El abuelo Florencio

¡Hola! Soy Florencio, abuelo de Pablo y Verónica. Vivo en este lugar que antes fue parte
de un hermoso bosque. Hoy muchas personas maltratan las plantas y los animales, y
contaminan el aire, el agua que todos necesitamos para vivir.

Tampoco enseñamos a las niñas y los niños a querer la naturaleza, y valoramos poco a las
personas que saben cómo cuidarla, como los abuelos de las comunidades.

- ¡Pero eso va a cambiar! –Exclama Pablo emocionado-, porque mi hermana Verónica y

yo nos hemos comprometido a ayudar a la naturaleza para que vuelva hacer como
antes; con muchas plantas y flores de colores, donde las aves y todos los animales
puedan vivir felices.
- El abuelo escucho atentamente a su nieto, y aclaró: Espero que toda la escuela y
comunidad también se comprometan y entre todos podamos cuidar el bosque, cultivar
plantas frutales como la naranja: Huando, Valencia, Sacsona, Tangelo, Lima naranja;
así como el plátano de Seda, Imperial, Artavillaco y Chuntakiro. También necesitamos
continuar cultivando el café y el cacao.
Nuestro bosque debe seguir protegiendo al Samani, Sihuayro, Capizo, Águila, Picaflor,
Perdiz, Gallinazo, venado, loro y mono; así como a los peces, Mamuri, Doncella,
Paco, Carachama, Sardina, y todas las culebras y lagartos que existan.