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UNIVERSIDAD TÉCNICA DE MACHALA

FACULTAD DE CIENCIAS SOCIALES

CARRERA DE DERECHO

MEDICINA LEGAL, PSICOLOGÍA JURÍDICA

Y PSIQUIATRÍA FORENSE

TOXICOLOGÍA FORENSE

INTEGRANTES

KAREN LISBETH SANCHEZ ROMERO

BYRON SEBASTIAN SANMARTIN ALVAREZ

LASDY GRETHEL TORRES ZAPATA

ANGIE YAMILETH YAGUAL GUAMAN

GISSELLA STEFANY VILLAMAR TOALA

DOCENTE RESPONSABLE:

Dr. ADRIAN ENRIQUE VELEZ CASTILLO

CURSO: CUARTO SEMESTRE ‘’B’’.

PERIODO LECTIVO:

2023 - 2024

MACHALA – EL ORO – ECUADOR


Toxicologia

Desde el punto de vista etimológico, la palabra Toxicología deriva de dos palabras griegas:
toxikon (veneno) y logos (tratado), que quieren decir <<Ciencia de los venenos». No obstante,
si bien en los primeros momentos de su organización como Ciencia fuera definida de este modo
así lo hizo Orfila- bien pronto quedaba claro que tal definición resultaba bastante incompleta,
puesto que el objeto de esta Ciencia se extiende a un campo mucho más amplio, abarcando
también el cuadro clínico provocado por la ingestión del compuesto tóxico.

En consecuencia, han aparecido diversas definiciones, unas más exactas que otras, entre las
que podemos destacar las siguientes:

- «Ciencia que se ocupa de las intoxicaciones y de las sustancias que las provocan». De este
modo, la atención se orienta hacia el estudio de los efectos nocivos que una sustancia química
es capaz de provocar sobre un tejido o sobre un mecanismo biológico.

Ciencia centrada en el estudio, descripción y comprensión de las interrelaciones entre las


sustancias químicas y los organismos, así como de sus efectos sobre los seres vivos».

Toxicologia Forense

Es la rama de la toxicología que estudia los efectos de estas sustancias en los seres vivos, así
como las alteraciones físicas específicas que causan en el organismo, los mecanismos de
producción, las lesiones que provocan, el proceso metabólico que siguen y la identificación,
determinación y tratamiento de los síndromes causados.

¿Cómo aplican la toxicología forense los patólogos?

1. Métodos de Detección en Toxicología Forense

Los patólogos utilizan una variedad de técnicas avanzadas para detectar y cuantificar sustancias
tóxicas en el cuerpo humano. Estas incluyen:

● Cromatografía y Espectrometría de Masas: Técnicas poderosas para identificar y


medir compuestos químicos en tejidos y fluidos corporales.
● Inmunoensayos: Métodos rápidos para el cribado de drogas y venenos comunes,
aunque menos específicos que los análisis cromatográficos.
● Microscopía y Análisis Histológico: Para identificar daños a nivel celular causados
por toxinas.

2. Tipos de Sustancias Tóxicas

Los patólogos forenses se encuentran con una amplia gama de sustancias tóxicas, incluyendo:
● Drogas Ilegales y Farmacéuticas: Desde opiáceos hasta antidepresivos, su presencia y
niveles pueden indicar sobredosis o envenenamiento.
● Venenos Ambientales e Industriales: Como el monóxido de carbono, plomo y otros
metales pesados, cuyo análisis es crucial en casos de envenenamiento accidental o
intencional.
● Toxinas Naturales: Como las encontradas en ciertas plantas y animales, relevantes en
casos de envenenamiento alimentario o asesinatos.

3. Implicaciones Legales

La toxicología forense desempeña un papel crucial en el ámbito legal:

● Determinación de la Causa de Muerte: Ayuda a establecer si una muerte fue


accidental, suicida o homicida.
● Pruebas en Casos Criminales: Los hallazgos toxicológicos pueden ser evidencia clave
en juicios por asesinato, DUI, y otros delitos relacionados con drogas.
● Cuestiones de Responsabilidad: En casos de negligencia médica o industrial, la
toxicología forense puede identificar sustancias responsables de daños a la salud.

4. Desafíos Éticos y Limitaciones

Los patólogos enfrentan varios desafíos éticos y limitaciones en la toxicología forense:

● Consentimiento y Privacidad: La ética en torno a la realización de pruebas


toxicológicas, especialmente en personas fallecidas.
● Interpretación de Resultados: Diferenciar entre exposición incidental y causalidad
directa en la muerte.
● Límites de la Ciencia: La constante evolución de las drogas sintéticas y las limitaciones
en la detección de nuevas sustancias.

Clasificación de los Agentes Tóxicos:

Origen

Sin duda, la Toxicología puede ser considerada como una disciplina científica que ha tenido
un desarrollo relativamente reciente, sin embargo, la observación de los efectos dañinos de
algunos productos naturales llevada a cabo por el ser humano, tiene sus raíces en los tiempos
prehistóricos.

Desde los mismos comienzos de sus vidas sobre la tierra, los seres humanos tuvieron necesidad
de buscar materias con las que alimentarse. En esta constan- te búsqueda de alimentos
observaron cómo ciertos frutos, bayas y raíces no sólo carecían de propiedades nutritivas, sino
que daban lugar a efectos nocivos. De este modo, fueron aprendiendo a través de la propia
experiencia cómo unos pro- ductos eran de gran utilidad en cuanto integrantes de la dieta
alimenticia, mientras que otros podían provocar graves trastornos al ser ingeridos que, incluso,
podían conducir a la muerte.

A su vez, fue comprobada la peligrosidad de algunas mordeduras de insectos y reptiles. Y es


posible que, en sus intentos de aplicar medios curativos para las enfermedades y lesiones, se
experimentaran los resultados dañinos provocados por algunas plantas y minerales, también en
personas saludables.

Probablemente, junto a la cuestión primordial de la búsqueda de alimentos, el descubrimiento


de la existencia de productos naturales con efectos perniciosos debió excitar la imaginación de
algunas personas, que tuvieron la ocurrencia de aplicar tales agentes a la caza y a la pesca. En
consecuencia, algunos pueblos primitivos consiguieron la enorme ventaja de una mayor
facilidad para obtener diversas fuentes alimenticias.

Los primeros datos sobre hechos toxicológicos se remontan prácticamente a la prehistoria


humana, donde los pueblos cazadores usaban los venenos contenidos en animales y plantas
para matar a las piezas de caza, fuente principal de materia alimenticia. Por consiguiente, el
conocimiento de la existencia de los venenos y de sus efectos nocivos se puede situar en la
primera etapa del ser humano sobre la tierra, con una expansión que ha corrido paralela con la
misma evolución de sus condiciones de vida.

No obstante, desde un punto de vista puramente científico, en el desarrollo histórico de la


ciencia toxicológica cabe considerar dos etapas claramente diferenciadas, tanto por sus
objetivos como por sus planteamientos científicos:

1. La etapa primitiva: muy prolongada en el tiempo, ha mantenido sus características


primitivas vinculadas al uso de los venenos para la caza, la guerra o envenenamientos, unas
veces legales y otras criminales, siempre aureolado de un ambiente de misterio. Durante
siglos, sus conocimientos han tenido unos fundamentos totalmente empíricos, porque hasta
finales del siglo XVIII les ha faltado la base química y biológica necesaria para interpretar
el fenómeno tóxico. Su rasgo esencial lo constituye la observación y registro del hecho
tóxico de modo simple, sin abordar su verdadero significado, al carecer para ello de unas
bases científicas adecuadas.

2. La etapa moderna: arranca de los comienzos del siglo XIX, momento histórico en el
que tiene lugar su organización como ciencia, es decir, en cuanto todo el conjunto de
conocimientos toxicológicos se agrupa de una manera sistematizada. Como rasgo
característico se puede señalar la preocupaciónpor interpretar los mecanismos responsables
del suceso tóxico, contando con el apoyo de los nuevos conocimientos aportados por los
avances de otras ciencias experimentales. De acuerdo con la opinión más generalizada,
puede afirmarse que la Toxicología moderna tiene su inicio con los brillantes trabajos del
español Orfila.
Al ser necesario un conocimiento apropiado de los efectos metabólicos y bioquímicos
provocados por las sustancias químicas en uso, que sirva de base para las recomendaciones de
inocuidad de su empleo, se ha forzado el perfeccionamiento de los métodos de análisis
químicos, bioquímicos y fisiológicos, alcanzándose una gran sensibilidad. Así, los progresos
en Biología molecular, la aplicación del microscopio electrónico y las técnicas de histoquímica,
el manejo de cultivos celulares, la mejora del control genético de los animales de
experimentación, etc., ha favorecido de modo muy notable la investigación toxicológica en el
último tercio del siglo XX.

En tiempos pasados, la Toxicología hacía especial referencia a los efectos agudos del tóxico,
que se investigaban mediante ensayos con animales de laboratorio. Sin embargo, los cambios
sociales, anteriormente apuntados, dieron lugar a un desplazamiento de la atención del
toxicólogo hacia aquellos efectos.

La Toxicología puede ser considerada como aquella parte de las Ciencias Experimentales
relacionadas con el ser vivo, que estudia las posibles acciones nocivas ejercidas por las
numerosas sustancias químicas capaces de incidir sobre los sistemas biológicos. Desde que se
estructura como Ciencia, a raíz de los trabajos de Orfila, se ha ocupado de poner de manifiesto
las interacciones químicas y biológicas que ocurren entre los seres vivos y los xenobióticos o
sustancias químicas ajenas a sus organismos y que se traducen en fenómenos perjudiciales para
la salud.

La consecución de este objetivo requiere alcanzar una profunda comprensión de los


mecanismos bioquímicos y fisiológicos que rigen dichas interacciones, con el fin de disponer
de un bagaje suficiente de conocimientos como para detectar, tratar y prevenir cualquier daño
tóxico posible. En última instancia, el objetivo primordial de la toxicología tiende hacia la
protección de la vida frente a cualquier factor externo que la pueda dañar.

Toxicología forense

La toxicología es una ciencia que identifica, estudia y describe, la dosis, la naturaleza, la


incidencia, la severidad, la reversibilidad y, generalmente, los mecanismos de los efectos
tóxicos que producen los xenobióticos que dañan el organismo. La toxicología también estudia
los efectos nocivos de los agentes químicos, biológicos y de los agentes físicos en los sistemas
biológicos y que establece, además, la magnitud del daño en función de la exposición de los
organismos vivos a previos agentes, buscando a su vez identificar, prevenir y tratar las
enfermedades derivadas de dichos efectos.

La toxicología se encarga de analizar los efectos tóxicos de determinados elementos sobre el


organismo humano y sobre otros organismos vivos en general, establece que un producto o
sustancia es tóxica cuando causa algún tipo de daño tanto superficial como profundo. La
Toxicología forense, la cual se basa en el conocimiento de la toxicología apoya a la patología
y medicina forense para establecer las causas de muerte; cualquier paciente que fallezca o no,
sometido a atención médica en
El curso de una intoxicación, genera obligaciones desde el punto de vista médico legal, por lo
cual la medicina forense interviene en todos los casos en los que se requiere de un peritaje
médico para deslindar responsabilidades legales. El objetivo de aplicar un estudio toxicológico
es realizar una investigación documentada donde se recopila información ya existente
relacionada con el tema de toxicología y su relación con la medicina forense.

La tarea de la toxicología es analizar los efectos tóxicos de ciertos elementos sobre el cuerpo
humano y otros organismos vivos en general, y afirmar que un producto o sustancia es
venenoso si causa algún tipo de daño superficial y profundo. La toxicología forense, basada en
los conocimientos de la toxicología, apoya a la patología y a las ciencias forenses en la
determinación de la causa de la muerte; cada paciente, moribundo o no, que recibe atención
médica El curso de intoxicación genera obligaciones desde el punto de vista médico legal, por
lo que la Medicina Forense interviene en todos los casos en que se necesita la opinión de un
perito médico para definir la responsabilidad legal. El propósito de realizar estudios de
toxicología es realizar un estudio documentado que recopile información existente sobre la
toxicología y su relación con la medicina forense.

Su Uso

La Toxicología forense, esta se fundamenta gracias al raciocinio de la Toxicología la cual


ampara a la patología y medicina forense para dar a conocer cuáles fueron las causas de su
fallecimiento; cualquier familiar que fallezca o no, deberá ser sometido a la asistencia médica
en el transcurso de un envenenamiento, produce responsabilidad desde la perspectiva del
médico legal y es así que medicina forense en lo absoluto forma parte de todos los casos en los
que se solicita de un examen médico para establecer con las obligaciones dentro del marco
legal. Su finalidad es asignar que se realice un análisis toxicológico, del tema de Toxicología
y el vínculo que mantiene con la medicina forense y se obtenga datos de suma importancia.

Comenzaremos diciendo que la toxicología es el estudio del impacto negativo de los


componentes físicas y material químico en la humanidad y los animales. Su terminología,
deriva del latín "toxicum" (veneno) y del griego "tóxico" que significa "flecha envenenada", es
decir estas producen un efecto letal se dan que en las flechas introducen sustancias dañinas o
perjudiciales lo cual acaban con su vida. La toxicología forense establece sustancias
psicoactivas con el propósito de colaborar en las indagaciones pertinentes, y participa en las
debidas investigaciones criminalistas además así determinar la causa de su deceso,
envenenamiento, adicción entre otros. Descubrir y calcular estupefacientes de exceso
(marihuana, cocaína, heroína u otras) en muestras de material sangre, orina, ADN, ARN,
tejidos u otros fluidos biológicos y elementos irreconocibles los cuales son hallados
encontradas en el lugar en donde se cometió el crimen. La investigación de los materiales
tóxicos es muy antigua como la especie humana, y es así que Paracelso fue quien estableció
los principios básicos de la Toxicología, además se estudia sistemáticamente las toxinas y las
bases toxicocinética, por parte de Mateo Buenaventura Orfila además si vemos desde otro
punto de vista la Toxicología como doctrina que efectivamente en el siglo XX no está siendo
considerada como ciencia a tal forma como corresponde al manejo exagerado insecticidas y
sus consecuencias adversas en el cual están relacionadas con la salud de la sociedad.

Mientras tanto, la toxicología forense ha ido evolucionado y de alguna u otra manera esta va
de la mano con medicina forense, sin embargo, esta aún no se encuentra ubicada aun como
especialidad científica.

La Toxicología forense como especialidad de la medicina forense Rama de la ciencia forense


la cual analiza varios puntos tóxicos, los cuales están vinculados con actos delictivos y
especificar la correlación que existe entre el motivo de su deceso y las dificultades que se
obtuvo. En otras palabras, podemos establecer aquellas sustancias que se encuentran presentes,
como perjudicaría aquella herida o persona. Su trabajo es descubrir qué sustancias tóxicas están
presentes, sus concentraciones y efectos, y luego compararlos con la información de las pruebas
criminológicas y de toxicología crónica. Como ocurre con cualquier otra enfermedad, la
investigación de una muerte por intoxicación debe realizarse desde la perspectiva del
diagnóstico del paciente. Se recomienda comenzar con una historia clínica normal e indagar e
investigar más acerca de datos relevantes para ver el tiempo de duración de la intoxicación. Si
el paciente muere o se sospecha de envenenamiento, la situación debe investigarse claramente.
Si la víctima declaró intención suicida, si hubo intento de suicidio, si hubo testigos que
ingirieron algún veneno y otros detalles relevantes; de igual manera, si existen otros casos
similares o muertes, se deben considerar como intoxicación alimentaria, ambiental u
ocupacional. Obtener e interpretar los resultados de las pruebas toxicológicas es la piedra
angular de las investigaciones de intoxicaciones. El objetivo de un patólogo forense es
recolectar suficientes muestras de diferentes órganos o fluidos corporales. Vargas sugirió esta
lista de muestra y números apropiados para un estudio exitoso.

Su estado fisico

1. Estado liquido solido


2. Estado fisico solido
3. Estado fisico gaseoso

Órgano Blanco

Se sabe que es el lugar del cuerpo donde las toxinas hacen su mal trabajo. En la mayoría de los
casos, este órgano puede no contener las sustancias más tóxicas (por ejemplo, compuestos
orgánicos que actúan en el sistema nervioso, y aparecen acumulando mayores concentraciones
en el tejido adiposo), pero las zonas más afectadas son el hígado, los riñones, la médula ósea.
y células sanguíneas. Neurotóxicos: actúan sobre el tejido nervioso, ya sean neuronas o glía.
Los ejemplos incluyen monóxido de carbono, mercurio, diversos venenos para animales y
alcohol. Actúa sobre los canales de sodio bloqueándolos y deteniendo la actividad, o
bloqueando la liberación de neurotransmisores en la placa neuromuscular, provocando
parálisis.
Cardiotóxico: se trata de sustancias que causen daño o alteraciones al músculo cardíaco, así
como los que afectan la función electrofi siológica y el ritmo cardiaco. Incluyen ciertos
medicamentos quimioterapéuticos, como adriamicina, metales pesados o medicamentos
cardiacos incorrectamente administrados, como la estrofantina.

Hepatotóxico: daña el hígado. Este órgano limpia al cuerpo de los xenobióticos, a expensas de
daño a sí mismo. Como el hígado recibe gran parte de su circulación desde las venas portales,
la mayoría de los tóxicos ingeridos pasan de manera íntegra hacia la circulación hepática. Por
ello existen más de 500 hepatotoxinas, gran parte de ellas, medicamentos. Una de las razones
por las que más medicamentos se retiran del mercado es la hepatotoxicidad; existen
medicamentos que son aún más peligrosos, ya que no dependen de la dosis y la temporalidad
para ejercer un daño hepático. Este daño se manifiesta de diferentes maneras, sea como zona
de necrosis delimitada, infi ltración de células infl amatorias, colestasis con cirrosis biliar,
esteatosis o vasculitis.

Nefrotóxico: daña los riñones. Puede ser por daño tubular directo o a diferentes estructuras
colectoras o filtradoras, como los glomérulos o los túbulos. Estos tóxicos dañan también los
delicados sistemas vasculares, disminuyendo su funcionamiento.

Ototóxico: daña cualquier parte del oído, sea la cóclea, nervio auditivo o sistema vestibular. La
mayoría de los ototóxicos son medicamentos, como los aminoglucósidos, macrólidos y
furosemida, o quimioterapéuticos como el cisplatino. La ototoxicidad es reversible o
irreversible; el tratamiento consiste en dejar de usar el medicamento que causa la toxicidad

Órgano blanco de la metástasis, estimulan la proliferación y migración de células tumorales


mamarias murinas in vitro, así como el crecimiento tumoral y metástasis in vivo. Se propone
que durante los estadios tempranos de la enfermedad se producen antígenos que inducen a la
producción de anticuerpos contra los receptores de membranas del órgano blanco y estos a su
vez alteran la morfología.

En medicina legal, el término "órgano blanco" se refiere al órgano o tejido del cuerpo que es
más sensible a los efectos tóxicos de un agente químico determinado. No todos los compuestos
tóxicos afectan de la misma manera a todos los órganos; algunos tienen afinidad por ciertos
órganos o tejidos. El órgano blanco es donde la toxicidad es más fuerte. Por ejemplo, si una
sustancia química tiene un efecto tóxico primario en el hígado, el hígado se considera un órgano
objetivo de la sustancia. Asimismo, si otra sustancia afecta principalmente a los pulmones, el
órgano diana son los pulmones. La identificación del órgano blanco es crucial para comprender
los efectos tóxicos de una sustancia y desarrollar estrategias preventivas y de tratamiento.
Además, la toxicología no sólo se centra en órganos individuales, sino también en sistemas
corporales específicos, como el sistema nervioso, el sistema cardiovascular o el sistema
respiratorio, dependiendo de la naturaleza de la sustancia y sus efectos. Esto ayuda a los
toxicólogos a entender cómo una sustancia puede causar daño y a qué órgano o tejido se dirige
principalmente.
Lugar de accion

1. Laboratorios Forenses: Centros de Análisis y Investigación

Los laboratorios forenses son el epicentro de la toxicología forense. Equipados con tecnología
de punta, estos laboratorios realizan análisis detallados y especializados de muestras biológicas
y químicas.

● Técnicas Avanzadas: Utilizan métodos como cromatografía, espectrometría de masas,


y pruebas inmunológicas para identificar y cuantificar sustancias tóxicas.
● Análisis de Muestras Diversas: Incluyen sangre, orina, cabello, tejidos, y otros fluidos
corporales.
● Desarrollo Continuo: Evolución constante en técnicas y equipamiento para adaptarse
a nuevos retos, como la aparición de drogas sintéticas y sustancias químicas
emergentes.

2. Escenas del Crimen y Autopsias: Recolección y Análisis de Evidencia

La toxicología forense juega un papel crucial en las escenas del crimen y durante las autopsias,
proporcionando información vital sobre la causa de la muerte y las circunstancias que la rodean.

Recolección de Evidencia en la Escena: Participación activa en la recolección de muestras


que pueden contener toxinas.

Colaboración en Autopsias: Trabajo conjunto con patólogos para determinar la influencia de


sustancias tóxicas en la muerte.

Reconstrucción de Eventos: Ayuda a esclarecer el cronograma y las circunstancias de una


muerte sospechosa o criminal.

3. Sistema Legal y Judicial: Un Pilar en la Resolución de Casos

Los hallazgos de la toxicología forense son fundamentales en el sistema legal y judicial,


aportando pruebas clave en una amplia gama de casos.

Testimonio Experto en Juicios: Los toxicólogos actúan como testigos expertos, interpretando
los resultados de las pruebas toxicológicas.

Influencia en Decisiones Legales: Los informes toxicológicos pueden determinar la dirección


de un caso, influenciando en juicios por asesinato, casos de DUI, y otros delitos relacionados
con sustancias tóxicas.

4. Impacto en la Comunidad y la Salud Pública

La toxicología forense trasciende el ámbito legal, impactando significativamente en la salud


pública y la comunidad.
Alertas de Salud Pública: Generación de alertas sobre drogas peligrosas, contaminantes
ambientales, y riesgos asociados a sustancias químicas.

Educación y Prevención: Contribuye a campañas educativas sobre los peligros de ciertas


sustancias y promueve la prevención.

Investigación Continua: Avanza en el conocimiento sobre los efectos a largo plazo de las
toxinas y mejora los métodos de detección y tratamiento.

5. Desafíos y Futuro de la Toxicología Forense

La toxicología forense enfrenta desafíos continuos, como la aparición de nuevas sustancias y


métodos de intoxicación, lo que demanda una evolución constante en sus prácticas.

Adaptación Tecnológica y Metodológica: Necesidad de actualizar constantemente técnicas y


equipamientos.

Interdisciplinariedad: Colaboración con otras disciplinas como la genética, informática y


química para desarrollar métodos de análisis más sofisticados.

Formación y Capacitación Continua: Importancia de la educación y formación de nuevos


toxicólogos para enfrentar los retos futuros.

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