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La ciudad de Nueva York completa las

pruebas del autobús eléctrico de BYD
La Autoridad de Transporte Metropolitano de Nueva York, la MTA, y la compañía
constructora de autobuses eléctricos BYD, han dado por finalizado el periodo de pruebas al
que han sometido a un autobús eléctrico BYD eBus-12 en condiciones reales de tráfico
rodado, durante dos meses, en el interior de Manhattan.

Este periodo de pruebas se realizó durante el periodo comprendido entre el 25 de agosto

y el 25 de octubre de este año recién acabado 2013 y hasta ahora no habían sido hecho
públicas las conclusiones sacadas de esos dos meses de circulación intensa entre el pesado
tráfico de la ciudad de Nueva York.

La prueba fue llevada a cabo operando en diferentes rutas a través de la isla de Manhattan.
Entre esas rutas se encontraban las más significativas, como la M20 (Lincoln Center –
South Ferry), M42 (Naciones Unidas – 42 St. Pier), M104 (West Harlem – Times
Square), M98 (Washington Heights – East Midtown), M60 (Aeropuerto de Laguardia
– West Side) y la exprés BX27 (Bay ridge – Downtown).
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La distancia total recorrida por el BYD eBUS-12 en esos dos meses ha sido de 2.383 km, lo
que ha resultado dar un promedio excelente de consumo de batería, según las fuentes de la
MTA, que traducido son 225 km por cada carga completa, es decir, 2,25 km por cada 1%
del indicador de carga de la batería. La velocidad media aproximada durante toda la prueba
ha sido de 6,4 km/h bajo el pesado tráfico de Manhattan.

Si con todos estos datos se realizan cálculos sale que la duración media de la batería es de
0,3 horas por cada 1% del indicador de carga, lo que representa un tiempo de
funcionamiento previsto entre carga y carga de 30 horas. Con ello, y por mucho que se
quiera apurar en calefacción o aire acondicionado, en casos de temperaturas extremas, se
puede afirmar que estos autobuses están preparados para afrontar la dura jornada de
trabajo de Nueva York, al menos en cuanto a autonomía de la batería se refiere,
siendo tan solo necesaria la recarga nocturna durante el periodo de descanso.

Si esto se contrasta con los consumos obtenidos con autobuses movidos por gasoil, que sus
motores permanecen consumiendo combustible al ralentí la mayor parte del tiempo, se saca
la conclusión de la alta eficiencia de este tipo de energía para mover autobuses por
rutas en las que las distancias son cortas en kilómetros pero largas en duración. Ahora
tan solo queda esperar a las decisiones que adoptará la MTA en el momento en el que tenga
que renovar su flota.