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SOBRE EL CULTO A LA «SANTA MUERTE»

12 de diciembre de
2023 | Categorías: Perspectivas

por P. Andrés Esteban López Ruiz CCR*

Una descripción para los


sacerdotes exorcistas.

1. Marco histórico del culto a la "Santa


Muerte" en México
El fenómeno del culto a la "Santa Muerte", tan
extendido hoy en México y otros países, en
particular en algunos contextos sociales
proclives a prácticas mágicas, adivinatorias y
supersticiosas vinculadas también al mundo
del crimen, tiene un origen reciente y un
pasado lejano. .
No se trata de un fenómeno prehispánico,
aunque tiene un antecedente precisamente
en aquellas visiones del mundo prehispánico
en las que la muerte y la morada de los
muertos jugaban un papel
fundamental[1]. Hay evidencia de cultos
vinculados a la muerte, aunque muy
diferentes a los actuales, en Hidalgo y Oaxaca
en los siglos XVIII y XIX. En realidad, sin
embargo, se tiene evidencia de su existencia
sólo desde 1961[2], y con mayor desarrollo
desde 1965[3], año en el que aparece con las
características típicas de su configuración
actual en el mercado de Tepito en la Ciudad
de México. conocido por ser un lugar de
contrabando y anarquía. Allí mismo se
encuentra actualmente el "altar mayor"[4] de
la "Santa Muerte", ubicado entre Tepito y
Colonia Morelos, zonas caracterizadas por el
narcotráfico y la trata de personas.

Además, hay un notable desarrollo de este


culto en Catemaco, en el estado de Veracruz,
localidad que posee una antigua tradición de
brujería, chamanismo y ocultismo[5], con
Manifestaciones de culto en el mercado de
Tepito

escuelas iniciáticas y familiares, costumbres


de pactos, consagraciones y transmisión de
«médium», entre generaciones emparentadas
por sangre e iniciadas a través de diversos
rituales.
Si bien la mayoría de los estudios no opinan
que Catemaco deba ser considerada la cuna
del culto a la “Santa Muerte”, optando por
Tepito, es innegable que muchos de los
rituales y prácticas mágicas ligadas a él se
configuraron en Catemaco. Este dato nos
parece relevante, ya que es un lugar que ha
sufrido una fuerte influencia de las religiones
afroamericanas, en particular de la santería
afrocubana, e incluso de la yoruba brasileña,
como los cultos Candomblé, Umbanda y
Quimbanda. : hecho que se evidencia al
observar algunos de sus altares.
Estas influencias han llevado al complejo
desarrollo de una versión mexicana del culto
satánico, mezclando elementos de la
Quimbanda brasileña, la Santería cubana[6],
culturas prehispánicas y el satanismo
ocultista, teniendo a la «Santa Muerte» como
uno de sus principales ídolos.
Estas convergencias pueden entenderse
teniendo en cuenta el carácter ecléctico de
muchas tradiciones ocultistas. Por ejemplo,
en los mismos altares donde se celebran
estos ritos, la imagen del «Baphomet»[7] que
preside el culto, con la «Santa Muerte»
colocada en el lugar principal, junto a otros
ídolos oscuros propios de la Quimbanda , que
popularmente en México se llama «Santería
Satánica», esto junto con los calderos de
«Palo Mayombe», en los que se realizan
rituales caníbales. Estos artículos son de
dominio público ya que fueron exhibidos en el
famoso altar del brujo llamado “El Lunares”,
donde se encontraron evidencias claras,
incluidos restos humanos.

Probablemente la influencia de la Santería en


el culto a la “Santa Muerte” contribuyó a que
se pretenda convivir con la religión católica,
como intenta hacerlo la propia Santería,
además de que las similitudes rituales son
notables, sobre todo en el culto a la “Santa
Muerte”. Ikú»[8]. Este tipo de cultos y rituales
de magia negra son comunes entre los
Brujería y culto satánico en Catemaco

narcotraficantes, al punto que se les ha


llamado “narcosatanismo” y están vinculados
de una forma u otra al culto a la muerte.

2. Configuración del culto a la "Santa Muerte"


en México y sus principales características:
esoterismo, criminalidad y
sincretismo. Consideradas estas breves
notas históricas sobre el culto en cuestión,
podemos derivar algunas de sus
características fundamentales. En primer
lugar, el culto a la “Santa Muerte” nació como
una práctica mágica, ritual, ligada a la
brujería, la adivinación y el espiritismo, a
través de diversas formas de ocultismo
practicadas anteriormente en México. Por lo
tanto, es más probable que su origen sea
estrictamente esotérico-popular
contemporáneo[9] y no religioso
prehispánico. La primera referencia histórica
proviene del antropólogo estadounidense
Oscar Lewis (1914-1970) quien destaca el
elemento esotérico y ritual:

Cuando mi hermana Antonia me habló por


primera vez de Crispín, me dijo que cuando los
maridos tienen una aventura rezan a la Santa
Muerte. Es una novena que se reza a
medianoche, con una vela encendida y su
retrato. Y me dijo que, antes de la novena
noche, llegará la persona que llamaste.[10]

En segundo lugar, el culto a la "Santa Muerte"


nació como una práctica ocultista vinculada
al ámbito criminal, en particular a los delitos
de robo, contrabando, estafa, asesinato,
secuestro, narcotráfico y trata de
personas. Este detalle criminal ha llevado al
gobierno mexicano a considerarlo un
problema de seguridad nacional, negando el
registro de ministros de religión como
asociación religiosa[11].
De hecho, no son pocas las voces que se han
alzado para denunciar el problema de
reconocer a la "Santa Muerte" como una
práctica religiosa en una dimensión
asociativa, ya que estructuralmente
representaría una afrenta al orden público y a
los derechos humanos[12]. Ha habido
muchos de sus ministros que han enfrentado
procesos penales, que están detenidos en
prisión o que han sido ejecutados durante las
guerras entre organizaciones
criminales[13]. En consecuencia, esta
relación entre el culto a la "Santa Muerte" y el
crimen ha permeado la mayoría de los
entornos criminales de México. Las cárceles,
en particular, se han convertido en lugares
privilegiados para este culto y no parece
haber una sola prisión en México donde no se
practique[14].
En tercer lugar, el culto a la "Santa Muerte"
nace como una práctica sincretista que de la
santería cubana hereda la pretensión de
subsistir con la religiosidad de un pueblo
predominantemente católico, sin exigir
renuncia a la fe católica pero conviviendo con
ella. Este componente sincretista es
sumamente importante, porque facilita la
participación de muchas personas que por
desconocimiento de la fe católica adhieren a
las prácticas del culto a la "Santa Muerte" sin
darse cuenta de que constituyen una
amenaza para su fe. Además, su
configuración simbólica y ritual se presenta
con componentes típicos del catolicismo
romano: los ministros visten alba, estola y
casulla en ocasiones totalmente idénticas a
las utilizadas por los sacerdotes católicos. En
algunos casos utilizan los mismos rituales e
incluso el Misal Romano, simulando la
celebración eucarística en sus templos[15].

3. Estructura del culto a la "Santa Muerte" en


México en sus prácticas rituales
En la fenomenología del culto a la "Santa
Muerte" se pueden distinguir claramente dos
componentes rituales: el sincrético y el
esotérico. Dentro de los rituales sincretistas
observamos pues la configuración de un culto
externo al ídolo de la Muerte que toma
algunos elementos de los cultos
católicos. Así encontramos rosarios, novenas,
escapularios, altares, imágenes,
consagraciones a la muerte, procesiones,
cantos y similares: todos elementos propios
del catolicismo, pero utilizados con diferentes
significados. Es evidente que la mayoría de
estas prácticas reemplazan la piedad
mariana. De hecho, parece que el culto a la
"Santa Muerte" quería suplantar el culto a
Santa María de Guadalupe.

Por otro lado, dentro del componente


esotérico, podemos creer que el culto a la
“Santa Muerte” se ha convertido en un
espacio de convergencia en el que se pueden
realizar todo tipo de prácticas mágicas. Este
eclecticismo lo hace particularmente proclive
a difundirse entre las prácticas más
ocultistas y populares. Sin embargo, los
mismos "operadores de lo oculto" dedicados
La Santa Muerte como sustituto de la
devoción mariana

a ello reconocen que practicar magia


utilizando a la "Santa Muerte" implica un
compromiso, un pacto o una alianza con el
ídolo, que no puede ser violado fácilmente
posteriormente.
Dicho esto, veamos algunas de las prácticas
mágicas que se realizan a través de rituales y
“oraciones” a la Muerte, y que expresan su
naturaleza y función en el color del vestido
con el que se cubre el ídolo que la
representa. Por ejemplo, el ídolo se viste de
blanco para practicar magia blanca; rojo para
realizar hechizos de amor; de oro para pedir
dinero; el negro para lanzar una maldición,
protegerse de hechizos o solicitar protección
durante la comisión de un delito; Está vestido
de verde para pedir protección legal. Incluso
existen rituales para solicitar la rehabilitación
de la drogadicción vistiendo al ídolo de
ámbar. De esta manera, podemos decir que
este ritual se ha convertido en una técnica
compleja de culto y magia, donde se realizan
oraciones, vigilias, rituales y ofrendas para
obtener el favor del ídolo, y se realizan
rituales mágicos para obtener beneficios o
lanzar maleficios. .
También existe, aunque no directamente, una
práctica espiritista y adivinatoria ligada al
culto a la "Santa Muerte", ya que a través de
cultos, pactos y consagraciones, algunas
personas piden la capacidad de saber lo
oculto, para ejercer la adivinación o la
'invocación'. de espíritus, incluida la
nigromancia.
Los tipos de sacrificios, ofrendas y obsequios
que se presentan al ídolo de la "Santa Muerte"
son varios: algunos son sincréticos, otros
están influenciados por las religiones
afrocubanas, y otros tienen un carácter
verdaderamente satánico. Se ofrecen flores,
piedras y metales preciosos, imágenes y
altares, pero también se ofrecen y consagran
armas de fuego y blancas: fusiles de asalto,
pistolas y cuchillos. Otras ofertas son alcohol,
tabaco, cigarrillos y drogas ilegales. Es
habitual que los narcotraficantes ofrezcan las
dosis de marihuana, cocaína o
metanfetamina que trafican. Además, rezan
al ídolo incluso pidiéndole que maldiga las
drogas que suministran a sus usuarios. A la
«Santa Muerte» se ofrecen personas,
familias, niños, así como crímenes, torturas,
asesinatos. Finalmente, se ofrecen lugares
como viviendas, prisiones y mercados.

La ofrenda de alcohol al ídolo también


involucra a menores

En la Arquidiócesis de México, diversas


personas que abandonaron estas prácticas
para renovar su Bautismo han brindado
amplios testimonios sobre estos
ritos. Algunos de ellos tuvieron que ser
exorcizados.

4. El culto a la "Santa Muerte" en la práctica


de exorcismos en México
Como podemos entender de lo explicado
hasta ahora, desde el punto de vista
teológico-moral el culto a la "Santa Muerte"
implica directamente la comisión de los
pecados de idolatría, magia, brujería,
espiritismo, adivinación y nigromancia. En
algunos casos incluye prácticas satánicas
que material y formalmente constituyen
apostasía, blasfemia y sacrilegio. Además,
implica, de una forma u otra, pecados
específicos de violencia contra la vida y
violaciones gravísimas del código penal
como asesinato, delitos, robos y tráfico de
drogas. Estos pecados gravísimos colocan a
quienes los cometen bajo el control directo
de Satanás y, con el permiso divino, pueden
fácilmente constituir la ocasión[16] de su
acción extraordinaria.
Las personas que adoran a la "Santa Muerte",
realizando diversas prácticas rituales y
mágicas, adoran implícita o explícitamente a
Satanás, arriesgándose a volverse sumisos a
él y sufrir su extraordinaria acción[17]. Así,
aunque algunos de sus ministros y devotos
no firman un pacto formal, al menos lo hacen
internamente. Sin embargo, dentro de estas
comunidades, también existen pactos
formales con los que el diablo, a través del
ídolo de la "Santa Muerte", otorga a sus
seguidores, mediante intervención
sobrenatural, regalos y riquezas. La
proliferación de este culto ha provocado un
notable aumento de la acción extraordinaria
del diablo, tanto entre las personas que
adoran este ídolo, como entre sus ministros,
así como entre quienes son víctimas de
maldiciones, hechizos y magias realizadas
con el mismo. rituales de la «Santa Muerte».
La práctica del exorcismo en México
confirma numerosos casos de acoso,
obsesiones y posesiones diabólicas ligadas a
la práctica y creciente difusión del culto a la
"Santa Muerte". Cada vez más personas
sufren no sólo de brujería en general, sino
también de los males asociados a este
culto. Son varios los casos recientes de
jóvenes que, esclavizados por las drogas,
sufren alguna forma de acción extraordinaria
del diablo debido al consumo de drogas
malditas y los rituales con los que los
narcotraficantes consagran a sus clientes a la
"Santa Muerte".
Además, aunque menos habituales, se han
confirmado casos de auténticas
infestaciones diabólicas en lugares donde se
venera a la "Santa Muerte", como mercados,
locales especiales y, en particular, cárceles.

5. La respuesta pastoral de la Iglesia debe


incluir exorcismos
En repetidas ocasiones, los obispos de
México han instruido al pueblo de Dios sobre
la gravedad del culto a la "Santa Muerte" y
han explicado abiertamente que se trata de
un culto a Satán.
La respuesta pastoral de la Iglesia ha incluido
la denuncia de este terrible engaño y busca
preservar al pueblo de Dios de estos males,
consolidando el anuncio evangélico, la
catequesis y la formación, y al mismo tiempo
santificándolo con los sacramentos y la
oración. Sin embargo, en muchos casos, es
necesario un exorcismo mayor para ayudar a
todas aquellas personas que han sufrido las
crueles heridas de Satanás a través del culto
que le rendían a la "Santa Muerte".

*Ordenado sacerdote el 30 de mayo de 2015.


Miembro de la Sociedad de Vida Apostólica
“Cruzados de Cristo Rey” desde 2005.
Exorcista en la Arquidiócesis de México
desde 2006. Secretario de la Comisión para el
Exorcismo de la Arquidiócesis de México
desde 2016. Miembro de el Colegio de los
Exorcistas de la Arquidiócesis de
México. Vicario parroquial de la Parroquia
“Sagrada Familia Colonia Portales Oriente” en
la Ciudad de México. Estudios civiles:
Licenciatura en Filosofía UPAEP (Universidad
Popular Autónoma del Estado de Puebla)
(2010). Especialización en Ética UCIME
(Centro Universitario de la Ciudad de México)
(2012). Maestría en Ética Tomista UCIME
(2013). Doctorado (Estudios Finalizados) en
Filosofía UCIME (2020). Licenciado en
Teología por la Universidad Católica Lumen
Gentium (2015). Estudios Eclesiásticos:
S.Th. Bac. Universidad Pontificia de México
(2015). S. Th. Lic. con especialidad en Moral,
Universidad Pontificia de México
(2021). Experiencia académica: ex profesor
de la Universidad Pontificia de México, la
Universidad Católica “Lumen Gentium”, la
Universidad Popular Autónoma del Estado de
Puebla.

[1] Claudia REYES RUIZ, Historia y actualidad


del culto a la Santa Muerte, en: “El cotidiano”,
n. 169 (2011), pág. 52 [los títulos de las notas
bibliográficas fueron traducidos por el autor
en italiano, ed.].
[2] Oscar LEWIS, Los hijos de
Sánchez. Autobiografía de una familia
mexicana, México, 1961.
[3] Juan Antonio FLORES MARTOS,
Transformismos y transculturación de un
culto neomestizo emergente: la Santa Muerte
mexicana, en: Mónica CORNEJO – Manuela
CANTÓN – Ruy LLERA, Teorías y prácticas
emergentes en Antropología de la religión,
Ankulegi, Madrid 2008, p. 58.
[4] Alfonso HERNÁNDEZ HERNÁNDEZ,
Devoción a la Santa Muerte y a San Giuda
Taddeo en Tepito y anexos, en: “El cotidiano”,
n. 169 (2011), págs. 39-50.
[5] Javier, MOJICA MADERA, Acciones
rituales en el arte latinoamericano, en: Öznur
SEÇKIN, El Viejo Mundo y el Nuevo Mundo en
la Era del Diálogo, Universidad de Ankara,
Ankara 2014, pp. 763-768.
[6] Juan Manuel SALDIVAR ARELLANO,
Orishas, ​demonios y santos. Una
aproximación al sincretismo de la Santería,
caso Catemaco, Veracruz, en: “Gazeta de
Antropología”, n. 25-1 (2009).
[7] Redacción, ¿Qué significan los altares
satánicos de “El Lunares” encontrados en
Tepito?, En: “La Silla Rota” [31/01/2020]
https://lasillarota.com/metropoli/que-
significar- los-altares-satanicos-del-topo-
encontrado-en-tepito-operativo-tepito-
satanico-la-union / 329119 (31.01.2020).
[8] Cossete Celecia PÉREZ, Muerte y muertos
en la santería afrocubana, en: “Revista de
Cultura y Comunicación de la Universidad
Veracruzana”, n. 3 (2015), págs. 105-110.
[9]Juan Antonio FLORES MARTOS,
Transformismo y transculturación de un culto
neomestizo emergente: la santa muerte
mexicana, cit., p. 57.
[10] Oscar LEWIS, Los hijos de Sánchez, cit.
[11] Dirección General de Asociaciones
Religiosas (04 de 2005). “Boletín núm. 87/05:
Secretaría de Gobierno resuelve cinco
procedimientos administrativos por
violaciones a la ley sobre asociaciones
religiosas y culto público [10.06.2020].
[12] Pilar CASTELLS BALLARIN, La Santa
Muerte y la cultura de los derechos humanos,
en: “LiminaR. Estudios Sociales y
Humanísticos”, vol. 6 n.1. (2008).
[13] Redacción, 66 años de prisión impuesta
al líder de la Iglesia de la Santa Muerte, en:
“Proceso” [14.06.2012]
https://www.proceso.com.mx/310895/dan-6-
anos -de-cárcel-un-líder-de-la-iglesia-de-la-
santa-muerte (31.01.2020).
[14] Jorge Adrián YLLESCAS ILLESCAS, Mira,
escucha y calla. Creer en la Santa Muerte
durante el encierro, UNAM, México 2019,
págs. 32-43.
[15] Domingo VALDEZ, Con misa y cirio
veneran a la Santa Muerte, en: “El Universal
Querétaro” [11.03.2018]
http://www.eluniversalqueretaro.mx/nuestras-
historias/con-misa-y-veladoras- veneran -la-
santa-muerte (11.03.2018).

[16] ASOCIACIÓN INTERNACIONAL DE


EXORCISTAS, Directrices para el Ministerio
del Exorcismo a la luz del ritual actual,
Edizioni Messaggero, Padua 2019, n. 59-65
[17] Norberto RIVERA CARRERA, Directorio y
normas para la pastoral de exorcismos y
oraciones de liberación y sanación en la
arquidiócesis de México, Arquidiócesis
Primada de México, México 2019, p. 8.
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