).
33
Tiene la capacidad de someterse y comprender una evaluación médi-
ca, nutricional y psicológica antes y después de la cirugía.
Está dispuesto a participar y adherirse a un programa de tratamiento
transdisciplinario postoperatorio con énfasis en nutrición.
Está de acuerdo en evitar el embarazo durante al menos un año poste-
rior a la cirugía.
Tiene el compromiso de integrarse a un programa de seguimiento.
Firma consentimiento bajo información para ser integrado al programa
de cirugía bariatrica y otra donde acepta la realización del procedi-
miento quirúrgico.
Demostrar capacidad de decisión y tener red de apoyo familiar.
Tiene acceso a cirugía en una unidad con un equipo interdisciplinario
(cirujanos pediatras con formación en cirugía bariátrica o cirujano ba-
riatra de adultos con asesoría pediátrica, anestesiólogo, endocrinólogo
pediatra, cardiólogo pediatra, neumólogo pediatra, psicólogo, licencia-
do en nutrición y enfermeras especializadas en pacientes pediátricos).
Diagnóstico
• Se recomienda realizar los siguientes estudios como parte de la evaluación
preoperatoria en el adolescente con obesidad (candidato a procedimiento
quirúrgico):
Glucosa plasmática en ayuno.
Carga oral de glucosa (en aquéllos que presenten niveles séricos de
glucosa en ayuno igual o mayor a 100 mg/dl).
Hemoglobina glucosilada.
Pruebas de función hepática.
Prueba de embarazo.
Perfil de lípidos.
Perfil tiroideo.
En las pacientes que presentan irregularidades menstruales, datos de
hiperandrogenismo, e hirsutismo, se recomienda efectuar:
• Perfil hormonal ginecológico y androgénico así como ultrasonografía pélvica.
Tratamiento
• Las técnicas quirúrgicas para el control de la obesidad mórbida se dividen
en tres:
Restrictivas: aquéllas que reducen la capacidad gástrica (banda gástrica
ajustable y gastrectomía vertical en manga por laparoscopia).
Malabsortivas: son las que reducen la absorción de nutrientes al aislar
grandes segmentos de intestino delgado.
Mixtas: las que combinan las anteriores (bypass gástrico en Y de Roux).
Pronóstico / Referencia
• No se deberá realizar tratamiento quirúrgico en las siguientes situaciones:
Adolescentes con IMC menor a 35 con una o más comorbilidades.
Que el adolescente no desee someterse al tratamiento quirúrgico y no
firme el consentimiento bajo información.
Adolescentes que no han completado la madurez esquelética y desa-
rrollo sexual con Tanner menor a III.
Enfermedades psiquiátricas sin tratamiento o sin respuesta al trata-
miento.
No tener la capacidad de someterse y comprender una evaluación
médica, nutricional y psicológica antes y después de la cirugía.
Adolescente que sí acepta la cirugía pero no acepta el régimen dieté-
tico, psicológico y físico.
Mujeres adolescentes que no aceptan evitar el embarazo al menos 1
año posterior a la cirugía.
Adolescente en el que después de la evaluación por el equipo multi-
disciplinario, se llegue a la conclusión de que no tiene la capacidad de
adherirse a un programa de seguimiento nutricional y de cambio en el
estilo de vida.
Ausencia de redes de apoyo familiar.
No se recomienda realizar cirugía bariátrica en pacientes con anorma-
lidades congénitas del tracto gastrointestinal.
En presencia de cáncer.
Si usa regularmente antinflamatorios no esteroides y esteroides.
Consumo de alcohol y droga.
Tips
• Después de realizada la cirugía el paciente adolescente deberá seguir sien-
do evaluado por el equipo multidisciplinario que previamente lo valoró
para evitar la mayor cantidad de complicaciones postquirúrgicas posibles.
CIRUGÍA GENERAL 35
Banda gástrica Bypass gástrico Gastrectomía
ajustable en Y de Roux de manga vertical
TRAUMATISMO DE TÓRAX
Definición / Etiología
• Por traumatismo de tórax se refiere a lesiones producidas en la pared torá-
cica, en órganos o estructuras intratorácicas, por fuerzas externas de ace-
leración, desaceleración, compresión, impacto de baja y alta velocidad,
penetración de baja velocidad y electrocutamiento.
• Los traumatismos torácicos pueden ser cerrados (contusos) y penetran-
tes, ocasionados directamente desde la pared torácica o a través de la vía
aérea.
Factores de riesgo
• Accidentes de vehículo de motor (43%).
• Suicidios (29%).
• Homicidios (22%).
Cuadro clínico
• El cuadro clínico de los pacientes con trauma de tórax es muy variado,
depende del tipo y la extensión de la lesión, por lo que es importante el
examen físico detallado, y realizar de manera casi simultánea el interroga-
torio y el manejo.
• En el neumotórax se manifiestan datos clínicos como dificultad respiratoria,
taquipnea, hipoxia, desviación de la tráquea al lado contralateral, venas del
cuello distendidas, cianosis tardía, disminución o ausencia de ruidos respi-
ratorios del lado afectado, timpanismo a la percusión torácica, deformidad
Diagnóstico/Manejo
• Se sugiere realizar ultrasonido de tórax en pacientes con trauma de tórax
en los que exista duda diagnóstica o inestabilidad hemodinámica.
• Se recomienda realizar radiografía de tórax en proyecciones postero-ante-
rior o antero-posterior en pacientes con trauma de tórax hemodinámica-
mente estables.
• Se recomienda realizar la angiotomografía en pacientes con trauma de
tórax y sospecha de lesión de aorta.
Tratamiento
• El tratamiento habitual de los pacientes con neumotórax simple secunda-
rio a trauma es la pleurostomía.
• Se debe de realizar toracocentesis en todos los pacientes con diagnóstico
clínico de neumotórax a tensión.
• Se recomienda en pacientes con trauma de tórax con diagnóstico de he-
motórax masivo realizar toracotomía de manera inicial.
• Se sugiere realizar pericardiocentesis guiada por ultrasonido, en pacientes
con diagnóstico de taponamiento cardíaco, si se cuenta con los recursos
necesarios para ello.
Pronóstico / Referencia
• Todo paciente con sospecha de neumotórax debe ser referido a tercer
nivel para su adecuado tratamiento.
Tips
• Neumotórax hipertensivo se trata con aguja en segundo espacio intercos-
tal.
• 40% de neumonías bacterianas tienen derrame.
CIRUGÍA GENERAL 37
DERMATOLOGÍA
DERMATITIS POR CONTACTO
Definición / Etiología
• La dermatitis por contacto es una reacción inflamatoria aguda o crónica
que se desencadena por una repuesta a un agente externo.
39
Factores de riesgo
• Trabajo prolongado en entornos húmedos, con jabones y con detergen-
tes.
• Edad.
• Género femenino.
• Topografía: la cara, el dorso de las manos y pliegues interdigitales son los
que están más expuestos a irritantes químicos.
• Antecedentes de atopia.
Cuadro clínico
• El cuadro clínico de la dermatitis por contacto se caracteriza por eritema,
escama, vesículas y ampollas durante la fase aguda; mientras que en la
fase crónica se presenta la liquenificación y fisuras.
Diagnóstico
• Gold estándar pruebas epicutáneas (pruebas de parche).
• Clínico.
Tratamiento
• Primera elección: emolientes 3 veces por día, evitar alérgenos o agentes
irritativos, glucocorticoides tópicos:
• DA leve: baja potencia.
• DA moderada: mediana potencia.
• DA grave: alta potencia.
• Cara, cuello, axilas e ingles: baja potencia.
• Segunda elección: glucocorticoides sistémicos, inhibidores de calcineu-
rina.
• Esteroides sistémicos (Prednisona).
• Azatioprina.
• Metotrexate.
Complicaciones
• Impetiginización.
• Eczema herpético.
Pronóstico / Referencia
• Deben de referirse a alergología aquellos pacientes en que sospeche de
DCA recurrente para identificación del agente causal.
Tips
• El tipo irritativo es causado por efecto citotóxico.
• El tipo alérgico es mediado por hipersensibilidad de tipo IV.
• DCI: el sitio más frecuente de afección es toda la superficie de las manos.
• DCA: el sitio más frecuente de afección es el dorso de las manos.
• Las pruebas epicutáneas identifican el alérgeno especifico en DCA.
DERMATOLOGÍA 41
42 VIÑETAS CLÍNICAS ARM
ENDOCRINOLOGÍA
COMPLICACIONES AGUDAS DE LA DIABETES MELLITUS
Definición / Etiología
• Síndromes precipitados por algún evento estresante que aumenta el cata-
bolismo del organismo debido a la falta de acción de la insulina y/o gluco-
sa acompañado del aumento de hormonas contrarreguladoras.
43
Factores de riesgo
• Mal control metabólico.
• Infecciones.
• Intoxicaciones farmacológicas (corticoesteroides, tiazídicos).
• Intoxicación etílica.
• Eventos isquémicos.
Cuadro clínico
• Sintomatología cardinal diabética
Diagnóstico
• Gold standard clínico.
Tratamiento
• Primera elección:
Identificar y resolver causa desencadenante.
Corrección líquidos y electrolitos.
Plan de insulina.
Evitar el edema cerebral y la hipoglucemia en caso de estado hiperos-
molar y cetoacidosis diabética.
ENDOCRINOLOGÍA 45
Cetoacidosis Corrección de líquidos con:
diabética Solución fisiológica o solución Hartmann hasta
disminuir la glucosa plasmática a ≤250 mg/dl a
razón de :
15-20 ml/kg/hr o 1 lt en la primer hora.
250-500 ml/hr durante las siguientes horas.
Solución glucosada al 5 o 10% para mantener la
glucosa plasmática entre 150-200 mg/dl hasta
corregir la cetonemia.
Infusión de insulina rápida a 0.1 UI/kg/hr con bolo inicial
o 0.14 UI/kg/hr hasta la resolución de la cetosis y la nor-
malización del anión gap.
Vigilancia estrecha con valores del potasio al momento
de hidratar al paciente y al administrar infusión insulina,
ya que puede presentarse hipokalemia.
Corrección de potasio cuando se encuentre <5.3 mmol/l:
Administrar 20-30 mEq por cada litro de infusión.
Administrar bicarbonato si el pH sérico se encuentra <6.9.
Corrección de sodio sérico, agregar 1.6mEq/L por cada
100mg/dl de elevación de la glicemia sobre los 100mg/
dl.
Objetivos:
Reducción de la cetonemia 0.5 mmol/l por hora.
Aumento del bicarbonato sérico 3mmol/l por
hora.
Reducción de la glucosa 50 mg/dl por hora.
Mantener el potasio sérico entre 4.3-5.0 mmol/l.
Hipoglucemia Primera elección: carbohidratos de absorción rápida por
vía oral 20 g.
Infusión IV de solución glucosada.
Pronóstico / Referencia
• Estas complicaciones agudas son emergencias que requieren tratamiento
y monitoreo en hospital de segundo o tercer nivel.
• La cetoacidosis diabética debe de ser tratada de preferencia en una unidad
de terapia intensiva.
• La mortalidad por hiperglucemia es <1 %.
• Las principales causas de muerte son el desequilibrio electrolítico y el ede-
ma cerebral.
• La mortalidad por cetoacidosis diabética es <5%.
• La mortalidad del estado hiperglucémico e hiperosmolar es de 5-20%.
Tips
• La hidratación es el primer paso en el manejo de las complicaciones por
hiperglicemia.
• Tríada patognomónica de cetoacidosis: hiperglucemia, acidosis metabóli-
ca y cetonemia.
GALACTOSEMIA
Definición / Etiología
• La galactosemia clásica es una enfermedad hereditaria (autosómica rece-
siva) del metabolismo de los hidratos de carbono ocasionada por una de-
ficiencia enzimática, lo que resulta en la acumulación de los metabolitos
galactitol y galactosa-1-fosfato.
• Se clasifica en:
I. Galactosemia primaria (deficiencia congénita de GALT, GALK, GALE),
de la que existen tres tipos:
• Tipo 1. Galactosemia causada por la deficiencia de galactosa-1-fosfato uri-
diltransferasa (GALT) y se clasifica en:
Galactosemia clásica.
Galactosemia clínica.
Galactosemia bioquímica (variante Duarte D2).
• Tipo 2. Deficiencia de galactosa cinasa (GALK/GALK).
• Tipo 3. Deficiencia de galactosa-4-fosfato epimerasa.
II. Galactosemia secundaria generada por patologías como: hepatitis
congénita, malformaciones hepáticas arteriovenosas, alteraciones me-
tabólicas como tirosinemia tipo I, citrulinemia tipo 2 y síndrome de
Fanconi-Bickel.
Cuadro clínico
• La sintomatología clínica inicia en el paciente posterior a la ingesta de le-
che humana o fórmulas que contienen galactosa siendo manifestaciones
de una intoxicación aguda con signos inespecíficos como:
Crisis convulsivas, rechazo al alimento, vómitos, diarrea, ictericia, hipo-
tonía, encefalopatía de diferentes grados (irritabilidad, letargia y coma),
acidosis metabólica.
• Sintomatología especifica en el hígado: hay hepatomegalia, hiperbilirrubi-
nemia, transaminasemia, insuficiencia hepática con coagulopatia y ane-
mia; en ojos: cataratas; en riñón, disfunción tubular renal, albuminuria,
aminoaciduria generalizada, septicemia por E. coli y muerte.
• En etapas tardías hay falla para crecer, dispraxia verbal y disfunción ovárica
con hipogonadismo hipergonadotrópico.
Diagnóstico
• Tamiz neonatal en los primeros días de vida (1-5 días).
• Resultados de galactosa mayores de 10 mg/dl en el tamiz neonatal es igual
ENDOCRINOLOGÍA 47
a un caso probable de galactosemia.
• La determinación de la enzima GALT en eritrocitos sirve para confirmar las
variedades de la galactosemia por deficiencia de GALT.
• El diagnóstico definitivo se realiza mediante la medición de galactosa uri-
diltransferasa (GALT) y galactosa-1-fosfato en plasma por reacción enzimá-
tica, ensayo espectrofotométrico y/o análisis cuantitativo radioenzimático.
Los siguientes valores indican galactosemia clásica o variedad Duarte:
Galactosa-uridiltransferasa (GALT) menor o igual a 9.5 umol/h/gr Hb
(Duarte). Menor a 2 umol/h/gr Hb (clásica).
Galactosa-1-fosfato (GALT-1-P) mayor o igual a 1 mg/dl.
• La determinación sérica de la galactosa total y las mediciones de GALT y
Gal-1-P son útiles para el diagnóstico de la deficiencia de galactosa qui-
nasa (GALK) y deficiencia de galactosa 4-epimerasa (GALE), enzimas del
metabolismo de galactosa.
Tratamiento
• El tratamiento específico se debe iniciar en las primeras semanas de la vida
y mantenerse de un modo estricto durante toda la vida mediante:
Eliminación de la galactosa de la dieta, ante la menor sospecha clínica
o resultado positivo de las pruebas confirmatorias para prevenir las se-
cuelas irreversibles o muerte en la etapa neonatal
Fórmula de proteína de soya.
Micronutrimentos, vitamina D y calcio.
Pronóstico / Referencia
• Las complicaciones más comunes de la galactosemia son: daño hepático,
desarrollo psicomotor, lenguaje y coeficiente intelectual anormal, compli-
caciones óseas, cataratas e insuficiencia ovárica.
Tips
• El tamiz neonatal es primordial en el diagnóstico temprano de esta pato-
logía.
• El tratamiento empieza desde las primeras semanas de la vida.
Definición / Etiología
• La Mucopolisacaridosis (MPS) tipo I es una enfermedad autosómica re-
cesiva de depósito lisosomal, que se produce por el déficit de la enzima
α-L-iduronidasa.
• La MPS I se ha clasificado de acuerdo al fenotipo y al grado de afectación.
Síndrome de Hurler – Grave.
Síndrome de Hurler-Scheie - Intermedia/ moderada.
Síndrome de Scheie – Atenuada.
Factores de riesgo
• Antecedente de hermano con diagnóstico de certeza de MPS I.
• Endogamia.
Cuadro clínico
Forma leve Forma moderada Forma grave
Diagnóstico
• El diagnóstico definitivo de MPS I se realiza al encontrar actividad baja de
la α-L-iduronidasa en fibroblastos o leucocitos.
• El estudio molecular confirma el diagnóstico.
Tratamiento
• Hasta el momento no existe tratamiento curativo para MPS I.
• Existen dos modalidades de tratamiento con indicaciones muy precisas,
que ofrecen beneficio limitado en algunas variedades de MPS I:
Terapia de Reemplazo Enzimático (TRE) con laronidasa.
Trasplante de Médula Ósea (TCH).
• En embarazo no se recomienda utilizar la TRE.
Pronóstico / Referencia
• Criterios de referencia:
Antecedente de un hijo afectado por MPS I.
Sospecha clínica.
Confirmación diagnóstica.
• Ante datos de reacción adversa y/o falta de respuesta a la TRE, se requiere
su envío a un centro hospitalario especializado en tratamiento de niños
con MPS I.
Tips
• El diagnóstico, tratamiento y seguimiento de los niños con MPS I debe ser
realizado por un grupo multidisciplinario.
ENDOCRINOLOGÍA 49
NÓDULO TIROIDEO NO TÓXICO EN ADULTOS
Definición / Etiología
• Un nódulo tiroideo es un aumento focal de volumen o consistencia loca-
lizado en la tiroides, que se detecta por palpación o mediante estudios de
imagen y cuyas características permiten su distinción del resto del parén-
quima.
• Con base en el patrón de captación del radionucleótido, los nódulos se
clasifican como hiperfuncionantes, isofuncionantes o hipofuncionantes.
Los nódulos hiperfuncionantes prácticamente nunca representan lesiones
malignas, mientras que los nódulos hipofuncionantes tienen un riesgo de
malignidad de 8 a 12%.
Factores de riesgo
• Edad.
• Antecedentes personales o familiares de enfermedad tiroidea, radiación en
la infancia, cáncer de cabeza o irradiación a cuello.
• Síntomas de híper o hipotiroidismo.
• Uso de medicamentos o suplementos que contengan yodo.
Cuadro clínico
• Sensibilidad del cuello y/o dolor.
• Presencia de adenopatía cervical.
• Crecimiento de masa en cuello.
• Disfonía, disfagia o disnea.
• Dolor a la palpación en la parte anterior del cuello.
Diagnóstico
• Medir niveles séricos de TSH para establecer si son nódulos autónomos o
hiperfuncionantes.
• USG de tiroides.
Tratamiento
• Los nódulos con diámetro de <5 mm deben ser monitoreados con eco-
grafía, independientemente de su apariencia ecográfica, en lugar de biop-
siados. En los nódulos con diámetro de entre 5-10 mm que son asociados
con signos sospechosos por USG (lesiones de alto riesgo), considere rea-
lizar BAAF, vigilar y la preferencia del paciente.
• La BAAF es el procedimiento de elección en la evaluación de los nódulos
tiroideos, cuando está clínicamente indicado.
• Criterios para realizar BAAF:
Nódulos ≥10mm con patrón ecográfico altamente sospechoso o de
sospecha intermedia.
Nódulos con diámetro de entre 5-10 mm con patrón ecográfico sos-
pechoso, considerando la preferencia del paciente.
Tips
• Considerar la TC y/o RM en casos de compresión de las vías respiratorias,
la extensión subesternal, intratorácica o muy extensas.
• Cuando la muestra de biopsia es insatisfactoria para el análisis citológico
(categoría 1 de Bethesda), se recomienda repetir la BAAF dirigida por eco-
grafía 3 a 6 meses después.
PELAGRA
Definición / Etiología
• La Pelagra es una enfermedad sistémica, producida por deficiencia de vi-
tamina B3 (niacina), que es un componente esencial de varias coenzimas.
Es originada por el consumo de dietas con bajo contenido de niacina y/o
triptófano. La niacina también se obtiene por producción endógena a par-
tir de su precursor natural, el triptófano. La pelagra se produce cuando los
niveles de niacina y triptófano son bajos o cuando la conversión del ami-
noácido esencial de la coenzima se ve comprometida.
Factores de riesgo
• Estados de mala absorción.
• Diarrea prolongada.
• Mal nutrición.
• Dietas de moda: altas en leucina y bajas en triptófano.
• Ingestión por tiempo prolongado de sorgo.
• Terapia con isoniazida que por su estructura análoga a la niacina suprime
la producción endógena.
• Medicamentos que interrumpen la síntesis de triptófano:
5-fluoracilo.
Pirazinamida.
6-mercaptopurina.
Hidantoína.
Etionamida.
Fenobarbital.
Aazatioprina.
Cloranfenicol.
• Enfermedad de Hartnup.
• Alcoholismo crónico.
• Tumores carcinoides.
• Cirrosis hepatica.
• Diabetes.
• Fiebre prolongada.
• Virus de Inmunodeficiencia Humana (VIH).
ENDOCRINOLOGÍA 51
Cuadro clínico
• Lesiones dérmicas en zonas expuestas al sol cuyas características princi-
pales son inicialmente eritematosas y simétricas. Posteriormente hiperpig-
mentadas con hiperqueratosis. Finalmente se presenta adelgazamiento de
la piel que evolucionan a descamación.
• En orden de frecuencia se presentan en:
Dorso de brazos.
Cuello “Collar de Casal”.
Manos “Guantes de Pelagra”.
Cara “Signo de mariposa”.
Lesiones en escroto, periné y puntos de presión.
Diarrea.
Evacuaciones líquidas, ocasionalmente con moco y sangre.
• Alteraciones neurológicas:
Demencia.
Letargia.
Apatía.
Depresión.
Ansiedad.
Irritabilidad.
Concentración mental deficiente.
Sopor (poco frecuente).
Coma (poco frecuente).
• Lesiones en mucosas orales:
Queilosis.
Gingivitis.
Estomatitis.
Glositis.
Aplanamiento de las papilas gustativas.
Diagnóstico
• El diagnóstico de pelagra es principalmente clínico, la determinación de
niacina se usa solo para estudios de escrutinio con fines de investigación.
• El diagnóstico de pelagra se puede confirmar cuando se encuentran nive-
les séricos bajos de:
Niacina.
Triptófano.
NAD (dinucleótido de adenina nicotinamida).
NADP (Fosfato de dinucleótido de adenina nicotinamida).
• En muestras de orina de seis horas, los niveles de nicotinamida entre 0.2 y
0.5 mg se consideran bajos, y un nivel menor de 0.2 mg indica una caren-
cia de niacina.
• La excreción urinaria combinada de N-metilnicotinamida y piridona menor
de 1.5mg en 24 horas indica la deficiencia grave de niacina.
Tratamiento
• La dosis diaria recomendada para el tratamiento de Pelagra es de 300 mg
de nicotinamida en dosis divididas, durante 3 a 4 semanas.
• Zinc, piridoxina y magnesio también se deben prescribir como suplemen-
tos, se ha visto que actúan como cofactores en la síntesis de niacina.
Tips
• Las manifestaciones características son: dermatitis, diarrea y demencia “las
tres D” y puede conducir a la muerte conocida como la cuarta “D” por su
inicial en inglés “death”.
ENDOCRINOLOGÍA 53
GASTROENTEROLOGÍA
ENFERMEDAD POR REFLUJO GASTROESOFÁGICO
Definición / Etiología
• Se define como el ascenso del contenido gástrico o gastroduode-
nal por arriba de la unión gastroesofágica, que causa síntomas y com-
plicaciones esofágicas y que afecta la calidad de vida del paciente.
Factores de riesgo
• Hernia hiatal.
• Ciertos tipos de comida (café, alcohol, grasa, chocolate, cítricos, menta,
bebidas carbonatadas).
• Consumo exagerado de alcohol.
• Tabaquismo.
• Obesidad.
• Medicamentos: AINE´s aspirina, antagonistas de calcio, sedantes, anticon-
ceptivos orales, anticolinérgicos, morfina, teofilina, alfa y beta agonistas
adrenérgicos.
Cuadro clínico
• Síntomas esofágicos: pirosis, regurgitación.
• Síntomas extraesofágicos: tos crónica, laringitis crónica, asma.
• Síntomas atípicos: dispepsia, dolor epigástrico, distensión, eructos, náusea.
55
Diagnóstico
• Gold standard: historia clínica.
• Una prueba terapéutica exitosa con un inhibidor de la bomba de protones
(IBP) apoya el diagnóstico.
• Se recomienda realizar panendoscopia en paciente con prueba terapéuti-
ca negativa y recidiva de la sintomatología.
• Monitoreo de pH esofágico en 24 horas en síntomas persistentes de 6 a 8
semanas de tratamiento médico.
• El daño a la mucosa se puede documentar mediante un estudio de esofa-
gograma baritado, esofagoscopia y biopsia de la mucosa.
Tratamiento
• Primera elección: modificaciones en estilo de vida (reducción de peso,
elevación de la cabecera, no fumar, no ingerir bebidas alcohólicas, evitar
comidas grasosas, cafeína, alcohol, chocolate, ajo, cebollas, mentas) en
conjunto con IBP (omeprazol, lansoprazol).
• Segunda elección: Antagonistas de receptor H2 (cimetidina, ranitidina).
• Tercera elección: La funduplicatura de Nissen en caso de enfermedad re-
fractaria o grave.
Pronóstico / Referencia
• Las complicaciones de ERGE son la esofagitis erosiva, estenosis péptica
esofágica, neumonía por aspiración, sangrado gastroesofágico superior.
• Factores de mal pronóstico: IMC >25, sin respuesta a IBP, hernia hiatal
mayor de 3 cm, porcentaje de exposición prolongado de pH menor a 4 y
enfermedades psiquiátricas.
Tips
• Las modificaciones del estilo de vida son imprescindibles para el trata-
miento.
Reflujo
gástrico
Figura 1. Reflujo gástrico. Imagen que representa el colapso normal del esfínter
esofágico inferior y como al no haber una función adecuada, se produce el reflujo del
contenido gástrico a la luz esofágica.
Recuperado de https://www.gicare.com/gi-health-resources/gerd/ www.gicare.com. Jackson Siegelbaum
Gastroenterology.2019.
Definición / Etiología
• Venas ensanchadas y sangrantes en el esófago, principalmente secunda-
rias a cirrosis hepática.
Factores de riesgo
• Consumo excesivo de alcohol.
• Infección crónica por virus de hepatitis B y C.
• Esteatohepatitis no alcohólica.
Diagnóstico
• Endoscopia.
• Exámenes de laboratorio: biometría hemática completa, tiempos de coa-
gulación, grupo sanguíneo, pruebas de función hepática, función renal y
cruce de sangre.
Tratamiento
• Existen tres objetivos primarios en el manejo agudo del sangrado variceal
activo:
Resucitación hemodinámica.
Prevención y tratamiento de las complicaciones.
Tratamiento del sangrado.
• Primera elección: terlipresina 2 mg IV cada 4 horas hasta lograr control del
sangrado o máximo 5 días y puede titularse a 1 mg IV cada 4 horas una vez
que la hemorragia esté controlada.
• Segunda elección: octreotide 50 mcg en bolo seguido de infusión de 25-
50 mcg/hr por 5 días.
• Se recomienda transfusión de plaquetas en pacientes con sangrado activo
y cifras de plaquetas menores a 50,000 / μl.
• La ligadura variceal es la terapia endoscópica de elección para el control
de sangrado secundario a várices esofágicas.
Complicaciones
• Las principales complicaciones que aumentan la mortalidad son:
Neumonía por aspiración.
Encefalopatía hepática.
Sepsis.
Agudización de insuficiencia hepática crónica.
Lesión renal aguda.
Pronóstico / Referencia
• La tasa de mortalidad del sangrado de várices esofágicas es de al menos el
20% en las primeras 6 semanas.
• Todo paciente con diagnóstico de cirrosis hepática debe de enviarse a
estudio de endoscopia como parte del protocolo de estudio en busca de
várices esófago – gástricas.
• Se debe realizar endoscopia a segundo nivel al momento que exista evi-
dencia o sospecha de sangrado en el paciente cirrótico, posterior al ma-
nejo médico inicial.
GASTROENTEROLOGÍA 57
• Se deberá enviar a tercer nivel de atención aquéllos pacientes con san-
grado de difícil control o resangrado, si no se cuenta en la unidad con
los recursos necesarios para ofrecer una terapia definitiva endoscópica o
quirúrgica.
Tips
• Antes de realizar la endoscopia es necesaria la estabilización hemodiná-
mica.
• Se debe realizar endoscopia en todos los pacientes con hepatopatía cró-
nica.
Varices esofágicas
Hígado con
cirrosis
Bazo
Vena porta
Definición / Etiología
• La EF es una enfermedad hereditaria ligada al cromosoma X recesiva, pro-
ducida por la deficiencia de la enzima lisosomal AGLA, que afecta de for-
ma predominante a los varones. Tiene alta penetrancia y expresión feno-
típica variable.
• Se han descrito diversos grados de actividad residual de AGLA, que origi-
nan diversas formas clínicas de EF.
• La variante cardíaca se presenta con hipertrofia ventricular izquierda y/o
miocardiopatía aislada, que se presenta en la sexta o séptima década de la
vida, careciendo de los síntomas de la enfermedad clásica y el tiempo de
evolución habitual. Los pacientes que sufren de esta variante pueden tener
proteinuria, pero su función renal suele ser normal para su edad.
• La variante renal se describe en un estudio de cribado en una población
de diálisis, donde los pacientes carecían de las manifestaciones clásicas.
Este fenotipo se describe como “intermedia” entre la variante cardíaca y
el fenotipo clásico. Estos pacientes con variantes cardíacas y renales son
llamados pacientes con EF atenuada o atípica.
• Y una posible variante cerebrovascular, donde los ictus suelen suceder en
menores de 30 años y algunos autores reportan jóvenes con evento vas-
cular cerebral criptogénico en 4.9% en varones y 2.4% en mujeres mayores
de 40 años.
59
Cuadro clínico
Diagnóstico
• Determinación de actividad enzimática y análisis molecular del gen GLA.
• Exploración inicial de manifestaciones renales y cardíacas:
Sangre: creatinina sérica, urea, ácido úrico, calcio, fósforo, sodio y po-
tasio.
Orina: depuración de creatinina, medición de TFG, proteínas en orina
de 24 horas, tiras reactivas (microalbuminuria/proteinuria).
Ultrasonido renal.
EGO.
Medición de presión arterial.
Electrocardiograma.
Pronóstico / Referencia
• Es necesario realizar controles cada seis meses, o anuales dependiendo
de la presencia de signos de deterioro.
• Se recomienda el seguimiento de la función renal, según el grado de afec-
tación.
Cada 3 meses, si existe ERC estadio 1 o 2 y > 1 g / día de proteinuria o
ERC en estadio 4.
Cada 6 meses, si existe ERC en estadio 3.
Cada 12 meses, si existe ERC estadio 1 o 2 y < 1 g de proteinuria /día.
Tips
• El diagnóstico se realiza mediante la determinación de actividad enzimáti-
ca y análisis molecular del gen GLA.
• Las manifestaciones renales deben de tener un seguimiento especial.
• La terapia enzimática no está indicada en todos los pacientes.
GENÉTICA 61
Sospecha
clínica
Diagnóstico
No se confirma Realizar pruebas
confirmatorio
el diagnóstico diagnósticas
de EF
No
¿Cumple
objetivo Mantener
terapéutico? en vigilancia y
Si
seguimiento
Si No
¿Cumple crite-
rios para inicio No
de TRE?
Mantiene
Suspender
tratamiento
TRE
con TRE
Recuperado de IMSS. (2017). Guía de referencia rápida, Catálogo Maestro de Guías de Práctica Clínica: IMSS-
165-09. Recuperado de: http://www.cenetec.salud.gob.mx/contenidos/gpc/catalogomaestroGPC.html
Definición
• Hipertensión arterial se establece con valores de tensión arterial sistólica
igual o mayor de 140 mm Hg y tensión arterial diastólica mayor o igual de
90 mm Hg, al menos en tres ocasiones en diferentes días.
• La hipertensión sistólica aislada se define como la tensión arterial ≥ 140
mmHg de presión sistólica y ≤ 90 mmHg de presión diastólica. Esta se
incrementa con la edad, es más resistente a la terapia antihipertensiva,
además de ser la de mayor prevalencia en adultos mayores de 65 años,
presentándose hasta en 87% de los adultos mayores.
Factores de riesgo
• Los factores de riesgo no modificables que independientemente están
asociados con hipertensión arterial sistémica esencial son: edad avanzada,
historia familiar y la raza, de la cual, la raza negra es más común, grave y
con mayores complicaciones a órgano blanco, le siguen los hispanoame-
ricanos, asiáticos y blancos.
• Los factores de riesgo modificables asociados a hipertensión arterial sisté-
mica esencial son: obesidad, dieta con alto contenido de sodio, consumo
de alcohol en exceso, inactividad física, diabetes y dislipidemia, enferme-
dad renal aguda o crónica, personalidad depresiva o depresión.
63
Cuadro clínico
• Síntomas inespecíficos: cefalea, disnea, mareos, acúfenos, fosfenos.
Diagnóstico
• Mismas cifras de tensión arterial (TA) para todas las edades, salvo en la
presión arterial sistémica (PAS) aislada que marca >140 mmHg con presión
diastólica de < 90 mmHg.
La medición con esfigmomanómetro es la prueba de escrutinio de
elección.
• En el adulto mayor, por presentar variabilidad en la tensión arterial el diag-
nóstico deberá basarse en el promedio de al menos 3 lecturas (descar-
tando la primera y promediando las subsecuentes), en 3 visitas separadas
durante un período de 4 a 6 semanas (siempre que la tensión arterial pre-
sente no sea ≥ 180/110 mm Hg).
• Para diagnosticar hipertensión arterial sistémica, se puede utilizar la “de-
terminación domiciliaria de la tensión arterial” (realizada con mediciones
secuenciales por paciente/familiar en domicilio) o utilizando “Monitoriza-
ción Ambulatoria de la Presión arterial” (MAPA), de acuerdo a las siguientes
parámetros diagnósticos:
Promedio de 24 horas ≥ 130/80 mmHg.
Horas diurnas (en estado de despierto) promedio ≥135/85 mmHg.
Horas nocturnas (en estado de dormido) promedio ≥120/70 mmHg.
Promedio ≥ 135/85 mmHg en determinaciones domiciliarias repetiti-
vas durante el día.
Tratamiento
• Farmacológico:
• Iniciar con IECA, si no controla los niveles de TA agregar tiazidas. Posterior-
mente, betabloqueadores o antagonistas de los canales de calcio.
• El inicio con la dosis mínima recomendada, en la mayoría se requerirá más
de un fármaco combinando los indicados de primera elección.
• Los betabloqueadores se consideran fármacos de tercera elección.
• Los diuréticos se deben utilizar en la dosis mínima eficaz, es preferible la
combinación de fármacos que aumentar la dosis del diurético.
Los betabloqueadores no deben considerarse en la terapia inicial, pero
si considerar su utilización en jóvenes con intolerancia o contraindica-
ción a IECA.
• No farmacológico:
Modificaciones del estilo de vida: reducción moderada de la ingesta de
sal, ejercicio aeróbico, suspender tabaquismo, control de peso.
Pronóstico / Referencia
• Referir al tercer nivel para tratamiento médico si hay insuficiencia cardíaca
refractaria, deterioro en clase funcional con fracción < 40%, falla cardíaca
aguda o necesidad de tratamiento quirúrgico.
Tips
• La medición domiciliaria de la TA es especialmente útil en adultos mayores
por la variabilidad de la presión durante el día.
• No se recomienda presiones arteriales sistólicas menores a 120 mmHg en
mayores de 85 años.
GERIATRÍA 65
GINECOLOGÍA
DIAGNÓSTICO DE CÁNCER DE MAMA
Definición / Etiología
• El cáncer de mama es el crecimiento anormal y desordenado de las cé-
lulas del epitelio de los conductos o lobulillos mamarios y que tienen la
capacidad de diseminarse.
Factores de riesgo
Mayores Menores
67
Cuadro clínico
• Etapas iniciales es asintomático.
• Tumor mamario.
• Cambio de tamaño.
• Nódulos en axila.
• Secreción a través del pezón.
Factores de riesgo
• Gold standard: estudio histopatológico obtenido por biopsia.
• Los tipos de biopsias: biopsia con aguja fina, biopsia con aguja de corte
(tru-cut), marcaje por estereotaxia con aguja/arpón.
• La biopsia con ultrasonido se realiza en anomalías sospechosas no palpa-
bles o mamográficamente visibles.
• Mastografía procedimiento estándar para el diagnóstico precoz; el uso de
ultrasonido mamario bilateral en mujeres jóvenes menores a 30 años, em-
barazadas y con tejido mamario denso.
• Se recomienda que la mujer realice autoexploración mamaria y acuda a
revisión por médico en caso de encontrar alteraciones.
Tratamiento
• En caso de reportarse Carcinoma Ductal In Situ (CDIS) se recomendará la
cirugía como opción primaria (lumpectomia) y según el puntaje de la esca-
la de Van Nuys se contemplará acompañarla de radiación postquirúrgica y
posteriormente hormonoterapia, en caso de resultar positiva a receptores
hormonales.
Pronóstico / Referencia
• Referencia a segundo nivel en edad mayor a 30 años, con tumoración de
mama sin explicación, con o sin dolor; mayores de 50 años con: descar-
ga, dolor o retracción del pezón, cambios en la piel sugestivos de cáncer,
ganglio axilar inexplicable.
• Referir a tercer nivel de atención en caso: tumor mamario con sospecha
de malignidad, BI-RADS 3-6, diagnóstico histopatológico de hiperplasia
con atipia o cáncer de mama, embarazadas con tumor, enfermedad de
Paget, cáncer de mama recurrente.
• Las consultas de seguimiento y exploración física se sugieren realizar con
una frecuencia de cada 3 a 6 meses durante los tres primeros años, pos-
teriormente cada 6 a 12 meses durante los siguientes 2 años y luego de
forma anual mientras la persona con cáncer de mama se encuentre asin-
tomática.
• En la persona con cáncer de mama tratada con cirugía conservadora ini-
ciarán su control mastográfico al menos 6 meses después de haber con-
cluido la radioterapia en las mastografías subsecuentes es recomendable
realizarlas anualmente. En casos de mastectomía, el control mastográfico
será igualmente anual.
Tips
• Lo más importante es la detección temprana del cáncer, con autodetec-
ción y mediante las campañas.
• Referir a tercer nivel en lesiones BIRADS 3 a 6 para realización de biopsia.
Definición / Etiología
• Lesiones que preceden a la aparición de un cáncer del cuello cervicoute-
rino.
Factores de riesgo
• Infección persistente por virus de papiloma humano de alto riesgo (VPH-
AR).
• Inicio de actividad sexual a edad temprana.
• Edad temprana al primer nacimiento.
• Multiparidad.
• Múltiples compañeros sexuales.
• Una pareja de alto riesgo.
• Historia de infecciones de transmisión sexual como:
Chlamydia trachomatis.
Herpes genital.
• Uso prolongado de anticoncepción hormonal.
• Tabaquismo.
• Historia de neoplasia intraepitelial vaginal o vulvar.
• Inmunosupresion (VIH).
Diagnóstico
• Pruebas de tamizaje
Prueba de VPH.
Citología cervical convencional o en base líquida.
Pruebas biomoleculares de VPH de alto riesgo.
Prueba de Papanicolau.
Inspección visual de ácido acético.
• La prueba de VPH resulta ser la de mayor beneficio. Se realiza en mujeres
de edad mayor o igual a 30 años y en caso de resultar negativa se repite
cada 5 años).
• El Pap se realiza preferentemente en grupos de mujeres de 25 a 29 años
que ya comenzaron vida sexual y en caso de ser negativa, se repite cada
3 años.
Tratamiento
• Existen diferentes técnicas quirúrgicas, aunque no se ha demostrado supe-
rioridad de una técnica sobre otra en cuanto eficacia y morbilidad:
Biopsia con bisturí.
Conización con láser.
Escisión con asa de la zona de transformación.
Ablasión con láser.
Crioterapia.
• Se recomienda realizar la conizacion con bisturí frio de la zona de transfor-
mación como tratamiento para las mujeres con adenocarcinoma In Situ
confirmado mediante histología.
GINECOLOGÍA 69
Pronóstico / Referencia
• Las mujeres con diagnóstico histológico de LEIAG (NIC3) deben tratarse
para reducir el riesgo de desarrollar carcinoma cervical invasivo, por lo
que deben referirse para realizar la colposcopia con fines diagnósticos y
terapéuticos.
Tips
• Realizar tamizaje en mujeres que iniciaron su vida sexual.
• Buscar infección por virus del papiloma humano.
• El tratamiento depende de la etapa de la lesión.
Definición / Etiología
• Tumor maligno originado por la pérdida de control del crecimiento de las
células del endocérvix y exocérvix, que puede invadir estructuras adyacen-
tes.
• Cáncer in situ confinado a superficie epitelial, cáncer invasor donde célu-
las malignas traspasan la membrana basal.
Factores de riesgo
• Virus del papiloma humano.
Cuadro clínico
• Sangrado anormal postcoito.
Diagnóstico
• Gold standard: Papanicolau.
• Historia clínica, exploración física completa, realización de citología cervi-
cal y toma de biopsia de sitio representativo de la lesión.
• El examen físico de la paciente con cáncer cervico-uterino, es recomenda-
ble que incluya: tacto recto vaginal, valoración de: cérvix, fondos de saco,
paredes vaginales, parametrios, tabiques rectovaginal y vésicovaginal, así
como pared pélvica; valoración de regiones ganglionares: supraclavicula-
res, axilares e inguinales, exploración de abdomen.
• Realizar biopsia guiada por colposcopia para corroborar el diagnóstico: se
considera como cono cervical adecuado el que incluya la lesión en su to-
talidad y la zona de transformación, profundidad en el canal endocervical
de 10 mm para que incluya las criptas, que incluya la totalidad del canal
endocervical, que no esté fragmentado.
• El reporte histopatológico de la biopsia: tamaño y características del tejido.
Diagnóstico: tipo histológico, infiltración, grado histológico y la presencia
de infiltración linfovascular y perineural.
Tratamiento
• El tratamiento de la paciente con carcinoma in situ del cérvix será conser-
vador o definitivo de acuerdo a los deseos de paridad. En pacientes con
paridad no satisfecha pueden ser tratadas con cono cervical, siempre y
cuando la paciente sea susceptible de seguimiento.
• Estadio Ia1: conización con márgenes libres (conservación de fertilidad) o
GINECOLOGÍA 71
Categorías Estadio Interpretación
Definición / Etiología
• Defecto hemorrágico hereditario frecuentemente descrito en la literatura
médica, causado por un defecto cualitativo o cuantitativo del factor de
Von Willebrand (fvW).
• Tipo 1: deficiencia parcial de FvW.
• Tipo 2: defectos cualitativos de FvW.
• Tipo 3: ausencia de FvW.
Factores de riesgo
• Antecedentes personales o familiares de hemorragias significativas.
• Antecedentes de hemorragias de mucosas no relacionadas a traumatismos.
Cuadro clínico
• Epistaxis, menorragia, equimosis, hemorragia gastrointestinal, hemorragia
posterior a procedimiento y en algunas variantes hematomas y hemartro-
sis.
• Tipo 3: sangrado en cavidad oral 54%, hemartrosis 45%, hematomas 28%.
73
Diagnóstico
• Escrutinio: biometría hemática, tiempo de tromboplastina, tiempo de
trombina, tiempo de protrombina, tiempo de sangrado de Ivy.
• FvW antigénico (FvWAg) y actividad de FvW cofactor de ristocetina (FvWRi-
Co). Si los resultados están disminuidos, pasar a clasificar subtipo de enfer-
medades de VW.
• Tipo de EvW: análisis de multímetros del FvW, agregación plaquetaria in-
ducida por ristocetina (RIPA) a dosis bajas, prueba de unión del FvW al FVIII
(FvW: FVIIIB), prueba de unión a colágena (FvW: CB), prueba de unión del
FvW a plaquetas fijadas en paraformaldehido con bajas concentraciones
de ristocetina (FvW: PB), razón entre el FvW: RCo y FvW: Ag.
Tratamiento
• EvW tipo 1: desmopresina 0.3 g/kg en 20-30 ml de solución fisiológica en
infusión continua durante 30 minutos por vía intravenosa, después de la
prueba con desmopresina 1-desamino-8-D-arginina vasopresina, (DDAVP),
cada 8-12 horas por 72 horas v.o., i.v. o tópico para hemorragias en muco-
sas o postquirúrgicas.
• Antifibrinolíticos: ácido épsilon-aminocaproico, ácido tranexámico.
• Concentrados de factor VIII/FvW.
Tips
• Sospechar en pacientes con sangrados en mucosas inexplicables.
• En caso de sospecha medir los parámetros del factor de Von Willlebrand
para clasificar la enfermedad.
Definición / Etiología
• Enfermedad hemorrágica hereditaria que presenta deficiencia funcional o
cuantitativa del factor VIII (hemofilia A) y factor IX (hemofilia B) de la coa-
gulación.
• Defecto en genes en el brazo largo del cromosoma X.
Factores de riesgo
• Mujeres portadoras, hombres que manifiestan la enfermedad.
• Paciente con hemorragia y antecedente familiar de enfermedad hemorrá-
gica: sospechar hemofilia.
Diagnóstico
• Clínico, antecedentes familiares.
• Biometría hemática, tiempos de sangrado, tiempo de tromboplastina par-
cial activada, tiempo de protrombina y tiempo de trombina.
• En la segunda fase de evaluación: determinación de factores de coagula-
ción (VIII y IX). En la deficiencia de factor VIII, establecer diagnóstico diferen-
cial con FvW.
• En diagnósticos establecidos: determinación de inhibidores contra factor
VIII y IX.
Tratamiento
• Primera elección:
Factor recombinante VIII o IX profiláctico.
Hemorragia: tratamiento sustitutivo de factor VIII o IX (1 U fVIII/kg arriba
del 2% de actividad).
• Segunda elección: concentrados de factores de la coagulación de origen
plasmático que al menos tengan 2 procesos de inactivación viral.
Tips
• Sospechar en hombres con sangrado inexplicable.
• Mujeres son portadoras.
• El tratamiento se basa en reposición de factor ausente.
HEMATOLOGÍA 75
INFECTOLOGÍA
DIAGNÓSTICO Y TRATAMIENTO DE SEPSIS Y CHOQUE SÉPTICO EN
PACIENTES DE 1 MES A 18 AÑOS DE EDAD EN LOS 3 NIVELES DE
ATENCIÓN
Definición / Etiología
• La sepsis es una enfermedad sistémica grave, caracterizada por afección
multiorgánica que conlleva morbilidad y mortalidad elevadas; el pronós-
tico de esta enfermedad es tiempo dependiente, un diagnóstico y trata-
miento oportuno es la principal característica para que no evolucione a
choque séptico.
Factores de riesgo
• Lactantes menores de 1 año hospitalizados, inmunodeficiencia por enfer-
medad o medicamento, pacientes oncológicos en quimioterapia, pacien-
tes con diabetes, uso crónico de esteroides, cirugías mayores, pérdida de
integridad de la piel, uso de catéteres centrales, desnutrición.
Cuadro clínico
• Sepsis: sospecha o evidencia de infección más:
alteración del estado de conciencia, fiebre mayor a 38° o hipotermia
con temperatura central menor a 36°, taquicardia o taquipnea; se debe
sospechar sepsis en niños con foco infeccioso que no mejore su curva
térmica o persista con datos de respuesta inflamatoria sistémica e ini-
cie con alteraciones en el estado de alerta.
77
• Choque séptico: alteración del estado de conciencia, llenado capilar al-
terado, pulsos débiles o saltones, alteración de la temperatura de las ex-
tremidades, cambios en la coloración; se debe sospechar en casos de
hipoperfusión y disfunción de un órgano secundario a sepsis.
Diagnóstico
• Sepsis: estudios auxiliares: biometría hemática: leucocitosis o leucopenia,
bandemia mayor al 10%, plaquetopenia, proteína c reactiva, procalcitonina
(solo en infecciones bacterianas), pruebas de coagulación, gases en san-
gre y cultivos.
• Choque séptico: gasometría arterial índice de kirby menor a 300, acidosis
metabólica, lactato mayor a 2 mmol, trombocitopenia, bilirrubinas totales,
alanino aminotrasnferasa, incremento de la creatinina sérica, pruebas de
coagulación sanguínea.
Tratamiento
• Sepsis: asegurar vía aérea y soporte de oxígeno de acuerdo al paciente, acceso
vascular o intraóseo, asegurar requerimientos hídricos y electrolíticos, iniciar tra-
tamiento antimicrobiano con el mayor espectro disponible dentro la primera hora
del diagnóstico, valoración clínica y laboratorios para cambios en tratamiento.
• Choque séptico: iniciar mascarilla facial, CPAP nasofaríngeo, intubación
temprana en caso de dificultad respiratoria, reanimación con líquidos e ino-
trópicos, carga rápida de cristaloides isotónicos en 5 a 10 minutos con vigi-
lancia hemodinámica, iniciar hidrocortisona en choque séptico resistente a
catecolaminas y riesgo o diagnóstico establecido de insuficiencia suprarrenal.
Tips
• La sospecha de infección es la principal herramienta en el diagnóstico de
shock séptico y sepsis.
• El tratamiento se basa en reanimación, tratamiento de soporte y antibióti-
cos adecuados.
Definición / Etiología
• Exposición accidental: contacto no deseado ni esperado que se produce
con un líquido potencialmente infectante ya sea por vía parenteral a través
de una lesión percutánea, por piel no intacta o por membranas mucosas
como la boca, ojos, vagina y recto.
Factores de riesgo
• Ser personal del área de la salud y trabajar con pacientes infectados; ma-
nejo de fluidos corporales (sangre, líquido cefalorraquídeo, líquido sinovial,
líquido pleural), manejo de objetos punzo cortantes utilizados para manejo
de fluidos corporales o para manipulación de órganos y tejido.
• El riesgo de adquirir la infección por VIH después de una inoculación per-
cutánea se estima en 0.3%; las salpicaduras de mucosa con material con-
taminado, o la piel lesionada tiene un riesgo estimado de .09%.
• La calificación del riesgo de transmisión se refiere como:
• 1. Riesgo muy alto: accidente con gran volumen de sangre y con carga
viral VIH elevada.
• 2. Riesgo alto: accidente con alto volumen de sangre o accidente con
sangre que contiene carga viral VIH elevada.
• 3. Riesgo no alto: accidente en el que no se da exposición a gran volu-
men de sangre ni a sangre con carga viral VIH elevada.
Cuadro clínico
• Los sitios más frecuentes de las lesiones por material punzo cortante fueron
los dedos de mano izquierda, dedo índice, y dedo medio; causado por agujas
de sutura, hojas de bisturí y agujas con sangre.
• La mayoría de los pacientes que reciben profilaxis post-exposición al VIH pre-
sentan efectos adversos con severidad variable: mareo, malestar general, do-
lor muscular etcétera.
Diagnóstico
• Investigar siguientes factores: situación serológica del trabajador, tipo de
exposición, cantidad de virus presente en el inóculo, estado virológico de
la fuente y tiempo transcurrido desde la exposición.
• Realizar estudios basales: prueba de ELISA para VIH, para virus hepatitis B
y C, biometría hemática completa y pruebas de función hepática y renal.
Tratamiento
• Lavar inmediatamente con agua y jabón los sitios corporales expuestos,
nunca exprimir el sitio del accidente.
• Las mucosas expuestas deben ser inmediatamente irrigadas con agua.
• Evacuación inmediata del riesgo para definir profilaxis, primeras dos horas
del accidente; primera dosis de anti-retrovirales se debe administrar mien-
tras se esperan resultados.
• Tenofovir/Emtricitabina mas Raltegravir como esquema inicial.
INFECTOLOGÍA 79
• Estudios de laboratorio se deberán repetir a las 4 y 12 semanas después de
la exposición para búsqueda de antígeno-anticuerpo.
Tips
• El riesgo de contraer VIH en exposición laboral debe de ser estratificado de
acuerdo al tipo de exposición.
• En general, aunque sea una exposición de riesgo alto, la tasa de contagio
es muy baja.
Definición / Etiología
• La inmunodeficiencia producida por el VIH es el resultado de una desregu-
lación de la dinámica de las células T, sobre todo, la interrupción de la tran-
sición desde células TCD4+ activadas a células T de memoria en reposo y
la posible alteración de la timopoiesis.
• Debido a la inmunodeficiencia establecida, las infecciones oportunistas se
deben principalmente a defectos en el número y la funcionalidad de célu-
las TCD4+, como resultado directo o indirecto de la infección por el VIH.
Factores de riesgo
• Uso de drogas intravenosas.
• Promiscuidad.
• Transfusiones sanguíneas sin garantías de seguridad.
Cuadro clínico
• Fiebre, pérdida de peso, diarrea, tos, inflamación de ganglios linfáticos.
Diagnóstico
• ELISA para diagnóstico de VIH y Western-Blot para confirmación.
• Cuenta de Linfocitos TCD4+.
• Carga Viral RNA-VIH.
• Biometría hemática completa, química sanguínea, pruebas de función
hepática, transaminasas, nitrógeno uréico, creatinina, examen general de
orina y depuración de creatinina de 24 horas.
• Glucosa y perfil de lípidos que incluya cHDL,cLDL.
• Serología para hepatitis A, B y C.
• Serología para citomegalovirus y toxoplasma.
• VDRL y PPD.
Tratamiento
• Debe solicitarse una cuantificación de la carga viral antes del inicio de la
terapia y 2-4 semanas después del inicio o por cambio de tratamiento.
• Tratamiento base: combinación de inhibidores de la transcriptasa reversa
análogos de nucleósidos, inhibidores de la transcriptasa reversa no nu-
cleósidos, inhibidores de la proteasa.
• Esquema preferido: dos inhibidores de la transcriptasa reversa análogos
Tips
• Hay que monitorizar la carga viral y la cantidad de linfocitos CD4.
• El tratamiento debe consisitr en una combinación de medicamentos.
INFECTOLOGÍA 81
NEUMOLOGÍA
DIAGNÓSTICO Y TRATAMIENTO DE BRONQUITIS AGUDA EN EL
PACIENTE ADULTO, MAYOR DE 18 AÑOS DE EDAD, EN PRIMER Y
SEGUNDO NIVEL DE ATENCIÓN
Definición / Etiología
• Se denomina bronquitis aguda (BA), a la inflamación del árbol bronquial
que afecta tanto a adultos como a niños, sin enfermedades pulmonares
crónicas. Aproximadamente el 5% de los adultos padece un episodio du-
rante el año y más del 90% de estos buscan atención médica; etiología viral
en la mayoría de los casos, se presentan con mayor frecuencia en otoño
e invierno por agentes como rinovirus, coronavirus, adenovirus o en casos
más graves virus de influenza, parainflueanza y virus sincitial respiratorio.
Factores de riesgo
• Estación del año principalmente otoño e invierno, personas mayores de
60 años, habitar comunidades cerradas y huéspedes inmunosuprimidos.
Cuadro clínico
• Compromiso moderado de vías aéreas superiores, tos aguda me-
nos de 3 semanas que empeora a medida que progresa la enfer-
medad, esputo purulento (factor de mal pronóstico), fiebre me-
nos de 3 días, escaso compromiso del estado general, sibilancias y
roncus. El cuadro clínico suele ser más sintomático en infección por vi-
rus sincitial respiratorio e influenza y en pacientes mayores de 60 años.
83
Diagnóstico
• Siempre clínico, como objetivo principal descartar la presencia de neu-
monía. No se recomiendan estudios de esputo, ni el uso de radiografía de
tórax si no se sospecha de otra patología.
• Realizar radiografía de tórax en caso de sospecha de condensación: sibi-
lancias y estertores, percusión mate.
Tratamiento
• Se recomienda otorgar medidas sintomáticas como antipiréticas, desin-
flamatorios y analgésicos según sea necesario. Dar a conocer datos de
alarma: dificultad para respirar, taquipnea, disnea, fiebre mayor a 38°, sibi-
lancias, hemoptisis, cianosis, somnolencia, confusión y en su caso acudir
a revaloración con el fin de descartar infección agregada.
Tips
• El diagnóstico es clínico, pero hay que descartar patologías más graves
como neumonía.
Definición / Etiología
• El cor pulmonale (CP) se define como la hipertrofia del ventrículo dere-
cho, dilatación o ambas, debido a hipertensión pulmonar como resultado
de enfermedades que involucran al parénquima pulmonar, la circulación
pulmonar o al control ventilatorio
• La causa más frecuente de CP es la enfermedad pulmonar obstructiva
crónica (EPOC) secundaria a bronquitis crónica o enfisema.
Factores de riesgo
• Las enfermedades pulmonares intersticiales, los trastornos respiratorios
relacionados al sueño, severidad de la obesidad, hipoxemia diurna, hiper-
capnia, enfermedades obstructivas de la vía aérea, desaturación nocturna,
la hipertensión arterial pulmonar.
• Tabaquismo, tos crónica, producción de esputo, disnea de aparición re-
pentina, embolia pulmonar, flebitis y/o trombosis venosa, dolor pleurítico.
Cuadro clínico
• Síntomas en etapas tempranas relacionados con el ejercicio: disnea,
astenia, fatiga, síncope, angina, tos seca, náusea. Los síntomas atri-
buibles al CP en etapa tardía que con mayor frecuencia se presen-
tan son disnea de reposo, letargia, tos y hemoptisis, síncope y angina.
• Se recomienda hacer énfasis en la búsqueda de los siguientes signos que
se asocian a hipertensión pulmonar y disfunción ventricular derecha: plé-
tora yugular, incremento en la intensidad del componente pulmonar del
segundo ruido, soplo holosistólico tricuspídeo, hepatomegalia, edema de
miembros inferiores (el cual se asocia con menor supervivencia a 5 años).
Tratamiento
• Medidas generales: actividad física, rehabilitación física y pulmonar super-
visada, consejería reproductiva, vacunación, terapia psicológica; medidas
de terapia médica: oxígeno, anticoagulantes, diuréticos, vasodilatadores,
corrección de anemia, flebotomía; medidas en situaciones específicas:
uso de ventilación mecánica no invasiva en presencia de SAOS y síndrome
de hipoventilación-obesidad, considerar tromboendarterectomía en casos
seleccionados, cirugía de reducción de volumen pulmonar en EPOC gra-
ve, considerar trasplante pulmonar.
• Tratamiento diurético (furosemide o espironolactona) en pacientes con CP
y HAP con signos de retención hídrica y falla del ventrículo derecho, trata-
miento con anticoagulantes orales en pacientes con HAP idiopática.
Tips
• Afectación cardíaca secundaria a patología pulmonar.
• Pronóstico malo.
• Referir a pacientes con sospecha a neumólogo y cardiólogo.
Definición / Etiología
• La neumonía adquirida en la comunidad (NAC) es una enfermedad infec-
ciosa respiratoria aguda con una incidencia que oscila entre 3 y 8 casos
por 1000 habitantes por año. Esta incidencia aumenta con la edad y las
comorbilidades.
NEUMOLOGÍA 85
Factores de riesgo
• Se ha encontrado relación entre la presencia de EPOC, la utilización de
corticoides, la taquipnea al ingreso y el uso previo de antibióticos con la
NAC por bacilos gramnegativos. La asociación clásica entre infección por
virus influenza y neumonía por Staphylococcus aureus.
Cuadro clínico
• Los síntomas clínicos comunes de la NAC severa fueron tos (41%), fie-
bre (28%), disnea y dolor torácico pleural (5%), y producción de esputo
(30%). La producción de esputo purulento fue más común en la neu-
monía bacteriana. También se pueden presentar cambios en el estado
mental (32%) o síntomas gastrointestinales (náusea, vómito o diarrea).
Diagnóstico
• Diagnóstico clínico: se debe sospechar neumonía en todo paciente que
presente fiebre, taquicardia, disminución de sonidos respiratorios, sensa-
ción de falta de aire y crepitaciones a la auscultación.
• Se debe realizar una radiografía de tórax, si se requiere de certeza diagnós-
tica en el manejo de un paciente con sospecha de neumonía.
• Se recomienda utilizar la medición de procalcitonina y proteína C reactiva
para predecir desenlaces y como apoyo en la selección de tratamiento en
pacientes con NAC, obtener hemocultivo antes de iniciar antibioticotera-
pia y su uso principal debe ser en pacientes con NAC severa para descartar
otros agentes infecciosos como S. Aureus, P. Aeruginosa, y otros bacilos
Gram-negativos que puedan modificar la selección del antibiótico inicial.
La tinción de Gram del esputo es un examen diagnóstico confiable para el
diagnóstico etiológico temprano de NAC bacteriana.
• Escalas de severidad CURB-65 y CRB-65 para Neumonía Adquirida en la
Comunidad (NAC).
Tratamiento
• El tratamiento de la neumonía incluye el uso de antibióticos, reposo, flui-
dos, el manejo de complicaciones y cuidados profesionales en casa. El
oxígeno suplementario es indispensable para mejorar la saturación de oxí-
geno en los gases en sangre arterial.
• Se debe iniciar el tratamiento antibiótico lo más pronto posible una vez
que el diagnóstico de NAC se establezca. Se sugiere dar monoterapia en
pacientes con NAC leve. Iniciar con amoxicilina. En pacientes alérgicos a
penicilina se sugiere iniciar con macrólido o tetraciclina. No se debe iniciar
tratamiento con fluoroquinolonas en pacientes con NAC leve.
• Iniciar el tratamiento de pacientes con NAC moderada severa con: 1. Qui-
nolona en monoterapia (levofloxacino vía oral o intravenosa) o 2. Cefa-
losporina de tercera generación (cefotaxima o ceftriaxona) o amoxicilina/
clavulanato con un macrólido.
• Se recomienda iniciar tratamiento en pacientes admitidos a UCI con: 1.
Betalactámico IV asociado a un macrólido por la misma vía, y 2. Si no se
pueden administrar macrólidos se sugiere la combinación de betalactámi-
co más quinolona IV.
Prevención
• Se recomienda utilizar las vacunas de polisacáridos de pneumococo para
Tips
• Sospechar en pacientes con tos, fiebre y disnea, se confirma con una tele
de tórax.
• La escala CURB65 nos ayuda a defirnir si el paciente puede ser tratado en
casa u hospitalizado.
Factor clínico
Confusión 1 punto
Nitrógeno ureico en sangre >19 mg/ dl 1 punto
Frecuencia respiratoria ≥ 30 respiraciones por minuto 1 punto
Presión arterial sistólica <90 mm Hg ó presión arterial 1 punto
diastólica <60 mm Hg.
Edad ≥ 65 años. 1 punto
Puntaje total:
NEUMOLOGÍA 87
NEUROCIRUGÍA
DIAGNÓSTICO Y TRATAMIENTO DEL TRAUMATISMO
CRANEOENCEFÁLICO EN PACIENTES MENORES DE 18 AÑOS DE
EDAD
Definición / Etiología
• Lesión directa en cráneo, encéfalo o meninges por efecto mecánico.
• Clasificación: trauma leve, moderado o severo; trauma leve no amerita
manejo intrahospitalario.
Cuadro clínico
• Trauma moderado-severo: signos de alarma escala de Glasgow <15 en
menores de un año y de < 14 en el resto de pacientes, vómito en 24 horas,
cefalea intensa, crisis convulsiva, déficit neurológico, hemorragia o salida
de líquido acuoso por la nariz.
Diagnóstico
• El diagnóstico de severidad del trauma deberá realizarse mediante la uti-
lización de la escala de coma de Glasgow (ECG) y su versión modificada
para los que se encuentren en etapa preverbal.
89
• Gold standard: tomografía axial computarizada: realizar en casos donde se
presente hematoma en piel cabelluda, edema local o laceración, fontane-
las a tensión en niños, evento neurológico previo, coagulopatía, mecanis-
mo de trauma de alto riesgo, más de 2 episodios de vómito, convulsiones
postraumáticas, sospecha de maltrato y lesión cervical. Se deberá realizar
TAC cuando tenga una calificación global en el ECG < 14 y presente dato
de fractura palpable de cráneo o agitación, somnolencia o respuesta lenta
en comunicación verbal.
• Radiografía: cervical solo en pacientes politraumatizados.
Tratamiento
• Traumatismo leve: vigilancia domiciliaria por 24 horas.
• Traumatismo moderado-severo: manejo de acuerdo a los principios de
reanimación básica y avanzada; posteriormente referir a centro especia-
lizado.
Referencia
• Enviar a centro de atención especializada en neurotrauma a todo niño con
TCE leve con fractura de cráneo palpable o en radiografía, datos compati-
bles con fractura de base de cráneo, agitación, somnolencia, preguntas re-
petitivas, o una respuesta lenta verbal y todo paciente con TCE moderado.
Tips
• Enviar a todo paciente con sospecha de TCE a valoración en un centro
especializado.
• La TAC es el mejor estudio para valorar TCE, radiografías cervicales solo en
politraumatizados.
Definición / Etiología
• El término de demencia vascular comprende a todas aquellas demencias
secundarias a una o varias lesiones vasculares cerebrales, de cualquier
etiología.
• Este término incluye las siguientes entidades: demencia multi-infarto, de-
mencia por infarto estratégico, demencia vascular subcortical, demencia
post-ictus, demencia mixta, demencia por lesiones hemorrágicas.
Cuadro clínico
• Deterioro cognitivo de forma aguda o subaguda, después de un evento
neurológico agudo con una progresión escalonada.
• Pérdida de la función cognoscitiva, contenido del pensamiento (temas
comunes, ideas de referencia, delirios), cambios perceptuales (ilusiones,
alucinaciones), memoria inmediata/ corto plazo / largo plazo, entre otras
funciones mentales superiores.
Diagnóstico
• Realizar exámenes generales en los pacientes con sospecha de demencia.
Las pruebas de laboratorio que se deberán solicitar son: biometría hemáti-
ca, hormona estimulante de la tiroides (TSH), electrolitos, calcio y glucosa,
para descartar causas potencialmente reversibles de demencia y para el
tamizaje de comorbilidades.
• La evaluación cognoscitiva es fundamental para el diagnóstico y debe rea-
lizarse en todos los pacientes. Debe incluir las siguientes herramientas:
evaluación cognoscitiva global. Evaluación detallada de los principales do-
minios cognoscitivos afectados en daño vascular, incluyendo la memoria,
NEUROCIRUGÍA 91
funciones ejecutivas y funciones instrumentales.
• Uso de instrumentos como MoCA, NINDS, AIREN, VASCOG para el diag-
nóstico de demencia vascular de evaluación ejecutiva, la escala de isque-
mia de Hachinski con el fin de identificar entre enfermedad de Alzheimer
y demencia vascular.
• Se deberá realizar una tomografía axial computarizada (TAC) y/o resonan-
cia magnética (RM) para la detección de componentes vasculares en el
paciente con deterioro cognoscitivo o demencia.
Tratamiento
• Control de diabetes, hipertensión arterial y dislipidemia, así como la mo-
dificación en los estilos de vida (reducción de peso en caso de obesidad,
cese del hábito tabáquico, disminución en el consumo de alcohol) para
prevenir la aparición de demencia vascular.
• Se recomienda usar antiagregantes plaquetarios de acuerdo a indicación
médica previa (ej. Cardiopatía isquémica, EVC previo) para prevención se-
cundaria y disminuir riesgo de nuevo EVC.
• Los inhibidores de la acetilcolinesterasa pueden ser considerados para el
tratamiento de enfermedad de Alzheimer con un componente cerebro-
vascular asociado.
• El manejo de la depresión en demencia vascular se recomienda el uso de
inhibidores selectivos de la recaptura de serotonina, se ha demostrado su
efectividad y seguridad.
• Implementar estrategias de rehabilitación adaptadas a las limitaciones
mentales y funcionales. En pacientes con demencia vascular sin limitación
en transferencias y marcha, se recomienda la realización de actividad física
al menos 30 minutos 3 veces por semana.
Pronóstico
• Los pacientes con demencia vascular tienen mayor mortalidad que el res-
to de la población y aquéllos con enfermedad de Alzheimer de la misma
edad. Esto es debido a mayor riesgo de enfermedad coronaria y de evento
vascular cerebral recurrente.
Tips
• La evaluación cognoscitiva es fundamental para el diagnóstico y debe rea-
lizarse en todos los pacientes.
• Implementar estrategias de rehabilitación cognitiva y física.
• Manejo de comorbilidades es parte del tratamiento integral de la demen-
cia.
Definición / Etiología
• Accidente isquémico transitorio: se caracteriza por la presencia de signos
neurológicos focales que duran menos de 24 horas. Existe isquemia focal
cerebral, medular o de la retina sin evidencia de infarto agudo.
• Evento vascular cerebral isquémico: se define como la evidencia de un
Cuadro clínico
• Depende del territorio vascular afectado:
Territorio carotídeo: alteraciones motoras y sensitivas del hemicuerpo
contralateral al sitio de lesión, trastornos del lenguaje como disartria, afa-
sia motora o sensitiva, amaurosis unilateral o hemianopsia homónima.
Territorio vertebro basilar: hemiparesia, tratraperesia o síndromes alter-
nos, alteraciones sensitivas afectando uno o ambos lados del cuerpo,
ceguera bilateral, hemianopsia homónima, síndrome cerebeloso.
Diagnóstico
• El objetivo es completar la evaluación e iniciar el tratamiento fibrinolítico
dentro de los primeros 60 minutos de la llegada del paciente al departa-
mento de urgencias.
• Sospecha clínica secundaria a exploración neurológica completa y aplica-
ción de escalas neurológicas de ictus.
• Tomografía computarizada de elección en etapa aguda (12-24 hrs) para
descartar hemorragia.
• Resonancia magnética de cerebro: permite observar cambios isquémicos,
uso en caso de disponibilidad inmediata.
• Electrocardiograma: al inicio se recomienda en pacientes que se presen-
tan con un evento vascular cerebral isquémico agudo pero no debe retra-
sar el inicio de rt-PA intravenoso.
• Exámenes de laboratorio completos: valoración de troponinas se reco-
mienda en pacientes que se presentan con un evento vascular cerebral
isquémico agudo.
Tratamiento
• Evaluar los signos vitales y asegurar la permeabilidad de la vía aérea y la
estabilización hemodinámica y respiratoria.
• Hiperglicemia en pacientes con evento vascular cerebral hasta alcanzar un
rango de 140 a 180 mg/dl y monitorizar los niveles de glucosa para pre-
venir hipoglicemia. Se sugiere identificar y tratar las fuentes de hipertermia
mayores a 38°C, administrar oxígeno suplementario para mantener una
saturación de oxígeno mayor a 94%.
• Reperfusión: tratamiento seguro y eficaz, mejora la sobrevida y funciona-
lidad, trombólisis con alteplasa en primeras 3 horas de iniciados los sínto-
mas en pacientes que cumplen criterios de inclusión.
• La trombólisis endovenosa con rt-PA (0.9 mg/kg, dosis máxima de 90 mg)
es recomendada para los pacientes elegibles, quienes puedan ser tratados
dentro de las 3 a 4.5 horas del inicio de los síntomas. Los criterios de ele-
gibilidad son los mismos que para aquellos pacientes tratados dentro de
las primeras 3 horas con los siguientes criterios adicionales de exclusión:
NEUROCIRUGÍA 93
mayores de 80 años, tratamiento con anticoagulantes orales independien-
temente del valor de INR, puntuación NIHSS >25, evidencia por imagen de
daño isquémico que involucre más de un tercio del territorio de la arteria
cerebral media, historia de diabetes mellitus e infarto cerebral previo.
• Quirúrgico: en infartos cerebrales extensos, la craniectomía descompresi-
va temprana en las primeras 48 horas.
Pronóstico/ complicaciones
• Se sugiere vigilancia estrecha de los pacientes para detección oportuna
de posibles complicaciones, las cuales pueden ocurrir hasta en el 25% de
los pacientes y ser explicadas por progresión del infarto cerebral, edema
cerebral, transformación hemorrágica o recurrencia de la isquemia.
Tips
• La meta es proporcionar tratamiento fibrinolítico a los pacientes en menos
de 60 minutos de haber llegado al hospital, con una valoración completa.
Definición/etiología
• El control prenatal es un conjunto de acciones que involucran una serie
de visitas de parte de la embarazada a la institución de salud y la respec-
tiva consulta médica, con el objeto de vigilar la evolución del embarazo,
detectar tempranamente riesgos, prevenir complicaciones y preparar a la
paciente para el parto, la maternidad y la crianza.
Objetivos
• Los objetivos del control prenatal son: tamizaje; tratamiento y vigilancia
de la evolución de patologías como: hipertensión arterial, diabetes ges-
tacional, sífilis, infección de vías urinarias, infección por VIH, malnutrición,
carencia de vitaminas y micronutrientes; evaluación de factores de riesgo,
detección y manejo de complicaciones obstétricas: cicatrices uterinas,
presentación anormal, ruptura prematura de membranas, preeclampsia,
sangrado en el embarazo, etcétera. Prevención sistemática de enferme-
dades como: tetanos neonatal y materno, anemia, transmisión de VIH,
elaboración de un plan de acción previo al parto.
Promoción
• Toda mujer que se encuentra en edad reproductiva y/o persona embara-
zada y su pareja deben ser informados sobre los cuidados que debe seguir,
95
incluyendo información sobre: prácticas sexuales seguras, la eliminación
de alcohol y tabaco, el uso de métodos anticonceptivos y la prevención de
infecciones de transmisión sexual (ITS).
Control materno
• Es recomendable la suplementación con multivitamínicos en casos de
mujeres con peso bajo, fumadoras, uso de sustancias ilícitas, vegetarianas
y gestación múltiple. La ingesta de más de un suplemento vitamínico pre-
natal deben evitarse.
• Dosis altas de ácido fólico (5 mg/día) se sugiere administrar en casos de:
embarazo previo con defecto de tubo neural, miembros de la familia con
defecto de tubo neural, uso de fármacos con efecto anti-folato (anticon-
vulsivos), mutaciones genéticas en la vía metabólica del ácido fólico o sus
receptores, diabetes mellitus 1 o 2 mal controlada, pobre ingesta de ácido
fólico en la dieta, tabaquismo activo o pasivo, antecedente de anticoncep-
tivos orales, enfermedad celíaca o enfermedad de Crohn.
• La suplementación con hierro (30-60 mg) para la persona embarazada
puede ser recomendada como una estrategia preventiva para evitar la ane-
mia materna, iniciando idealmente a las 20 semanas de gestación.
• Evaluar el riesgo de diabetes gestacional en toda persona embarazada
desde la primera consulta prenatal. En embarazadas con riesgo bajo para
desarrollo de DMG, se recomienda realizar glucosa de ayuno a las 24 a 28
semanas de gestación, en caso de resultado ≥92mg/dl realizar búsqueda
de DMG en uno o dos pasos de acuerdo a criterio médico y la infraestruc-
tura de la unidad.
• Mantener cifras de presión arterial durante el primer trimestre: sistólica: 115
a 120 mmhg, diastólicas: 65 a 80 mmhg.
Control fetal
• La medición del fondo uterino constituye una primera herramienta de
detección en la persona embarazada con sospecha de alteración en el
crecimiento fetal. Es recomendable el registro de la altura uterina en el
expediente clínico para identificar a las mujeres quienes requieren una eva-
luación sonográfica del crecimiento fetal.
• Auscultación de la frecuencia cardíaca fetal en cada consulta prenatal.
• Se sugiere el monitoreo de los movimientos fetales comenzando entre la
semana 26 a 32 hasta el término en la persona con embarazo y factores
de riesgo perinatal adverso.
• En todas las embarazadas, entre las 18 y 22 SDG se debe efectuar un ul-
trasonido para determinar anomalías estructurales. La ecografía obstétrica
básica debe incluir la evaluación de las cuatro cámaras, tracto de salida
derecho e izquierdo y tres vasos.
Prevención
• Los signos y síntomas de alarma por los que una gestante, en caso de
presentarlos, debe acudir inmediatamente a un hospital o centro de salud
más cercano son los siguientes:
Fuerte dolor de cabeza.
Zumbido en el oído.
Visión borrosa con puntos de lucecitas .
OBSTETRICIA 97
Visita inicial: Visita entre:
28-34 semanas 24-28 semanas
Evaluación y procedimientos
• Revisión de frecuencia cardíaca fetal. • Revisión de frecuencia cardíaca fetal.
• Altura uterina. • Altura uterina.
• Movimiento fetales. • Presentación fetal.
• Evaluación de presión arterial, peso • Movimiento fetales.
materno e IMC. • Evaluación de presión arterial, peso
• Evaluación de salud fetal (USG obstétri- materno e IMC.
co para evaluación de crecimiento, PSS • Evaluación de salud fetal (USG, PSS de
de acuerdo a criterio médico y antece- acuerdo a criterio médico y antecedentes
dentes obstétricos). obstétricos).
Definición/etiología
• La hipertensión es el trastorno médico más común del embarazo y com-
plica 1 de cada 10 gestaciones. La principal preocupación acerca de la
presión arterial elevada son sus posibles efectos perjudiciales, tanto para la
madre como para el feto.
• Hipertensión gestacional: hipertensión que se presenta después de la se-
mana veinte de gestación, proteinuria negativa. En el postparto las cifras
tensionales normales. Cifras elevadas.
• Preeclampsia: hace referencia a la presencia de cifras tensionales mayores
o iguales a 140/90 mmhg, proteinuria mayor a 300 mg/24h, creatinina
sérica elevada (>30 mg/mmol).
• Preeclampsia con datos de severidad: cifras tensional mayor o igual a 160
x 110 mmHg y síntomas con compromiso de órgano blanco.
• Eclampsia: es una complicación de la pre-eclampsia severa, frecuente-
mente acompañada de síntomas neurológicos, que incluye: convulsiones
(eclampsia), hiperreflexia, cefalea, alteraciones visuales (fotopsia, escoto-
mas, ceguera cortical, vasoespasmo retinal).
• Hipertensión crónica: definida como la presencia de hipertensión arterial
mayor o igual a 140 x 90 mmHg antes del embarazo, antes de la semana
veinte de gestación o hasta la semana sexta postparto, asociada o no a
proteinuria.
OBSTETRICIA 99
• Hipertensión crónica más pre-eclampsia sobreagregada: hace referencia
al desarrollo de pre-eclampsia o eclampsia en una mujer con hipertensión
crónica preexistente.
Factores de riesgo
• Los factores de riesgo reconocidos, asociados a hipertensión gestacional
y preeclampsia incluyen: edad materna, paridad, raza, historia familiar de
preeclampsia, presión arterial materna (presión arterial media), embarazo
mediante técnicas de reproducción asistida, índice de masa corporal, co-
morbilidad: diabetes mellitus, hipertensión arterial crónica, insuficiencia
renal crónica, trastornos inmunológicos (LES, SAAF), trombofilias.
Cuadro clínico
• Cefalea, dolor en hipocondrio, epigastrio, náuseas, vómito, pérdida parcial
de la agudeza visual, fosfenos, hasta el 21% de pacientes con preeclampsia
leve y 6% con severa puede ser asintomática.
Diagnóstico
• Si se detecta hipertensión durante el embarazo en mujeres previamente
sanas o en aquellas con alto riesgo de preeclampsia >140/90 mmHg o
proteinuria por tira reactiva en orina > 1+ o cuantificación de proteínas en
orina de 24 horas > 300 mg/24 horas o índice de proteína: creatina >0.28).
Tratamiento
• Se recomienda el uso de AAS a dosis bajas (80- 150 mg) administración
nocturna, en pacientes de alto riesgo o con screening positivo para pree-
clampsia antes de la semana 16. El uso de AAS se debe suspender a la
semana 36 de gestación.
• Se recomienda la ingesta de dietas normosódicas en mujeres de riesgo
bajo y establecer un plan de ejercicio de forma individualizada.
• Por su seguridad para el uso durante el embarazo, se recomienda la metil-
dopa como medicamento de primera línea en el tratamiento de hiperten-
sión gestacional y uso de bloqueadores de canales de calcio como parte
del tratamiento de hipertensión gestacional.
• Se debe utilizar hidralazina como alternativa de segunda línea en el tra-
tamiento de la hipertensión gestacional, tomando en cuenta los posibles
efectos secundarios y la dosificación.
• Es recomendable sustituir los inhibidores de la enzima convertidora de
angiotensina (IECA) y los antagonistas de los receptores de angiotensina
2 (ARA 2), por alfametildopa, nifedipino, o hidralazina para control de la
presión arterial en la paciente con hipertensión arterial sistémica crónica y
embarazo.
• Se recomienda la inducción de trabajo de parto en mujeres con trastorno
hipertensivo controlado después de las 38 semanas considerando las con-
diciones obstétricas.
Pronóstico/referencia
• En la paciente con hipertensión crónica el objetivo es mantener la presión
arterial ≤ 140/90 mmHg. Cuando existen condiciones comórbidas el obje-
tivo debe ser mantener la presión arterial ≤130/80 mmHg.
Definición/etiología
• La ruptura uterina es la separación completa del miometrio con o sin ex-
trusión de partes fetales en la cavidad peritoneal materna y requiere una
cesárea de emergencia o laparotomía posparto.
Factores de riesgo
• Paciente multípara, cicatriz uterina previa, cesárea electiva de repetición,
más de una cesárea previa, parto vaginal posterior a una cesárea, periodo
intergenésico corto menor de 12 meses, alto riesgo de ruptura uterina en
inducción con prostaglandinas.
Cuadro clínico
• Registro cardiotocográfico anormal, dolor abdominal grave entre contrac-
ciones, dolor en el pecho o en hombro y repentina pérdida del aliento,
dolor repentino y agudo en cicatriz, sangrado transvaginal anormal o he-
maturia, cese de la actividad uterina eficiente, taquicardia materna, hipo-
tensión o choque, cambio en el contorno abdominal y la incapacidad para
captar la frecuencia cardíaca fetal, pérdida de la estación de presentación.
Triada clásica: dolor, sangrado transvaginal y anormalidades en la frecuen-
cia cardíaca fetal.
Diagnóstico
• Vigilancia continua durante la fase activa del trabajo de parto buscando da-
tos sugestivos de ruptura uterina; monitoreo continuo con electrocardio-
grama en mujer con factores de riesgo, búsqueda intencionada de signos
de alarma cada 4 horas.
• La medición por ultrasonido del espesor del miometrio está indicada solo
para pronóstico de riesgo de ruptura.
• El diagnóstico se confirma con una cesárea de emergencia o laparotomía
posparto.
Tratamiento
• Atención urgente así como laparotomía de urgencia para disminuir la mor-
bilidad materna y perinatal; reconstrucción quirúrgica uterina se realizará,
si es posible, dependiendo del sitio y extensión de la ruptura, las condicio-
nes clínicas de la paciente y el deseo de tener más hijos.
OBSTETRICIA 101
Pronóstico/ Complicaciones/ Referencia
• Informar que los riesgos de muerte perinatal y comorbilidades asociadas
a la ruptura uterina son bajos, pero también informar que el 60% de los
casos de encefalopatía hipóxico isquémica en neonatos fue secundario a
ruptura uterina.
Frecuencia
cardíaca:
<100 latidos
por minuto.
Tensión arte-
rial: normal
Compensada Sin datos de 10 - 15 700 - 1050
hipoperfusión
tisular.
Frecuencia
cardíaca:
100 - 120
No Choque latidos por
Compensada hemorrági- minuto
co leve Tensión arte- 15 - 30 1050 - 2100
rial: normal
Sin datos de
hipoperfusión
tisular.
Frecuencia
cardíaca:
120 - 140
latidos por
minuto.
Tensión arte-
rial: sistólica
<90mmHg,
Choque diastólica
hemorrá- <60mmHg. 30 - 40 2100 - 2800
gico Presencia de
moderado algún dato de
hipoperfusión
tisular (ver
No cuadro 2)
Compensada
Frecuencia
cardíaca:
>140 latidos
por minuto.
Tensión arte-
rial: sistólica
Choque <90mmHg,
> 40 > 2800
hemorrágico diastólica
severo <60mmHg.
Presencia de
algún dato de
severidad (ver
cuadro 3)
Cuadro 2. Clasificación de la gravedad de la hemorragia obstétrica.
- Se recomienda clasificar la hemorragia de acuerdo con el parámetro mas alterado.
OBSTETRICIA 103
Anteparto
Ruptura uterina.
Alteraciones en la implantación placentaria (placenta acreta).
Postparto
Atonía uterina.
Laceraciones durante el parto (cervical, vaginal).
Retención de placenta por implantación anormal.
Hematomas por episiotomía.
Cuadro 3. Causas de hemorragia obstétrica.
Tomado de: Chatrath C., Khetarpal, R., Kaur, H., Bala, A. & Magila, M. Anesthetic considerations and
management of obstetrics Hemorrhage. International Journal of Scientific Study. 2016; 4 (5):240-248.
Definición / Etiología
• La preeclampsia es un trastorno multisistémico de severidad variable espe-
cifico del embrazo caracterizado por reducción en la perfusión sistémica
por vaso espasmo y activación de los sistemas de coagulación. Se presen-
ta después de la semana 20 de gestación, durante el parto o 2 semanas
después de este.
Factores de riesgo
• Preeclampsia previa, anticuerpos anti fosfolípidos, presión arterial (TA)
diastólica de 90 mmHg, antecedente de enfermedad renal o proteinuria,
diabetes mellitus, hipertensión arterial, trombofilia, enfermedades de la
colágena, embarazo múltiple, enfermedad trofoblástica, historia familiar,
período intergenésico mayor de 10 años, TA en segundo trimestre 120/85
mmHg o mayor.
Cuadro clínico
• Hipertensión arterial >140/90 más proteinuria, acompañado comúnmente
de cefalea, acúfenos, fosfenos, edema, dolor abdominal o alteraciones en
los laboratorios, dolor en epigastrio, dolor en hipocondrio derecho, náu-
sea y vómito severo.
Tratamiento
• En pacientes con preeclampsia sin comorbilidad la terapia antihipertensiva
se recomienda para mantener presión diastólica entre 105 y 80 mm Hg, y
sistólica entre 155 a 130 mm Hg. En mujeres que presentan condiciones
comórbidas (por ejemplo: diabetes tipo 1 y 2, enfermedad renal, etcétera) la
terapia antihipertensiva se recomienda utilizar para mantener la presión sis-
tólica entre 139 a 130 mm Hg, y la presión diastólica entre 89 y 80 mm Hg.
• Cuando se considere el uso de terapia antihipertensiva oral, los fármacos
recomendados: metildopa, labetalol (si se encuentra disponible), hidrala-
zina, antagonistas del calcio (nifedipino), bloqueadores beta (metoprolol o
propranolol).
• Toda paciente con preeclampsia severa independientemente de la edad
debe considerarse el nacimento en breve.
• Hospitalizar a la paciente con embarazo y preeclampsia con datos de se-
veridad e iniciar el tratamiento antihipertensivo con nifedipina en cápsulas
de acción corta y/o hidralazina parenteral intravenosa (IV) y/o - labetalol
intravenoso (IV) en caso de contar con él.
• El sulfato de magnesio está recomendado como primera línea para pre-
vención de eclampsia en la paciente con preeclampsia con datos de se-
veridad.
• Corticocorticoesteroides antenatales son recomendables en todas las pa-
cientes que presentan preeclampsia y gestación menor a 36 semanas, de
24-34 semanas de gestación.
• El manejo conservador (resolución del embarazo) en la mujer con pree-
clampsia sin datos de severidad y con gestación entre las 24 a las 33.6 se-
manas puede ser considerado, siempre y cuando se cuente con servicios
de cuidados intensivos neonatales.
• Se podría considerar esperar para inducción de madurez pulmonar fetal,
un periodo de 24 a 48 hrs después de la última dosis de corticoesteroide.
• Embarazo mayor a 37 semanas se recomienda inmediata terminación del
embarazo, y de acuerdo a condiciones obstétricas valorar vía de resolu-
ción.
Complicaciones
• La eclampsia es precedida por una serie de signos y síntomas que puede
o no tener: hipertensión o proteinuria o edema o una combinación de
OBSTETRICIA 105
todos. Las convulsiones en eclampsia son generalmente auto limitadas en
1 a 2 minutos.
• El manejo inicial consiste en el soporte vital para prevenir daños, mante-
niendo la oxigenación con la protección de la vía aérea y aplicación de
oxígeno por mascarilla.
• Se recomienda el uso de sulfato de magnesio como parte del tratamiento
inicial de la paciente con eclampsia, continuar por 24 horas.
• Vigilar la frecuencia cardíaca fetal con cardiotocografía, así como la pre-
sencia de actividad uterina y sangrado trasvaginal en pacientes que cursa-
ron con eclampsia.
Pronóstico
• En la vigilancia del puerperio se recomienda lo siguiente: monitoreo de la
presión arterial, revaloración del uso de antihipertensivos, solicitar exáme-
nes de control (cuenta plaquetaria, transaminasas, creatinina), hidratación,
control de dolor, uso de carbecitocina u oxitocina en pacientes que cursa-
ron con hemorragia obstétrica.
• Si después de 12 semanas de seguimiento la paciente continúa hipertensa
o aún requiere de tratamiento antihipertensivo, debe ser catalogada como
hipertensa crónica y tratada como tal.
Definición / Etiología
• El parto pretérmino se caracteriza por la presencia de contracciones uteri-
nas (> 4 en 20 minutos o >8 en una hora) y cambios cervicales.
Factores de riesgo
• Factores de riesgo: factores no modificables: edad, raza, antecedente de
cono cervical, sangrado transvaginal en segundo trimestre, uso de técni-
cas de reproducción asistida. Factores modificables: índice de masa cor-
poral, tabaquismo, enfermedad periodontal.
• En las mujeres con embarazo asociado a sobrepeso y obesidad está reco-
mendado mantener el control de peso durante todo el control prenatal, así
como realizar actividad física.
Cuadro clínico
• Signos y síntomas tempranos asociados a amenaza y progresión a trabajo
de parto pretérmino: contracciones suaves e irregulares, dolor de espalda
baja, sensación de presión en la vagina, secreción vaginal de mucosidad,
que puede ser clara, rosada o ligeramente con sangre (tapón de mucoso).
Diagnóstico
• Longitud cervical de 20.1-34 semanas de gestación, fibronectina fetal 24-34
semanas sin infección vaginal.
• Se establece diagnóstico de amenaza de parto pretérmino con presencia
de contracciónes uterinas con una frecuencia de 2 en 10 minutos o 4 en 20
minutos y 8 en 60 minutos acompañadas de cualquiera de los siguientes:
dilatación cervical ≤3 centímetros, borramiento ≤50% ó cambios cervicales
Tratamiento
• El análisis de orina para detectar infecciones urinarias debe ser rutinario y
el tratamiento antibiótico debe proporcionarse durante un período de 4-7
días si es necesario en las mujeres con colonización bacteriana o infección
urinaria.
• Se recomienda la administración del sulfato de magnesio por 24 horas en
mujeres con parto pretérmino para reducir el riesgo de parálisis cerebral
(RR 0.68; IC: 95% 0.54–0.87).
• Uso de atosiban y nifedipino por sus beneficios para prolongar el embara-
zo y la buena tolerancia materna, tanto para embarazos únicos como múl-
tiples. Dentro de las ventajas del nifedipino se incluyen su administración
oral y su bajo costo.
• Mantener una vigilancia de la frecuencia cardíaca fetal en aquellas pacien-
te con síntomas de parto pretérmino en quienes se prescriba sulfato de
magnesio o betamiméticos y que se asocien a terapia antenatal con cor-
ticoesteroides.
• Se recomienda la administración del sulfato de magnesio por 24 horas en
mujeres con parto pretérmino para reducir el riesgo de parálisis cerebral.
Prevención
• En las pacientes con cérvix corto, es recomendable un seguimiento de la
longitud cervical cada 1-2 semanas, en especial en aquellas pacientes con
antecedente de parto pretérmino.
• Se recomienda el envío de primer a segundo nivel: pacientes con embara-
zo y antecedente de 3 pérdidas perinatales del segundo trimestre, pacien-
tes con embarazo menor a 34 semanas con antecedente de 1 o partos
pretérminos previos.
• Se recomienda el envío de segundo a tercer nivel: mujeres con embarazo
y anomalías mullerianas (útero unicorne, bicorne, septado y didelfo), mu-
jeres con embarazo único y cérvix corto, mujeres con embarazo gemelar
o múltiple y cérvix corto, mujeres con antecedente de parto pretérmino
previo.
Definición / Etiología
• Tumor maligno originado por la pérdida de control del crecimiento de las
células del endocérvix y exocérvix, que puede invadir estructuras adyacentes.
• Cáncer in situ confinado a superficie epitelial, cáncer invasor donde célu-
las malignas traspasan la membrana basal.
Factores de riesgo
• Virus del papiloma humano.
OBSTETRICIA 107
Cuadro clínico
• Sangrado anormal postcoito.
Diagnóstico
• Gold standard: Papanicolau.
• Historia clínica, exploración física completa, realización de citología cervical
y toma de biopsia de sitio representativo de la lesión.
• El examen físico de la paciente con cáncer cervicouterino, es recomendable
que incluya: tacto recto vaginal, valoración de: cérvix, fondos de saco, pare-
des vaginales, parametrios, tabiques rectovaginal y vésicovaginal así como
pared pélvica, valoración de regiones ganglionares: supraclaviculares, axila-
res e inguinales, exploración de abdomen.
• Realizar biopsia guiada por colposcopia para corroborar el diagnóstico: se
considera como cono cervical adecuado: el que incluya la lesión en su tota-
lidad y la zona de transformación, profundidad en el canal endocervical de
10 mm para que incluya las criptas, que incluya la totalidad del canal endo-
cervical, que no esté fragmentado.
• El reporte histopatológico de la biopsia: tamaño y características del tejido,
diagnóstico: tipo histológico, infiltración, grado histológico y la presencia de
infiltración linfovascular y perineural.
Tratamiento
• El tratamiento de la paciente con carcinoma in situ del cérvix, será conser-
vador o definitivo de acuerdo a los deseos de paridad. En pacientes con
paridad no satisfecha pueden ser tratadas con cono cervical, siempre y
cuando la paciente sea susceptible de seguimiento.
• Estadio Ia1: conización con márgenes libres (conservación de fertilidad) o
histerectomía extrafacial (paridad satisfecha).
• Estadio a2: histerectomía radical de Piver III con lifadenectomía pélvica y
muestreo ganglionar para aórtico.
• Estadio b1: traquelectomía radical con linfadenectomía pélvica y muestreo
para aórtico (tumor <2 cm y que se quiera conservar fertilidad); estadio B1
con >4 cm histerectomía Piver III radical linfadenectomía pélvica y mues-
treo linfático para aórtico.
• Ganglios pélvicos positivos o márgenes de cirugía positivos: dar radiotera-
pia pélvica con quimioterapia concomitante con base en platino y braqui-
terapia vaginal.
• Estadio b2, IIa > 4 cm, IIb, IIIa, IIIb, IVa: radioterapia pélvica+qumioterapia
con cisplatino.
OBSTETRICIA 109
OFTALMOLOGÍA
PREVENCIÓN DE TOXICIDAD OCULAR POR CLOROQUINA (CQ) E
HIDROXICLOROQUINA (HCQ)
Definición / Etiología
• La HCQ se utiliza para tratar enfermedades autoinmunes como LES y AR.
El uso prolongado del medicamento causa toxicidad en la retina y los ha-
llazgos fondoscópicos de la toxicidad retiniana pueden ser tempranos,
mostrando un fino puntilleo del epitelio pigmentario de la mácula hasta la
lesión característica bilateral en “ojo de buey”.
• Se presenta después de haber utilizado el medicamento por más de 5 años
o incluso después de haberlo suspendido, ya que esta se relaciona con la
dosis acumulada.
Factores de riesgo
• Uso del fármaco por más de 7 años o con una dosis acumulativa que ex-
cede 1000 gramos de HCQ ó 460 gramos de CQ. Existe una asociación
de toxicidad con dosis diarias de HCQ de 6.5 mg/kg de peso corporal
(equivalente a CQ 3.0 mg/kg). CQ e HCQ son eliminados por riñón e hí-
gado, cualquiera de los dos órganos puede disminuir la tasa efectiva de
eliminación de fármacos, lo que aumenta su nivel en sangre. Los pacien-
tes ancianos tienen mayor riesgo, dada la posibilidad de que los cambios
retinianos relacionados con la edad pueden aumentar la susceptibilidad al
daño tóxico. Los pacientes con enfermedad retiniana subyacente tienen
mayor riesgo de toxicidad dado que los signos tempranos pueden ser en-
mascarados y el tamíz se hace menos efectivo o imposible.
111
• La obesidad suele ser un factor de riesgo para toxicidad debido a que los
antimaláricos son lipofóbicos y el fármaco se acumula sólo en el tejido
magro.
Cuadro clínico
• Maculopatía bilateral de ojo de buey; un anillo de despigmentación del
epitelio pigmentado de la retina (EPR) que evita una isla foveal. Aunque la
agudeza visual puede ser excelente, escotomas paracentrales se asocian
con dificultades de lectura.
• Dificultad para leer, disminución y / o visión borrosa, pérdida de visión
central, fotopsias, metamorfosis. Etapa inicial: asintomática; etapa tardía:
escotoma central y paracentral; etapa final: pérdida de la visión central,
periférica y nocturna; signos: cuando se producen cambios visibles en la
retina, la pérdida de la visión es irreversible y puede progresar incluso des-
pués de suspender el tratamiento. La Maculopatía del ojo de buey indica
toxicidad avanzada: escaso pigmento en la fóvea y despigmentación del
EPR de la mácula Irreversible en esta etapa, extensa atrofia de la retina y el
epitelio pigmentario.
Diagnóstico
• Todos los pacientes que inicien tratamiento con HCQ o CQ a largo plazo
deben someterse a un examen oftalmológico de base dentro del primer
año de iniciarse el fármaco para identificar manifestaciones clínicas de to-
xicidad así como documentar cualquier complicación ocular y establecer
un registro de la apariencia del fondo y estado funcional.
• El electrorretinograma multifocal (mfERG) muestra disminución de la fun-
ción retiniana en los pacientes. Se puede realizar mfERG en pacientes con:
síntomas, sin cambios en los estudios de rutina, cambios iníciales en los
campos visuales, deterioro de la función renal, hepática, obesidad o dosis
alta de tratamiento, después de 5 años de tratamiento, en ausencia de los
factores de riesgo. El campímetro automatizado con programa 10-2 pue-
de mostrar cambios tempranos.
Tratamiento
• El único tratamiento existente es la suspensión del medicamento, es por
esto que los pacientes y los médicos deben conocer los riesgos de toxi-
cidad, la dosis máxima acumulada permitida y la importancia de realizar
exámenes de detección de alteraciones tempranas antes de que se esta-
blezca la pérdida visual central irreversible y pérdida de la vida productiva.
Definición / Etiología
• La leucemia aguda es la enfermedad neoplásica más frecuente en niños
a nivel mundial, se define como una transformación maligna de las célu-
las hematopoyéticas pluripotenciales o de sus progenitoras que presentan
una proliferación y crecimiento incontrolado de células inmaduras que
han perdido la capacidad de diferenciarse dando lugar a una clona malig-
na.
Factores de riesgo
• Exposición a rayos x infantil durante el embarazo, antecedentes laborales
de los padres con metales, textiles y farmacéuticas, exposición a hidrocar-
buros y pesticidas como el dióxido de carbono y el benceno.
• Enfermedades genéticas: niño con síndrome de Down, anemia de Fanco-
ni, síndrome de Bloom, ataxia telagiectasia, neurofibromatosis.
Cuadro clínico
• Palidez, síntomas de hipoxia: fatiga, irritabilidad, astenia, adinamia, cefalea,
somnolencia.
• Fiebre inexplicable, infecciones persistentes o recurrentes, petequias, equi-
mosis, epistaxis, gingivorragia, dolor óseo o articular, adenomegalias, he-
patomegalia, esplenomegalia.
113
Diagnóstico
• Clínico: exploración física completa, exploración testicular buscando indu-
ración o crecimiento, exploración neurológica completa.
• Exámenes de laboratorio: biometría hemática completa, química sanguí-
nea, electrolitos séricos, pruebas de función hepática con deshidrogenasa
láctica, reactantes de fase aguda.
• Punción lumbar búsqueda de blastos en el líquido cefalorraquídeo.
• TAC de cráneo en pacientes con cefalea intensa, persistente o deterio-
ro neurológico súbito. Realizar radiografías de tórax AP y lateral de tórax
en todos los pacientes con leucemia aguda al diagnóstico. Radiografía de
huesos largos en pacientes con dolor óseo persistente.
• Diagnóstico confirmatorio se realiza con el aspirado de médula ósea con >
20% de mieloblastos para leucemia mieloide aguda y > 30% de linfoblastos
para leucemia linfoblástica aguda.
• Clasificación adecuada de cada tipo de leucemia.
Tratamiento
• Síndrome de lisis tumoral: puede producir hiperuricemia, hiperkalemia
hiperfosfatemia e hipocalcemia. Alopurinol a dosis de 100/mg/m2/dosis
cada 8 horas.
• Mantener hiperhidratación con soluciones mixtas, mantener gasto urinario
mayor de 100 ml/m2/h.
• Compresión medular por tumor sólido: evitar daño neurológico con este-
roides a dosis altas y radioterapia.
• En caso de anemia: mantener aporte de oxígeno suplementario y monito-
rización clínica durante la transfusión sanguínea.
• Trombocitopenia: transfundir concentrados o aféresis plaquetaria en pa-
cientes con sangrado menor y mayor, cuenta plaquetaria menor de 100
000/mm3, hiperleucocitosis, anomalías de la coagulación.
• En pacientes con fiebre y neutropenia, casos de sepsis grave sin foco in-
feccioso iniciar vancomicia y aminoglucósidos.
M4 Eo + + + - - + + inv(16)
(q23)
M5 M5 + + + - - + + del(11,
q23)
M6 M6 + - + - + + +
115
DIAGNÓSTICO Y TRATAMIENTO DE LA DESNUTRICIÓN EN
MENORES DE CINCO AÑOS DE EDAD EN EL PRIMER NIVEL DE
ATENCIÓN
Definición / Etiología
• El término desnutrición se refiere al estado patológico resultante de la in-
gesta insuficiente de alimentos con valor nutritivo o malabsorción de los
mismo, lo que se traduce en una alimentación insuficiente para satisfacer
las necesidades de energía o de nutrimentos esenciales que conduce a
una alteración en la composición corporal del individuo con la diminución
de la función física y mental.
Factores de riesgo
• Peso y talla baja al nacer, retraso en el desarrollo psicomotor, ausencia de
lactancia materna, inicio tardío o inadecuado de alimentos complemen-
tarios, discapacidad en el menor, hermano menor de un año, muerte por
desnutrición de algún miembro de la familia, infecciones crónicas en la
familia.
Cuadro clínico
• Peso bajo para la edad, talla baja para la edad, peso bajo para la talla, ede-
ma bilateral, perímetro braquial <11.5 cm, dificultad para beber o tomar el
pecho, vómito, convulsión, letargo o inconciencia. Signos que aumentan
riesgo de muerte: hipotermia, fiebre, anemia, dificultad respiratoria, lesio-
nes de piel, diarrea, vómito, aumento de la frecuencia respiratoria.
Diagnóstico
• Indicadores para medir la desnutrición: peso para la talla, talla para la edad,
peso para la edad; la talla baja es el más apropiado para evaluar la desnu-
trición. Realizar somatometría en todo menor de 5 años haciendo uso de
las tablas de la OMS para edad y sexo.
• Solicitar biometría hemática, así como estudios a juicio clínico y disponibi-
lidad médica para descartar la presencia de anemia.
Tratamiento
• Prevención: consejería sobre lactancia, complementos con vitamina A,
zinc, promoción de la higiene, complemento prenatal, inmunizaciones.
• Alimentos fortificados a base de cereales y de lípidos con micronutrientes.
En casos de anemia y desnutrición moderada o grave (según las tablas de
la OMS) referir a segundo nivel de atención.
Definición / Etiología
• Disminución de la luz intestinal a nivel del píloro debido a hipertrofia e hi-
perplasia de la capa muscular de la porción antro-pilórica del estómago, la
cual se torna anormalmente engrosada y se manifiesta clínicamente como
obstrucción al vaciamiento gástrico.
Factores de riesgo
• Se presenta con más frecuencia en lactantes con las siguientes condicio-
nes: antecedente familiar, Es más frecuente en hombres que en mujeres
4-5:1, Ser primogénito.
• Ingestión oral de azitromicina y eritromicina coloca a los niños pequeños
en un mayor riesgo de desarrollar estenosis pilórica. Esta asociación es
fuerte si la exposición ocurre en las primeras 2 semanas de vida, pero per-
siste en un menor grado en niños entre 3 y 6 semanas de edad.
Cuadro clínico
• Se presenta generalmente en lactantes entre la segunda y octava semanas
de vida, se han documentado algunos casos hasta los 3 meses de vida.
• El signo principal en la EHP es el vómito que se caracteriza por ser: progre-
sivo, no biliar, postprandial, profuso, de retención, en “proyectil”. Al inicio
puede parecer regurgitación, raramente hemático, pérdida de peso, deshi-
dratación, letargia, disminución de movimientos intestinales, constipación,
ictericia leve.
• Los datos que el prematuro presenta con más frecuencia son: aumento
del residuo, vómitos no biliares no en proyectil, es poco frecuente la alca-
losis metabólica hipoclorémica.
Diagnóstico
• La palpación de la “oliva pilórica” se considera el signo patognomónico
de la Estenosis Hipertrófica de Píloro. Se encuentra al palpar el cuadrante
superior derecho o epigastrio del abdomen.
• Lactantes: el diagnóstico se realiza casi siempre por medio de ultrasonido
y/o serie esófago-gastro-duodenal
• Realizar biometría hemática, electrolitos séricos, TP y TTP, gasometría ar-
terial (puede mostrar desequilibrio ácido base con alcalosis metabólica),
BUN, Creatinina, Bilirrubina indirecta.
• Ante la sospecha de EHP en un lactante el estudio de imagen que se debe
realizar como primera elección es el ultrasonido abdominal.
• La serie esófago-gastro-duodenal: gastromegalia, retraso en el vaciamien-
to gástrico, sonda antiperistáltica que se detiene en el estómago, conduc-
to pilórico alargado de 2-3 cm y engrosado que da imagen de “doble o
triple riel”, signo del “hombro” por formación de acúmulos de bario en el
antro prepilórico, el cual se dilata.
• Se realizará endoscopia cuando la ecografía abdominal y la serie esófa-
go-gastro-duodenal no son concluyentes.
117
Tratamiento
• En pacientes sin desequilibrio hidroelectrolítico se indica: ayuno, solucio-
nes parenterales a requerimientos basales 120-150ml/kg/día, colocar al pa-
ciente en posición semi fowler, para ingresar a cirugía.
• Si hay deshidratación: corregir la pérdida de líquidos, electrolitos y des-
equilibrio ácido-base. Iniciar con bolo de cristaloide isotónico a 20 ml/kg.
• Una vez que el paciente se encuentra en condiciones óptimas, el proce-
dimiento quirúrgico deberá realizarse lo más pronto posible para evitar el
ayuno prolongado: como primera opción el abordaje laparoscópico.
• El tratamiento post-quirúrgico tiene como objetivo principal manejo del
dolor: infiltrar la herida quirúrgica con bupivacaína al 0.125% a dosis de
1ml/kg para disminuir el dolor postoperatorio y reinicio de la vía oral.
• Paracetamol como analgésico a dosis de 15 mg/kg/dosis cada 4 a 6 horas
(no exceder de 5 dosis al día).
Complicaciones
• Deshidratación, choque.
• Perforación de mucosa: se repara con cierre primario y se efectúa la piro-
miotomía en otro lugar de la circunferencia del píloro.
• Dificultad para el abordaje laparoscópico: realizar conversión a técnica
abierta.
• El paciente es egresado de la unidad hospitalaria una vez que se establece
la adecuada ingesta de fórmula láctea o seno materno.
Definición / Etiología
• La encefalopatía hipóxico-isquémica es la lesión producida al encéfalo por
uno o varios eventos de asfixia ocurridos en un recién nacido con edad
gestacional ≥35 semanas, la cual, no puede ser explicada por otra causa.
Factores de riesgo
• Alteración de los movimientos fetales, perfil biofísico fetal, frecuencia car-
díaca fetal anormal (FCF) documentada, trabajo de parto prolongado, su-
frimiento fetal agudo, enfermedad hipertensiva del embarazo, el uso de
oxitocina en cualquier momento del trabajo de parto.
• Postnatales, el pH del cuero cabelludo fetal, distocias, líquido amniótico
meconial, síndrome de aspiración de meconio, anemia, malformaciones
fetales, Apgar < 3 al nacimiento.
Cuadro clínico
• La asfixia puede ocurrir antes, durante y después del nacimiento, se mani-
fiesta principalmente con dificultad para iniciar o mantener la respiración,
alteraciones del estado de conciencia, convulsiones (en casos graves), de-
presión del tono muscular y disminución de reflejos.
Tratamiento
• Identificar en forma temprana del paciente de alto riesgo, establecer medi-
das de terapia básicas para facilitar una adecuada perfusión y nutrición ce-
rebral, iniciar lo más pronto las medidas de neuroprotección: la hipotermia
terapéutica se debe iniciar en las primeras 6 horas de vida, identificar a los
pacientes con criterios de inclusión y no inclusión (cuadro 2).
• El tratamiento inicial de las crisis convulsivas neonatales debe comenzar
con la administración de fenobarbital 20 – 40 mg/kg, o DFH 20 mg/kg
como dosis de carga, seguidos de dosis de sostén de 5 – 7 mg/kg de am-
bos fármacos.
119
Hipotermia terapéutica
Criterios de no inclusión:
Malformación congénitas mayores como hernia diagragmática
ventilados.
Anormalidades congénitas de crosomopatías.
Ecografía cerebral con lesión estructural.
Hemorragía activa.
Laboratorios:
- Glicemia sérica.
- Lactato, piruvato, troponina I, CPK MB y amonio a su ingreso y
a las 24 h.
- Electrólitos séricos a las 12, 24, 48 y 72 horas.
- Biometría hemática a su ingreso a las 12, 24, 48 y 72 horas.
- Hemocultivo a su ingreso.
- Tiempo de protombina y tiempo de tromboplastina parcial a su
ingreso y a las 24, 48 y 72 horas.
- Pruebas de función hepática a las 24 y 72 horas.
Métodos Corporal total
hipotermia Enfriamiento cefálico o sistémica
terapéutica
Monitorización Gabinete:
- Ultrasonido transfontanelar cada 24 horas durante las 72 h
de manejo con hipotermia.
- Control de EEG previo a inducción de hipotermia.
- Monitorización EEG continua y 4 horas posterior a fase de
recalentamiento.
121
Hipotermia terapéutica
Definición / Etiología
• Enfermedad metabólica que se caracteriza por defecto en la secreción de
insulina, de su acción o ambas.
Factores de riesgo
• Genéticos HLA DR3, HLA DR4; aproximadamente el 90 % de los individuos
que tienen DMT1 tienen 1 o 2 de estos haplitipos.
Cuadro clínico
• Presentación clásica: sed, poliuria, polidipsia, enuresis, pérdida de peso 2-6
semanas.
• Síntomas severos: niveles altos de glucosa, glucosuria, cetonuria, cetoaci-
dosis.
• Enuresis (en niño que sabe usar el baño), candidiasis vaginal, vómito, pér-
dida crónica de peso, irritabilidad, disminución del rendimiento escolar,
infecciones recurrentes de piel
Diagnóstico
• Para hacer el diagnostico de DM se sugiere siguientes criterios: concentra-
ción de glucosa plasmática en ayuno (después de 8 o más horas de ayuno)
mayor o igual 126 mg/dl.
Tratamiento
• Tratamiento multidisciplinario entre endocrinología, pediatría, nutriología,
oftalmología, etcétera.
• Todo paciente debe tener insulina como parte del tratamiento, rotar sitios
de aplicación de insulina para mantener el buen estado de la piel. Se reco-
mienda que del total de la insulina diaria administrada, se tome entre un
40 a 60% para insulina basal y el resto para insulina de acción ultrarrápida
o regular en tiempos prepandiales.
• Se recomienda la infusión continúa de insulina subcutánea en pacientes
tratados con esquema multidosis de insulina cuando el control de glucosa
es inadecuado, con predominio de hipoglucemias.
• Realizar monitoreo de glucosa capilar 4 y 6 veces al día, medición de glu-
cosa capilar en los posprandios y a media noche para prevenir hipergluce-
mias o hipoglucemias. Monitoreos continuo en pacientes de difícil control.
• Evaluar niveles HbA1c cada 3 a 4 meses y contrastarlos con el auto moni-
toreo de glucosa para realizar ajustes en el tratamiento: niveles recomen-
dados < 7.5% que indica niveles medios de glucosa capilar de 108 a 180
mg/dl.
• Las metas de glucemia para niños y adolescentes con DMT1 son: 90 a
130 mg/dl antes de los alimentos y 90 a 150 mg/dl a la hora de dormir y
durante la noche.
123
Glucosa en Cetonas en Dosis suple- Tiempos de Ingesta
sangre (mg/dl) sangre u mentaria de revaloración de líquidos
orina insulina (hasta de glucosas
cada 2 horas)*1 capilares
125
PREVENCIÓN, DIAGNÓSTICO Y TRATAMIENTO DE DIARREA AGUDA
EN PACIENTES DE 2 MESES A 5 AÑOS DE EDAD EN EL PRIMER Y
SEGUNDO NIVEL DE ATENCIÓN
Definición / Etiología
• La diarrea aguda se define como disminución en la consistencia de las
evacuaciones (líquidas o semilíquidas) o el incremento en la frecuencia de
las mismas (más de 3 en 24 horas), que puede acompañarse de fiebre vó-
mito, su duración es por lo general menor de 7 días y no mayor de 14 días.
• Los rotavirus son el agente causal más frecuente de diarrea grave en niños.
Factores de riesgo
• Consumo de agua y alimentos contaminados con heces, medidas de hi-
giene deficientes tanto personal como en la manipulación, preparación y
almacenamiento en los alimentos; así como la falta de saneamiento básico.
• Hospitalización: menores de 3 meses, peso bajo al nacer, enfermedad
concomitante, sin control prenatal.
Cuadro clínico
• Aumento de la frecuencia de evacuaciones, disminuye la consistencia de
las heces, presencia de moco, sangre, cólico, náuseas, vómito, habitual-
mente auto limitada de 5-7 días, vómito suele ceder a las 72 horas.
• Presentación como diarrea aguda sin deshidratación clínica, con deshidra-
tación sin choque, deshidratación y choque.
Diagnóstico
• Grado de deshidratación: retardo en llenado capilar, pérdida de turgencia
de piel, polipnea y taquicardia, uso de la escala clínica de deshidratación
para clasificar grado de deshidratación.
• Investigar agente causal en esto casos: enfermedad crónica más conco-
mitantes, prolongación de los síntomas por más de 7 días, anteceden-
te reciente de viaje al extranjero, protocolo de estudios epidemiológicos;
medir electrolitos séricos en pacientes hospitalizados con deshidratación
moderada y grave, así como medir el estado ácido-base.
Tratamiento
• Vacunación de todos los lactantes contra rotavirus a las edades recomen-
dadas en el esquema nacional de vacunación.
• Administrar solución Vida suero oral (VSO) para evitar la deshidratación,
VSO recomendado es el de aja osmolaridad como tratamiento de primera
línea.
• Uso de ondansetron en dosis única en los pacientes con vómito asociados
a diarrea aguda, deshidratación leve y fracaso en la terapia de hidratación
oral. (2mg para <15 kg, 4 mg para niños de 15-30 kg, 8 mg para > 30 kg.), el
tratamiento coadyuvante con racecadotrilo, uso de zinc en presentación
de acetato o sulfato en niños mayores de 6 meses, prebióticos y simbió-
ticos.
• Rehidratación intravenosa cuando se presente deshidratación grave, fraca-
so en la rehidratación, contraindicación oral o nasogástrica; realizarse con
Pronóstico
• Continuar con lactancia materna, fomentar ingesta de líquidos, ofrecer
solución vida suero oral como líquido suplementario. Fortalecer medidas
higiénicas.
• Remitir a segundo o tercer nivel en caso de: choque, bacteriemia o sepsis,
deshidratación grave, alteración neurológica, vómito persistente, sospe-
cha de patología quirúrgica, menores de 2 meses, gasto fecal elevado.
127
Aumento de la severidad de la deshidratación
Definición / Etiología
• La rubéola es una enfermedad infectocontagiosa de origen viral causada
por un togavirus del género Rubivirus, compuesto de un solo serotipo. Se
trasmite por vía respiratoria. Su principal característica es una leve erup-
ción maculopapular. Los niños generalmente desarrollan pocos o ningún
síntoma, pero los adultos pueden experimentar de 1-5 días pródromos
con: fiebre leve, dolor de cabeza, malestar general, coriza, conjuntivitis y
adenopatía retroauricular. El tiempo de incubación varía de 12 a 23 días,
el período infeccioso de la rubéola comprende desde 7 días previos a la
erupción, hasta 5 - 7 días después de la aparición de las lesiones en piel, el
momento más infeccioso es durante la erupción cutánea. El porcentaje de
infectados por el virus de la rubéola que cursan asintomáticos se encuen-
tra entre 20% y 50%.
Cuadro clínico
• La infección por rubéola puede empezar con uno o dos días de febrícula
(entre 37.2 y 37.8° C), Ganglios linfáticos inflamados y dolorosos al tacto,
generalmente en la parte posterior del cuello y detrás de las orejas, exan-
tema de color rosa o rojo claro, que se agrupan formando áreas de color
uniforme que empieza en la cara y se extiende por el resto del cuerpo en
sentido descendente. A medida que se va extendiendo por el tronco, la
erupción suele ir desapareciendo de la cara. La erupción puede ocasionar
prurito y puede durar hasta tres días. A medida que va remitiendo la erup-
ción, a veces la piel afectada se descama en láminas muy finas, en adultos
y adolescentes se puede presentar: dolor de cabeza, pérdida del apetito,
conjuntivitis leve, obstrucción y/o secreción nasal, poliartralgia o poliartritis
generalizada, que persisten entre 14 y 23 días.
Diagnóstico
• Clínico, para confirmar el diagnóstico de rubéola, aislamiento del virus de
la rubéola o demostración de anticuerpos específicos de la rubéola.
• Tras la infección por el virus de la rubéola los anticuerpos de tipo IgG e
IgM se pueden detectar por lo general entre el día 14 y 18, coincide con la
aparición del exantema.
• Para confirmar el diagnóstico de rubéola se usa la prueba de ELISA para la
detección de anticuerpos de tipo igm específicos del virus.
Tratamiento
• La vacuna de virus vivos atenuados contra la rubéola se aplica en personas
mayores de 1 año de edad. Para evitar el Síndrome de Rubéola Congénita,
todas las niñas deben ser vacunadas contra la rubéola antes de entrar a la
edad reproductiva.
• Para asegurar una adecuada protección con la vacuna se deben aplicar
dos dosis de vacuna triple viral para sarampión, paperas y rubéola en los
niños, ya que esta combinación ha probado mayor seroconversión y es
bien tolerada.
• El tratamiento de la infección aguda de rubéola es solo con medidas ge-
nerales, se debe mantener aislamiento para evitar contagio. La fiebre se
129
controlará con medios físicos, alimentación habitual, baño diario con agua
tibia, no tallar la piel.
Prevención
• Las personas infectadas con rubéola pueden transmitir el virus 7 días antes
y hasta 7 días después del inicio del exantema.
• Cuando se sospeche que una mujer embarazada tuvo contacto con infec-
ción por rubéola deberá referirse a la brevedad a una unidad donde se le
pueda realizar la prueba serológica para confirmar la sospecha.
Definición / Etiología
• Traumatismo de tórax, implica lesiones producidas en la pared torácica, en
órganos o estructuras intratorácicas, por fuerzas externas de aceleración,
desaceleración, compresión, impacto de baja y alta velocidad, penetración
de baja velocidad y electrocutamiento; pueden ser cerrados (contusos) y
penetrantes, alta frecuencia en accidentes automovilísticos y relacionados
al trabajo, así como caídas y golpes directos.
Cuadro clínico
• Neumotórax a tensión, donde se manifiestan datos clínicos como dificultad res-
piratoria, taquipnea, hipoxia, desviación de la tráquea al lado contralateral, venas
del cuello distendidas, cianosis tardía, disminución o ausencia de ruidos respira-
torios del lado afectado, timpanismo a la percusión torácica, deformidad toráci-
ca con abombamiento del lado afectado y estado de choque con hipotensión
sostenida.
• El hemotórax masivo se define de acuerdo a los siguientes criterios: más de
1500 ml de sangre, drenados inmediatamente a través del tubo de pleurosto-
mía, hemorragia torácica persistente con volumen de 150 a 200 ml/hora en
las siguientes 2 a 4 horas y cuando se requieren transfusiones de sangre para
mantener la estabilidad hemodinámica.
• Tórax inestable: respiración paradójica, inestabilidad hemodinámica, deformidad
131
de parrilla costal, dos o más costillas adyacentes fracturadas en dos o más luga-
res.
Diagnóstico
• Evaluación clínica y estudios de imagen: radiografía de tórax en proyec-
ciones posteroanterior o antero-posterior y la tomografía simple de tórax
• Realizar ultrasonido de tórax en pacientes con trauma de tórax, en los que
exista duda diagnóstica o inestabilidad hemodinámica.
• Angiotomografía en pacientes con trauma de tórax y sospecha de lesión
de aorta.
• FAST, electrocardiograma, gasometría, biometría hemática, tiempos de
coagulación, química sanguínea, verificar disponibilidad de hemoderiva-
dos.
Tratamiento
• Realizar toracocentesis en todos los pacientes con diagnóstico clínico de
neumotórax a tensión, en el segundo espacio intercostal línea media clavi-
cular del lado afectado con catéter de 6.5 cm de longitud.
• Tratamiento habitual de los pacientes con neumotórax simple secundario
a trauma es la pleurostomía.
• En pacientes con trauma de tórax con diagnóstico de hemotórax masivo
realizar toracotomía de manera inicial.
• Se recomienda administrar soluciones cristaloides de acuerdo a los reque-
rimientos en pacientes con contusión pulmonar.
• Considerar la utilización de ventilación mecánica no invasiva en pacientes
con trauma de tórax neurológicamente íntegros, cuando las condiciones
anatómicas del paciente lo permitan.
Definición / Etiología
• El apoyo nutricional especializado debe considerarse como parte esencial
del tratamiento en el paciente crítico, ya que no sólo se asocia a benefi-
cios nutricionales; también contribuye a mejorar la respuesta metabólica
a la lesión, previene el daño celular oxidativo y modula favorablemente la
respuesta inmune.
Factores de riesgo
• Menor masa magra presenta mayor riesgo de mortalidad, respuesta meta-
bólica al estrés, paciente en estado crítico internado en unidad de cuida-
dos intensivos, pacientes inconscientes, con dificultar motora por enfer-
medad o discapacidad.
Cuadro clínico
• El estado nutricional en los pacientes críticos presenta un rápido deterioro,
debido a la actividad catabólica severa, secundaria al incremento de la pro-
ducción de citosinas inflamatorias y hormonas proinflamatorias, inclusive
en pacientes que se encuentren en un adecuado estado nutricional previo
Diagnóstico
• Se deben utilizar para el tamizaje nutricional en el paciente crÍtico las es-
calas de NRS 2002 y NUTRIC score modificado, ya que estas estiman el
riesgo nutricional y el estado de severidad de la enfermedad.
• Los marcadores séricos como la albúmina, pre-albúmina, transferrina, pro-
teína unida al retinol, 3 metilhistidina (3MH) y proteína C reactiva (PCR), se
pueden utilizar como complemento de la evaluación del estado nutricio-
nal.
Tratamiento
• Se recomienda el inicio de apoyo nutricional especializado en las primeras
48 horas de ingreso a la unidad de terapia intensiva en el paciente que no
cubre los requerimientos nutricionales por vía oral.
• En el paciente en fase temprana aguda incremente los requerimientos
energéticos de 25-30 kcal/kg/día, aportar al inicio de la nutrición enteral
entre 33 y 66% del requerimiento energético.
• Iniciar nutrición enteral: en el paciente con alto riesgo de malnutrición que
sea incapaz de mantener el aporte oral. La nutrición enteral debe iniciar las
primeras 24-48 hr de la admisión al hospital, en infusión continua a 20 ml/
hr cada 4 a 6 hrs, evitando el riesgo de contaminación de las tomas, con
50% del requerimiento total incrementando al 100% en 48-72 hr. El tiempo
para incrementar al requerimiento energético total depende de la adecua-
da tolerancia y la alimentación, incrementando el aporte con precaución
cubriendo el 100% en 5-7 días.
Variables de puntuación
Variables Rango Puntos
URGENCIAS 133
Variables Rango Puntos
Recomendaciones
Recomendaciones
URGENCIAS 135
UROLOGÍA
DIAGNÓSTICO OPORTUNO DEL CÁNCER DE TESTÍCULO EN EL
PRIMER Y SEGUNDO NIVEL DE ATENCIÓN
Definición / Etiología
• Tumor de células germinales, tumor sólido más común en hombres entre
20 y 34 años, se clasifica como seminomatoso o no seminomatoso.
Factores de riesgo
• Más importante: criptorquidia; trastornos endocrinos, hipospadias, esper-
matogénesis disminuida e infertilidad, historia familiar de tumores testicu-
lares, antecedente de neoplasia intratesticular.
• Traumatismo de testículos, hernia inguinal, valores extremos de índice de
masa corporal, dieta rica en productos lácteos y estatus social alto.
Cuadro clínico
• Tumor escrotal no doloroso, dolor en el escroto, ginecomastia, pesantez
escrotal, pubertad temprana y esterilidad.
• Diseminación extragonadal: dolor de espalda y en flanco, palpación de
tumoración abdominal, adenopatías supraclaviculares palpables, disnea y
ataque al estado general.
137
Diagnóstico
• Incremento de la alfa-fetoproteína en tumores no seminomatosos, au-
mento de la gonadotrofina coriónica.
• Los tumores seminomatosos pueden llegar a presentar aumento de la go-
nadotrofina coriónica con el curso de la enfermedad.
• La deshidrogenasa láctica menos especifico, es proporcional al volumen
tumoral.
• La fosfatasa alcalina marcador opcional en seguimiento en pacientes con
seminoma puro.
• Ultrasonido de testículo para la evaluación estándar de referencia, para
lesiones intra y extratesticulres.
• Resonancia magnética: tumores testiculares sólidos, diferencia lesiones
intra y extratesticulares benignas o malignas, diferenciación de tumor se-
minoma o no seminomatoso.
• Diagnóstico definitivo mediante estudio histopatológico para estirpe y cé-
lulas tumorales.
Tratamiento
• Orquiectomía radical cuando existe alta probabilidad de cáncer testicular,
se debe realizar por vía inguinal a través del anillo inguinal interno.
• Referencia a tercer nivel para evaluación quirúrgica radical o de preserva-
ción de órgano.
Definición / Etiología
• Los síntomas del tracto urinario inferior representan uno de los problemas
más importantes en hombres adultos en la práctica clínica cotidiana. Están
fuertemente relacionados con la edad y son una queja común en hom-
bres mayores de 40 años; se acompañan de una reducción significativa y
progresiva en su calidad de vida. Se asocian con depresión y ansiedad, con
aumento de los costos en su tratamiento ya sea médico y hospitalario, y
en su vida personal y entorno.
Factores de riesgo
• Se debe informar a los pacientes que la edad, la obesidad, niveles altos de
colesterol y glucosa y el síndrome metabólico como tal constituyen facto-
res de riesgo para el desarrollo de hiperplasia prostática benigna.
Cuadro clínico
• Los síntomas del tracto urinario inferior (STUI) se dividen en síntomas de
almacenamiento, de vaciamiento y post miccionales. Estos síntomas se
han relacionado tradicionalmente con obstrucción de salida vesical, co-
múnmente ocasionada por crecimiento prostático benigno, resultado de
la condición histológica conocida como hiperplasia prostática benigna.
• Vaciamiento se caracteriza por: disminución del flujo de orina, orina in-
termitente, esfuerzo miccional, goteo terminal, flujo de orina dividido, y
tenesmo vesical. Síntomas postmiccionales (ej. goteo postmiccional y
Diagnóstico
• Se debe realizar el examen rectal digital a todo aquel paciente con STUI.
La utilización de una de estas dos escalas (AUA-SI e IPSS) se recomienda
para una evaluación objetiva de los síntomas al momento del diagnóstico.
Se recomienda hacer un examen general de orina con microscopía a todo
hombre con STUI. Se sugiere realizar la prueba con tira reactiva de orina en
los pacientes con STUI en que se sospeche HPB con el fin de descartar la
presencia de nitritos, leucocitos, proteínas y microhematuria.
• Se recomienda durante la evaluación inicial, realizar creatinina sérica en
todo paciente con STUI sólo si se sospecha daño renal. Se sugiere realizar
antígeno prostático únicamente en pacientes con STUI sugestivos de obs-
trucción de salida vesical secundaria a crecimiento prostático benigno o si
la próstata se palpa como anormal en el examen rectal digital.
Tratamiento
• Se sugiere que los pacientes con síntomas leves se mantengan en vigilan-
cia expectante. Se les debe ofrecer a los pacientes con STUI leve consejería
en relación al estilo de vida previo o al mismo tiempo que el tratamiento.
• Utilizar los bloqueadores alfa 1 en pacientes con STUI moderados a seve-
ros como primera línea de tratamiento. Dar tratamiento con inhibidores
de la 5 alfa reductasa a los hombres con STUI de moderados a severos y
un crecimiento prostático > 40 ml. Utilizar los antagonistas de los recep-
tores muscarínicos en hombres con STUI con síntomas predominantes de
almacenamiento vesical. Uso de los inhibidores de la 5 fosfodiesterasa en
hombres con STUI de moderado a severos (almacenamiento y vaciamien-
to) con o sin disfunción eréctil.
• Se recomienda utilizar la resección transuretral de próstata como el proce-
dimiento estándar para pacientes con volúmenes prostáticos de 30 a 80
ml que ameriten manejo quirúrgico. Se recomienda prostatectomía abier-
ta en ausencia de equipo endourológico y láser de holmio para el trata-
miento quirúrgico de hombres con próstatas mayores a 80ml. Se sugiere
utiizar agonistas beta 3 en hombres con STUI moderados a severos que
tienen predominio de síntomas de almacenamiento vesical.
Pronóstico
• La prostatectomía abierta tiene la ventaja de la eliminación completa del
adenoma prostático y no hay riesgo de hiponatremia dilucional en com-
paración con la RTUP, en próstatas mayores de 70 cc, sin embargo, se
observa mayor estancia hospitalaria y mayor volumen de sangrado.
Definición / Etiología
• Infección del tracto urinario: existencia de microorganismos patógenos
UROLOGÍA 139
en el tracto urinario con o sin presencia de síntomas. Son clasificadas de
diversas formas: alta o baja, aguda o crónica, no complicada o complica-
da, sintomática o asintomática, nueva o recurrente y comunitaria o noso-
comial. Infección urinaria asociada a sonda vesical: una infección urinaria
se considera asociada a sondas urinarias si ocurre durante el período de
cateterización o en las 72 horas tras la retirada de la sonda.
Factores de riesgo
• Modificables: duración de la sonda, desconexiones inadvertidas o erróneas
del sistema de drenaje cerrado, sistema de drenaje y fijación, inserción de
la sonda sin técnica estéril, cuidados inadecuados del sondaje urinario.
• No modificables: sexo femenino, edad superior a 50 años, diabetes me-
llitus e insuficiencia renal, creatinina plasmática >2mg/dl al momento del
cateterismo, inmunosupresión, ingreso por enfermedad no quirúrgica,
ingreso en servicio de urología u ortopedia, presencia de uropatogenos,
colonización de la bolsa recolectora.
Cuadro clínico
• Paciente presenta fiebre (> 38,0 ° C), sensibilidad suprapúbica, dolor o sen-
sibilidad ángulo costo vertebral, urgencia urinaria, aumento en la frecuen-
cia urinaria, disuria.
Diagnóstico
• Gold standard para infección urinaria es el cultivo urinario (>105CFUs/ml).
Paciente con sonda vesical permanente con estancia > 2 días a la fecha del
evento (día de la colocación del dispositivo = día 1) y al menos un síntoma
del cuadro clínico. Paciente con cultivo de orina con más de dos especies
de organismos identificados, y de los cuales al menos uno es una bacteria
de ≥ 105 UFC / ml.
Tratamiento
• Se recomienda que la paciente: se bañe diariamente, siempre con la sonda
vesical conectada a la bolsa colectora de orina, lavarse dos veces al día el
área genital y siempre que vaya al WC, desde el clítoris a la zona perianal,
rotar diariamente la sonda con el fin de evitar incrustaciones.
• Se recomienda el tratamiento antimicrobiano en pacientes con infección
sintomática, síntomas severos de infección urinaria, así como datos clínicos
de infección sin encontrar el sitio de localización de la infección. Se reco-
mienda tratamiento empírico parenteral en pacientes con datos severos de
infección (fiebre, naúsea, vómito o inestabilidad hemodinámica).
• Se recomienda el uso de nitrofurantoína, primera línea para la profilaxis an-
timicrobiana en el retiro de sonda vesical, ya que no está asociada con pro-
blemas de resistencia importante, dosis 50 a 100mg VO cada 6 hrs x 7 días.
• No se recomienda el tratamiento con trimetoprim / sulfametoxazol ni ci-
profloxacino debido a las altas tasas de resistencia de las bacterias contra
estos antibióticos. Utilización de ciprofloxacino en pacientes alérgicas a los
fármacos de primera línea y a aquellas pacientes con patógenos sensibles
a la fluoroquinolonas: dosis ciprofloxacino, 500mg VO cada 12 hrs x 7 días.
• Se recomienda trimetroprim con sulfametoxazol en tratamiento para pa-
cientes con pielonefritis aguda con cultivos susceptibles al mismo.
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