RECONCILIANDOME CON MIS HERIDAS

5 HERIDAS DE LA INFANCIA

Por Yliani Contreras

Durante la infancia vivimos diferentes etapas, y en cada vivimos distintas situaciones que
construyen lo que hoy somos. En una familia, cada hijo va a vivir las mismas experiencias
vistas a través de diferentes lentes. Un ejemplo es, que cada hijo viva diferentes estados
económicos y ello determina la relación con el dinero.
Tu NIÑO/A INTERIOR es tu YO DE PEQUEÑO/A que vive dentro de ti. Es ese ser que
atravesó experiencias tanto positivas como negativas durante su infancia, y de esta
manera construyo una historia, que puede estar llena de amor, validez, reconocimiento,
sueños. Pero también de traumas, inseguridades o abandono. Dependiendo de la historia,
es como el niño/a interior tratara de proteger al yo adulto.
Un niño/a abandonado, es un adulto dependiente, por ejemplo. Un niño con la herida de
rechazo, es un adulto que tiene la sensación de falta de aceptación y desvalorización.
Tu niño/a interior, son todos esos pensamientos, sentimientos, emociones y actitudes que
salen a la luz cuando te encuentras en una situación que detone esas heridas que
probablemente no sabias que tenías, pues estaban muy escondidas desde la niñez.
Muchas veces no nos percatamos de esa voz interior que nos habla que es nuestro niño
interior, que es esa parte de ti que busca protegerte, pero a la vez te limita vivir
experiencias como adulto.

¿CÓMO SABER SI MI NIÑO/A INTERIOR ESTÁ

HERIDO/A?
Responde las siguientes preguntas:
¿No te gusta poner límites por miedo a la soledad?
¿Te haces dependiente de tu pareja?
¿Se te dificulta tener un vínculo afectivo con una persona por
miedo a ser rechazado/a?
¿Sientes que no perteneces a ningún lugar?
 ¿Te avergüenzas de todo?
¿Te vuelves muy presente en la vida de todos, pero te dejas de
lado a ti mismo/a?
¿Se te dificulta confiar en las personas porque sientes que en
algún momento te pueden traicionar?
¿Te gusta tener todo bajo control porque piensas que así no te
vas a equivocar?
¿Cuando tienes un logro piensas que lo pudiste hacer mejor?
¿Escondes tus emociones y vulnerabilidad?

Lo más significativo de las heridas es que todas están relacionadas con un tipo de
máscara. Esto, no es más que las personalidades que adquirimos para protegernos
del sufrimiento que nos provocan las heridas.

TRABAJO DE INTROSPECCIÓN
Contemplación visual.

1. ¿Cómo se encuentra tu niño/a interior?

2. ¿Cuales situaciones detonan que nuestro/a niño/a interior salga a la luz?
3. ¿En qué forma aparece?
4. Aprender a darle Amor a tu niño/a interior.

Afirmaciones frente al espejo:

Tu no tienes la culpa de nada, eras solo un/a niño/a.

No tengas miedo, yo estoy contigo para amarte y protegerte.
Te amo. Estoy muy orgulloso/a de ti.
HERIDAS DE LA INFANCIA
1. Herida de Rechazo: se relaciona con la máscara del
Huidizo/a.
2. Herida de Abandono: forma la máscara del Dependiente.
3. Herida de Humillación: esta asociada con la máscara del
Masoquista.
4. Herida de Traición: esta relacionada con la máscara del
Controlador/a.
5. Herida de Injusticia: con la máscara del Rígido.

1 HERIDA DE RECHAZO

Rechazo y Abandono se pueden llegar a confundir

En Rechazo decimos: “no quiero” estar aquí, escucharte. se produce en el

vientre de la madre al primer año de vida. la produce el progenitor del
mismo sexo.

Características del niño/a huidizo/a:

Le gusta vivir en la fantasía

Suelen ser tranquilos
Desconectados de la realidad
Inventan formas de huir de casa: jugar en la calle, anhelando ir a la
escuela, hacer actividades afuera. El mismo deseo es mostrado por el
progenitor del mismo sexo.
Desea que los demás reconozcan su existencia, porque sienten que no
tienen derecho a existir.
Siente la necesidad de madurar más rápido y alcanzar la perfección, de
esta manera tienen menos probabilidades de ser rechazados o cometer
 errores, así creen que adquirirán valor en su círculo social.
Estos niños de adultos prefieren apegarse a lo espiritual, olvidándose
completamente de lo material para seguir en la fantasía que vivían de
pequeños.
En sus relaciones evitan a las personas que los aman, pues les parece
difícil entender como alguien “los eligió”, saboteando la situación para
alejarse y/o ser rechazados.
En el ámbito laboral prefieren ser invisibles al momento de tener que
opinar, ya que le da pánico sentirse rechazado.
En relaciones, pueden sentir miedo a ser rechazados sexualmente, al
punto de evitar cualquier contacto íntimo para prevenirlo.

2 HERIDA DE ABANDONO

Relacionada con la máscara del dependiente. Podemos entender la palabra

abandono por distanciarse de alguien por el hecho no poder estar ahí.

La frase que la identifica es “no puedo”.

Se sienten que no son queridos realmente por su entorno, viven en el
dramatismo y victimismo.
Característica importante relacionada a esta herida es que le cuesta la
independencia, y por lo mismo generan mucha dependencia de otros, lo
que les hace tolerar ambientes difíciles y violentos.
Se crea desde el 1er y 3 er año de edad, siendo el progenitor del sexo
→ →
opuesto con quien se desarrolla: niña papá / niño mamá.
La falta de comunicación con el progenitor del sexo opuesto es una
característica más de esta herida, de hecho pudiste sentir que el
progenitor no se interesaba en ti, pues se mostraba reservado/a.
Seguramente sentías que eras tu el responsable de la tristeza del otro.
En la adultez te conviertes en salvador de otros para sentirte importante
y no abandonado.
 Crees que necesitas a alguien más como apoyo. Por ello, pides opinión y
aprobación de amigos para poder confiar que tus decisiones son las
correctas. Ejemplo: si buscas apoyo o colaboración económica de tus
familiares y recibes un NO por respuesta, puedes caer en un victimismo,
llanto y tristeza al no poder aceptar la negación de ellos de poder
apoyarte, ya que te hace sentir que al no tener ese apoyo te sientes
abandonado.

3 HERIDA DE HUMILLACIÓN

La máscara relacionada es la del masoquista.

La persona con esta herida busca inconscientemente sufrir, incluso
autosabotea cualquier situación para sentir dolor, autocastigarse por
cualquier experiencia.
En la infancia, se desarrolla en el 1er y 3er año de edad. El niño la
experimenta cuando uno de sus padres se avergüenza de él o ella, o
teme que lo hagan.
El progenitor que se hizo cargo de su desarrollo físico es quien crea esta
herida. Por lo general es la madre, pero a veces es papá.
Siente que el progenitor lo controla, por lo que busca hacer cosas
prohibidas en la infancia o adolescencia.
Es posible que tuviera responsabilidades más grandes para un niño,
ocuparse de sus hermanos por ejemplo, por lo que muy poco se sentía
libre.
Ayudaba a sus compañeros de clase a tener buenas calificaciones, pero
él o ella no dedicaba tiempo para estudiar lo suficiente para sus
exámenes.
De adulto, se le dificulta expresar sus necesidades, porque tiene miedo
a sentir vergüenza, por lo tanto se siente muy sensible ante todo.
 Hace de todo por los demás, mostrándose servicial, porque piensa que
solo así no lo van a humillar. Pero lamentablemente todos abusan de él.
El o ella misma se considera como una persona desagradable, se siente
menos importante que los demás, y no comprende porque lo ven como
una persona especial e importante.

4 HERIDA DE TRAICIÓN

Esta herida trae consigo la máscara del controlador.

Reacciona ante la traición buscando tener el control para asegurarse de
cumplir con sus propios compromisos, ser fiel y responsable, o bien,
asegurándose que los demás cumplan con su responsabilidad,
Se desarrolla entre los 2 y 4 años de edad y surge con el progenitor del
→ →
sexo opuesto: niña papá / niño mamá.
Cuando el progenitor no cumple con su palabra traiciona la confianza
del niño. Es probable que sea controlador y tome decisiones por sus
hijos.
De adulto, se protege de todo para no mostrar su vulnerabilidad porque
piensa que si lo hace la gente lo va a querer controlar o se van a
aprovechar.

Ejemplo: con amigos no se muestra vulnerable por temor a verse débil. Le

gusta dar órdenes en todo momento, incluso al momento de ayudar a
alguien lo hacen desde el lugar de querer controlar.

Otro ejemplo: En una relación la mujer quiere controlar todo lo que hace el
novio/a porque de esta forma no podrá traicionarla.

Otra característica, es que es muy rápido para opinar o actuar. Evita las
situaciones donde no puede tener el control. Le gusta la reputación de
ser alguien importante y responsable.
Miedo a la negación, porque esto trae a de nuevo la sensación de ser
traicionado. Pero es quien primero es capaz de negar a alguien, ya que
 cuando alguien se equivoca, el controlador no dan segundas
oportunidades.

5 HERIDA DE INJUSTICIA

Esta herida fabrica la máscara del rígido.

La persona sufre injusticia cuando sus derechos son negados.
No se siente apreciado o percibe no tener valor.
Se crea entre los 3 y 5 años, cuando el niño empieza a desarrollar su
personalidad y surge con el progenitor del mismo sexo.
El niño/a con esta herida tiene un progenitor frío, autoritario, que crítica
frecuentemente, intolerante, etc.
En la infancia, percibió que su progenitor lo apreciaba más por lo que
hacía que por lo que es.
En la adultez, piensa que las cosas o las personas valen por lo difícil que
es ganarlo. Ejemplo: un hombre piensa que si le fue muy difícil
conquistar a una mujer, por un largo tiempo vale más que las otras que
aceptaron sus elogios.
Busca tener la razón y control de la situación.
Trata de hacer todo de manera perfecta y recibir el mérito de los
hechos, ya que la recompensa es muy importante para ellos.
En el ámbito laboral, si un proyecto se trabaja en equipo, buscará que se
le reconozca por lo que hizo correcto para recibir el mérito.
Evita los problemas, y si los tiene es muy raro que pidan ayudan.
Es muy exigente consigo mismo/a y con los demás, a su vez, tiene
dificultades para respetar sus límites, y eso le provoca sentir culpa o
vergüenza.
En lo emocional, le es difícil dejarse amar y demostrar su amor, ya que
pasa por ser frío e insensible, pero realmente es todo lo contrario. De
esta forma es injusto/a consigo mismo/a, por privarse de sus emociones
y sentimientos.
 En lo sexual, tienen dificultad para sentir placer si siente que no lo
merece, y le da miedo equivocarse con sus parejas.
Se compara con otros frecuentemente con aquellos que percibe como
superior a sí, recreando la herida de injusticia.
Teme la frialdad, es uno de los mas grandes, sin percatarse que busca
ser percibido de esta manera porque evita todo contacto con su
sensibilidad para no mostrarse vulnerable.

¿CÓMO SANAR TUS HERIDAS DESDE LA COMPASIÓN Y

EL AMOR?

Existen múltiples técnicas...

Lo que he aprendido en este proceso de sanación de mis heridas es que

tengo una familia interna y que todo lo que yo haga me estará dando un
mensaje de amor o de abandono, por ello, estar en contacto con mi familia
interna me ayuda a cuidar mejor de mí misma.

“Nada que verdaderamente importe, se puede sanar con una sola terapia,
con un solo taller o una sola vez de algo. El trabajo de sanación requiere de
constancia y práctica.”

PASOS QUE PUEDES LLEVAR A CABO PARA PODER

SANAR TU HERIDA
1. Conoce a tu niño/a interior, conoce sus necesidades, abrazalo y amalo.
2. Identifica que situaciones detonan tus heridas. Cuestionate: cuándo y
cómo salen al exterior.
3. Revisa cómo aparecen. Qué máscaras portas para protegerte, reconoce
en que forma y contexto específicos se manifiestan.
4. Comprométete con tu proceso de sanación.
5. Agradece a tu niño/a interior y a tus heridas por protegerte

CARTA A MIS HERIDAS

Queridas heridas,

No importa cómo haya sido mi pasado, hoy decido seguir adelante con mi
proceso de sanación a mi propio ritmo. Ahora soy consciente de que la vida
es un viaje y no una carrera. Reconozco y festejo que lo estoy haciendo
perfecto, con todos mis recursos y posibilidades. A partir de hoy, prestaré
atención solo a mi camino, ya que ahora entiendo que no puedo comparar
mi proceso con los demás, pues todos lo vivimos diferente.

El día de hoy les doy las gracias a cada una por ser un acto de amor propio.
Un acto de amor propio porque salían a protegerme de aquellas situaciones
en las que podía sentir dolor, tristeza, temor. Soy consciente de que ustedes
siempre estarán ahí, haciendo lo que saben hacer, protegerme; pero
también sé que algún día dejarán de doler.

Sé que el inicio del camino puede resultar doloroso y difícil de caminar. Si

es necesario lloraré, escucharé todos esos sentimientos de tristeza, dolor,
angustia, frustración. Por otro lado, se que al final del camino volveré a reír,
a amar y sobre todo a vivir en paz, gozo y armonía.
El día de hoy, confío y estoy segura que quiero sanarlas. El día de hoy las
conozco, las acepto y las abrazo con amor incondicional. No busco que
desaparezcan porque cada vez que aparecen aprendo de mi y descubro
aquellas cosas que me quedan por sanar. El día de hoy las amo, las
reconozco, las acepto y les agradezco.

Aunque no estoy de acuerdo con ciertos comportamientos y me he perdido

de ciertas oportunidades por el miedo que me provocan cuando salen a la
luz. Hoy las adquiero más que nunca porque me ayudan a ser consciente de
aspectos que antes no quería ver. Las adquiero desde el amor y compasión,
hacia mí y hacia los otros. Gracias por protegerme porque hoy gracias a
ustedes quiero aprender más de mi.

Hoy ya no las veo igual que antes. Hoy las veo desde un espacio de amor,
compasión, agradecimiento y luz. Reconozco que ustedes nunca fueron
oscuridad, nunca me hicieron una mala persona, solo buscaban protegerme.

Por eso, hoy soy una persona con mayor consciencia y compasión. Por eso
hoy, dejo a un lado la culpa y vergüenza que en algún momento llegué a
sentir. Hoy, elijo ver a mis padres desde otros ojos, unos ojos llenos de
compasión y amor.

Hoy me perdono de verdad, desde el corazón, desde el alma. Decido a

partir de ahora, ser yo misma. Decido dejar de creer que para sentirme
segura y protegida, debo portar las máscaras. Acepto todas las experiencias
que la vida me regale, así las catalogue como buenas o malas, porque sé
que llegarán para enseñarme, beneficiarme y expandirme. Decido amarme
a mi misma, porque el amor tiene un fuerte poder de curación y abre paso
a mi transformación, porque el verdadero amor es la experiencia de ser yo
misma.

A mi herida de rechazo, hoy ocupo mi lugar, reconozco mi existencia y

abrazo la incomodidad y el pánico. Gracias por protegerme.

A mi herida de abandono, hoy me siento bien conmigo misma si estoy sola,

ya no busco el drama o llamar la atención, mi deseo de emprender
proyectos y en pareja crece y si los demás ya no me apoyan soy capaz de
continuar. Gracias por protegerme.

A mi herida de humillación, hoy me tomo el tiempo de conocer mis propias

necesidades antes que las de los otros, ya no busco cargar con problemas
que no son míos, me siento más libre porque no me limito. Gracias por
protegerme.

A mi herida de traición, hoy decido confiar en otros y ceder con facilidad,

ya no intento ser el centro de atención y no necesito que los demás
reconozcan mis logros para yo reconocerlos. Gracias por protegerme.

A mi herida de injusticia, hoy me permito equivocarme sin enojarme o

criticarme, me permito mostrarme sensible y llorar sin perder el control o
temer al qué dirán. Gracias por protegerme.

A todas mis heridas, gracias. Hoy tengo el control de mi vida, gracias por
hacerse presentes, pero ya no más.

Yliani Contreras 💜