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La inembargabilidad del Estado

Para iniciar, de acuerdo con la sentencia núm. TC-01-2012-0055 del Tribunal Constitucional,
el principio de inembargabilidad del Estado, persigue impedir la indisponibilidad de los
recursos destinados a las entidades públicas. Además, establece que el principio de la
inembargabilidad del Estado, le confiere un trato distinto a los particulares, lo que constituye
una desigualdad razonable, pues con ello se garantiza su adecuado funcionamiento.

En forma de definición, los bienes del Estado son aquellos cuya propiedad pertenece al
Estado y que conforma el uso y goce del mismo; puede ser de carácter público o privado.
Partiendo de esto último, podemos responder estas preguntas; ¿Cuáles bienes del Estado
pueden ser embargados? ¿Por qué no pueden ser embargados los demás bienes?
Respondiendo la primera pregunta; los bienes del Estados que son embargables, son aquellos
que tengan carácter privado, es decir, que sus actividades sean comerciales o empresariales y
no estén fijadas al uso público. Ahora bien, en cuanto la segunda pregunta, los demás bienes
del Estado se clasificarían en uso público, los cuales son inembargables, ya que, estos están
destinados a sólo ser de uso público y si son embargados estarían en contra del orden social y
del derecho de disfrute de los particulares.

El Código Civil establece en sus artículos 538 al 541 los bienes inembargables, entre estos,
las calles a cargo del Estado, ríos, bahías, los bienes sin dueño y los de las personas que
mueran sin herederos o que hayan sido abandonados, fortalezas, entre otros.

Es necesario saber que, la Ley 86-11 sobre Inembargabilidad de los Fondos Públicos prohíbe
a los intermediarios financieros bloquear las cuentas de las entidades públicas aun cuando
tengan deudas exigibles. Esto entra en contradicción con parte de la norma que establece la
excepción al principio de inembargabilidad del Estado, para los casos en que las instituciones
públicas comprometen sus recursos en contrataciones privadas. Esta ley es innecesaria y
debió establecer otro mecanismo para evitar la indisposición total de los fondos de una
determinada institución.

En principio el Estado es inembargable, que tiene como fundamento la no afectación de los


servicios básicos que brinda a los particulares por lo que es de orden público, pero existen
excepciones a este estatuto de inembargabilidad que ha sido fundamentado por la Suprema
Corte de Justicia, el Tribunal Constitucional y a nivel Internacional por el Tribunal
Constitucional Español, Colombiano y de Perú.

En la Sentencia TC/0170/16, relativa a la Acción Directa de Inconstitucionalidad en contra


del Artículo 15 de la Ley 307-1985, que crea el Instituto Postal Dominicano en el año 1985,
el referido artículo establece que las propiedades del Inposdom son inembargables.

Por lo anterior la accionante establece que la citada norma violenta los artículos 5, 11 y letra c
del artículo 8 de la Constitución en ese entonces vigente del 1994, que establecen que es
función principal del estado la protección de los derechos de las personas, que a nadie se le
puede ordenar hacer lo que la ley no ha establecido o prohibirle y la libertad de trabajo, en
este mismo sentido transgrede los principios III, V VI, del Código de trabajo, sobre la
protección de los derechos de los trabajadores, que los derechos adquiridos no son
renunciables, que son nulo todo pacto contrario al código de trabajo y la posibilidad de
garantizar el ejercicio y ejecución de estos derechos.

En su defensa el Instituto Postal Dominicano establece que el articulo 581 del Código Civil
Dominicano y 45 de la ley 14-94, establece que no se podrá trabar embargo en contra de
entidades públicas, por lo que a su juicio es imposible embargar los bienes de dicha
institución del Estado.

El Tribunal Constitucional Dominicano estableció que la Violaciones Constitucionales


establecía en ese entonces por la accionante en la constitución de 1994, se encuentran ahora
en la Constitución del 2010, en los artículos 8, 39.1, 40.15, 62.7 y 68, que en su orden versan
que es función esencial del Estado la protección efectiva de los derechos de las personas, el
Derecho a la igualdad, Derecho a la libertad y seguridad personal en lo referente a que a
nadie se le puede obligar hacer o no hacer lo que no esté tipificado o descrito en la ley,
Derecho al trabajo y sobre las garantías de los derechos fundamentales.

Los jueces del T C, aclaran que el objetivo del carácter de inembargabilidad se trata de una
protección de carácter de orden público e interés general que busca que no se afecten los
servicios ofrecidos a particulares criterios que ha mantenido la Suprema Corte de Justicia.

Que sobre un tema similar se ha referido la Suprema Corte de Justicia, donde estableció que
el Patrimonio del Banco Central de la República Dominicana, es inembargable por aplicación
del artículo 16 de la ley Monetaria Financiera Número 183-02, pero que esta protección de
inembargabilidad no podría oponerse a un crédito de naturaleza salarial en virtud de que
violentaría el Convenio 95 de la Organización Internacional del Trabajo y el artículo 201 del
Código de Trabajo, por lo que una norma adjetiva no puede ser superior a normas de carácter
constitucional o convencional.

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