La contaminación ambiental por plásticos.

La contaminación del plástico y como es un problema ambiental grave en la actualidad, y el

cómo podemos enfrentarlo. Este problema lleva a hablar sobre que debería hacer el estado,
las empresas, las asociaciones y los científicos para poder reducir su negatividad e impacto
en el medio ambiente.

Como consecuencia, se han publicado diversos artículos hablando sobre si Constituye el

consumo de plásticos un problema grave en la actualidad. Respecto a tal cuestión el propósito
de este trabajo es comparar las posiciones y argumentos de algunos artículos. Se considerará
el posicionamiento que Verónica Ramos asume en “El reciclado y las ecoetiquetas
construyen la economía circular de los plásticos” y el que postula Micaela Buteler en “¿Qué
es la contaminación por plástico y por qué nos afecta a todos?”.

Respecto a esta cuestión Verónica Ramos presenta las certificaciones y las ecoetiquetas junto
con la economía circular para poder combatir el impacto del plástico en el medio ambiente.
Mientras que Micaela Buteler presenta lo grave que es el consumo del plástico, como es un
problema grave en la actualidad y como todos deberían combatirlo desde sus lugares.

Para analizar cómo se desarrollan estas hipótesis se tendrán en cuenta tres aspectos temáticos,
primero se tendrá en cuenta su campo disciplinario, en segundo lugar, su posición respectó
al uso del plástico y el marco legal/jurídico, y en tercer lugar sus acciones/medidas concretas
para reducir el impacto negativo del consumo de plástico.

En primer lugar, esta Verónica Ramos, ella es la directora ejecutiva de la asociación civil
ECOPLAS, después esta Micaela Buteler, ella es Licencia en ciencias biológicas, Doctora en
recursos del suelo y Ciencias ambientales e investigadora independiente del Conicet. Para
poder entender la postura de ambas autoras sobre el plástico, debemos comprender que es el
plástico, el plástico es un material constituido por compuestos orgánicos o sintéticos que
tienen la propiedad de ser maleables y son obtenidos de derivados del petróleo a su vez, son
productos altamente tóxicos que tardan años en desaparecer de la tierra independientemente
de su tamaño o forma.

En segundo lugar, tenemos a Verónica Ramos la cual presenta el uso de las escoetiquetas y
las certificaciones. La implementación de estas normas y certificaciones ayudan a que las
empresas hagan una correcta gestión de los residuos plásticos e incorporen practicas
sostenibles en toda la cadena de suministros. “Las certificaciones deben estar respaldadas por
normas internacionales, sistemas de acreditación o verificación de tercera parte, que aseguren
transparencia e imparcialidad”. Después tenemos a Micaela Buteler la cual presenta que “el
plástico no es inerte, ya que en su manufactura se incorporan adictivos y compuestos
químicos que lo hacen más flexible, duradero y transparente”. Los químicos y adictivos más
conocidos son el bisfenol A (BPA) y los ftalatos. En los Estados Unidos se han prohibido los
ftalatos para su uso en juguetes y productos para el cuidado de los niños, aunque se siguen
utilizando para otras aplicaciones del plástico. El bisfenol A también está prohibido para su
uso en mamaderas y chupetes, aunque muchos fabricantes han dejado de utilizarlo por cuenta
propia, los compuestos alternativos son casi tan tóxicos como los mismos.

En tercer lugar, tenemos a Verónica Ramos, que presenta la economía circular. Esta es una
medida que ayuda a promover el reciclado, permite identificar los productos sustentables,
garantizar su calidad y generar confianza en los consumidores. La autora propone dejar de
usar el modelo lineal – Donde se fabrica, se usa y se tira el plástico- por el de economía
circular. “La construcción de una nueva cultura de economía circular tiene su eje en la
educación ambiental para que los plásticos sean responsablemente consumidos, reutilizados,
reciclados y recuperados”. Por otro lado, Micaela Buteler propone abordar este problema
desde todos los frentes. Un cambio a nivel del consumidor, incrementa la demanda de
alternativas del plástico. Es probable que necesitemos legislaciones, las cuales prohíban los
plásticos de un solo uso, e incentivos para que las empresas desarrollen alternativas más
amigables con el medio ambiente, para que los productos alternativos se vuelvan más viables
económicamente y reemplace los plásticos derivados del petróleo. Hay mucho que se puede
hacer para reducir la basura plástica que se genera, desde reducir el uso de plásticos
descartables, reutilizar, hasta rechazar productos plásticos. “Seamos parte de la solución y no
parte del problema”.