SITUACIÓN: manejo de mi primer paciente intoxicado

A mediados de 2018 después de graduarme de la universidad y tuve que atender mi

primera urgencia de paciente felino intoxicado por insecticidas. Aquel paciente
contaba con solo 20 días de vida y era muy complicado sacar adelante un cachorro
con ese grado de intoxicación ya que poner una vía endovenosa es. Casi imposible
por el tamaño me sentí muy asustada porque de mi reacción dependía su vida. El
paciente llevo con pupila dilatada, hipersalivacion, hipotermia , no tenía control
de esfinteres, bradicarda y taquipnea.
Bamby la Gatica estaba muy mal después del examen clínico mi pronóstico era malo.
Empecé a realizar las maniobras para estabilizar sus signos vitales, empecé a
analizar los recursos que tenía para ver qué podía hacer para sacarla de el estado
crítico en el que llego.
Ya que no podía realizar la maniobra de canalización endovenosa recurrí a otra que
había leído en la Universidad pero jamás la había practicado. A pesar de que tenía
mucho miedo de que las cosas salieran mal me arriesgué y lo hice realicé pasó de
líquidos por vía subcutánea y empecé a poner los medicamentos necesarios para
manejar la situación, las dos primeras horas Bamby empeoró y ya me estaba dando por
vencida pero, seguí perseverando y haciendo todo lo que tenía en mis manos por
mantenerla viva. Esta situación no ocurrió en la verterinaria me la llevaron a mi
casa cuando me cogieran por sorpresa y tuve que arreglármelas con los medicamentos
y los insumos que tenía en mi casa. ( recursos muy limitados)
Después de pasar 4 horas Bamby empezó a moverse mejor, si temperatura se empezó a
regular, en general sus signos vitales se empezaron a estabilizar y se recuperó
rápidamente a tal punto que pasadas 24 horas ya estaba como si nada. jugando y
comiendo muy feliz y comportándose como una gatita normal de su edad.

Nunca me rendí y siempre di lo mejor de mi para solucionar la situación, a pesar

del miedo, logre superarlos y fui reciliente e ingeniosa con los recursos limitados
que tenía. Eso me hizo sentir poderosa y ver a pesar de que las cosas podían salir
muy mal, nunca me rendí y seguí intentando salvar su vida aunque todo se estaba
dando para que Bamby no tuviera oportunidad de vivir por la condición de su edad y
el grado de intoxicación con el cual llego. Practicante logro llegar a un estado
comatoso del cual logró salir y ahora bamby tiene 5 años y lleva una vida normal y
muy feliz.