Escuela de Danza FACULTAD DE LETRAS Y CIENCIAS HUMANAS SEMESTRE 2021-2
IMPROVISACIÓN II
Profesor: Maureen Llewellyn Jones Garrido Lecca
Alumna: Grecia Fernanda Uriol Rojas
Free Play – La improvisación en la vida y en el arte
La inspiración y el fluir del tiempo
Al pensar en la improvisación encontramos al lenguaje común como la forma mas general de ello, pues es una actividad instantánea que para nosotros es respirar. Al momento de comparar las clases del tiempo entre las artes escritas, las teatrales y la improvisación, se encuentra tres tiempos: en la primera encontramos al tiempo de la inspiración (cuando el artista recibe una intuición), y la de lucha para retener lo suficiente esa idea y plasmarla; en el segundo encontramos un tiempo más el cual es el de la actuación a tiempo real; y finalmente en la improvisación solo encontramos un tiempo: el real. Todo lo descrito anteriormente se da en solo un tiempo cuando se trata de improvisar, pues el improvisador tiene el trabajo de extender los flases momentáneos para fusionarlos con su vida del día a día y jugar con ello. Se menciona que hay situaciones en las que se espera erróneamente que se planifique como un libro todo lo que vamos a hacer, no obstante, según en el momento en el que estemos, la persona de conocimiento debe modificar la enseñanza según quien se la enseña, como un maestro quien vincula sus conocimientos con la vida de sus alumnos y según ello los aconseja y acompaña. Llegando al final, se considera a la improvisación como la aceptación de la eternidad y transitoriedad, pues uno sabe que pasará en unos días aún asi se sepa lo que sucederá en unos minutos, así disfrutaremos de las sorpresas que nos prepara el destino. Uno debe aprender a correr riesgos, a equilibrar la tradición familiar y la libertad personal, sin embargo, siempre se debe tener en cuenta que, si bien se puede encontrar el deleite y placer de las nuevas amistades, la autorrealización, hay otras veces en las que se puede encontrar el fracaso, la desilusión, la enfermedad o incluso hasta la muerte. “Todo momento es precioso, porque es efímero y no puede repetirse, conservarse ni capturarse””. Debemos vivir cada segundo de nuestra vida artística como personal, pues lo grandes momentos pasan en ensayos, improvisaciones, caminatas, etc, y estos son únicos, ninguno volverá a repetirse y de pende de nosotros de preservar en nuestra memoria aquellos recuerdos.