Está en la página 1de 11

~ E D 1 e 1 O


N E S A K A L
1

A R T E y E S T É T 1 C A
Maqueta: RAG

Motivo ponada: Sanclro Botticelli, La virgen escribiefldOel Magt~íjicat

1.' edición, 1987

2.' edición, 1996

© 1976 by Sansoni Editore Nuova S.p.A., Firenza

Par• todos los países de habla híspa na

© Ediciones Akal, S. A., 1996

Los Bcrro<.~des del ) arama

Apdo. 400 -Torrejón de Ardoz

Madrid - España

Telfs.: 656 56 1l • 656 51 57

Fax: 656 49 11

ISBN: 84-7600-248-3 (Obra completa)

ISBN: 84-7600-243-2 (Tomo 1)

Depósito legal: M. 10.275-1996

Impreso e n Litoprint, S. A.

Fuenlabrada (Madrid)

He5ervado5 todos los derechos. De acuerdo a lo clis ~


puesto en e l art. 534-bis, a), del Código l'enal, podrán
ser castisrJdos con penas de multa y privaci(m de liher·
t:,JU quienes reproduzcan o phtgicn 1 en todo o e n par-
te, una obra litemria, ¡lrtística o científica fijada en cual-
quier tipo de soporte sin la preceptiva autorizació n.

CLlpynghted matenal
as ·" r udn pnr 1 solu 1 , 11 amele tu la t
\'C 111 l
'1.wlo Ue e11 ( 11 1' •r o se d.t u cm n '¡,a perod•m t r 1d
,
• , 1 r1 2r '0 1 qu no
l r '·' de clct;•r entre d( s c.:orr icnt c s1 el rt d 1
1
1
1
e> ten r n v
lor \ IIUV ·r s.tl no pued e h her rn s tstcrn,1sl Tod l obrad la
ro se de~ ,trr oll.tr 1 fuer . dt.: lloren ia y de u crcc cn t n
1 10
nc.·s polcrlll • : en A re u o, en Hor go n S polcro, en R mm•.
en .l·cr_r "·1• .,~ .Ro m V, (lt hrc.: todo cf' Urbino. Su búsqucd
unt t.HJ.\ • dqu utr hon ton tcs cad , m' ampl 1o ha t n-
luir 1., r.u.l~cal .lt;r n:ltr a ~lam cnc • y cumplir vcrd;d r rn;n-
tc un:l fun c1Ón umt. n h. c1enclo de eje entre la cultur de la lt.a·
li.1 CL'ntral (e inclu o ~lcrid~o~al, con Anwnello de Me ina) )
Venceta, c?n <~•ovanna tic~] m! ..r:.n l. nueva cultura que arrad a
1
dc-,d c U rbu,o y que, . pnncJp1os del Ci nquccento, dominar'
en Rom:t con Bramante y R f~cl , Horcncia perm nece e si ai -
lilda cuando menos ha~ta M1gucl Angel (pero, en cieno enti-
do, tambicn c.on Miguel Angel y dec;pué de él): erá el bas· ión
de la mvestiga ción artís uca específicamente formal orienuble
por tend encias o por hncas de investigación, pero cada vez más
lejana del ideal universalista de identificación del arte con la to-
tal idad del saber, propuesLo por Picro.
Fig. 245 La primeras obras cíe nas de Picro son el poliptzco de la t\olz-
Fig. 246 sencordta, de Borgo San Sepolcro (1445-1462) y el Bautismo de
Cristo. El primero e una alineación de fi uras ~u sladas en pie,
obr e fondo de oro; las rela ciones de tamaño entre los com par-
timientos son modulares; cada figura ocupa y mide exactamen-
te la cubicac ión espacial comprendida entre. plano frontal y pla-
no de fond o; este prisma de espacio se llena con la luz que
toca a las figuras y se refleja desde el fondo dorado: la ilumi-
nac ión, por tanto, construye el \'Olumen. La ausencia de cual-
quier elemento arquitectónico o pa1sajísrico prueba que, para
Piero la figura humana no es solo la mediación enrre espacio
teórico y espac10 empírico, smo la re' elación de la identidad ab-
soluta entre espacio geométrico y luz.
Fig. 245 En el poltptico de la ,\lzsericordz la te is viene enunciada en

términos casi abstractamente teóri<..o el ondl.. de oro como
identidad absoluta del espacio-luz. las h~uras reducidas a for-
LA SíNTESIS ENTRE VERDAD INT ELECTUAL Y VERD \0 Fig. 246 mas casi geométricas. En el Bautisrno la tesis ~ ,·erifica s~b~e
DOGMÁTICA la variedad de las apariencias natura es. el t pac10 t:S un PaiSaJe
abierto hasta el honz.onre, lleno de }u¿ t.lara y tran parente!
Cua ndo PIERO DELLA F RAN CESCA, un tmb ro naiU· como en la obras <.le Fra Angelico . Pero no hay propa~ac1Jn
ral de Borgo San Sepolcro (h. 1420 - 1492 ) llega a folor ncia y tra· de la .luz: el cielo st refle ja en el agua en primer plano. con la
baja en Sant'Egidio con Domcnico Ven eziano (143 , que qut· luz que desciende Ot'~de arriba st corre o )nde la l~z a 'ende?.-
zás había sido su maestro en la Umb ría, se da CUL I inmedta· te que se refleJa de de abaj o. Al no hab~r transm1S10n smo h-
tamente de que, tras el contras te de tend encias dt. pp1 y Pao· ja~ió n de la luz, no hay reco rrido en per p~c iva de las lmea
lo Uccello, está todavía la antítesis de los dos gr1 y de los plan os de color, ir <" un progrt •' o aleJamtento de
oolos dt
la cultura figurativa florentina: Masaccio y h a man chas oscuras de bosque obrt campo claros.
lico. El Los tre angelo no part i~•pan tn el rito lle' ando. como t
compromiso naturalista de Lippi no le interesa ; ca ~lt:nte, se

230 231
habitual, la ve tidura de Cristo: son pu t.l\ ptC \t.'
. . d 1
ifica ione mauca e e pa to. . ero no 10 0 '-unct
p ,
On 1tan •'-lS tper
bolo ino que lo re'"elan en 1.t p1cmtud de b fot nl .l t Sen el• 5lll¡.•
la analogía entre el tronco J e1ar bo 1' 1o \..Uerpo d
dl'nUdo~:
e"tde .
bo tienden igualmente a la forma 1dc.1l del cilt
. n ro d arht m.
umna• y el cuerpo de1persona te que YJ a er b
le de J.Ut t?· de la ',.0.
nuda en egund o plano e ·ra cu na do para
vertic~e repetidas \'. paralela de la fi gura ,. elrtarbac1o1n4r 1~st
1a o' qu

recodo del no y. las blanda cu n·a_s del ho nzontc. 1\tn cr. ti


rarquía• entre ftgura humana . arb ole , paisaJe, ha gun• • 1 ~.
°
mínimo detalle : todo lo que e ,.e es, , no h"\ . ta los 01),
tinto modos de er. Pue to que tod o e· re,·ela"'d0 rados o d15 • '.1

puede haber anhelo , ansia. ten ión religio a: la r ' c~eno. no


. . ~ d 1. e' e 1acto
verdad es conoc1m1ento a traYe e mte lecto, no n d~ 1,
tuación moral. Se resuelve así la ,·ie¡a di puta nnb a Para la 2c.
. e . ') 0
re e 1an
t' Ql!~
muestra .cosas no vt tas • { enmm o qu e e 0 u
· · l pa solo d
que se ve• (Albern ): e1 mte ecto no po ee nada q e lo
puedan ver, y los ojos no ,•en nada que el inreleU< os 10s no
1 0
. - . d
comprender. T remta anos mas tar e se abn ra e Fl no puel!,
cto .J

'd f "' n oren


dil em a entre 1 ea y enomeno, ent re Bo ttic elh " Le d '~ t
para Piero la identidad entre idea )' ten óm eno onar bo. Pe~~.
. ., d e a so},
Y trata de una afnmac1 on e capital imp ar lAn
se . ~ cla. s.1 Utt
fenómeno se ve todo, ya no tiene sennd o and ar . · doenun2el
u 'll.Jn
• 1

233
ella Franccsca, TrilsJ.,Jo narr acio.n.. n las 1onn s bajas se represcnt n d b 11 . 1
. . . . on tante culta b,tjo IJ n1udJblcs apan,, . dM ,Uro, Jrl nclo dt . b os ta s
e truc tu..
a e con
.
·ntu ve
.
tnnl c
d ·
tlt,\l11 ent~ com o
"neta d ~,.ncisco dr A rezzo co~pos aca o n a ac¡c de g:upos apretado s da al espectador le cn-
0 ~ 1{
real . a a ..d ;1 ¡· 1 re a1•dad x /,90 m . sac•on de que estos sosucnen las escenas que están por encima.
oluta, e tructural y fo_r~a . .~ \~J Lt ' pue , po tu lar u ~h. Francesca, Ltz
. b oluto geometnco. una\ er Jl, ~n el que e En la s_egu nda 1on a aparece la visita de la Rema de Saba l rey
pacto a l . n e1. ¡,~o. Jrl cado de . St~lo~on y, en la pared f roncal, el hallazgo de~ Cruz ; la con -
. . part i . .
'
ulare : e e ·pac
d
to e a enteramente e l rt.. encua d fr.,acisco dr Arn zo
1a a . p· 'b· n a e S6 X /,9J m. - tru ceto n es menos densa y las figuras parecen linea: e lo lar-
a e form a del e pa 10. 1ero e en tra un d Os~ ~ella Francesca, El s" rno
y ada O . l .D . . .
t
rata 0 go de b s paredes. Finfllmcntc, en la muerte de Ab-,aham y en
bre la perspectiva y lo u tu ara e p~ ospecti'Vz pmgendl Para so. Jrl ciclo de frescos
la rest1luczon de L1 Cruz ct jerus llén, la dos ecScenas en los lu-
trar como efecrivan1ente de m u e ·rr J, que la per pe .. de. Jr Arrzzo
ffi.v., ' . . . l . . Ctt\ a n J,29 x 1,90 m. neto de la zona más elevada, el ciclo domina y las 1 ur on
a premt a de la ptntura tno a ptnt ura n11 ·ma. " d e ralas de modo que dan ~ la vista una ilu ión de li ereza. Esta
e un . . . . l . · ' e lrro. ....
lla una ompleJa ca Ul u.c~ _porq.ue ) J a ~~r pe tn·a no e la lt pro re ion demuestra de modo evidcrue la intención de Pi ro
el principio de la vt ton, 1no b ,.• 10n en u tot l'd ·
o F R . . a 1 ad
Tra haber trabajado en errara yf en l
tmtnt Lfresco co \
. 1l Jt.
l
gismllndo !tlalattsta, en el tem p o . l.l J~e tt.ln o, 14~ 1), afronu
deo'd'da 1
men te el prob lem l .de l.1 ht t rtJ:
a . ¿"'e .pued e r~duc tr
.
la e\;den ia y a la fijeza de t~non1en o 1 n1~rc tgu.1l ,1 -1 mt tr 4

( n téunino de valor, e entten~e ) b .. u .s~ ~ y el de.' en ir C(


la hi toria? E una pregu~~.l que nene ta~lbt n tnlphc.lctonu rt·
ligio :¿e po i~le c~n~thar la verda~ hp del J_o 'na ·on. du.
enir de la hi tona rehgto _a? De 145_ ._l 1459 Ptc. ~ o tr4lbaJa, ·o~
intervalo , en el 'ido de tre ·e .: con b lt-' en el' u .f Cruz ~
el coro de la igle ia de an Franci , ~ t:n . rc 21 0. l ) tre mu·
ro e dividen en recuadro de t.1n1.tn s dtvcr ·o : •~:.n b p.trt'·
d laterale , la divi ión entr gran dt: 70n J' t. a orde ·on 14

,..
,,.1• - ' 1

2H - 5

}Jt 156
della Francesca, dtrrota de dar a su s figuraciones una unción arquitectónica•
Jera/le del aclo de (L
Frtmasco de Arezzo Venrur i).
3,22 X 7,64 m. Pi ero rom a el argumento de la Leyenda A urea de Jacopo da
ddla Fr.ancesca, derrota Vo ragine, pero no se atiene al orden del relato ni al rono de
tku llt del aclo de fá-
Frana sco de A rezzo bula edificant e; no indi\'idualtza m caractenza a los persona
Jes;
J~ X 7,47 m excluye cualq uier efecto drarnatico o de mO'>lffiiento, cualqu1
della Fr.ancesca, ocro er
acentuactó n del pathos. 1 o el mma, sin embargo, las figurac
11. 2H . to-
nes que parece que debenan tmphcar drama o movimiento
ru
los acomectmJentos puramente eptsodtcos: para él no ha' un
os
remas dram atices \ epis die otros filo ófico o doomáu-
cos. Todo lo que e consutu\ e como fenomeno asume \·alor
de
revelacion to tal, } no es necesano que e tra te del persona
Je
Fig . 251 prin cipal o dd hech ulnunante de la hi tona. En la trasl ao
n
del sagrado puente, p r emplo, lo que nos da el fenomeno, '
no como un .1conte m 1 mo cualquiera tno como la . . úbtta
re-
velacion de l slb uft lo real, s 1CJC que arra\ iesa en dta-
gonal rod a la ~,.,_~rup eQue e lo que re\ ela? La an logta
entre las , e-ra. . J 1 ra ' la e"tna de las nube del cielo
} , por tanto, L um u trucrural de lo ,:¡ tble; la imerna
In diagona l en pnm on la del declt\': ~el monte . ' p .
tanto. la ho ...~ogene tre el eo;p.lclo proxtmo y t-.pJ.cto
lejano; el csluerzo d ombre' que lo le\ 'an Pn . '. po r tan-
ro, la mt ,.u tla de la g Hdad. d equilibrio de 1-.. tll r .1 •
lJI

El
nl ltt.\'O de la mc,amca vuclvt.• .1 \Ut gir en la C\1..cn"
Fig. 252 t
. del hebreo. un mero cptsooto en re 1ac1 on con,, con 1.l tor.
. j .

tur,z . , . . b ll ~ 1 co :
de.. la hi ·to na: per o el cnormt.: t:J a etc ocupa ca~ 1 n Unto
, l tod o
pacio entre lo muros en angu o recto, y en u ltnea~ ob~1es.
e in ertan lo ge to de los do grupo , de los hombres ltuas
ran de la oga con lo brazo le\'ant ado y del hebp qtJc ¡1•
por lo cabello por el e bIrro . A , b' co afer d
. 1, un o ¡ero to e
0 ra o
de cualquier cualidad fo rm al, e hace arq unectura r' Pn'ado
aci o. En el sue -
no de C ons . ) d , Orma
Fig. 25.3 P tan tmo e ray o e luz que d ·es.
- 1 . d , .
con el ángel bana ~ uen a comca; es un o de 1os primeroesct e
s nae
romos• , de .los pnmeros efectos de •luz parttc ub r- en la nac.
toria de la pmtura del Quattrocento. Per o con este fe . h1s.
Piero demuestra que la forma geornetnca untversal nnornene,, . .
con el cambio de la 1uz, no es menos unt versal por el h cam
. , o b1
1 . 1 h ~
ec o d
Figs. 254, 255 que. sea rev~lada, polrl 'udna luz '~parucu arf:>l. Edn las dos batalla:
el c1elo, vac1o mas a a e as compactas 1 as e los cornb .
. · d . atJen
tes, no es un fon do.: es de.fmt o como es pacto por las astas d~
las lanzas, por las p1ezas vtvamente co 1oreadas de los est d
, . .
tes, por las enormes y geometncas ctm eras y pen achos an ar.
de lo~
yelmos.
El espacio no es superficie que cierre o profundidad ah'
ta: tampoco 1a anu'tes1•s entre pro fun d1·d ad y superficie se ter·
· o com
senta como ta1, sm o propo rc1· on ' de 1 d
os os ' 1lores opupre.. 258 Jj
tos. No hay contraposición de luz y sombra, porque la Ju/)
espacio, el espacio es homogéneo y no puede tt _r imerru ~ clella Franccsca, rerraro lo rea l? Los ept~odio de Fra An_ehco re' elan la con tan te pre-
cienes: por lo demás, ni siquiera las formas sólida de las cos~( Sforza (h. 1465); tabla, sencia y asistt: ncia de la dj, m d d en las \ Jcisnude humanas.
detienen la luz, sino que son atravesada s y llen a p.or ella. lo Florenoa, Uffizz que son s1empre pequeños e ectos de 1 gran causa· lo ept o-
della Francesca, retrato
que podría parecer una sombra atenuada es sól f una inclina· tk Momefeltro (h. dio de Piero, en cambio, n:velan Siempre la totalidad de lo re •
ción distinta de ,los rayos donde gi r~n Jo.s planos , como la qu~ 47 X JJ cm. Florencw, y ni siq uiera son los efe tos de una e usa porque el tiempo
vemos en los margenes de un globo dummado dt el inrenor un o, como el t pacio. } no puede haber su esion.
y nos da el sentido de su esfericidad. La misma e.1 1rlad y den· Pa rece que una \1 ion tan loba! deb na exclUi r cua)qu er
sidad de espacio se encuentra dentro y fuera de lo Jerpas. d~ interes por lo parti ular er rre u tamente lo ontran
tal modo que no se tiene nunca la sensación de { una figur~ i Picro, con u cien t 4;; • desarrolla t da la po J-
o un objeto, esté en el espacio sea algo sól id o en acío o en bilidades propnr ion p 1ar e ca 1 thmnadament
la más rarificada sustancia de la atmósfera . Por e los volú · lo exrremos de la d ' ore : hac1a lo in mnament
menes se expresan por contornos que delimi tan las as de co· grande (lo ht ,o ' A o h c1 lo mfinu m nte p -
lor, y éstas se enmarcan unas en otras, como en . tarace~ queño. El pr 1 ner P1ero con 1arte flamen o u e
Los colores son puros, elevados, brillantes, se un m mngu· lugar en I errara, d ..,9 rrabaJ ha Ro ier 'an aer
na concesión a los difuminado s tan caros a Gen t1 t lo de· den. La primera n ucntro con el pmtor flam
licados arpegios predilectos de Fra Angelice. Pen b1en en- Fig. H7 po dn .m enahr e er ana ) p_aruculanzada d ta-
tre los colores es válida la ley de la proporción¡ r. dos un- piz v de lo [ejid co de Rtmtm 14 1
tas entre las que no se pueda encontrar una ce rne' oporctO· ' o ob tJ He, flamenco» !)C plantea e m rnn
nal •, de modo que cada color es al mis mo uer • mismo. problem.l "~;.),l) n tn qut Pa ro. de d u ntp ant
en su más límpida calidad tímbrica, y la ~~ media rc10nal en ~ont.l to on U n' ierte n l. per n 1 a d nll -
d_e, los otros. ~sí, pues, ¿qué puede hacer la h1st omo ac· nantc del uh .·ul o h que 'e fonn. en la ort Fe c:-
c1on humana SI no es producir fenómenos cada u los cua- nco de \ lontefeltn ) 111 olito rte d pc:r tl 't 1~' d
les revele siempre la unidad y la totalidad, la inn Uldad d~ Figs. 25 • 259 reOcltO' dt, duqut ele o) lt 8 ttr't forz on t

•.41

,.
•ti.

160. Pat'rO dtlla J•rancesca, L" ma cerana mmmemc .. , dtrcctamcntt· •• an mcr a plt'nnud
Vrrgtn Jt Smrg•ll"' (h. 1470), rab/4,
61 x JJ,J tm Urbmo, G•llt>1111 del aire•, •sin mcdiacionc de conina'i o \'C:nt:m ~lhl'ntt'~
N•z10Mlt Jtlk M•rchr. o antepechos• (Longhi) ~e pt~<.•dc advcr tir un un por !1 mt·
161. Pat'ro ddJa hanct.) a, Vngt"
con tl Nmo, untos, angrltJ ) rl nuciosa rctratística flaml"nca, t... timulndo prc isar por !J se
~"t FtJmco Jr Montt/rltro (p•Lt guridad que Piero tenía de poder rcdu Í1 .1 gcon , rmdtdl
ú Brtr•) (b 14lJ), tllb/4, 1,4 X
y proporcionar incluso, con d lcjaní\imo y lur u pat lle
1.70"' MilÁn, Brtra
Ja~ propias irrcgularidadt.• dd perfil, lo~ riz o CI Jos de lo(
cabeJio , las verruga del ro~tro L1 fina de los
párpados.
Aproximadamente a partir de 1470 trabaja bmo un
gran pintor flamenco, jusro DI CAi'tl'L. La 11 dt Sz·
242 243
c~tr,\, Clc.'ll,\111~tHc.• ll l)' . r¡
. ¡¡, ¡ de Plero no c.h:muPo
mga ' h 1 • . , tn Ucnc1¡• n GouClll (/loH' IICla b ahora Piero es el de 1 proy . 6
e n~a pero prueb.t que 1 tero \C .1 p .liHca do po . . Vi dt los MJtgo.s perficie curva, es decir el d;~cat n en p r pe u a ·e
·b·l·d d" d ~· · 1
cue tion de la p~~~ t 1 .tu e re ue u l propto \t~t~rn a rtlehte~
\ ll lva
t
~ortnc1a, 1' r/ac10
m \: ' 'Q
• f '
antt 'Uos, eescrita por PJmio e] V
per pecu, a comm lt u
m t
cional el modo tl.tmenco Jl· capt,tcJon dttcc la~ ~e ProP<>r. J • ICJO }' por V1 ru JO
1 a a rq uncctu ra es hJstóncamcnte el ' . 1 rt
Lle\'a ha ta el extremo lo ".ti ores ma,im os v 01 a rtal 1 ¿~ .
, •e ' pero o pl4 tta COtTlO
problema eórico b d
o

dl.men ione proporcion.tlc : la figura de la V1rgc 'fl1o~ de ¡,,


10
h d J o en sa expenencaa concreu de e
. d n.con "
~ltl.
Plio manto hmcha. o, .e una gran n1a~a cerca na qu su e _os e a natur ' y de la hinona. L teon ' en o ros ter-
1 l .
[ 1
empujar de de el mtenor e p ano renta ; pero de este nce e, 1
e Pare ~mno s, ~o pr~cct. a ¡ experiencia cond•c•onándola con a
24-t'rn Idea a pnon , smo que se constru} e sobre]"' e . J
e de ciende poco a poco hasta lo mmzm os de los d · 1 · • xpene noa a com
pcn Ja en a umve rs hdad del concepto J co 1
lo hilo de oro de lo cabellos de los ángel.es, de ¡ h~res, dt
0 11
~
obJ'etos que recogen un poco de luz en la sdencios
0 ll1tlde1
d dd f ' nc U) e en a n _
a e una ~rma absoluta: es como la cúpula del edrfJoo del
del armario de la pare d . La ((me d ·
1a propo rcion al a
e penu ll1 b r¡ saber, y los pdares que la sosuenen son la expenencJa de b na-
. ·
declarada: la pare 1sa y gns que separa e espacio d d '~
d l l s, esta rurale7:t y de la historia. y la expenencJa no tiene límat dt-
las figuras lleno de luz, del otro e pacio cerrad o ?n. e es~cn men~ Jonales, ?o puede detenerse ame lo demasiado pequeño 0
, apenas s ~rcada p~r e1 rayob de sol que , •ntuno an le J~ de ma 1ado grande en el prime r plano de la 1ntersecc1on
una penumbra
la \'en tan a y tra~~ u.na mea 1 1.Uffi.lnosa so r.e el muro. l a ,r:
entra'r-.en
alberu~~ o de la hipotética Jinea del honzonte. El mi mo P1e-
ro sumtm srra la clave de su teoría cuando suspende un huC\ 0
gris es una secc1on mtermed1a de perspecnva pero e Prrtf
s tamb· ·
ten en el centro de la cavidad absidial en forma de concha y sobre
la media entre los colores, especialmente el gris claro d
o ,

l . d 1 . e1lllar la cabeza O\ al de la Vi roen. El huevo es una forma Hen de 51 o-


to de la ~trgen y e gns os~uro e a esra~ c1 a ~n penurnbr~
.
nificados SJ":bó licos, pero su ,unció n aquí e indicar que na~a
del arman o de la pared; y nene una doble tlumm ación f \
es tan pequeno que no pueda entrar en •na proporoon uni' er-
Y radiante, que le permite actuar como fond o de la m~s rodnt~ sal: y el t~rmm o medi? entre d • mínimo .. del hue\·o y el .. máxt-
Virgen v hacer correr 1a 1uz que mct . 'de so bre los finos sala e'~
, f arn-. tentes mO•• del abstdL es ~ torma de la cabeza hum na de la \ ·1:reen.
de los ornamentos y llega a a ectar a los objeto s del
•111an0. Y no sólo esto: la misma forma se presenta, en dimen 1on ...dt-
Fig. 261 Un poco anterior a la muerte de Federico (14b2) es la ~
con la Virgen, Santos)' Federico de Al/ontefeltro en oraoón .p;,
primera vez la a~quite.ctura no es ya sólo una estr ltura de pi::
nos en perspectiva, sm~ un vano vasto y protu rJo, cubteno
con bóveda y con un mcho al fondo; y se exnende, grac 1as ~
la apertura de los grandes arcos, lateralmente \ hac a adelamr
El semicírculo de las figuras se sitúa, por tanto, n el cruce de
los brazos de un edificio en cruz. La decoración lsica a bm
de casetones con florones y las pilastras acanal u.1S captan 1~
luz y le dan una densa vibración; las zonas de so a están !Ir-
nas de aire. La función arquitectónica del semll l aO de figu-
ras en torno a la Virgen consiste en relacionar los e 1cios abter·
tos con el vano de fondo. En el pobpt1co de la A zcord1J,!.
primera obra conocida de Pie ro, el nicho era el m de la\ tr·
gen y la arquitectura estaba dentro de ]a figut ·nrras qut
los devotos arrodillados cerraban el círculo d<. L .aciendo el
vacío en tomo a la gran columna del cuerp o ergu En la pJ/J
de Brera el semicírculo de los santos repite, con ·urva m.b
amplia, la cavidad del ábside y, relacionánd ose e ., t:spacto~
abiertos laterales, recibe la luz, la recoge en tc,r la hguu
central y casi cónica de la Virgen y la transmite ,·idad ah·
sidial. Pero, sobre este semicírculo de figuras, se deter· -
mina según los distintos colores y segú n Ja Sil 11 Y la di·
\'ersa inclinación de cada figura . El probl em e plantel
<]u e h bJ tr b 1 do e n J r n
e tá en el e ulmcn d u r u ·~,_.,,
. n
cts rn ·rnc 1 qu 1 n • e 1 n z ,.
ele odo un p o tr" : en el v141 d
bd h ccr otr. . co qu r pi n~-c~.r,
co
rn~d crna y ma ce ~ • ble 1 bur u • e
el.. •• e 1 ~e rtés- de Gen tJe d 1 bn no Te2an
1tmltC e1e convencaon la mo ctu ltz do, m r u.. """''

cu.
p· ndo fron el cm historico-bíb1 ICO en e
H~ ~ 146 - 14 4; los fr co f eron en parte de,"'-\1.1
la ultJm guerra). FR e o PE Elll O l 22 57
~rcndc que la vía ind 1cada por J r n ehco
ttcndo
. d . con su n tu r lismo empín co, L1pp1• p o
tn ectsa entre el n tur lismo e penmental y el ptetJtsrn
corto alcance. A l ~SIO BAI DOVI ETn 1"25-1
alido clcl círc~Jo de Fr ngelico, el típ 1co d-'o.4:;.iemc~co
rcntcm~n tc abten.o las mve ugacton de p 0 0 U""c.c~e,.:u.. --
Dome ntco Veneztano e mcluso de Piero dell Franc.e ~ - 1

mita sin embarg o a tom r de ell s Jg( n p ctO enen ..


damentalmente para demostr r que sabe m n ene e
-
La Ín\'esrigación compromeud y onen d vue "
co n ANTO NIO DEL POLLAIOLO (h. 1 32-1 9 como poleru
ca contra el oficiali mo • ocial de Go7..zolt pero, tamb e
]6J allá, contra el universalismo reoréoco y formal d P e.r
versas ' en todas las cosas de la naturaleza, tanto en el h efecto, para Pollaiolo el rte no es una con truccion ~-•"*J.u:J
ue~
como en la concha o en la persona human a, y el alor de qu e cubre todo lo que VJ 1bl e no ctb mo IU
. d d 1 , este la experi encia; no dom1n 1 h1 ona con la utond d e
fonna no cam b~a cuan o pasa. e o ~ on cavo ~ 1J convexo.
Esta es la últtma obra conocada de Pacro que, ~n ·os úhimo ma, sino que se realiza en 1 ht ron y en oc aon
años de su vida, perdió la vista y aband onó la ¡) n ura por 1~ contrastes; no parte de pnnap t teon,.,.

pura especulación matemática; y esta obra, que de ·-..tra la su- stn o que recorre u prop o e m e
prema convergencia e identidad entre experi en,ia 1dea, entre tar en cada momento con r"'..""
idea y fonna, constituye el fundamento histórico eal del cla- fin , no e~ certeza sino bu
sicismo universalista del primer Cinqu ecc nto , o ramame •,. la olín1pi cn y :;upren l
de Rafael. prc el rnundo d d
línea de horizo nt
ror, el oscuro itn
LAS TENDENCIAS DE LA PINTURA EN FLORc NC puJa a penetrar
Las pr cn1i a d
En Florencia sólo el viejo Paolo U ccello se d enta (y lo fu erza voliti' a "'"''. .
Fil. 225 demuestra en las tres batallas) de la cnonn c in lllCI3del m.: tic a de I on
arte de Piero della Francesca. Los pintor es q ue do 11 w Flo· v iert~ en 1d e

rencia en tomo a mediados del siglo se n1u cven u mayor rentu10 contr
parte en la línea de Fra Angelico, pero no cn ticn ya el sig· ~u .1je hun1, n o~....
e 1450 y ntrc
nificado de sus tais naturalistas. Es cierto q UL!, do. Sl· dib uJa
su obra • ,.., n un n L ton
1460, Lippi esti con los freseos de 1 un.\ lOO!. cp ·toa n,;,¡

ado sólo del ntun Jo n ub)eti de


condu siva; pero iKJntenido proble mático :;c;·r
0-1197), ucs, l1 qu 111 rdc e
más tarde, por BENO ZZO GoZZ ( >1 1 (1 la in li,·idu, lad 1

También podría gustarte