Está en la página 1de 7

 Jesús de Nazareth I

 “Existe una voluntad de Dios con nosotros y para


nosotros, que debe convertirse en el criterio
(Norma para conocer la verdad. Juicio o
discernimiento) de nuestro querer y de nuestro
ser. Ahí donde se cumple la voluntad de Dios, ahí
está el Cielo, PORQUE LA ESENCIA DEL CIELO ES
SER UNA SOLA COSA CON LA VOLUNTAD DE
DIOS”.
 DEUS CARITAS EST”
En el n. 17 dice significativamente:

 El reconocimiento del Dios viviente es un camino hacia el


amor, y el sí de nuestra voluntad a la Suya une
inteligencia, voluntad y sentimiento en el acto totalizador
del amor.
La historia de amor entre Dios y el hombre consiste
precisamente en el hecho que esta COMUNIÓN DE
VOLUNTADES CRECE EN COMUNIÓN DE
PENSAMIENTOS Y DE SENTIMIENTOS, y así, nuestro
querer y la Voluntad de Dios van coincidiendo cada vez más:
LA VOLUNTAD DE DIOS YA NO ES PARA MÍ UNA
VOLUNTAD EXTRAÑA, QUE LOS MANDAMIENTOS ME
IMPONEN DESDE FUERA, SINO QUE ES MI MISMA
VOLUNTAD, conforme a la experiencia que, de hecho, Dios
me es más íntimo que yo mismo.
 Miércoles 29 de Junio de 2011

 “La amistad no es solamente conocimiento, es sobre todo


comunión del deseo. Significa que mi voluntad crece hacia el «sí»
de la adhesión a la suya. En efecto, su Voluntad no es para mí una
Voluntad externa y extraña, a la que me doblego más o menos de
buena gana. No, en la amistad mi voluntad se une a la suya a
medida que va creciendo esta amistad; SU VOLUNTAD SE
, Y JUSTO ASÍ LLEGO A
CONVIERTE EN LA MÍA

SER YO MISMO”.
 “Pero la tercera expresión es la decisiva,
aquélla en la que la voluntad humana se
adhiere plenamente a la Voluntad Divina.
(...) JESÚS NOS DICE QUE SÓLO
CONFORMANDO LA PROPIA VOLUNTAD
CON LA VOLUNTAD DIVINA, EL SER
HUMANO ALCANZA SU VERDADERA
ALTURA, SE HACE DIVINO'. Y es eso lo que
hace en Getsemaní: transfiriendo la
voluntad humana en la Voluntad Divina
NACE EL VERDADERO HOMBRE y somos
redimidos".
 Audiencia 2 de febrero 2012
 CIC 295. Creemos que Dios creó el mundo según su sabiduría (cf. Sb
9,9). Éste no es producto de una necesidad cualquiera, de un destino
ciego o del azar. Creemos que procede de la voluntad libre de Dios que
ha querido hacer participar a las criaturas de su Ser, de su sabiduría y
de su bondad: “Porque tú has creado todas las cosas; por tu voluntad lo
que no existía fue creado” (Ap 4,11). “¡Cuán numerosas son tus obras,
Señor! Todas las has hecho con sabiduría” (Sal 104,24 “Bueno es el
Señor para con todos, y sus ternuras sobre todas sus obras” (Sal 145,9).

 375: La Iglesia enseña que nuestros primeros padres fueron


constituidos en un estado «de santidad y de justicia original» Esta
gracia de la santidad original era una «participación de la Vida Divina»

 460 dice: «El Verbo se encarnó para hacernos partícipes de la


“Naturaleza Divina” Porque tal es la razón por la que el Verbo se hizo
hombre, y el Hijo de Dios, hijo del hombre, para que el hombre al
entrar en comunión con el Verbo y al recibir así la filiación divina, se
convirtiera en hijo de Dios. (S. Irineo) Porque el Hijo de Dios se hizo
hombre para hacernos dios. (S. Atanasio) El Hijo unigénito de Dios,
queriendo hacernos partícipes de su Divinidad, asumió nuestra
naturaleza, para que, habiéndose hecho hombre, hiciera dioses a los
hombres» (Sto. Tomás)
 521, el mismo Catecismo dice: «Todo lo que Cristo vivió hace que
podamos vivirlo en Él y que Él lo viva en nosotros. “El Hijo de Dios con
su encarnación se ha unido en cierto modo con todo hombre” (GS
22,2). Estamos llamados a no ser más que una sola cosa con Él; nos
hace comulgar en cuanto miembros de su Cuerpo en lo que Él vivió en
su carne por nosotros y como modelo nuestro» Debemos continuar y
cumplir en nosotros los estados y misterios de Jesús, y pedirle que los
realice y lleve a plenitud en nosotros y en toda su Iglesia. Porque el
Hijo de Dios tiene el designio de hacer participar y de extender y
continuar sus misterios en nosotros y en toda su Iglesia por las gracias
que Él quiere comunicarnos y por los efectos que quiere obrar en
nosotros gracias a estos misterios. Y por este medio quiere cumplirlos
en nosotros.
 759. “El Padre eterno creó el mundo por una decisión totalmente libre
y misteriosa de su sabiduría y bondad. Decidió elevar a los hombres a
la participación de la Vida Divina” a la cual llama a todos los hombres
en su Hijo: “Dispuso convocar a los creyentes en Cristo en la santa
Iglesia”.
 704. “En cuanto al hombre, Dios lo hizo y dibujó sobre la carne
moldeada su propia forma, de modo que incluso lo que fuese visible
llevase la forma divina” (San Ireneo, dem. 11).
Luisa 29-31
 “…La creación del hombre fue el centro donde nuestra Divinidad
concentraba todos los bienes que debían surgir en la criatura,
poníamos en ella Vida Divina y Voluntad Divina, vida humana y
voluntad humana; la vida humana debía servirnos de habitación, y las
dos Voluntades fundidas juntas debían hacer vida en común, con sumo
acuerdo, más bien la voluntad humana debía tomar de la nuestra para
formar sus actos, y la nuestra debía estar en acto continuo de dar de
lo suyo para hacer que la voluntad humana quedase modelada y toda
uniformada en la Divina Voluntad.

También podría gustarte