Está en la página 1de 3

DEVOCIONAL: Romanos 8:12-27 | Fortaleza de Dios

para nuestra debilidad

PUNTO DE PARTIDA:

El pecado nunca nos dio nada bueno, éste sólo conduce a la tristeza y además no le
debemos nada. Si debemos algo, lo debemos al Espíritu quien nos dio vida
(Ro.8:13).

Tener vida significa que tenemos la guía de Dios (Ro.8:14) y una relación especial
con Él (Ro.8:15). Nos da la seguridad de ser sus hijos y por ende también herederos
suyos. Sin embargo, muchos creyentes están desanimados y viven como si fueran
huérfanos y mendigos espirituales.
SOBRE LA MARCHA:

¿Cómo se ajusta esta verdad a nuestras vidas cotidianas? Podemos enfrentar la vida
con esperanza sabiendo que lo mejor siempre está por venir (Ro.8:16-17). Pablo
nos muestra algunas de las bendiciones que recibimos de Dios para ayudarnos en
este propósito:

1. La guía del Espíritu de Dios. (Ro.8:14)

2. La gracia de clamar a Dios como hijo a Padre. (Ro.8:15-16)

3. La esperanza de una gloria superior a nuestros sufrimientos presentes. (Ro.8:18-

21)

4. La capacidad para soportar padeciendo mientras aguardamos al Señor.

(Ro.8:22-25)

5. La ayuda del Espíritu en nuestra debilidad para orar como conviene. (Ro.8:26)

6. El Espíritu mismo intercede por nosotros llevándonos a la voluntad de Dios.

(Ro.8:27)

ALCANZANDO LA META:

Las dificultades de la vida querrán empujarte a desanimarte o a pecar. Serás


tentado a satisfacer tu carne como lo hacías antes de ser salvo.

La esperanza, en cambio, te ayuda a ver lo que no se ve, aquella bendición que


vendrá como resultado de nuestra fe (v. 24-25). Recuerda, somos deudores pero no
a la carne.
Vivimos en un mundo corrompido por el pecado. Enfrentémoslo en el poder del
Espíritu.

¿Qué presiones te debilitan y te llevan a pecar? ¿A qué hábitos pecaminosos


vuelves cuando estas desanimado? Oras con la ayuda del Espíritu (v.26-27) y
aprende versículos que te den esperanza en tiempos de adversidad.

UN REFRESQUITO:

2 Corintios 4:16-18 | “Por tanto, no desmayamos; antes aunque este


nuestro hombre exterior se va desgastando, el interior no obstante
se renueva de día en día. Porque esta leve tribulación momentánea
produce en nosotros un cada vez más excelente y eterno peso de
gloria; no mirando nosotros las cosas que se ven, sino las que no se
ven; pues las cosas que se ven son temporales, pero las que no se ven
son eternas.”

Colosenses 1:11 | "fortalecidos con todo poder, conforme a la


potencia de su gloria, para toda paciencia y longanimidad"

Efesios 6:18 | orando en todo tiempo con toda oración y súplica en el


Espíritu, y velando en ello con toda perseverancia y súplica por
todos los santos;"

2 Timoteo 1:7 | "Porque no nos ha dado Dios espíritu de


cobardía, sino de poder, de amor y de dominio propio."

También podría gustarte