1.- El contrato requiere para su perfección.

Según nuestro Código Civil, aprobado por Real Decreto de 24 de julio de 1889, y mas
concretamente en lo concerniente a los requisitos esenciales para la validez de los
contratos, dentro del Título II “de los contratos”, nos encontramos con el artículo
1261, que nos tasa literalmente su disposición general, regulando que no hay contrato
sino cuando concurren los requisitos siguientes:
1.º Consentimiento de los contratantes.
2.º Objeto cierto que sea materia del contrato.
3.º Causa de la obligación que se establezca.
Así para el perfeccionamiento del contrato se requiere la concurrencia del
consentimiento, el objeto y la cusa.

2.- Diferencia entre el derecho de crédito y el derecho real. A

En primer lugar, debemos decir que los derechos reales son aquellos que regulan los
diversos grados de dominio que las personas pueden ejercer sobre los bienes. El
significado jurídico de la palabra real tiene su origen en el término latino res, que
quiere decir cosa, así en contrapartida el derecho de crédito vincula a un concreto
acreedor con un determinado deudor y de ahí que se hable de su eficacia relativa o
eficacia inter partes, además cuando se ejercita un derecho de crédito, si su ejercicio
es eficaz, se produce su extinción.

3.- El contrato de compraventa es título y medio suficiente para la transmisión del

dominio. C
Debemos indicar que el contrato de compraventa se recoge en el artículo 1445 de
nuestro Código Civil, tratándolo que aquél por que el vendedor se obliga a entregar
una cosa determinada al comprador y este se obliga a pagar por ella un precio cierto
en dinero o signo que lo represente. Así la compraventa le es aplicable todos los
contratos traslativos del dominio, lo que supone que le entrega o tradición es el medio
jurídico para transmitir al comprador la propiedad de la cosa o derecho real sobre ella
regulado en los artículos 609 y 1095 del Código Civil, así la entrega es el acto de
transferir la posesión jurídica de la cosa que se entenderá entregada cuando se ponga
en poder y en posesión del vendedor, conforme al artículo 1462 del Código Civil.

Así debemos detallar la sentencia de la Audiencia Provincial de Albacete, Sección 2ª de

fecha 15 de marzo de 1996, en la que se estima que para la adquisición dominical por
contrato de compraventa no basta la mera existencia o perfección del negocio jurídico
contractual (título), sino que el mismo ha de ser inexcusablemente acompañado o
seguido de la tradición o entrega de la cosa (modo), no lo es menos que este segundo
requisito -de entrega-, constitutivo o consumador de la transmisión dominical, se
entiende cumplido, no sólo cuando se produce una entrega física o material de la cosa

1
(tradición real), sino también cuando medien cualesquiera otros actos jurídicos que de
manera patente entrañen la misma significación de entrega, en virtud del progresivo
proceso de espiritualización experimentado por las formas de tradición.

4.- El contrato de arrendamiento como título de tenencia de una cosa. C

Nuestro Código Civil, regula el contrato de arrendamiento conforme al artículo,

estableciendo que el arrendamiento puede ser de cosas, obras o servicios,
concretando en el artículo 1543 el arrendamiento de cosa, obligando a una parta a dar
a la otra el goce o uso de la cosa poro tiempo determinado y bajo precio cierto, dando
lugar a obligaciones recíprocas en el que el arrendador se obliga a ceder el goce o uso
de la cosa, y de la otra el arrendatario se obliga a pagar un precio cierto por el uso o
goce. Son de aplicación por tanto el artículo 1124 CC y las reglas especiales que en el
propio Código Civil se prevén.

5.- ¿La donación es un contrato o un mero acto? D

En lo que respecta a la donación, debemos decir que hay que considerar lo expuesto
en el artículo 632 y 633 de nuestro Código Civil, que hace referencia respectivamente
al caso de la donación de una cosa mueble o inmueble y así en lo referente a la cosa
mueble puede hacerse verbal o por escrito, pero requiere la entrega de la cosa donada
en la cosa mueble. Por otra parte, y conforme el artículo 633 antes citado dice que
para que se válida la donación de cosa inmueble, habrá de hacerse en escritura
pública, expresando individualmente los bienes donados y el valor de las cargas que
deba satisfacer el donatario.

6.- ¿La donación es un contrato gratuito y unilateral? D

En primer lugar, comentar que la donación viene recogida en el artículo 618 de nuestro
Código Civil, siendo un acto de liberalidad por el cual una persona dispone
gratuitamente una cosa en favor de otra, y que esta otra lo acepta. Pero esta donación
a una persona y según el artículo 619 del Código Civil, desprende una acción hacia sus
méritos o servicios prestados al donante, siempre que no constituyan deudas exigibles,
o aquella en que se impone al donatario un gravamen inferior al valor de lo donado.
Visto la redacción del artículo 618, es mas que una donación, es un contrato que
genera obligaciones para una de las partes en este caso el donante, siendo un negocio
jurídico bilateral, por lo cual se exige dos parte donante y donatario, aunque se
encuentra dentro de los contratos unilaterales, así se dispone en la Sentencia de la
Sala Primera del Tribunal Supremo, número 519/2006, de fecha 31 de mayo de 2006,
en la que parte de la doctrina “no acepta que la donación se realmente un contrato,
entiendo que la exigencia de consentimiento del donatario que se toma como

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demostración de que estamos ante un contrato se basa en que sin la voluntad de una
persona no se adquieren bienes, pero ello no implica que la donación sea un contrato.

7. La forma en la contratación. B

En primer lugar, decir que hay contrato desde que una persona o varias personas
consienten en obligarse, respecto de otra u otras, a dar alguna cosa o prestar algún
servicio, así viene recogido en el artículo 1254 del Código Civil. Así pues y conforme al
artículo 1261 del Código Civil, en la que se habla de los requisitos esenciales para la
validez de los contratos, se dispone que no hay contrato sino cuando concurren los
siguientes requisitos: Consentimiento de los contratantes, objeto cierto que se materia
del contrato y causa de la obligación que se establezca. Conforme al artículo 1278 del
Código Civil podemos decir que los contratos son obligatorios cualquiera que sea la
forma en que se hayan celebrado, siempre que concurran las condiciones esenciales
referidas en el párrafo anterior para su validez.

8.- Los tipos de contrato de arrendamiento. A

Según nuestro Código Civil en su artículo 1542, el arrendamiento puede ser de cosas, o
de obras o de servicios. Comentar que en la Sección 3ª sobre disposiciones especiales
para los arrendamientos de predios rústicos y en la sección 4ª sobre disposiciones
especiales para el arrendamiento de predios urbanos que si quedan sujetos a lo que
disponga este Código Civil. En nuestro Código Civil y más concretamente el artículo
1545, en el arrendamiento de cosas, una de las partes se obliga a dar a la otra el goce o
uso de una cosa por tiempo determinado y precio cierto y según el artículo 1546 en el
arrendamiento de obras o servicios, una de las partes se obliga a ejecutar una obra o a
prestar a la otra un servicio por precio cierto. Existe dentro de los tipos de
arrendamiento como son las de obra, cosas o servicios una regulación unitaria como
forma de contrato originario del derecho romano, en el que ya existía estas tres
modalidades. A parte de lo que se regula en este Código Civil existe una regulación
especial en materia de arrendamientos tanto rústico como urbanos.

9.- El concurso de la oferta y la aceptación en la contratación electrónica. A

Conforme al artículo 1261 del Código Civil, que define los requisitos esenciales del
contrato y en lo referente al consentimiento de los contratantes, podemos definirla
como la manifestación por el concursado de la oferta y de la aceptación sobre la cosa y
la causa de constituir el contrato, continuando con el mismo artículo en su párrafo
segundo que establece lo que a continuación sigue: “ Hallándose en lugares distintos el
que hizo la oferta y el que la aceptó, hay consentimiento desde que el oferente conoce
la aceptación o desde que, habiéndosela remitido el aceptante, no pueda ignorarla sin
falta a la buena Fe. En tal caso el contrato se presume celebrado en el lugar donde se
hizo la oferta.”, así pues, en un contrato electrónico se entiende que damos nuestro
consentimiento en el momento en que el que vende un bien o un servicio conoce la
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aceptación o, una vez enviado dicha aceptación, sea evidente que lo ha recibido. No
pudiendo ignorarla. A modo de resumen los contratos electrónicos quedan reguladas
por la siguiente normativa.

● Artículos 23 a 29 de la Ley 34/2002, de 11 de julio, de Servicios de la Sociedad

de la Información y de Comercio Electrónico (LSSI). Norma Especial. Esta
normativa permite adaptar la realidad digital a nuestra normativa actual.

● Derecho Supletorio: Código Civil y de Comercio y por las restantes normas

civiles o mercantiles sobre contratos, especial:

o Ley protección de los consumidores y usuarios y de ordenación de la

actividad comercial (en relación con el art. 23.2. 2º Ley 34/2002).

o Ley de condiciones Generales de la Contratación.

10.- La capacidad del menor para contratar. D

Conforme nuestro Código Civil, debemos decir que un contrato puede ser suscrito por
cualquier persona sea legalmente capaz. La capacidad es otro de los requisitos para la
validez del contrato, la capacidad es la aptitud para ser titular de derechos y deberes,
es la aptitud que tiene toda persona para ejercer actos de la vida civil, adquiriendo
derechos y contrayendo obligaciones, ya sea por sí mismo o por autorización y
consentimiento de otra a través del mandato. Así se establece en nuestro Código Civil
que son incapaces de suscribir un contrato: los menores de edad, los interdictos
declarados, sin embargo estos incapaces podrán realizar actos civiles por medio de sus
representantes legales, para finalizar debemos dejar claro que según el artículo 1263
“los menores de edad no emancipados podrán celebrar aquellos contratos que las
leyes les permitan realizar por sí mismos o con asistencia de sus representantes y los
relativos a bienes y servicios de la vida corriente propios de su edad de conformidad
con los usos sociales”