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Materia: filosofía Semestre: 3

Estudiante: María Berenice López Romero Fecha: 20/12/18

Trabajo: ensayo de filosofía.

Un corazón hablante.
En esta semana leí un libro sobre el tema de las emociones, para ser más precisa
se llama “emociones que matan” del Dr. DON COLBERT, en donde nos da una
explicación de las funciones del corazón y es que su trabajo es algo más fuerte de
lo que imaginamos todos conocemos las cosas esenciales del corazón como:

Además el ritmo cardíaco suele enviar mensajes variados al cerebro y al cuerpo.


Cuando una persona siente miedo, por ejemplo, el corazón se acelera enviando
una señal a todo el cuerpo. Cuando la persona está contenta y feliz, el ritmo
cardíaco disminuye, diciéndole a todo el sistema nervioso que la persona se siente
bien.
Cuando el corazón está en paz o lleno de amor comunicará armonía a todo el
cuerpo. Y de manera contraria, cuando las emociones tóxicas hagan que el
corazón lata de forma irregular, más fuerte, o más rápido, el corazón comunicará
lo opuesto a la paz a los demás del cuerpo.

Sin embargo hay algo extraordinario que hace único a nuestro corazón pues tiene
a ser una selectividad de la respuesta del corazón esto lo sugieren los
investigadores, que el corazón no responde mecánicamente a la señal del
cerebro. En cambio, el corazón parece tener su propia opinión, que envía como
respuesta devuelta al cerebro.

Lo que fue todavía más interesante es el hecho de que los mensajes que el
corazón enviaba al cerebro parecían ser mensajes que el cerebro no solamente
entendía sino que también obedecía. En efecto, el corazón y el cerebro mantienen
un diálogo inteligente. A veces el corazón envía mensajes al cerebro, y en otras
ocasiones el cerebro parece enviar mensajes al corazón. Los mensajes del
corazón parecen ser capaces de afectar la conducta de una persona.
“Nuestro verdadero ser se compone de lo que nuestro
corazón le dice a nuestro cerebro, de lo que nuestro cerebro
le dice a nuestro corazón, y de lo que nuestra voluntad decide
creer, decir, y hacer”.

Pero a pesar de estas informaciones científicas que nos detallan de lo afortunado


que somos por tener un corazón, me empiezo a cuestionar ciertas cosas que
como en esta materia de filosofía apremia, el hablar del corazón a un nivel en el
que “entiende” incluso las cosas que no queremos decir, pero que el corazón por
ser parte nuestra sabe. Es algo que puedo llegar a filosofar un poco
preguntándome lo siguiente:

¿Qué pasaría si “el péndulo de su corazón y el del corazón de


Dios entraron en un ritmo Sincronizado”?

Pues se supone que el corazón es un órgano en el cuerpo, pero ¿acaso puede ver
más allá de mis ojos?, ¿sentirá también la emoción del dolor, la tristeza o el
amor?, ¿podrá tener algo que los científicos hablan como el hecho de decidir?

Si fuera así posiblemente, tendría razón lo que la biblia dice cuando menciona:

Engañoso es el corazón
más que todas las cosas, y perverso;
¿quién lo conocerá?
¡Yo, Jehová, que escudriño la mente,
que pruebo el corazón,
para dar a cada uno según su camino,
según el fruto de sus obras!
Jeremías 17:9-10

Puesto que en este mundo con sus ideologías y ciencias; encontramos muchas
cosas, nos enseñan que podemos decidir hacer las cosas conforme a nuestros
deseos, es más nos dicen que “sigamos a nuestro corazón”. Pero viendo este
contexto puedo decir que tendemos muchas veces a fracasar porque el corazón
me puede engañar, es más leía un autor donde dice que el corazón fue diseñado
para ser guiado y no nosotros a él, lo dice de esta manera:
“No sigas tu corazón. Dios no diseño nuestros corazones para ser seguidos sino
para ser guiados. – jhon piper”.

Es algo tan cierto pero tan difícil de aceptar, porque todos hacemos nuestra propia
voluntad, porque creemos que lo sabemos y no importa lo que nos digan más bien
hacemos lo que para nosotros es lo mejor sin pensar que El que hizo nuestro
corazón está más interesado en saber que piensa y siente. Si tan solo nuestro
corazón pudiera hablarnos literalmente, me gustaría hacerle tantas preguntas
como: ¿Cómo te das cuenta que es la mejor opción?, ¿estás seguro de hacerlo?,
¿Por qué tienes miedo en enfrentarlo?, ¿qué es tu mayor miedo?, ¿Por qué te
dejas engañar tan rápido?, ¿Por qué no dejas que el cerebro piense más rápido
que tú?, ¿Por qué tomas las decisiones sin pensar un poco?
Bueno hay una infinidad de cosas que me gustaría cuestionar y que sé que talvez
mi corazón no me lo conteste pero si sé que solo su creador puede expresarlo.

Aún recuerdo varios salmos donde David se cuestiona así mismo el hecho de
decirse que no tuviera miedo más bien que se alentara su corazón y se esforzara,
puesto que él sabía que el corazón angustiado solo lo puede animar su creador.
Me gusta filosofar en esta parte pues las características que David sentía se vive
en muchos de nosotros, sin embargo al recordar que Dios es el que moldea la vida
de las personas puedo ver que a través y solo a través de él podemos hacer que
nuestro corazón no se equivoque demás, ni se desespere más bien tenga la
certeza que todo pasara en su tiempo.

Por ellos me gusta mucho este texto:

Sobre toda cosa guardada, guarda tu corazón;


Porque de él mana la vida. Proverbios 4:23

Saber guardar nuestro corazón en las diferentes etapas de la vida y en ciertas


circunstancias difíciles que podamos vivir, hacen que podamos decidir mucho
mejor y así evitarnos de problemas que talvez a la larga nos perjudique. Lo mejor
que podamos hacer siempre es dejar que Dios dirija el nuestro y así poder llegar
hacer sabios y entendidos.

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